489 3 Iniciativa Convencional Constituyente Del CC Adolfo Millabur Sobre Autonomia Territorial Indigena 0925-01-02
489 3 Iniciativa Convencional Constituyente Del CC Adolfo Millabur Sobre Autonomia Territorial Indigena 0925-01-02
489 3 Iniciativa Convencional Constituyente Del CC Adolfo Millabur Sobre Autonomia Territorial Indigena 0925-01-02
I. VISTOS:
3. Que, el artículo 83 del Reglamento General de la Convención Constitucional exige que las
iniciativas convencionales constituyentes sean presentadas con fundamento, por
escrito, con articulado y dentro de plazo.
1
Ex relator especial sobre derechos de los pueblos indígenas de la Organización de Naciones Unidades (ONU),
cargo asumido en el año 2008.
1
Unidas2 -y otros instrumentos jurídicos internacionales relevantes3- no existe mayor
discrepancia en orden a que se trata de un principio de derecho internacional
consuetudinario y de iuscogens, es decir, una norma imperativa, por ello que siempre deba
entenderse referida “a un conjunto de normas de derechos humanos que se predican
genéricamente de los pueblos, incluidos los pueblos indígenas, y que se basan en la idea de
que todos los sectores de la humanidad tienen el mismo derecho a controlar su propio
destino”4.
A este respecto, la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los
Pueblos Indígenas (2007) señala que “los pueblos indígenas tienen derecho a la libre
determinación. En virtud de ese derecho determinan libremente su condición política y
persiguen libremente su desarrollo económico, social y cultural”5, para luego agregar que
“tienen derecho a la autonomía o al autogobierno en asuntos relacionados con sus asuntos
internos y locales, así como a disponer de medios para financiar sus funciones autónomas” 6,
complementando con el “derecho a determinar y desarrollar sus prioridades y estrategias
para ejercer su derecho al desarrollo”7. Recientemente la también ex relatora especial sobre
2
Carta ONU (art. 1.2): “Los propósitos de las Naciones Unidas son: fomentar entre las naciones relaciones de
amistad basadas en el respeto al principio de la igualdad de derechos y al de la libre determinación de los
pueblos, y tomar otras medidas adecuadas para fortalecer la paz universal”.
3
El Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales señala en su art. 1.1: “Todos los
pueblos tienen el derecho de libre determinación. En virtud de este derecho establecen libremente su condición
política y proveen asimismo a su desarrollo económico, social y cultural”. El Pacto Internacional de Derechos
Civiles y Políticos, señala en su art. 1.1.: “Todos los pueblos tienen el derecho de libre determinación. En virtud
de este derecho establecen libremente su condición política y proveen asimismo a su desarrollo económico,
social y cultural”. En concordancia, la Declaración ONU sobre derechos de los pueblos indígenas (2007) señala
en su art. 1: “Los indígenas tienen derecho, como pueblos o como individuos, al disfrute pleno de todos los
derechos humanos y las libertades fundamentales reconocidos en la Carta de las Naciones Unidas, la
Declaración Universal de Derechos Humanos y las normas internacionales de derechos humanos”.
4
ANAYA, James (2005): “Los pueblos indígenas en el derecho internacional”, traducción de Luis Rodriguez-
Piñero Royo en colaboración con Pablo Gutiérrez Vega y Bartolomé Clavero, Editorial Trotta, Andalucía, p.
135 y ss.
5
Art. 3.
6
Artr. 4. En concordancia, la Declaración Americana sobre Derechos de los Pueblos Indígenas, establece en su
Art XXI “Derecho a la autonomía o al autogobierno: “1. Los pueblos indígenas, en ejercicio de su derecho a la
libre determinación, tienen derecho a la autonomía o al autogobierno en las cuestiones relacionadas con sus
asuntos internos y locales, así como a disponer de medios para financiar sus funciones autónomas./ 2. Los
pueblos indígenas tienen derecho a mantener y desarrollar sus propias instituciones indígenas de decisión.
También tienen el derecho de participar en la adopción de decisiones en las cuestiones que afecten sus
derechos. Pueden hacerlo directamente o a través de sus representantes, de acuerdo a sus propias normas,
procedimientos y tradiciones. Asimismo, tienen el derecho a la igualdad de oportunidades para acceder y
participar plena y efectivamente como pueblos en todas las instituciones y foros nacionales, incluyendo los
cuerpos deliberantes”.
7
Art .23. Anteriormente, y de la misma manera, el Convenio Nº 169 de la Organización Internacional del
Trabajo (OIT, 1989) señaló en su art. 7.2 señala que: “Los pueblos interesados deberán tener el derecho de
decidir sus propias prioridades en lo que atañe al proceso de desarrollo, en la medida en que éste afecte a sus
2
los derechos de los pueblos indígenas de la ONU, Victoria Tauli-Corpuz, ha señalado que el
derecho de los pueblos indígenas a la libre determinación se materializa a través de la
autonomía o el autogobierno, y que su realización conlleva obligaciones para los Estados -
en particular la debida incorporación del derecho en la legislación nacional- agregando que
“*e+l derecho a la autonomía o el autogobierno, al igual que los derechos a las tierras y los
recursos, no es solo un concepto jurídico para los pueblos indígenas, sino también una
cuestión vinculada a los principales aspectos de su existencia como sociedades diferenciadas
(…) un derecho a controlar su pasado, su presente y su futuro: el control del pasado, en el
sentido de desarrollar un relato propio de su historia; el control del presente, en lo que se
refiere al poder de mantener los elementos que les caracterizan como sociedades distintas;
y el control del futuro, en referencia a la seguridad de saber que serán capaces de sobrevivir
como pueblos diversos conforme a sus propias condiciones”8.
Sin duda, se trata éste de un fenómeno político que ha venido ocurriendo a nivel
mundial9. En el contexto latinoamericano comenzó a verificarse cuando las legislaciones
internas las declararon10, de la mano, también, con un desarrollo jurisprudencial, incipiente
y progresivo por parte de la Comisión y la Corte Interamericana de Derechos Humanos11.
Aún así, es la incorporación en los textos constitucionales, de las autonomías indígenas, lo
que ha originado un paradigma sin precedentes y del cual Chile, inexplicablemente, se ha
restado. Podemos citar, como ejemplos:
vidas, creencias, instituciones y bienestar espiritual y a las tierras que ocupan o utilizan de alguna manera, y de
controlar, en la medida de lo posible, su propio desarrollo económico, social y cultural”.
8
TAULI-CORPUZ, Verónica (2019): “Informe sobre el derecho de los pueblos indígenas a la autonomía o el
autogobierno como ejercicio de su derecho a la libre determinación”, A/74/149. https://undocs.org/
es/A/74/149, p. 7 y 8.
9
Por ejemplo, Dinamarca en su Constitución de 1953; Canadá, en la sección 35 de la Acta Constitucional de
1982; Estados Unidos, Nueva Zelanda, Australia, etcétera. Cfr. DAHL, Jens et al. (2020): “Construyendo
autonomías”, Grupo Internacional de Trabajo sobre Asuntos Indígenas, IWGIA.
10
Es lo que ocurrió en Panamá, respecto al pueblo Kuna, en donde a través de la ley N° 2 (1987), se estableció
que en las comarcas indígenas se aplicará un régimen jurídico especial y que las leyes nacionales se aplicarán en
forma supletoria.
11
En 1983, en el “Informe sobre la situación de los derechos humanos de un sector de la población nicaragüense
de origen Miskito”, del 29 de noviembre, si bien la Comisión no reconoció expresamente el derecho a la
autonomía de ese pueblo, sí referenció la evolución de la autodeterminación y el autogobierno a nivel
internacional, cfr. COMISIÓN INTERAMERICANA DE DERECHOS HUMANOS (2021): “Derecho a la libre
determinación de los Pueblos Indígenas y Tribales”, OEA-IWGIA, p. 26.
3
El Estado garantiza a estas comunidades el disfrute de sus
recursos naturales, la efectividad de sus formas de propiedad
comunal y la libre elección de sus autoridades y diputados.
Asimismo, garantiza la preservación de sus culturas y lenguas,
religiones y costumbres”.
COLOMBIA 1991 Art. 287: “Las entidades territoriales [incluidos los territorios
indígenas] gozan de autonomía para la gestión de sus intereses, y
dentro de los límites de la Constitución y la ley. En tal virtud
tendrán los siguientes derechos: 1. Gobernarse por autoridades
propias. 2. Ejercer las competencias que les correspondan. 3.
Administrar los recursos y establecer los tributos necesarios para
el cumplimiento de sus funciones. 4. Participar en las rentas
nacionales”.
MEXICO 2001 Art. 2: “El derecho de los pueblos indígenas a la libre
determinación se ejercerá en un marco constitucional de
autonomía que asegure la unidad nacional. El reconocimiento de
los pueblos y comunidades indígenas se hará en las constituciones
y leyes de las entidades federativas, las que deberán tomar en
cuenta, además de los principios generales establecidos en los
párrafos anteriores de este artículo, criterios etnolingüísticos y de
asentamiento físico”.
ECUADOR 2008 Art. 242: “El Estado se organiza territorialmente en regiones,
provincias, cantones y parroquias rurales. Por razones de
conservación ambiental, étnico-culturales o de población podrán
constituirse regímenes especiales./ Los distritos metropolitanos
autónomos, la provincia de Galápagos y las circunscripciones
territoriales indígenas y pluriculturales serán regímenes
especiales”.
Art. 171: “Las autoridades de las comunidades, pueblos y
nacionalidades indígenas ejercerán funciones jurisdiccionales, con
base en sus tradiciones ancestrales y su derecho propio, dentro de
su ámbito territorial, con garantía de participación y decisión de
las mujeres. Las autoridades aplicarán normas y procedimientos
propios para la solución de sus conflictos internos, y que no sean
contrarios a la Constitución y a los derechos humanos reconocidos
en instrumentos internacionales./ El Estado garantizará que las
decisiones de la jurisdicción indígena sean respetadas por las
4
instituciones y autoridades públicas. Dichas decisiones estarán
sujetas al control de constitucionalidad. La ley establecerá los
mecanismos de coordinación y cooperación entre la jurisdicción
indígena y la jurisdicción ordinaria”.
BOLIVIA 2009 Art. 2: “Dada la existencia precolonial de las naciones y pueblos
indígena originario campesinos y su dominio ancestral sobre sus
territorios, se garantiza su libre determinación en el marco de la
unidad del Estado, que consiste en su derecho a la autonomía, al
autogobierno, a su cultura, al reconocimiento de sus instituciones
y a la consolidación de sus entidades territoriales, conforme a esta
Constitución y la ley”.
Art. 289: “La autonomía indígena originaria campesina consiste
en el autogobierno como ejercicio de la libre determinación de las
naciones y los pueblos indígena originario campesinos, cuya
población comparte territorio, cultura, historia, lenguas, y
organización o instituciones jurídicas, políticas, sociales y
económicas propias”.
12
Igual que una junta de vecinos, por ejemplo, cfr. LUCAS SIERRA, Lucas (2003): “La Constitución y los
indígenas en Chile: reconocimiento individual y no colectivo”. Estudios Públicos(92), pp. 19-27. A nivel legal,
una “etnia”, como indica la ley Nº 19.253.
13
Considerando N° 44 de la causa rol N° 309, sentencia del 4 de agosto del 2000.
5
que la autodeterminación implique sobrevivencia y, a la vez, una medida de reparación
histórica por la cual el Estado -reconociendo previamente los derechos colectivos e
individuales de todos los pueblos indígenas- facilite el ejercicio de la autonomía.
Hay que tener en cuenta que la autonomía ya ha sido reconocida en los diferentes
Tratados suscritos entre Chile y pueblos considerados indígenas14. No obstante, la aspiración
por la autodeterminación, ha venido a retomar fuerza durante la década de 1980,
particularmente por los movimientos Mapuche, Aymara y Rapa Nui. En la década siguiente,
ese reclamo comenzó a cobrar mayor fuerza debido a la emergencia indígena en América
Latina, instalándose como paradigma luego del triunfo de gobiernos de carácter indígena.
Para nosotros la autonomía política es una condición fundamental a fin de revertir legados
históricos de racismo, violencia y colonialismo, condición básica para la vida política de los
pueblos indígenas en el tiempo presente15 y en un contexto latinoamericano favorable a
este paradigma, caracterizado por su diversidad. En ese ámbito, la autonomía es un
concepto polisémico, por ello convenga más bien hablar de “las autonomías”, ya que éstas
dependerán de sus dimensiones históricas, políticas, geográficas y culturales, contribuyendo
a la comunidad no indígena a repensar nuevas formas de ciudadanía política a partir de
principios establecidos por el derecho internacional16. Sin duda, el contexto político chileno
actual permite generar un nuevo pacto social en donde se incluyan y permita el ejercicio de
las autonomías indígenas17.
14
Cfr. Contreras Painemal, Cristian (2011): “Los Tratados Mapuche en la bibliografía”, Estudios
Latinoamericanos, Nº 31, pp. 105-120; CLAVERO, Bartolomé (2008): “Reconocimiento Mapu-che: Tratado ante
Constitución”, Revista Derecho y Humanidades, Nº 13, pp. 13-40.
15
Cfr. MARIMÁNQUEMENADO, José (2012): “Autodeterminación. Ideas políticas mapuche en el albor del siglo
XXI”, Santiago, LOM.
16
Cfr. BURGUETTE CAL, Aracely et al. (2010): “Autonomia al debate. Autogobierno indígena y Estado
Plurinacional en América Latina”, Ediciones FLACSO.
17
Cfr. El “Informe Ejecutivo Sobre Verdad Histórica, Reparación y Garantías de No Repetición de los Pueblos
Originarios y Tribal Afrodescendiente”, elaborado durante el trabajo de la presente Convención Constitucional,
en donde ya se ha planteado la necesidad de garantizar la autodeterminación y la autonomía, reconociendo el
genocidio que hubo desde el Estado hacia los pueblos originarios y tribal afrodescendiente, planteando
expresamente -como garantías de no repetición y medidas de reparación integral, en los ámbitos materiales,
políticos y simbólicos- la restitución territorial, la autodeterminación y autonomía de los pueblos.
18
FIGUEROA HUENCHO, Verónica (2021): “Autonomías territoriales indígenas en Chile: elementos para la
reflexión”, exposición ante la Comisión Forma de Estado de la Convención Constitucional, del 10 de
Noviembre de 2021.Asimismo, cfr. DAHL, Jens (2020): “Construyendo autonomías”, Grupo Internacional de
Trabajo sobre Asuntos Indígenas, IWGIA p. 9.
6
espacio para la toma de decisiones sobre sus recursos naturales, por ello que los pueblos
indígenas estemos hoy buscando y proponiendo nuestro propio camino hacia la autonomía,
en atención a las condiciones políticas, demográficas y económicas especificas que ofrece el
escenario chileno actual.
Somos conscientes de la histórica reticencia, por parte del Estado chileno, siquiera a
reconocernos, de ahí que sea necesario relevar dos cuestiones. La primera es que -de
persistir en su actitud- Chile continuaría contradiciendo la política internacional de fomento
hacia las autonomías indígenas19. En caso contrario -es decir, aceptar el ejercicio del
autogobierno indígena- habría que atender necesariamente al trabajo desarrollado por los
organismos internacionales especializados en la materia, y construir nuestras autonomías en
base a las siguientes prescripciones y recomendaciones20:
1.- Que el Estado chileno reconozca constitucionalmente la preexistencia de los
pueblos y naciones indígenas y su derecho a la libre determinación;
2.- Que el Estado chileno reconozca la expoliación territorial indígena y proponga
medidas de reparación;
3.- Que las autonomías sean construidas según la visión política y cultural de cada
pueblo que la ejerza, incluyendo los elementos fundamentales que supone el ejercicio
efectivo del poder como, por ejemplo, el control sobre tierras y recursos naturales, y medidas
de rendición de cuentas para garantizar la gobernanza indígena;
4.- Que los procesos de negociación y diálogo intercultural, con el Estado chileno, no
impliquen la renuncia a los derechos reconocidos a los pueblos indígenas en el ámbito
nacional e internacional;
5.- Que para la implementación de las autonomías, el Estado chileno fomente y elimine
cualquier brecha o impedimento, conforme a los estándares internacionales, estableciendo
procedimientos adecuados, eficaces y pertinentes culturalmente, los cuales deben ser
implementados dentro de plazos razonables y de buena fe;
6.- Por último, que estos procesos se realicen solo con el consentimiento de los pueblos
indígenas, pudiendo ser acompañados eventualmente por los mecanismos del sistema
internacional de protección en materia de derechos humanos. En este caso, se sugieren
mecanismos de monitoreo y seguimiento, a nivel interno e internacional, que podrían estar
19
Y complotando contra las aspiraciones de desarrollo sostenible de los pueblos indígenas, proyectados hacia el
año 2030, cfr. DAHL, Jens (2020): “Construyendo autonomías”, Grupo Internacional de Trabajo sobre Asuntos
Indígenas, IWGIA p. 9.
20
Cfr. IWGIA (2019): “Informe Derechos de los Pueblos Indígenas a la Autonomía y al Autogobierno como
manifestación del Derecho a la Libre Determinación”, Informe elaborado por el equipo de relatoría del Grupo
Internacional de Trabajo sobre Asuntos Indígenas.
7
sujetos a revisión, conforme al principio de mejoramiento progresivo en materia de derechos
humanos21.
21
Como, por ejemplo, el Foro permanente de la ONU sobre Asuntos Indig ́ enas, el Mecanismo de Expertos sobre
los Derechos de los Pueblos Indígenas y el Relator Especial sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas.
8
autonomía en un espacio geográfico que coincida con su ocupación tradicional o
histórica, con pleno respeto de los derechos fundamentales de todas las personas
indígenas o no indígenas que en ellos habiten, y justificando su viabilidad para
autogobernarse y asumir todas o algunas de las competencias que
constitucionalmente se le reconocen. En caso de que el Estado, a través del gobierno
respectivo, rechace el establecimiento de una autonomía indígena, tendrán los
pueblos el derecho a interponer un recurso judicial que zanje la cuestión.
Mediante un artículo transitorio para la debida creación, tramitación e
implementación de las autonomías territoriales indígenas, se propone del Ministerio
de Pueblos Indígenas, Autonomías y Plurinacionalidad, el que será encargado, entre
otras atribuciones relativas a la implementación de los derechos colectivos de los
pueblos y naciones indígenas, de gestionar y resolver, breve y oportunamente, los
requerimientos para el establecimiento de autonomías territoriales indígenas.
Competencias, coordinación, modificación y resolución de contiendas. Otro aspecto
a destacar son las competencias o atribuciones que podrá tener una autonomía
territorial indígena, la coordinación con demás entidades territoriales u órganos del
Estado, la modificación de estas competencias como, asimismo, la resolución de
conflictos o contiendas que pudieran surgir. En este punto, se habilita al legislador
para definir el procedimiento respectivo.
Las autonomías territoriales indígenas se rigen por las disposiciones de esta presente
Constitución y sus leyes, sus Estatutos Autonómicos y el sistema jurídico propio de los
respectivos pueblos y naciones indígenas. Asimismo, su autogobierno se ejerce en pleno
respeto de los derechos fundamentales de las personas indígenas y no indígenas,
interpretados de manera intercultural y en debida coordinación con las demás entidades
territoriales.
9
Tendrán personalidad jurídica de derecho público y patrimonio propio. Es deber del Estado
transferir los recursos necesarios para el cumplimiento de sus fines y competencias, sin
perjuicio de su participación en las rentas regionales y estatales, según sea el caso,
quedando sujetas, además, al control y fiscalización de las cuentas y gastos públicos que
realicen los respectivos órganos de control.
ARTÍCULO 2. CREACIÓN.
Para la determinación de los límites y fronteras del espacio geográfico donde se ejercerá la
autonomía, se considerará aquel territorio ocupado tradicional, antigua o históricamente
por el respectivo pueblo y cuya ocupación, posesión o propiedad pueda demostrarse, entre
otros elementos, mediante registros públicos, informes oficiales, investigaciones sobre
determinación y pérdida territorial indígena encargadas o reconocidas por el Estado,
sentencias emitidas por tribunales judiciales y, en subsidio, informes técnicos que
demuestren fehacientemente la ocupación territorial tradicional, antigua o histórica
mediante hitos de significación cultural, espiritual o ceremonial, toponimia, homogeneidad
ecológica u otros antecedentes antropológicos y arqueológicos pertinentes.
El establecimiento de las autonomías territoriales deberá ser requerido por parte de las
autoridades de las instituciones representativas del respectivo pueblo indígena, en atención
al acuerdo alcanzado en un proceso de deliberación interna, desarrollado en base a sus
usos, costumbres, procedimientos, protocolos, derecho y sistemas normativos propios.
Dicho requerimiento deberá contener:
1.- Una propuesta de Estatuto Autonómico que regule, como mínimo, el proceso de
designación de sus autoridades propias, la creación de su estructura orgánica,
administrativa y funcionaria, las competencias atribuidas a cada uno de sus órganos, y la
formas de ejercerlas.
2.- Un Plan de Desarrollo y Financiamiento para la Autonomía Territorial Indígena;
3.-Un Plan de Derechos Humanos que contenga compromisos de promoción y respeto de
los derechos fundamentales para aquellas personas indígenas y no indígenas que habiten la
autonomía territorial indígena, que deberá ser construido con las y los habitantes de dicho
territorio.
10
que se presentaran. En caso que el ente administrativorechace estas correcciones, o
formule nuevas observaciones previas y de forma, podrán deducirse los recursos
administrativos señalados en este artículo como, asimismo, la acción cautelar señalada en el
artículo siguiente, en su caso.
11
tramitación del procedimiento administrativo en atención a los principios de
plurinacionalidad, interculturalidad, pro pueblos y los estándares internacionales en materia
de derechos sobre pueblos indígenas. La interposición de los recursos administrativos de
que se trata en el artículo anterior suspenderá el plazo de presentación de la acción cautelar
hasta su resolución o hasta el transcurso del plazo para su resolución. El procedimiento de
tramitación de esta acción no podrá durar en su totalidad más de 6 meses.
ARTÍCULO 4. COMPETENCIAS.
Las autonomías territoriales indígenas están investidas de todas las competencias necesarias
para el ejercicio del derecho a la libre determinación de los pueblos y naciones indígenas.
Sin perjuicio de las competencias compartidas, o las que le sean transferidas o delegadas, se
reconocen como competencias esenciales de las Autonomías Territoriales Indígenas las
siguientes:
12
administrativas que sean susceptibles de afectarlos, sin perjuicio de la competencia
regulada en el punto anterior;
7.- Elaborar y aprobar el presupuesto anual para la administración y gobierno de la
autonomía territorial respectiva, en el marco de la Ley de Presupuesto anual del Estado;
8.- Promover el respeto de los derechos colectivos de los pueblos y naciones indígenas
preexistentes al Estado y el respeto a los derechos de la naturaleza;
9.- Ejercer funciones jurisdiccionales por sus autoridades conforme a sus costumbres,
procedimientos, protocolos, derecho y sistemas normativos propios, en el marco de la
presente Constitución;
10.- Determinar, preservar, resguardar y administrar el patrimonio cultural, espiritual,
artístico, arqueológico, ceremonial, bioantropológico, y la propiedad intelectual sobre los
conocimientos tradicionales y expresiones culturales del respectivo territorio autonómico;
11.- Establecer, promover y difundir las lenguas y emblemas oficiales que se usarán en el
territorio, además del castellano y los símbolos y emblemas oficiales el país;
12. Proponer y desarrollar las bases de las políticas públicas, planes y programas en los
ámbitos de su competencias, tales como educativas, lingüísticas, de salud, económicas,
sociales y culturales, de acuerdo con sus propios conocimientos, prácticas e instituciones
propias.
13.- Crear instituciones y empresas autonómicas indígenas, en áreas de su interés y
competencia, que le permitan desarrollar sistemas de producción e intercambio fundados
en criterios de justicia, equidad social y de respeto a todas las formas de vida;
14.- Asociarse con cooperativas, microempresas u otras unidades comunitarias para la
producción de bienes o prestación de servicios atingentes a sus objetivos y competencias;
15.- Recibir donaciones de entes públicos o privados, nacionales, internacionales o
extranjeros;
16.- Las demás que autoriza la Constitución y las leyes.
Se reconocen como competencias compartidas, las que se ejercerán en coordinación con las
demás entidades territoriales y en atención a lo señalado por el legislador, las siguientes:
13
culturales, de acuerdo con sus propios conocimientos, prácticas e instituciones propias, y en
coordinación con las demás entidades territoriales y órganos del Estado.
ARTICULO 1. TRANSITORIO
14
3. Cesar Uribe
4. Elisa Giustinianovich
5. Adriana Ampuero
6. Claudio Gómez
7. Jennifer Mella
8. Hernán Velázquez
15
9. Julio Álvarez
16
15. Ramona Reyes
17