Analisis Reflexivo - Cartas Deuteropaulinas

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UNIVERSIDAD EVANGÉLICA DE EL SALVADOR

Licenciatura en Teología - Cartas Deuteropaulinas


Licenciada Jeannette de Meléndez
David Bonilla
Kevin Flores

Análisis reflexivo de la dimensión teológica en Santiago.

Para comenzar podemos enfatizar el gran contenido teológico que encontramos en Santiago,
aun siendo un texto muy corto, le sobran espacios para hacer uso de frases, declaraciones y
títulos que aluden a Dios y a Jesús, dentro de pensamientos teológicos contemporáneos al
escrito. Dentro de Santiago encontramos menciones a Dios como: Padre, Kyrios, Legislador,
y Dios como la más usada; estos títulos están ubicados dentro de frases teológicamente
significativas, como en el caso de Stg 1:17 “Padre de las luces”, que alude a Dios creador,
Padre de todo lo creado.

El texto está lleno de afirmaciones como la antes mencionada que presentan a Dios, su ser y
su obra, y esto último punto, la obra de Dios, es de mucha importancia para Santiago, porque
de este pensamiento provienen una de las ideas centrales del texto, la fe que obra, esta fe
en Dios que el hombre tiene, debe de llevarlo a obrar igual que Dios. En otras palabras, para
Santiago, presentar a Dios y su obra son el preámbulo que luego le permite hablar de cómo
debería un cristiano vivir, sus ideales de sociedad y su trato a los demás.

Otro de los puntos importantes dentro de la teología de Santiago es la forma en la que


presenta a Jesucristo, aunque no es tan mencionado como Dios o sus títulos, en el caso de
Kyrios es usado para referirse a Dios y a Jesucristo, lo que denota la teología cristológica del
autor, pero, sin dejar de lado la teología judeocristiana. En Santiago 2:1 hace uso de glorioso
(gloria), Kyrios, Jesucristo, en una misma frase, esta frase podría ser una de las confesiones
cristológicas más importantes del Nuevo Testamento, por el significado de cada palabra y la
intención de ponerlas cerca. Gloria y Kyrios, son términos teológicos que forman parte de la
teología joanica, que eleva a Cristo Jesús por medio de su sacrificio en la cruz y la
resurrección, el término Kyrios relacionado con Jesucristo pone especial énfasis en la parusía,
al juntar los tres términos, se está creando una declaración absoluta de que Jesús es Dios,
de su especial obra salvadora, y de su pronta venida.

Ahora bien, retomando el punto de la obra de Dios, para Santiago, Dios es el único que puede
salvar al hombre, no hay obra salvadora, corona de vida, perdón de pecados, o cualquier otro
elemento salvífico que venga del hombre, lo que pone paz en el conflicto de la mala
comprensión entre Santiago y Romanos, pero el punto que resuelve este conflicto es la
aplicación que Santiago hace sobre la fe viva y la fe muerta. Lo que el autor está tratando de
decir es que la fe en Dios tiene una evidencia de que es verdadera, genuina, auténtica, la
compañía de las obras de amor son ese testimonio de que la fe de un creyente es producto
de la obra salvadora de Dios, y que nos dirige a obrar como Dios lo hace. Santiago no está
en contra de Pablo, ni habla de una fe diferente, solo está afirmando que esa fe va
acompañada de obras de amor que reflejan el señorío de Cristo.

En cuanto a la ética, Santiago también presenta una serie de argumentos morales de cómo
el creyente debería de comportarse, con lo cual esté honra al señor, se acerca a él, y alcanza
la bendición divina en esta tierra y en la eternidad. De igual forma se desarrolla la temática
del sufrimiento, que, para Santiago, algo tiene que ver con el pecado, pero Dios se vale de
este (sufrimiento) para santificar a los santos. Y también resalta el tema de la dignidad para
aquellos desafortunados - bendecidos con la elección de Dios de las bienaventuranzas
escatológicas. Este último punto también pone es orientado hacia el actuar de los ricos para
con ellos, para crear una conciencia en los afortunados, el trato que estos dan a los pobres y
una reflexión sobre la limitada existencia del bien de este mundo.

De igual forma para Santiago la Ley tiene especial interés, pero no necesariamente la Torah
como escrito importante del judaísmo, sino más bien el contenido de está, la cual lo resume,
así como lo hizo Jesús, en “el mandamiento del amor”, para Santiago el que quiere alcanzar
la perfección deberá cumplir la Ley, la cual es perfecta, pero esta Ley se cumple en el servicio
al más necesitado, en el pobre o desvalido, es esta misma Ley la que si la cumplimos a
cabalidad, nos salvara. La Ley del servicio y el amor al prójimo.

En esto se complementa la fe y las obras, pues una verdadera fe es la que muestra obras en
favor del pobre, en esto se compara a la fe paulina que nos dice que “se hace eficaz por
medio del amor” (Gal 5,6), no existe nadie más en el NT que procure alcanzar la ética de
Jesús como lo hace Santiago convirtiéndolo en un heredero del amor al prójimo y de la justicia
social.

Con todo esto para Santiago, el tiempo se ha acercado a su final, el juez está a la puerta y
la sola fe no podría detener el juicio que se cierne sobre nosotros, sin antes haber sido
manifestada en actos de amor y misericordia, pues para Santiago, quien insulta a su hermano
no ha cumplido la Ley, y la Ley del amor, solo así el juez obrara misericordia sobre la vida del
hombre.

Para finalizar, podemos resaltar cada uno de los puntos que hemos mencionado sobre la
carta de Santiago, en la cual como dijimos se ve reflejada una teología distinta a los demás
escritos del NT, las menciones que hace de Dios y de Jesucristo refiriéndose a los dos como
Kyrios, su ética, que nos enseña a comportarnos de manera que nuestra vida sea un reflejo
del señorío de Dios en ellas, y la mención de la Ley, la cual nos demuestra su compromiso
con la justicia social, en la cual la fe del creyente en la obra salvadora de Dios lo llevaría a
una obediencia que inspira a esta misma fe, a la acción en favor del necesitado que muestran
las obras de amor.

Es Santiago un ejemplo para las congregaciones actuales que buscan un verdadero


acercamiento a la forma de actuar que era evidente en la persona de Jesús, nuestro deseo
debe ser alcanzarlo, y que mejor manera que a través de las ricas enseñanzas dentro de este
escrito. A medida podemos estudiar textos como este nuestro deber es reorientar las metas
y visiones de la iglesia en la cual servimos hacia la continuidad del ministerio de Jesús, no
podemos ser mas indiferentes a la luz de las escrituras, hay que enfocarnos en seguir el
ejemplo de Jesús plasmado en cada uno de los textos, aun Santiago, que no hace muchas
menciones, si podemos encontrar una reflexión a la fe viva de la cual Jesús es el mayor
exponente.

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