Presión Y Caudal Necesarios en Cabecera de Redes de Riego A La Demanda Según La Calidad de Servicio Deseada
Presión Y Caudal Necesarios en Cabecera de Redes de Riego A La Demanda Según La Calidad de Servicio Deseada
Presión Y Caudal Necesarios en Cabecera de Redes de Riego A La Demanda Según La Calidad de Servicio Deseada
Resumen
Se han desarrollado numerosos modelos para la determinación del caudal circulante por las líneas de una
red de riego a la demanda, siendo el método de Clement el más comúnmente utilizado. Puesto que esta
metodología no siempre hace una buena estimación de los caudales realmente circulantes, se ha
desarrollado y validado una nueva metodología basada en la generación de Curvas Aleatorias de
Demanda Diaria (CADD). Para la validación del nuevo modelo se ha utilizado la red de riego a la
demanda de 550 ha de Tarazona de la Mancha (España) Los resultados obtenidos muestran que
metodología de Clément subestima un 35-40% el caudal de cabecera, frente al buen ajuste obtenido
entre los valores medidos y los calculados con el método de las CADD. El procedimiento permite además
determinar las concisiones de presión y caudal necesarias según la calidad servicio deseada.
Abstract
Several models for obtaining the design discharge in on-demand irrigation networks have been developed.
The Clément methodology is the most commonly used. This methodology has been compared with
measured data from several on-demand irrigation networks by different authors, concluding that the
methodology proposed by Clément does not always fit properly. For this reason, a new stochastic
methodology is proposed in this paper (Random Daily Demand Curve), so that a higher accuracy design
flow can be obtained. Results of applying Clément methodology and that proposed herein have been
compared with measured flow data in an on-demand irrigation network, located in Tarazona de La
Mancha (Spain). The results show that the Clément methodology does not fit as well as the proposed
method, underestimating the design flow by 35-40% in the case study. The procedure also permits to
determine the necessary head and discharge according to the required operation quality.
Introducción y objetivos
Para tener una buena calidad de servicio de una red de riego a la demanda, la probabilidad de
fallos en el suministro de la presión y el caudal necesarios en los hidrantes debe ser pequeña.
Para ello es preciso conocer con precisión los caudales circulantes por las líneas de la red para
poder realizar su adecuado dimensionamiento, así como el caudal y presión necesaria en
cabecera al condicionar el dimensionado y regulación de la estación de bombeo. Por otra parte,
para un mismo caudal en cabecera, las necesidades de presión son distintas dependiendo de la
localización de hidrantes abiertos, por ello es muy importante conocer las curvas de demanda
máxima y mínima de la red.
1 Centro Regional de Estudios del Agua. Universidad de Castilla-La Mancha, España; Email: jose.tarjuelo@uclm.es
La determinación del caudal y altura piezométrica en cabecera de una red de riego a la demanda
que produzca el mejor equilibrio entre el coste total del bombeo y la calidad del servicio prestado,
medida a través de la probabilidad de fallo de suministro a la red, es un problema no bien
resuelto por el momento. Si se utiliza para dimensionar el bombeo el caudal de diseño en
cabecera que resulta al aplicar el método de Clement (Clement y Galant 1986), habrá
normalmente un gran número de fallos de suministro a la red (Lamaddalena y Sagardoy 2000).
Esto obligaría a pasar a un sistema de riego a turnos durante el periodo punta de riego. La
concentración del riego durante la noche en sistemas de aspersión por ejemplo, o el distinto
coste de la energía a diferentes horas del día, y en los distintos días de la semana (Pulido et al.
1998, Reca et al. 1999), hace que no se cumpla la hipótesis de igualdad de probabilidad de
funcionamiento de las tomas a cualquier hora del día o cualquier día de la semana en que se
basa la metodología de Clement.
Dentro de la fase de diseño de este tipo de redes, uno de los principales pasos es la
determinación del caudal de diseño por línea (Labye et al. 1988). Éste es muy variable a lo largo
de la campaña de riego, dependiendo, entre otros, de la distribución de cultivos en la zona
regable, de la fase de crecimiento de los cultivos, de las condiciones meteorológicas, de la
eficiencia de aplicación de los sistemas de riego y de los hábitos de los agricultores. La dificultad
de cálculo del caudal circulante por línea ha provocado el desarrollo de numerosas
metodologías. Las más frecuentas son las que utilizan métodos estadísticos (Clement 1966,
Maidment and Hutchinson 1983, Mavropoulus et al. 1997) y modelos basados en la apertura
aleatoria de tomas con la ayuda de ordenadores personales (Pereira and Texeira 1994, Texeira
et al. 1996, Lamaddalena and Sagardoy 2000, Aliod et al. 1997, Planells et al. 2005). La
metodología de Clement es la más comúnmente usada dada su sencillez de implementación. Sin
embargo, después de haber sido analizada por diversos autores, se demuestra que no siempre
se ajusta adecuadamente a los caudales circulantes por la red de riego a la demanda,
produciendo distintos niveles de subestimación de caudales.
Cualquiera que sea la metodología elegida para obtener el cálculo del caudal de diseño, se debe
aplicar una calidad o garantía de funcionamiento (CF) que es el valor, en porcentaje, de la
probabilidad estadística de que los caudales circulantes por la red durante el periodo punta de
consumo no superen a los de diseño (Granados 1990). Este es un factor que fija el proyectista
buscando un equilibrio entre la garantía de suministro a la red y su coste, tratando de evitar su
sobredimensinamiento.
El objetivo de este trabajo es proponer y analizar un método de determinación de caudales
circulantes por las líneas de una red de riego a la demanda basado, por una parte, en la
asignación aleatoria de cultivos a cada parcela dependiendo de la alternativa de cultivos
considerada para la zona regable, y por otra, en la apertura aleatoria de hidrantes, prestando
especial atención al caudal en cabecera resultante. Una vez establecida la mejor estimación de
los caudales circulantes por línea en el periodo de máximas necesidades, se comparará este
resultado con el obtenido con el método de Clement y con los valores medidos en una red de
riego a la demanda situada en Tarazona de La Mancha (Albacete).
Materiales y métodos.
Metodología de Clemnet
La primera fórmula de Clement (Clement 1966) propone una solución probabilística para
determinar el caudal de línea en una red de riego a la demanda basada en dos hipótesis
iniciales: 1) la apertura de hidrantes se ajusta a una distribución binomial, y si el número de
hidrantes aguas debajo de la línea es suficientemente grande, sigue una distribución normal; 2)
todos los hidrantes de la red tienen la misma probabilidad de apertura a cada hora del día y cada
día de la semana en periodo punta.
Esta metodología supone una distribución aleatoria de caudales, de manera que si una red tiene n
tomas con una dotación qd, que pueden estar abiertas o cerradas en un momento dado, es
improbable que todas estén abiertas a la vez, y por tanto, que el caudal en cabecera) sea Qt = n qd.
El caudal que puede circular por una línea es una variable aleatoria, obtenida como suma de las
variables aleatorias binomiales asociadas a cada uno de los hidrantes aguas abajo de la línea en
cuestión. Si este número de hidrantes es elevado, se puede considerar que el caudal que circula
por la línea sigue una distribución Normal de media
n
μ = ∑ piq d i (1)
i =1
y varianza,
n
σ 2 = ∑ p i (1 − p i ) q d i2 (2)
i =1
siendo Qr el caudal continuo por una línea que tiene aguas abajo n tomas de distinto tipo, cada
una de ellas con dotación qdi, por lo que será:
n n
Qr = ∑ Qri = ∑ pi q d i (6)
i =1 i =1
El caudal total Qt, con todas las tomas abiertas a la vez, sería:
n
Qt = ∑ qdi (7)
i =1
Qtotal
Qmax
Hmax Q2
Q1 Caudal de diseño Qd
Bomba
Hmin Curva
H
Tiempo
JER
Fig. 1. Curvas aleatorias de demanda diaria (parte derecha) y curvas de demanda máxima (Hmax) y
mínima (Hmin)(parte izquierda).
La principal diferencia entre la metodología de Clement y la de las CADD es que ésta no
considera la probabilidad media de apertura de hidrantes (ecuación 3), sino que una vez se ha
elegido de forma aleatoria el día y el momento del día en que comienza el riego, el hidrante
permanecerá abierto durante el tiempo de riego de ese día trd. Otra diferencia importante es la
forma en que asigna el cultivo a la parcela. En el caso de que la distribución real de cultivos en la
zona regable no sea conocida, puede realizarse una distribución aleatoria de cultivos en la zona
a partir de la alternativa de cultivos media prevista para la zona regable, evitando así el problema
de utilizar un valor medio de la alternativa de cultivos, igual para todas las tomas. Eso puede
conducir en ocasiones a errores importantes, especialmente cuando el número de tomas aguas
abajo de la línea en estudio es pequeño.
Para estimar la evolución del caudal en cabecera de la red, el volumen de agua que debe ser
distribuido cada día (Vd) se toma como punto de partida. Además deben conocerse la dotación
de cada hidrante (qdi), el tiempo de riego de un sector (tr), el intervalo entre riego (Ir), el número
de sectores en que se ha dividido la parcela (Ns), es el numero de sectores regados en un día en
una parcela (Nsd), el número de días necesarios para regar la parcela (Nd), y la Jornada Efectiva
de Riego (JER).
Los diferentes pasos a seguir para llevar a cabo esta metodología son:
1.- Fijación del día de apertura del hidrante de forma aleatoria. El primer paso es obtener la
probabilidad de que un hidrante esté abierto un determinado día (pd). Esta depende de si el
tiempo de riego de la parcela (tp = Ns tr) es mayor que la JER o no. Si es mayor, se considera
que se utilizará el mayor tiempo de riego posible de la JER durante un día, y el tiempo de riego
restante se utilizará cualquier otro día. De esta manera pd se define como:
Nd
pd = (8)
Ir
donde Nd es el número de días necesario para regar la parcela
2.- Determinar el tiempo de riego diario de cada parcela:
Este puede ser calculado como:
trd = Nsd tr (9)
donde Nsd es el numero de sectores regados en un día.
Si la parcela no puede ser regada en un solo día, habrá diferentes trd dependiendo del día en que
se efectúe el riego. En esta metodología el día de riego es elegido aleatoriamente. Por ejemplo,
si un sector requiere un tiempo de riego tr = 6,5 h, con un Ir = 5 días, y la parcela esta dividida en
Ns = 3 sectores, para una JER = 18 h, solo podrán regarse dos sectores en un día (lo que quiere
decir que trd = 2 x 6,5 = 13 h) y el otro sector podrá ser regado cualquier otro día, con trd = 6,5 h.
Por tanto la probabilidad de que el hidrante se abra un día concreto será pd = 2/5 = 0,4, ya que
se necesitan 2 de los 5 días del intervalo para regar la parcela. El método elige aleatoriamente si
el hidrante funcionará 13 h/día, 6,5 h/día o no funcionará, respetando el intervalo entre riegos
para los restantes riegos de cada sector.
3.- Determinación de los escenarios de simulación válidos
Para considerar como válido un determinado escenario de hidrantes abiertos en la red se exigirá
que el volumen de agua distribuido durante la JER se ajuste a las necesidades de agua de la
alternativa de cultivos de ese día (Vd), considerando admisible un error máximo del 5% de dicho
volumen.
4.- Determinación del inicio del riego de una parcela de forma aleatoria
Para la generar las CADD, se divide la JER en intervalos de tiempo pequeños (por ejemplo 15
min) para discretizar el proceso. Despues se realiza una generación aleatoria de tomas abiertas,
seleccionando de forma aleatoria el día de riego. Una vez seleccionado el día, se elige de forma
aleatoria el momento de apertura del un hidrante, en un period de tiempocomprendido entre el
inicio de la JER y la JER menos el tiempo de riego al día de ese parcela (trd)..
5.- Generación de las Curvas Aleatorias de Demanda Diaria (CADD)
Una vez conocidos los hidrantes abiertos en cada uno de los invtervalos de tiempo en que se ha
dividio la JER, y considerando la dotación de cada hidrante (qdi), puede obrtenrse el caudal que
circula por cada línea de la red sumando las dotaciones de los hidrantes abiertos aguas abajo de
dicha línea (figura 2). Puesto que se conocerá la localización de las parcelas con los hidrantes
abiertos, podrá determinarse la presión necesaria en cabecera una vez que la red esté
dimensionada, partiendo de la presión necesaria en cada hidrante para el correcxto
funcionameinto del reigo en la parcela.
Hidrante abierto
Tinicio tr Tfina
Qintervalo Tiempo
Caudal
Qmedium
Pequeño Gran
intervalo intervalo
Tiempo de riego
Intervalos diarios
(Clement)
Fig. 3. Efecto del tamaño del intervalo sobre el caudal de diseño en cabecera.
Aunque en principio cabe suponer que todas las CADD tienen la misma probabilidad, en
realidad, bien por tarifación (p.e. periodos de menor coste de la energía eléctrica) o por hábitos
de riego (p.e. regar de noche en aspersión o durante los fines de semana), el conjunto de curvas
generadas puede presentar subconjuntos de curvas más probables. Una forma de implementar
esta posibilidad en el proceso planteado es establecer la condición de distribuir una proporción
del volumen diario en algunas horas del día. Entonces, la probabilidad de apertura del hidrante
no será igual en todas las horas del día. En este caso las curvas de demanda obtenidas no
seguirán una distribución normal, pudiendo utilizar otras funciones de densidad de
probabilidades, entre ellas la de Weibull (Mavropoulos 1997).
Para determinar el número de CADD necesarias para obtener el caudal de diseño en cabecero y
en cualquier línea de la red se ha realizado un análisis estadístico a partir de 50000 simulaciones
en la red de Tarazona antes comentada, obteniendo el coeficiente de variación (CV) de caudales
para diferente número de CADD. Los resultados (figura 4) indican que el número mínimo de
CADD que estabiliza el CV es de 1000-1200.
2003 2004
3,5
2,5
Diferencia CV
2
1,5
1
0.5
0
0 200 400 600 800 1000 1200 1400 1600 1800 2000
Fig. 4. Evolución del coeficiente de variación (CV) de caudales según el número de CADD generadas.
6.- Caudal de diseño en las líneas
Una vez que se ha generado sufriente número de CADD válidas (con un Vd semejante) puede
obtenerse la curva de caudales máximos, uniendo los puntos de caudal máximo de cada CADD.
Este caudal es siempre menor que el que se obtendría con todos los hidrantes abiertos (Qt), y la
red nunca demanda ese caudal máximo. Al igual que en la metodología de Clement, puede
obtener el caudal que corresponde a una determinada calidad de funcionamiento (CF), que
llevará asociado un máximo porcentaje de fallos de suministro a la red. Para determinar el caudal
de diseño se supondrá que la distribución de caudales generados en cada uno de los intervalos
en que se ha dividido al JER se ajusta a una distribución normal. De forma similar a la
metodología de Clement, puede aplicarse una CF (por ejemplo CF = 96%) a cada uno de los
caudales generados para cada intervalo. El valor medio de los caudales máximos obtenidos con
las CADD así generadas podrá considerarse como caudal de diseño de la correspondiente línea
en estudio.
b c
1
0 Caudal
Qinicial QClem. Qmax. Qt
Resultados
El consumo de agua en periodo punta de la alternativa de cultivos implantada en la zona regable
de Tarazona de la Mancha fue de 4,01 mm/día y 4,21 mm/día en 2003 y 2004 respectivamente.
El intervalo ente riegos (Ir, entre 4 y 5 días) y el tiempo de riego (tr, entre 3 y 4 horas)
considerado para el manejo de los principales cultivos de la zona regable son los indicados en la
metodología. El volumen de agua diario a distribuir en periodo punta fue de 25 500 m3 durante la
campaña de riegos de 2003 y 29 800 m3 en 2004.
La jornada efectiva de riego considerada, de acuerdo con el manejo del riego en la zona regable
ha sido de JER= 14 h/día (entre las 20 h y las 9h del día siguiente, sin variación del coste del
agua en esas horas), aunque los sábados, domingos y festivos se puede regar las 24 h. No
obstante, del análisis de tomas abiertas se observa que hay mayor concentración de 5h a 7h de
la madrugada, con cerca del doble de tomas abiertas que en resto de horas disponibles para
regar. Esto es debido a que los agricultores tienden a regar de noche, porque el viento y las
pérdidas por evaporación y arrastre son menores, con lo que programan los riegos con inicio
alrededor de la 4 h de la madrugada y finalización entre las 7h y las 9h, con el fin de poder ver el
final del riego de la parcela. También se ha detectado una concentración del riego los fines de
semana, así como los miércoles y jueves, al coincidir con intervalos de 3 ò 4 días, comenzando
el riego el fin de semana. Así, los fines de semana hay el doble de tomas abierta que los lunes,
martes, o viernes, mientras que los miércoles y jueves hay un 50% más.
De acuerdo con lo observado en la zona regable, el número de sectores en que se ha dividido
cada parcela (Ns) ha sido: 1 sector para parcelas menores de 1 ha; 2 sectores entre 1-3 ha; 3
sectores entre 3-6 ha; y 4 sectores para más de 6 ha.
Del análisis de los caudales circulantes por las líneas de la red, calculados como suma de las
dotaciones de los hidrantes abiertos aguas abajo de la línea, se deduce que no se ajustan bien a
una distribución normal (figura 6) ya que al aplicar el test de Kormogorov-Smirnov resulta un p-
valor menor de 0,05. Algo semejante ocurre al tratar de ajustarlos a una distribución Weibull o
Gamma, aunque visualmente se adapte algo mejor a la distribución Weibull. No obstante, los
caudales de línea obtenidos al aplicar la metodología de las CADD si se ajustan a una
distribución normal.
Frecuencia
Weibull Weibull
120 120
Normal Normal
90 90
60 60
30 30
0 0
0 100 300 500 700 900 1100 0 100 300 500 700 900 1100
Q (l/s) Q (l/s)
Fig. 6. Ajuste de la distribución de caudales en cabecera durante el periodo punta (de lunes a viernes) a
una distribución Normal y Weibull en las campañas de 2003 y 2004.
Los resultados obtenidos con la metodología de las CADD para la línea de cabecera de la red en
2003 y 2004, se muestran en la figura 7, donde aparecerte tanto las curvas de caudales
máximos (Qmax) como las correspondientes a una CF = 96% (Qdiseño).
Qmax 2003 Qdiseño 2003 Qmax 2004 Qdiseño 2004
1750
Q (l/s)
1500
1250
1000
750 997 l/s 811 l/s
500
250
0
0 5 10 15
JER (h)
Fig. 7. Envolvente de las curvas aleatorias de demanda diarias para 2003 y 2004.
Los caudales de diseño en cabecera de la red, calculados con la ecuación (4) para el método de
Clement y el de las CADD, para una calidad de funcionamiento CF = 96%, se muestran en la
tabla 1 para los años 2003 y 2004, donde se han incluido también los caudales medidos,
calculado como suma de las dotaciones de los hidrantes abiertos aguas abajo. Aunque en estos
resultados no se han tenido en cuenta las concentraciones de tomas abiertas en algunos días de
la semana o en algunas horas del día, los resultados obtenidos con el método de las CADD han
sido muy satisfactorios, no ocurriendo lo mismo al aplicar la metodología de Clement.
Tabla 1. Caudales de diseño (l s-1) calculados con las distintas metodologías en 2003 y 2004.
Año Qdiseño(l s-1) Qdiseño (l s-1) Qc (l s-1)
Clement CADD medido
2003 600,0 811,0 817,7
2004 704,7 997,0 848,7
H (bar)
6,1
6,0
5,9
5,8
5,7
5,6
5,5
5,4
Fig. 8. Ejemplo de la evolución de la presión en cabecera un día del periodo punta de la campaña 2004.
La subestimación de caudales obtenida al aplicar el método de Clement entendemos que tiene
mucho más que ver con la falta de cumplimiento de la hipótesis de igualdad de probabilidad de
apertura de hidrantes a cualquier hora del día y cualquier día de la semana que a la falta de
ajuste de los datos de caudal medido a una distribución normal (figura 6), aunque resulta difícil
poder discriminar el efecto producido sobre el resultado final del incumplimiento de cada una de
las hipótesis.
Los buenos resultados obtenidos al calcular los caudales de diseño en cabecera con el método
de las CADD y compararlos con los caudales medidos, hace pensar que el hecho de no utilizar la
probabilidad media de apertura de hidrantes lo hace poco sensible a la posible concentración de
hidrantes abiertos a determinadas horas del día, quedando englobado este hecho en la
generación aleatoria de hidrantes abiertos, y seleccionar después los valores máximos de caudal
del conjunto de CADD generadas.
Con el método de las CADD se ha estudiado la fiabilidad de la estación de bombeo, y la función
distribución de aciertos, que contiene el porcentaje de CADD cuyo caudal máximo no supera un
determinado caudal de diseño (Qd) fijado previamente en cabecera. La función distribución
resultante se muestra en la figura 9, donde se ha marcado el caudal máximo demandado en la
red (1180 l/s en 2003 y1500 l/s en 2004), el caudal de diseño calculado con el método de las
CADD (811 l/s y 997 l/s en 2003 y 2004 respectivamente) y los caudales de diseño calculados
por la metodología de Clement (600 l/s y 704,7 l/s en 2003 y 2004 respectivamente).
1,0
Frecuencia (decimal)
0,8
0,6
0,4
Q Clement
diseño
Qmax
0,2
Q
0,0
600 811 1180
Caudal (l/s)
Conclusiones
Se ha desarrollado una nueva metodología basada en la simulación aleatoria de hidrantes
abiertos y generación de Curvas Aleatorias de Demanda Diaria que ofrece resultados adecuados
de predicción del caudal de diseño de las líneas de una red de riego a la demanda al
compararlos con los caudales medidos.
La utilización de la metodología de Clément provoca una subestimación de los caudales en
cabecera de la red de hasta un 35-40%. Al analizar la diferencia en los fundamentos de ambas
metodologías se pone de manifiesto que uno de las causas más importantes de la subestimación
de caudales del método de Clement puede ser el que no se cumple la hipótesis de igual
probabilidad de apertura de tomas en los diferentes días de la semana y durante todas las horas
de la jornada efectiva de riego.
Los resultados obtenidos ponen de manifiesto también la gran influencia que tiene el consumo de
agua de los cultivos en periodo punta sobre el caudal de diseño en cabecera. Aspecto clave para
dimensionar adecuadamente la estación de bombeo y no tener fallos en el suministro de la red.
Este periodo punta debe corresponder a unos pocos día, una semana en nuestro caso, y puede
haber diferencias significativas si se utilizan periodos muy grandes como puede ser un mes.
Los fallos en el suministro de agua a la red detectados en el periodo punta de la campaña 2004
ponen de manifiesto la importancia de disponer de procedimientos adecuados para estimar los
caudales y presiones necesarios en la estación de bombeo. El método de las CADD y la
determinación de las curvas de demanda máxima y mínima de la red constituyen dos
herramientas fundamentales para dar respuesta a ese tema.
Agradecimientos
Este trabajo de investigación ha sido financiado por el proyecto “Manejo eficiente del agua de
riego y la energía en zonas semiáridas (ref. AGL2001-1180-C02-01), del Plan de I+D del
Ministerio de Ciencia y Tecnología.
Simbolos
qdi = dotación de cada hidrante
Ir = intervalo entre riegos
n = número de hidrantes aguas abajo de la línea
Nd = número de días necesarios para regar la parcela
Ns = número de sectores en que se ha dividido cada parcela
Nsd = numero de sectores regados en un día en una parcela
CF = Calidad de funcionamiento
JER = Jornada Efectiva de Riego
pd = probabilidad de que un hidrante esté abierto un día concreto
pi = probabilidad de que un hidrante esté abierto
Qc = Caudal en cabecera
Qd = Caudal de diseño
Qr = Caudal continuo por una tubería
Qt = Caudal total, con todos ,os hidrantes abiertos
td = tiempo medio de riego al día
tp tiempo de riego de la parcela
tr = tiempo de riego de un sector
trd = tiempo de riego al día de una parcela
U = percentiles de la función de distribución normal asociados a una CF
Vd = volumen de agua que debe ser distribuido cada día
= Media de la población
= Desviación típica
Referencias bibliográficas
Abadía R., 2003. Optimización del diseño y gestión de redes colectivas de distribución de agua para riego
por goteo de cultivos leñosos. Aplicación al regadío de Mula (Murcia). Tesis Doctoral. Escuela
Politécnica Superior de Orihuela. Universidad Miguel Hernández.
Aliod R., Eizaguerri A., Estrada C., Perna E., 1997. Dimensionado y análisis hidráulico de redes de
distribución a presión en riego a la demanda: aplicación del programa GESTAR. Riegos y Drenajes
XXI, 92:22-38.
Clément R., 1966. Calcul des débits dans le réseaux d’irrigation fonctionnant á la demande. La Houille
Blanche. 5: 553-575.
Clément, R. and Galand, A., 1986. El riego por aspersión y las redes colectivas de distribución a presión.
Editores Técnicos Asociados.
Granados A., 1990. Infraestructuras de regadíos: redes colectivas de riego a presión (2ª edición). E.T.S.
Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos. Universidad Politécnica de Madrid. Madrid. Spain.
Labye Y., Olson M.A., Galand A., Tsiourtis N., 1988. Design and optimization of irrigation distribution
networks. FAO Irrigation and Drainage, 44. Roma. Italy.
Lamaddalena N., Sagardoy J.A., 2000. Performance analysis of on-demand pressurized irrigation
systems. FAO Irrigation and Drainage, 59. Roma. Italy.
Maidment D.R., Hutchinson P.D., 1983. Modeling water demands of irrigantion projects. Journal of
Irrigation and Drainage Division. ASCE. 109 (4): 405-418.
Mavropoulos T.I., 1997. Sviluppo di una nuova formula per il calcolo delle portate di punta nelle reti irrigue
con esercizio alla domanda. Rivista di Irrigazione e Drenaggio. 44(2): 27-35.
Monserrat J, Poch R., Colomer M.A., Mora F., 2004. Análisis of Clément’s First Formula for Irrigation
Distribution Networks. Journal of Irrigation and Drainage Engineering. 130: 2.
Mora F., Monserrat J., Cots Ll., Colomer M.A., 2000. Contrastación de la metodología de Clément en una
red de distribución a presión a la demanda en Alcarrás, Lleida. XVIII Congreso Nacional de Riegos.
Huelva. Spain.
Pereira L.S., Texeira J.L., 1994. Modeling for irrigation delivery scheduling: Simulation of demand at
sector level with models ISAREG and IRRICEP. Irrigation Water Delivery Models, 2:13-32. FAO.
Roma. Italy.
Planells P., Tarjuelo J.M., Ortega J.F., Casanova M.I., 2001. Design of water distribution networks for on-
demand irrigation. Irrigation Science 20:189-2001.
Planells P., Carrión P.A., Ortega J.F, Moreno M.A., Tarjuelo J.M., 2005. Pumping selection and regulation
for water distribution networks. Journal of Irrigation and Drainage Engineering. 131(3):273-281.
Pulido I., López R., Roldan J., 1998. Caracterización horaria y estacional de la demanda en una red de
distribución de agua para riego. XVI Congreso Nacional de Riegos. Palma de Mallorca. Spain.
Reca J., Martínez J., Zapata A., López J.G., Callejón J.L., 1999. Estimación de caudales circulantes en
redes de distribución de agua a presión, ramificadas y a la demanda para sistemas de cultivos
intensivos. Actas del VII Congreso Nacional de Riegos, AERYD, Murcia. Spain.
Rossman L.A.., 2000. EPANET 2. Users Manual. Water supply and Water Resources Division National
Risk Management Research Laboratory. U.S. Enviromental Protection Agency. Cincinati. USA.