America Latina en Su Arquitectura Roberto Segre-Searchable
America Latina en Su Arquitectura Roberto Segre-Searchable
America Latina en Su Arquitectura Roberto Segre-Searchable
EN SU
ARQUITECTURA
SE PROFHBE relator:
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cy s u.: ERTO SEGRE
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190 LA ARQUITECTURA
Eran los albores de 1900, era la Belle Epoque y habia que conmemorarla
dignamente: se construyen los grandes teatros, las sedes gubernamenta-
les, los palacios legislatives y las grandes residencias. Aturdidos por el
festin, pletdricos de optimismo, su propia algarabia les impidid escuchar
la Hamada con que el proletariado mundial estaba cerrando histdrica-
mente, con la Revolucion rusa de 1917, el periodo effmero del capitalis-
mo. Pero el proceso no es mecdnico sino dialectico. La suntuosidad y el
dispendio con que realizaban todas sus obras, la importacidn de arquitec-
tos europeos, no marchaban acompasadamente ni con su propia ideologia
estetica ni con las posibilidades tecnicas. Asi vemos aparecer un conjunto
abigarrado y anarquico de formas en el que los frontispicios griegos se
mezclaban indiscriminadamente con las bovedas islamicas, en el que las
lineas de ondulacidn acerada del art nouveau eran reproducidas con
madera y argamasa y en el que se repetian una y otra vez las formas
7 La tasa media de urbanizacidn mundial, sin Latinoamerica, era de 27.8 %
hacia 1950, en tanto que la de nuestra area fue de 32.9%, con tendencia a incre-
mentarse. Asimismo, America Latina se caracteriza por el dominio de las aglo-
meraciones principales (casi siempre las capitales de los paises) sobre el resto de
las poblaciones de cada pais.
194 LA ARQUITECTURA
A finales del siglo xix y en las primeras decadas del siglo xx, el neoclasi-
196 LA ARQUITECTURA
1. INfRuDUCCION
a] Ensenanza
Tai vez sea el campo mAs fecundo y de mayor responsabilidad. Ensenar no
sdlo con la asistencia a las aulas universitarias, sino con todos los medios
existentes hoy para transmitir el conocimiento. La ensenanza intramural
life- • .
212 la arquitectura
bl Publicaciones
Si se ensena con las propias obras, se ensena tambidn en la labor de escri-
bir, uno de los medios mds necesarios y mds eficaces para aclarar el pen-
samiento. Un buen escrito queda por mucho tiempo cumpliendo su eficaz
labor de transmitir. A travds de los escritos se orienta, se dirige. Cuantas
veces todo un movimiento arquitectdnico se ha nutrido de una idea, de
una frase bien estructurada.
cl Investigation .
No estd, desgraciadamente, muy extendida la costumbre de la investiga- 1
cidn entre los arquitectos. El ejercicio profesional independiente atrofia |
esta rama de la profesidn. Se adquiere la costumbre de acometer sdlo |
aquellos trabajos solicitados por clientes que van a pagar un honorario. |
Hay tantos y tan fascinantes campos de investigacidn virgenes. La inves- |
tigacidn-histdrica, que descubre las raices de una nacionalidad, la vivienda |
popular en.,el campo, en los pequenos poblados surgida sin arquitectos 1
que puede damos tantas lecciones vivas, el andlisis del impacto del pro- I
ceso de urbanizacidn sobre el habitat urbano, la investigacidn socioldgica, |
para descubrir el medio en que vivimos y debemos trabajar. La investi
gacidn, ademds, se puede hacer ya sea como oficio permanente del cual !
se derive ademds un modus vivendi, ya sea como actividad adicional o ?
como simple curiosidad cientifica o cultural, o como goce espiritual, y se ;
puede realizar entonces en forma intermitente en la medida del tiempo
disponible.
RESPONSABILIDAD social del arquitecto 213
d] Administracion publics, y la politico.
Se trata de dos actividades afines, en diferentes niveles. Hay quienes
llegan a una position administrativa como tecnicos, y salen de ella como
tecnicos, sin comprender que la tdcnica esta al servicio de la polftica. Pero
es raro el funcionario publico que .no adquiere un sentido de responsa-
bilidad y no ve los problemas desde un Angulo nuevo, que le hace entrever
las posibilidades que se tienen desde lugares en donde se maneja la polf
tica, la polftica de vivienda, la polftica de desarrollo urbano. Y la polftica
vista no como un camino de ascensos a posiciones burocrAticas, sino como
un canal a traves del cual, en pafses democrAticos, como son con sus pau-
sas ocasionales todos los pafses latinoamericanos, se pueden lograr los
grandes cambios, en donde se pueden tomar las medidas necesarias para
ajustarse a la estructura de la sociedad latinoamericana en permanente
cambio. En la mayoria de los casos el descredito de la polftica por parte
de los profesionales esta precisamente en su ausencia de ella, en la falta
de participation de quienes por formacidn estan obligados a intervenir.
La polftica activa es la gran escuela de formacidn profesional, porque
en ella se pulsan no solamente las necesidades de una sociedad sino por
que; se cohoce el element© humane con que esta sociedad cuenta para
resolver sus problemas.
En muchos casos los arquitectos abogan por que les sean respetados
determinados puestos burocraticos, pensando quizAs que con ello estAn
alcanzando las posiciones claves para la profesidn. Si bien desde allf
ejercen una labor eficaz, debemos darnos cuehta que dichas posiciones
son apenas de francotiradores, que sdlo pueden disparar en una sola di-
reccidn. Las batalias necesitan de equipos de hombres coordinados, asf
como las sociedades necesitan del trabajo en equipo de todos sus espe-
tialistas. Los arquitectos deberAn acceder a todos los campos de la activi-
dad dirigente para participar conjuntamente con otros especialistas, en
el gobiemo de los pafses hacia metas mejores.