114 El creyente responsable

desarrollo de la lección

UTILICE CORRECTAMENTE SU TIEMPO

Algunos pensamientos acerca del tiempo
Objetivo 1. Identificar descripciones de las cualidades del tiempo
y de la responsabilidad del hombre por su tiempo.
Las cualidades extrañas del tiempo
El tiempo es algo extremadamente extraño. Es como una
avenida, pero con ciertas diferencias, porque en una avenida
podemos avanzar y retroceder mientras que en el tiempo sólo
avanzamos. Siempre avanzamos hacia el futuro; nunca podemos
volver al pasado. Podemos regresar a la ciudad donde vivimos
cuando éramos niños; ¡pero no podemos ser niños otra vez!
Podemos detenernos en el camino por un tiempo; pero no
podemos detener el tiempo. Usted no puede siempre ser joven;
debe avanzar hacia la ancianidad . . . la muerte . . . la eternidad.
El tiempo es una posesión muy valiosa. Pero a diferencia de
otras posesiones, no podemos comprar tiempo de otra persona ni
podemos vender el nuestro. ¡Cuántas personas estarían
dispuestas a pagar una fortuna simplemente para vivir unos
pocos años más!

Atrás Adelante

Pasado Futuro

Tampoco podemos ahorrar tiempo para usarlo más tarde; si

no lo aprovechamos ahora, lo perdemos.
En algunos aspectos el tiempo pareciera ser relativo. Parece
más largo al estudiante que al profesor. También parece más
extenso a la congregación que al predicador.

Nuestra vida
Dios determina cuánto tiempo tendremos de vida. La
experiencia de Ezequías así lo demuestra (2 Reyes 20:1-6). De
esta manera El es dueño de nuestro tiempo. El nos da
Empleando nuestros recursos personales 115

individualmente nuestro tiempo. ¡Y pensar que algunas personas

dicen que no tienen tiempo para Dios!
Cada ser humano es responsable delante de Dios por la
manera en que usa su tiempo. Una vida de muchos años al
servicio del Señor no es lo mismo que unas pocas horas dadas a
El antes de morir. No hay punto de comparación entre Pablo
(2 Timoteo 4:6-8) y el criminal que se arrepintió en la cruz
(Lucas 23:41-43). Ambos fueron salvos; pero el primero le dio a
Dios los mejores años de su vida, mientras que el último le dio
las sobras. ¡Y Dios siempre merece lo primero y lo mejor!
Dios ha prometido larga vida a quienes le obedecen (Exodo
20:12; 23:26; Deuteronomio 30:20; Salmo 91:16; Proverbios
4:10). Por el contrario, El acorta la vida del malvado (1 Samuel
2:31-33; Proverbios 10:27).
1 ¿Cuál declaración describe mejor la responsabilidad del
hombre por su tiempo?
a) No es importante, en realidad, lo que una persona hace con su
tiempo con tal que al final llegue al cielo.
b) Dado que el tiempo le es dado a la persona por Dios, ella
deberá responder acerca de su uso.
c) Debido a que una persona no puede ahorrar tiempo ni obtener
tiempo adicional, ella no debería preocuparse mucho acerca
de cómo lo utiliza.
2 El tiempo puede ser descrito como
a) una avenida, sobre la cual uno puede avanzar o retroceder.
b) una posesión valiosa de la cual somos dueños.
e) un recurso que Dios nos permite administrar.

Organizando su tiempo
Objetivo 2. Identificar la estrategia que le ayudará a una persona
a resolver los problemas en el uso de su tiempo.
Objetivo 3. Siguiendo los ejemplos dados en la lección, escribir
sus responsabilidades, sus citas semanales, una
agenda diaria y una lista de cosas para hacer.
Ahora que usted comprende que su vida es un depósito que
Dios ha puesto en sus manos, lo más lógico que pueda hacer es
usarla de acuerdo a sus instrucciones (Efesios 5:16; Colosenses
4:5). Para hacer así deberá organizar su tiempo. Dado que las
horas que usa para su trabajo ya están ocupadas, únicamente
trataremos con la organización del tiempo que usted puede usar
como quiera. Estas son algunas de las sugerencias:
116 El creyente responsable

Haga una lista de responsabilidades

¿Recuerda cuando en la lección 2 mencionamos tres
categorías de inversión: Dios, otros y nosotros mismos? ¿Y la
estrategia de metas, prioridades y planes de la lección 3? Muy
bien, ahora puede practicarlas para separar una parte de su
tiempo en cada una de sus diferentes responsabilidades.
1. Tiempo para Dios. Esta es nuestra responsabilidad
principal y nuestra primera prioridad. Dios ha establecido que
una séptima parte de nuestro tiempo debería ser dedicada
especialmente a El (Exodo 20:9-10). Pero también
necesitamos apartar tiempo para nuestras devociones
privadas. Note el ejemplo de Jesús en Marcos 1:35.
Necesitamos separar tiempo para estar a solas con Dios,
orando y estudiando su Palabra. Si hemos dejado de hacerlo,
le debemos a Dios una cantidad de tiempo; y debemos
devolvérselo, o no, ¿Qué piensa usted?
3 ¿Cuál sería una manera específica de aplicar el ejemplo de
Cristo, según Marcos 1:35, a su vida?
........................................................................................................
2. Tiempo para otros. Si estamos casados, en primer lugar,
debemos separar tiempo para hablar con nuestro cónyuge
acerca de nuestros intereses comunes. Somos una carne
(Génesis 2:24). Cada uno necesita al otro. A veces es posible
que dos personas vivan bajo un mismo techo como si fueran
totalmente extrañas. Ser negligentes en separar un tiempo el
uno al otro puede ser el primer paso que más tarde dirija al
matrimonio a la separación.
En segundo lugar, necesitamos separar un tiempo para
nuestros hijos. Ellos tienen sus propias necesidades y problemas,
y durante este tiempo podemos averiguar cuáles son y buscarles
soluciones. Este es el tiempo cuando les aconsejamos y les
damos a entender que tenemos interés en ellos.
Luego debemos dedicarles tiempo a nuestros hermanos y
hermanas en la fe. Un tiempo para adorar juntos al Señor y estudiar
la Biblia. Un tiempo para promover nuestro compañerismo. Un
tiempo para establecer una amistad cordial con otros creyentes.
Por último, necesitamos separar un tiempo para otras personas.
Este es el tiempo que dedicamos a la obra del Señor. Es el tiempo
cuando testificamos, predicamos, enseñamos o aconsejamos. Es el
tiempo cuando podemos hacer el bien a los demás.
Empleando nuestros recursos personales 117

3. Tiempo para usted mismo. Esto pareciera ser egoísta,

¿verdad? Pero todos necesitan separar un tiempo de descanso,
recreación o meditación, ¡y un tiempo para hacer planes! De
esta manera estaremos en mejores condiciones de servir al
Señor.
4 Divida una página de su cuaderno en tres secciones, como
ilustramos a continuación y escriba arriba de cada sección:
Tiempo para Dios, Tiempo para otros y Tiempo para mí mismo.
En cada sección, escriba las responsabilidades que tiene.

Tiempo para Dios Tiempo para otros Tiempo para mí

mismo

Utilice una agenda

Una vez que ha hecho una lista de sus responsabilidades,
necesita escribirlas en una agenda. Las agendas son pequeños
libritos donde se anotan las citas diarias. Hay agendas sencillas
donde se anotan las citas principales que una persona tenga
diariamente; y las más detalladas, en donde las anotaciones
pueden programarse cada media hora. Una agenda sencilla no es
costosa y, por supuesto, es adecuada para las citas que un obrero
cristiano pudiera tener.
Quizá usted se pregunte: ¿Cuáles son las ventajas para el
obrero cristiano que utiliza una agenda? Yo diría que hay tres:
118 El creyente responsable

1. No se olvidará de sus citas si tiene varias. (En una

ocasión, antes que pusiera en práctica el uso de la agenda,
¡me olvidé de una cita para predicar en una iglesia!)
2. Le evitará formalizar una cita en el mismo tiempo que ya
tiene apartado para otro propósito.
3. Le permitirá, bien anticipadamente, hacer planes con su
tiempo.
Usted necesita mirar su agenda todos los días, por supuesto,
para recordar sus obligaciones. Una vez que haya cumplido con
ellas, podrá tacharlas. Esto le ayudará a saber cuáles citas no ha
cumplido y cambiar de fecha si fuera necesario.
El siguiente ejemplo es una sugerencia para un creyente que
trabaja por su cuenta:

Mayo Mayo
Lunes Jueves
20:00 Hablar con mi esposa 14:00 Visitar a los enfermos en el
por media hora. hospital.
20:30 Visitar a Juan. Está 18:30 Hablar con mi hijo mayor.
enfermo.
Martes Viernes
10:00 Pagar la cuenta de 20:00 Dirigir los himnos en la
electricidad. iglesia.
Miércoles Sábado
20:00 Asistir a la reunión de 14:00 Salir a invitar gente para la
la iglesia. escuela dominical.
Domingo
10:00 Enseñar en la escuela
dominical.
18:30 Asistir a la reunión de la
iglesia.

5 En su cuaderno escriba las citas que tiene para la próxima

semana, indicando el día y la hora. Siga el modelo proporcionado
en esta lección.

Prepare un programa
Puede parecerle innecesario escribir en su agenda cosas que
lleva a cabo como una rutina: orar, asistir a la iglesia, ir al trabajo,
Empleando nuestros recursos personales 119

etc. Si es así, sería de mucha ayuda si preparara un programa de lo

que considera ser un día normal. Este programa le ayudará a
recordar las cosas que necesita hacer a cierta hora de cada día. Su
programa también les ayudará a otros a comprender que usted tiene
ciertas horas separadas para propósitos específicos. Por ejemplo,
nadie vendría a visitarle a la misma hora en que usted sale hacia su
trabajo. Pero algunas veces ocurre que un amigo o pariente viene a
visitarle cuando está listo para salir hacia la iglesia.
Los programas sugeridos a continuación son para un creyente
que trabaja de empleado y para una ama de casa cristiana. Por
supuesto, usted puede adaptarlos para que se ajusten a las
costumbres de su país y a sus propias necesidades
Programa de un empleado Programa para una ama de
casa
6:00 Levantarse 6:00 Levantarse
6:30 Orar 6:30 Orar
7:00 Desayunar 6:45 preparar el desayuno
7:15 salir al trabajo 7:00 Desayunar
8:00 Trabajar 7:15 orar con los niños; enviarlos
a la escuela
12:00 Almorzar 7:30 estudiar la Biblia
12:30 Estudiar 8:00 limpiar la casa y hacer
compras
13:00 Trabajar 12:00 Almorzar
17:00 Regresar a casa 12:30 hacer limpieza
17:45 Bañarse 13:00 Actividades con los niños
visitar
18:15 Cenar 16:30 preparar la cena
18:45 tiempo libre 18:00 hacer limpieza
19:00 salir para la iglesia 18:45 Bañarse
21:30 regresar a casa 19:00 salir para la iglesia
22:00 orar y acostarse 21:30 regresar a casa
22:00 orar y acostarse

6 Escriba en su cuaderno un programa diario para usted. Use el

ejemplo proporcionado en esta lección para obtener algunas
ideas. Para asegurarse de un tiempo para cada una de sus
responsabilidades, utilice la lista que preparó en respuesta a la
pregunta 4.
120 El creyente responsable

Prepare una lista de cosas que hacer

Una buena técnica que nos ayudará a utilizar bien nuestro
tiempo es planificando cada día lo que hemos de hacer al día
siguiente. Esta técnica le ayudará especialmente a la persona que
trabaja por su cuenta, al obrero cristiano de tiempo completo o a
la ama de casa. Para esto, escriba en una hoja todo lo que
necesitará hacer al día siguiente. Normalmente algunas personas
preparan una lista sencilla, pero si hay varias cosas para hacer,
otras prefieren dividirlas en categorías. El siguiente es un
ejemplo de una lista dividida en categorías:

Escribir: Visitar:

Al Pastor S. N. Al hermano J. B.
Al Superintendente Al Sr. Luis H.
A mi mamá A la familia García

Comprar: Pagar:
3 bombillas La cuenta de electricidad
sellos postales La literatura de escuela
dominical

El tener esta clase de lista le ayudará a hacer las cosas a

tiempo. ¿Qué necesidad tiene de disculparse por haber esperado
tanto tiempo para contestar una carta? ¿O disculparse por
demorar la visita a un enfermo? ¿O pagar una cuenta el último
día, teniendo que esperar en una larga fila de personas que están
haciendo lo mismo? Además, una lista dividida en categorías le
ayudará a hacer todas las diligencias semejantes a un mismo
tiempo. ¿Por qué hacer otro viaje al centro de la ciudad debido a
una carta que se olvidó enviar o algo que olvidó de comprar?
7 En su cuaderno, o en una hoja de papel, escriba una lista de
cosas que necesita hacer. ¿Tiene dos o tres cosas para hacer al
mismo tiempo? Si es así, agrúpelas siguiendo el ejemplo.
8 Santiago se da cuenta que le prometió a su hijo llevarlo de
paseo a la misma hora en que había acordado reunirse con un
amigo para estudiar la Biblia. Santiago podrá evitar problemas
como éste en el futuro
a) preparando un programa diario de actividades.
b) teniendo una lista de cosas que necesita hacer.
c) llevando una agenda.
Empleando nuestros recursos personales 121

Sea puntual
Hay personas que maldicen al hombre que inventó el reloj;
ellas creen que este aparato ha transformado al hombre en un
esclavo. Debido a eso, siempre llegan tarde dondequiera que
van. Otras no organizan su tiempo y no hacen lo que deberían
hacer.
El hábito de llegar tarde bien puede ser el resultado de una
actitud que teníamos antes de conocer a Cristo. Pensábamos que,
como lo hace mucha gente, nos sobraba tiempo para arreglar
nuestra cuenta con Dios. Pero es importante comprender que
Dios hace las cosas a tiempo (Gálatas 4:4; Tito 1:2-3). También
Jesús hizo las cosas a su debido tiempo y quiso que sus oyentes
hicieran lo mismo (Lucas 22:14; Juan 7:6).
Como mayordomos de nuestro tiempo, también deberíamos
obrar puntualmente y llegar a tiempo a nuestros compromisos.
Esta actitud demostrará también que somos considerados con
otros. Si tenemos una cita con alguien a las 10:00 de la mañana,
¿por qué debemos hacerle perder media hora a otra persona por
llegar a las 10:30? Un empleado trata de llegar puntualmente a
su trabajo. Deberíamos tener el mismo deseo de llegar a las
reuniones a tiempo y, también comenzarlas a tiempo.

Utilice el tiempo de espera

Usted puede aprovechar el tiempo en una sala de espera,
viajando en autobús o viajando en un tren. Puede leer un libro,
estudiar su lección, testificar acerca de Cristo a la persona que se
sienta junto a usted, o pensar en algo edificante. Lo mismo
podría hacer si está en una fila de personas, esperando comprar o
sellos postales o pagar una cuenta.
9 Haga una lista, en su cuaderno, de maneras en que usted
podría utilizar su tiempo de espera

INVIERTA SUS CAPACIDADES

Algunos pensamientos acerca de las capacidades
Objetivo 4. Identificar declaraciones que están de acuerdo con lo
que Mateo 25:14-30 nos enseña acerca de la
mayordomía de las capacidades.
Como dijimos en la lección 2, en Mateo 25:14-30 Jesús nos
enseña que cada persona es mayordomo de Dios. Su parábola