Niños Amos
Niños Amos
Niños Amos
“Niños Amo”
1
| Marzo 2019
Autores:
Lic. María José Manzo
En este artículo se abordará lo atinente al niño y la La mencionada autora basa su libro en una
época, por el costado de los síntomas actuales en niños. investigación que posee base en la clínica. Los describe
Nos centraremos en el concepto de “niños-amos” de la diciendo “la posición subjetiva de niños que acudieron
psicoanalista Adela Fryd, quien de hecho dirá que a su consulta (…) niños tiránicos y caprichosos (…) no
“podríamos pensar a los niños amos como un síntoma corresponde a una estructura clínica, ponen en
de la época” (2018:39) y en otro momento lo ubica evidencia una variedad estructural y una graduación
como una “casuística propia de la época: debilidad de la gravedad” un “fenómeno clínico” (…) dar cuenta
paterna”(2018:55). Resulta interesante mencionar la de un posición subjetiva que se presenta como
descripción como “niños que no presentan síntomas, ni sintomática de la subjetividad de nuestra época.
acuden a un analista por ellos, los denominaremos así
por su manera de actuar, de presentarse” (2018:41). Se pregunta “¿cuáles son las características que se
repiten? La caprichosa tiranía que los caracteriza,
A modo de ejemplo se trabajará una viñeta, apuntando hacer valer el poder de un “yo quiero” que no acepta
a ejemplificar algunos aspectos del concepto abordado. los términos de la frustración o la falta (…) lo cual los
fija en una posición de ser “esclavos ellos mismos de
Por empezar, puede mencionarse que los rasgos ese goce tonto” que los excluye de ese lazo con el Otro
fenoménicos de esta presentación serian el de “tirano”, (…) “presentan una inflación yoica”
en tanto que todo gira alrededor del niño. Pareciera
que prescinden del otro. Se autorizan desde muy Prosigue diciendo que (…) el niño amo no presenta un
chiquitos. Porque lo dije lo quiero. Comandan la cosa, la síntoma característico, un síntoma tipo, sino que
escena. Tienen una posición de “yo ideal”, impera como fenómeno de cuerpo para otro cuerpo, y
omnipotencia y capricho. Narcisismo extremo. ¿qué en esta posición de imponer al otro, a los otros, un goce
pasa con la ley del padre y en qué lugar queda?. Pone fuera de sentido y sin ley.”
en el tapete el lugar de la madre, para Lacan; si hay
omnipotencia en el niño es consecuencia del capricho La hipótesis que la autora propone para su categoría
materno ¿cómo hacer para que no funcione la ley clínica, es lo relativo a la cuestión del goce femenino,
materna? Es el horror, el capricho, la locura, sin límites. puesto que la madre, en un gran número de casos, es
una mujer (…) los niños amos objetan en acto la
castración a su “para todos”.
Los describe como “niños amos con una tiranía planteo del caso con la presentación de la madre y de
dominante (…) niños que parecen encarnar al amo (…) sus dichos durante las entrevistas. Luego me referiré a
estos pequeños caprichosos desanudados de la algunos momentos y dichos surgidos en una serie de
racionalización, muestran que el “yo quiero” es encuentros con la niña en el ámbito de la justicia.
anterior al “yo pienso” (2018:17)
La madre de la niña se hizo oír desde el inicio y de
Podría pensarse una línea de trabajo clínico con estos manera literal, a los gritos en la institución. Se
niños, y es la siguiente: “si el deseo del niño está en presenta sin límites, enloquecida en sede judicial,
condiciones de convertirse en ley, el desafío es como debiendo intervenir otras autoridades judiciales, -
hacer para que consienta el deseo del Otro. Emerge una además de las que llevaban la causa-, intentando
situación compleja caracterizada por la falta de “tranquilizarla”. La mujer aparece cuestionando casi
autoridad, de reglas, de normas y la ausencia de toda todo, incluso los pasos específicos y habituales del
empatía con la expectativa del Otro” (2018:20). proceso. Con el devenir de la misma, surgió que
Prosigue dando interesantes indicaciones clínicas profesionales psicólogos intervinientes, manifestaron
acerca de cómo “deberíamos pensarlos en relación a haber recibido llamados de la madre con tinte
qué Otro se han plantado y cuál es la incidencia del amenazante e incluso solicitando que dijeran cosas que
lugar de la madre y del lugar del padre en eso que ellos no habían visto. Se trata de una madre que
son o quieren ser” (2018:41) frecuentemente acude a denuncias judiciales, en
diferentes lugares. Los encuentros con la niña se
A fin del análisis que efectúa, Fryd toma al binomio del efectúan a partir de una denuncia respecto del padre
-“niño amo y su madre-”…a partir de la declinación del de la niña.
lugar del padre…la instancia de la madre vuelve a
quedar sólidamente demarcada. La consecuencia es Al momento de las entrevistas, la pequeña se muestra
observar caso por caso el peso que hoy toma el lugar extrovertida e histriónica. Se define a sí misma como
de la madre, que en algunos casos es el de ser el “especial y diferente a todos”, intentando desde allí
partenaire preponderante o exclusivo de los hijos” comandar los encuentros, diciendo qué decir, qué
(2918:54) porque “entre el niño y la madre hay un hacer y qué no. Desde allí se mostrará interesada y
discurso singular, un discurso que, a veces, incluso, es dispuesta a contar su historia, abordando la misma ni
mudo; pero que también deja marcas. Hay allí una bien ingresa al consultorio y previo a cualquier
invención que es lo que Lacan llamo la lengua (la intervención. Rompe de manera casi automática en
langue) materna. (2018:57) llantos, e inicia un relato acerca de ésta y otras
denuncias que le habría efectuado su madre a su
Pasando a la viñeta mencionada antes, diremos que los padre, la última por “violencia”. Relata ese episodio
rasgos fenoménicos que se le atribuyen son algo del diciendo de su papa que “nunca lo vi así, loco”. Episodio
capricho, la tiranía y el narcisismo aparecen en esta que signó la interrupción del contacto. La institución
niña de 11 años y, tal como plantea la mencionada judicial alojó el planteo. En los dichos de la niña puede
autora, algo del goce femenino, de la madre y de su agregarse a lo ya mencionado y citando a Adela Fryd
posición cobra relevancia. Por eso comenzaré el que “en estos niños amos aparece el capricho, que no
es otra cosa que el capricho materno sin la mediación ocupando el lugar que tradicionalmente correspondía
del padre (…) inflación yoica” (2018:25) y tal como se al padre” (…)“el goce del juicio” toda acción humana es
presenta “soy único, soy yo, soy” este narcisismo es el capaz de ser penalizada por la carga de goce que
que clausura toda relación con el Otro (2018:26). transporta: lo que lleva a una suerte de goce-del juicio”
(…) proliferación de juicios de abuso sexual en nombre
A diferencia de lo trabajado por la autora mencionada, de niños contra sus propios padres (más acá de su
en este caso no ha habido demandas de tratamiento, realización y/o fantasmatización) parecen invertir los
solo escasas consultas, incluso ligando a la profesional lugares de quienes han encarnado tradicionalmente
contactada con lo posteriormente denunciado, las funciones del ejercicio culpable del goce –por un
predominando la apelación a la denuncia judicial. lado- y la de su interdicción – por el otro.(176)
Resulta interesante lo planteado por Sinatra Queda abierta la pregunta por el devenir de esta niña
(2015:175) “el desenganche entre el goce y el decir- “que le gano el juicio a su padre” y que no lo verá más.
que-no -consecuencia mayor de la caída pos-moderna Nada de lo atinente a una separación respecto de esta
del padre- se remienda con el empalme entre la madre parece vislumbrarse.
judicialización generalizada y el empuje del mercado al
–imposible- goce del “todo-para-ver”.