Neuro Oratoria - Ensayo Anestesio
Neuro Oratoria - Ensayo Anestesio
Neuro Oratoria - Ensayo Anestesio
Anestesiología dental
Por ello mismo, comienza explicando cada uno de sus puntos. Comenzando por la tonalidad
de la voz, considero que esta juega uno de los papeles más importantes en nuestra
presentación, ya que, de esta manera estamos transmitiendo nuestro mensaje y lo demás serán
herramientas que nos ayudarán a complementar el mismo.
No hace falta mencionar que un buen tono en nuestra voz proyecta seguridad acerca del tema
del que estamos hablando, escuchar hablar a alguien con un tono de voz quebradizo nos
puede hace creer que no está lo suficientemente preparado para hablar acerca del tema y
nuestra atención se centra en eso mismo en vez de lo que pueda estar diciendo.
Por otra parte, podemos jugar con nuestro tono de voz así lo amerite cada tema, depende la
emoción que querramos transmitir, de esta manera volviendo nuestra presentación más
dinámica. El juego con las tonalidades tiene la finalidad de no aburrir a nuestro público y
lograr tener su atención en todo momento o al menos durante la mayor parte del tiempo que
nos sea posible.
Una frase citada en el libro de Jürgen (Lo más importante en la comunicación es saber
escuchar lo que no se dice -Peter Drucker. Jürgen Klaric 2018) me gustó bastante, debido a
que siempre he sio fanática de admirar el lenguaje corporal de las personas.
Jürgen en su libro nos menciona que desde el primer instante en el que nosotros nos paramos
en un escencario nuestro cuerpo comienza a transmitir mensajes, ya sea de manera consciente
o inconsciente.
Es importante iniciar por mejorar nuestro estado de ánimo, ya que, será lo primero que se
refleje en nuestra cara. Si bien no podemos cambiar completamente nuestro estado de ánimo
de la noche a la mañana, sí podemos hacer algunos ejercios que nos permitan eliminar
aquellos pensamientos negativos y no interfieran en el lapso que dure nuestra presentación.
Sin dejar de lado la postura que al igual que la voz, nos ayudará a proyectar confianza,
siempre y cuando nos plantemos con estabilidad y tengamos pasos firmes, de otra manera
podemos llegar a proyectar lo contrario.
Aquí podemos ayudarnos de nuestros brazos y manos para dar enfásis o bajarlo en algunas
expresiones; haciendo movimientos fuertes para dar enáfisis y débiles para bajar el mismo.
Entre más me adentraba en el capítulo del cuerpo, más me atrapaba el libro, puedo decir que
fue el capítulo que más me interesó. Klaric nos dice que nosotros como seres humanos
seguíamos reaccionando de acuerdo a nuestros instintos primitivos pero que ya era difícil que
nos encontraramos a amenzas de depredadores o alguno similar y que por ende ahora esta
amenza la encontrábamos en el miedo al no ser aceptados, quedar en ridículo, perder nuestra
dignidad, entre otros problemas de la sociedad moderna. Este punto me pareció realmente
importante porque considero que el vivir en una era digital, de redes sociales; ha hecho que
también estemos en una era donde la mayor parte de la población presenta síntomas de
ansiedad y esto por el miedo a las burlas, críticas y equivocaciones, muchas veces
provocadadas por los mismos nervios.
El consejo que nos dan es tratar de cambiar el concepto de ansiedad por emoción, de esta
froma haciendo que esta sensación nos ayude a desenvolvernos más acerca de lo que estemos
explicando.
Aquí doy inicio al primer capítulo en el que difiero en ideas con el autor, nuestro apoyo
visual, es decir, nuestra presentación de power point. Klaric nos sugiere hacer nuestras
dispositivas de una manera muy sencilla, con colores neutros, tipografía sencilla y con
imágenes y vídeos no muy llamativos; esto con la finalidad de seguir enfocando la atención
del público en las ideas que salgan de nuestra boca.
Sin embrago, aquí es donde creo que entrarían los tipos de aprendizaje, ya que si bien existen
personas que se van a quedar con toda la información que hayan escuchado durante la
presentación, va a haber algunas otras que se queden con la infromación que hayan visto en
el vídeo o imágenes expuestas y algunas otras que se queden con la información que hayan
leído de las diapositivas y si a mí no me llaman la atención tus diapositivas va a ser muy fácil
que pierda la concentración.
Por lo que yo voy de acuerdo con la idea en que cada quien le agregue su estilo a su apoyo
visual, sin priorizar el diseño sobre la información.
El tiempo; este puede llegar a transcurrir de manera distinta para cada uno de nosotros,
depende de la actividad que nos encontremos haciendo o del estado de ánimo que tengamos
en ese momento.
Siempre se ha discutido el tiempo adecuado para una presentación debido a cuánto tiempo el
cerebro puede lograr poner atención, en el libro de Jürgen se comenta que se recomienda
hacer las exposiciones de 3 a 18 minutos pero que esto puede llegar a variar con la persona.
Considero este punto bastante relevante, ya que en este capítulo nos dicen que el tiempo
puede llegar a transcurrir diferente para cada persona gracias a las disintas personalidades
que existen; no será lo mismo para una persona paciente que para una persona impulsiva.
Esto me pareció importante, debido a que como antes mencionaba en el punto del apoyo
visual, así como existen personas con distintas formas de aprendizaje también las hay con
distintos temperamentos y distintas conductas.
Desde mi experiencia como estudiante con trastorno límite de la personalidad y ansiedad,
después de los 30 minutos automáticamente dejo de prestar atención y mi mente empieza a
carburar en otras cosas y a desesperarse. De esta manera, voy de acuerdo con que una plática
eficiente sea de los 3 a los 30 minutos, en los que considero que se puede abarcar muy buena
información.
Posteriormente, nos habla de nuestro estilo, capítulo que también me dejó atrapada y con un
mensaje muy bonito.
No hace mucho me hice un tatuaje del cual a nadie le había compartido su significado y
cuando se lo mostré a mis amigos, lo primero que me hicieron fue decirme que era totalmente
para mí. Mientras iba leyendo este capítulo me di cuenta de que las cosas que mis amigos
relacionaban conmigo eran aquellas cosas con algún significado espiritual, ya que, siempre
suelo portar pulseras con ojos turcos, collares con cuarzos, etc. Estos accesorios, a su vez son
lo que desde hace unos meses me han ayudado a salir adelante dándome fortaleza, seguridad
y confianza porque como bien nos menciona Jürgen, lo importante no es que sean accesorios
o prendas extravagantes sino el simbolismo que nosotros le estemos otorgando a estos
mismos.
De esta manera comenzamos a crear nuestra marca personal, nuestro estilo y la gente empieza
a relacionar esas pequeñas cosas con nuestra persona lo cual considero que nos da una
sensación de alegría y a la vez de poder, de esta manera mejoramos nuestro discurso.
Por otra parte, se hace mención a los errores. Nos la pasamos la mayor parte del tiempo antes
de nuestra presentación agobiándonos por las cosas que podrían salir mal, pero si en algo
tiene razón Klaric es en que todos cometemos errores y saliendo de la presentación se les
olvidará. Sin embargo, podemos seguir sus consejos para que nuestros errores sean un poco
menos notorios y que de esta manera no les transmitamos inseguridad a nuestro público
porque podríamos estar representando falta de conocimiento aunque esto no sea así.
Ahora bien, está de más decir que si a lo mejor no nos sirve de mucho ensayar nuestra
presentación antes de presentarnos oficialmente, es de suma importancia hacer una buena
investigación para preparnos adecuadamente y de esta manera no perder lo mencionado en
el último capítulo; la credibilidad, esta será fundamental, ya que afectando esta no solo
estamos perjudicándonos individualmente, sino también podemos llegar a desprestigiar a
nuestro colegio, familia y/o iglesia; esto debido a que al hablar en público acerca de cierto
tema nos convierte en portavoces experimentados respaldados por instituciones.
Así como la confianza, la credibilidad se construye poco a poco pero se puede perder en un
abrir y cerrar de ojos.
Concluimos que realmente la mente es fascinante, me impresiona que haya ciertas tácticas,
colores y tiempos en específico que si empleamos es muy probable que nuestra presentación
mejore considerablemente.
Creo que llegó cierto punto de la pandemia en que muchos de los estudiantes nos empezamos
a sentir más cómodos en las clases en línea que en clases presenciales y fue por un punto en
específico tocado del libro; los errores, el poder ocultarnos tras una cámara comenzó a hacer
las presentaciones y participaciones más livianas ya que no teníamos que lidiar con el cruce
de miradas ni preocuparnos por nuestro lenguaje corporal, lo cual nos ayudaba a controlar un
poco más el pánico escénico.
Hay una parte en la que Jürgen nos explica cómo la mente se pone en blanco cuando nos
encontramos bajo estrés, lo que me hizo pensar en cuándo los maestros nos preguntan algo
en clase y hay hasta quienes prefieren salirse de la sesión debido a los nervios que eso nos
puede llegar a causar, más no significa que no sepamos la respuesta a sus preguntas. Así
mismo, me parece importante que nosotros como estudiantes entendamos que no pasará nada
malo si contestamos mal una pregunta, después de todo, estamos aprendiendo y es algo que
los maestros también deberían entender. Por lo que, este libro me deja un muy buen
aprendizaje para irnos preparando para un regreso a clases presenciales después de tanto
tiempo sin interacción cara a cara con otras personas.
REFERENCIAS