Nutricion y Alimentación Del Conejo

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NUTRICION Y ALIMENTACIÓN

DEL CONEJO
Introducción
Anatomía y Fisiología Digestiva 
Estudio de la Digestión 
Cecotrofia 
Alimentación práctica. 
Necesidades Nutricionales de los conejos. 
Alimentos para Conejos
Sistemas de alimentación
Necesidades de consumo del conejo
Recomendaciones para la adecuada formulación de raciones :
Precauciones en el manejo de los alimentos 
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Introducción
Durante cientos de años los conejos han estado alimentándose casi exclusivamente con
hierbas y subproductos, recibiendo una pequeña ración de granos; la alimentación de los
conejos por tal sistema no podía resultar más económica ya que el campesino nada tenía
que adquirir, pues aprovechaba los productos de la propia finca, por lo que el beneficio
que podían dar tales conejos era poco más que nulo, pues se conformaba únicamente,
con obtener de sus animales la carne que precisaba para su propio consumo. Sin
embargo, si pretendemos obtener elevados rendimientos en carne, deberá comprenderse
que lo anterior no es suficiente, habremos de suministrar al animal una alimentación de
calidad que cubra con sus requerimientos nutricionales para que con ello, nos rinda lo
adecuado, sin perder de vista el hecho de que nos
ha de producir determinados beneficios
económicos.

Por lo anterior, conviene señalar la importancia


que tiene esta fase en la cunicultura moderna, ya
que la alimentación ocupa hoy, al igual que en
otras especies, alrededor de un 75 % de los
costos totales de producción. De ahí que se
precisen conocimientos básicos y elementales,
tanto de la anatomía y fisiología del aparato
digestivo, como de los requerimientos nutritivos
del conejo, los aportes nutricionales de los
alimentos que ha de tomar, y el valor económico de la alimentación, y poder así
aumentar la rentabilidad de las explotaciones.
Anatomía y Fisiología Digestiva
El aparato digestivo del conejo está constituido por una serie de órganos, los cuales
conjuntamente ejercen la función digestiva. Estos órganos pueden clasificarse en dos
grupos: unos que figuran alineados, constituyendo el llamado tubo digestivo, y otros
que son las llamadas glándulas anexas; es decir, participan en la función digestiva pero
no forman parte del aparato digestivo.

El tubo digestivo está formado por: boca, faringe, esófago, estómago, intestino delgado
(duodeno, yeyuno e íleon), ciego (válvula íleo-cecal o saco redondo, cuerpo y
apéndice), intestino grueso (colon proximal, colon distal y recto) y el ano. Las glándulas
anexas tales como las salivales, el hígado y el páncreas (Figura 4.1).

Figura 4.1. Aparato Digestivo del Conejo.

Boca.- Es el órgano encargado de la prensión y masticación de los alimentos, para lo


que dispone de los elementos necesarios para este fin: labios, dientes, lengua y paladar.
La boca tiene básicamente tres funciones:
a). Prensión de los alimentos.- Acción que se lleva a cabo básicamente por los labios,
los incisivos y la lengua. 
b). Masticación.- Actividad directamente encomendada a la dentición, y se produce
mediante desplazamientos transversales o laterales del maxilar.
c). Insalivación.- Acción de mezcla y humidificación del alimento para su posterior
deglución.

Labios.- El conejo dispone de un labio inferior redondeado y de un labio superior


hendido muy característico (labio leporino, de ahí lo de leporino), enmarcando ambos
una abertura bucal reducida y de enorme motilidad.

Dientes.- Resultan muy característicos en el conejo los incisivos, piezas dentarias


afiladas en bisel y muy resistentes. Después de los incisivos queda un espacio ínter
dentario llamado diastema, ya que estos animales carecen de caninos, tras lo cual
aparecen los premolares y los molares, piezas que ofrecen una superficie dura y muy
rugosa. La dentición de un conejo está compuesta por un total de 28 piezas en total, bajo
la siguiente fórmula dentaria:

2(I 2/1; C 0/0; PM 3/2; M 3/3) = 16/12 = 28

Lengua.- Es grande y presenta botones gustativos en las bases y papilas de distinto


tamaño en las porciones anterolateral y superior.

Paladar.- Se distingue por poseer dos porciones, una dura y otra blanda denominada
también velo palatino, que separa la boca de la faringe.

Faringe.- Esta cavidad aparece dividida en dos porciones, la respiratoria y la digestiva.


La faringe constituye un anillo muscular que cuando se contrae produce la elevación de
la glotis y la correspondiente deglución del alimento.

Esófago.- Es un conducto destinado a trasladar el alimento de la faringe al estómago;


discurre junto a la traquea, y atraviesa el diafragma para desembocar en el estómago a
nivel de cardias.

Estómago.- Es un órgano voluminoso en forma de bolsa con una capacidad de 40 a 50


cc. Estructuralmente pueden distinguirse dos partes: el saco cardial, junto a la entrada y
de paredes finas, y el antro pilórico, con mucosa glandular y paredes algo más gruesas.
Una característica particular de la especie, es que las paredes de este órgano son
relativamente finas y con escasa musculatura. El papel fisiológico de los dos sectores
del estómago está perfectamente definido: la zona cardial o fundus actúa como
reservorio y el antro pilórico como el estómago secretor o glandular propiamente dicho.

Un conejo adulto presenta continuamente un contenido gástrico que oscila entre 55 y 90


g de sustancias que están sometidas a la llamada digestión gástrica. El contenido
estomacal, lo constituyen los alimentos, el agua de bebida y los cecotrofos, con
predominio unos de otros según la hora del día. La humedad del contenido gástrico
oscila entre el 81 y el 83%, con un pH de alrededor de un 2.5

En el estómago del conejo siempre hay cierta cantidad de alimento porque la escasa
musculatura que tiene la mayor parte de la pared de este órgano, no produce las
contracciones necesarias para vaciarlo completamente, es decir, cuando el animal come,
el alimento que ingiere llega al estómago, empuja al que había acumulado en él y lo
hace pasar a la zona musculada que está próxima al píloro. Ya allí, se producen
contracciones que impulsan parte del contenido estomacal al duodeno.

Conforme el alimento llega al estómago, se agrega jugo gástrico secretado por las
paredes del mismo, y el cual contiene ácido clorhídrico (HCl), y la enzima pepsina, que
actúa sobre las proteínas, reduciéndolas a peptonas. El HCl actúa sobre el precursor de
la pepsina, zimógeno pepsinógeno que la activa, y sobre el material mineral.

Intestino delgado.- Es un conducto tubular de paredes lisas con una longitud de 2 a 3 m


y un diámetro de 1 cm en conejos adultos. Está formado por tres porciones: duodeno,
yeyuno e íleon. Inicia su trayecto en el píloro y desemboca en la glándula íleo-cecal. En
él desembocan los conductos secretores del hígado y del páncreas.

El intestino delgado realiza 3 funciones básicas:

1. Recibe el jugo pancreático que contiene enzimas y secreta el jugo intestinal o entérico
que contiene también enzimas, las cuales completan la digestión final de las proteínas y
convierte los azúcares en compuestos más sencillos en el duodeno.
2. La segunda función es la de absorber el alimento digerido, y pasar los nutrimentos al
torrente circulatorio.
3. Realiza una función peristáltica que forza al material que no es digerido, pasar al
ciego.

Las glándulas de la mucosa duodenal secretan un líquido viscoso con un pH de 8.0 a


8.2, alcalinidad que se debe eminentemente a la concentración de bicarbonatos; dicha
concentración neutraliza la acidez del quimo, que llega del píloro con un pH que oscila
entre 1.8 y 2.2.

Ciego.- El ciego representa una porción individualizada del intestino grueso que destaca
por terminar en un apéndice tubular sin salida y por su gran volumen (de 250 a 600 cc).
Desde un punto de vista estructural, tiene tres partes o porciones: cuerpo, apéndice y
saco redondo o válvula íleo-cecal. La longitud total del mismo viene a ser de 30 a 50 cm
encontrándose dispuesto en forma espiral, y ofreciendo un aspecto abollado. El cuerpo
del ciego tiene un tono grisáceo y el apéndice es blanquecino. El ciego en el conejo es
un órgano fundamental, como lo demuestra el hecho de que es de 6 a 12 veces más
voluminoso que su estómago, pudiendo alcanzar un 33% del total del aparato digestivo.
Porción muy elevada, especialmente si tenemos en cuenta que en el cerdo representa el
6%, en ovinos y bovinos el 3% y en el perro, solo un 1%. Esta desproporción, en el
conejo, tiene un significado biológico muy importante, como veremos más adelante
(Cuadro 4.1).

Cuadro 4.1. Capacidad relativa de las


distintas porciones 
del aparato digestivo de diversas especies
(%)

El ciego
recibe los
alimentos del intestino a través de la válvula íleo-cecal. La motricidad del ciego consiste
en movimientos que se conocen por el nombre de peristaltismo. El ciego se contrae
regularmente, de 10 a 15 veces cada 10 minutos; durante las comidas, las contracciones
pueden doblarse en frecuencia, inhibiéndose después de las mismas. Los movimientos
del ciego producen una homogeneización de su contenido, sometiéndolo a una serie de
fenómenos bioquímicos y biológicos.

El contenido cecal puede dividirse en tres elementos: el alimento, las secreciones


digestivas y la microflora.

a).- El alimento que ingresa en el ciego procedente del intestino delgado, es un substrato
nutritivo rico en celulosa, proteínas y otros elementos. Los productos celulolíticos
constituyen la fracción mayoritaria del ciego pues la ausencia de enzimas celulolíticas
hace que estas materias lleguen indigestibles a dicho órgano. La destrucción de la
celulosa por parte de los microorganismos, que si producen estas enzimas, libera
determinados nutrientes que serán luego aprovechados por el animal en un segundo
ciclo de digestión.
b) Las secreciones digestivas tienen poca importancia, ya que en el interior del ciego
sigue parcialmente la actividad de algunas enzimas intestinales. Otra secreción es la del
apéndice que produce un fluido alcalino de un pH de entre 7.8 a 8.0.
c) La microflora está constituida por una serie de gérmenes que colonizan normalmente
este órgano. Cuando el gazapo nace, su aparato digestivo carece de bacterias, al primer
día de vida, por contacto con el pelo del nido y con los pezones de la madre entran en su
aparato digestivo los primeros gérmenes.

Intestino grueso.- Desde un punto de vista estructural, se puede dividir en 3 partes:

1. Válvula íleo-cecal.- Elemento que actúa a modo de válvula entre el intestino delgado,


ciego y colon; tiene forma de cúpula convexa y es rica en vasos linfáticos.
2.- Colon proximal.- Tiene una longitud de unos 6 cm, presentando abolladuras; tanto
su estructura anatómica como su contenido, son muy similares al ciego, por lo que el
alimento contenido sigue los procesos fermentativos.
3.- Colon distal.- Es alargado y se caracteriza por presentar un aspecto lineal con
ausencia de abolladuras y por tener una mucosa de células cúbicas ricas en glándulas
mucígenas. El moco segregado en esta parte posiblemente sea el que recubre los
cecotrofos.

El intestino grueso ejerce una misión importante en la formación de las heces y


reabsorción de agua, pues el avance del contenido va reduciendo progresivamente su
humedad. Téngase en cuenta que las paredes de esta porción intestinal reabsorben casi
el 40 % del agua que entró en el órgano.

Recto.- Tiene la misión de fragmentar las heces, reabsorbiendo la mayor cantidad de


agua posible, pues recibe el contenido fecal del colon con un 50-60% de humedad,
expulsando desechos con sólo un 15-18%. Las contracciones del recto producen las
bolas de heces que son expulsadas rítmicamente por el ano.
Glándulas anexas.- Como se mencionó antes, son aquellas que poseen actividades
directamente vinculadas con las funciones digestivas, tales como las glándulas salivales,
hígado y páncreas.

Glándulas salivales.- Su misión es la de segregar saliva, la cual impregna y humedece


a los alimentos para facilitar la deglución. Los forrajes apetitosos estimulan la secreción
de la enzima amilasa salival, que actúa sobre los almidones degradándolos a maltosa.

Hígado.- Es una glándula importante porque constituye el órgano central del


metabolismo de las sustancias absorbidas por el intestino, y por segregar la bilis.
También, tiene una misión de reserva de los principios vitamínicos, minerales y
oligoelementos. La secreción biliar tiene un destacado papel digestivo por disminuir la
tensión superficial, emulsionar las grasas y alcalinizar el medio favoreciendo la acción
enzimática del páncreas y del intestino, y poseer una ligera acción laxante.

Páncreas.- La acción digestiva del jugo pancreático se debe a las enzimas que produce,
las cuales son vertidas al intestino mediante el conducto pancreático. La enzimas más
importantes son la tripsina, amilasa, lipasa, carboxipeptidasa, etc, con papeles muy
destacados sobre la asimilación de los alimentos.

Estudio de la Digestión

La digestión de los alimentos consiste en su aprovechamiento para que sean


incorporados al organismo y utilizados como fuente de energía y proteína para el
mantenimiento, crecimiento, producción y buena salud.

Para que los alimentos puedan aprovecharse realmente, es preciso que antes sean
degradados y transformados a entidades más simples (glucosa, aminoácidos, ácidos
grasos y glicerol, etc.). Para que se produzca esta transformación, debe haber la
intervención de mecanismos físicos o mecánicos, químicos y biológicos (Cuadro 4.2).

Cuadro 4.2. Mecanismos que participan en la digestión de los alimentos


Físicos Químicos Biológicos
Humidificación Acido clorhídrico Bacterias
Maceración Sales biliares
Masticación Bicarbonatos
Movimientos de mezcla Enzimas

Los mecanismos físicos actúan preferentemente como condicionantes o auxiliares y los


químicos (Cuadro 4.3) y biológicos como determinantes; siendo los primeros
inespecíficos y los segundos altamente específicos.
Cuadro 4.3. Digestión de los principios nutritivos orgánicos

De Blas (1989) menciona que los herbívoros consumen alimentos que en general se
caracterizan por tener una elevada proporción de compuestos fibrosos, a pesar de que
ellos mismos no producen enzimas que transformen esos compuestos en nutrientes
absorbibles. Sin embargo, poseen en su aparato digestivo unos compartimentos en los
que habita, en simbiosis con el huésped, una población microbiana con una actividad
celulolítica importante. Estos microorganismos obtienen energía a partir de los
compuestos fibrosos del material alimenticio, produciendo ácidos grasos volátiles
(AGV), fundamentalmente acético, propiónico y butírico. Y a su vez, el huésped utiliza
esos AGV, y en ocasiones, los propios microorganismos como fuente de nutrientes.

En los rumiantes, el área microbiana se asienta, preferentemente en la primera porción


de su aparato digestivo (rumen), por lo que los microorganismos poseen un sustrato rico
y variado. En el rumen se absorben la mayoría de los ácidos grasos volátiles, mientras
que los productos resultantes de la actividad microbiana, incluyendo los propios
microorganismos, sufren posteriormente el ataque enzimático de las secreciones
digestivas del tracto digestivo posterior (Abomaso e intestino), similar al que tiene lugar
en los monogástricos. Ahora bien, cuando el área microbiana está situada en el tramo
digestivo posterior del aparato digestivo (ciego), después de que la digestión enzimática
ha tenido lugar, los microorganismos disponen, por un lado, de un sustrato menos rico y
digestible.

Por otro lado, aunque hay procesos tales como la absorción de los AGV que se realiza a
nivel de ciego (siendo más o menos independiente de la localización del hábito
microbiano), la capacidad de utilizar otros productos resultantes de la actividad de los
microorganismos (tales como proteína microbiana y vitaminas) se pierde, ya que no
existen en el ciego ni en tramos posteriores, enzimas proteolíticas o sistemas de
absorción de tales productos, que por tanto son eliminados en las heces. La coprofagia
permite la digestión enzimática de las bacterias cecales y la absorción intestinal tanto de
los aminoácidos procedentes de la proteína bacteriana como de las vitaminas. De ahí
que lo verdaderamente importante de la fisiología digestiva del conejo y que lo hace
diferente con respecto a otras especies tales como el cerdo o las aves, es el hecho de que
practica la coprofagia como un acto normal, (acto digestivo que consiste en la ingestión
de una modalidad de heces denominadas cecotrofos), actividad de vital importancia en
esta especie.

Cecotrofia

En distintas especies, la coprofagia es un fenómeno considerado como un acto de


perversión nutricional debido a subcarencias, vicio adquiridos o desarreglos
alimenticios. En el conejo este hecho tiene otra significancia pues no ingiere heces
propiamente dichas, sino un producto intestinal de características muy distintas (heces
blandas por su elevado contenido de agua). De ahí que se hable de cecotrofia y no de
coprofagia, entendiendo que éste fenómeno tiene un papel digestivo cíclico de primer
orden parecido al que se da en los rumiantes con la rumia.

Además, el conejo posee un aparato digestivo adaptado para obtener las máximas
ventajas de la cecotrofia como se puede apreciar en la figura 4.1, pues posee un ciego
muy desarrollado, cuya capacidad relativa con respecto al toral del aparato digestivo es
notablemente mayor que en otras especies de herbívoros.
Figura 4.2.- Esquema general de la digestión en el conejo.

Asimismo, la capacidad del estómago es también considerable, sobre todos si se


compara con el de otros herbívoros monogástricos, pues tiene la particularidad de ser
poco contráctil, lo que permite a las heces blandas permanecer intactas en el estómago
durante varias horas (6 horas en promedio): el tiempo suficiente para que se consiga
mantener un pH favorable para el metabolismo bacteriano, a pesar de la fuerte acidez
del jugo gástrico. El proceso digestivo de la cecotrofia comienza desde el momento en
que el conejo tiene acceso a alimentos sólidos (Figura 4.2).

Primer ciclo digestivo o diurno


El primer alimento ingerido pasa de la boca al estómago a través del esófago, donde son
expuestos al proceso de digestión del jugo gástrico, convirtiéndose ahora en el llamado
bolo alimenticio. Enseguida, dicho material pasa al duodeno, —primera parte del
intestino delgado— a través del píloro por acción de los movimientos musculares de las
paredes del antro pilórico y por el empuje del alimento ingerido posteriormente y donde
continúa la digestión de los nutrientes por acción enzimática de los jugos entérico,
pancreático y biliar, además de realizarse la absorción de los compuestos digeridos a
través de las paredes del intestino. El material no digerido pasa luego a las siguientes
porciones del intestino delgado. A partir del yeyuno dicho material se espesa, pasando
su proporción en agua al 86-88% y descendiendo aun más en el íleon hasta un 80-85% y
donde el medio es alcalino, alcanzando un pH que oscila entre 7.5 en el duodeno, hasta
un 8 en el íleon. Y como se mencionó antes, el material alimenticio entra al ciego a
través
de la

válvula íleo-cecal, donde sufre procesos de fermentación por acción de los


microorganismos. Proceso que en promedio dura al rededor de 12 horas, pasadas las
cuales, el contenido digestivo sale hacia el intestino grueso, específicamente al colon
proximal, donde se deshidrata, concentra y segmenta formándose pequeñas bolitas más
blandas que las heces normales y que enseguida avanzan por el colon distal en grupos
de 5 a 10 con gran rapidez evitando que pierdan humedad, y recubriéndose de una
sustancia mucosa conocida como mucina, para continuar su camino hacia el ano. El
proceso digestivo hasta aquí descrito se realiza generalmente durante el día, finalizando
así lo que se puede considerar como primer ciclo de digestión o diurno.
Segundo ciclo de digestión o nocturno

Por la noche, el animal se voltea para que literalmente


sorba del ano con su boca los cecotrofos, sin dejarlos
caer el suelo, ingieriendolos sin masticar, iniciándose
así el segundo ciclo de la digestión. La cantidad de
cecotrofos que ingiere el conejo representa
aproximadamente una tercera parte de la capacidad
total del estómago y, como consecuencia de su
ingestión, el alimento normal que se encontraba en el
estómago es empujado a la zona pilórica siguiendo,
después el curso descrito anteriormente.

Por su parte, como se mencionó antes, los cecotrofos,


gracias a la acción tapón de la mucina, son capaces de
continuar su actividad microbiana dentro del estómago durante unas 6 horas, al final de
las cuales, y por acción de los jugos digestivos, se liberan los AGV, proteínas, vitaminas
y minerales que contienen, pasando a la zona pilórica para ser sometidas a la
correspondiente digestión gástrica con el resto de la ingesta, para luego pasar al
duodeno donde continúa la digestión enzimática y la correspondiente absorción de los
nutrientes, como en el caso del primer ciclo, hasta llegar de nuevo al intestino grueso sin
introducirse, en esta ocasión, al ciego; es decir, que el alimento solo penetra en el ciego
en el primer ciclo de la digestión. El tránsito por el intestino grueso es ahora y a
diferencia de lo que ocurre durante el primer ciclo digestivo, muy lento de modo que las
heces pierden humedad dando lugar a su transformación en bolas de heces duras, sin
valor nutritivo y que constituyen el excremento visible bajo las jaulas y que es
expulsado durante el día. Todo ello ocurriendo durante la misma noche de su ingestión.

Si bien, la cecotrofia puede realizarse durante el día, es más común que el conejo la
realice durante la noche, circunstancia que da lugar a que este fenómeno fisiológico
pase inadvertido la mayor parte de las veces. Hay que tener presente, así mosmo, que si
bien se han descrito separadamente dos ciclos digestivos en el conejo, éstos se realizan
de modo simultáneo, habiéndose desglosado solo para mejor comprensión.

Características físicas y químicas de los dos tipos de producto

La formación diferenciada de los dos tipos de heces (blandas o cecotrofos y heces duras
o verdaderas) comienza en el conejo, cuando deja de depender únicamente de la leche
materna y comienza a ingerir alimento sólido, y que en promedio se efectúa entre los 18
y 20 días de edad.

Los cecotrofos (heces blandas) son partículas o porciones en forma de esfera rodeadas
por una película de moco. Físicamente tienen el aspecto de bolas húmedas y blandas
que aparecen aisladas o agrupadas en forma de cadenas o racimos, siendo su olor
completamente distinto del de las heces duras y su composición química también.

El color de los cecotrofos puede variar de acuerdo con el tipo de alimento que ingieren
los animales, por ejemplo, cuando consumen alfalfa son de un tono verdoso oscuro, y si
consumen zanahoria son grisáceos amarillentos y si comen remolacha son blanquecinos.
La composición química de los cecotrofos es similar a la del contenido del colon.
Muestra una notable riqueza en agua, proteína y fósforo, frente a una marcada
superioridad en celulosa por parte de las heces duras, como se puede observar en el
cuadro 4.4. Asimismo, los cecotrofos tienen un notable interés alimenticio, pues aparte
de los macro-ingredientes, contienen vitaminas y oligoelementos.

Por lo que la simple valoración de sus componentes sugiere que se trata de un alimento
que no puede ser desperdiciado, sobre todo si tenemos en cuenta que el régimen
herbívoro impide al conejo proveerse de las grandes fuentes naturales de aminoácidos

Una dieta a base de cereales difícilmente supera el 9% de proteína en base de materia


seca y sin embargo, los cecotrofos triplican esta proporción. Por otra parte, los
aminoácidos de los cecotrofos son de gran calidad ya que contienen una proporción
significativa de los llamados indispensables.

Cuadro 4.4. Composición química de los dos tipos de heces


del conejo
Constituyentes Quimicos Heces duras Cecotrofos
Referencias A B A B
Materia Seca (MS), % 58.9 82.5 29.3 55.3
Proteína Cruda (BMS), % 10.7 20.3 32.3 39.7
Grasa, % de la MS 2.7 1.4 2.2 1.3
Celulosa, % de la MS 51.1 47.4 28.5 26.4
E.L.N. , % de la MS 30.2 24.7 29.5 24.9
Cenizas, % de la MS 5.2 6.2 7.9 7.7

E.L.N. = Extracto libre de nitrógeno


A: Proto, 1965.B: Yoshida et al. 1971, citados por Leonart et al. (1980).

La cantidad de cecotrofos producida (e ingerida) supone aproximadamente un tercio del


material fecal total excretado y varía en función de la edad, el nivel de producción o la
composición química del alimento.

Una vez que el animal es destetado, la cantidad de cecotrofos producida aumenta


linealmente con la edad, alcanzando un máximo entre los 65 y 75 días de edad (25 g de
MS/d). A partir de este momento, la producción se mantiene constante o ligeramente
inferior entre 20 - 25 g MS/d tanto para animales en crecimiento como para hembras
gestantes con alimentación restringida (Gidenme y Lebas, citados por De Blas, 1989).

Por otra parte, la variación observada en la producción de heces blandas desde el destete
hasta los 65 días de edad parece estar relacionada con el aumento del nivel de ingestión
de alimento. Por ejemplo, Lorente citado por DeBlas (1989) observó un aumento del
65% en la producción de heces blandas cuando el nivel de ingestión se incrementó un
40% en hembras en lactación con alto nivel de producción de leche, aunque se ha
comprobado que cuando los gazapos reciben alimentos concentrados con un elevado
contenido de proteína tienden a ingerir menores cantidades de cecotrofos y viceversa, lo
cual contribuye a complicar notablemente el problema de las necesidades proteicas de la
especie.
De hecho, la composición química de ambos tipos de heces depende en parte de la
composición química de la dieta y así, a medida que aumenta el contenido de fibra
cruda de la ración, aumenta el contenido en fibra de las heces duras. Mientras que el
nivel de fibra de las heces blandas se ve menos afectado. Resultados que parecen indicar
la capacidad de los animales para separar el material más indigestible del fluido y
pequeñas partículas, aún cuando la proporción de material indigestible ingerido sea muy
elevada. Por otra parte, se ha visto que un aumento del contenido de fibra de la dieta al
limitar la disponibilidad de energía para el crecimiento bacteriano, supone una
disminución del contenido en proteína del material cecal y, como consecuencia, de las
heces blandas (Lleonart et al., 1980).

Mecanismos de elaboración del Cecotrofo

La formación de cecotrofos es un acto fisiológico que presenta todavía numerosos


puntos obscuros; su elaboración no corresponde al ciego pues al quitarlo
quirúrgicamente no suprime esta actividad, por lo que si bien organolépticamente los
cecotrofos son afines a la materia cecal, su preparación corresponde a otros tramos del
intestino, probablemente al colon proximal, ya que éste órgano presenta una formación
anatómica que indica que es ahí donde se forman.

Razones de índole nutritiva pueden variar la intensidad de la cecotrofia pues se ha


comprobado que cuando los conejos silvestres disponen de abundante verde reducen la
cecotrofia, acto que se incrementa en épocas de escasez; por tanto, es muy verosímil la
teoría de que la cecotrofia actúa como un mecanismo de adaptación.

Hay varias teorías que tratan de explicar el porque determinadas masas alimenticias
pasan a ser cecotrofos y otras pasan a ser excrementos. La determinación de las dos
modalidades tiene lugar a partir de primeros los 10 cm del colon.

Las explicaciones de este fenómeno se basan en diversos hechos: Naturaleza del


contenido cecal, fermentaciones, motricidad, tiempo de estancia del alimento, etc..

A partir de la diferenciación, (a nivel del primer sector del colon proximal) el contenido
del colon se deshidrata, concentra y segmenta, avanzando por el colon distal con gran
rapidez. Pareciendo que existe una especial sensibilidad anal o rectal en el conejo para
distinguir a los cecotrofos; al removerlo quirúrgicamente produce incapacidad para la
cecotrofia a pesar de que se elaboran perfectamente los cecotrofos.

Por otra parte, la privación del sentido del olfato interrumpe la cecotrofia, por lo que
posiblemente tenga alguna relación con el sistema nervioso central. Aunque el
fenómeno de la cecotrofia parece depender de múltiples factores, tales como físicos,
químicos, mecánicos, metabólicos y humorales integrados a nivel cerebral.

En fin, la producción e ingestión de cecotrofos representa un ejemplo muy interesante


de regulación fisiológica para momentos de carencia alimenticia; este hecho tiene un
extraordinario significado ecológico por ser el conejo un animal capaz de aumentar los
rendimientos de raciones deficientes. Detalle que, por otro lado, dificulta los estudios
sobre nutrición en esta especie.
Alimentación práctica.

Necesidades nutricionales de los conejos.

Las necesidades nutricionales se definen como las cantidades mínimas de nutrientes que
deben estar presentes en la dieta para que el animal pueda desarrollarse y producir
normalmente. Sin embargo, cuando se comparan las recomendaciones hechas por varios
autores, se pueden ver diferencias a veces bastante grandes. En gran parte, la
divergencia que se puede observar obedece a la gran cantidad de circunstancias que
modifican o hacen variar tales niveles, por ejemplo:

1). El patrimonio genético, pues el conejo, al igual que en otras especies, existen claras
indicaciones de que su raza influye considerablemente sobre sus necesidades
nutricionales, lo que se explica a través del diferente peso adulto o velocidad de
crecimiento, su diferente composición corporal, etc.
2). El sistema de explotación, ya sea que se haga en la jaula o sobre el piso; el grado de
ejercicio modifica los requerimientos.
3). La temperatura ambiente, ya que las altas temperaturas hacen disminuir el consumo
de alimento, mientras que las bajas lo favorecen, por lo que las necesidades energéticas
serán, en consecuencia, más elevadas en invierno que en verano, de igual manera que
también lo serán, en la misma época del año, en un local abierto en invierno que otro de
ambiente controlado.
4). El nivel de restricción alimenticia hace que sus necesidades resulten modificadas.
5). Las enfermedades, modifican substancialmente sus necesidades nutricionales, por el
solo hecho de mantenerse con vida o saludables.

Por estas y por muchas otras circunstancias, es recomendable NO formular raciones


para los conejos con base en niveles mínimos, sino en unos márgenes lo suficientemente
holgados.

Por otro lado, la mayor parte de las recomendaciones sobre los requerimientos
nutricionales de los conejos, se han determinado a través de ensayos de alimentación, en
los que se suministran a varios lotes de animales diferentes dietas. A partir de la
composición del alimento que produce la respuesta óptima, se deducen las necesidades
de los distintos nutrientes.

Sin embargo, las recomendaciones así obtenidas tienen varias limitaciones. Una de las
principales es la dificultad de establecer y unificar que se entiende por respuesta óptima.
La mayoría de las veces se utiliza como tal la velocidad de crecimiento asociada con un
bajo índice de conversión alimenticia y, en el caso de las hembras, el número de
gazapos destetados o vendidos por jaula y año.

Por otro lado, los resultados de muchos de estos experimentos no tienen interés práctico,
pues se han obtenido con razas poco productivas, con bajo número de dietas o
utilizando materias primas poco usuales y, en caso de las hembras, en experiencias de
poca duración.

En los últimos años se han realizado nuevos experimentos de alimentación (sobre todo
en hembras) y se han obtenido nuevos datos utilizando métodos calorimétricos, que
permiten diferenciar las necesidades para mantenimiento y producción así como la
eficacia con que se realizan los distintos procesos.

En general, a partir de los datos que provienen de ensayos de alimentación, las


necesidades se expresan como porcentaje de la dieta, y son relativamente rígidas y
difíciles de extrapolar a situaciones de mercado diferente, aunque algunos autores
especifican cuales son los cambios en la productividad de los animales cuando los
aportes difieren de las recomendaciones.

Utilizando ecuaciones de regresión o, a partir de ensayos calorimétricos, las necesidades


pueden expresarse en valores absolutos (Kcal/d, g/d, ...) y permiten tener en cuenta una
serie de factores tanto ligados al animal (peso vivo, velocidad de crecimiento,
producción de leche) como al manejo y a la situación de mercado (edad al destete, peso
al sacrificio, etc...). Teniendo en cuenta las características de los sistemas modernos de
producción, se pueden distinguir dos grupos de animales: a).- Conejos en engorda
(desde el destete al sacrificio) y, b).- Hembras vientre (gestantes o lactantes).

La diferencia entre las necesidades de ambos grupos justifica generalmente la


fabricación de dos tipos de alimento. Los animales adultos en mantenimiento, las
hembras de reemplazo y las hembras en gestación reciben una de estas dos dietas en
cantidades más o menos restringidas.

Los requerimientos nutricionales establecidos por el NRC (1977), se muestran en el


Cuadro 4.5. Las notas que aparecen en blanco, muestran la información de nutrientes
que aun no están disponibles.

Sin embargo, una versión más actualizada de los requerimientos del NRC, ha sido
publicada por Lebas, un prominente nutriólogo francés, quien ha introducido el termino
"fibra indigestible", buscando la prevención de la enteritis (Cuadro 4.6).

Cuadro 4.5. Requerimientos nutricionales de


los conejos alimentados ad libitum (en
porcentaje o cantidad por Kg. de dieta), según
el NRC (1977).
1 Los nutrientes no enlistados indican que no se conoce si son o no necesarios en la
dieta.
2 Puede no ser el mínimo, pero se sabe que es adecuado.
3 No han sido determinados, pero se ha demostrado ser necesarios en al dieta.
4 Se puede encontrar en 0.5% en el NaCl.
5 Convertido a cantidades por conejo por día usando un consumo de alimento secado al
aire de 60g/d para un conejo de 1 Kg.
6 Requerimiento no determinado.
7 Probablemente se requiere, cantidades desconocidas.
8 Estimados.
9 Síntesis intestinal probablemente adecuada
10 Necesidades desconocidas en la dieta.

Cuadro 4.6. Requerimientos nutricionales


de los conejos (según Lebas, 1980, citado
por Cheeke, 1987)

Métodos de Expresión de las Necesidades Nutritivas

Por lo que respecta a las necesidades nutritivas, lo más y frecuente es que la proteína, la
grasa y la fibra que contienen los alimentos para conejos, se expresen en porcentaje;
mientras que para medir la energía se utilizan distintos sistemas, ya que a diferencia de
lo que sucede en las aves, hasta el momento no se ha impuesto internacionalmente
ninguno de ellos, aunque se observa una tendencia a utilizar la energía metabolizable.

Necesidades Energéticas.- En principio, el conejo come para satisfacer sus necesidades


de energía, lo que significa que, al igual que en otras especies no rumiantes, el conejo
ajusta su consumo diario según el nivel energético de la ración suministrada. Aunque,
este ajuste del consumo al nivel de energía de la dieta no es tan perfecto como parece,
ya que existen diferentes interacciones con la fibra, la proteína, etc.

Las necesidades energéticas del conejo no se han establecido con precisión, sin embargo
en 2500 Kcal/ED (Energía Digestible), es el mínimo requerido para favorecer un rápido
crecimiento, gestación y lactación, mientras que para mantenimiento, es del orden de las
2100 Kcal/ED (NRC, 1977).
Con relativa poca diferencia, éstos son también los niveles de energía que recomiendan
otros investigadores. Se exceptúan únicamente los machos reproductores, para los
cuales, si bien no se conocen exactamente sus necesidades energéticas, se recomiendan
unos niveles en la dieta del orden de 2100 a 2200 Kcal/ED para la reproducción.

El efecto general de la concentración energética (en este caso estimada por el contenido
de fibra ácido detergente - FAD) de la dieta, presenta un aumento del contenido de FAD
hasta niveles de alrededor de 21% (que corresponde a 2200 Kcal de ED/Kg), sin
repercusión sobre la velocidad de crecimiento. Esto debido a que el consumo aumenta
con dietas fibrosas, permitiendo rendimientos elevados aunque a costa de un
empeoramiento del índice de conversión alimenticia. Por otro lado, cuando la
concentración energética de la dieta se sitúa por debajo de las 2200 Kcal de ED/Kg, la
regulación se ve impedida por factores de tipo físico y tanto la velocidad de crecimiento
como la conversión alimenticia empeoran. Aunque con menos evidencia experimental,
se considera igualmente que las hembras en lactación regulan correctamente el consumo
de alimento por encima de las 2250 Kcal ED/Kg.

Los límites máximos de concentración de energía de la dieta se pueden elevar a base de


añadir grasa, y manteniendo los niveles de fibra hasta unos 2650 y 2800 Kcal ED/Kg
para engorda y vientres, respectivamente.

Necesidades de Proteína y Aminoácidos.- Se expresan, como ya se mencionó, en tanto


por ciento de proteína cruda (PC). Como es lógico, las necesidades de proteína varían
según la fase fisiológica del animal. Sin embargo, aunque no existe un total acuerdo
entre investigadores, las tendencias andan alrededor de 12 a 18% en todas las etapas.

Asimismo, hasta hace relativamente poco se consideraba que la calidad de la proteína


no era de gran importancia para el conejo porque las fermentaciones microbianas que
tienen lugar en el ciego eran capaces de suplir las deficiencias de la ración en
determinados aminoácidos, tal como sucede en los rumiantes, no siendo extraño ver aún
hoy muchas fórmulas equilibradas sin atender a su composición en aminoácidos.

Las investigaciones realizadas en varios países, han demostrado que, al menos los
conejos en crecimiento, tienen claras necesidades en aminoácidos y que los conceptos
de indispensabilidad de éstos que se tienen para otras especies también rezan para ellos.
Aunque, en realidad, solamente en lisina y en total de aminoácidos azufrados se dispone
de cierta información relativamente coherente pues en los restantes incluso se discute,
como en el caso de la glicina, si existe necesidad de ella o no.

En efecto, parece probado que los conejos necesitan el aporte de los 10 aminoácidos que
son esenciales para la mayoría de las especies monogástricas y que incluso la glicina es
sintetizado en insuficiente velocidad y, por tanto, hay que aportarlo en la dieta.

Por último, es muy importante que el contenido en proteína debe relacionarse con el
contenido energético de los alimentos, incrementándose a medida que las dietas sean
más concentradas y se consuman en menor cantidad (Cuadro 4.7).

Cuadro 4.7. Niveles máximos y mínimos de


proteína cruda (%) en la dieta, según su
contenido en energía digestible (Kcal/Kg.)
Vientres 
Dietas Engorda
Reproductores

ED de
PC PC PC PC
alimento
Mn Mx Mn Mx
(Kcl/Kg)
2300 13.5 14.5 16.4 18.2
2400 14.1 15.3 17.1 19.0
2500 14.7 16.0 17.8 19.8
2600 15.3 16.6 18.5 20.5
2700 15.9 17.2 19.3 21.0
2800 16.5 18.0 20.0 21.4

La elevada producción de leche de la coneja (30 - 40 g/Kg. de peso vivo en promedio),


así como el alto contenido en proteína (13 - 14%), son responsables de las elevadas
necesidades proteicas de las conejas en lactación. Lebas (1985) recomienda un 18% de
PC para esta fase fisiológica. Niveles inferiores al 14% tienen efecto negativo sobre el
tamaño de la camada al momento del parto.

Por otra parte, como en las demás especies Zootécnicas, las necesidades de proteína del
conejo son mayores en el primer período de crecimiento. Durante los primeros 21 días
de vida, el gazapo cubre sus necesidades con la leche materna. Pasado este período, la
dependencia de alimento se va acentuando y los gazapos deben disponer de uno de
calidad (equivalente al de la leche materna).

Requerimientos en Fibra.- En principio, se puede mencionar que el conejo no utiliza


la fibra tan eficientemente como otras especies, como antes se creía. Sin embargo, esto
no quiere decir que el conejo no tenga necesidades específicas en fibra para conseguir
un crecimiento óptimo.

Por fibra cruda (FC) se le conoce a una serie de carbohidratos estructurales


(principalmente celulosa, hemicelulosa, lignina, etc...) o bien como fibra neutro
detergente (FND) a la celulosa, hemicelulosa, lignina y sílica en los forrajes (VanSoest,
1963), que son poco digestibles y que sirven además para dar volumen a la ración.

Aunque se ha señalado al conejo como un pseudorumiante, éste no utiliza la fibra tan


eficientemente como los rumiantes según la creencia. En sentido general, se pude decir
que el papel principal de la fibra en la dieta del conejo, es el de favorecer el libre
tránsito del alimento a través del tubo digestivo, principalmente por su fracción
indigestible. Una consideración importante al respecto, es la relación fibra-energía-
proteína. Es decir, cuanto más se ha aumentado el nivel de fibra de una ración más ha
disminuido el de energía, aumentando por consecuencia el consumo, por lo que también
habría que tomar en cuenta el efecto que sobre la utilización de la proteína tiene esta
relación (Cuadro 4.8). De todas formas, cuando el nivel de fibra se eleva excesivamente,
el conejo no tiene la capacidad de autorregulación para consumir la cantidad de
alimento necesario para mantener un consumo energético determinado, reduciéndose,
en consecuencia ésta y, de manera simultánea, el contenido de grasa de la canal.
La cantidad de FC que, por término medio deben contener los alimentos para conejos,
oscila entre 12 - 15%, aunque llega hasta el 20% en alimentos destinados a conejas
vacías y machos, y se reduce al 10% o menos en alimentos para animales en
crecimiento y engorda. 
Por último, la deficiencia de fibra en las raciones se manifiesta frecuentemente por
fenómenos de “pica” o tricofagia, caracterizada en esta especie, por comerse su propio
pelo o el de sus compañeros.

Cuadro 4.8. Comportamiento digestivo del conejo según los


niveles de proteína y fibra de la ración.
PC (%) FC (%) Comportamiento Digestivo
< 16 <12 peligro de diarreas
16 - 18 12 - 15 normalidad digestivacrecimiento normal
> 18 12 - 15 peligro de diarreas
> 18 < 12 Diarrea habitual

Necesidades en Grasa.- Al igual que la PC, FC, etc., las necesidades de grasa no están
bien estudiadas y los diversos autores dan cifras diferentes. No obstante, la mayoría de
los trabajos al respecto, indican que la cantidad de grasa de la ración puede oscilar entre
2 y 5%. No se considera conveniente superar esta cifra, ya que, como es sabido, las
grasas tienden fácilmente a oxidarse, produciéndose su enranciamiento que, aparte de
dar mal sabor a los alimentos, puede originar alteraciones en la nutrición.

La mayor parte de la grasa contenida en todo tipo de alimentos para conejos es de


origen vegetal. Únicamente en algunas ocasiones se incorpora algo de grasa animal (a
niveles de 0.5%) para mejorar la granulación, llegándose en tales casos hasta un 3% o
incluso hasta un 4% de grasa total.

Teniendo en cuenta que una elevación en la cantidad de grasa adicionada a un alimento


origina un aumento de su valor energético y, en consecuencia, una notable disminución
en el consumo, deben tenerse presente que simultáneamente deberá incrementarse el
nivel de otros nutrientes para evitar un descenso en la productividad.

Necesidades de Vitaminas.- Las vitaminas son necesarias en pequeñísimas cantidades


y participan en el metabolismo del animal, y su deficiencia en la dieta produce
trastornos serios y en algunos casos la muerte.

Aunque en la mayoría de los casos las necesidades vitamínicas del conejo no están bien
definidas, por lo que se aportan con un amplio rango de seguridad a fin de garantizar
una productividad óptima.

Los conejos adultos sintetizan en su intestino, como consecuencia de las fermentaciones


microbianas, vitamina C, y varias del Complejo B, las cuales se aprovechan para cubrir
sus necesidades mediante la cecotrofia. Por tanto, en conejos adultos no es común que
se produzcan carencias en estas vitaminas. No sucede lo mismo con los gazapos
lactantes, ya que la cecotrofia se inicia a partir de la 3a. semana de edad, y por
consiguiente, los alimentos destinados a estos animales deben aportar dichas vitaminas.
Por lo que respecta a las vitaminas liposolubles (A, D, E y K), la situación es diferente,
pues la ración deberá de contenerlas en cantidades suficientes, ya que no las sintetizan,
excepción hecha del la vitamina K, la cual es producida por acción de los
microorganismos del ciego. Aunque los animales que consumen algo de forraje fresco
todos los días, tienen cubiertas sus necesidades de estas vitaminas, y si son alimentados
exclusivamente con alimentos balanceados, ocurre lo mismo, ya que las contienen de
manera de micromezcla vitamínica - mineral.

Necesidades de Minerales.- Las necesidades de elementos minerales en el conejo son


altas. En ciertas fases, estas necesidades se agudizan y en algunas ocasiones, se ponen
de manifiesto por una alteración del comportamiento. Por ejemplo, las conejas en
lactación que no reciben suficiente sal (NaCl), se comen a sus crías. Por lo que al
formular raciones se deberá incorporal premezclas minerales y vitamínicas con el fin de
ponerlas a disposición del animal.

Alimentos para conejos

En un programa satisfactorio para la alimentación de los conejos, se deben considerar


tres requisitos fundamentales: que sea:

Sana.- Esto es, de buena calidad y de uso seguro, pues es la única manera de evitar
pérdidas por enfermedades, envenenamientos o producción baja.

Barata.- Pues el cunicultor debe utilizar aquellos alimentos que le son de más fácil
adquisición con el costo más reducido, y

Nutritiva.- Es decir, que llene los requerimientos nutricionales mínimos para


mantenimiento y producción.

Por otra parte, se requiere además que la alimentación sea completa y adecuada.

Es completa cuando contiene todos los nutrientes requeridos por el organismo, y


es adecuada cuando se proporciona en las cantidades que precisa el individuo para su
desarrollo, funcionamiento y producción.

Sistemas de alimentación

Existen diversas opciones para proporcionar alimentos a


los animales, de entre ellas están las siguientes:

Alimentos manufacturados comerciales.- También


conocidos como alimento balanceado de fábrica (Figura
4.3). El procesamiento de los alimentos para
administrarlos en forma a de pelet (pastillas), es muy
conveniente cuando se requiere facilitar el manejo del alimento, disminuir su
desperdicio y mejorar su aprovechamiento y conservación. Solo que resulta, por lo
mismo, ser mas caro que otras opciones de alimentación.

Figura 4.3. Ejemplo de una Formula Comercial


de Alimento Balanceado para Conejos

Alimentos no manufacturados,- Cuando se carece de alimentos de fabricación


industrial, o se desee evitar o reducir su empleo, habrán de buscarse otras alternativas
para el abastecimiento de los mismos, que se acomoden a las posibilidades y objetivos
de la explotación. Para tal caso se puede proceder de las siguientes formas:

a). Conseguir desperdicios alimenticios de fábricas de alimentos, panaderías,


restaurantes, mercados, cocinas caseras, etc.. Estos nutrientes pueden suministrarse a los
conejos, siempre y cuando se ofrezcan en condiciones totalmente higiénicas. Sin
embargo, no es recomendable para explotaciones industriales.

b). Comprar la totalidad de las materias primas y preparar las raciones en la propia


granja.

c). Producir en la granja las materias primas que sean posibles, como elementos

básicos de la ración. Sistema que podría considerarse como el ideal.

d).- Realizar combinaciones de algún alimento industrializado con otros alimentos.

Complemento de forrajes.- Como se ha mencionado antes, el forraje es muy


importante para el aparato digestivo de los conejos ya que el mismo funciona por
empuje y no como el de otros mamíferos que funciona por contracción. Esto quiere
decir que mientras el animal va comiendo va empujando el resto de la comida y va
digiriendo el alimento. Es por eso que los conejos comen durante todo el día y en
pequeñas cantidades de comida. El pasto del prado, la alfalfa y otros forrajes se les
denomina alimentos volumino-sos y son muy importantes para la salud del animal. Poco
a poco se puede acostumbrar a los animales a que consuman el pasto verde recién
cortado y sin orear, realmente les encanta y es un natural aporte de vitaminas que aparte
les produce más leche a las madres. Sin embargo, es muy importante que el forraje sea
de procedencia segura, hay que tener mucho cuidado con áreas que son rociadas con
pesticidas, insecticidas u otros agentes tóxicos.

Necesidades de consumo del conejo

El animal, requiere de cierta cantidad de alimento diario, que convertida en "ración",


cubra con sus requerimientos nutricionales. Dependerá, entre otras cosas,
principalmente del actual estado fisiológico y peso corporal; es decir, ya sea un animal
que esté en engorda porque se destinará para la venta de carne, o bien, es un animal en
estado de gestación o lactancia, o ambos; Así mismo, puede solo ser un animal
reproductor semental, etc.

En el cuadro 4.9, se muestra un ejemplo de las necesidades de consumo diario de esos


conejos expresados en Kg diarios de alimento por animal.

Cuadro 4.9. Necesidades de consumo del conejo en diferentes etapas fisiológicas

Recomendaciones para la adecuada formulación de raciones para conejos


en base a los tipos de alimentos disponibles

Dos son los sistemas que se pueden elegir para proceder a la elaboración de una dieta
alimenticia para conejos:

1. De manera manual, con el auxilio de una calculadora de bolsillo


2. Mediante el uso de programas de computo diseñados para este fin.

El primer sistema es, como puede comprenderse, el más sencillo, estando al alcance de
todo el que tenga los suficientes conocimientos en nutrición cunícola. En el segundo
sistema, es utilizado principalmente por los fabricantes de alimentos balanceados en el
que se busca la máxima competitividad de las raciones, es decir, su costo más bajo, así
como el máximo ahorro de tiempo en la formulación y la mayor elasticidad posible en
los cambios a realizar.

Concretando algo más acerca de esta primera elección de las materias primas que han de
integrar las raciones para los conejos, cabe indicar algunas restricciones alimenticias
que permitirían que el animal hiciera un uso más eficiente de los alimentos y evitaría
desperdicios y problemas digestivos en los animales.

1.- Generalmente los cereales suelen ocupar del 15 al 45% del total de la ración, son
alimentos aportadores de gran cantidad de energía, constituyendo los ingredientes más
importantes en la alimentación del conejo. Los más usuales son el maíz, el sorgo,
cebada, avena, trigo, centeno, etc.

2.- Los subproductos de molinería como son los salvados de trigo, sorgo, los glútenes y
gérmenes como el de trigo, maíz o arroz, en general tienen un valor nutritivo bajo con
un alto porcentaje de fibra y solo un poco superior en proteína que los cereales.
Además, son materias en las que el calcio y el fósforo se hallan en diferente proporción
Ca:P. Por lo que es recomendable no administrar más del 30%.

3.- El empleo de forrajes secos cubre un importante papel en la alimentación del conejo,
y aunque se consideran forrajes secos numerosos productos del grupo de las gramíneas
(hierba) y del de las leguminosas (trébol, frijol, cacahuate, soya, etc…) el heno de
alfalfa y la alfalfa deshidratada son los forrajes por excelencia para conejos, ya sea que
se incluya en la elaboración de alimentos balanceados o como ingrediente aparte. La
alfalfa es importante por su aporte en proteínas y en especial por el buen valor en lisina
y otros aminoácidos a excepción de los llamados azufrados como la metionina y la
cistina, en los que es limitante. Su alto contenido en celulosa, permite alcanzar
fácilmente los mínimos precisos para el buen funcionamiento digestivo del conejo. Su
aporte mineral en potasio (2.5%) y en calcio (1.40 a 1.45%) es elevado, lo que es
preciso tener en mente el momento de balancear la ración, por lo que se recomienda se
incluya en las raciones desde un 20 hasta un 50%, sobre todo para animales en engorda,
reproductores y reemplazos.

4.- Las pastas oleaginosas son fuentes excelentes de proteína, pudiéndose llegar en
algunas de ellas (como la soya) a valores similares a los de las harinas animales.
Aunque por su procedencia y tratamientos, su composición nutricional es cambiante, ya
que son el producto de la extracción del aceite para consumo humano y se someten a
diferentes procesos químicos y/o físicos. Las diversas tortas oleaginosas pueden ser
utilizadas, considerando lo anterior, desde un 10 a un 20% del total de la ración.

5.- Otros productos alimenticios como la melaza, forrajes ensilados, pajas y henos, así
como los ingredientes de origen animal y mineral son recomendables solo cuando se
utilizan en pequeñas proporciones, ya que la melaza, por ejemplo, su contenido de
humedad hace que su empleo sea complicado para el consumo de los conejos, lo que
limita su empleo a no más de un 5%, ya que cantidades mayores ocasionan diarreas a
los animales. En cuanto a los ensilados, su contenido de agua hace que el conejo los
consuma bien, sobre todo en épocas de calor, sin embargo en épocas de frío, su
consumo limitaría el de concentrado o alimentos proteicos que desbalancearían la
relación fibra:energía:proteína, pudiendo con esto causar trastornos digestivos a los
animales. En general, se recomienda utilizarlos con moderación de acuerdo con el
comportamiento del animal.

6.- Los productos de origen animal como las harinas de pescado, de carne y hueso de la
industria avícola, de sangre, y lácteos se utilizan en la alimentación del conejo siempre y
cuando no representen un problema para balancear la ración y llenemos sus
requerimientos sin causar ningún trastorno digestivo. Sin embargo, se recomienda su
utilización entre un 5 y un 10% en la dieta.

7.- Las grasas y los aceites proporcionan el mayor aporte de energía en los alimentos,
sin embargo, para la alimentación adecuada del conejo, es recomendable, el uso de
fuentes carbohidratadas (granos de cereales) para cubrir sus necesidades de energía, ya
que el bajo requerimiento de energía de los conejos y el manejo complicado de los
sebos, mantecas y aceites, hace que las dietas sean difíciles de elaborar, por lo que se
recomienda se utilicen en no más de un 5% y protegidos con algún antioxidante, como
por ejemplo la vitamina E, u otros sintéticos comerciales, para evitar el enranciamiento
y posterior intoxicación de los animales.

8.- Las fuentes minerales que aportan calcio y fósforo como la harina de huesos, el
carbonato cálcico, roca fosfórica, concha de ostras, etc.. se utilizan en las dietas para
conejos en un 0.2 a un 2%.

9.- La sal común, es un producto totalmente necesario en toda clase de dieta como
aportador de dos elementos importantes, el cloro y el sodio. Además de utilizarse
yodatada, lo que aporta el yodo necesario apara el animal. Se utiliza de manera general
de un 2 a un 5%. Y actúa como in controlador de consumo.

10.- Aditivos no alimenticios, como los antibióticos, premezclas vitamínicas y


minerales y otros, se acostumbran cuando se considera que los animales requieren de
suplementar sus dietas con ellos para protegerlos de alguna posible enfermedad o
deficiencias en minerales y vitaminas, etc.. Generalmente se utilizan de acuerdo con la
recomendación del fabricante y vendedor de fábrica, por lo que su inclusión en el
alimento es con esa base.

La formulación manual de raciones se basa en la realización de todo un conjunto de


operaciones más o menos laboriosas con un fin, el conseguir la combinación más
económica de las materias primas disponibles para cubrir lo más exactamente posible
(es decir, sin exceso ni deficiencia) las necesidades nutritivas de los conejos.

Lo primero que el formulador deberá plantearse es anotar todas las materias primas de
que pueda disponer con regularidad y sus precios, elaborando una lista con aquellos
que, en principio, le parezcan más interesantes por su relación calidad/precio, y sin
olvidar las consideraciones en cuanto a las restricciones alimenticias. Y contar con las
tablas de requerimientos nutricionales de los animales de acuerdo con su situación
fisiológica actual (Ver cuadros 4.6 y 4.9), por ejemplo, si se encuentra en gestación, en
lactación, o si solo está vacía o sea, en mantenimiento, si es semental, o si son gazapos
que están en engorda, etc., aunque sea solo las necesidades de energía, proteína, fibra,
calcio y fósforo.

Existen varios métodos para diseñar dietas alimenticias que cubran con las
características de ración para los conejos, por ejemplo la del tanteo, la del Cuadrado de
Pearson, el uso de programas de computo como el Mixit, el Nutrion, etc. Sin embargo,
el más a la mano se encuentra el método del tanteo, porque, como su nombre lo indica,
consiste en ir "tanteando" las cantidades de los diversos insumos que incluiremos hasta
llegar a la dieta que llene los requerimientos del animal. Y como se dijo antes, aunque
solo sea en cuanto a proteína, energía, calcio y fósforo.

Ejemplo:

Supongamos que decidimos elaborar nuestro propio alimento balanceado, pues resulta
que el comercial se ha puesto muy caro, además de que las materias primas son fáciles
de conseguir. Lo primero que debemos hacer es investigar cuales son sus
requerimientos nutritivos. Enseguida, checamos los aportes nutricionales de los
ingredientes con los que contamos, así como su precio por kilogramo. Todo esto lo que
podemos consultar en libros o tablas.

Entonces, vamos a alimentar a conejos que vamos a engordar para vender su carne.
Estos pesarán al final 2.20 Kg, y consumirá en promedio 130 g/día. Entonces, unos 150
animales que vayamos a sacar en una primera ocasión, requerirán de la preparación de
por lo menos, 20 Kg de alimento/día. Y como serán 30 días en promedio, tendremos
que preparar 600 Kg para toda la etapa de engorda. (Sin considerar mortalidad). Los
requerimientos según el Lebas (1980) para animales para engorda, que son los que se
encuentran en crecimiento desde el destete a las 4 semanas de edad hasta el sacrificio
que son entre 8 y 12, según la preferencia del productor, son:

Nutrientes   
Nutrientes (%) Energía Digestible
(Kcal/día)  
Proteína Cruda 15.00
Metionina +  
00.50
Cistina
Lisina 00.60 2500  
Fibra Cruda 14.00
 
Calcio 00.50
Fósforo 00.30  

Y los ingredientes que utilizaremos para formular la ración y sus aportes nutricionales
son:
Notación:
Hum.= Contenido de Humedad; MS = materia seca.- libre de agua; Cen = Cenizas =
minerales totales; PC = Proteína cruda;
E.E. = Extracto etereo = Grasas; FC = Fibra cruda; ED = Energía digestible; Ca =
Calcio; PT = Fósforo total; 
Met + Cist.= Metionina + cistina.
* = Fecha de compra.-= 15-04-2002.

Ahora bien, multiplicado lo tanteado por cada uno de los aportes nutritivos y los
precios, quedará de la siguiente manera:

Por lo tanto, los 600 kilogramos que prepararemos en total (20 Kg/día x 30 días) nos
costarán $1,800.00. Y si los dividimos entre los 150 conejos, nos costará producir carne
de engorda $12.00/animal, solo por concepto de alimentación.

La necesidad nutricional de los conejos en engorda (Cuadros 4.5. y 4.6), se puede haber
pasado, pues nuestra dieta proporciona 2747 Kcal/Energía digestibe/Kg, cuando el
requerimiento es de tan solo 2500, el de proteína fue de 17%, cuando se recomienda
entre 15 y 16%, la fibra, fue de 11.33%, cuando las tablas presentan entre 10 y 12%, etc.

Ahora bien, no importa que no hayamos excedido un poco, lo importante es que se


cumpla más exactamente con lo observado en el cuadro 4.8 de la página 58. En donde
se indica la relación que deben guardar la proteína y la fibra, con el fin de no causar
trastornos digestivos, que no impedirían tener un adecuado proceso de crecimiento-
engorda de los conejos.

Por ello, con esta dieta, nos situamos dentro de lo que marca como entre 16-18 % de
proteína y 12-15 de fibra, para tener una adecuada digestión de los alimentos.

En fin, si la fórmula anterior no hubiera satisfecho las necesidades de los animales, o


por el contrario, las hubiera satisfecho en una forma exagerada (incrementando los
costos), hubiera sido necesario cambiar los ingredientes o seguir trabajando con los
mismos, regulando las cantidades en la ración hasta encontrar el más adecuado.

Así mismo, se encontrarán por toda la literatura existente, recomendaciones y resultados


del comportamiento de los animales alimentados con diferentes dietas y que han dado
buenos resultados, por ejemplo, Templetón (1976), presenta lo siguiente:
 

Alimentación necesaria
para producir gazapos de
2 Kg a base de
concentrados y alfalfa.
(4.4 kg de pellet´s y 1.86
kg de alfalfa)

Alimentación necesaria
para producir gazapos de
2 Kg a base de granos
enteros y alfalfa. (4.6 kg
de pellet´s y 1.96 kg de
alfalfa)

Alimentación necesaria
para producir gazapos
de 2 Kg a base de pellet
comerciales solamente.
(7.76 kg de pellet´sde
alimento concentrado)

 
 

Precauciones en el manejo de los alimentos

El cunicultor deberá tener cuidado especial de los alimentos destinados para sus
conejos, vigilará la calidad de todos los que utilice en la alimentación de sus animales y
desechará, por defectuosos y dañinos los que presenten las siguientes anomalías:

1. Granos o forrajes tratados con insecticidas


2. Granos plagados de insectos y hongos
3. Forrajes atacados por hongos, en especial deben evitarse las plagas por el cornezuelo.
4. Granos o forrajes contaminados por el excremento de otros animales, los sucios de
tierra o roídos por ratas.
5. En los alimentos balanceados y los derivados industriales, el envase no deberá
presentar rasgaduras o roeduras, el cerrar debe ser perfecto.

En el conejar habrá un lugar destinado a la reserva de alimentos; procurando que sea un


local amplio, seco, limpio, y bien ventilado, al que no tengan acceso insectos, roedores
o animales domésticos.

Interacción Nutrición-Reproducción

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