Amparo
Amparo
Amparo
PRIMERO
DE LA LEGITIMACIÓN DEL ACCIONANTE
SEGUNDO
DE LA COMPETENCIA DEL TRIBUNAL
TERCERO
DE LA ADMISIBILIDAD Y PROCEDENCIA
DE LA ACCIÓN DE AMPARO CONSTITUCIONAL
CUARTO
DE LA IDENTIFICACIÓN DEL AGRAVIANTE
Identifico como agraviante al Juzgado Primero de Juicio del Circuito Judicial
Penal del Estado Zulia, y cuya sede se encuentra en el circuito judicial de Cabimas
carretera H del municipio Cabimas del Estado Zulia.
QUINTO
DE LOS HECHOS QUE MOTIVAN LA ACCIÓN DE AMPARO
Los hechos radican en que mis defendidas fueron acusadas por los a abogados
EURO BLANCHARD CUAURO Y EUGENIO LUIS BLANCHARD RHODE,
inscritos en el inpreabogado bajo los Nros. 19.487 y 103.034, respectivamente, actuando
en su carácter de apoderados judiciales especiales de la ciudadana ROSALIA JOSEFINA
DE NICOLÓ DE TORRES, quien es venezolana, mayor de edad, titular de la cedula de
identidad 5.712.530, ante el Juez de Juicio del Circuito Judicial Penal del Estado Zulia,
Extensión Cabimas, por la presunta comisión de los delitos de Difamación e Injuria,
previstos y contemplados en los Artículos 444 y 442 del Código Penal, en fecha dieciocho
(18) de diciembre de dos mil seis (2.006), fecha en la cual la Unidad de Recepción y
Distribución de Documentos del Circuito Judicial Penal de Cabimas, le asignó el numero
de asunto VP11-P-2006-008352, y por distribución conoció el Juzgado Primero de Juicio
del Referido Circuito, el cual en fecha veintiuno (21) de diciembre de 2006, declara con
lugar la admisión de la acusación privada, por cumplir presuntamente con todos los
requisitos establecidos en el articulo 401 del Código Orgánico Procesal Penal, por lo que
ordena la citación de mis defendidas en cumplimiento a lo establecido en el articulo 409
ejusdem; posteriormente en fecha diez (10) de enero de 2007, el supra nombrado Juzgado
levanta un acta donde deja constancia que la querellante ROSALIA JOSEFINA,
representada por sus abogados EURO BLANCHARD CUAURO Y EUGENIO LUIS
BLANCHARD RHODE, RATIFICAN LA QUERELLA, querella tal que había sido
admitida por el citado Juzgado en fecha veintiuno (21) de diciembre de 2006;
posteriormente en fecha primero de febrero de 2.007 mis defendidas, se presentaron ante
el Juzgado Primero de Juicio del Circuito Judicial Penal del Estado Zulia, Extensión
Cabimas, a los fines de nombrar su defensor de conformidad a lo establecido en el articulo
409 del Código Orgánico Procesal Penal, en vista a esto el Juzgado decidió fijar la
audiencia de conciliación para el día primero de junio de 2007, ahora bien en fecha treinta
de mayo de 2007 la anterior defensa de mis representadas solicito el diferimiento de la
audiencia de conciliación por cuanto había sido notifica eso mismo treinta de la
celebración de la audiencia es decir dos días antes de celebrarse la misma por lo cual el
tribunal decidió fijar nueva fecha para la celebración de la audiencia conciliación, es
importante señalar que la parte acusadora para la primera fecha de la audiencia de
conciliación no presento en el termino fijado en el articulo 411 del Código Orgánico
Procesal Penal, las pruebas pertinentes y necesarias para su acusación; posterior a esto el
Juzgado fijó para el día veintiocho de julio de 2007 la celebración de la audiencia de
conciliación antes diferida, la cual tampoco se pudo celebrar ese día por encontrarse este
juzgado sin despacho por presentar la Juez quebrantos de salud que la suspendieron de sus
labores, por lo cual se acordó fijar para el día veintiséis de julio de 2007 la audiencia
conciliación, en dicha oportunidad la parte acusadora tampoco presento las pruebas
pertinentes a la carga de las partes señaladas en el articulo anteriormente señalado;
finalmente para el día veintiséis de julio de 2007, se celebró la audiencia de conciliación
en donde esta defensa hizo mención que en ninguna de las fechas fijadas para celebrar la
audiencia de conciliación la parte querellante promovió las pruebas pertinentes a la carga
adquiridas por su condición de parte en dicho proceso, por lo cual y por tratarse de actos
preclusivos en donde el incumplimiento de estos trae como consecuencia el desistimiento
tácito de la acusación privada de conformidad a lo dispuesto en el articulo 416 del Código
Orgánico Procesal Penal, seguidamente la Juez hizo la siguiente consideración:
XXXXXXXXXXXXXXXXXX.
cx
SEXTO
DEL DERECHO CONSTITUCIONAL VIOLADO
Denuncio como derechos y garantías constitucionales violadas la TUTELA
JUDICIAL EFECTIVA, EL DEBIDO PROCESO Y EL PRINCIPIO DE LA
DEFENSA E IGUALDAD ENTRE LAS PARTES, establecidos en los artículos 26, 49
ord. 1º ,,respectivamente, de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, en
concordancia con el articulo 12 del Código Orgánico Procesal Penal, como consecuencia
de la ERRÓNEA INTERPRETACIÓN de los artículos 257 de Constitución de la
República Bolivariana de Venezuela, 401 y 411 del Código Orgánico Procesal Penal y
FALTA DE APLICACIÓN del artículo 416 eiusdem.
El derecho de amparo en la Constitución y en la Ley Orgánica está establecido para
proteger el goce y el ejercicio de todos los derechos y garantías constitucionales,
incluyendo por su puesto, la protección y tutela del DEBIDO PROCESO y la TUTELA
JUDICIAL EFECTIVA, por ello el amparo se configura como una garantía fundamental
para la protección de los derechos humanos y de los derechos fundamentales del proceso.
Ciudadanos Magistrados, considera, quien aquí suscribe, que el Juzgado Primero
de Juicio del Circuito Judicial Penal del Estado Zulia, Extensión Cabimas, ha
violentado con su actuación permisiva la garantía constitucional de EL DEBIDO
PROCESO, la cual representa un derecho fundamental, encaminado a la protección de
todas las garantías indispensables que deben existir en todo proceso para lograr una tutela
judicial efectiva, por lo cual las leyes adjetivas garantizan la existencia de un
procedimiento que asegure el derecho de defensa de la parte, derecho que todos los
administradores de justicia deben resguardar como premisa máxima, como así establece la
Constitución de la República Bolivariana en Venezuela en su artículo 49:
Principio que es vejado, por la decisión permisiva y simplista que hoy denuncio,
puesto que no se puede pretender amparar la violación del proceso que a su vez es un
ultraje a la justicia, al cubrirse bajo el manto de un precepto constitucional, el cual es
interpretado de una manera errónea, manifestada al momento de tildar como una
formalidad no esencial a un procedimiento intrínsico de la norma adjetiva penal, como lo
es, la oportunidad procesal para presentar las pruebas que se producirán en el juicio oral,
las cuales representan los elementos fundados de toda denuncia o acusación, encaminados
a homologar la verdad que se pretende impugnar, y en efecto el articulo 257 de nuestra
carta magna consagra: NO SE SACRIFICARÁ LA JUSTICIA POR OMISION DE
FORMALIDADES NO ESENCIALES, pero no por esto se puede pretender tipificar
como una formalidad no esencial a un acto procesal que garantiza el cumplimiento del
DEBIDO PROCESO, consagrado como premisa máxima garante en la administración de
justicia de nuestro ordenamiento jurídico, consagrada en el articulo 49 de nuestra
constitución, de forma clara e irrefutable positivisada en el ordinal primero del articulo
supra mencionado al consagrar: SERAN NULAS LAS PRUEBAS OBTENIDAS
MEDIANTE VIOLACION DEL DEBIDO PROCESO…; violación tal que para esta
representación se ve reflejado en la decisión emanada por el Juzgado Primero de Juicio del
Circuito Judicial Penal del Estado Zulia, Extensión Cabimas, en la audiencia de
conciliación de la causa signada con el número de asunto VP11-P-2006-008352, llevada a
cabo en fecha veintiséis (26) de abril del año en curso, al momento de decidir, para cual
cito textualmente: Asimismo atendiendo el contenido del xxxxx En el entendido que
efectivamente, en vista a esto esta representación observa con preocupación y de manera
alarmante, la manera arbitraria en que se decide que no se produjo ningún gravamen a
ninguna de las partes, cuando es claro y evidente que estamos frente a una franca
violación de la TUTELA JUDICIAL EFECTIVA, EL DEBIDO PROCESO, en virtud
de la ERRÓNEA INTERPRETACIÓN de los artículos 401 y 411 del Código Orgánico
Procesal Penal y FALTA DE APLICACIÓN del artículo 416 eiusdem:
En efecto, dichos artículos establecen:
Artículo 401. Formalidades
La acusación privada deberá formularse por escrito
directamente ante el tribunal de juicio y deberá contener: 1. El
nombre, apellido, edad, estado, profesión, domicilio o residencia
del acusador privado, el número de su cédula de identidad y sus
relaciones de parentesco con el acusado;
2. El nombre, apellido, edad, domicilio o residencia del
acusado;
3. El delito que se le imputa, y del lugar, día y hora
aproximada de su perpetración;
4. Una relación especificada de todas las circunstancias
esenciales del hecho;
5. Los elementos de convicción en los que se funda la
atribución de la participación del imputado en el delito;
6. La justificación de la condición de víctima;
7. La firma del acusador o de su apoderado con poder
especial;
Si el acusador no supiere o no pudiere firmar, concurrirá
personalmente ante el juez y en su presencia, estampará la
huella digital.
Todo acusador concurrirá personalmente ante el juez para
ratificar su acusación. El Secretario dejará constancia de este
acto procesal.
En un mismo proceso no se admitirá más de una acusación
privada, pero si varias personas pretenden ejercer la acción
penal con respecto a un mismo delito, podrán ejercerla
conjuntamente por sí o por medio de una sola representación.
Por lo cual es acertado traer a las actas, lo afirmado por el procesalista JOSE LUIS
TAMAYO RODRIGUEZ, en su obra Manual Practico Comentado sobre la Reforma del
Código Orgánico Procesal Penal; cuando afirma: “… Se indican con precisión las
causales que determinan cuando la acusación privada ha de entenderse desistida,
agregándose dos nuevas causales, como lo son, en primer lugar, la no promoción de
pruebas por parte del acusador para fundar su acusación (que de presentar “hasta” tres
días antes de la celebración de la audiencia de conciliación , o simplemente,
ratificarlas, en caso de haber sido íntegramente promovidas junto con el escrito de
acusación privada).
Por todos alegatos presentados es menester para esta representación, aclarar que el
articulo 401 del Código Orgánico Procesal Penal, en su ordinal quinto, en efecto estable
que la acusación privada deberá contener: “Los elementos de convicción en los que se
funda la atribución de la participación del imputado en el delito...”, por ende esta
representación considera que tales elementos señalados en el articulo anteriormente
expuesto, no adquieren carácter de prueba si no hasta que son promovidos o ratificados
en el momento procesal oportuno, es decir tres (03) antes de la celebración de la audiencia
de conciliación, tal y como señala el articulo 411 de nuestro Código Penal Adjetivo.
Sin ánimos de ser reiterativos esta representación considera que el Juzgado Primero
de Juicio del Circuito Judicial Penal del Estado Zulia, Extensión Cabimas Juzgado, ha
violentado los derechos y garantías constitucionales de EL DEBIDO PROCESO, al
momento de interpretar erróneamente lo consagrado en los artículos 257 de Constitución
de la República Bolivariana de Venezuela, 401 y 411 del Código Orgánico Procesal Penal
artículos, en donde el legislador fijó un termino procesal exacto y preclusivo para
promover las pruebas pertinentes a la acusación, las cuales so pena de incumplimiento
acarrea el desistimiento de la acusación privada, en estricto resguardo a lo consagrado en
el articulo 416 del Código Adjetivo Penal, norma que en este caso no fue aplicada.
En el mismo orden de ideas considera humildemente quien aquí suscribe, que el
Juzgado Primero de Juicio del Circuito Judicial Penal del Estado Zulia, Extensión
Cabimas, ha violentado de igual forma el derecho constitucional de la TUTELA
JUDICIAL EFECTIVA, prevista en el artículo 26 de la Constitución Nacional.
En efecto, dicho artículo establece:
“Toda persona tiene derecho de acceso a los órganos de
administración de justicia para hacer valer sus derechos e
intereses, incluso los colectivos y difusos, a la tutela efectiva de los
mismos y a obtener con prontitud la decisión correspondiente. El
estado garantizará una justicia gratuita, accesible, imparcial,
idónea, transparente, autónoma, independiente, responsable,
equitativa y expedita, sin dilaciones indebida, sin formalismos o
reposiciones inútiles”