Arte Rupestre
Arte Rupestre
Arte Rupestre
Características
Temáticamente, las pinturas rupestres son más o menos homogéneas: las
provenientes del Paleolítico muestran por lo general animales salvajes y líneas,
mientras que en el Neolítico aparecen figuras humanas, huellas de manos y
otras representaciones del entorno.
La mayoría de los animales dibujados son mamuts, bisontes, caballos, ciervos y
renos, a menudo heridos con flechas o lanzas de cacería.
También llama la atención que estos dibujos fueron hechos con materiales muy
similares, a pesar de hallarse a miles de kilómetros los unos de los otros:
pigmentos de carbón vegetal, heces y otros fluidos corporales, hematita, arcilla
y óxido de manganeso, probablemente mezclados con grasa o algún aceite
como aglutinante.
Por lo general priman en ellos uno o dos colores: negros, rojos, amarillos y
marrones. Se untaban sobre la piedra directamente con los dedos, aunque las
figuras animales a menudo se raspaban con alguna piedra o herramienta para
generar efectos de realismo y tridimensionalidad.
Datos
Las pinturas en Cognac, Francia, se pintaron a lo largo de un período de 10
000 años.
Es posible que las cuevas fueran los templos de los tiempos prehistóricos y
las pinturas estuvieran relacionadas con rituales religiosos.
La mayoría de las pinturas en cuevas muestran animales grandes como
bisontes, venados, caballos y mamuts.
Los artistas de las cuevas con frecuencia pintaban escupiendo la pintura,
una práctica que también realizaban los aborígenes de Australia
Para llegar hasta las pinturas de 14 000 años de antigüedad en Cueva de
Pergouset, Francia es necesario arrastrarse a través 150 m (metros) de
pasajes.
En las cuevas de Nerja, España, hay formaciones rocosas que posiblemente
la gente prehistórica tocaba como un xilófono.
Las pinturas aborígenes en las rocas de Arhemland, en el Territorio del
Norte, en Australia, podrían tener más de 50 000 años de antigüedad.
Arte Egipcio
Arte desarrollado en el valle del Nilo, habitado desde el Paleolítico.
Tras la unificación del Alto y del Bajo Egipto, la evolución del Egipto faraónico se
divide en tres periodos: el Imperio Antiguo (2778 – 2263 a. C.), que abarca las
dinastías III, IV, V y VI; el Imperio Medio (2065 – 1788 a. C.), cuyo núcleo fundamental lo
forman las dinastías XI y XII, y el Imperio Nuevo, que comienza con la XVIII dinastía y la
expulsión de los hicsos en 1580 a. C., que habían invadido el país en 1730 a. C.
Su arte, fundamentado en la religión y en sus ideas sobre la vida de ultratumba, en el
carácter divino y sagrado del faraón, así como en la influencia del vivir agrario, se
caracteriza por el colosalismo y monumentalismo de su arquitectura, por el hieratismo
y frontalidad de sus esculturas y por la preponderancia del elemento lineal en su
pintura.
La arquitectura se proyecta pensando en la eternidad, como una especie de
prolongación de la vida en la tierra, donde el Ka (réplica inmaterial del cuerpo)
puede seguir disfrutando del ambiente terreno. De estas premisas derivan acciones
como construir en sus tumbas habitaciones para guardar todos los bienes, ornamentos
y dones que contribuyan a alegrar la vida futura y la momificación.
Al hablar de arquitectura en Egipto, debemos referirnos a las construcciones que
disfrutaron los faraones y las clases privilegiadas, de un lado; y de otro, a la de
carácter eminentemente funerario: se trata de un arte de tumbas (mastabas,
pirámides e hipogeos) y de templos, en los que todo gira en torno al Más Allá: se
utilizan materiales con gran capacidad de resistencia, como adobe y piedra, y joyas
para alabar y engalanar a los muertos.
Las formas estatuarias están
subordinadas a la arquitectura, son
funerarias, sólidas y duraderas; se guían
por algunos convencionalismos no
rígidos (frontalismo de cara, hombros
anchos), se relacionan con el poder y
manifiestan una perspectiva jerárquica,
por lo que las figuras tienen distintos
tamaños según su jerarquía social.
Las pinturas suelen decorar las paredes de tumbas, cámaras mortuorias y sarcófagos,
tienden al realismo y la frontalidad y presentan contornos marcados. Se elaboraron
con colores minerales aplicados a la cola sobre paredes de yeso blanco; abundan en
ellas los colores planos, obedecen a los cánones del relieve y las figuras están situadas
en franjas consecutivas.
Su temática se refiere al mundo funerario y a la vida cotidiana.
Arte Chino
El arte chino es arte visual que, ya sea antiguo o moderno, se originó o se practica en
China o por artistas chinos. El “arte de la Edad de Piedra” se remonta al año 10 000
aC, y consistía principalmente en cerámica y esculturas sencillas. Después de este
período inicial, el arte chino, como la historia china, se clasifica típicamente por la
sucesión de dinastías reinantes de emperadores chinos, la mayoría de los cuales
duraron varios cientos de años.
El arte chino tiene posiblemente la tradición continua más antigua del mundo, y está
marcado por un inusual grado de continuidad y conciencia de esa tradición, que
carece de un equivalente al colapso occidental y la recuperación gradual de los
estilos clásicos.
Los medios que generalmente se han clasificado en Occidente desde el Renacimiento
como las artes decorativas son extremadamente importantes en el arte chino, y gran
parte del mejor trabajo fue producido en grandes talleres o fábricas por artistas
esencialmente desconocidos, especialmente en la cerámica china.
Gran parte del mejor trabajo en cerámica, textiles, laca tallada y otras técnicas fue
producido durante un largo período por las diferentes fábricas o talleres imperiales,
que además de ser utilizados por el tribunal, se distribuyeron interna y externamente
en gran escala para demostrar la riqueza y el poder de los emperadores. En
contraste, la tradición de la pintura de lavado de tinta, practicada principalmente
por académicos y pintores de corte especialmente de paisajes, flores y pájaros,
desarrolló valores estéticos que dependen de la imaginación individual y de la
observación objetiva del artista que son similares a los del Oeste, pero mucho antes
de su desarrollo allí. Después de que los contactos con el arte occidental se volvieron
cada vez más importantes a partir del siglo XIX en adelante, en las últimas décadas
China ha participado con un éxito creciente en el arte contemporáneo mundial.