Tema 3 El Proceso de Enseñanza Aprendizaje
Tema 3 El Proceso de Enseñanza Aprendizaje
Tema 3 El Proceso de Enseñanza Aprendizaje
Objetivos
La enseñanza es la actividad que se realiza para orientar o dirigir el aprendizaje. Para enseñar
bien necesitamos, tener una noción clara y exacta de lo que es realmente enseñar y aprender,
pues existe una relación directa y necesaria no solamente teórica sino también práctica, entre
estos dos conceptos básicos de la didáctica.
¿Cómo se sabe que una persona ha aprendido? ¿Dónde y cuándo es posible aprender? ¿Qué
se necesita para que una persona aprenda? ¿Cuál es la función del profesor o profesora en el
aprendizaje de las alumnas y de los alumnos? ¿Por qué en ocasiones los alumnos o alumnas
no aprenden? ¿Cómo puede lograrse el aprendizaje efectivo del estudiantado?
Estas y otras preguntas deben movernos a reflexionar acerca de nuestro papel como
facilitadores o facilitadoras en el proceso de enseñanza - aprendizaje.
Ningún profesor o profesora enseña bien, si sus alumnos o alumnas no aprenden; de nada
sirve que crea que enseña bien, si el alumnado no alcanza los objetivos de conocimientos o
comportamientos esperados.
Nadie aprende lo que no quiere aprender, y sólo se aprende aquello que elabora uno mismo
o misma; es obvio que interesa utilizar métodos activos en los que alumnas y alumnos
construyan el proceso y por lo tanto el aprendizaje.
En este caso, es más importante lo que el alumnado produce que lo que hace el profesor(a);
pues si en un método la actividad la lleva predominantemente la profesora o profesor, será
ella quien de verdad aprende y no los alumnos y las alumnas.
Caso contrario, si la actividad predominante es ejecutada por los y las alumnas orientadas(os),
ayudadas(os) y motivadas(os) por el profesor o profesora, serán aquellos quienes más
aprenderán, es decir, se convertirán en artífices de su proceso de formación y aprendizaje,
que en definitiva es el fin que se persigue.
Aprender es un proceso de toda la vida. Aprendemos desde el vientre materno hasta nuestro
lecho de muerte. Entre todas las actividades humanas, aprender ha sido una de las más
antiguas y todo hombre o mujer está sometida a un largo proceso de aprendizaje.
Desde apenas recién nacidos(as), hemos tenido necesidad de aprender infinidad de cosas
aparentemente sencillas como: mamar, caminar, distinguir diferentes objetos, reconocer a
nuestro papá y a nuestra mamá, llamar por su nombre a cada cosa, a cada persona y a cada
animal, construir frases y largas oraciones.
Posteriormente, hemos tenido que aprender a leer y a escribir, a efectuar sencillas operaciones
aritméticas, las reglas de ortografía, etc. Poco a poco nuestro nivel de conocimiento fue
aumentando.
Sin embargo, cada vez que hemos alcanzado un nivel determinado, vemos hacia adelante,
hacia todos los lados, y notamos que aún nos falta mucho por aprender. Y siempre nos faltará.
Aún con todo esto, necesitamos aprender a aprender, a construirnos un ambiente educativo e
informativo, que promueva la creatividad y criticidad
Aprender es un proceso
Todas las personas aprendemos en cada etapa de la vida. Un anciano o anciana sigue
aprendiendo, por ejemplo, cada día el periódico le muestra información, igual la radio, la
televisión le lleva nuevos conocimientos y cada día sus condiciones físicas y mentales le
imponen nuevos hábitos y adaptaciones.
Podemos concluir esta parte, diciendo que la persona está siempre en un proceso permanente
de aprendizaje, día a día descubre que lo aprendido es muy poco en relación con lo que debe
aprender.
Las experiencias pueden ser directas (o en contacto con las cosas mismas), o bien
mediatizadas (información del profesor o profesora), transmitida por otras personas a través
de representaciones, símbolos o lenguajes.
Para que una persona aprenda, se requiere que sea capaz de percibir e interactuar con una
situación nueva y que resulte importante hacerlo, porque encuentra sentido y valor en la
experiencia.
Enseñar viene de in signare, que significa: marcar, sellar, imprimir, y alude al hecho de
comunicar conocimientos, transmitir información.
Es importante notar que mientras la acción de aprender está en la persona que aprende, la
acción de enseñar se centra en la otra persona, el maestro o maestra.
Educar, educación: De Educare que significa extraer, sacar, hacer salir. Indica la actividad
de la maestra(o), pero pone de relieve que las potencialidades ya están en la persona; que no
se trata tanto de "meterle" cosas como de poner en juego las potencialidades y fortalezas de
que está dotada.
La enseñanza escolar no es más que una parte de la instrucción, porque en toda instrucc ió n
lo que se hace es enseñar.
Todo lo que existe en el universo es objeto de aprendizaje por parte del ser humano. Pero se
puede clasificar en cuatro grandes áreas:
Para que una persona aprenda se requiere que sea capaz de percibir e interactuar con una
situación nueva y que resulte importante hacerlo, porque encuentra sentido y valor en la
experiencia.
Confronte situaciones nuevas para las que todavía no hay respuesta previa. Considere útil e
interesante estudiar, investigar y experimentar. Actúe sobre los materiales de estudio, y, a
través de la actividad, obtenga experiencias nuevas. Las experiencias resulten significativas,
porque corresponden a las necesidades e intereses, y se relacionan con los conocimientos y
experiencias previas. Me doy cuenta de los resultados de mi esfuerzo, y ratifican o rectifica n
mis actividades.
El constructivismo
Sin duda, la reflexión sobre las temáticas anteriormente estudiadas, nos abren un espacio para
construir posteriormente nuestros modos y estilos de aprendizaje y ofrecer una buena labor
pedagógica a los niños y niñas y por lo tanto ofrecer un mejor servicio educativo.
Las personas que aprenden de una manera constructivista elaboran sus nuevos conocimie ntos
a partir de revisiones, selecciones, transformaciones y reestructuraciones de los
conocimientos que ya se tienen; actividad que se realiza de manera cooperativa con la ayuda
de un facilitador o facilitadora - el o la docente- y de sus compañeros y compañeras.
"Las tareas son tan complejas, y las consecuencias de una profesionalización inadecuada son
tan graves para los individuos y para la sociedad, que todos quienes tienen responsabilidades
educativas, independientemente del tipo de institución en la que deben realizarlo, deberían
tener una preparación continua"
De acuerdo con este enfoque, la educación enciclopédica con miles de contenidos, con
cientos de materias, está siendo abandonada en la mayoría de los países del mundo.
Es muy fuerte la idea del alumno o alumna que egresa sabiendo las capitales de los países de
Europa o del Asia, las fechas históricas, las fórmulas de oxígeno… pero eso no es
fundamental.
Lo fundamental es que el alumno o alumna se preocupe por un problema físico, o por los
desastres naturales y su prevención como los huracanes o cualquier otro tipo de desastres y
qué hacer en esos casos, que tome conciencia de una enfermedad llamada SIDA que en 20
años va a destruir gran parte de la población mundial, que sea consciente de que hay un
desastre ecológico y que no es sólo un problema moral sino una cuestión científica, que sepa
por qué hay un intercambio desigual entre los países, por qué se está acrecentando la
violencia y qué hacer para contrarrestar ese problema.
En tal sentido, se debe favorecer la comprensión, y que los alumnos y alumnas sepan de qué
hablan. El contexto social es el que determina en gran medida sus opiniones.
Para aprender los conceptos no alcanza con repetirlos, hay que relacionarlos, comprenderlos
y poner en marcha un proceso de aprendizaje realmente significativo.
Las fuentes psicológicas del constructivismo, visualizado como una propuesta pedagógica,
están desarrolladas en muchos enfoques de psicólogos y pedagogos contemporáneos.
"En la época actual se ha comprobado que la mera explicación verbal del profesor(a) no es
tan esencial e indispensable para que los alumnos y alumnas aprendan; sirve solo para
iniciar, evaluar y guiar el aprendizaje. Que el profesor o profesora haya explicado muy bien
un tema, no garantiza que los alumnos o alumnas hayan aprendido".
"Básicamente puede decirse que es la idea que mantiene que el individuo - tanto en los
aspectos cognitivos y sociales del comportamiento como en los afectivos no es un simple
producto del ambiente ni un simple resultado de sus disposiciones internas, sino una
construcción propia que se va produciendo día a día como resultado de la interacción entre
esos dos factores. En consecuencia, según la posición constructivista, el conocimiento no es
una copia fiel de la realidad, sino una construcción del ser humano.
¿Con qué instrumentos realiza la persona dicha construcción? Fundamentalmente con los
esquemas que ya posee, es decir, con lo que ya construyó en su relación con el medio que le
rodea.
En la actualidad hay suficientes conceptos en los currículos. Sin embargo, la realidad es que
los alumnos y alumnas estudian los conceptos como si fueran datos. Es decir, aprenden de
memoria listas de informaciones, pero sin intentar entenderlas.
Pero hay otra razón por la que muchas veces los alumnos y alumnas memorizan en vez de
comprender: en la evaluación con mucha frecuencia el profesor o profesora no tiene la
capacidad de discriminar cuál alumno o alumna ha comprendido y cuál no.
Con mucha frecuencia igualmente, las evaluaciones siguen un patrón que consiste en pedirle
al alumno(a) una repetición más o menos literal de lo que se ha dicho en clase o de lo que
está en el libro. Por ejemplo: "hay cinco características de las sociedades liberales". Si el
alumno o alumna pone seis se ha pasado de la raya. ¿Esa de dónde la ha sacado? La idea
equivocada es que el alumnado tiene que estructurar el saber cómo el profesor o profesora lo
ha hecho en clase. Entonces, lo que aprende es a repetir palabras ajenas, no a decir las propias.
Es más cómodo memorizar que intentar entender. Además, como la mitad de las palabras
que la profesora o el profesor dice no las entiende, éste se justifica diciendo: "más vale que
las repita tal cual"
Podemos concluir entonces, diciendo que algunos ejercicios que ayudan a romper estos
paradigmas, tienen que ver con pedir a los y las estudiantes que digan lo que han entendido
con sus palabras, que busquen los ejemplos, que hagan las preguntas, que lo conecten con
cosas que conoce.
Ese nuevo conocimiento hay que darlo para cambiar lo que los y las estudiantes ya tienen de
alguna manera escrito en su mente. Porque el aprendizaje se asienta en otros aprendizajes
más simples pero anteriores.6
"Aprender a aprender no es tan difícil. Solo necesita ejercicio, práctica y querer saber las
cosas por el lado de la comprensión y el esfuerzo, dejando de lado la memorización mecánica
que sólo le aporta frías informaciones, pereza para pensar y tedio de vivir". Miriam Masso.
El famoso filósofo y pedagogo norteamericano Jhon Dewey, expresó hace algún tiempo, que
el ser humano aprende haciendo, lo cual significa que debemos actuar de manera práctica y
concreta en todos los momentos de la vida, reflejando en nuestro comportamiento las ideas,
creencias y valores que alberga nuestra mente, con el fin de darle una orientación clara a
nuestra vida.
Se dice popularmente que existen tres maestros que debemos oír continuamente: la
naturaleza, la experiencia y los libros.
Los libros son muy útiles, pero hay que saber que, si no hay un equilibrio entre la práctica,
la naturaleza y la lectura, vamos perdiendo la capacidad de actuar.
De igual manera, si nos alejamos de los libros, perdemos la amplitud enriquecedora que nos
da el pensamiento de quien los ha escrito, y que permite generalizar y darles inmenso valor
a los pequeños hallazgos de los experimentos concretos.
Para aprender los conceptos no es suficiente repetirlos, hay que relacionarlos, comprenderlos
y aplicarlos.
De todo el caminar por esta vida, usted ha sacado una enseñanza: aprendió. Poco a poco se
fueron moldeando sus intereses, sus gustos, sus sentimientos y creencias. Y a medida que fue
ampliando su contacto con las personas y cosas, continuó aprendiendo; cambió gustos y
opiniones, descubrió situaciones nuevas. Su ambiente y la relación con él determinaron su
forma de ser, lo que usted es hoy.
Pero la historia continúa, el mundo avanza. Y usted, está allí, como sus alumnos y alumnas
aprendiendo de él. Porque usted puede pensar, puede observar, puede descubrir, crear y
necesita comunicar. Y mientras usted viva, puede continuar aprendiendo. Por esa razón,
también es responsable de su propio aprendizaje y de los beneficios que éste traiga a su vida,
a los y las estudiantes que han sido puestos bajo su orientación, la de su familia, la de la
comunidad y la de su país.
Por otro lado, debemos analizar desde una perspectiva global, formas de aprendizajes muy
variadas, que revisten las siguientes características:
- El aprendizaje abierto, sin fases ni esquemas prefijados, más bien centrado en intereses,
necesidades y posibilidades de los alumnos, que favorece ofertas de aprendizaje fuera del
ámbito escolar. De esta manera se crea una atmósfera estimulante de trabajo, semejante al
ambiente en los talleres; su organización es libre y flexible, se reduce la enseñanza frontal a
favor de la enseñanza personal y de equipo (trabajo individual, en pares, pequeños equipos,
método de proyectos, viajes de estudio, etc.)
- Un aprendizaje interrelacionado por áreas. Se rompe con la separación del conocimie nto
por asignaturas aisladas, buscando la interdisciplinariedad que se da alrededor de un tema,
problema, proyecto o necesidad.
- Un aprendizaje dialógico, donde las personas demuestran que son capaces de comunicarse
y generar acciones a través del consenso, transformando las relaciones entre las personas y
su entorno.
Entendemos por modelo didáctico, una teoría de las ciencias de la educación que sirve como
modelo y análisis del actuar didáctico en el contexto escolar como extra-escolar. Por un lado,
es la representación conceptual, simbólica y por otro lado, es la estructuración sistemática de
la secuencia del proceso de aprendizaje.
Tienen por finalidad aclarar las condiciones, las posibilidades y límites del proceso,
considerando tanto aspectos teóricos como práctico-metodológicos.
Distinguimos como factores a nivel macro, aquellos que se encuentran a nivel mundia l,
nacional, regional y como factores a nivel micro, aquellos que se encuentran en el entorno
más cercano: escuela y localidad.
Factores en el nivel macro son:
La estructura curricular nacional o regional con sus componentes, sus enfoques, sus
contenidos, estrategias metodológicas generales y su sistema de evaluación.
Las normas generales sobre infraestructura, construcción, mobiliario, material educativo etc.
Concluimos, que ya no cabe determinar un solo modelo didáctico como válido, pues las
realidades tan complejas exigen que el maestro o maestra conozca y domine una gran
variedad de modelos y determine en qué momento emplear qué modelo y cuándo combinarlo
con otro, insistiendo cada vez más en modelos didácticos con relaciones interactivas, donde
se da una interrelación entre alumnos(as), entre profesor(a) y alumno(a), y su entorno,
integrando saberes y abarcando al ser humano en su totalidad, para así lograr comprender y
poder transformar la realidad.
Este proceso de aprendizaje puede realizarse presentando los contenidos totalmente acabados
o descubriendo y construyendo los contenidos mediante procesos participativos. Ambas
tendencias se deben complementar y el buen proceso de aprendizaje requiere de modelos
didácticos centrados en el actuar del profesor(a) y modelos didácticos centrados en la
actividad de los alumnos(as), para lograr hacer una síntesis armónica de naturaleza
interactiva.
TIPOS DE APRENDIZAJE
Aprendizaje Repetitivo
Los nuevos conocimientos no establecen relación con los conceptos previos o son de forma
mecánica, poco duradera.
Aprendizaje Significativo
Los nuevos conocimientos se vinculan de manera clara y estable con los conocimie ntos
previos.
Aprendizaje Receptivo
Debe partir del nivel de desarrollo cognitivo, social, afectivo y motor, considerar los intereses
y experiencias personales y grupales y favorecer la elaboración autónoma del nuevo
conocimiento. Los alumnos(as) son responsables, en gran parte, de su propio aprendizaje.
Mediante un aprendizaje activo, participativo elaboran, producen y aplican nuevos
conocimientos, y no se les presenta fórmulas, esquemas, resultados, modelos y datos hechos,
sino que se facilita y organiza un proceso en el cual puedan, paso a paso, descubrir las leyes,
las estructuras y las interrelaciones.
Comúnmente se identifica con este modelo la enseñanza frontal, que ha sido criticada y dada
de baja por los teóricos de la educación, pero sigue vigente en la práctica pedagógica, y
frecuentemente reviste todos los males de una enseñanza tradicional, expositiva, memorís tica
y repetitiva. El contenido, mayormente de naturaleza cognitiva, es presentado totalmente
acabado y el agente principal es el profesor. Generalmente es un aprendizaje estandarizado
para un grupo grande (20 a 40 personas), sin recursos didácticos y metodológicos
innovadores.
Aunque actualmente se priorizan los modelos más participativos, no deja de tener vigenc ia
una buena enseñanza con enfoque informativo y hay autores actuales (Cpr.Grell/ Grell 1999)
que insisten en la importancia de los modelos didácticos centrados en el actuar del
profesor(a), pues consideran que la mejor motivación para el aprendizaje no es la motivac ió n
y elaboración, sino una información clara a los alumnos acerca de lo que van a aprender.
Seifert (1994) considera que los modelos centrados en el profesor significan exposiciones
frente a un grupo de personas interesadas en temas específicos que deben cumplir los
siguientes objetivos:
Una objeción básica a este modelo es la receptividad mayormente pasiva de los alumnos,
quienes pueden influenciar muy poco en lo que quieren aprender o cómo quisieran aprender,
pues es una oferta estandarizada en la cual no se sabe, si el alumno entendió, si lo incorporó
a su estructura mental dada o no, pues depende de su capacidad de concentración, de atención,
de comprensión, de su nivel de abstracción cognitiva y de poder estar sentado y callado un
buen tiempo.
El sentido que se activa mayormente es el oído y por consiguiente el aprendizaje real, según
la psicología del aprendizaje, queda reducido a un 20%. Es conveniente, que, en el
procesamiento de la información, se utilicen diferentes canales, para que la retención sea
mayor. El cuadro siguiente nos ilustra cuánta información retenemos:
Si observamos nuevamente el cuadro acerca de cómo aprendemos mejor, vemos que tenemos
mayor posibilidad cuando participamos directamente con todos los sentidos actuando y
haciendo. Logramos un aprendizaje significativo, cuando integramos el nuevo conocimie nto
a la estructura mental ya existente y es difícil que eso se realice solamente mediante la
información del profesor, sino que es indispensable que el alumno o la alumna mismo sea el
agente de su propio aprendizaje, pues tiene su propio ritmo, sus propios intereses y
necesidades, sus propias facultades etc.
Hemos insistido varias veces en la visión globalizadora de la didáctica, y por consiguie nte
no se trata de condenar la intervención del profesor o profesora, ni sobrevalorar
unilateralmente la actuación de los alumnos, sino ambos, profesores(as) y alumnos(as) deben
interactuar constantemente.
Por un lado, los educadores y las educadoras deben organizar su actuación flexibleme nte,
para que le dé margen suficiente de adaptarla a las necesidades y conocimientos de los y las
alumnas y por otro lado deben encontrar sentido en lo que hacen, deben enfrentarse a retos y
desafíos nuevos, pero a la vez se les debe proporcionar las ayudas adecuadas para que puedan
abordarlos.
De esta manera se logra una actividad mental auto estructurante, que permita establecer el
máximo de relaciones con el nuevo contenido.
"Lo importante no es que las y los profesores enseñen, sino que sus estudiantes
aprendan"
BIBLIOGRAFIA
1. De acuerdo con las ideas aquí expuestas y con sus conocimientos previos, conceptualice
lo que es para usted enseñanza y aprendizaje y establezca sus diferencias.
2. Escriba una frase qué sintetice qué es para usted, aprender a aprender.
4. Enuncie situaciones de su vida diaria, en las que usted ha comprobado que ha aprendido a
aprender.