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PROBIÓTICOS

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PROBIÓTICOS

Un poco de historia …

En todas las culturas, el hombre ha consumido alimentos fermentados, para transformar


materias primas perecederas, en alimentos estables desde el punto de vista
microbiológico, con alto valor nutricional y beneficios fisiológicos (vino, cerveza, quesos).

Además, son alimentos muy digeribles, ya que los que son difíciles de digerir son
transformados en sustancias asimilables.

Fermentación
Se entiende por productos fermentados, el resultado final de una serie de
transformaciones que requieren intervención de levaduras o bacterias lácticas (bacterias
gram +, que fermentan el azúcar produciendo ácido láctico).

Las tecnologías de producción actuales, han alterado el contenido microbiano (en


cantidad y calidad) y por ende sus efectos benéficos.

Metchnikoff, médico búlgaro sugirió el consumo de leche ácida para contrarrestar la


sintomatología de varias patologías – Esto, debido a que los campesinos búlgaros
consumían grandes cantidades de este producto y eran muy sanos y longevos.

En 1903 propuso el consumo de bacterias lácticas para reducir los problemas intestinales,
mejorar la higiene digestiva e incluso aumentar la esperanza de vida.

En la década de los 60 se define el término probiótico, contraponiéndolo al concepto de


antibiótico – es decir, si el Ab cura una infección matando bacterias patógenas, el Pb
previene o controla el problema, enriqueciendo la flora intestinal con bacterias a favor de
la fisiología normal.

A medida que la investigación en probióticos fue avanzando y confirmando su validez, la


OMS a través de la FAO en el 2001, formaron un Comité de Expertos en la materia y se
llegó a un consenso en relación a la definición de probióticos, siendo este:
“Microorganismos vivos los cuales, al ser administrados en cantidades adecuadas,
confieren efectos benéficos en la salud del huésped”.

Son considerados reguladores biológicos.


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Flora Bacteriana (Microbiota)


Es un complejo ecosistema en el que muchas especies de bacterias viven en relación
simbiótica.

Cuidando la alimentación en forma permanente (a lo largo de la vida) se promueve la


mantención de esta flora, pero ante la presencia de un desorden intestinal, es necesario
una terapia para administrar productos que contengan estos microorganismos.

La flora intestinal, tiene variaciones a lo largo de la vida. Por ejemplo, el tipo de parto
determina la flora cuali y cuantitativamente – un RN nacido de parto, tiene una flora más
fisiológica que un RN nacido por cesárea, por ende, su inmunidad no es la misma
(estadísticamente, un niño nacido por
cesárea, sufre más enfermedades en su
primer año de vida, que un niño nacido
por parto).

También la alimentación determina la


flora. Un lactante alimentado con leche
materna contiene en su flora, más
cantidad de lactobacilus y
bifidobacterium, que uno alimentado
con fórmulas maternizadas. Esto
repercute directamente en su estado
inmunitario.

Esta flora habitual, cumple roles específicos en los procesos de salud y enfermedad tanto
benéficos como nocivos.

Por ejemplo, el E. Coli (microorganismo propio de nuestra flora) sintetiza vitamina K


como efecto benéfico, pero al mismo tiempo algunos elementos ingeridos, pueden ser
transformados por la actividad metabólica de estas bacterias, en compuestos
carcinogénicos – Ej. : el endulzante ciclamato es transformado en ciclohexamina, un
compuesto carcinógeno para la vejiga.
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Estimulación Inmune

Nuestro abundante número de inmunoglobulinas circulante refleja en parte, la


estimulación antigénica constante de la flora intestinal. Es decir, debemos a la flora,
nuestra capacidad de responder frente a estímulos antigénicos.

En general, no existen niveles muy altos de anticuerpos contra las bacterias, virus y
hongos que habitan en nuestro cuerpo, sin embargo, este bajo contenido de anticuerpos
es suficiente para mantener una vigilancia suficiente contra la posible invasión a los
integrantes de la flora y al resto del organismo.

Entonces, la estimulación del sistema inmune, es un claro beneficio que nos brinda la flora
intestinal.

Participación en el sistema inmune?? – Por mucho tiempo se habló de esta


participación, pero también se ha puesto en duda como algo determinante.

En los últimos años, se ha concluido que esta participación es concreta y se ha


demostrado mediante algunos hechos:

Las bacterias del tracto digestivo producen antígenos que reaccionan en forma cruzada
con las sustancias propias del organismo. Esto hace que este proceso constante, estimule
la formación de anticuerpos, pero este tipo de reactividad generalmente no produce
enfermedades.

Pero en casos como el Lupus Erimatoso (LES), se forman anticuerpos contra el ADN. Se
tiene claro que estos anticuerpos no se han formado contra el propio ADN, sino por
estímulo antigénico de las bacterias de la flora intestinal. Entonces, este tipo de
enfermedades autoinmunes, que siempre estuvo catalogada como una alteración
inicialmente ocurrida en el tejido colágeno, al parecer tiene su origen en algún proceso de
la flora bacteriana.

Eliminación de invasores – Este fin, es logrado por la flora mediante:

- La mantención del nicho ecológico ocupado (tanto espacio como sustratos),


impidiendo de esta manera la colonización por parte de otras bacterias. Este
proceso se altera cuando se “barre” el microbiota con Ab.
- Algunas de las bacterias son capaces de producir sustancias que inhiben el
desarrollo de otras que tratan de colonizar, a través de la producción de
“antibióticos” o proteínas letales, llamadas bacteriocinas.
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En el tracto digestivo, sólo se considera colonizada la cavidad bucal y el colon - aunque se


sabe que el esófago y la última porción del íleon (intestino delgado), también tienen una
colonización parcial.

En el caso del estómago, continuamente hay bacterias, pero no llegan a colonizar debido a
las condiciones inapropiadas y agresivas, como el pH.

PROPIEDADES DE LOS PROBIÓTICOS

• Seguridad biológica: Deben ser capaces de cumplir su objetivo sin causar


infecciones.

• Ser de proveniencia intestinal – Es decir, las cepas originales deben haber sido
extraídas del intestino humano y por lo tanto muy bien toleradas por el sistema
inmunitario del huésped.

• Capacidad de resistir la acción de ácidos gástricos y sales biliares, para llegar vivos
al intestino y poder ejercer su acción terapéutica.

• Alta capacidad de adherencia a la mucosa intestinal, para lograr una óptima


colonización.

• Compatibilidad y sinergia con la flora endógena, sin modificarla.

• Efecto barrera: capacidad de producir sustancias con acción trófica del epitelio, es
decir, que ayudan a la mantención de la buena calidad del tejido intestinal, buena
calidad celular (recordemos que si las células tienen membranas de buena calidad,
serán mucho más difíciles de colonizar, por ejemplo por virus). Además, si el tejido
llega a estar afectado por inflamaciones o lesiones, podrá regenerarse más rápido
y más efectivamente.

• Capacidad de potenciar las defensas inmunitarias del huésped (por los procesos
inmunitarios que se revisaron antes).
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EFECTOS SALUDABLES DE LOS PROBIÓTICOS

A nivel digestivo

- La flora probiótica aporta enzimas que contribuyen a la proteolisis y lipolisis, por lo


tanto, el proceso digestivo se ve favorecido. Las posibilidades de que algún
alimento sea mal tolerado, es menor.

- Síntesis de vitamina K y algunas del complejo B. Algunas bacterias probióticas


requieren para su actividad metabólica, vitaminas del complejo B (por lo que se
justifica la asociación de vitaminas con probióticos).

- Intolerancia a la Lactosa - Es causada por una deficiencia en la enzima lactasa, a


nivel intestinal, por lo que hay imposibilidad de digerir esta azúcar. En estos casos
la lactosa llega intacta al colon donde es fermentada por las bacterias de la flora
colónica con producción de agua, gas metano e hidrógeno, lo que da lugar a la
sintomatología típica de mala absorción de azúcares: meteorismo, dolor
abdominal y diarrea - Generalmente las personas que no toleran la leche toleran el
yogurt. Esto es porque el yogurt contiene probióticos, principalmente lactobacilos,
los que transforman la lactosa en ácidos orgánicos como el láctico. Además,
algunos probióticos inducen la producción de lactasa después de ser ingeridos
oralmente y podrían facilitar la digestión de lactosa en tramos altos del intestino
delgado.

- SII (Síndrome de Intestino Irritable) - La inflamación de la mucosa intestinal, propia


de este síndrome, se ve disminuida ante la presencia constante de probióticos,
debido a que éstos contribuyen a inhibir la producción de mediadores
inflamatorios locales, específicamente Interleuquinas IL 3 – IL6 y FNT (Factor de
Necrosis Tumoral)

- Erradicación de Helicobacter Pylori - Estudios recientes demuestran que algunos


probióticos poseen actividad antimicrobiana a través de la secreción de
componentes antibióticos (bacteriocinas).

- Además, se ha demostrado que poseen una proteína en su superficie celular que


inhibe la unión del Helicobacter Pylori a los receptores de la mucosa gástrica, lo
que impide la colonización por dicha bacteria.

- Efecto secundario común al uso de Ab y puede ocurrir hasta en el 40% de los niños
que reciben antibioterapia de amplio espectro.
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- Diarrea asociada al uso de Anti bióticos - Los Pb son una gran alternativa para
minimizar esta alteración. En niños y adultos se ha demostrado que la
administración de Saccharomyces boulardii y Lactobacillus (diferentes cepas)
reducen la duración e intensidad de la diarrea. También se pueden utilizar como
un agente para prevenir o disminuir la ocurrencia de la diarrea asociada a
antibióticos.

- Además, la flora tiene influencia sobre la anatomía y la fisiología del aparato


digestivo, logrando:

- Aumento del volumen de los compartimientos digestivos (viscerales) facilitando los


procesos digestivos.

- Aumento de la superficie de absorción.

- Aumento de las dimensiones de la microvellocidades contribuyendo también a


mejorar la absorción.

- Aumento de la motilidad intestinal, por ende, normalización del tránsito digestivo.

Erradicación de Gérmenes patógenos

- Producción de ácidos orgánicos como el Ac. Láctico a partir de los glúcidos,


acidificando el pH y limitando la proliferación de algunas especies patógenas.

- Producción de una sustancia denominada bacteriocina, la que reprime el


crecimiento bacteriano en forma selectiva (antimicrobiano endógeno).

- Competición por nicho ecológico – espacio, sustratos.

Estimulación Inmune

- Al parecer se ve favorecida tanto la inmunidad primaria (inespecífica)como la


específica (producción de anticuerpos), por la presencia de las bacterias
probióticas.

- Aunque el mecanismo específico es aún desconocido, se ha probado que estimulan


la actividad de los macrófagos (¿Químicamente? Aunque no está comprobado aún)
y estimulan también la producción de algunas Ig (inmunoglobulinas).

- Esto último está más descrito en las bacterias lácticas (como el lactobacilus) que en
las levaduras (dato muy bienvenido para nosotros a la hora de referirnos a este
tema en la promoción de Biolactus por ejemplo).
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Alergias

- Los alergenos pueden provocar una respuesta pro-inflamatoria en el intestino que


las bacterias probióticas podrían prevenir:

- Corrigiendo el desbalance de linfocitos (tipo de glóbulos blancos participantes en


este proceso).

- Estimulan a las sustancias mediadoras de la inflamación, que son supresoras de los


eventos proinflamatorios del intestino.

- Además algunos de los lactobacilos y bifidobacterias usados como probióticos


regularían la producción de IgA e IgE.

Infecciones del tracto vaginal

- Varias especies de lactobacilos han demostrado eficacia clínica en el tratamiento


de infecciones vaginales, aplicados en forma local.

- Los mecanismos de acción que explicarían esta utilidad se basan en la capacidad de


los lactobacilos de adherirse y colonizar el tracto urogenital, previniendo e
impidiendo el crecimiento de gérmenes patógenos.

- Estimulan un ambiente ácido, lo que impide el crecimiento de otras especies


bacterianas.

Cáncer colo - rectal

- Estudios indican que los probióticos serían de utilidad en prevenir el cáncer


colorrectal, mediante la producción de ácidos grasos de cadena corta, los cuales
acidifican el medio ambiente - Un pH bajo se asocia a menor riesgo de cáncer
colorrectal.

- También se ha observado que las bacterias probióticas reducen el nivel de enzimas


pro-carcinogénicas.

Beneficios específicos según cepa:


- Propionibacterium : propiedades antiinflamatorias.

- Strep. Thermophilus : reduce los síntomas de la mala absorción debido a las


diarreas agudas y tiene gran acción anticolonización del H. Pylori.
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- Bifidobacterium : (flora predominante en los niños alimentados con leche


materna) – disminuye la capacidad viral de colonización celular.

- Lactobacilus Bulgaricus - Ayuda a la proliferación de las bifidobacterium – efecto


barrera – gran producción de bacteriocina.

- Lactobacilus Cassei – Potente acción antidiarreica.

- Lactobacilus Plantarum - Gran producción de bacteriocinas.

- Lactobacilus Acidophilus – Acción específicamente antagonista sobre : E. Coli, C.


Perfringens. St. Aureus, Salmonella y Shighella S. – Hay estudios que respaldan sus
efectos positivos en diarreas por radio y quimioterapia – Fortalecimiento del
sistema inmune.

PROBIÓTICOS NATURALES

• Son los que están presentes en lácteos fermentados (yogurt, leche y quesos) -
vegetales fermentados (chucrut, cereales) y bebidas alcohólicas artesanales.

• Su uso es difícil para condiciones terapéuticas, porque necesitan almacenamiento


a bajas temperaturas y tienen una vida media limitada.

• La biomasa contenida es muy baja (habría que consumir varios litros de yogurt
cada día, por ejemplo, para obtener efecto evidente). Pueden ser parte de una
alimentación sana, pero sin esperar eficacia terapéutica.

PROBIÓTICOS COMERCIALES

• Son los probióticos naturales pero incorporados en mayor cantidad a algún


producto alimenticio, por ejemplo yogurt en formato comercial, obtenido a partir
de diferentes cepas de microorganismos, y algunas leches maternizadas

• Suplementos alimenticios con probióticos:

Son microorganismos viables, en forma seca, incorporados en gránulos o


cápsulas. Su distribución se rige por criterios de las leyes de alimentos, no de
medicamentos
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EN ODONTOLOGÍA

• Los microorganismos probióticos también pueden desarrollar un papel importante


a nivel odontopediátrico como, por ejemplo, la disminución en el recuento salival
de unidades formadoras de colonias de S. mutans (microorganismo mayormente
responsable de la producción de caries).

• Algunos probióticos son capaces de incorporarse y crecer junto a la flora autóctona


de la placa supragingival, disminuyendo la posibilidad de colonización de
microorganismos cariogénicos.

• Un estudio de 2008 encontró que las muestras de especies distintas de


Lactobacillus tomado de la boca de sujetos sanos, tienen la capacidad de bloquear
el desarrollo de determinadas bacterias patógenas. Un efecto bacteriostático
contra los principales agentes de la periodontitis.

• Es sabido que los probióticos se adhieren a la mucosa, lo que limita las


posibilidades de la colonización por levaduras del género Candida.

• El Lactobacillus produce una sustancia antifúngica capaz de inhibir el crecimiento


in vitro de Candida.

• La estomatitis aftosa es una reacción inflamatoria de los tejidos hacia algún


estímulo (lesión, estrés, cambio brusco de pH, etc.) por lo que la presencia
adecuada de microbiota, amortiguaría estos estímulos e impediría este tipo de
lesiones, además de prevenir la sobrecolonización por bacterias u hongos.

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