Infografia de Mozart
Infografia de Mozart
Infografia de Mozart
La obra mozartiana abarca todos los géneros musicales de su época e incluye más de seiscientas
creaciones, en su mayoría reconocidas como obras maestras de la música
sinfónica, concertante, de cámara, para fortepiano, operística y coral, logrando una popularidad y
difusión internacional.
Según críticos de música como Nicholas Till, Mozart siempre aprendía vorazmente de otros
músicos y desarrolló un esplendor y una madurez de estilo que abarcó desde la luz y la elegancia, a
la oscuridad y la pasión —todo bien fundado por una visión de la humanidad «redimida por el
arte, perdonada y reconciliada con la naturaleza y lo absoluto»—.Su influencia en toda la música
occidental posterior es profunda; Ludwig van Beethoven escribió sus primeras composiciones a la
sombra de Mozart, de quien Joseph Haydn escribió que «la posteridad no verá tal talento otra vez
en cien años».
Durante los años en los que Mozart se estaba formando su familia realizó varios viajes por Europa,
en los cuales mostraban a él y a su hermana Nannerl como niños prodigio. El 12 de
enero de 1762 la familia entera partió hacia Múnich, comenzando con una exhibición en la corte
del príncipe elector de Baviera Maximiliano III y más tarde en el mismo año en la corte imperial
de José II de Habsburgo en Viena y Praga. La permanencia en la ciudad de Viena, uno de los
principales centros de la música en esa época, culminó con dos recitales ante la familia imperial en
el palacio de Schönbrunn. El pequeño Wolfgang causaba sensación en cada concierto, aunque el
dinero recolectado en este viaje no fue tanto como los elogios recibidos. Podría decirse que este
fue un viaje de prueba para Leopold. El 5 de enero de 1763 la familia Mozart retornó a Salzburgo;
el viaje había durado poco menos de un año.
El 9 de junio de 1763 iniciaron una larga gira de conciertos que duró tres años y medio, en la que la
familia se desplazó a las cortes de Múnich, Mannheim, París, Londres, La Haya, otra vez a París y
volvieron a casa pasando por Zúrich, Donaueschingen y Múnich, cosechando grandes éxitos.
Durante este viaje Mozart conoció a un gran número de músicos y las obras de otros
compositores, en particular a Johann Christian Bach, a quien Mozart visitó en Londres
en 1764 y 1765. Bach fue una influencia importante para el joven compositor. La familia regresó a
Viena a finales de 1767 y permaneció en la ciudad hasta diciembre del año siguiente. En Viena
fueron llamados al palacio por la madre del emperador, María Teresa, quien quedó encantada con
el niño Wolfgang Amadeus hasta el punto de que incluso lo sentó en su regazo y lo besó.
En Versalles los Mozart tocaron ante el monarca Luis XV. La anécdota fue que en esa ocasión la
amante del rey, la altiva Madame de Pompadour, no permitió que el niño Wolfgang la abrazara
por temor a que se estropeara su traje. En Londres causaron la admiración del rey Jorge III y
durante este viaje el joven músico compuso su Primera Sinfonía (en mi bemol mayor, KV 16). En
los Países Bajos deslumbró tocando el órgano y compuso su primer oratorio (Die Schuldigkeit des
ersten Gebotes, KV 35) a los nueve años.
A menudo estos viajes eran duros debido a los rudimentarios medios de transporte de aquel
tiempo, la necesidad de esperar pacientemente las invitaciones y el pago de las actuaciones por
parte de la nobleza y las largas enfermedades, algunas casi mortales, padecidas lejos de su hogar:
en primer lugar enfermó Leopold, en el verano de 1764 durante su estancia en Londres, y luego
enfermaron ambos niños en La Haya durante el otoño de 1765.
Wolfgang tocando el clavicordio y Thomas Linley (de la misma edad), el violín, durante su estancia
en Florencia, en 1770.
Llegaron a Roma el 11 de abril de 1770, donde escuchó el Miserere, de Gregorio Allegri, una vez
durante una representación en la Capilla Sixtina. Esta obra tenía carácter secreto, pues solo podía
interpretarse en dicho lugar y la publicación de su partitura estaba prohibida bajo pena
de excomunión. Sin embargo, apenas llegado a la posada donde se alojaba, el joven compositor
demostró poder escribir de memoria una versión muy aproximada de la partitura completa. El
papa Clemente XIV, admirado del talento del músico de 14 años, no solo no lo excomulgó, sino
que lo nombró Caballero de la Orden de la Espuela de Oro.
Cada representación del joven Wolfgang Amadeus era una exhibición de su virtuosismo con
el clavecín y el violín (se cuenta que ya en esa época podía tocar el teclado con los ojos vendados),
y maravillaba a los espectadores improvisando sobre cualquier tema que le proponían.