0% encontró este documento útil (0 votos)
46 vistas10 páginas

Orientación Profesional Desde El Enfoque Del Analisis Del Comportamiento

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1/ 10

ORIENTACIÓN PROFESIONAL DESDE EL ENFOQUE

ANÁLISIS DE COMPORTAMIENTO:

EVALUACIÓN DE UNA EXPERIENCIA

ENFOQUE DE COMPORTAMIENTO APLICADO A LA ASESORÍA PROFESIONAL

CON ADOLESCENTES:

LA EVALUACIÓN DE UNA EXPERIENCIA

Cynthia Borges de MOURA1

Jocelaine Martins da SILVEIRA2

ABSTRACT

El objetivo de este trabajo fue evaluar una experiencia de intervención grupal en Orientación
Vocacional según el enfoque de Análisis de Conducta. Se buscó evaluar los cambios en el
comportamiento de los adolescentes con respecto a los indicadores de elección profesional.
Participaron de la intervención diez adolescentes, de ambos sexos, con edades comprendidas
entre los 15 y los 19 años, estudiantes de secundaria.

El programa consistió en nueve sesiones semanales estructuradas para discutir el tema


vocacional, enfocadas en el desarrollo del autoconocimiento y conocimiento de las
profesiones. Antes del inicio y al final de las consultas, se aplicó un instrumento que contiene
preguntas relacionadas con los indicadores de elección profesional para la recolección de
datos a comparar. Los resultados mostraron que el 50% de los adolescentes lograron hacer su
elección profesional y el otro 50% avanzó en cuanto a criterios personales para la selección
profesional.

Estos resultados indican que el modelo parece ser efectivo y necesita ser mejorado para
satisfacer las necesidades de todos los adolescentes que buscan el Programa.

Palabras clave: Orientación profesional, Orientación vocacional, Elección profesional, Análisis


de comportamiento.
Este trabajo se refiere a la sistematización de un Programa de Orientación Profesional según el
marco teórico del Análisis de Conducta. Esta propuesta surge ante la creciente demanda en el
área de Orientación Profesional, la necesidad de desarrollar una herramienta adecuada para
enfrentar la complejidad de esta problemática y la escasez, o inexistencia, de trabajos
sistematizados que pretendan investigar el dilema de elección profesional de forma elaborada,
principalmente desde un punto de vista conductual. El presente estudio investigó la
efectividad de emplear el Análisis de Comportamiento Funcional como un método que guió las
estrategias de intervención para ayudar a los adolescentes en su elección profesional. Se
asumió que el Análisis de Conducta tiene importantes aportes al área de Orientación
Profesional dado su carácter funcionalista, contextualista y directivo, pudiendo realizar análisis
de contingencia dirigidos a una toma de decisiones más consciente por parte del adolescente.

Delineando un modelo comportamental de Orientación vocacional

El Análisis de Conducta no cuenta con un modelo estructurado de práctica en Orientación


Vocacional, aunque sí ofrece la posibilidad de interpretar el tema de la elección profesional. A
menudo, los analistas de comportamiento evitan la tarea de ayudar a los adolescentes a elegir
profesiones, remitiendo a los clientes con esta demanda a otros profesionales. En ocasiones,
realizan labores de orientación profesional, sin preocuparse por informar de sus
procedimientos a la comunidad de médicos.

Este hecho parece que se debe a la negativa a adherirse a los modelos tradicionales de
asesoramiento en esta área, que comúnmente se ha llamado "Orientación Vocacional". Por su
connotación tradicionalmente mentalista, el término "vocación" puede haber quitado el
interés de los Analistas de Conducta por el problema, ya que, en otras palabras, "descubrir la
vocación" implica comprometerse en varias conductas relacionadas con la elección
profesional.

Analizar conductualmente la "vocación"

Primero, es necesario pensar en el concepto de “vocación” para el Análisis de Conducta.


Parece evidente el rechazo del modelo “vocacional” como algo inherente a la persona,
determinado internamente y que solo necesita ser develado a su portador.

Partiendo de una visión del hombre completamente diferente (Skinner, 1974, 1989), El análisis
de la conducta entiende la “vocación” como una construcción personal, o como un conjunto
complejo de variables filo y ontogenéticas que se ordenan de manera única para cada
individuo. Es decir, la “vocación” es un concepto construido socialmente, en la medida en que
existe un conjunto de valores y normas sociales a los que se espera que las personas
respondan, adaptando sus características a los estándares de un momento histórico
determinado.

Por tanto, la "vocación" de una persona está determinada socialmente e implicará una
combinación única de su historia genética, personal, familiar y cultural. La disposición de estas
variables a lo largo de la vida del individuo lo guiará hacia el desarrollo de intereses y
habilidades que deberían encajar en un conjunto razonablemente restringido de opciones
profesionales (Macedo, 1998).

Un procedimiento de asesoramiento profesional basado en patrones de comportamiento


debería:

l) llevar al individuo a discriminar las variables de estos diferentes contextos de control a los
que se exponen sus conductas de elección y decisión; 2) proporcionar información relevante
sobre las profesiones de interés, discutiendo compatibilidades y perspectivas; y 3) aumentar la
probabilidad de comportamientos relacionados con la elección y / o la toma de decisiones.

Decisión como proceso conductual

Según Skinner (1989), la conducta de decidir es esencialmente un proceso de generación de


condiciones que harán que un curso de acción determinado sea más probable que otro. El
proceso se puede ilustrar con el ejemplo de alguien que dice que está decidido a pasar sus
vacaciones en la playa, al contar esto a sus colegas, la persona controla el curso de su propio
comportamiento, reduciendo la probabilidad de cambiar de opinión. "Decidir" es, para
Skinner, ante todo, un "proceso", que está relacionado con una clase de estímulos, a menudo
manipulados por la persona que decide.

En definitiva, la práctica de la orientación profesional bajo el enfoque del análisis de la


conducta presupone el modelado de clases conductuales relacionadas con la elección y
decisión que son, en sí mismas, “procesos”. Así, el producto o contenido de la elección tiene
menos relevancia si se compara con la primacía de aprender a decidir y / o elegir, que
caracteriza el objetivo general de la Orientación Profesional. De acuerdo a lo expuesto, el
proceso de elección requiere la oferta de clases de estímulos que son traducidos por las
llamadas “opciones profesionales” para ser consideradas.

Comportamiento verbal en la orientación vocacional

Tanto como el análisis del contexto de vida del adolescente, es importante conocer las reglas a
las que responde. "¿Cómo se comporta el aprendiz verbalmente durante las sesiones?" Esta
pregunta llevará al analista de comportamiento a 1) identificar pensamientos y sentimientos
relacionados con la elección profesional; 2) interpretar cómo los contextos pasado y presente
del adolescente interfieren en la toma de decisiones; 3) identificar (para luego cambiar) reglas
para mantener relaciones impropias o distorsionadas con contingencias reales que se refieren
a la elección profesional. El asesor evalúa con los adolescentes la idoneidad de algunas reglas
y, a menudo, discute reglas con ellos, tales como: “Necesito hacer mi elección correctamente
porque es definitiva y será irreversible”; “El daño a mi vida será irreparable, si me equivoco en
la elección”, “Si elijo la carrera 'correcta', no encontraré obstáculos profesionales”, que
impiden considerar cambios de rumbo profesional en caso de cambios. en las contingencias
presentes o futuras.

Contribuciones de otros enfoques para comprender el problema


En nuestra experiencia de Orientación Vocacional con enfoque en Análisis de Conducta, a
través de lecturas de textos clásicos, hemos buscado información de la práctica tradicional en
Orientación Vocacional. Creemos que la experiencia de estos clínicos puede aportar
indicaciones útiles para la caracterización de la población, así como de recursos y técnicas de
intervención, que con algunas modificaciones complementarán nuestra práctica. Por ejemplo,
los modelos psicodinámicos (Holland, 1971; Roe,

1972; Bohoslavsky, 1977) señalan la importancia de incluir metas dirigidas tanto al


autoconocimiento como al conocimiento de las profesiones en el proceso de orientación. Esta
propuesta corresponde a una de las metas del analista de conducta que promoverá el
autoconocimiento al analizar funcionalmente con el adolescente, las variables de las cuales es
función la conducta de elección profesional. Por otro lado, los modelos de decisión (Hilton,
1959; Hershenson y Roth, 1966; Gati, 1986; Gati, Shenhav y Givon, 1993) han contribuido al
proponer la delimitación de un procedimiento secuencial para orientar el proceso de toma de
decisiones, categorizando y sugiriendo los pasos a seguir para tomar una decisión eficaz.
Estableciendo un paralelo con la intervención del analista de conducta, puede utilizar el
entrenamiento de habilidades básicas, lo que lo lleva a avanzar en su elección (modelado) y
analizando alternativas paso a paso, según unos criterios seleccionados hacia una decisión
final.

¿Qué tiene que ofrecer el análisis de comportamiento a la orientación vocacional?

Azrin y Besalel (1980) publicaron un programa de rehabilitación vocacional basado en análisis


de comportamiento. El programa está dirigido a personas desempleadas que buscan
reintegrarse al mercado laboral y señala diversos supuestos de la orientación vocacional que
pueden orientar las intervenciones con otras poblaciones. Según estos autores, el enfoque
conductual de la orientación vocacional tiene varias características que lo diferencian de otros
enfoques: 1) las estrategias están principalmente orientadas a resultados: encontrar un trabajo
(o, en este caso, decidirse por una profesión), 2) la intervención enfatiza el aprendizaje como
un determinante de la conducta en lugar de habilidades o predisposiciones innatas, con una
formación adecuada que puede conducir al individuo para alcanzar las habilidades necesarias
para una profesión, y 3) los consejeros utilizan el refuerzo de múltiples fuentes para obtener
cambios de comportamiento y un aumento de la motivación para seguir el proceso de
búsqueda de información.

Así, se considera que el Análisis de Conducta puede contribuir a la práctica de la orientación


profesional en la medida en que establece un marco teórico que sitúa la elección profesional
en una perspectiva integral, haciendo del alumno un sujeto activo en su elección. Además,
cuenta con un conjunto de procedimientos de intervención que abordan aspectos centrales de
la toma de decisiones. Estos aportes parecen lo suficientemente amplios como para abarcar el
conjunto de variables que intervienen en la elección profesional y brindar a los adolescentes el
apoyo necesario para superar sus conflictos hacia una elección consciente, a partir de sus
posibilidades concretas.

Objetivo
El objetivo de este trabajo fue evaluar una experiencia de Orientación Profesional según el
enfoque de Análisis de Conducta mediante la verificación de cambios en la conducta de
elección profesional de los adolescentes que fueron sometidos al Programa de Orientación. Se
planteó la hipótesis de que una intervención sistemática enfocada en esta problemática y sus
determinantes podría conducir a la ocurrencia de avances significativos en la conducta de
dichos adolescentes en relación a los indicadores de elección profesional y así demostrar la
efectividad de aplicar el enfoque conductual a la Orientación Vocacional, señalando un camino
para la mejora de la presente propuesta en futuras investigaciones.

Método

Sujetos: Participaron de la intervención 10 adolescentes, 06 mujeres y 04 hombres con edades


comprendidas entre 15 y 19 años, todos cursando el nivel secundario. Tres grupos fueron
atendidas al mismo tiempo, y se agruparon los resultados de los 10 sujetos que completaron
totalmente el proceso de intervención con fines de análisis.

Ubicación: Las consultas se realizaron en las instalaciones de la Clínica Psicológica de la


Universidad Estatal de Londrina.

Procedimiento:

El procedimiento consta de tres fases:

1a Fase: Pre-Test: Previo al inicio de las consultas se realizó una caracterización de los sujetos y
un relevamiento preliminar de la situación actual de los adolescentes en relación a la elección
de profesión a través de un instrumento que contiene preguntas sobre indicadores relevantes
de elección profesional. (adaptado de Vasconcellos, Oliveira & Carvalho, 1976).

2ª Fase: Intervención: El programa de Orientación Profesional consistió en nueve sesiones


estructuradas para discutir los problemas vocacionales de los adolescentes, quienes recibieron
asistencia grupal. Las sesiones estuvieron enfocadas a desarrollar el proceso de
autoconocimiento y conocimiento de las profesiones. Cada grupo atendido tuvo sesiones
semanales de dos horas de duración, bajo la coordinación de dos supervisores y contó con la
presencia de un observador, que permaneció en la sala para registrar los datos.

El programa de intervención se estructuró de la siguiente manera: las sesiones uno a tres


enfatizaron el trabajo de autoconocimiento, con el objetivo de promover la discriminación de
habilidades, aptitudes, intereses, aspiraciones, perspectivas personales y sociales relacionadas
con las condiciones de vida de cada adolescente. Las sesiones cuatro a seis están enfocadas a
brindar información sobre las profesiones con el fin de dar a conocer las contingencias
relacionadas con: carreras, cursos técnicos y de educación superior, exámenes de ingreso y
mercado laboral. También se buscó desarrollar habilidades básicas para la búsqueda de
información concreta y actualizada sobre una determinada profesión. Finalmente, las sesiones
siete a nueve tuvieron como objetivo integrar la información obtenida hasta el momento y
fomentar una toma de decisiones efectiva.

3ª Fase: Post-Test: Para la comparación de los datos, al final de las nueve sesiones, los
adolescentes fueron nuevamente sometidos al mismo instrumento utilizado en el pre-test. Los
adolescentes también respondieron a un Cuestionario de Autoevaluación y Evaluación del
Programa de Orientación.
Resultados

Los resultados que se presentan a continuación se refieren al agrupamiento comparativo de


datos de tres grupos de intervención que fueron atendidos simultáneamente. Como hubo
algunos abandonos en los grupos, los diez sujetos que finalizaron las consultas se agruparon
para fines de análisis, ya que se mantuvo el mismo procedimiento para los tres grupos de
sujetos.

Al principio, todos los adolescentes tenían dudas sobre tres opciones profesionales, mientras
que al final, el 50% consideró entre una y dos profesiones para elegir. Entre los que
mantuvieron tres opciones, algunos reorganizaron el orden de prioridades y otros incluyeron
opciones no consideradas previamente.

La influencia de la opinión de familiares y amigos se minimizó al final de la intervención, su


frecuencia se redujo de uno a cero; mientras que la percepción de características personales
incompatibles con determinadas profesiones aumentó de dos a cuatro. Se encontró que la
probabilidad de estar empleado en la profesión fue un factor indicado dos veces al inicio y tres
veces en la posprueba. Las ventajas económicas ofrecidas se mencionaron cinco veces al final
del programa y tres veces en la prueba previa. El estatus social atribuido a las profesiones
empezó a influir en la elección profesional, habiéndose indicado una vez en el postest. Por otro
lado, solo un adolescente señaló como influyente en la elección el hecho de “tener
información solo sobre una determinada profesión”, luego de haber sido presentado al
Programa. Los factores “gusto por la profesión”; “Habilidades y aptitudes”; El “contacto previo
(con la profesión)” y la “orientación profesional” no cambiaron, comparando el pre-test y el
post-test.

Al final del proceso, seis adolescentes se consideraron bien informados sobre su profesión
favorita. Otros cuatro adolescentes comenzaron a considerarse bien informados sobre su
segunda y tercera opción profesional, mientras que al inicio de la intervención, para cualquiera
de las opciones consideradas, el nivel de información era muy bajo, oscilando entre cero y dos.

En el post-test, hubo una disminución en la influencia de factores que dificultaban la toma de


decisiones en relación a la profesión para todos los participantes. Sin embargo, el 50% de las
respuestas indicaron que los adolescentes todavía se sentían atraídos por diferentes carreras.
El factor “poco conocimiento de las profesiones”, señalado con alta frecuencia en el pre-test,
ya no fue reportado por los adolescentes luego de la intervención. Solo un participante indicó
que tenía poco conocimiento sobre los cursos en el post-test, mientras que tres lo indicaron al
inicio. Los factores “dificultad para estudiar fuera de la ciudad”; La “falta de base para el curso”
y la “falta de un método de estudio adecuado”, señaladas al inicio, no fueron mencionadas en
el post-test como factores que dificultan la decisión.

En cuanto a los sentimientos descritos por los adolescentes en el proceso de toma de


decisiones, se observa un incremento en los relatos de experiencias subjetivas en el sentido de
“seguridad”, considerando un continuo inseguridad-seguridad. En la prueba previa, ningún
adolescente se consideró “completamente seguro”, a diferencia de dos que se describieron al
final del proceso de Orientación Vocacional. La indicación de “Me siento inseguro” ocurrió
cinco veces en la prueba previa y solo dos al final del programa. Sin embargo, cuatro de los
adolescentes no describieron cambios en los sentimientos de seguridad, comparando el pre-
test y el post-test.
Se observa que, al finalizar el proceso de orientación, cuatro de los diez adolescentes se
decidieron sobre su profesión, lo cual fue señalado por solo uno de ellos en el pre-test; cuatro
se consideraron “casi decididos” (tres lo indicaron en el pre-test) y otros dos se ubicaron entre
“indecisos” (tres indicaron este factor al inicio) o “con dificultad” para tomar una decisión,
habiéndose indicado dos veces en la prueba previa y dos veces al final del programa.

Discusión

La comparación del pre y post-test sugiere que la práctica de la Orientación Profesional bajo el
enfoque del Análisis de la Conducta parece ser una forma prometedora de intervención en el
asesoramiento clínico.

Si bien una de las estrategias de intervención consistió en promover un aumento en la


variabilidad de opciones y criterios de elección, el efecto, al final del proceso de orientación,
fue una restricción en el número de opciones entre las cuales los adolescentes tenían dudas.
Esto sugiere que el proceso de Orientación Profesional fue eficaz para modelar
comportamientos relacionados con la toma de decisiones. Los adolescentes parecen haber
eliminado algunas opciones de profesiones que, inicialmente, les parecieron interesantes, al
recibir más información sobre diversas profesiones. Investigar el proceso individual de los
adolescentes que quedaron en duda entre tres opciones profesionales, es decir, que no
cambiaron con el transcurso del proceso, podría arrojar luz sobre qué estrategias de
intervención merecen ser agregadas o removidas en futuras consejerías.

Se constató, luego de la orientación, que la opinión de familiares y amigos dejó de tener una
marcada influencia en la elección de los adolescentes. Por otro lado, se empezó a considerar el
estatus social atribuido a las profesiones, las posibilidades de empleo y las ventajas
económicas que, antes, no influían en los criterios de elección. Quizás esto se deba a la
provisión de información sobre las profesiones y el acercamiento del estudiante a las
contingencias relacionadas con una carrera determinada, reduciendo expectativas poco
realistas. Esta interpretación parece corroborada por una menor frecuencia de notas, en el
post-test, del factor “tener información sobre una sola profesión” como influyente en la
elección. Un mayor número de adolescentes logró identificar “profesiones incompatibles con
sus competencias”, como factor que incidió en la exclusión de opciones, lo que sugiere un
aumento del autoconocimiento y conocimiento de las características de las profesiones. De
hecho, el número de adolescentes que se consideraban bien informados sobre las opciones
profesionales entre las que tenían dudas aumentó significativamente en el postest.

La Orientación Vocacional no se indicó antes ni después del proceso de asesoramiento como


factor que influyera en la elección de la profesión. Esto parece indicar que el proceso de
asesoramiento no fue coercitivo, aunque sí directivo. Al parecer, la orientación solo se
relacionó con la disminución de la influencia de otros factores coercitivos. El "contacto previo"
con las profesiones, el gusto por las mismas y las "habilidades y aptitudes" fueron factores
señalados como influyentes en la elección, tanto antes como al final de la Orientación
Profesional.

Los consejos parecen haber sido menos señalados como influyentes en la elección, al final del
proceso, debido a que se incentivó a los adolescentes a buscar de manera autónoma y directa
la información relevante sobre las profesiones. Esto parece corroborarse con la indicación de
los adolescentes que afirmaron estar más informados sobre la opción profesional de mayor
interés, (ya sea primero, segundo o tercero) proporcionalmente, lo que sugiere un proceso
activo de búsqueda de información relevante.

La intervención pareció disminuir el número de factores que obstaculizaron la decisión


profesional. Si bien en el post-test aún existían dudas sobre el mercado laboral y los cursos, se
puede notar que el escaso conocimiento de las profesiones, frecuentemente señalado en el
pre-test, ya no es un factor que obstaculizara la decisión en el final de la orientación. Parece
que el 50% de los adolescentes todavía se sintieron atraídos por diferentes carreras al final de
la orientación, sin embargo, la mayoría de los informes subjetivos de los sentimientos
experimentados parecían migrar de “inseguro” a “seguro” y “completamente seguro”.

Al final del proceso de orientación, cuatro de los diez adolescentes se consideraron decididos
sobre su profesión y otros dos dijeron que estaban “casi decididos”. La orientación pareció
ayudar más a los adolescentes que estaban indecisos, pero que ya tenían algunas opciones,
que a aquellos que aún no habían seleccionado las opciones a considerar. Estos datos sugieren
que se deben emplear diferentes estrategias para ayudar a los adolescentes que aún no tienen
opciones de elección profesional, mientras que, para aquellos que ya tienen estas opciones, el
programa sistemático ha demostrado ser prometedor.

En cuanto a este resultado, también se debe considerar que estos adolescentes no


participaron en el mismo grupo de orientación. Así, incluso bajo la influencia de las mismas
estrategias clínicas, el resultado, más o menos cercano a la toma de decisiones segura,
también debe atribuirse a la forma en que los grupos son manejados por diferentes
terapeutas. Se sabe que la forma en que se emplean las estrategias y las características
personales más o menos facilitadoras para los terapeutas son variables relevantes para ser
consideradas como influyentes, especialmente en el caso de los adolescentes.

Finalmente, se debe considerar la necesidad de mejorar el instrumento utilizado en el pre y


post test, ya que alguna información relevante sobre el proceso individual parecía estar
dispersa en las categorías establecidas, dificultando la comparación de los datos con fines
comparativos, mientras que otros Las preguntas fueron muy amplias para que los adolescentes
pudieran expresar objetivamente los logros obtenidos con el proceso de orientación.

Además, las estrategias de intervención eficaces para desarrollar la capacidad de seleccionar


opciones profesionales previas merecen ser propuestas y probadas. Después de todo, los
datos sugieren que esta habilidad se traduce en un paso inicial, sin el cual el repertorio de
toma de decisiones se vuelve ineficaz, haciendo que la tarea de elección profesional sea
costosa y riesgosa para el adolescente.

CONCLUSIÓN

El presente estudio, a pesar de ser una evaluación inicial de una experiencia integradora de
Análisis de Conducta y Orientación Profesional, sugiere que una intervención sistemática
enfocada en el tema de la elección profesional y sus determinantes puede conducir a la
ocurrencia de avances significativos en la conducta de los adolescentes en relación con los
indicadores de elección profesional.

A partir de conocimientos previos sobre la importancia de trabajar con el autoconocimiento y


el conocimiento de las profesiones (Lucchiari, 1993; Billups y Peterson, 1994; Neiva, 1995;
Macedo, 1998) fue posible avanzar no solo en la propuesta de estrategias adecuadas. los
objetivos, sino la forma en que estas estrategias se implementaron en el proceso de toma de
decisiones.

Las estrategias de intervención apuntaron principalmente a incrementar la variabilidad


conductual de los adolescentes en cuanto al contacto con el contexto de las profesiones. Se
asumió que al aumentar la información sobre los criterios de elección relevantes (los
relacionados con las características personales y las profesiones), los adolescentes podían
restringir mejor sus opciones en función de la selección de sus propios criterios (Gati, 1986;
Gati, Shenhav y Givon, 1993).

La elección de los criterios de selección / exclusión de opciones es muy importante en el


proceso de toma de decisiones, ya que se sabe que la integración del conocimiento sobre uno
mismo y sobre las profesiones ya no conduce a una combinación de hombre / profesión
(Macedo, 1998). De esta forma, se llevó a los adolescentes a explorar las profesiones a través
de material actualizado, que les permitiría acceder a información específica sobre los cambios
que emergen de los cursos y del mercado laboral. Y conocer no solo tus intereses y habilidades
actuales, sino también tu potencial, que se puede desarrollar a través de una buena formación
técnica, para cumplir con los requisitos profesionales que son de interés personal.

Además, la presente evaluación permitió identificar en el repertorio de los adolescentes,


aspectos conductuales considerados requisitos básicos para que la elección efectiva sea más
probable. Por ejemplo, la diferencia observada entre los adolescentes que traían opciones
previas de Orientación y los que no las tenían. Aquellos que previamente habían seleccionado
algunas opciones para ser consideradas respondieron mejor a las estrategias utilizadas en este
modelo de intervención. Otros estudios podrán profundizar en este aspecto, proponiendo y
probando formas de intervención que favorezcan el desarrollo de estos requisitos básicos, y
ayuden a estos adolescentes, de la misma forma, en el proceso de decisión de su futuro
profesional.

Por el momento, este estudio permite concluir que, al igual que en el modelo de Rehabilitación
Profesional propuesto por Azrin y Besalel (1980), los principios conductuales resultaron útiles
para el desarrollo de programas estructurados de Orientación Profesional con adolescentes.
De esta forma, el Análisis de Conducta parece ofrecer una base conceptual prometedora para
que los programas de Orientación Profesional puedan basarse en un análisis cuidadoso de la
dificultad de elegir a cada adolescente, ofreciendo una forma de asistencia efectiva en este
proceso, sea cual sea su repertorio de conductas. con respecto a la toma de decisiones.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

AZRIN, N.H. & Besalel, V.A. (1980). Job Club Counselor’s Manual: A behavioral approach to
vocational counseling. Austin: Pro-ed.

BILLUPS, A. & Peterson, G.W. (1994). The Appreciation of Career Literature in Adolescents. The
Career Development Quarterly. 42, 229-237.

BOHOSLAVSKY, R. (1977). Orientação vocacional: A estratégia clínica. São Paulo: Martins


Fontes.

GATI, I. (1986). Making career decision – A sequential elimination approach. Journal of


Counseling Psychology, 33, 408-417.
GATI, I., Shenhav, M. & Givon, M. (1993). Process involved in carrer’ preferences and
compromises. Journal of Counseling Psychology. 40 (1), 53-64.

HERSHENSON, D. S. & Roth, R. M. (1966). A decisional process model of vocational


development. Journal of Couseling Psychology,13 (3), 368-370.

HILTON, T. L. (1959). Career decisionmaking. Journal of Couseling Psychology, 6, 291-298.

HOLLAND, J. (1971). Técnica de la elección vocacional: tipos de personalidad y modelos


ambientales. México: Trillas.

LUCCHIARI, D.H.P.S. (Org). (1993). Pensando e Vivendo a Orientação Profissional. São Paulo:
Summus.

MACEDO, R. B. M. (1998). Seu diploma, sua prancha: como escolher a profissão e surfar no
mercado de trabalho. São Paulo: Saraiva.

NEIVA, K. M. C. (1995). Entendendo a Orientação Profissional. São Paulo: Paulus. ROE, A.


(1972). Psicologia de las profesiones. Madri: Marova.

SKINNER, B. F. (1974). Sobre o Behaviorismo. São Paulo: Cultrix.

SKINNER, B. F. (1989). Ciência e Comportamento Humano. São Paulo: Martins Fontes.

VASCONCELLOS, M. J .E., Oliveira, A. L. Q. & Carvalho, M. A. V. (1976). Curso de Informação


Profissional, Belo Horizonte: Vigília, Rio de Janeiro: FENAME.

También podría gustarte