Aaa Analisis Cuentos Dick

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Todos los cuentos de

Philip K. Dick
  Rémy Bastien van der Meer

Habiendo recorrido sumariamente las 36 novelas de Philip K.


Dick, ofrecemos ahora un repaso de todos y cada uno de
los cuentos de este autor que revolucionó un género y, de
paso, transformó en buena medida nuestra forma de
entender el tiempo, el espacio, el mundo.

Nunca confíes en el artista. Confía en el relato. La función


correcta
de un crítico es la de salvar al relato del artista que lo creó.

—D.H. Lawrence

Un autor de ficción especulativa, en años recientes, se


quejaba de que parecía imposible concebir una idea nueva
en ciencia ficción, porque al revisar los cuentos de PKD
resultaba que él ya la había contemplado. Esta aseveración
es relativamente cierta.
Retrato dibujado de Philip K. Dick, de Pete Welsh,

Cabe recordar que PKD inició su quehacer literario


escribiendo novelas realistas sobre la vida en California
durante los años 50, 60 y 70. Ante el rechazo de editores,
encontró una modesta veta remunerativa en las revistas
populares de ciencia ficción, género literario al que hoy
debe su merecida fama internacional y que practicó tanto
en novela como en cuento. La siguiente lista revisa en
orden cronológico los 121 cuentos canónicos del autor.1

1952

Beyond Lies the Wub (“Más allá yace el wub”)


Primer cuento de PKD publicado en la revista Planet Stories.
En Marte, hay que cuidar lo que uno come. Relato
espléndido sobre alteridad extraterrestre: un ser porcino,
amable y pacífico, “adicto a formas de relajamiento”, que
discurre sobre Homero y La Odisea, y que posee poderes
únicos. En este cuento Dick abrió fuego con un tema que
sería obsesivo para él: la apropiación.
The Gun (“El cañón”)
Plantea peligros de máquinas “pensantes”, en este caso los
robots, todavía no  androides (robots con forma humana).

The Little Movement (“El pequeño movimiento”)


Asombrosa anticipación de Toy Story 3, incluyendo ositos y
puerquitos, y un niño enterado de que sus juguetes tienen
vida propia. En Dick, muchas veces, los “estereotipos
adorables” son más bien amenazantes y siniestros.

The Skull (“La calavera”)


Enredo clásico de viaje en el tiempo, al estilo del rey Edipo,
quien descubre que él mismo es el asesino que todos
buscan. Aborda temas que después serán frecuentes:
mesianismo versus totalitarismo, realidades paralelas, orden
de causa y efecto, o la ausencia de ambos.

1953

The Builder (“El constructor”)


Cuento con resonancias bíblicas que quizá solo entienda
cabalmente quien haya vivido la paranoia social
estadounidense de los años 50, cuando la amenaza de una
guerra nuclear era una posibilidad real, soterrada o
abiertamente angustiante.

Colony (“Colonia”)
En un lejano planeta, aparentemente paradisíaco, objetos
inanimados (microscopios, toallas) adquieren vida, agresiva
y letal. Aparece en PKD la “paranoia de las cosas”. Una
cruelmente diezmada tripulación exploradora tiene que
esperar una nave de rescate en traje de cumpleaños: ya no
es posible confiar en prenda de vestir alguna. PKD
experimenta con finales de pesadilla, y pronto alcanzará
cumbres insospechadas.
The Commuter (“El viajero”)
A un vendedor de boletos de tren le piden pasajes a un
pueblo que no figura en ningún mapa; descubrirá el secreto
de un “portal” tras del cual cambia su psique y el tejido
mismo del espacio-tiempo.

The Cookie Lady (“La señora de las galletas”)


Más terror que CF, trazado con tiernas pinceladas, en un
típico suburbio de clase media baja. Para PKD —como
para Ray Bradbury— los niños serán personajes viables,
para bien o para mal.

The Cosmic Poachers (“Los cazadores furtivos cósmicos”)


CF tradicional con un tipo de final sorpresa bastante visto.
El toque PKD presente, sin embargo, en los diálogos de
mandos militares que no entienden que no entienden hasta
que es demasiado tarde.

The Defenders (“Los defensores”)


Tras una guerra nuclear, estadounidenses y soviéticos son
engañados por capitalistas y especuladores que “controlan”
la realidad. Del cuento surgiría la novela La penúltima
verdad.

Expendable (“Prescindible”)
En el marco de una guerra entre bandos de insectos que
remonta millones de años atrás, los bichos preparan la
conquista de un rincón suburbano. La idea de este cuento,
hilarante y terrorífico, le vino a Dick cierta vez que imaginó
que una mosca se reía de él.

The Eyes Have It (“Los ojos lo tienen” o “Está en los ojos”)


Un juego lingüístico que explora lo que un burócrata
agotado del capitalismo tardío podría imaginar al escuchar
expresiones como “Le dio su corazón”, “Le entregó su
mano”, “Volvió a perder la cabeza”. Literalidad como
función de locura y pesadilla.

The Great C (“La gran C”)


Semilla de la novela Deus Irae, escrita con Roger Zelazny.
En un mundo postapocalíptico, la humanidad ha olvidado
conocimientos científicos de nivel primaria. Un pueblito
envía a un joven cada año con tres preguntas para la
monstruosa computadora que originó el holocausto, y que
lo sacrificará vivo si no las contesta correctamente: ¿de
dónde viene la lluvia? ¿Por qué el Sol no se cae del cielo?
¿Cómo se creó el mundo?

The Hanging Stranger (“El ahorcado desconocido”)


Otro tropo dickiano: el individuo que ve algo que sus
congéneres no perciben: un ahorcado. La Tierra ha sido
invadida, y el ahorcado es un ardid para detectar a quienes
no han sido “apropiados”.

The Impossible Planet (“El planeta imposible”)


Una anciana soñadora de más de 300 años de edad insiste
en contratar una nave espacial para viajar a un mítico
planeta llamado Tierra.

Impostor o Imposter (“Impostor”)
Filmado con muy parcial acierto (Gary Fleder, 2002). PKD
trabajará muchas variantes de este tema: el androide o
robot que no sabe que lo es, que se cree humano.

The Indefatigable Frog (“La rana infatigable”)


Paradojas clásicas de Zenón de Elea, en un acerbo duelo
por comprobar lo incomprobable entre profesores
universitarios. No es de los cuentos más afortunados de
Dick.

The Infinites (“Los infinitos”)


Un fenómeno cósmico inexplicable genera un salto
evolutivo equivalente a millones de años en un trío de
viajeros interestelares. El detalle incómodo es que la
radiación transformadora afectó primero, y con ventaja, a
los hámsteres que viajaban con los cosmonautas.

The King of the Elves (“El rey de los elfos”)


Un hombre de a pie trasciende su modesta condición para
ayudar a elfos contra troles. Relato fantástico inusual para
Dick. Derechos adquiridos por Disney. Si algún día se
concreta la película, quizá será una que no habrá que
perderse.
Martians Come in Clouds (“Los marcianos llegan en nubes”)
La invasión extraterrestre es cosa de todos los días en un
pueblito (y el mundo entero). Ni adultos ni niños entienden
que los etéreos marcianos son amigables e inofensivos.
Una intrincada trama moralista.

Mr. Spaceship (“Sr. Nave Espacial”)


Una idea común en la CF de los años 40 y 50: un cerebro
humano integrado a una nave espacial. Plantea un reinicio
de la especie humana con una nueva pareja primordial.
PKD pregunta si la guerra es una pulsión ineludible
del Homo sapiens o bien resultado de su desarrollo cultural.

Out in the Garden (“Allá en el jardín”)


De cabeza la mitología griega, entre horror interespecies y
humor estilo Groucho Marx: el mito de Leda y el cisne. Aquí
ella se llama Peggy y él, un pato arisco, Mr. Franklin. Y el
marido cornudo, como el lector, navega entre sospechas y
pasmo.

Paycheck (“Cheque de paga”)
Filmada con el subtítulo Recuerda el futuro (John Woo,
2003), diluye una idea novedosa de PKD con acción
policiaca. En el cuento, a diferencia de la película, el
secreto empresarial que le ocultan al protagonista son los
preparativos de una revolución contra el estado totalitario.

Piper in the Woods (“Flautista en el bosque”)


Variante de “El Flautista de Hamelin”. En otro mundo,
cosmonautas quedan convencidos de que son plantas.
PKD ya es experto en finales desconcertantes, o al estilo
Chéjov, de los cuentos “sin final”.

Planet for Transients (“Planeta para viajeros en tránsito”)


El planeta es la Tierra, y quienes transitan son una minoría
humana. Guerra atómica, el invierno nuclear resultante y la
ubicua radiactividad producen insólitas mutaciones en la
mayoría de los humanos. Lo viejo normal es lo nuevo
anormal.

The Preserving Machine (“La máquina preservadora”)


El doctor Laberinto quiere preservar partituras clásicas, y al
insertarlas en una máquina especial de su creación
produce animales Wagner, bichos Bach y pájaros
Stravinski y Mozart. Otro tema favorito de Dick: en la
naturaleza de la criatura está la rebeldía ante su creador.

Project: Earth (“Proyecto: Tierra”)


El futuro de la especie se decide en un juego de canicas.
Niños versus simulacros humanos alienígenas que
reiteradamente fracasan intentando crear mejores
humanos.

Roog (“Ruug”)
El primer cuento que Dick vendió. Se lo compró Anthony
Boucher, y serían amigos de por vida. PKD imagina el
mundo visto a través de los ojos de Boris, un perro. Los
“Ruug” son los empleados municipales que se llevan las
bolsas de basura, que para Boris son preciadas reservas
de alimentos.

Second Variety (“Segunda variedad” o “Segundo tipo”)


Filmada como Screamers (Christian Duguay, 1995) y con
una secuela.  Aquí ya aparecen robots que han
adquirido conciencia de sí mismos. Apocalipsis teleológico
en el futuro, tras una guerra entre soviéticos y las Naciones
Unidas. Una realidad sofocante que se revela a
cuentagotas. “El mundo de Jon” será una suerte de
continuación.

Some Kinds of Life (“Algunos tipos de vida”)


Eleva a la enésima potencia una sátira inmisericorde que
combina neocolonialismo planetario e interestelar con el
absurdo de una sociedad de consumo in extremis,
concluyendo con la extinción de la humanidad. Alegoría de
la demencial necesidad de gadgets y tecnología, más
presente que nunca en la actualidad.

Tony and the Beetles (“Tony y los escarabajos”)


El planteamiento básico —y el dilema del niño Tony y sus
civilizados amigos coleópteros— podría trasladarse de la
colonización extragaláctica de una sociedad de insectos a
la realidad genocida del far West, o a la colonización de
India por los británicos. Pinta como inescapable la
condición del colonialista así como la del colonizado.

The Trouble with Bubbles (“La problemática de las burbujas”)


Cuando la robótica resuelve todas las necesidades básicas
de la sociedad, ante el ennui existencial derivado de no
haber encontrado vida alguna en el sistema solar, los más
pudientes construyen mundos simulados en burbujas
cristalinas, para destruirlas después, sin consideración de
la minúscula vida real creada en las esferas.

The Variable Man (“El hombre variable”)


Durante una guerra contra Próxima Centauri, los terrícolas,
gracias a una “burbuja del tiempo”, rescatan del pasado, de
1913, a Thomas Cole, quien será el “elemento variable” en
la ecuación del conflicto y la posible resolución del mismo.

The World She Wanted (“El mundo que ella quería”)


La única “ciencia ficción” en este singular y exasperante
relato es la subjetividad humana. Ella insiste que su novio
es solo un elemento más de su mundo, y él se esfuerza por
demostrar lo contrario. Pienso, luego existo, sí, pero ¿qué
tal si lo que piensas no es tuyo? Y, quizás, él y ella son
meros elementos de otra ensoñación, pero soñada
por… ¿quién?

1954

Adjustment Team (“Equipo de ajustes”)


Filmado como The Adjustment Bureau (George Nolfi, 2011),
apenas respeta el marco general original (y el humor negro)
sobre una autoridad superior (dios) que organiza y modifica
en ocasiones el quehacer humano, ofreciendo una
melcochosa historia de amor entre un político y una
bailarina. Adaptación fallida de un cuento excepcional.

Beyond the Door (“Más allá de la puerta”)


Podría haber sido un episodio de La dimensión desconocida.
El cucú de un reloj integra un siniestro (y mortal) cuarteto
con un matrimonio y el amante de la esposa.

Breakfast at Twilight (“Desayuno al atardecer”)


Una maravilla de cuento, aunque en el desenlace feliz (no
muy común en Dick), parece que se le olvida el personaje
del niño. Un comentario sencillo del pequeño Earl, al final,
hubiera redondeado inmejorablemente el relato.

The Crawlers (“Los reptadores”)


Un cuento cruel. PKD podría darle clases de siniestralidad
a Villiers de L’Isle Adam: emanaciones radiactivas
producen bebés deformados, reptantes, apenas
morfológicamente humanos. Son asesinados,
abandonados, aplastados cuando cruzan carreteras
reptando. Pero son pensantes, poseen empatía, construyen
redes kilométricas de madrigueras, aspiran a superarse,
conquistarán la adversidad. ¿Qué ocurrirá cuando esta
progenie repulsiva, a su vez, empiece a reproducirse?

The Crystal Crypt (“La cripta de cristal”)


Relato policiaco espacial. Marte —colonizado por humanos
— y Terra están al borde de una guerra interplanetaria,
cuando una ciudad marciana entera desaparece
inexplicablemente. Dick maneja con maestría tropos
comunes de la era pulp.
Exhibit Piece (“Pieza de exhibición”)
En una futura sociedad totalitaria, un encargado de la sala
de un museo que exhibe la vida clasemediera
estadounidense de los años 50 descubre un universo
paralelo, o quizá solo su propia, profunda, psicosis. Trama
típica de los años de la Guerra Fría.

The Father-Thing (“La cosa-papá”)


Un cuento de terror, sobre el que Dick escribió: “Siempre
tuve la impresión, cuando era muy pequeño, de que mi
padre era dos personas, una buena, una mala. El padre
bueno se va lejos, y el padre malo toma su lugar”.

The Golden Man (“El hombre de oro”)


Filmado como Next (Lee Tamahori, 2007), con Nicholas
Cage desvariando ejemplarmente como un mutante que
puede ver dos minutos hacia el futuro. Lo dickiano del
cuento original apenas es reconocible en este típico delirio
hollywoodense.

James P. Crow
Jim Crow, figura folclórica, bufón afroamericano, fue
símbolo del racismo estadounidense del siglo XIX (y XX y
XXI). Pero originalmente, un “Jim Crow” era también un
renegado, un traidor (a su propia raza). En una sociedad
dominada por robots, democráticos en apariencia, los seres
humanos tienen ocupaciones intrascendentes. El
protagonista caucásico, sin embargo, asciende al Consejo
Rector. Supera finalmente en jerarquía a los robots
gobernantes, que le dejarán la Tierra a los humanos,
ocupando otros planetas y satélites del sistema solar. Un
solo hombre tiene pues todo el poder sobre el resto de la
humanidad. Ahora, la duda es: ¿cómo lo ejercerá?

Jon’s World (“El mundo de Jon”)


Habitantes del mundo subterráneo hacen una salida ilegal
a la superficie para capturar humanos que usarán como
esclavos. Siglos después, ¿cuál de estas dos sociedades
representa realmente al Homo sapiens?

The Last of the Masters, también Protection Agency (“El último


de los magísteres” o bien “Agencia de Protección”)
Revela una inclinación por “la mentira piadosa”,
promulgada por Leo Strauss y la Escuela de Chicago como
arma psicológica de control de la población: dominar a las
masas mediante la religión y el mito de la nación. Un
comando de anarquistas postapocalípticos destruye una
sociedad progresista, sostenida por los conocimientos del
último de los magísteres, un robot biempensante.

Meddler (“Entrometido”)
Un desarrollo similar al de Colony, en el que la paranoia
galopante llega inadvertidamente a la Tierra desde un
mundo lejano.

Of Withered Apples (“De manzanas marchitas”)


Otra versión dickiana de Ovidio, igual o más pirada que
“Allá en el jardín”. Erotismo y sexo, ya no entre especies
incompatibles, sino entre reinos.

A Present for Pat (“Un regalo para Pat”)


Historia de una estatuilla traída de una galaxia lejana a la
Tierra por un explorador espacial, como regalo para su
esposa. El chunche es en realidad un dios que anda
cazando a otra divinidad que huyó a Terra eras antes. Un
enredo afín a los de otros humoristas de CF como R. A.
Lafferty o William Tenn.

Prize Ship (“La nave botín de guerra”)


Cientos de años en el futuro, los habitantes de Ganimedes
se rebelan, poniendo en jaque al resto del sistema solar.
Surge una esperanza cuando Terra se apodera de una
nave enemiga que resulta ser una máquina del tiempo. El
planteamiento de un viaje al pasado y luego al futuro, a los
mundos concebidos por Jonathan Swift en Los viajes de
Gulliver, resulta forzado.

Progeny (“Progenie”)
Un empresario interplanetario regresa a conocer a su
primogénito en una Tierra en la que casi todo —incluyendo
medicina y pediatría— es controlado por robots. Los padres
no pueden tocar a sus hijos, ni hablar con ellos, hasta que
cumplan 16 años. Cuando el padre finalmente pasea con
su vástago, su afecto y sus emociones paternales
contrastan con la ausencia de empatía del hijo. Una
variedad de la apropiación, en este caso de la mente
humana, por la frialdad “mental” de los robots.
Prominent Author (“Autor prominente”)
Viajando al trabajo en un transbordador futurista, un autor
descubre un mundo alterno en el que responde a preguntas
de seres diminutos. Al transcribir metódicamente sus
respuestas descubre que ha escrito la Biblia. PKD
indagando el origen de las religiones.

Sales Pitch (“Oferta de venta”)


¿Qué hacer cuando entra a casa un robot multiusos que se
publicita a sí mismo y que simplemente no acepta una
negativa de compra?

Shell Game (Literalmente, “Juego de conchas” o, mejor:


“Juego de apariencias”)
Un grupo de exploradores varados en un planeta
desconocido, asediados por alienígenas, intentan deducir si
solo uno de ellos está loco o si comparten una psicosis
colectiva. Dick usa “concha” (shell) refiriéndose a los
“cráneos” de los protagonistas, cuyos interiores están
destruidos para efectos prácticos.
The Short Happy Life of the Oxford Brown (“La corta vida feliz
del Oxford café”). Título con resonancias a un famoso
cuento de Hemingway. Fantasía de Dick describiendo lo
imposible en el entorno más pequeñoburgués imaginable.
Reaparece Doc Rupert (Laberinto, de “La máquina
preservadora”), dando vida ahora a objetos mundanos.

Small Town (“Pueblo chico”)


Otro protagonista que lidia con una esposa infiel, que a fin
de cuentas ni le interesa. Durante décadas ha construido
obsesivamente una réplica perfecta del pueblo en el que
vive. Otro final siniestro estilo La dimensión desconocida.

Souvenir (“Recuerdo”)
Tras siglos de búsqueda, exploradores espaciales
encuentran por fin el Planeta de Williamson, habitado por
una sociedad utópica, ajena a excesos tecnológicos, que
rechaza incorporarse a la “federación progresista
galáctica”. Será borrada del cosmos por intransigente. El
horror de la Historia es la otra cara de la utopía.

Strange Eden (“Extraño Edén”)


Dick en territorio mitológico, esta vez con una seductora
Circe interplanetaria.

Survey Team (“Cuadrilla de exploración”)


Cosmonautas intergalácticos originarios de Marte llegan a
un sistema solar buscando un nuevo hogar. La nave se
posa en un planeta devastado, y poco a poco entienden
que han aterrizado en la Tierra.

Time Pawn (“Peón del tiempo”)


Se convirtió en la novela Dr. Futurity, de las más complejas
de PKD, sobre un médico transportado 700 años al futuro,
donde heridos y enfermos prefieren la eutanasia a la
atención médica y la posibilidad de vivir.
The Turning Wheel (“La rueda que gira”)
La rueda es la del karma en una sociedad postapocalíptica.
A las autoridades les preocupa la proliferación de cultos y
sus concomitantes mesianismos. Un investigador que visita
Detroit en misión encubierta topa con un culto que le
salvará la vida: han redescubierto la penicilina.

Upon the Dull Earth (Sobre la oscura Tierra)


Genial. En esta fantasía casi inclasificable Dick logra un
ejemplo perfecto de la apreciación de Anthony Boucher
sobre sus mejores cuentos: “La lógica de la pesadilla
absoluta”. El título proviene de la oda de Proteo a Silvia
(Acto 4, Escena 2) en Los dos caballeros de Verona, de
Shakespeare:

Cantemos pues a Silvia,


Que Silvia en todo se supera;
Supera toda cosa mortal
Que habita sobre la oscura tierra:
A ella traigámosle guirnaldas.
A World of Talent (“Un mundo de talento”)
Una meditación sobre el insólito, peligroso e insuperable
poder que tendrían seres humanos dotados de poderes
psíquicos: telepatía, telequinesis, precognición, y una
resultante ausencia de empatía.

1955

Autofac (“Autofactoría”)
En un mundo devastado, pequeñas colonias de humanos
sobreviven gracias a fábricas manejadas por robots que
siguen produciendo bienes y tecnología que reparten
indiscriminadamente, sin criterio de utilidad para los
sobrevivientes. El horror sin remedio de una tecnología
dominante desbocada, que además se reproduce a sí
misma.

Captive Market (“Mercado cautivo”)


Una vigorosa anciana visita una realidad futura paralela en
el desierto, vendiendo componentes aeroespaciales a
sobrevivientes de una catástrofe nuclear que sueñan con
abandonar la Tierra. La codicia no da para alivio ni perdón,
ni en mundos alternos ni en éste.

The Chromium Fence (“La cerca de cromo”)


Una guerra futura, absurda y fatal entre Puristas y
Naturalistas por motivos demenciales de higiene personal.

Foster, You’re Dead! (“Foster, ¡estás muerto!”)


Crueldad social, matoneo en la escuela primaria; otra visión
oscura de la paranoia nuclear estadounidense de los años
50. Un niño padece escarnio porque su familia tiene el
refugio antiatómico más barato del mercado.

The Hood Maker, también Immunity (“El hacedor de


capuchas”)
No se trata de capuchas comunes, sino de cintas metálicas
usadas en torno al cráneo, que bloquean los poderes
telepáticos de mutantes al servicio de un gobierno
totalitario. Este gobierno hurga mentes en busca de signos
de deslealtad.

Human Is (“Humano es”)


Una mujer tiene que elegir entre un marido despótico e
insensible, y una entidad alienígena que se apropia del
cuerpo de su esposo durante una misión espacial: el
extraterrestre de nombre impronunciable es amable y
cariñoso: humano es. Dick dijo que este cuento era su carta
de presentación, su credo. De las tres virtudes teologales,
siempre afirmó que caritas era la más importante, que
la empatía era la cualidad que distinguía al ser humano del
robot o del androide.

The Mold of Yancy (“El molde de Yancy”)


Al estilo de “Big Brother” en la novela de Orwell, 1984, aquí
la figura dominante de la sociedad totalitaria es un hombre
inexistente, una construcción virtual respaldada por un
ejército de técnicos, publicistas y diseñadores. Como
comentó PKD sobre este cuento: “todo lo que te cuenta el
gobierno es mentira”.

Nanny (“Nana”)
De pronto, en el parque, las nanas robóticas se ponen
psicóticas y brutalmente bélicas. Los niños ya son lo de
menos. Otra sátira de la sociedad de consumo y, esta vez,
de una carísima servidumbre mecánica con obsolescencia
y disfuncionalidad integradas.

Psi-Man Heal My Child! (“¡Hombre Psi cura a mi niño!”)


Situación al límite en un erial postapocalíptico: ¿puede
haber algo más desesperante para unos padres que tener
un hijo enfermo en un mundo sin médicos?

Service Call (“Visita de servicio”)


Otro vendedor a domicilio del universo PKD, con la
particularidad que el despistado técnico viene del futuro a
darle mantenimiento al swibble, enigmático aparato que
debe engalanar todo hogar respetable. El swibble detecta
infaliblemente la ideología de las personas: izquierda,
derecha o centro pierden peso e importancia, hasta que la
única condición ideológica política aceptable es,
precisamente, poseer un swibble.

A Surface Raid (“Incursión en la superficie”)


Después de la Tercera Guerra Mundial, un grupo de
sobrevivientes que ha vivido bajo tierra prepara una
expedición a la superficie sin imaginar que toparán con
seres que antes no existían.

War Veteran (“Veterano de guerra”)


Un veterano de conflictos interplanetarios llega del futuro,
presunto sobreviviente de guerras con las colonias de
Venus y Marte. En realidad es un robot androide, un ardid
para convencer a los terrícolas de que no podrán ganar la
guerra que se avecina. Personaje precursor de los robots
con apariencia humana de ¿Sueñan los androides con ovejas
eléctricas?, filmada como Blade Runner, película que alteró
todo el concepto original de PKD sobre los “replicantes”.

1955 vio la publicación de la primera novela de CF de


Dick, Solar Lottery (Lotería solar), y a partir del año siguiente
su trabajo se bifurcaría entre relatos cortos y novelas.

1956

The Minority Report (“El reporte minoritario”)


Filmada (Steven Spielberg, 2002) con Tom Cruise como
agente policiaco en un futuro en el que los criminales son
arrestados antes de cometer un crimen gracias a visiones
del porvenir de mutantes precogs (precognitivos). La
película respeta elementos básicos del cuento, pero
finalmente se desvía del planteamiento original.

Pay for the Printer (“Paga por el impresor”)


En otro futuro devastado, la sociedad depende de una raza
extraterrestre, los Biltong, que reproducen artefactos y
enseres que la humanidad ya no puede crear o fabricar.

To Serve the Master (“Servir al magíster”)


En una sociedad postapocalíptica, el común de las
personas desconoce la historia más allá de unas décadas
atrás. La guerra que supuestamente devastó la Tierra fue
entre los Racionales y los Sensuales. Eso dicen el credo y
la ley. Pero un humilde mensajero topa con un robot
quebrado, y lo ayuda a reconstruirse. Conocerá la verdad
entonces, pero la verdad no lo hará libre.

Vulcan’s Hammer (“El martillo de Vulcano”)


Relato largo convertido después en novela del mismo
nombre, sobre la computadora Vulcan III, que adquiere
conciencia. Los humanos logran derrotarla con ayuda de
Vulcan II. La novela es considerada la última creación de
PKD dentro de las tradiciones heredadas de las
revistas pulp de CF. Al año siguiente ganaría el Hugo
Award por su novela El hombre en el castillo alto. Se
encaminaría por nuevos derroteros, que llevarán a la
creación de sus obras maestras.

1957

Misadjustment (“Mal adaptado”)
La palabra misadjustment no figura en ningún diccionario.
Una alternativa correcta sería maladjustment (inadaptación).
Historia de un burócrata que cría en su patio trasero
plantas que le permiten volar. Pero para surcar los aires,
realmente no hacen falta, y ésa es su “maladaptación”.

The Unreconstructed M (“La M no reconstruida”)


Cuento future-noir sobre máquinas que suplantan la
presencia humana. Un enredo medio incoherente en torno
a empresarios interplanetarios billonarios disputándose
innovaciones tecnológicas y una mujer muy emprendedora
y manipuladora.

1958

Null-O (“O nula”)
PKD imagina humanos cuya capacidad de empatía es cero.
Su misión es desarticular la realidad. Un extraño jovencito
enajena y desquicia a sus padres, quienes lo entregan a
una institución psiquiátrica. Pero, ¡sorpresa!, el médico
también carece de empatía, y es miembro de una cofradía
secreta con grandiosos planes cósmicos para acelerar la
entropía mediante la madre de todas las desarticulaciones.

1959

Explorers We (“Nosotros, exploradores”)


Por fin, un grupo de cuatro cosmonautas regresa a la
Tierra. Pero no son recibidos con brazos abiertos y
celebraciones; los persiguen el FBI y otras policías. Y es
que el regreso conlleva un pequeño problema: los
cosmonautas ya lo han hecho 21 veces antes.

Fair Game (“Víctima válida”)


Uno de los cuentos de PKD que el crítico marxista Fredric
Jameson, admirador incondicional del autor, clasifica como
basura. Recuerda a “Para servir al hombre”, un cuento más
redondeado, de Damon Knight, que hizo historia televisiva
cuando Rod Serling lo adaptó para su programa La
dimensión desconocida.

Recall Mechanism (“Mecanismo para recordar”)


Sobre un par de pacientes idóneos de un psiquiatra armado
con un mecanismo de espejos para hipnotizar. Uno revela
temores atávicos de caer desde las alturas, pero más bien,
son visiones del futuro. El otro es feliz en cualquier altura,
pero cuando ve a otra persona, no resiste el impulso de
empujarla al vacío. Al igual que en Small Town, acecha
Tánatos, y los pacientes habrán de encontrarse.

War Game (“Juego de guerra”)


La industria juguetera de Ganimedes es única, y su
principal mercado son los niños de la Tierra, donde los
aduaneros sospechan que un juego de soldaditos que
asaltan un castillo es quizás una bomba. No detectan el
juego realmente peligroso, aunque está bajo sus narices.

1963

The Days of Perky Pat (“Los días de Perky Pat”)


Dick se inspiró para este cuento viendo a sus hijas jugar
con Barbies. En California, comunidades de sobrevivientes
de una guerra nuclear dedican su tiempo libre a jugar con
muñecas y muñecos en maquetas de la sociedad de los
años 50. La vida transcurre en paz hasta que los jugadores
de “Pat la Pizpireta” se enteran de otra comunidad donde la
muñeca reina es Connie Companion.

If There Were No Benny Cemoli (“Si no existiera un Benny


Cemoli”)
Dick en especulaciones políticas, enmendándole la plana a
Thomas Carlyle y a su great man. Para este cuento PKD se
basó en una de sus propias excéntricas declaraciones:
“Siempre he creído que en la historia por lo menos la mitad
de la gente famosa nunca existió. Uno inventa lo que
necesita inventar. Quizás incluso Karl Marx fue inventado,
producto de algún escritor chambón”.

What’ll We Do with Ragland Park?(“¿Qué haremos con


Ragland Park?”)
Un baladista compone canciones cuyas letras se vuelven
realidad, y lo contrata la segunda televisora más poderosa
del mundo. Historia de una muerte anunciada, cuando ya
están explorados y poblados planetas del sistema solar y
más allá.

1964

Cantata 140
Cuento que se convirtió en la novela The Crack in Space,
sobre el mundo en 2080, atrozmente sobrepoblado, en el
que millones de personas se encuentran en animación
suspendida, “esperando” una solución.

A Game of Unchance (“Un juego de in-suerte”)


En un mundo futuro, dos ferias itinerantes compiten entre sí
por el favor de la agobiada población que arriesga todo en
sus puestos y juegos. Los carnavales son símbolos de Yin
y Yang, de Eros y Tánatos, amañados para favorecer a las
fuerzas destructivas.

The Little Black Box (“La pequeña caja negra”)


Precursor de la subtrama de la novela ¿Sueñan los androides
…?, que nunca figuró en la película Blade Runner. Una
agente japonesa llega a Cuba para impartir concientización
zen. Ahí es capturada por agentes de la CIA que investigan
la “cajita (negra) de empatía” que conecta al usuario con el
misterioso mesías Mercer. El cuento plantea la religión
como amenaza para regímenes totalitarios, y al mesías
como invasor de otro mundo, aunque no de otro planeta.
Novelty Act (“Espectáculo novedoso”)
La Primera Dama le gana al Presidente el favor y atención
del público. En la Casa Blanca una empresa se dedica a
ofrecerle espectáculos cada vez más novedosos. Una
intriga política entre “simulacros” (androides), que rondan
tanto entre artistas como políticos, hasta que nadie sabe
quién es qué.

Oh, to be a Blobell! (“¡Ah, poder ser un blobel!”)


Impecable cuento que recuerda “El regalo de los reyes
magos” de O. Henry, y “Una obra de arte” de Chéjov, pero
mientras que en éstos el quid lo constituyen objetos
inanimados, aquí son seres vivientes los que juegan sillas
musicales de identidades durante una guerra
interplanetaria. Denuncia de la estupidez de la guerra, y
una exploración de las psiques de las especies
contendientes. Con un inesperado final feliz para todos. De
lo más logrado de PKD.

Orpheus with Clay Feet (“Orfeo con pies de barro”)


PKD es personaje de su propio cuento, bajo su
pseudónimo ocasional Jack Dowland. Su misión en la vida
es inspirar a un escritor de ciencia ficción a realizar su obra
maestra. Con el detalle de que Dowland viaja al pasado,
cuando el autor ni ha pensado en escribir ciencia ficción.
Metaficción que seguirá dándose años después, a partir de
su revelación mística de 1974.

Precious Artifact (“Artefacto preciado”)


Después de trabajar en Marte durante años, un ingeniero
visita la Tierra, pensando volver a ella con su familia. El
“artefacto” es un simulacro de gatito que se lleva de
regreso a Marte cuando entiende que la Tierra ya está
invadida y poblada por androides.

The Unteleported Man (“El hombre no teletransportado”)


Los viajes interestelares se vuelven redundantes cuando se
inventa la tele-transportación, y 40 millones de personas
son despachadas a un mundo paradisiaco a 18 años luz de
distancia, del que nadie ha regresado hasta ahora.
Reeditado póstumamente con 100 páginas que se creían
perdidas, como Lies, Inc. (Mentiras, S.A.)

The War with the Fnools (“La guerra con los Fnuuls”)


Fumar, beber, fornicar. Los fnuuls, simpáticos, hilarantes
seres alienígenas surgidos como de una amable pesadilla,
secuencian los tres “clásicos” vicios humanos resolviendo a
su favor la conquista de la Tierra. Dick haciendo chunga de
todo y de todos.

Waterspider (“Araña acuática”)
Otro ejercicio de metaficción, excelente, en el que aparecen
junto con Dick varios eminentes colegas: Poul Anderson es
el protagonista, secuestrado en un viaje temporal al futuro
durante una convención de CF. Figuran también R.
Heinlein, I. Asimov, A. E. Van Vogt, M. Leinster, J.
Williamson y la autora de exquisita CF Margaret St. Clair.
What the Dead Men Say (“Lo que dicen los hombres
muertos”)
El potentado Louis Sarapis ha muerto, pero existe ahora en
un estado intermedio de animación suspendida del que
revive. Comienza a “transmitir” inesperadamente desde
allende la tumba alterando las telecomunicaciones y
también los medios impresos terrestres, que ahora
presentan mayor complejidad que Finnegans Wake. Ideas
singulares de PKD que culminaron en la escalofriante
novela Ubik, una de sus obras maestras.

1965

Retreat Syndrome (“Síndrome de retirada”)


Un hombre, posible usuario de la droga “Frohadrehina”,
incapaz de ubicar si está en la Tierra o en Ganimedes,
parece vivir en una “banda continua” de alucinaciones, de
irrealidades, en las que asesina una y otra vez a su esposa,
a quien sin embargo observa por videoteléfono. Cuento de
una pesadilla que busca lógica donde no la hay.

1966

Holy Quarrel (“Conflicto sagrado”)


Bien construido y redondeado, con creciente humor
absurdo relata la invasión de la Tierra mediante bolitas de
chicle dispensadas por maquinitas de monedas. La
paranoia de objetos y cosas inicuas llevada a nuevas
alturas.

We Can Remember It For You Wholesale (“Al por mayor lo


podemos recordar por ti”)
Sobre recuerdos implantados más reales que vivencias
verídicas. Filmada ya dos veces como Total Recall, y
probablemente, debido al éxito mundial de la primera
versión con Arnold Schwarzenegger (Paul Verhoeven,
1990), esta película es responsable, quizá más aún
que Blade Runner, de despertar en el siglo pasado el interés
de Hollywood por la deslumbrante veta de ideas de PKD y
su potencial nato para películas o series que prácticamente
nunca respetan la fuente original.

Your Appointment Will Be Yesterday (“Tu cita será ayer”)


Cuento semilla de la novela Counter-Clock World sobre
tecnologías que alteran la continuidad del tiempo,
revirtiendo la entropía, con los consiguientes enredos de
causas y efectos. La vida se da en reversa, afectando
también la política nacional.

1967

Faith of Our Fathers (“Fe de nuestros padres”)


Entre las mejores instancias del llamado gnosticismo
postmoderno del autor. Un ciudadano vietnamita de un
gobierno chino totalitario deja de tomar una droga
mezclada con el agua potable desde décadas atrás, y
accede así a una realidad sobria, terrorífica, inimaginable.
Una fábula de horror, una alegoría multiusos,
diabólicamente adaptable a cualquier contexto social,
gubernamental, democrático o totalitario, ya que nada es lo
que parece ser —idea central del universo PKD—, y ésa es
la única verdad comprensible, o quizás tampoco lo es,
porque, a fin de cuentas, ¿qué es la realidad, qué es la
verdad? Este cuento, que tuvo repercusiones históricas
para el género CF, fue la aportación de Dick a la disruptiva
antología de Harlan Ellison, Dangerous Visions (1967).

Return Match (“Partido de revancha”)


Otro cuento sobre juguetes peligrosos y simulaciones de
inocencia lúdica, esta vez con maquinitas de pinball que
más parecen artefactos de ruleta rusa, y en cuyas partidas
participan inteligencias alienígenas.

1968

Not by Its Cover (“No por su portada”)


Reaparece aquí, si no el wub, su pelaje, usado para forrar
libros de calidad. Pero el pelaje ejerce una extraña
mutación en el contenido de los libros, alterando la
traducción de John Dryden de De rerum naturae de Lucrecio.
Cuando forran la Biblia, convierte pasajes enteros a
mayúsculas. Lo que decide hacer personalmente el editor
con ese pelaje wub resulta de antología. Dick comentó que
en este cuento expresó un deseo suyo largamente
acariciado: que la Biblia fuera cierta.

The Story to End All Stories for Harlan Ellison’s Anthology


Dangerous Visions (“El cuento para acabar con todos los cuentos
para la antología Dangerous Visions de Harlan Ellison”).
Un “extra” ideado por Dick para acompañar “Fe de nuestros
padres” en la citada antología, publicado originalmente en
la fanzine Niekas. El cuento más corto de Dick, 177
palabras en inglés. Admirado por algunos, repudiado por
otros, incluso considerado sacrílego.
1969

The Electric Ant (“La hormiga eléctrica”)


Un hombre sufre un accidente que lo deja tullido, y en el
hospital donde reconstruyen su cuerpo descubre que
realmente no es un humano sino un androide. Culminación
de muchos planteamientos anteriores como los de
“Impostor”: el personaje androide descubre en su pecho un
“carrete” que contiene su programa de “la realidad”, y
comienza a jugar con él, hasta que todo lo sólido se
desvanece en… menos que el aire. (Dick no bautiza como
“hormigas” a los robots o androides por ser industriosos; los
llama robants, neologismo que combina prefijo y sufijo
de robot y servant ,respectivamente).

1974

En febrero-marzo de este año, PKD tiene la revelación


mística que cambiaría no solo su existencia sino su
quehacer literario, durante los ocho años que le quedarán
de vida. Poco a poco, los planteamientos de su ciencia
ficción “invadieron” su vida, o su vida se convirtió en un
planteamiento de ciencia ficción. La naturaleza de la
experiencia mística es personal e incomunicable, y se ha
dicho que PKD dedicó los últimos años de su vida a
intentar expresar la suya, agotando las posibilidades del
lenguaje. Aldous Huxley vivió experiencias místicas
paralelas que, quizás con resultados más felices, intentó
resolver en su obra La filosofía perenne.

The Pre-Persons (“Las pre-personas”)


En una extraña sociedad futura, si a los 12 años no puedes
resolver ecuaciones, significará que no tienes alma, y
pasará por ti la camioneta exterminadora. Infanticidio en
vez de aborto. Dick escribió que el cuento dio pie a la carta
más desagradable que recibió en su vida, enviada con
“odio absoluto” por la escritora de CF feminista Joanna
Russ, autora de El hombre femenino. PKD respondería en
una antología: “…lamento ofender a quienes no están de
acuerdo conmigo respecto del aborto sobre demanda”,
concluyendo con la frase atribuida a Martín Lutero: “Me
mantengo firme, no puedo hacer otra cosa”.

A Little Something for Us Temponauts (“Una pizca de algo


para nosotros, navegantes del tiempo”)
Un cuento trágico sobre viajeros en el tiempo que no logran
conciliar el hecho de haber conocido otras versiones de sí
mismos.

1979

The Exit Door Leads In (“La puerta de salida lleva al interior”)


En un futuro indeterminado, Bob Bibleman gana un
concurso que lo inscribe forzosamente en un colegio militar
en Egipto. ¿Podrá revelar un supuesto secreto industrial
que beneficiaría a millones de seres humanos (o no)? Uno
de esos cuentos que pide quizá dos lecturas sucesivas
para entender a qué juega PKD en un episodio de gallina
ciega, en el que el invidente y desconcertado protagonista
persigue realidades éticas y morales.

1980

I Hope I Shall Arrive Soon, originalmente Frozen


Journey (“Espero llegar pronto”, o “Viaje congelado”).
Un cosmonauta en animación suspendida, entretenido con
vivencias implantadas durante décadas de viaje
interestelar, al llegar a la Tierra ya no puede distinguir cuál
o qué es la realidad.
Rautavaara’s Case (“El caso de Rautavaara”).
Científicos alienígenas hacen un experimento teológico con
el cerebro de una cosmonauta finlandesa. Rautavaara (o su
cerebro) visualiza la aparición de una figura, Cristo, que
devora a quien no lo reconoce. Una inversión de la
eucaristía, que ha llevado a advertencias de que católicos
no lean el cuento. De los más polémicos escritos jamás por
un autor de ciencia ficción.

Chains of Air, Web of Aether (“Cadenas de aire, red de éter”)


En un planeta inhóspito, un hombre y una mujer, en
misiones de colonización, viven en apartadas cabañitas
individuales, visitados periódicamente por un correo que les
lleva alimentos. La soledad de los personajes termina
acercándolos, en uno de los cuentos más enigmáticos de
PKD, también titulado “El hombre que sabía cómo perder”.

1981

The Alien Mind (“La mente alienígena”)


¿Qué hacer si le espera a uno un viaje interestelar de años,
sin posibilidad de suspensión animada o de sueño
criogénico, y con una sola cosa para comer? Dick imaginó
aquí un castigo desconcertante.

Philip K. Dick fallecería en 1982; curiosamente, 14 años


después de ganar el Hugo Award por la novela The Man in
the High Castle, publicada 14 años después de su primer
cuento. Los que siguen serían publicados póstumamente.

1984

Strange Memories of Death (“Extraños recuerdos de la


muerte”)
Cuento atípico, metaficción, en el que PKD medita sus
problemas románticos y la triste suerte de una anciana,
la Lysol Lady (“Sra. Lysol”, una marca de desinfectante) que
tendrá que abandonar el departamento en un edificio
donde el autor pudo adquirir el suyo en condominio.

1987

Cadbury, the Beaver Who Lacked (“Cadbury, el castor que


tenía deficiencias”)
Una alucinante fábula, o alegoría, sobre un castor dedicado
a roer árboles, cuya esposa ricachona le hace la vida de
cuadritos. El castor inicia un periplo iniciático, al final del
cual, ante revelaciones de tres mujeres, símbolos del
eterno femenino, Cadbury se va desvaneciendo, como
voluta de humo. Extraño relato, mitad confesión
autobiográfica de sus dificultades matrimoniales (PKD tuvo
cinco esposas), y posiblemente, una premonición literaria
de la muerte del autor (aunque fue escrito en 1971).

The Day Mr. Computer Fell Out of Its Tree (“El día en que el
Sr. Computadora cayó de su árbol”).
Todo le falla a Joe Contemptible (“Pepe Despreciable”) en su
hogar robotizado: el Sr. Puerta no abre, el Sr. Closet le
ofrece ropa de payaso, el Sr. Computadora que se la pasa
leyendo cuentos de CF de un tal Phil Dick. Cuando Joe
contempla suicidarse, lo arresta la policía, y es llevado ante
una misteriosa beldad que resolverá su “miserable pequeña
vida sin sentido”. Una especie de sueño wishful thinking de
PKD, escrito en 1977.

The Eye of the Sybil (“El ojo de la sibila”)


Metaficción en la que PKD (Philos Diktos de Tiana) relata,
desde el Imperio romano, visiones del futuro que la sibila
de Cumas recibe de inteligencias extraterrestres. Dick
borda sobre el pasaje “profético” de la Cuarta égloga
de Las bucólicas de Virgilio, que derivó en la monumental
malinterpretación histórica de hermeneutas cristianos —
durante toda la Edad Media— que creyeron que Virgilio
anunciaba el advenimiento de Jesucristo. Fue
precisamente la “profecía” que llevó a Dante a convertir a
Virgilio en su guía para atravesar el Infierno y el Purgatorio
en la Comedia. Dick debió saber que la cristiandad se
equivocó con respecto a la supuesta “profecía” de Virgilio
(en realidad un trazo hiperbólico en honor a su protector
Cayo Asinio Polión), por lo que el final de este cuento, que
anuncia el advenimiento de una nueva y gloriosa era,
simplemente no funciona.

Stability (“Estabilidad”)
Una sociedad futura en la que el ingenio humano deja de
manifestarse; en el año en que trascurre la historia solo se
han registrado dos patentes. El gobierno autoritario
desaparece a los disidentes, elimina a todos los
contestatarios. Pero el protagonista ha viajado al futuro, y
después al pasado, y ha registrado una patente que acaba
alterando toda la realidad, incluyendo la suya, obliterando
incluso su memoria de su existencia previa. Curiosamente,
este cuento, algo nihilista, inédito hasta después de la
muerte de PKD, fue escrito en 1947.
A Terran Odyssey (“Una odisea terrestre”)
Pastiche elaborado en 1964, reuniendo pasajes
descartados de la novela Dr. Bloodmoney.

121 cuentos nos dejó la imaginación de Philip K. Dick,


además de novelas especulativas, realistas y otros escritos,
diarios, correspondencia y las acaso impenetrables 8 mil
páginas de su Exégesis que desde 1974 seguía escribiendo
hasta que murió, víctima de varias apoplejías sucesivas.

Hoy en día, cuando las ciencias mismas estrechan cada


día más los márgenes de posibles especulaciones literarias
que no sean mera fantasía, lo posthumano que Dick
imaginó en sus robots y androides queda confirmado en
los cyborgs de nuestro futuro. Hace unos días, el Prof.
Martin Rees, eminente cosmólogo y astrofísico, Astronomer
Royal del Reino Unido, describe en el siguiente video algo
de lo que seguirá en nuestra conquista del espacio: el uso
de robots en los más lejanos confines del sistema solar,
porque allí la presencia humana será realmente
innecesaria.

Y quizás, en solo cien años más, cuando las ciencias


hayan transformado la narrativa misma de la humanidad, la
contribución innegablemente valedera de Philip K. Dick
sería que nunca olvidemos la esencia de lo que es ser
humano, aunque seamos cyborgs, mas no robots o
androides como tales. En una palabra, que no olvidemos
nunca caritas.

Bibliografía

• PKD A Philip K. Dick Bibliography, Compiled by Daniel J H


Levack with Annotations by Steven Owen Godersky,
Underwood/Miller, San Francisco, California – Columbia,
Pennsylvania, 1981. Considerada por muchos como la
mejor de varias bibliografías, aunque no ha sido reeditada
ni actualizada.

Los 121 cuentos canónicos de PKD comentados en este


artículo pueden leerse en inglés o en español, en estas
opciones:

 • En 5 e-books:

– PKD, Volume One of the Collected Stories – Beyond Lies the


Wub, A Gollancz e Book, an Hachette UK Company, 1988.

–Volume Two (Second Variety), Volume Three  (The Father-


Thing), Volume Four (Minority Report) y Volume Five (We Can
Remember It For You Wholesale), e-books de la misma
editorial.

• En español, en 5 tomos, ediciones físicas, existe una


compilación paralela:

PKD, Cuentos completos I, Editorial Minotauro, Barcelona,


España, 2005; o bien  Cuentos completos II, III, IV y V,
Editorial Minotauro, Barcelona, España.

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