Ensayo Final Electiva Tovar Ortega

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 8

UNIVERSIDAD EXTERNADO DE COLOMBIA

FACULTAD DE CIENCIAS SOCIALES Y HUMANAS


ELECTIVA: CULTURA Y PODER EN AMÉRICA LATINA
2021-2
Daniela Tovar Ortega

-Dime una cosa compadre: ¿Por qué estás peleando?

- ¿Por qué ha de ser compadre? Contestó el coronel Gerineldo Márquez- Por el gran partido liberal.
-Dichoso tú que lo sabes- contestó el – Yo, por mi parte, apenas ahora me doy cuenta de que estoy
peleando por orgullo.
Gabriel García Márquez

Latinoamérica: la historia de una lucha interminable.

Y así esta es la relación de cómo todo estaba en suspenso, todo en calma, en silencio;
todo inmóvil, callado y vacía la extensión del cielo. Esta es la primera relación, el primer
discurso. No había todavía un hombre, ni un animal, pájaros, peces, cangrejos, árboles,
piedras, cuevas, barrancas, hierbas ni bosques: Sólo el cielo existía.

Es esto lo que nos dicen textos sagrados como el Popol Vuh; quizá el silencio y la
calma marcan el inicio de sucesos importantes. Desde mi perspectiva este pequeño
fragmento y en general este texto son una metáfora aplicable a lo que vino después en
la lucha en América Latina, es decir una catástrofe inminente como lo fue la conquista y
el despojo a nuestros ancestros.

Durante esta época se vivía en relativa paz (o eso queremos imaginar) algunos
pueblos del continente como los Incas en el Perú tenían una economía propia y
sostenible, estaban organizados en comunas agrícolas en las que se buscaba el
bienestar social y alimentario de toda la población, según Mariátegui (1928) los Incas
sacaban toda la utilidad social posible de esta virtud de su pueblo, valorizaban el vasto
territorio del Imperio construyendo caminos, canales, etc., lo extendían sometiendo a su
autoridad tribus vecinas. El trabajo colectivo, el esfuerzo común, se empleaban
fructuosamente en fines sociales.

Este tipo de cuestiones no son ajenas al resto del sur de América y esto se puede
corroborar al hablar de los Muiscas - luego de la conquista conocidos como Chibchas-;
su organización social, económica y política fue evidente durante mucho tiempo en el
altiplano cundiboyacense colombiano. Como muchos otros grupos de la región ellos se
destacaban por organizarse en cacicazgos, especializarse en actividades como la
orfebrería, practicar el trueque, cultivar ciertos alimentos como la papa y cuidar la
naturaleza especialmente la laguna de Guatavita, la cual tiene una historia tortuosa que
evidencia la lucha por el poder por cierta época, lucha que está presente en cada
aspecto de la historia latinoamericana y por ende colombiana.

El despojo a América del sur:

Durante los siglos en los que se llevó a cabo la colonización en América Latina se
empiezan a evidenciar procesos de invasión, expropiación e imposición de la
cosmovisión de españoles hacia pueblos indígenas, por esto mismo, es importante
decir que muchos procesos -si no fueron todos- se llevaron a cabo de forma
exageradamente violenta por lo que varios de estos pueblos lucharon fuertemente para
defender su territorio lo que terminó en ríos de sangre; la situación se agudiza cuando
en el siglo XV la Corona de Castilla da licencia para traer a América cargamentos de
africanos esclavizados y torturados en cientos de barcos para empezar a explotar las
riquezas encontradas en América del Sur

En los siguientes siglos se evidencia fuertemente un entrevere cultural impuesto y


también natural por la mezcla que se estaba dando durante la época; por esto mismo
es pertinente comentar que las corrientes estéticas y filosóficas europeas llegaban
junto con la miseria traída por los colonizadores, un claro ejemplo de esto es la
corriente artística Barroca la cual tuvo cabida en esta sociedad y generó una serie de
movimientos sociales silenciosos, los cuales eran protagonizados por unos cuantos, en
parte como es sabido en el siglo XVII un pequeño grupo de personas tenían acceso al
conocimiento, parte de este grupo eran los miembros de la iglesias así como Sor Juana
Inés de la Cruz marca un antes y un después en el desarrollo literario ya que no sólo
nos mostraba el desacuerdo que tenía ante la situación social en el México colonial
sino también usó su voz para expresar su descontento con el trato dado a las mujeres,
así es como oímos resonar el famoso “hombres necios que acusáis a la mujer sin razón
sin ver que sois la ocasión de lo mismo que culpáis: si con ansia sin igual solicitáis su
desdén,¿ por qué queréis que obren bien la incitáis al mal?” lo cual nos demuestra
actualmente que no sólo se trataba de desamor -como se dijo en muchos momentos-
sino de algo más, un sentimiento que inquietaba a los que sin decir nada pensaban que
la situación no era justa para nadie, y es que cabe preguntarnos ¿A quién le parece
justa la opresión y el exterminio de un grupo social en específico? O ¿Por qué la
dominación y el poder están inmersos en la sociedad? Es aquí donde es pertinente
recordar que el poder es la capacidad que se tiene de hacer cosas y la potencia de
causar efectos por medio de la legitimidad, la autoridad y la hegemonía, en esta caso
se expresa a través de la violencia y el control que tiene un grupo sobre otro.

El concepto de poder se evidencia en todos los aspectos de la vida y no es ajeno a


todo lo sucedido en la época colonial, durante estos siglos la Corona de Castilla
demuestra la grandeza que tiene e intenta reivindicarse a los ojos del mundo y es así
como España impone una división político-administrativa en la que se encuentran
cuatro virreinatos principales: Nueva España, Nueva Granada, Perú y Río de la Plata;
estas fragmentaciones evidencian que como plantea Segato (2007) se cortan los hilos
que entretejían las historias familiares y que daban continuidad a una trama ancestral.
El «crisol de razas» fue la figura que garantizó esa opacidad de la memoria, un proceso
que aún no termina y es que como plantea esta misma autora, la colonización dio lugar
al racismo sistémico el que sigue vigente en la sociedad actual y no sólo tiene que ver
con el color de nuestras pieles sino con nuestras raíces, con la marca que dejaron
nuestros ancestros en nuestros cuerpo, la marca del indio o del africano es una huella
indeleble de su subordinación histórica, es precisamente la huella de los pueblos
despojados de América Latina y África.

Según esta autora (2007) la raza alude también a la creación del trazo de la historia
otrificadora que hizo posible la noción de «raza» para constituir «Europa» como idea
epistémica, económica, tecnológica y jurídico-moral que distribuye valor y significado
en nuestro mundo, es debido decir que esta idea ha permeado generaciones enteras y
es por esta razón que al ser conscientes de nuestras historia y nuestro lugar podemos
cambiar el mundo sin intentar blanquear nuestras raíces porque quitar lo indio de las
sociedades latinoamericanas es para los ricos una forma de progreso o desarrollo y no
es algo que debamos permitir.

Independencia- ¿En realidad somos un continente independiente?


.

¡Bajarse hasta los infelices y alzarlos en los brazos! ¡Con el fuego del corazón deshelar la América coagulada!
¡Echar, bullendo y rebotando, por las venas, la sangre natural del país! En pie, con los ojos alegres de los
trabajadores, se saludan, de un pueblo a otro, los hombres nuevos americanos

Las luchas por la independencia en América Latina se gestaron poco a poco, mientras
que América del norte se lograba independizar de Inglaterra luego de una guerra
llevada a cabo durante más o menos una década, en Francia estallaba la famosa
Revolución burguesa de1789, la revolución francesa; ésta empezó a ser un gran
ejemplo para los criollos intelectuales en el sur y el centro de américa, por lo que
aprovechando la invasión de Napoleón Bonaparte a España se creó una Junta de
Gobierno, y a su imagen se formaron otras tantas en las provincias de Ultramar: en
Quito, en México, en Caracas, en Buenos Aires, en Cartagena y en Santafé se abrió
así la etapa agitada, confusa y tragicómica (Caballero, 2017) los criollos hacendados e
intelectuales empezaban a hablar de la revolución americana y francesa como un
chisme de pasillo que aunque sólo eran ejemplos más adelante se convertirían en
realidad.

A pesar de tener esto en cuenta es fundamental plantear que los ideales de


independencia se empiezan a tener en mente por una aspiración al poder político por
parte de las élites criollas las cuales siguiendo el llamado de Francisco Miranda se
levantan en cadena “Con los pies en el rosario, la cabeza blanca y el cuerpo pinto de
indio y criollo, venimos, denodados, al mundo de las naciones. Con el estandarte de la
Virgen salimos a la conquista de la libertad” Martí nos decía esto en su pequeño texto
Nuestra América y ese grito de lucha por la libertad más pronto que tarde se daría, pero
lo que no se sabía era que siglos después otras generaciones seguirían buscando la
libertad que se nos robó, porque es debido decir que, aunque se gestó la
independencia de España estaríamos atados años después a otras potencias
económicas.

Como es sabido el 20 de julio de 1810 se declara la independencia en Santa Fe, pero


es sabido que durante 5 años se lleva a cabo una lucha interminable por el poder entre
criollos ya que algunos como Antonio Nariño proclamaban la necesidad de convertir la
nación al centralismo, pero por otro lado Camilo Torres expresaba su apoyo al
federalismo, situación que genera cierta cantidad de guerras civiles lo que genera
debilidad estructural y se genera la reconquista de 1815 a 1819.

El 7 de agosto de 1819 se da la Batalla del Puente de Boyacá, la cual es el comienzo


formal de la Independencia de España. Diez años de sainete y de sangre como diría
Antonio Caballero; me parece necesario decir que, aunque se pensaría que es el inicio
de una era tranquila evidentemente no es así, por esta época se evidencian diversos
conflictos entre provincias, cambios de nombres excesivos, luchas interminables por el
poder, la dirección y la identidad, desde mi perspectiva fue una forma de parecerse a
su verdugo.

Según Segato (2007) El efecto de la lucha sobre la identidad de las elites criollas
latinoamericanas fue perturbador: «la idea del hemisferio occidental estaba ligada al
surgimiento de la conciencia criolla, anglo e hispánica». La conciencia criolla blanca
(sajona e ibérica) fue heredera de los colonizadores y emigrados. «Nuestra América»,
como la llamaría más tarde Martí, y la idea de «hemisferio occidental» es así que se
puede decir que el eurocentrismo estaba respirando en la nuca, y es que, aunque hubo
un grito de independencia los negros e indígenas seguían considerándose como
inferiores en la población de la época, fueron borrados de su propia historia y nunca
hubo reparación consciente.

Es por eso por lo que se dice que El Estado que ejerce hoy el terror entre los
desposeídos es heredero jurídico y patrimonial de los Estados metropolitanos que
instauraron la colonia mediante la conquista y sentaron las bases para que sus
sucesores, los Estados nacionales controlados por elites criollas blancas o
blanqueadas, continuaran garantizando el proceso de expropiación de las posesiones y
del trabajo de los pueblos no blancos

Por esta razón y por otras cuantas podemos decir sin dudarlo: aunque las luchas
independentistas ayudaron a menguar la sensación de atraso con respecto a otros
lugares del mundo no sirvieron. -ni han servido- para curar las heridas profundas que
dejó la colonización en nuestros territorios.

República de Colombia ¿Una república violenta?

Es así como hemos saltado entre periodos históricos sin detenernos en cada uno de
ellos puesto que desde mi punto de vista merecen detenernos en cada uno de ellos
para lograr analizar en su totalidad los hechos históricos lo que no es el objetivo
principal de este ensayo.

Siendo así llegamos a 1886 en la República de Colombia, una república que tenía
como antecedentes cinco nombres distintos, por esta época la constitución de 1886 era
la que regía las normas de lo que ya se consideraba país luego de otra guerra civil en
el año 1885, esta constitución buscaba una nación “centralista, hispánica y confesional”
para la cual podríamos reflexionar y preguntarnos ¿esta constitución estaba guiada por
el autoritarismo?

Sin detenernos en estos hechos puedo nombrar fragmentos de la historia que nos
ayudan a dilucidar lo que sucedía, luego de la creación de la constitución llega la
regeneración encabezada por Rafael Núñez, la cual antecede a la hegemonía
conservadora y la guerra de los mil días, se separa Panamá por razones ya conocidas,
se reforma la constitución un par de veces y antes de la república liberal se lleva a cabo
la masacre de las bananeras, un hecho que sigue en nuestras memorias y que aún no
tiene sentido alguno; luego de este hecho tan atroz en 1930 empieza la república liberal
la cual duró 6 periodos presidenciales, por lo que termina en 1946. Durante este
momento se intentan llevar a cabo diversos cambios como lo es la política de
bibliotecas aldeanas, se intentan hacer reformas al sector agrario, pero para sorpresa
de nadie éstas no fueron posibles ya que las élites ponían trabas a cada proceso.
Antes de las elecciones se sentía una tensa calma en el ambiente, los conservadores
buscaban obtener el poder a costa de lo que fuera y evidentemente pasó luego del
asesinato de Jorge Eliecer Gaitán, como lo escribió Gardeazabal en cóndores no
entierran todos los días, ese nueve de abril de 1948 la Violencia llegó a los lugares del
país y en Tuluá Valle del Cauca se presentó así:

“Pero si ese nueve de abril Tuluá sintió terror y vio arder las casas y esquinas que más le
significaban en su historia de ciudad antigua, no lo tomó en serio, y una semana después
construyó, por colecta, un mausoleo especial para Martín Mejía y contrató arquitectos para que
la esquínas tradicionales volvieran a ser lo que habían sido por siglos. De ese viernes nueve de
abril. Tuluá no quiso. grabarse ningún acto de depravación ni las caras de quienes
encabezaban la turba, pero sí elogió y convirtió en una leyenda la descabellada acción de León
María Lozano cuando se opuso (...) a que la turba íncendiara el colegio de los salesianos ...
(12-13).”

José María Lozano encaja perfectamente en el papel de lider carismático que todos
buscaban en el pueblo, nunca fue necesario agredir a sus vecinos para causar pánico
porque la fe religiosa y el poder los respaldaron desde siempre, al igual que en la vida
real durante la Violencia el grupo paramilitar “los pajaros” iba de pueblo en pueblo
masacrando a cualquiera que no pensara igual, las personas ya no podían estar
tranquilas en sus casas porque eran sacados a la fuerza. Los conflictos bipartidistas
han tenido lugar en toda la historia del país ¿Y por qué es importante seguir hablando
de esto? Porque la hegemonía del silencio y la desmemoria han arrebatado los sueños
a mujeres y hombres durante siglos enteros.

El frente nacional aunque no se diga fue otra medida autoritaria y represiva, la cual no
sirvió en lo absoluto para acabar la guerra, los muertos siempre han sido puestos por
los sectores más vulnerables y aquí una vez más podemos evidenciar la genealogía del
racismo, es decir, el campesino indígena o negro siempre ha puesto las botas para la
lucha ¿y es que qué podemos hacer nosotros si ya no tenemos esperanzas? Por ellos
debemos seguir.

También podría gustarte