Bases Conceptuales de La Lactancia Materna

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I.

Bases conceptuales de la lactancia materna:

1.1 Definición y tipos de Lactancia Materna.

La lactancia materna es el proceso por el que la madre alimenta a su


hijo recién nacido a través de sus senos, que segregan leche inmediatamente
después del parto, que debería ser el principal alimento del bebé al menos
hasta los dos años.

1.2 Beneficios generales de la lactancia.


El calostro de los primeros días
Tiene un alto contenido en proteínas y es el alimento perfecto para
satisfacer las necesidades del recién nacido. Esta leche de apariencia entre
blancuzca y amarillenta se llama calostro, y es rica en nutrientes y
anticuerpos que el bebé necesita justo después de nacer.
Proporciona gran cantidad de defensas inmunológicas y estimula el
desarrollo de su propio sistema inmunológico. El calostro contiene una
sustancia llamada inmunoglobulina A secretora, la cual forma una capa
protectora sobre las membranas mucosas en los intestinos, nariz y garganta
del bebé, precisamente las partes más susceptibles a virus, bacterias e
infecciones.
Ayuda a reducir la absorción de bilirrubina y los problemas
de ictericia. Si el bebé ingiere la leche materna suficiente, eliminará el
excedente de bilirrubina a través de las heces.
Tiene un efecto laxante, se digiere fácilmente y es por eso que el bebé
la demanda frecuentemente, lo que facilita la estimulación de leche
materna. 
La leche materna
Proporciona los nutrientes necesarios en la proporción y temperatura
adecuados. 
Se digiere y asimila con gran facilidad. Esto previene incomodidades en
el bebé relacionadas con su insipiente sistema digestivo, incluyendo diarrea,
estreñimiento y cólico.
Proporciona anticuerpos de la madre y alarga el periodo de inmunidad
natural. La lecha materna contiene anticuerpos que provienen de la madre,
los anticuerpos que se transmiten son específicamente aquellos que le
permiten combatir los peligros a los que el bebé está expuesto en su medio
ambiente.
Reduce la predisposición a enfermedades respiratorias. Los bebés que
se alimentan con lecha materna exclusivamente durante los primeros seis
meses de vida tienen menos infecciones en el oído, enfermedades
respiratorias (incluyendo asma), y molestias digestivas e intestinales.
Previene las alergias. Los bebés alimentados con leche materna
también sufren menos alergias a alimentos, factores ambientales y en la piel.
Disminuye el riesgo de desarrollar obesidad. Como la leche materna
contiene la nutrición exacta que el bebé requiere y la cantidad consumida es
autoregulada, tiene mejores probabilidades de aumentar el peso justo y
comer únicamente la cantidad necesaria. 
Los cambios de sabor, según la alimentación de la madre, preparan al
niño para aceptar mayor variedad de alimentos. La variedad de sabores que
recibe el bebé en la leche materna lo prepara mejor para aceptar los
diferentes sabores de la comida sólida. 
Favorece el correcto desarrollo de la mandíbula, los dientes y el habla.
El acto de succión contribuye al avance de la mandíbula del bebé alcanzando
una posición apropiada alrededor de los 8 meses. Si esta succión se realiza
con tetina, los movimientos que realiza el bebé son más pasivos y los
músculos de la mandíbula no se desarrollan tanto. Es por ello que una
correcta succión y deglución son de vital importancia para el óptimo
desarrollo de las estructuras orofaciales y así prevenir alteraciones del
lenguaje.
Crea un fuerte vínculo entre madre-hijo. Cubriendo necesidades como
la proximidad y seguridad que favorecen la autoestima del niño y la relación
con la madre.  
Contraindicaciones y problemas para la lactancia.
Casos en los que la lactancia materna está contraindicada:
 
- El virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) es la principal
contraindicación y más frecuente. Estos niños al poder adquirir la infección
por la leche de su madre, se crían a biberón.
 
- Existe un virus de leucemia humana de células T (HTLV-1) muy poco
frecuente pero también es una contraindicación, en especial si el lactante se
encuentra en un lugar con condiciones higiénicas no adecuadas.
 
- La galactosemia, es una enfermedad metabólica rara, se caracteriza
por la incapacidad de absorber y utilizar la galactosa, que se acumula y  altera
diferentes órganos. Estos niños no pueden tomar leche de su madre ni un
biberón normal.
 
- En madres a las que se les ha diagnosticado cáncer cuando ya estaban
embarazadas y que inmediatamente al parto, casi siempre prematuro
provocado, empiezan con medicación muy tóxica.
- En madres que consumen drogas de abuso como heroína, cocaína,
anfetaminas, etc., que pueden pasar a la leche y que además ellas no están
en condiciones óptimas, tampoco deben lactar a sus hijos.
1.3 Mitos y tabúes sobre la lactancia materna.

RELACIONADOS CON LA ALIMENTACIÓN DE LA MADRE

1. Mito: La madre que amamanta debe comer el doble para producir más
leche. FALSO.

Realidad: La madre debe consumir una dieta sana y balanceada, que


cubra sus requerimientos.

2. Mito: La madre debe tomar mucha leche para producir leche. FALSO.

Realidad: La madre debe tener una alimentación variada con un


consumo adecuado de leche y de derivados lácteos. Ningún otro
mamífero del reino animal toma leche para producir leche.

3. Mito: Para amamantar, la madre debe seguir una dieta especial con


restricción en el consumo de algunos alimentos, para evitar gases y
cólicos en el bebé. FALSO.

Realidad: Es muy frecuente que se le prohíba consumir refrescos


(gaseosas) y algunos alimentos como: ajo, cebolla, coliflor, brócoli,
granos entre otros, porque "pueden causar gases" a los bebés. El único
alimento relacionado con cólicos es la leche de vaca consumida por la
madre (sobre todo si la consume en exceso), el resto de los alimentos
pueden ser ingeridos. Debe limitarse el consumo de refrescos, té, café
y chocolates, los cuales pueden provocar irritabilidad en el bebé. En
general la madre lactante puede comer todo lo que comía durante el
embarazo.

4. Mito: La madre debe consumir ciertos alimentos para aumentar la


producción de leche. FALSO.

Realidad: Ningún alimento aumenta la producción de leche.


5. Mito: La madre no puede ingerir alimentos o bebidas al momento de
amamantar, porque el bebé "puede atragantarse" o "hacerle daño la
leche materna". FALSO:

Realidad: La madre puede consumir lo que le provoque mientras


amamanta, sin problemas.

RELACIONADOS CON LA ESTÉTICA DE LA MADRE

6. Mito: Las madre que tienen los pechos pequeños o que tienen los
pezones planos o invertidos, no podrán amamantar o producirán
menos leche. FALSO.

Realidad: No importa la forma del pezón, ni el tamaño del pecho.


Todos los pechos son buenos para amamantar. Todas las madres han
sido dotadas por la naturaleza con dos glándulas mamarias y con un
conjunto de hormonas que se activan por la succión del bebé,
independientemente de las características del pecho.

7. Mito: La lactancia prolongada hace que los pechos se caigan. FALSO.

Realidad: Este suceso no tiene nada que ver con el amamantamiento.


Depende de otros factores como: la laxitud de la piel, la cantidad de
grasa corporal, la edad y de factores genéticos.

RELACIONADOS CON LA SALUD Y EL TRABAJO DE LA MADRE

8. Mito: La cesárea es incompatible con la lactancia. FALSO.

Realidad: La madre que ha parido por cesárea puede amamantar


regularmente a su bebé. La cesárea no interfiere con la bajada de la
leche. Puede iniciar el amamantamiento, si se encuentra en buenas
condiciones al recuperarse de la anestesia, utilizando una posición que
sea cómoda para ambos.

9. Mito: Se debe suspender la lactancia, si la madre recibe


medicamentos. FALSO.
Realidad: La mayor parte de los medicamentos indicados a las madres,
llegan a la leche materna en pequeñísimas cantidades, absolutamente
inocuas para los bebés. Sólo hay una contraindicación absoluta,
cuando la madre recibe drogas antineoplásicas o isótopos radioactivos.

10.Mito: La madre no puede continuar amamantado, si se debe


reincorporarse al trabajo. FALSO.

Realidad: La madre puede prolongar la lactancia, implementando su


propio banco de leche casero. Esto le permitirá realizar la extracción,
conservación y suministro de su leche, de manera que ésta le sea
suministrada a su bebé con tacita, cucharita o inyectadora, por la
persona que lo cuida.

11.Mito: Si la madre se realizó cirugía en los pechos (colocación de


prótesis o cirugía reductiva). No puede amamantar. FALSO.

Realidad: La madre que ha sido operada de los pechos puede


amamantar sin problemas.

RELACIONADOS CON LA PRODUCCIÓN DE LECHE

12.Mito: La baja producción de leche puede ser un problema familiar que


se hereda de madre a hijas. FALSO.

Realidad: La baja producción no se hereda. Hasta el momento no se ha


evidenciado ninguna causa de hipogalactia hereditaria. La producción
láctea se relaciona con la colocación frecuente al pecho, el buen agarre
y la succión efectiva, que permita el adecuado vaciado del pecho.

13.Mito: La producción de leche en los primeros días, llamada calostro, es


insuficiente para alimentar al bebé. FALSO.

Realidad: El calostro, "el oro líquido", es un concentrado de nutrientes


para el recién nacido que cubre totalmente sus requerimientos. Si se
inicia el amamantamiento en la primera hora de vida, se favorece el
alojamiento conjunto y se permite el amamantamiento a libre
demanda, se producirá más rápidamente la bajada de la leche.
14.Mito: El bebé llora porque tiene hambre, porque la leche materna no
es suficiente. FALSO.

Realidad: Frecuentemente el llanto se asocia con el hambre, lo que


erróneamente conduce a la madre a complementar la lactancia con
fórmula, al creer que su leche no es suficiente. El llanto es la forma
como el bebé se comunica, cuando tiene hambre, cuando está
incómodo, asustado, insatisfecho, cuando siente dolor o cuando
requiere contacto o consuelo. Si el bebé llora por hambre, está
pidiendo nuevamente el pecho y no que se le dé tetero.

15.Mito: La madre debe espaciar las mamadas para que los pechos se
llenen. FALSO.

Realidad: La madre "no debe ahorrar leche". Debe amamantar en


forma frecuente, a mayor succión y frecuente vaciamiento del pecho,
habrá una mayor producción.

RELACIONADOS CON LA CALIDAD DE LA LECHE

16.Mito: La leche de la madre humana es aguada, comparada con la leche


de vaca. FALSO.

Realidad La leche humana varía durante la mamada. Es importante que


el bebé reciba tanto de la leche del comienzo (rica en agua, lactosa y
proteínas) como de la leche del final (rica en grasa), para que obtenga
una comida completa y toda el agua que necesita.

17.Mito: Si la madre queda embarazada debe suspender la lactancia.


FALSO.

Realidad: La madre puede continuar amamantando si así lo desea, sin


riesgo para su embarazo (no compromete la salud del embrión, ni
induce al aborto, ni al parto prematuro). Puede incluso amamantar a
ambos bebés después del parto, aún cuando sean de diferente edad.

18.Mito: La Leche materna después de los 12 meses de edad no aporta


casi nada al bebé. FALSO
Realidad: La Leche materna continúa siendo importante a esa edad, le
aporta el 40% de sus requerimientos de energía, pero requiere ser
complementada con otros alimentos.

RELACIONADOS CON LA TÉCNICA DE AMAMANTAMIENTO

19.Mito: Se debe amamantar al bebé en un horario regular (cada 2 a 3


horas), colocándolo 10 a 15 minutos en cada pecho por mamada.
FALSO.

Realidad: Debe amamantarse al bebé a libre demanda y sin


restricciones de tiempo, ni de horario, permitiéndole al bebé que vacíe
el pecho, que obtenga todas las fracciones de la leche y que lo suelte
cuando esté satisfecho.

20.Mito: Los pezones adoloridos y las grietas del pezón, aparecen en las


madres con pieles muy delicadas, en las que no prepararon los
pezones durante el embarazo y en aquellas cuyos bebés está pegados
al pecho por períodos prolongados. FALSO.

Realidad: Tanto el dolor como las grietas del pezón aparecen en


mujeres con distintos tipos de piel, no se previenen con la preparación
de los pezones durante el embarazo, ni se relacionan con los períodos
prolongados de amamantamiento. Son provocados por la inadecuada
colocación del bebé al pecho, que condiciona un mal agarre del mismo.

21.Mito: Se deben dar los dos pechos en cada toma. FALSO:

Realidad: Se debe dar de un solo pecho por toma hasta vaciarlo, de


manera de asegurar que el bebé reciba la comida completa.

22.Mito: Si la madre incorporó fórmula como complemento o abandonó


la lactancia, ya no se podrá regresar a la lactancia materna exclusiva.
FALSO.

Realidad: Existen recursos basados en el entrenamiento y apoyo a la


madre, si ella lo desea, para lograr una relactancia exitosa.
23.Mito: No existe la confusión de pezón. FALSO

Realidad: Cuando al bebé se le suministra pecho y fórmula como


complemento (lactancia mixta), aparece la confusión de pezón. La
alimentación al pecho y la alimentación por tetero requieren
diferentes técnicas orales y motrices. Como succionar del tetero es
más fácil, el bebé va a agarrar el pecho en forma inadecuada y su
succión será ineficiente, lo que hace que se sienta insatisfecho y que a
larga rechace el pecho.

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