Mantilla Molina-Acto de Comercio
Mantilla Molina-Acto de Comercio
Mantilla Molina-Acto de Comercio
MANTILLA MOLINA
CATEDRÁTICO DE LA ASIGNATURA EN LA UNIVERSIDAD NACIONAL DE wtJlco
DERECHO MERCANTIL
INTRODCCClóN y CONCEPTOS FUNDAMENTALES
SOCIEDADES
V¡GESIMOSEXT~EIÍ ÓN
REVISADA Y PUES AL OlA
PO ...(1..
ROBERTO L. M4'NTI¡.L"l\ CABALLERO
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JOSI' ~~A ABASCAL ZAMORA
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PROFE~~>~A
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UNIVERSIDAD IBEROAMERICANA
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EDITORIAL PORRÚA, S. A.
AV. REPÚBLICA ARGENTINA, 15
MEJICO, MCMLXXXIX
CAPITULO IV
ACTOS DE COMERCIO
5 Por ronexl6n ron la actividad mercanut 5egunda Sala, en el juicio Banco del P .
puede adquirir eae carácter la responaabllídad S. A., VI. Banco IntttnacionaJ, S. A.. de fecha
proveniente de un hecho mcito. pues no le le 15 de mayo de 1962. con el argumento de Que
ccnaldera esencíaltneme civil. En este aentido, la respon.abilidad civil se encuentra ~ulad.'t
la doctrina dominante seguida en b. actualidad por lo. artlcu10l 1910 V .iguientes del Código
por la jurisprudencia europea. AsCAal:Ll.l, In- Civil, V de que la via procesal la establea' el
troducción, n6m. 11; A. BOISTn., Cour! de C6dill'o de Procedtmtentoe Civiles. en la frac-
Droit Commercial (Paria, 1890); BoUPl'IO, nú- ción X:XIII del articulo HO (deroll'ada desde el
mero 99; Ph. BONNECAJUl.ItkE y M. LABOaDE·J..A· 14 de marzo de 197'). En ~ta argumentación no
OOlIIU, Expo!¿ mélhodique de droit commercial se toma en cuenta el carácter fragmentario del
(Parl., 1946), núm, 55; EaCAtulA, nflta. 167. V derecho mercantil, que se reconoce al señatársete
Manuel, núm. 129; RIPEIlT, nám. !l16 V 11rs.; fuentes supletcrlas: conforme a la argumentación,
necee, núm. 49; TllALLU., núm. 61; Vn'ANTE, no habrfa arrendamiento. mercantiles, pese a lo
número 88. Niegan la posibilidad de que tos declarado por el arto 75, frac. 1, Va que las ncr-
acto. llfcito. puedan adauirir carácter comer- mas sobre tales contrato. babrán de buscane, ne-
daJ: Antonio BaUNETn, éOTJO di Diritto com- cesariamente, en el C6digo Civil, pues ningún
merciale (Roma. 19M), núm. 29, V GAlUUGUEI, precepto sobre ello. se encuentra en el de Co-
Tf'tJttJdo. núm. 105. mercio, HAllUllA GIlAf, Responsabilidad civil en
Niecan cade:ter mercantil a la coerrovereta ;ns/itllcione! mercantjfes, en Revista de investiga-
para reclamar Indemuil1Kf6n por aetoll IUcito. dones jurídicas, Méifco, 1986, Escuela Libre de
divenu eentencí.. del Tribunal Superior de jus- Derecho, núm. lO, pág,. 75 y sgts., hace un aná-
ticia del Distrito 1 Territorio, Fe:doeraler. 5egun- lisis muy completo de lo• •upuenoa de responsa-
da Sala, JlnaleJ de JurisPrUdencia, tomo XXXVII. bilidad en nuestras lI"'Yes rotnerciales en donde
pill'. 842; Quinta Sala, op. dt., tomo XXXIX, cita, también, varias resotucícnee judiciales que la
página 626. v otra sentencia. inMita. de La reconocen.
ACTOS DE COMERCIO 61
a) Atendiendo al su-
jeto
lo- ActOS principales b) Atendiendo al fin
B.-Actos de ~w-
o motivo
tilidad condício-
e comercio a.
c e ) Atendiendo al oh-
nada { 2.-Actos accesorios jeto
o conexos ~
'1
La clasificación de los actos mercantiles que propongo se inspira en la de
ARCANGELI" la cual ha sido adoptada en lo substancial, según Indica el pro-
pio ARCANGELI, por VALERI, cANDIAN, NAVARRINI y ASCARELLI. A estos nom-
bres hay que añadir, en Méjico, el de Felipe de J. TENA, que, desde la segunda
edición de su Derecho Mercantil Mejicano, abandona el método seguido en la
primera para el estudio del acto de comercio, y adopta claramente la clasifica'-
ci6n de ARCANGELI. PuENTE y CALVO 4-4 se inspiran también en ARCANGELI.
pero no de modo directo, sino a través de TENA. .
ARCANGELI distingue actos :b.bsolutamente mercantiles y actos relativamente
mercantiles. Los actos relativamente comerciales los subdivide el propio ARCAN-
GEU en cuatro grupos:
a) Actos que responden a .r la noción económica de comercio;
b) actos realizados por empresas;
e) actos que se relacionan PJn otros actos de comercio, y
d) actos que se refieren a un ejercicio profesional.
Considero acertada la distinción tundamental entre actos absolutamente rner-
~_.Y actos relativamente rnercantiles, pero prefiero lla.ma.ra
estos últimos
actos de rñefcintIhdad cond10onada, yaque el adverbio relativamente, parece
apuntar a otro acto con el cual aquel de que se trata está en una relación de la
que deriva el carácter comercial,' cuando lo cierto es que éste depende, en muchos
casos. de las circunstancias en que Se realiza el propio acto. En los dos últimos
grupos en que subdivide ARCANGELI los actos relativamente mercantiles, hay un
elemento común, o sea el de Óbtener 5U comercialidad por la relación en que
se encuentran, directa o indirectamente, con otros actos mercantiles. Lo dicho
justifica que distinga yo, dentro de los actos de mercantilidad condicionada, dos
grandes grupos: los actos principales de comercio, que adquieren por sí mismos
su carácter de tales. y los actos accesorios o conexos, que s610 derivan su rner-
cantilidad de la relación en que se encuentran con otro acto mercantil.
En cuanto a las dos primerás clases que el autor italiano forma con los actos
que llama relativamente mercantiles, no las acepto, por basarse en criterios que
no atienden a los caracteres jurídicos de los actos en cuestión, como trata de
hacerlo la cIasificación que propongo.
TENA, que sigue literalmente la clasificación de ARCANGELI, declara que no
caben en ella dos actos de los enumerados por la legislación mejicana: la venta
que el propietario o el cultivador hace de los productos de su cultivo, y las
remesas de dinero de una plaza a otra 6. Pero, ¿cómo aceptar una clasificación
que se muestra ineficaz para ordenar todos los objetos que se quieren clasificar?
Los actos de comercio que no están previstos en el Código de Comercio,
.. Al1;to AllOVl.F.U, Los ados de comercio, nú- 4-a Derecho Mercantil (Mi-jito. 1966), nú-
meros I y 8. " m e r o .!I!.
5 TENA, op. dI., núm. 75.
62 DERECHO MERCANTIL
Actos de { Accesorios
comercio
accesorios Realizados por empleados
En verdad, la categoría de los actas accesorios no resulta subdividida, pues
los actos realizados por empleados (más propiamente, dependientes) son jurídi-
camente imputables a su principal y deben quedar comprendidos en alguna de
las cuatro primeras clases.
Resulta así que la clasificación de BARREM GRAF sólo difiere de l. mía
en manto suprime la categoría de los actos esencialmente mercantiles. que par.
cialmente reaparece en la subclase que llama actos de comercio por su forma.
La suprimida categuría de los actos ahsolutamente mercantiles también re-
aparece en cierto modo, en cuanto el propio autor (núm. 69) declara "que los
actos de comercio pueden ser ahsolutos y relativos; son absolutos aquellos que,
de acuerdo con la ley, sólo pueden ser mercantiles, nunca civiles. .. Tanto los
actas ahsolutos como los relativos pueden agruparse en las distintas categorías
propuestas por nosotros ... " Confieso que no puedo concebir un acto accesorio
absolutamente mercantil, y tampoco entiendo cómo si un acto es mercantil por
el sujeto que lo realiza, se pueda decir que su mercantilidad sea abro/u/d, y no
condicionada por dicho sujeto, etc.
Ulteriormente se analizarán algunas de las consecuencias de las modifkacio-
nes en la clasificación que propone BARRERA GRAF.
4CTOS DE COMERCIO 63
70-b is. Por lo contrario, tieqe gran difusión, tanto en el campo nacional
como en el internacional, lu 'a,.jet~ de crédito respecto de la cual no existe regu-
lución legal, aunque sí un reglamento aplicable a las tarjetas de crédito banca-
rias, que el llaneo de Méjico dio a conocer en D. O. del 15 de septiembre de 1986
(fe de erratas del 19 del mismo mes). '
66 DERECHO MERCANTIL
La LRSB (art. 30, frac. VII) contempla, entre las operaciones que pueden
realizar las instituciones de crédito, la de "expedir tarjetas de crédito con base
en contratos de apertura de crédito en cuenta corrientc.o-ee
S-bb Sobre la, tarjetas d~ crédito. l' IU día- d. Dn6eho Comparado (Univcnidad NaCional
linción de la. canas-orden de crédito, MANTILLA. Autónoma de MEjlco, 1971), ptg. 215 , biblio·
MOLI!'fA~ 1.Q.J tarjelM de crédilo en Comunica- grana que ah.! te cita.
nOl'l6J mejkantJS tU VIII Conrre$o Intemacional
ACTOS DE COMERCIO 67
Aunque sólo una institución lIe crédito puede tener el carácter de fiduciaria,
no debe pensarse que la comercialidad de este negocio es subjetiva, pues es
justamente la existencia de un acto de comercio la que determina la aplicación
de la ley mercantil, que fija los requisitos que ha de tener una de las personas
que en él intervienen; y no, como seria el caso tratándose de un acto sub-
jetivo, que un negocio, que puede adquirir la calidad de civil o de mercantil,
adquiera esta última al ser realizado por una institución de crédito.
No deben dejarse de señalar dos problemas oon relación a este tema: ¿Es
constitucionalmente válido arrebatar 'a los Estados la posibilidad de legislar sobre
los seguros no celebrados por empresas? .... ¿El carácter mercantil del seguro se
extiende a todas 1... partes que e",¡ él intervienen? El .intento de solución del
primer problema lo aplazo para mando aborde el tema del alcance de la fa-
Es errónea la afirmación de que todos los actos que tienen como objeto
titulosvalor son rnercantiles e, pues el texto del artículo 1- de la LTOC se limita
a declarar que son actos de comercio los que se consignan en el propio título, y
r.-d La ecPt'f'Ji6n tituloJY21or tiende a IUJJtuulr. MANTILLA MOLJS4, TftuU>.t tk trUito t.dmbillrio
en la doctrlra. a título de crédito. por ter (Edil'" ,.1 ¡'un ......\léjicu, 1'/7i) (~" l',lil;lI11,
aquélla má. exatta: la misma tendencl.a Ir' oh· J 1I"i ,.Nfi.',_ r·lill'r; .• j I';"T'·"!. \I':'Jllll,
.en-a en nuestra legialacl6n, pues ya en la LM' 1'11<:).
de Quiebras ,. SU'PeO,lón de Pago. te elDJ)lea e TENA. vp, cit., 1, n6m. 34: ..... son actO'
la más reciente terminologfa; etn embargo, aun- u eperacíones que tienen por octeto tirulo' de
que también :le UN. en el. anreproeeoo imprf:IU crfdito. laa cuales, por 10 mismo, en "lIo. lit:
del libro tercero del C6di~o de Comercio. la conslgnan ntt~riamente. .... h,. ~ct(\s ju-
Comisión redactora -·en contra del voto del rídtcos que tienen a esos tttutoe por objeto, ba·
autor de este libro, Que entonces fom¡;aba parte lIan su propio asiento en la enumend6n de lot
de ella-- MJlroÓ volver a utilizar la expre!.iém actos mercantiles ..... PUENtt r CI\LVO, núm. 22.
tlculos d(' crldito. SlgulMldo mi crüer¡a, emple-a- Discrepo también de BAD.UA GRAF (númno
ré en el texto sólo de modo eecepeiooal la 78), pues dice "Son también ano. de comercio
expresión titulo de crédito y h.thlaré en lo R('" las operaciones y negocios CUJO objeto está ron_j·
ncn.1 de titulO'\'alor, y en plural de liwllJt'-'<llM. tutdo por tuulos-vatores" y enumera una eeríe
.Igulendo una 5uRle!twn del lingiii'ta Rab.el de 'contratos que IOn artes de comercio por
DowiNCUEZ. . explícita d ecl.aracló n de la ley. l' no ,imple·
5-t An.ili,¡. de esta definición. en Roberto L. mente por recaer sobre titulo,valor.
!l
ACTOS DE COMERCIO 69
cuando el acto referente al título no consta en este mismo será ora civil, ora mer-
cantil, según lo indica expresamente el propio artíeu.lo lo LTOC, al decir que
"los actos o contratos que ... se hayan practicado con éstos (los títulos de eré-
dito) se rigen por las normas enumeradas en e! artículo 20 , cuando no se
puedan ejercitar o cumplir separadamente de! título, y por la ley que corresponda
A LA NATURALEZA CIVIL o MERCANTIL DE TALES ACTOS o CONTRATOS en los
demás casos" 7. I~
No es cierto que los actos que tienen por objeto titulosvalor se consignen
en ellos necesariamente 8: los títulos al portador, y los endosados en blanco se
transmiten por simple tradición, sin necesidad de anotar nada en el propio
documento; todos los títulos pueden transmitirse por cesión ordinaria (art. 27
LTOC) y es potestativo que la transmisión se anote judicialmente en e! título
mismo (art, 28 LTOC). Aun cuando recaigan sobre titulosvalor, los actos que no
se consignan en ellos pueden tener carácter civil; lo tendrá, por ejemplo, la da-
ción, en pago de una deuda civil, de pagarés endosados en blanco; y por ma-
yoría de razón, el testamento o la donación matrimonial cuyo objeto sean tales
títulos n, :~
Esta posibilidad convierte en dudoso e! carácter absoluto'de la mercantilidad
de los actos considerados; en realidad depende de una circunstancia formal: e!
que se consignen en el propio título o por separado. Claro es que cumplida esta
formalidad, el acto es de comercio, quienquiera que lo celebre, cualquiera que
sea el propósito y cualquiera que haya sido el negocio precedente.
7 En elle ~ntido: Roberto A. EsnvA :~UIZ. de C.omen::io de 1929: "Son acto. de com~lo y
le TleI'irán por las dispoaidonea de ese C.6dlgo,
todce los que rt:ealpn 1Ob~ (DQI mnnntil"
por naturaleza:' b obvtc que .. 10 meDoe debi6
aliadir: a no rr que sean eRD.clalmente dvíles;
IIJvedad que al formula el proyecto de 1!Hro~
aunque con ~P'l'elón poco (da. '
./
70 DERECHO MERCANTIL
76-a. BARRERA GRAF dice (núm. 93, al final): "Como actos conexos mer-
cantiles de carácter subjetivo debemos considerar aquellos ligados a la constitución
y funcionamiento de las sociedades mercantiles." Y en nota, pretendiendo refutar
nuestra opinión, añade: "el acto es mercantil en cuanto la sociedad a que se
refiere sea comercial. por lo cual es acto accesorio y conexo".
Pero ¿por qué es comercia! la sociedad? No ciertamente por su conexión
con determinados actos, en sí mismos mercantiles, pues para calificar la mercan-
tilidad de una sociedad nuestro derecho prescinde del fin u objeto social (por
lo cual la conexián con actos mercantiles es innecesaria) y toma en cuenta sólo
los tipos negocia/es de sociedad, gue son considerados siempre como mercantiles,
aun cuando no tengan relación de conexión o accesoriedad COn operaciones de
comercio. Menos aún puede verse en las sociedades mercantiles una conexión
de carácter subjetivo (como se dice en las primeras lineas transcritas), pues la
, /\<A..
consideración de los sujetos que constituyen la sociedad es completamente indi-
~~=nte para su calificación como mercantil. ,
ridos son simple medio para ejercitar el propia arte, que vendrá a ser la fina-
lidad principal (art, 76 in fine).
Es obvio que para que pueda decirse que la adquisición se hace con el Pt'>
pósito de revender o arrendar, tal propósito debe existir en el momento mismo
de la adquisición; el que vende, obteniendo una ganancia, lo que había adquj-
rido para el propio uso, evidentemente no hizo la adquisición con fin de lucro:
no celebró un acto de comercio.
Por el contrario, es indiferente que la adquisición sea posterior a la enajenación
o cesión del uso; aquélla se hizo con el propósito de especular, que es. lo decisivo.
La intención de revender debe resultar objetivamente del acto mismo, de
las circunstancias en que se realiza, de la cantidad de objetos sobre los que recae,
etcétera. Los hechos deben mostrar al vendedor, O a cualquer otra persona, que
la adquisición no se hace par<1f el propio consumo, sino para un ulterior acto
lucrativo:
En el de'\-echo mejicano no basta, como en el italiano, que le sirvió de
modelo, que exista el propósito de ulterior reventa: precisa que se pretenda ob-
tener una ganancia; claro que no influirá en la calificación del acto el que no
se llegue a obtener la ganancia buscada, y que;, por el contrario, se experimente
una pérdi~
80. "La reventa, arrendamiento .0 subarrendamiento, merced al cual
se pretende obtener el lucro buscado, es también acto de comercio. según
resulta de la letra de la fracción 1 del artículo 75. Su rnercantilidad
depende de su fin: consumar la especulación emprendida,
8!. De acuerdo con la letra de la fracción II del artículo 75, apli-
cable a los inmuebles, sólo son mercantiles las compras y las ventas
que recaigan sobre ellos. El suprimir los alquileres y las voces genéricas
adquisiciones y effajeffaciones no parece fortuito, y habrá de negarse
carácter mercantil a la adquisición mediante permuta de un terreno,
aunque se haga con el evidente propósito de venderlo obteniendo una
ganancia; tampoco es mercantil el arrendamiento de un edificio para
subarrendar sus apartamientos con el consiguiente lucro. Soluciones con-
forme a la letra de la ley. pero sin suficiente base económica y lógica.
Pero es ir más allá de la letra de la ley, negar la posibilidad de que
el arrendamiento de un inmueble adquiera carácter comercial en virtud
de preceptos legales diversos de la fracción que estamos comentando.
Por ejemplo, el arrendamienrtode un local por un comerciante para
establecer una sucursal de su negociación. evidentemente es un acto de
comercio por conexión (ver núm. 87).
De acuerdo con diversas ejecutorias de la Suprema Corte de justicia de la
Nación 9-4, cuando el arrendador se repute comerciante, en los términos de las
leyes respectivas, los ingresos que obtenga, provenientes del contrato de arren-
9-a Inverelones La Herradura. S. A., 4, de agosto de 1959. Semanario, Sexta :tpoca, Vol. XXVI,
Primera Parte, Ej«utorh! del Pleno, pág!. 9 a SI.
ACTOS DE COMERCIO
, 73
81-d. BARRERA GRAF (núm. ,,94, pág. 133) niega, en general, la posibilidad
de que sea mercantil el arrendamiento inmobiliario. Para ello se basa en la
fracción II del artículo 75 del Código de Comercio, no obstante que considera
que dl.cha fracción puede interpretarse analógicamente. Pero el motivo decisivo
para discrepar de su tesis, es que la mercantilidad del acto puede resultar. bien
de que esté expresa o implícitamente previsto en alguna de las fracciones del
artículo 75, o en otro precepto legal equivalente, bien de su conexión con
otros actos de comercio, y la consecuente aplicación de las fracciones XX y XXI
do! mencionado artículo 75. Ninguna razón da BARRERA GRAF para excluir la
mercantilidad en los casos en que existe tal conexión, y él mismo señala, en
nota, cómo su opinión discrepa de la mayoría de la doctrina; especialmente in'-
teresante a este respecto es la doctrina il:aliana elaborada sobre el Código de
Comercio. que inspiró al nuestro, y en el que existe una disposici6n del todo
equivalente a la fracción II del artículo 75, lo cual no ha impedido que la
generalidad de dicha doctrina considere mercantil el arrendamiento del local
para establecer una negociación.ncomo habrá de considerarse mercantil el arren-
damiento celebrado por un comerciante, salvo los casos de excepción previstos
en las mismas fracciones XX y ~ a que se ha hecho referencia (v, núms. 88
V 89).
operaciones activas, con las cuales confía a terceros los capitales que a
él se le han confiado; el banco lucra con la diferencia de tasa de interés
entre las operaciones activas, en que presta el dinero, y las operaciones
pasivas, mediante las cuales lo obtiene, a veces gratuitamente (depósi-
tos a la vista). Es digno de notarse cómo una operación gratuita sirve
de base a una especulación comercial.
En verdad, las operaciones bancarias son en esencia similares a las
previstas en la fracción 1: se adquiere el uso de una cosa (dinero), con
e! propósito de ceder su uso, obteniendo un lucro (la diferencia de! tipo
de réditos en las dos operaciones).
ción depende de las concretas circunstancias del caso, y han de aplicarse conjun-
tamente los criterios de normalidad, predominio, necesidad y autonomía de las
actividades consideradas, con respecto a las estrictamente agrícolas 10-4.
tales características. Queda así explicado por qué no sigo el método de estudiar
una por una las diversas empresas a que el artículo 75 se refiere, tal como lo hace,
por ejemplo, TENA.
85. Actos mercantiles por alguna de las personas que en ellos inter-
vienen.-Eludo llamar a estos actos subjetivos, porque la categoría que
tradiciona:lmente se denomina así es en absoluto diversa de la que pro-
pongo. En efecto, para mí, actos de comeraio por razón de alguna de
las personas que en ellos intervienen no son los realizados por un co-
merciante, sino aquellos que sólo se califican de mercantiles cuando
interviene una persona con d~inadas características; tales son: "la
enajenación que el propietario el cultivador hagan de los productos
de su finca o de su cultivo" (frac. XXIII del articulo 75); los depó-
sitos en los almacenes generales -(frac. XVIII del arto 75, Y arts. l'
in fine y 280 de la LTOC); los depósitos bancarios de títulos {arto l' in
fine} 276 de la LTOC) y los contratos de fianzas realizados por una
institución afianzadora (art. 2' de la Ley General de Instituciones de
Fianzas) .
12 La venta de una partida de cabras, hecha venta de una C08eCha que etti por producirse
por el propiaario de una hacienda. fue cenar- (op, cit., tomo XIV, pig. .521).
derada mercantil (Diario de JurnPrude1lcilJ. 13 Op. cit., núm. 12.
tomo 1, núm. 79, pq. ~), y tambIén lo fue la
ACTOS DE COMERCIO 77
16 Jacinto PALLARES, op. dt .• núms. 4.56 v 457: primera edición de esta obra, ~¡ dala allf'1t1il di-
TENA, op. cít., 1, núm.. 69: A. CAso, nÚilD.. 17; ferencia entre ambas fracciones: pár. 27 de la
PV.l:NTE y CALVO, nüm, 26. RODllfcuEZ RODRI~uE:t. primera edícíén.
en d CU1'so,publicado muy poco dl!l¡)uél ~ la 16-4 OP. cit., pill'. HO.
80 DERECHO MERCANTIL
17 En el mismo eenrldo, PALt.AUlI. 0/1. ca., 18 ARCANCELI, op. cit., núm.. .!I8.
núms. 4~2 v 44!. En sentido contrario. Ro- 18--4 Plantea el problema, pero 1610 con el
DIlIGuu: RoDRfGU!:Z, Curso,pá.~. 29. dice: "Si los pmp6sito de dilucidar' si el Gobierno F~eral po-
acres mixtos hubieren de regirse, lIeg1'¡n casos , llee facultades admlrrisrrativaa sobre el comercio,
círcuneeanctas por el derecho civil ., por el de- y no desde el punto de vista de la delimitaci6:J
recho mercanril, el caos mi! absoluto imperaría entre derecho mercanrtt y derecho civil. al cual
en esta materia. Es Indíspensable que el acto de a610 alude en la nota 47 de m trabajo. Cus-
comercio mixto se regule siempre por el Códteo tavo R. VELASOO, Las iecuítedes del (;o"'ierno
de Comercio." Pero este argumento probarla. Federal en materia de comercio, publicado en la
cuando más, la convenlencla de una aolud6n en Memoria de la tercertJ conferendtJ de la Feti ..-
el sentido que ee propugna, no que tal IOInd6n racíán Lnteramerícona de Abogados (Mtjiro, 19H),
haya sido efectivamente dada por el legblador. pág. 192.
ACTOS DE COMERCIO 81
19 Para una crltka de estas doctrinas, véase 21 Roberto 1.. MANTJu.A MOLINA, Sobre lo
Ageo All.CANCELI, El concepto fUTídit:o del co- definición del acto de comercio, en Revista de
merdo (Editorial Jus; Méjico, 1942). la Escuela Nacional de Jurlsprutkncia, tomo V,
20 Op. cit., núm. 50. pág. 71.
ACTOS DE COMERCIO 83
-----------------_
22 Su Usil doctoral. inMita. En IU Cuno, 28 MANTILU MOLlNA.
.. - ....
articulo citado en la
páal. 12 ., rip., inlllte en etta definición. DOLa 21.