Pachamanca
Pachamanca
Pachamanca
Actualmente este plato también es preparado en olla y en ese caso recibe el nombre
de «pachamanca a la olla».2
Índice
1 Historia
2 Preparación
2.1 Proceso en imágenes
2.2 Diferencias regionales
2.2.1 Junín
2.2.2 Cusco
2.2.3 Ayacucho
2.2.4 Huánuco
2.2.5 La Libertad
2.2.6 Ancash y los ancashinos en Santiago
3 Véase también
4 Referencias
5 Enlaces externos
Historia
El más antiguo precedente de esta forma de preparación se ubica en Telarmachay, un
abrigo rocoso de hace 7.000 a 8.000 años, ubicado en San Pedro de Cajas, Tarma,
donde se encontraron restos de antiguos hornos, similar a fogones donde empleaban
piedras calientes, además de fragmentos de carbón. Es la evidencia que el hombre
andino ya usaba esta técnica para cocer sus alimentos, utilizando para ello piedras
calientes.34
Esta técnica de cocción fue usada masivamente durante el arcaico tardío en el Valle
Fortaleza, según las últimas investigaciones arqueológicas de la Universidad
Cayetano Heredia y el científico Haas.[cita requerida] También es encontrada en la
tradición Vichama Raymi de Paramonga de cinco mil años de antigüedad Vinculado con
la pachamanca encontramos un plato precolombino que consiste en papas asadas en
pequeños hornos, en la tierra o en barbacoa y que se sirven con queso fresco
andino, como el «cachipa», o con una salsa de ají y queso conocida como «capchi» o
«japchi», y que se prepara en la época de cosecha de las papas.5
Durante el siglo XIX surgen las referencias a la pachamanca tal como se conoce en
la actualidad, una de ellas corresponde al Nuevo Manual de Cocina peruana de fines
de siglo. El tradicionalista Ricardo Palma es uno de los autores que da cuenta
detallada de la pachamanca en el siglo XIX; él menciona y describe costumbres
relacionadas con la pachamanca en las tradiciones: Los tesoros de Catalina Huanca
(1877), El orgullo del cacique (1880) y La venganza de un cura (1880). En «Los
tesoros de Catalina Huanca» se señala lo siguiente: "en los lugares de la sierra,
esas fiestas duran de ocho a quince días, tiempo en que los ciegos disfrutan de
festines, en los que la pacha-manca de carnero y la chicha de jora se consumen sin
medida".1
El argentino Santiago Estrada da cuenta de la pachamanca en su obra De Valparaíso a
la Oroya (1873); otras referencias son el Diccionario de Peruanismos del año 1883
por Juan de Arona6 y el recetario Cocina ecléctica de Juana Manuela Gorriti
(1890).1
Preparación
Pachamanca de res.
El principio básico es crear una cavidad con material refractario, que permita ser
llevado a una temperatura alta para proceder a la cocción de las carnes. Así, en
muchos lugares del Perú se crea un horno artesanal abriendo un hoyo en la tierra
donde se colocan piedras, que se calientan con la combustión de leños; no cualquier
piedra es apta, las mejores son esquistos y el contenido de sulfuro no es deseado
pues altera el sabor (piedras de río). Alternativamente se usan estructuras de
ladrillos hechas ex profeso.2