Las Batallas en El Desierto
Las Batallas en El Desierto
Las Batallas en El Desierto
Las batallas en el desierto es un novela corta de apenas 68 páginas escrita por José Emilio
Pacheco que nos narra la historia de Carlos, un niño que vive en la Ciudad de México entre
los años 40s y 50s, justo durante el gobierno de Miguel Alemán, esta novela post segunda
guerra mundial es una clara crítica social a todo lo acontecido durante esa época, desde lo
corrupto del gobierno, el supuesto avance político, económico, social y tecnológico de
nuestro país, hasta las costumbres de la gente, lo recatado y conservador de las personas, la
doble moral que ha caracterizado diversos momentos de nuestra historia, además de la gran
influencia que los maestros de escuela y los sacerdotes tenían sobre las familias de aquellos
tiempos, narra además detalles sobre las casas, edificios y calles de la ciudad que logran
ambientar muy bien la historia y permite al lector transportarse a ese tiempo y lo empapa de
ese ambiente antiguo de la época.
Es una historia narrada en primera persona por Carlos, un niño quien nos explica cómo es
la vida en su casa, con una mamá originaria de Guadalajara y que odia vivir en la Ciuda de
México y con un papá empresario dueño de una fábrica de jabones que está a punto de la
quiebra por la entrada reciente de empresas transnacionales. Nos cuenta además como es
asistir a una escuela con tanta mezcla social y racial, con niños tanto pobres como ricos,
árabes y judíos.
Y esta el ingrediente central de la historia, el amor platónico que siente hacia la mamá de
Jim, uno de sus amigos y el cómo eso lo llevara a darle un vuelco a su vida inesperado,
cuestionando en todo momento el poco entendimiento que los mayores tenían y que si me
permiten decirlo, seguimos teniendo hacía mucho de lo que los niños piensan y sienten,
haciendo valer en todo momento nuestra “experiencia” haciendo que nos sintamos con el
derecho de menospreciar lo que los pequeños puedan sentir, pensar y desear.
Es una historia estupendamente narrada y el nivel de detalle es genial cuando nos describe
los escenarios y las situaciones, cita programas de radio que la gente escuchaba en aquella
época en donde apenas sería introducida la televisión, así como la escasez de coches en las
calles e incluso describe las marcas de esos autos, las revistas que circulaban y hasta la
comida que se servía en las casas, mucho de esto por supuesto influenciado y respaldado
por las vivencias del mismo autor durante aquellos años, porque durante muchos lapsos
pareciera que nos está narrando sus propios aconteceres.