Geología de España 1
Geología de España 1
Geología de España 1
A medida que emergían las cordilleras de la orogenia Varisca comenzaba su meteorización y erosión, de tal modo que hoy en día sólo se aprecian sus restos en distintas partes de Europa. De entre ellos el más extenso es el Macizo Ibérico, que desde su formación en el Paleozoico ha estado prácticamente todo el tiempo emergido,
expuesto a los procesos geológicos externos, sobre todo meteorización y erosión.
El estudio sismológico evidencia que el macizo está compuesto por una amalgama de fragmentos de L.C. de diferentes placas (Laurussia, Gondwana, Avalonia y Armórica) con L.O. elevada, consecuencia de las sucesivas colisiones a lo largo de los millones de años, e intrusiones magmáticas causadas por aumentos de temperatura.
Como orógeno, la mayoría de sus rocas son ígneas plutónicas, sobre todo granitos, junto con rocas metamóricas (pizarras, gneises, cuarcitas) y sediemntarias tipo calizs y areniscas. En mucha menor proporción se conservar rocas volcánicas.
Se distinguen 5 zonas, de norte a sur:
Los ejes de los pliegues se curvan con la parte convexa hacia el oeste, formando la denominada rodilla astúrica. Esta curvatura es
típica de los orógenos de colisión (se llama deformación oroclinal). En su interior se encuentra una cuenca sedimentaria que alberga
importantes yacimientos sinorogénicos de carbón.