Piaget y Las Teorias

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 7

Licenciatura en

Educación Artística

EXPERIENCIAEDUCATIVAVIRTUAL:
PSICOLOGÍA DEL APRENDIZAJE

PARADIGMA
HUMANISTA EN
LA EDUACIÓN Y
CARL ROGERS

Lectura 8

AUTOR: Jorge Luis García


Este recurso ha sido extraído del
original y retomado para usos
pedagógicos por la Licenciatura en
Educación Artística en modalidad
virtual, de la Universidad Veracruzana.

García, J. (). Paradigma humanista en la educación y Carl Rogers.


Consultado en (Octubre 10, 2009) en
http://www.psicopedagogia.com/articulos/?articulo=355.
Paradigma humanista en la educación

y Carl Rogers

Que es el paradigma humanista en la educación y Carl Rogers

Jorge Luis García Fabela

Profesor de tiempo completo en la Escuela de Diseño de la Universidad de Guanajuato.


Licenciatura en Diseño de la Comunicación Gráfica

José Manuel Villalpando, en su Filosofía de la Educación (Porrúa, 1992) menciona que el


humanismo apareció como una nueva imagen del mundo después de la Edad Media. Los
pensadores humanistas fueron intérpretes de las nuevas aspiraciones humanas impulsados
por la decadencia de la filosofía escolástica en la cual el centro de gravedad era la vida
religiosa y la inmortalidad ultraterrena. El Humanismo la sustituye por la reflexión filosófica
abundante en productos racionales y en la que se considera al hombre como tal, con una
idea del hombre como humano, verdadero, e integral.

A partir de entonces (del Renacimiento, del Humanismo) se ubica un nuevo pensamiento


pedagógico, ideas y doctrinas de elevado sentido humanista acerca de lo que define el
carácter y el valor de la educación. Así la educación adquiere cualidades de liberalismo, de
realismo e integridad.

El liberalismo reconoce el valor de la persona del educando como la parte más significativa
en su formación, y se reconoce al hombre como auténtico. Se suprimen los castigos
corporales.

El realismo reconoce la naturaleza del educando como punto de partida para su educación,
y además advierte el ambiente en que se desarrolla. La integridad se refiere a la amplitud
de la educación y contempla al educando no solamente como un ser que debe adquirir brillo
para su persona o para cultivar aquello en lo que tenga capacidad, sino que también
contempla al educando con alma humana, como un conjunto de potencialidades y que es
preciso hacer que todas ellas se desarrollen.

Entre los humanistas destacados dentro de la educación encontramos a Tomás


Campanella (1568-1639), que en su obra utópica “La ciudad del Sol”, señala a la educación
como un medio para ennoblecer a los hombres, formando a todos en las artes, cuidando
fortalecer el vigor físico y haciendo mención de que para el aprendizaje se requiere la
observación y la práctica directas. En Francia aparece Francisco Rabelais que escribe
“Gargantúa y Pantagruel” que clama por una educación útil, y Miguel de Montaigne en sus
“Ensayos” menciona que la educación debe formar al hombre mejor, libre de prejuicios
sociales y falsos orgullos, haciendo del educando un ser reflexivo que muestre una cabeza
mejor formada que llena de conocimientos.
También es importante mencionar al español Juan Luis Vives (“El Tratado de la
Enseñanza”, “La Pedagogía Pueril”) que considera a la sabiduría como la diosa que
gobierna la educación y considera al maestro como un padre amoroso de sus discípulos
que comparte su saber. Vives en su “Tratado del Alma” concibe la educación como un
medio constructivo para una vida plena, digna y edificante, cuya meta final son los valores
morales.

Juan Amós Comenio (1592-1671) expone en su “Didáctica Magna” dos aspectos


importantes: la generalidad y generalización. Se debe enseñar de todo a todos, cuya razón
no es obtener un saber profundo y perfecto de todas las disciplinas, sino los fundamentos
y fin de cada una de ellas. Propone en el alumno el cultivo de sus sentidos para terminar
en el cultivo de la voluntad; así el alumno desarrolla sus propias facultades y llega a
formarse una personalidad original. Decía que no era apropiado hacer del educando una
bestia de carga, que lleve un fardo de mercancías ajenas; que mejor era cuidarlo como un
árbol para que diera sus propios frutos.

Ahora, en nuestros días, entendemos el paradigma humanista en educación como un


modelo antiautoritario. El humanismo se sitúa de manera distinta al conductismo. El
conductismo sobre la base de los principios de Iván Petrovich Pavlov (1849-1936) doctor
en fisiología, desarrolla el aprendizaje partiendo del condicionamiento reflejo animal o
reflejos condicionados de los fenómenos psíquicos más acabados (aprendizaje, voluntad,
hábitos) que crearon escuela. Burrhus Frederich Skinner (1904-1990) Psicólogo
estadounidense, también situó su estudio en los procesos de aprendizaje y descubrió un
nuevo tipo de acondicionamiento de la conducta animal denominada operante o
instrumental, aplicable a todos los campos de la psicología. Sus estudios están
fundamentados en experimentos en la conducta animal a base de repetir.

En educación, el conductismo se relaciona con las reacciones humanas automáticas. El


proceso educativo se reduce a factores externos, estímulos y reacciones observables,
olvidando o no dando valor a las actitudes y motivaciones. La acción humana se explica
mediante el arco reflejo y el hombre se reduce a un mero mecanismo. Ejemplos de estos
condicionamientos pueden ser la memorización (ley de la repetición), el desarrollar trabajos
de imitación en los cuales ya se saben los resultados de antemano. El docente no permite
la reflexión y limita la creatividad. Así las conductas son observables y medibles. La falla
del conductismo reside en la explicación mecanicista de la compleja acción humana. La
motivación se logra mediante la actividad reforzada, de la repetición condicionada.

El humanismo (Hernández Rojas, 1998) se refiere al estudio y promoción de los procesos


integrales de la persona. La personalidad humana es una organización o totalidad que está
en continuo proceso de desarrollo y la persona debe ser estudiada en su contexto
interpersonal y social. El humanismo incorpora del existencialismo la idea de que el ser
humano va creando su personalidad a través de las elecciones o decisiones que
Continuamente toma frente a diversas situaciones y problemas que se le van presentando
durante su vida. Las conductas humanas no son fragmentarias e implican aspectos
naturales como el egoísmo, el amor, las relaciones interpersonales afectivas, las cuestiones
éticas, los valores como la bondad, o aspectos naturales físicos como la muerte, la
sexualidad, entre muchos otros.

El humanismo incorpora del existencialismo los puntos siguientes:

El ser humano es electivo, capaz de elegir su propio destino

El ser humano es libre para establecer sus propias metas de vida y

El ser humano es responsable de sus propias elecciones.

Existen postulados comunes a la mayoría de los psicólogos humanistas, y son los


siguientes:

a) El ser humano es una totalidad. Este es un énfasis holista que dice que el ser humano
debe estudiarse en su totalidad y no fragmentadamente.

b) El hombre posee un núcleo central estructurado, es decir, su “yo”, su “yo mismo” (self)
que es la génesis y estructura de todos sus procesos psicológicos.

c) El hombre tiende naturalmente a su autorrealización formativamente. Ante las


situaciones negativas debe trascenderlas. Si el medio es propicio, genuino y empático y no
amenazante, las potencialidades se verán favorecidas.

d) El hombre es un ser en un contexto humano y vive en relación con otras personas.

e) El hombre es consciente de sí mismo y de su existencia. Nos conducimos de acuerdo


con lo que fuimos en el pasado y preparándonos para el futuro.

f) El hombre tiene facultades de decisión, libertad y conciencia para elegir y tomar sus
propias decisiones, lo que se traduce en un ser activo y constructor de su propia vida.

g) El hombre es intencional, es decir, que los actos volitivos o intencionales se reflejan es


sus propias decisiones o elecciones.

Desde el punto de vista humanista, la educación se debe centrar en ayudar a los alumnos
para que decidan lo que son y lo que quieren llegar a ser. La educación humanista tiene la
idea de que los alumnos son diferentes y los ayuda a ser más como ellos mismos y menos
como los demás.
Hernández Rojas (1998) menciona que la educación tradicional, hace hincapié en la
enseñanza directa y rígida, predeterminada por un currículo inflexible y centrado en el
profesor. La educación humanista es de tipo indirecto, ya que el docente permite que los
alumnos aprendan impulsando y promoviendo todas las exploraciones, experiencias y
proyectos, que estos preferentemente inicien o decidan emprender y logren aprendizajes
vivenciales con sentido.

El paradigma humanista considera a los alumnos como entes individuales, únicos y


diferentes de los demás. Son seres con iniciativa, con necesidades personales de crecer,
con potencialidad para desarrollar actividades y solucionar problemas creativamente. Los
alumnos no son seres que únicamente participen cognitivamente sino personas que poseen
afectos, intereses y valores particulares y se les debe considerar como personas totales.
La finalidad del humanista no es gobernar almas sino formar a los estudiantes en las tomas
de decisiones en ámbitos en donde el respeto de los derechos de la persona, lo justo y lo
injusto son cuestionados.

Los rasgos que debe tomar el humanista son:

a) ser un maestro interesado en el alumno como persona total.

b) Procurar estar abierto a nuevas formas de enseñanza.

c) Fomentar el espíritu cooperativo

d) Ser auténtico y genuino ante los alumnos.

e) Intentar comprender a sus alumnos poniéndose en su lugar (empatía) y ser sensible a


sus percepciones y sentimientos.

f) Rechazar las posturas autoritarias y egocéntricas

g) Poner a disposición de los alumnos sus conocimientos y experiencias y que cuando lo


requieran puedan contar con ellos.

Carl Rogers es quien más ha analizado el concepto de aprendizaje y dice que el alumno
desarrollará su aprendizaje cuando llegue a ser significativo y esto sucede cuando se
involucra a la persona como totalidad, incluyendo sus procesos afectivos y cognitivos, y se
desarrolla en forma experimental. Es importante que el alumno considere el tema a tratar
como algo importante para sus objetivos personales. El aprendizaje es mejor si se
promueve como participativo, en el que el alumno decida, mueva sus propios recursos y se
responsabilice de lo que va a aprender. También es importante promover un ambiente de
respeto, comprensión y apoyo para los alumnos, y sugiere Rogers que el profesor no utilice
recetas estereotipadas sino que actúe de manera innovadora y así sea él mismo, que sea
auténtico.
Bibliografía:

Rogers, J. El Proceso de Convertirse en Persona. Ed. Paidós. México 2001.

Rojas Hernández, Gerardo. Paradigmas en Psicología de la Educación. Ed. Paidós.


México 1988

Villalpando, José Manuel. La Filosofía de la Educación. Ed. Porrúa, México, 1992.

Referencia bibliográfica:

García, J. (). Paradigma humanista en la educación y Carl Rogers. Consultado en


(Octubre 10, 2009) en http://www.psicopedagogia.com/articulos/?articulo=355.

También podría gustarte