IMAGEN CORPORATIVA, IDENTIDAD CORPORATIVA E IDENTIDAD VISUAL
La identidad visual es la traducción simbólica de la identidad corporativa, la parte visual. Por ejemplo; Cuando se conoce
a alguien lo primero que se ve, sin hablar con ella, es su apariencia (identidad visual). Los elementos constitutivos básicos
de la identidad visual que serán capaces de transmitir la esencia de la organización son: logotipo, símbolo, tipografía y
color. Dichos elementos se verán plasmados en páginas webs, tarjetas de visitas, brochures o en material de oficina
variado. Se puede ver típicamente en logotipos y en el uso de marcas registradas, pero también puede incluir cosas como
el diseño de producto, la publicidad, las relaciones públicas, etcétera. Es creada sobre todo por personas idóneas en
diseño gráfico, utilizando principalmente campañas comunicacionales, plataformas digitales y otras formas de promoción.
Está compuesta básicamente por:
Logotipo: Según la RAE “Distintivo formado por letras, abreviaturas, etc., peculiar de una empresa, conmemoración,
marca o producto”. Es decir, la representación tipográfica que habitualmente coincide con el nombre de la
organización, la parte verbal de la marca. Debe transmitir la esencia de la empresa. Es fundamental que sea legible y
comprensible, de nada sirve tener un logo muy creativo y llamativo si no se entiende o nadie es capaz de descifrarlo.
A la hora de diseñar un logotipo hay que tener presente siempre la máxima: “Menos es más”. Y pensar que tiene que
ser atractivo para los potenciales clientes, por lo que hay que tener en cuenta el target, los valores a transmitir, el
sector, entre otros.
Símbolo: Es el signo representativo con cuya visualización se debe ser capaz de identificar de forma inmediata la
entidad. Pueden utilizarse deformaciones del logotipo, iconos, figuras abstractas. Es la expresión visual de la marca
que puede actuar independizada de él, la parte no verbal. Símbolo y logotipo cumplen la función de firma, a veces
separados y, otras, conjuntamente.
Tipografía: conjunto de caracteres números y signos que poseen unas características comunes.
Colores corporativos: el cromatismo que definirá a la empresa requiere de un estudio exhaustivo pues entran en
juego aspectos tan complejos como la psicología del color y las connotaciones culturales. Por ejemplo, para transmitir
serenidad y calma se usan los azules o los violetas, no el rojo Ferrari. Además, se deberán tener en cuenta aspectos
tan importantes como el nicho de mercado al que se dirige o el tipo de producto que se ofrece pues, no es lo mismo
vender un auto deportivo que un perfume para bebés. Este tipo de detalles, como lo son los colores y la tipografía,
hay que cuidarlos porque pueden debilitar la imagen corporativa.
El eslogan: Resume la filosofía de la compañía en una frase llamativa e impactante. Tiene que ser algo con lo que
los usuarios se sientan identificados. Ayudará a dar credibilidad, mejorar el recuerdo de la marca y potenciar la
imagen. Los inmortales eslóganes de Coca-Cola “La chispa de la vida” o “Destapa la felicidad”, desde luego es una
promesa muy ambiciosa, pero sin duda convence de que Coca-Cola es igual a felicidad.
El tratamiento fotográfico: Es decir, el tono de las fotografías y el encuadre o tipo de ángulo de éstas. Es
importante tener claro lo que se quiere mostrar con las fotografías y entender que van directamente ligadas al tipo de
contenido. Y, ¿cómo definir qué mostrar? Se debe tomar en cuenta composición, encuadre, tratamiento o filtros
fotográficos y así lograr un tono visual constante y coherente. También definir qué se quiere lograr con el uso de la
plataforma o medio. ¿Cuál es su finalidad? Definir claramente los objetivos de comunicación.
Ventajas de la Identidad Visual:
Concientización: Cuanto más desarrollada esté una identidad, más reconocible será y los consumidores estarán más
conscientes de la presencia de la marca.
Posicionamiento: Todos los símbolos, valores, cultura y proyectos vinculados a una marca sumarán valor para que
progrese en el mercado.
Reputación: Una fuerte identidad generará una sensación de pertenencia y confiabilidad en las personas que harán
que la marca gane reputación y reconocimiento.
Permanencia: Un diseño efectivo permitirá responder rápidamente y de forma efectiva ante cambios inesperados para
mantener la permanencia de la marca.
Ahorro: una identidad bien diseñada de base ahorrará dinero ya que evitará reinventar las piezas gráficas una y otra
vez.
Elementos gráficos de una identidad visual
El logo es un componente clave de la identidad visual ya que es la imagen principal que identificará la marca para que sea
reconocida y diferenciada de los competidores. La mayoría de las veces, la creación del logo es el primer paso en el
diseño de la identidad visual ya que de ella se extrae información rica en relación a diseño y mensajes a comunicar, para
que sean utilizados en las futuras piezas gráficas. Algunos de los elementos de soporte para la identidad de una marca
pueden ser:
Papelería institucional: Elementos promocionales: Piezas gráficas digitales:
Tarjetas personales Folletos Página web
Hojas membretadas Posters Tienda online
Carpetas Banners Blog
Sobres Stands de exposición Redes sociales
Cuadernos Empaques Banners digitales
Facturas Lapiceros Aplicaciones para celulares.
Sellos Pines, gorras, camisetas
Importancia de la identidad visual
La identidad visual es un conjunto de elementos gráficos que se alinean con el mensaje que comunica una marca y
asegura que la imagen de la misma sea coherente y consistente. Hoy en día, no existe ninguna empresa que pueda
posicionarse en el mercado y ser reconocida sin tener una identidad visual debido a que el mundo en el que vivimos, la
información viaja constantemente y casi de forma instantánea en forma de imagen y no así, como texto. Una imagen es
entendida y absorbida en las mentes de las personas de manera más rápida.
La identidad corporativa es la que la propia empresa tiene sobre sí misma. Incluye su filosofía, creencias, valores éticos
y culturales, estrategias. Es la columna vertebral de la existencia de la compañía. Por ejemplo; Después de entablar
conversación con esa persona se puede descubrir cuáles son sus ámbitos de interés, cómo piensa, a qué le da
importancia, sus creencias o ideales. Es decir, conocer su personalidad y su modo de concebir la vida (identidad
corporativa).
Consejos para crear una Identidad Corporativa
No es suficiente tener un logotipo y una papelería. La identidad corporativa se debe construir a partir de la generación del
concepto de marca que se quiera transmitir. Se debe identificar el posicionarnos del sector y trabajar para desarrollar los
conceptos que definirán como marca. Para ello, lo ideal es empezar por utilizar herramientas que ayuden a conocer mejor
qué se quiere ser y qué se quiere ofrecer como marca:
Realizar un informe DAFO, para analizar Debilidades, Amenazas, Fortalezas y Oportunidades.
Definir misión, visión y valores que se deberán plasmar en todos los ámbitos del negocio.
Este trabajo hacia dentro es el que dotará a la marca de concepto, de carácter, de identidad corporativa. Desde este punto
ya sólo se debe ser fiel a lo que se haya definido como la personalidad de marca.
La imagen corporativa es la manera en la que una empresa, firma o comercio se presenta a sí misma al público, tanto
como a clientes o a inversores como a empleados. Tras finalizar el encuentro, uno se retira a casa con una
impresión/opinión en mente sobre esa persona, lo que podría corresponderse con la imagen corporativa. El principal
objetivo en este sentido, es conseguir que el público, además de tener presente la marca, tenga una imagen positiva del
negocio. La imagen corporativa no se encuentra en la organización en sí, sino en la mente de los públicos, ya sea internos
o externos, que interactúan con ella, de tal forma que no se puede transferir o proyectar, sino que gestiona los estímulos
que transmite de modo que pueda comunicar los mejores identificadores para que sea reconocida de la formado más
cercana a la imagen deseada o ideal posible.
Imagen corporativa y posicionamiento de producto
Es un concepto relacionado de una forma muy estrecha con la cultura empresarial. La imagen corporativa debe ser
consistente -coherente- con el posicionamiento de producto de la compañía, de la línea de productos, o de la marca.
Cualquier incongruencia entre la imagen corporativa total y las posiciones de las ofertas individuales del producto será
confusa para los clientes potenciales y tenderá a reducir la rentabilidad. Una imagen corporativa acertada debe también
ser creíble. Es decir, la imagen debe estar relativamente cerca de sus comportamientos reales para resultar creíbles.
¿Para qué sirve la imagen corporativa?
Se pueden destacar 5 objetivos que debe trabajar la imagen corporativa:
1. Identificación con la marca: A través de la imagen corporativa, se consigue que el público objetivo se identifique con
los valores y la filosofía de la empresa. Hace que la empresa se vuelva su amigo, su compañero de vivencias, lo que
aumenta la fidelización de los consumidores.
2. Identificación de productos y servicios: La imagen corporativa hace que la marca tenga coherencia visual, al existir
una homogeneidad entre todos sus elementos gráficos, comportamientos y comunicaciones, los productos o servicios se
identifican fácilmente. Todos reconocen de inmediato los productos de la marca Apple, sin necesidad de ver el logotipo.
3. Aumento del valor percibido: Por lógica una empresa que se preocupa por su imagen, cuida los detalles y se
preocupa por agradar al cliente, esto incrementa el valor de los productos o servicios que ofrece. Además de transmitir una
sensación de confianza.
4. Establece un vínculo emocional: Como se mencionó anteriormente, las empresas buscan conectar a un nivel
emocional con su público, y por eso crear experiencias sensoriales de todo tipo en torno a la marca tiene tanta relevancia,
porque al final, ese vínculo da paso a la lealtad.
5. Fortalece la marca: Una imagen corporativa cuidada aporta una gran sensación de seguridad y confianza al cliente,
además de profesionalidad. Y esto al final genera un sentido de pertenencia a esa marca con unos valores compartidos. En
última instancia esto es lo que hace fuerte la marca de una empresa.
Creación de un nombre
El nombre es un factor primordial, existe una necesidad innata por denominar a todo lo que rodea. Más que un signo de
identificación es una dimensión esencial, proyecta la personalidad. Un elemento sin nombre es un elemento sin existencia
real en el espíritu, el nombre tiene una función lógica y una simbólica, sobre todo para identificación y de penetración en
una audiencia. Dar nombre a una entidad es fundamental pues la importancia reside en que ese nombre es un elemento de
intercomunicación para todos los miembros de una sociedad.
Métodos creativos
Fusión: crear una nueva fusionando dos palabras existentes que comparten una letra. Por ejemplo, DirecTV.
Composición: yuxtaposición de dos palabras completas. Ejemplo; Photoshop.
Derivación: crear un nombre nuevo a partir de la adición de prefijos o sufijos a una palabra raíz. Ejemplo: Tropicana.
Combinación: generar un nuevo nombre a partir de la mezcla de dos palabras con una estructura morfológica similar.
Ejemplo: Frappuccino
Fonosimbolismo: consiste en generar asociaciones a partir del sonido generando un vínculo directo entre el sonido
y su significado. Ejemplo: Sonidos como la K, T, P y X sugieren fortaleza, energía, potencia y brevedad (KodaK), Los
sonidos fricativos, F, S, Z y V, evocan rapidez, dinamismo, ligereza y vivacidad (Sveltesse), La Z, K y X, suelen
asociarse con eficacia y profesionalidad (Pilexil), Los sonidos oclusivos, sonoros, bilabiales, laterales y nasales como
BDGLM y N generan nombres más cercanos, fáciles y abiertos (Lala, MOMA).
Duplicar las grafías: puede ser un buen método para captar la atención. Ejemplo: Exxon.
Mecanismos lingüísticos
Descriptivos: enunciación sintética de los atributos de una institución. Ejm: Banco Interamericano de Desarrollo o
Museo Español de Arte Contemporáneo.
Simbólicos: alusión a la institución mediante una imagen literaria. Ejm: Camel, Omega o Nestlé.
Patronímicos: alusión a la institución mediante el nombre propio de una personalidad clave. Ejm: Lacoste, Johnson
&Johnson o Mercedes Benz.
Topónimos: alusión al lugar de origen o área de influencia de la institución. Ejm: Banco Santander o Aerolíneas
Argentinas.
Contracciones: construcción artificial mediante iniciales o fragmentos de palabras. Ejm: IBM o “AEG”.
Metáfora: consiste en denominar un producto con una palabra existente, cuando entre ellos se establece una relación
de similitud. Ejemplo; ADN como nombre para una agencia de noticias, da a entender que la información está resumida
y de lo que se debe saber.
Personificación: atribuir cualidades humanas a la marca. Ejemplo: La bella Easo, Elisabeth Arden…
Oxímoron: contradicción de dos ideas dando lugar a un tercer concepto. Ejemplo: White nigth
Paranomasia: juego de palabras a través de la semejanza en el sonido de palabras o frases. Ejemplo: Whatsapp
Referencias evocativas: evocación de un conjunto apropiado de imágenes y significados. Ejemplo: Safari, el nombre
del navegador de apple, como descripción de la experiencia de búsqueda.
Onomatopeyas: imitación o recreación del sonido de algo. Ejemplo: Crunch, para cereales crujientes.
Todas las normas que deben cumplir los elementos que componen la imagen de la empresa
deben estar compilados en un manual de identidad Visual Corporativa.