Lecciones de Filosofia para Principiante
Lecciones de Filosofia para Principiante
Lecciones de Filosofia para Principiante
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3
PRESENTACIÓN
“Vivir sin filosofar es, propiamente, tener los ojos cerrados, sin tratar de
abrirlos jamás”. René Descartes
4
imparte la asignatura sólo por cumplir con un pensum de estudio y
nada más. Por ello encontramos personas que han estudiado dicha
asignatura, sea en el Colegio como en la Universidad y terminaron
insatisfechas, esperando más; confundidas, con ideas torcidas o
totalmente en blanco, con sentimientos de coraje o tedio frente a la
misma.
Keny Vinces
5
INTRODUCCIÓN
0.1 Para empezar
6
principales problemas de la humanidad, aunque no ha profundidad,
pero dejaremos sembrado en el alumno, un antecedente oportuno
para que profundice, si así le corresponde o él de desea hacerlo por su
propia cuenta, en estudios posteriores.
7
¿Por qué empezamos entonces el estudio de la Filosofía por la
introducción la Filosofía? No es malo empezar por filosofar sobre lo
que es a Filosofía.
8
2) Método sistemático o propedéutico: Este método intenta
exponer algunas cuestiones acerca de la noción, división,
utilidad y método de la Filosofía de modo que los alumnos
se dispongan al estudio de otras cuestiones más
importantes. Si se sigue este método hay que dejar claro
desde el comienzo que las afirmaciones que se hacen
suponen una profunda reflexión sobre la filosofía misma,
una filosofía de la filosofía, unas reflexiones que, por
ahora se ocultan al alumno, para darle sólo los
resultados. O sea que siguiendo este método se hace la
introducción no a la Filosofía en general, sino a una
determinada manera de comprenderla.
9
ciencias experimentales, sus relaciones con otros
ámbitos del saber y del actuar humanos, como la
ideología y la religión.
10
ÍNDICE
UNIDAD 1: PRINCIPIOS BÁSICOS DE LA FILOSOFÍA
1. ¿Qué es la Filosofía?
1.1 Origen y naturaleza de la Filosofía
1.2 Origen del acto de filosofar: asombro, duda y situaciones límite
1.3 Definición de la Filosofía
1.4 El objeto de la Filosofía
1.5 Importancia de la Filosofía
1.6 La Filosofía como sabiduría
1.7 La Filosofía como Ciencia
1.8 El método de la Filosofía
1.9 Filosofía y Religión
1.10 Problemas actuales de la filosofía
1. ¿Qué es la antropología?
1.1 Concepciones sobre el hombre, dualismo antropológico
11
1.2 Culturalismo
1.3 Existencialismo
2. ¿Qué es la Epistemología?
2.1 El conocimiento humano
2.2 Racionalismo: La razón como fuente de conocimiento
2.3 Empirismo: La experiencia como fuente de conocimiento.
2.4 Criticismo kantiano: La razón como forma del conocimiento.
1. ¿Qué es la ética?
1.1 Lo bueno y lo malo
1.2 Dimensión ética del ser humano
1.3 La ética como un sistema social
1.4 La postura Kantiana
2. ¿Qué es la axiología?
2.1 Los valores humanos
2.2 El ser humano como un ser valorativo
2.3 Relativismo: Críticas al etnocentrismo y al universalismo
2.4 Subjetivismo: El idealismo subjetivo.
2.5 “El ser es ser percibido” (Berkeley)
12
1. ¿Qué es la Metafísica?
1.1 ¿Existe Dios?
1.2 Dios y el ser humano
1.3 La afirmación de la existencia de Dios
1.4 Límites del conocimiento humano
1.5 La negación de la existencia de Dios
2. ¿Qué es la Política?
2.1 La organización social
2.2 Liberalismo clásico
2.3 Neoliberalismo
2.4 Marxismo
13
UNIDAD 1
OBJETIVO
14
1. ¿Qué es la Filosofía?
15
desde el principio que la sola erudición no basta: se requiere un
deliberado esfuerzo en búsqueda de la verdad.
16
las interrogantes que se le plantean, y frecuentemente las
respuestas plantean nuevos interrogantes. Esa búsqueda del
saber está motivada por afanes teóricos (saber por saber, para
satisfacer las exigencias intelectuales) y por razones prácticas
(saber para actuar bien moralmente, o con eficacia técnica).
17
El surgimiento (comienzo) de la filosofía se da en Grecia en el
siglo VII a. C. aproximadamente, lo que será el germen de los futuros
desarrollos metodológicos y científicos. Lo primero que tenemos que
tener en cuenta es que comienzo no es lo mismo que origen: por
comienzo se entiende el momento histórico en que los hombres
empezaron a filosofar, es un dato convencional pues se refiere a un
tiempo y a un espacio determinados: el lugar es Grecia y el tiempo se
ubica en el siglo VII a. C, es decir que, la Historia de la Filosofía como
pensar metódico y sistemático tiene sus comienzos hace más de dos
mil quinientos años. También hay que aclarar que en el comienzo
Filosofía y Ciencia son sinónimos y sólo posteriormente comienza su
diferenciación.
18
Para intentar comprender el surgimiento del conocimiento
filosófico, comencemos analizando la situación histórica, cultural y
económica de los siglos anteriores. Sabemos que existían civilizaciones
mucho más antiguas que la griega, sobretodo en la cuenca de los ríos
Eufrates, Tigris y Nilo. Podemos afirmar que existieron adelantos
importantes a nivel técnico, artístico, religioso y espiritual, pero no
filosóficos.
19
Este tipo de conocimiento (contrario al filosófico y científico)
es esotérico, (es decir; cerrado en sí mismo, reservado, oculto y
secreto), y por lo tanto es: a-crítico, a-sistemático, a-lógico, no
demostrable, no fundamentado, no susceptible de ser enseñado, es
“revelado”. Es todo lo contrario de una reflexión libre, crítica y
metódica.
El asombro
20
los hombres a filosofar: empezando por admirarse de lo que les
sorprendía por extraño, avanzaron poco a poco y se preguntaron por
las vicisitudes de la luna y del sol, de los astros y por el origen del
universo."
La duda
21
humano intelecto. Se enredan en contradicciones insolubles. Por todas
partes se alzan unas afirmaciones frente a otras. Filosofando me
apodero de la duda, intento hacerla radical, mas, o bien gozándome en
la negación mediante ella, que ya no respeta nada, pero que por su
parte tampoco logra dar un paso más, o bien preguntándome dónde
estará la certeza que escape a toda duda y resista ante toda crítica
honrada.
22
“Los límites de mi lenguaje son los límites de mi mundo ".
Ludwig Wittgenstein- filósofo, ingeniero y lingüista austríaco.
23
la naturaleza y la sociedad humana deben garantizar la existencia.
El hombre se apodera de la naturaleza para ponerla a su servicio, la
ciencia y la técnica se encargan de hacerla digna de confianza.
Con todo, en plena dominación de la naturaleza subsiste lo incalculable
y con ello la perpetua amenaza, y a la postre el fracaso en conjunto: no
hay manera de acabar con el peso y la fatiga del trabajo, la vejez, la
enfermedad y la muerte. Cuanto hay digno de confianza en la
naturaleza dominada se limita a ser una parcela dentro del marco del
todo indigno de ella.
24
1.4 El objeto de la Filosofía
25
pertenece al ámbito natural; busca las explicaciones últimas que
pueden alcanzarse aplicando el razonamiento a los datos
proporcionados por la experiencia (analizándolos, estudiando sus
implicaciones y su razón de ser).
26
1.5 Importancia de la Filosofía
27
ambientes culturales que deforman los conocimientos del saber
espontáneo, al mismo tiempo que permite discernir los aciertos y
errores de las ideas predominantes en los diversos ámbitos científicos,
culturales y sociales2.
2
J. J. SANGUINETI, La filosofía de la ciencia según Santo Tomás. EUNSA, Pamplona
1977, pp. 355-359, señala claramente cómo muchos de la ciencia moderna van
acompañados de enfoques filosóficos deficientes, ya que se transmiten con tanta
mayor facilidad cuanto se presentan como formando parte de la respectiva ciencia y
avalados por sus éxitos; el remedio, en buena parte, está en manos de los especialistas
de cada ciencia más que en los filósofos.
28
tratan cuestiones para las que no basta la experiencia o los
conocimientos ordinarios; por ejemplo: la filosofía de la ciencia o la
psicología filosófica exigen frecuentemente una reflexión que versa
sobre conocimientos proporcionados por otras ciencias, cuyo dominio
es entonces indispensable.
29
Suele llamarse “sabio” a quien posee un saber cierto y fundamentado
acerca de las verdades más profundas, y por ello, es capaz de dirigir y
persuadir a los demás.
3
Cfr. TOMAS DE AQUINO, In Metaphys 1.2
4
In Ethic., VI, 5 (1180-1181)
5
Cfr. TOMAS DE AQUINO, Suma Teológica, I-II, q. 57, a. 2,c
30
Tipos de sabiduría
6
Cfr. ARISTOTELES, Metafísica. I, 1. Comentado este pasaje por Santo Tomás concluye
que la metafísica es una ciencia que es también sabiduría, ya que es una ciencia teórica
que versa sobre lso primeros principios y causa de realidad; cfr. In Metaphys., I, 2 (51)
31
De modo general, la sabiduría considera todas las cosas a la luz
de sus causas últimas (y sobre todo, las considera en relación a Dios,
que es principio y fin de todas las criaturas) permite juzgar y ordenar
convenientemente todas las cosas y acciones respecto a su último fin
(que es Dios). Si se consideran las causas últimas de modo relativo a los
diversos ámbitos de la realidad, pueden hablarse de sabiduría respecto
a cada uno de esos ámbitos particulares. Por ejemplo: respecto a las
ciencias particulares (que estudian ámbitos concretos de la realidad), a
la filosofía moral (que considera las acciones voluntarias), o a las artes
(que versan acerca del orden del que el hombre pone en las cosas que
produce, llamadas artificiales). También suele aplicarse el nombre de
sabiduría a la prudencia, que es la aplicación de la moral a los casos
concretos.
Sabiduría y ciencia
32
amplitud de su objeto, por las causas a la luz de las cuales ve la
realidad, y, por tanto, también en razón del método.
7
In Metaphys., I, 2 (35)
8
In Ethic., VI, 6 (1184)
33
Sabiduría e ignorancia
9
Es posible que Sócrates subrayara sobre todo que la moralidad de un acto humano es
proporcional a su voluntariedad (y por tanto, al conocimiento que tiene el sujeto), lo
cual es cierto: las fuentes al respecto son los diálogos de Platón: el Hipias menor no es
tan fácil de interpretar, y la frase “el sabio es bueno” es una interrogante en medio del
diálogo contenido en la República (I, 350b). En cuanto a la Ilustración, la idea central es
concebir el progreso del hombre en función de una racionalidad cientificista que
desplaza a la metafísica y al cristianismo, idealizando la idea del “progreso”, la de la
“ciencia” y la relación entre ambas.
10
Cfr. TOMAS DE AQUINO, In Ethic., VI, II (1285); a propósito de la opinión que
Aristóteles atribuyó a Sócrates, Santo Tomás subraya la dependencia mutua entre la
prudencia y la virtud moral.
34
El estudio de las ciencias particulares no suele interferir con las
disposiciones morales que tenga el sujeto, al menos mientras se trata
de cuestiones poco relacionadas con un compromiso personal (tales
como las demostraciones matemáticas o de la física matemática, o
muchos aspectos de la sociología o la historia). Pero cuando se
estudian problemas que tienen repercusiones sobre la actitud ante la
vida, la objetividad en la ciencia dependerá también de las
disposiciones subjetivas: puede darse, por tanto, una ignorancia
revestida de ropaje científico, que lleva a defender lo que coincide con
las preferencias personales más allá de lo permitido por las razones
objetivas. Esa ignorancia pseudo-científica es un obstáculo serio para
llegar a una visión objetiva de la realidad y, por tanto, a la verdadera
sabiduría teórica y moral.
35
Cuando se trata directamente de la sabiduría, el hombre se encuentra
con verdades que comprometen profundamente su existencia, por eso,
la ignorancia y el error en estas materias tienen estrecha relación con
la rectitud moral del sujeto. El conocimiento acerca de las verdades
más profundas, exige una voluntad recta que busque sinceramente el
bien sin dejarse arrastrar por las preferencias arbitrarias. Por eso, el
ejercicio de la libertad humana desempeña una función importante en
el progreso del conocimiento sapiencial, que se refiere a las causas
últimas que juzga y ordena los demás conocimientos.
11
In Ethic., X, 14 (2146)
36
1.7 La Filosofía como Ciencia
37
pretendido construir un sistema que acabara con esa pluralidad y
lograra un asentimiento general en virtud de su método.
12
Cfr. E. GILSON, La unidad de la experiencia filosófica . Rialp, Madrid 1973, p. 147-176;
C. CARDONA. René Descartes: Discurso del Método Emesa. Madrid 1978
13
Cfr. RF. VERNEAUX, Inmanuel Kant: Crítica de la razón pura. Emesa. Madrid 1978
14
Cfr. J. S. PEREIRA DE FREITAS. E. Husserl: la filosofía como ciencia rigurosa. Emesa;
Madrid 1979
15
Cfr. M. ARTIGAS. Karl Popper: Búsqueda sin término. Emesa, Madrid 1979, pp. 97-
105 (Popper no es neo-positivista)
Un buen estudio histórico y temático sobre esta cuestión se encuentra en E. GILSON. El
ser y los filósofos. EUNESA. Pamplonma 1979
38
correctamente a partir de la experiencia y evitando reduccionismos
unilaterales. La falta de asesoramiento general mo debe achacarse a la
filosofía misma, sino a los fallos de quienes no estudian de quienes no
han estudiado los problemas con el rigor necesario y pretende
explicarlos reduciéndolos a aspectos parciales, y también a la dificultad
de los problemas filosóficos más profundos.
39
propiamente metafísica pero se plantea siempre desde una
perspectiva metafísica.
40
humanos en otros). La filosofía estudia toda la realidad, intentando
explicar en último término su ser mismo.
41
Puede hablarse también de un cientifismo respecto a las
ciencias humanas; por ejemplo, el “historicismo” que reduce toda
explicación de la realidad, en último término, a factores históricos que
además responderán a leyes necesarias (negando arbitrariamente la
existencia de otros factores y –al menos en teoría- de la libertad
humana)16
16
Algunas de las doctrinas cientifismo se analizan en las siguientes obras: J. A. RIETRA.
Esbozo de un cuadro histórico de los progresos del espíritu humano. Emesa, Madrid
1978; J. J. SANGUINETI. Augusto Comte: Curso de filosofía positiva. Emesa, Madrid,
1977; M. ARTIGAS. Karl Popper: búsqueda sin término, o. c.
42
de la física mecanicista, edificada sobre el supuesto de que todas las
propiedades de la materia se reducen a los aspectos relacionados con
la cantidad; y lo mismo sucede con una sociología que admita la
existencia de las leyes necesarias en los comportamientos sociales o
con una psicología conductista. A pesar de ello, pueden encontrarse
afirmaciones, experiencias y descripciones verdaderas en un contexto
globalmente equivocado, pero esa ciencia mal fundamentada
contendrá también afirmaciones falsas y transmitirá una imagen
errónea de los aspectos de la realidad que estudia.
43
dimensiones espirituales, que son las que se caracterizan más
esencialmente al hombre17.
17
Se ofrece una visión panorámica de este tema en: F. OCARIZ. El marxismo, Palabra,
Madrid, 1975.
18
Una excelente visión de la psicología moderna en: J. L. PINILLOS. Introducción a la
psicología contemporánea, CSIC, Madrid 1962, donde se muestra de enfocar la
psicología desde una consideración del hombre en su totalidad.
44
Cuanto más elevado es el objeto que tienen las ciencias
particulares, mayor será su vinculación con la filosofía. La biología, al
estudiar los seres vivos, tiene más implicaciones metafísicas que la
metafísica que la química. Las ciencias que se ocupan directamente del
hombre (como la psicología, la sociología y la historia) utilizarán
necesariamente conocimientos filosóficos, y la verdad de sus
conclusiones dependerá en buena parte de que esa base metafísica sea
correcta.
19
Cfr. P. ej. P. JORDAN. Creación y misterio. EUNSA, Pamplona 1978
45
relación con la metafísica, pues se trataría de un simple instrumento
pragmático sin valor para conocerla realidad, que es objetivo primero
de las ciencias. La concepción positivista es falsa históricamente e
irrealizable en la práctica: desde el momento en que una ciencia
estudia aspectos de la realidad (y todas lo hacen), necesariamente ha
de contar con una base metafísica; cuando esto se niega, sucede que
se construyen las ciencias con bases metafísicas implícitas, con el
peligro de dar como científicamente comprobado lo que no son sino
concepciones filosóficas quizá injustificadas.
46
determinar el objeto propio de cada ciencia y clasificar las ciencias en
una jerarquía según la naturaleza de cada una.
20
Cfr. J. MARITAIN. Introducción general a la filosofía. Club de lectores, Buenos Aires
1945, pp. 89-100. Maritain concluye acertadamente que “para avanzar en las ciencias
no hay necesidad de ser filósofo”, y que “los sabios, al cultivar sus ciencias, no tienen
por qué pedir consejo a la filosofía ni aspirar a ser filósofo”, señalando al mismo
tiempo que, sin la filosofía, el científico no podrá “darse cuenta del lugar ni del alcance
de su especialidad en el conjunto de los conocimientos humanos”, ni conocer
adecuadamente los fundamentos de sus ciencia. Maritain advierte también que,
cuando la filosofía no ha ejercido correctamente su función directiva, se ha llegado
finalmente a un “gran desbarajuste” y a un “descenso general de la inteligencia” (Ibid,
p. 93)
47
Desde la antigüedad hasta el siglo XVIII, se consideraba la
filosofía como el conjunto de todo el saber incluidas las ciencias
particulares, de modo que en muchos casos la relativa autonomía de
éstas era respetada. Por el contrario, el positivismo del siglo XIX
reducía la tarea de la filosofía a una simple reflexión sobre los
resultados de las ciencias “positivas”. Una visión correcta del tema ha
de tener en cuenta los diversos enfoques de la filosofía y de las ciencias
particulares y, al mismo tiempo sus relaciones tal como han quedado
expuestas.
48
pretendiendo limitar las ciencias a una función secundaria y poco
acorde con sus logros reales (en posturas idealistas, por ejemplo). Por
lo general, las relaciones entre ciencias y filosofía, hasta el siglo XX
adolecen de múltiples equívocos y confusiones por ambas partes.
21
Esta amplia problemática se trata con claridad y rigor, desde el punto de vista
metodológico, en: E. SIMARD. Naturaleza y alcance del método científico, Gredos,
Madrid 1961, y J. J. SANGUINETI, Lógica, EUNSA, Pamplona 1985, pp. 165-232 (cuarta
parte “el conocimiento científico”)
49
inteligencia a conocimientos universales abstractos, y se avanza en el
conocimiento realizando inferencias cuyo valor viene determinado en
último término por la evidencia sensible o la intelectual. No existe
ninguna “facultad” o capacidad de conocimiento que dé lugar a un
conocimiento específicamente filosófico.
50
Estas consideraciones permiten advertir la relación entre el
“conocimiento ordinario”, las ciencias y la filosofía. En los casos, el
valor del conocimiento se mide por unos mismos patrones: la
utilización correcta del conocimiento sensible y del razonamiento
intelectual, según las reglas que estudia la lógica.
51
Filosofía y evidencia intelectual
52
respecto a los seres espirituales no pueden obtenerse imágenes
sensibles)
Siguiendo a Aristóteles, Santo Tomás afirmó que las ciencias
especulativas se distinguen entre sí por el grado de
“inmaterialidad” de sus respectivos objetos. En primer lugar, la
ciencia natural o física estudia lo que depende en su ser de la
materia (los seres materiales o cuerpos naturales, en cuya
definición necesariamente entra la materia). En segundo lugar,
la matemática estudia lo que, aun no pudiendo existir fuera de
la materia, puede ser considerado prescindiendo de ella (líneas,
números, etc.); en tercer lugar, la metafísica estudia todo
aquello que no depende en su ser de la materia, bien porque es
espiritual (por ejemplo, Dios), bien porque puede darse en las
realidades materiales como en las espirituales (substancia y
accidentes, acto y potencia, etc.)22
22
Cfr. TOMAS DE AQUINO. In phys. I, 1 (2-3); In Boet. De Trin., q. V, 1
53
naturaleza), la “ciencia natural” o “física” de los antiguos es un estudio
de la naturaleza desde el punto de vista filosófico.
Por otra parte, no se trata de unos “grados” de abstracción en
perfecta continuidad. La metafísica al estudiar el “ser” de todos
los entes, adopta una perspectiva peculiar: su abstracción
consiste en considerar todo bajo el punto de vista de sus “ser”
pero todo lo que es real tiene un cierto ser, por lo cual la
abstracción metafísica considera todo lo real (al menos de
modo implícito)-. La metafísica siendo la ciencia más
“abstracta” es la única que considera los entes en toda su
realidad, ya que las ciencias particulares prescinden de lo que
no forma parte de su enfoque y método propio.23.
23
Cfr. J. J. SANGUINETI, Lógica, o. c. pp. 162-167 “Santo Tomás considera que solo el
nivel físico y el matemático serían tipos de abstracción( en el sentido de separación
mental), mientras que los conceptos metafísicos se utilizarían más bien en un contexto
de separatio o juicio real, por cuanto separan de la materia lo que realmente es
separable o está separado de materia. De todas maneras, no hay inconveniente en
considerar abstractivo también el tercer nivel de inmaterialidad, siempre por
abstracción no se entienda captar aspectos parciales (pues así son abstractas mis bien
las ciencias particulares), sino superar la materialidad” (Ibid., p. 166)
54
valor de todo conocimiento sobre la evidencia de los sentidos,
encontrará grandes dificultades en la filosofía, pero también las
encontrará en muchos aspectos del conocimiento, ordinario que se
refieran a realidades que no se pueden ver ni imaginar (por ejemplo, la
inteligencia la libertad, el bien, el mal). La filosofía, al basarse sobre la
evidencia intelectual, no hace más que desarrollar de modo
sistemático la capacidad de la inteligencia, aplicándola el estudio de las
causas y aspectos más profundos de la realidad.
24
Sin embargo el método científico no se reduce solo al método hipotético –
deductivo; éste supone que podemos alcanzar conocimientos ciertos sobre la realidad,
y por tanto, supone el valor de muchos conocimientos que no son hipotéticos, en caso
contrario, no tendría siquiera sentido el planteamiento del problema y de
experimentos y la interpretación de sus resultados, con los que tampoco podría
utilizarse el método hipotético-deductivo.
55
deduciendo de esas consecuencias igualmente necesarias. Por
ejemplo, analizando los diversos tipos de “cambios” que se dan en la
naturaleza, la filosofía llega a conocer que todo sujeto de cambio debe
estar compuesto de acto y potencia.
Estas verdades generales están presupuestas en los planteamientos de
las ciencias particulares, que investigan los detalles concretos de los
entes y sus causas próximas25.
25
Así, cuando el razonamiento filosófico concluye que en el hombre se da un alma
espiritual, se trata de la conclusión necesaria del análisis de unos hechos (que en este
caso son el conocimiento i8ntelectual y la voluntad libre del hombre); no se trata de
algo que se pueda “comprobar experimentalmente” (por su espiritualidad, el alma
humana no puede someterse a experimentación del mismo modo que las realidades
materiales). Algo semejante sucede con los razonamientos metafísicos que conducen a
afirmar la existencia de Dios.
56
realidad, por ejemplo, el hombre es una substancia y su color es un
accidente, pero no puede representarse imaginativamente qué son la
substancia y el accidente: se trata sin embargo, de aspectos de la
realidad a los que se llega con certeza mediante el conocimiento
intelectual.
26
Es el caso de Kant, quien afirma que los conceptos intelectuales son categorías a
priori (independientes de la experiencia que se aplican al material que viene
proporcionado por los sentidos) cfr. Crítica de la razón pura, Analítica trascendental,
libro I, capítulo I, Sección III, 10. La conclusión es que no podemos conocer la realidad
tal como es: solo podríamos aplicar “nuestra” categorías a una realidad inalcanzable en
sí misma. Este planteamiento, que desarrolla el iniciado por Descartes, condiciona
negativamente buena parte de la filosofía moderna, conduciendo a doctrinas
subjetivistas y –al menos implícitamente- escépticas o pragmáticas. Esta cuestión se
encuentra ampliamente expuesta e ilustrada en: C. CARDONA. Metafísica de la opción
intelectual, Rial, Madrid 1973
57
El cultivo especializado de la filosofía
27
Los neopositivistas propugnaban el rigor lógico y la claridad en filosofía. No le fue
difícil encontrar algún blanco al que dirigir sus críticas, por ejemplo, R. Carnap cita
algunas frases de M. Heidegger como las siguientes: “¿Existe la Nada solo porque
existe el No, es decir, la negación? ¿O sucede a la inversa? ¿Existe la Negación y el No
sólo porque existe la Nada?...Nosotros postulamos: la Nada es más originaria que el No
y la Negación… ¿Cuál es la situación en torno a la Nada?...La Nada misma “nadea”. Sin
embargo, al negar arbitrariamente toda metafísica, se embarcaron en una empresa
imposible, y los sucesivos intentos de salvar sus tesis condujeron a explicaciones no
menos abstractas que las citadas.
58
Para comprender la filosofía es necesario preguntarse en cada
cuestión cuál es el problema real de que se trata. Para ello es preciso
tener siempre presente los datos de la experiencia evitando caer en
disquisiciones puramente verbales.
Por ejemplo cuando se trata acerca de la espiritualidad del
alma humana debe advertirse que “no se trata de una pura
construcción teórica sino de un esfuerzo de fidelidad a nuestra
experiencia humana. El hecho de entender que todos nosotros
experimentados y que se abre a un mundo de ideas –que no se han de
entender en sentido platónico sino como una aprobación de
contenidos inteligibles- es lo que mejor define lo que se entiende como
espiritual. Refiriéndose a menudo por su contenido al mundo material
y estando siempre ligado a la actividad de substrato biológico, el hecho
de entender nos revela características incompatibles con la
materialidad”
28
TOMAS DE AQUINO. De Veritae, q. XIV, a. 10, ad 9
59
sobrenatural por la que, con inspiración y ayudad de la gracia de Dios,
creemos ser verdadero lo que por El ha sido revelado, no por la
intrínseca verdad de las cosas, percibida por la luz natural de la razón,
sino por la autoridad del mismo Dios que revela, el cual no puede
engañarse ni engañarnos”29. La fe cristiana conduce a un asentamiento
más firme, a verdades accesibles a la razón (sobre Dios, el alma
humana, la ley natural) y además a la aceptación de verdades que la
razón humana no puede alcanzar por sus fuerzas.
29
Concilio Vaticano I, Constitución sobre la fe católica, cap. 3
30
E. GILSON. El Tomismo, EUNSA, Pamplona 1978 (2°. De) pp. 35-36
60
significación de conceptos como “persona”, “naturaleza” y “Dios”, no
se entendería nada de los misterios de la Santísima Trinidad y de la
Encarnación, por ejemplo). Por otra parte, razón es sanada y elevada
por la fe, ya que la fe ilumina la oscuridad en que ha quedado la razón
como consecuencia del pecado, e facilita el conocimiento de las
verdades sobrenaturales que superan sus posibilidades.
31
Concilio vaticano I, Constitución sobre la fe católica, cap. 2 (en este punto recoge las
ideas de Santo Tomás; cfr. S. Th. I. q. 1, a. 1, c.)
61
aumentadas por las consecuencias del pecado. Las verdades reveladas,
por apoyarse en la autoridad de Dios, gozan de una seguridad mayor
que las alcanzadas por la razón.
62
A veces las pretendidas dificultades contra la fe provienen de
planteamientos más genéricos. Por ejemplo, cuando se dice que la
ciencia progresa adueñándose racionalmente de terrenos antes
asignados a la fe. Esto, en el caso de la de fe cristiana, es simplemente
falso: no se encuentra un solo caso en el que una verdad contenida en
la doctrina católica haya sido o pueda ser eliminada por el progreso
científico32.
Qué es la teología
32
La continuidad, a lo largo de épocas históricas y culturas diferentes, de la doctrina
católica, es ya un fuerte motivo de credibilidad.
63
Las obras de Dios: la creación y los seres creados, la elevación
del hombre al plano sobrenatural, la encarnación y la
Redención, la Iglesia, los Sacramentos.
64
por lo que se refiere a la fe y a la fidelidad a la misión de la Iglesia en
unión con su Magisterio auténtico.
33
Juan Pablo II, Discurso a teólogos en Salamanca (1-XI-1982). Cfr. Concilio Vaticano II,
Constitución Del Verbum, nn. 10 y 12
65
más alejadas del centro y más irrelevantes desde la perspectiva del
existir cristiano, sino al contrario, como un movimiento centrípeto, ya
que consiste en conducir a su centro, para iluminarlo a partir de él,
toda verdad y todo conocimiento. La teología…es un momento interior
a la fe, en la que se funda y a la que sirve”34
La teología no es, por consiguiente, un conocimiento desvinculado de
la vida cristiana. Por el contrario, su misión es iluminar los más variados
problemas prácticos, con la luz de la profundización de las verdades de
la fe. Junto con un contenido objetivo, la fe cristiana supone un
acercamiento personal a Dios; por eso, como ciencia de la fe, la
teología tiene como fin ayudar al hombre a aproximarse más a Dios,
facilitándole un mejor conocimiento de Dios mismo y de las verdades
que ha revelado, e iluminando con ese conocimiento las cuestiones de
la existencia humana.
34
J. LUIS ILLANES. Sobre el saber teológico. Rialp, Madrid 1978, p. 66
66
La función de la razón en la teología no es ser, por consiguiente,
demostrar las verdades sobrenaturales de la fe, sino alcanzar una
mayor inteligencia de ellas; para conseguirlo acudirá a semejanzas con
realidades naturales, y estudiaré la conexión de los diversos misterios
entre sí y con el fin último del hombre. Aunque se alcance una cierta
explicación de las verdades de la fe, es evidente que esas verdades
seguirán siendo misteriosas para el hombre.
67
de la Iglesia con lo instituido por Jesucristo, etc.). Este tipo de
tareas es abordado por la “Teología fundamental”
La razón proporciona en esta tarea argumentos que unas veces
son demostrativos y otras veces sólo llegan a mostrar la
conformidad de la fe con las exigencias de la naturaleza
humana. Se recurre con estos fines a la filosofía, a la historia y
a la psicología, y de modo más secundario a otras ciencias35.
b. Estudio sistemático de la Sagrada Escritura, utilizando también
los recursos de las ciencias humanas: es la “Exégesis de la
Sagrada Escritura”
En este ámbito se utilizan especialmente los conocimientos
históricos y filosóficos, aunque siempre se ha de interpretar la
Sagrada Escritura según su naturaleza propia (por tanto, a la
luz de la fe), lo cual tiene importantes consecuencias por
ejemplo: la unidad y la veracidad de los textos –según el
género literario de cada uno de ellos- no es una conclusión sino
un presupuesto36.
c. Estudio sistemático de la Tradición: La “Patrología” es el
estudio de la doctrina que nos han legado los Santos Padres de
la Iglesia.
35
Cfr. A. LANG, Teología fundamental. I, Rialp, Madrid 1996, pp. 3-41
36
Cfr. M. A. TABET, Una introducción a la Sagrada Escritura. Rialp, Madrid 1981, 111-
162
68
El estudio de la Tradición es un complemento indispensable
para la exégesis de la Sagrada Escritura ya que las garantías
sobre la Escritura y su correcta interpretación provienen de la
tradición.
d. Estudio de las verdades de la fe. Penetrando en su contenido y
considerando las relaciones que existen entre ellas, e
iluminando su comprensión mediante analogías tomadas del
ámbito natural es la “Teología dogmática”
Para realizar esas tareas, la teología recurre al ejercicio
ordinario de la razón, y también las doctrinas filosóficas, ya que
éstas permiten profundizar de modo más riguroso en las
verdaderas estudiadas. Es claro que doctrinas como el
inmanentismo, el existencialismo o el historicismo, ofrecen
serios inconvenientes para su utilización teológica37 . La
teología exige -lógicamente- unas mínimas bases filosóficas
coherentes con el buen sentido y con la objetividad
presupuestos por la fe, y esas bases no se dan en cualquier
filosofía.
e. Estudio de las aplicaciones de las verdades reveladas a la vida
humana por lo que se refiere al ámbito moral: es la “teología
moral”
37
Cfr. PIO XII, Encíclica Humani generis (12-VIII-1950) nn. 3 y 9
69
La moral sobrenatural se fundamenta en la ética natural, por lo
que el mayor o menor acierto en la ética filosófica repercutirá
en el estudio de la teología moral38.
f. Estudio de diversos ámbitos de la vida de la Iglesia: por
ejemplo, la Liturgia, la Historia de la Iglesia.
En la época moderna, es particularmente necesario el rigor
histórico, pues no faltan planteamientos que pretenden
cambiar aspectos importantes de la fe cristiana apelando a las
exigencias de la historia39.
g. Rechazo de los ataques a la fe, mostrando que se basan en
argumentos falsos o no concluyentes: ésta área se incluye
como parte integrante de las anteriormente señaladas.
En este ámbito, la razón humana basta –no necesita fe-. Pues
esos ataques provienen de bases pretendidamente racionales,
y deben examinarse por tanto en el ámbito de la razón natural.
Problema antropológico
38
Cfr. GARCIA DE HARO e I. DE CELAYA, La moral cristiana, o. c. pp. 114-150
39
Cfr. J. LUIS ILLANES, Cristianismo, historia, mundo. EUNSA, Pamplona 1973
70
estructura histórica esencial del hombre es la resultante de tres
factores mutuamente implicados: 1) el carácter encarnado del espíritu
humano (el hombre no es pura materia ni puro espíritu, sino, en la
expresión de Heidegger, ser-en-el-mundo); 2) el hecho de la
intersubjetividad o dimensión relacional de la vida humana (la
subjetividad humana no es una interioridad cerrada al estilo de
Descartes, o de Leibniz, sino ser-con-nosotros-conciencia de); 3) la
temporalidad (el hombre es también él mismo ser histórico, tiempo,
historia).
71
Y el interrogante fundamental de la antropología aborda la
estructura básica y esencial del hombre que lo constituye en cuanto tal
y lo diferencia de las demás cosas. La pregunta: ¿qué es el hombre?
Implica de por sí una previa afirmación de una esencia ya determinada,
es decir, su comprensión dentro de un horizonte metafísico, pregunta
que es impugnada por los marxistas sobrevivientes al amparo del
existencialismo propuesto por Sartre; quien afirmó que de algún modo
se impone la noción y la necesidad de establecer estructuras básicas
del hombre si queremos establecer un punto de discontinuidad como
se resalta en su actividad racional y cultural respecto a las demás
especies vivientes.
72
hombre no se reduce a sus orígenes físicos (la llamada teoría de la
evolución), sino a su diferenciación constitutiva aunque reconociendo,
como es obvio, su relación básica con el mundo animal desde el punto
de vista somático. Entones la cultura aparece como una clave básica de
la comprensión misma del hombre y de la historia, según sustenta
Ernst Cassirer: "En el mundo humano encontramos una característica
nueva que parece constituir la marca distintiva de la vida del hombre.
Su círculo funcional no sólo se ha ampliado cuantitativamente sino que
ha sufrido también un cambio cualitativo. El hombre como si dijéramos
ha descubierto un nuevo método para adaptarse a su ambiente. Entre
el sistema receptor y el erector, que se encuentran en todas las demás
especies animales, hallamos en él como un eslabón intermedio algo
que podemos señalar como "sistema simbólico". Esta nueva
adquisición transforma la totalidad de la vida humana" (Antropología
filosófica, 1976).
El problema de Dios
73
El planteamiento del problema de Dios, como de otros
problemas, ofrece múltiples posiciones e interpretaciones. El mismo
concepto de Dios en la historia de la filosofía no es tan unívoco,
llegando incluso a presentarse conceptos de tipo panteísta. De hecho,
la noción predominante se refiere al concepto de Dios ofrecido por el
cristianismo y su pensamiento en los grandes teólogos. En este sentido,
Dios sería un ser distinto del mundo, causa de él, personal y existente
en sí mismo (aseidad). Por la influencia misma del cristianismo en la
cultura europea este concepto ofrece la gran ambigüedad de su
múltiple uso y abuso, cuando se le invoca en los procesos culturales,
sociales, ideológicos y políticos.
74
militante como lo fue el marxismo. Particularmente en las corrientes
materialistas (Demócrito en la Antigüedad) y desde el siglo XVIII la
corriente de impugnación de la afirmación sobe la existencia de Dios se
ha hecho cada vez más fuerte; línea que se prolonga en los sistemas
particulares de Nietzsche, Feuerbach, Marx, Sartre y de algún modo se
postula en el positivismo, el neopositivismo y la filosofía analítica.
75
El problema ético
76
Pero aquí, como en todos los problemas filosóficos, el planteamiento
del problema y las líneas de solución configuran abundantes
ramificaciones temáticas, según las escuelas y autores.
77
de la moralidad, esta fundamentación quiere expresar un conjunto de
normas y principios básicos orientadores de las situaciones concretas.
78
Esta dimensión, fundada en el carácter específico de la
conducta humana que no se ajusta a un inmediatismo frente a la
realidad, es una libertad situada, al mismo tiempo, con limitaciones y
ataduras, pero, de todos modos, la fuente de la moral y la ética.
79
campos de valor, no sólo de lo útil, de lo útil y práctico y de lo
vitalmente ventajoso, sino también de los valores intelectuales,
estéticos y culturales, se plantea esta pregunta: ¿existen también
valores que afectan al hombre en cuanto hombre, que le llevan al
desarrollo y realización plena en su ser propiamente humano? ¿Existen
valores por los que el hombre se hace, no sólo buen músico, un buen
estudiante y deportista, un buen jurista, físico, médico, etc., es decir,
no sólo se hace "bueno" en éste o en aquel sector particular de la
actividad humana, sino un hombre bueno, o lo que es lo mismo, un
individuo que en lo peculiar y esencial de su ser humano ha llegado a
su pleno desarrollo y realización? Esa es la esencia de la moral. A un
valor de este tipo lo llamamos un valor moral, lo moralmente bueno.
Todo aquello que corresponde al autodesarrollo esencial y común a
todos los hombres es moralmente bueno. Por el contrario, todo lo que
se opone a dicho desarrollo es moralmente malo"(¿Qué es el hombre?)
80
incluso del problema de la ética en el marxismo, la ética de la situación
inspirada en los planteamientos de Sartre y Simone de Beauvoir. Con
todo y a pesar de los múltiples obstáculos que se le ponen, la reflexión
de orientación cristiana se va redescubriendo.
81
positivista.
82
conocimiento). ¿Fuera del conocimiento discursivo existen otras
formas de conocer la realidad como la intuición opuesta a la forma
lógica argumentativa? (Problema de las formas del conocimiento).
Cuando un conocimiento se revela como verdadero, ¿con qué criterio
podemos estar absolutamente ciertos de que es así? (Problema del
criterio de verdad del conocimiento).
83
representativa de la realidad.
84
cabe afirmar que indudablemente el pensamiento filosófico se había
ocupado siempre en este problema bajo el título de bien y de bondad
(bonum et bonitas).
85
llegar a convertir el valor en una cosa, a hipostasiarlo, como lo hizo
Platón. Por último, si se concibe el "valor" exclusivamente como
cualidad, como modalidad de la cosa se lo naturaliza o cosmologiza. Se
hace del valor algo propio de las cosas. Las tres concepciones son
unilaterales. Perciben algo correcto, pero lo ven demasiado
exclusivamente y pasan por alto otros detalles" (Tratado de Filosofía,
1970)
86
orientada, hacia él; y puesto que se abre únicamente al sentir
emocional, surge el irracionalismo valoral. Lo contrario de éste sería un
racionalismo valoral que disolvería en el ser el carácter propio del
valor. Entre ambos se encuentra la aprehensión intelectual del valor,
que lo descubre porque el ser es intrínsecamente valioso, pero que
nunca puede constituir la respuesta total a aquel, porque el valor
perfecciona al ser y, por consiguiente, sólo encuentra la respuesta
plenamente adecuada en el sentir y el querer; por eso, aún la
aprehensión intelectual del valor estará siempre impregnada de
elementos sentimentales y apetitivos.
87
Atendiendo al contenido, el valor por razón de sí muestra los
grados siguientes: valores económicos, vitales, espirituales (lo
verdadero, lo bello, el bien ético) y religiosos (lo santo). La
jerarquización de Scheler, quizá como el axiólogo más significativo del
objetivismo contra el subjetivismo, responde a esta enumeración, que
sigue los grados del ser: valores sensibles: gratos e ingratos; valores
vitales, que se subdividen en: lógicos: verdadero-falso, estéticos: bello-
feo, éticos: justo-injusto; y valores religiosos que ocupan el lugar
supremo, pues en ellos se trata directamente del Bien infinito (Dios).
88
La historia de la filosofía no puede reducirse a un simple
conjunto de datos y afirmaciones de los filósofos: para captar el
pensamiento de un filósofo es necesario considerar cómo plantea sus
problemas y propone sus soluciones, y esto ya es una tarea filosófica.
Cuando se pretende además conseguir una visión histórica acerca de
los diversos planteamientos y soluciones de los problemas,
necesariamente se ha de trabajar a nivel filosófico. Pero tanto, la
historia de la filosofía es una parte de la filosofía.
40
Cfr. ARISTÓTELES. Física, IV, 1, donde pone como dificultad para el estudio del
“lugar” la falta de discusiones al respecto entre los autores anteriores.
41
Dice Santo Tomás que “la verdad, quienquiera que la diga, procede del
Espíritu Santo, que infunde la luz natural y mueve a la inteligencia y a la
expresión de la verdad” (S. Th., I-II, 109, I, AD 1).
89
examina todo tipo de opiniones y procura aprovecharlas lo más
posible42.
42
Cfr. De Coelo, I, 22 (225), donde Santo Tomás se refiere a “quienes reprueban sólo
por odio lo que otros han dicho, lo cual no es propio de los filósofos, que se profesan
buscadores de la verdad. Es necesario a quienes quieren juzgar suficientemente la
verdad que no actúen como enemigos de aquellos cuyas doctrinas han de juzgar, sino
como árbitros y rigurosos examinadores de ambas partes”
43
“El estudio de la filosofía no se hace para saber qué han opinado los hombres, sino
cómo es la verdad de las cosas”, Ibid., (228). Este texto de Santo Tomás, junto con los
dos recogidos en las notas anteriores, sitúan claramente cuál es el interés de la historia
de la filosofía y con qué actitud se ha de abordar el estudio.
90
En nuestra época, uno de los mayores peligros es el relativismo
que no reconoce el valor definitivo a ningún conocimiento
humano. A veces, se llega a esa postura argumentando que
incluso las doctrinas que se han considerado más ciertas en la
historia, finalmente se han revelado erróneas o parciales. Se
comete así el grave error de negar toda certeza bajo el pretexto
de que en todos los filósofos o doctrinas ha habido errores, y se
adopta una postura pretendidamente “objetiva” que en vano
busca un fundamento para seguir hablando de la “objetividad”
y la “verdad”44.
44
Cfr. , por ejemplo, S. TOULMIN. La comprensión humana I, Alianza, Madrid 1977. Pp.
17-45 y 479-503. Toulmin explica el valor de los conceptos humanos refiriéndolos a las
“empresas colectivas” concretas realizadas en la historia. De modo que no habría lugar
para una serdad definita por eso, su pretensión de defender una “racionalidad
objetiva” es inviable. Es significativo que- como sucede también a otros autores- la
“verdad objetiva” que no se puede alcanzar se identifica con la doctrina básica de
Descartes y Locke: las críticas dirigidas a esos autores tienen fundamento, pero,
evidentemente, no tocan o- sólo tangencialmente- a una filosofía no racionalista ni
empirista Descartes y Locke, lejos de agotar la verdad en filosofía, construyeron
sistemas sumamente endeble.
91
conocimiento que no traspase el plano histórico, sino de que sea una
ayuda para alcanzar el conocimiento de la verdad45.
45
Cfr. Nota 4 de este capítulo.
92
fundamentales, y que las soluciones dadas a esas cuestiones se
reducen, a su vez, a varias líneas básicas de pensamiento, que van
encontrando diversas expresiones a lo largo de la historia, y que se
relacionan estrechamente con las actitudes posibles frente a los
problemas cruciales de la existencia humana. Además es posible
señalar con frecuencia cómo unos planteamientos filosóficos surgen
como reacción frente a los excesos de posturas contrarias. Todo esto
permite disminuir la perplejidad causada por la variedad de doctrinas
en la historia de la filosofía, y evitar conclusiones relativas y escépticas.
93
materialismo, el pragmatismo y el ateísmo. Y no es raro que una línea
doctrinal se presente como reacción o superación de otra.
El progreso en la filosofía
94
El progreso en filosofía no es lineal ni acumulativo: hay
avances, retrocesos, y cumbres que- hasta el momento- no han sido
superadas.
95
épocas posteriores. Platón y Aristóteles representan el punto
culminante de este período.
46
J. MARITAIN, Introducción general a la filosofía, o, c. p. 64. No parece justo
achacar al influjo de Aristóteles en que la ciencia experimental no se
desarrolla sistemáticamente hasta siglos más tardes: su pensamiento se
orienta en clara fidelidad a la lógica y a la experiencia.
96
culminante es la doctrina de Santo Tomás de Aquino, que recoge en
una síntesis original las adquisiciones principales de la filosofía clásica y
las integra armónicamente en la teología cristiana.
47
E. GILSON. La filosofía en la edad media. Gredos, Madrid 1972, p. 702.
97
obstáculo, sino un estímulo para la razón “todo sucede cristiana
hubiese sido una fuente religiosas de desarrollo filosófico,
siendo la Edad Media latina, en el pasado, el testigo por
excelencia de ese desarrollo. Esta tesis podrá ser tachada de
apologética, pero, si es verdadera; si es falsa, no lo es porque se
la puede utilizar con ese fin. La cuestión es, pues, saber si es
verdadera, cada cual quedando libre de utilizarla como le
parezca”48.
48
E. GILSON. El espíritu de la filosofía medieval. Rial, Madrid 1981, p 371. Cfr. J.
CHEVALIER, Historia del pensamiento. II, Aguilar, Madrid 1967.
98
De Kant arranca el idealismo, cuyo máximo exponente fue
Hegel, de quien a su vez- y con los añadidos propios de tipo
materialista-arranca Marx.
49
Cfr. Question de méthode, Gallimard, Paris 1960, p. 17.
50
Por ejemplo de Kant llega a afirmar J. Chevalier que “fue llevado a mutilar la
inteligencia humana y a negar todo poder de aprehender lo real” (Historia del
pensamiento III, Aguilar, Madrid 1963, p. 594).
51
Cfr. J. M. PETIT. Filosofía, Politioca y religión en Augusto Comte. Acervo, Barcelona
1978.
99
serán variantes del positivismo y del marxismo, y llegarán a
dominar no sólo buena parte del mundo de las ideas, sino
también amplios ámbitos de la política, con muchas
repercusiones negativas.
100
La metafísica del ser, especialmente de inspiración tomista,
cultivada desde diferentes perspectivas por autores muy
variados.
101
encuentra en Santo Tomás de Aquino), que defiende el valor
permanente y definitivo de las tesis básicas de la metafísica52.
52
Sobre las diversas posturas mencionadas puede verse, p. ej.: I. M. BOCHENSEKI. La
filosofía actual. FCE, México 1969; R. VERNEAUX. Historia de la filosofía
contemporánea, Herder, Barcelona 1971.
102
una continuidad o por oposición a notables pensamientos anteriores;
sin embargo, lograron notoriedad por el aporte que significaron o por
la crítica oportuna que daba lugar a nuevos modos de pensar.
103
adolescente cuando deja atrás la infancia: ¿quién soy, dónde estoy y
hacia dónde voy?; porque el comportamiento del hombre
latinoamericano expresa la ambivalencia de su propio pasado y la
ambigüedad de su cultura.
104
que económicos.
105
que no tuvo mucha acogida, como la mayoría de obras de importantes
106
una quema de libros simbólica, cuando por ejemplo se puede
hablo de Filosofía Política, sino que por antonomasia lo es. Esta idea
Foucault marxista que dice que la lucha de clases, solo es una lucha por
107
técnicos trabajando en un régimen prepotente? Implicaría esto la
maquinización del hombre, sin su espacio para pensar… para la
Filosofía y su praxis, más que solo la ya inyectada
ideológicamente. Inyectada, de la misma forma como se le aplica el
suero a un enfermo que no tiene la más mínima voluntad de replicar y
solo desea salvar su vida, en manos de una enfermera.
108
en la estructura donde vivimos se evita y hasta se repudia, siendo este
un ejemplo de atrocidad del siglo XXI; en el siglo pasado en
Latinoamérica desaparecían a la gente y ahora, bueno esto. Freud diría:
“estamos avanzando como sociedad”.
109
2.7 Mujeres filósofas
110
que no dudó en denunciar que si las mujeres no alcanzaban puestos
más destacados en el panorama cultural de la Francia que le tocó en
suerte vivir, era debido a la carencia de posibilidades para formarse.
Por esta razón, nunca dejó de animar a sus amigas y conocidas, a
través de sus libros y en las reuniones que ella misma organizaba, a
emplear su intelecto y a adquirir el aprendizaje necesario para situarse
al mismo nivel intelectual que los hombres para, con el tiempo,
demostrar la igualdad de los sexos a este respecto. En un breve texto
titulado Quejas de las mujeres, harta de las falsas acusaciones que
sobre ella se cernían (brujería, prostitución, demencia, “vieja
solterona”, etc.) llegó a escribir que “más de uno dice treinta tonterías
y todavía triunfa, por su barba o por el orgullo de sus supuestas
capacidades”.
111
a ser y existir en un mundo construido por el varón”, por lo que
escapar de los fuertes prejuicios arraigados en la sociedad en cuestión
ha supuesto un esfuerzo en ocasiones insuperable.
112
Después de un matrimonio forzado con un viejo empresario, y
tras quedar viuda, adujo sin temor que el casamiento supone “la
tumba de la confianza y el amor”. En sus escritos, que tuvieron gran
repercusión, trataba diversos temas (la religión, el matrimonio, el
celibato, la sociedad, etc.). A pesar de que la revolución fuera acogida
como un soplo de aire fresco por gran parte del pueblo francés frente a
los abusos del Antiguo Régimen, bajo el estandarte del famoso lema
revolucionario Libertad, igualdad, fraternidad, Olympe de Gouges
pensaba que la situación de las mujeres, a pesar de todo, no había
cambiado ni un ápice. Con una voluntad férrea, reclamó un trato de
igualdad en cualquier aspecto para hombres y mujeres. Lo importante,
pensaba, no es demostrar que la naturaleza de ambos sexos no
difieren en lo esencial, sino obligar al Estado a que la ley les sea
aplicada de igual forma: los derechos no son un privilegio que puedan
dispensarse aleatoriamente. En su Declaración de los derechos de la
mujer y de la ciudadana, Olympe llamaba la atención a sus compañeras
de esta forma: “Mujer, ¡despierta! La campana que toca la razón
resuena por todo el universo; ¡conoce tus derechos! El reino poderoso
de la naturaleza ya no está rodeado de prejuicios, fanatismo,
escepticismo y mentiras. Solo la ley tiene derecho a poner límites a
esta libertad cuando degenera caprichosamente, pero debe ser igual
para todo el mundo”. El punto clave de la libertad, aseguraba la
enérgica Olympe, reside en que la sociedad admita que cualquier
113
ciudadano, sea cual sea su condición o su sexo, pueda progresar sin
impedimentos artificiales mediante la libre ejercitación de sus
capacidades. Olympe de Gouges murió ejecutada en defensa de esa
misma libertad, tras oponerse frontalmente a la represión jacobina que
por aquel entonces comandaban Marat y Roberspierre. La acusación
del tribunal revolucionario: reaccionaria.
Contra el silencio
114
escribe María Rosa Palazón, “el principal negocio femenino fue, pues,
seducir para engendrar”.
115
La conquista del voto
No fue hasta finales del siglo XVII cuando se publicó por vez
primera un libro bajo el título de Historia de las mujeres filósofas (en la
actualidad se puede encontrar en la editorial Herder), escrito por Gilles
Ménage y dedicado, según el autor, a “la más sabia de las mujeres
116
actuales y del pasado”: Anne Lefebvre Dacier, una intelectual francesa,
editora y traductora de clásicos griegos y latinos. Cuando Umberto Eco
echó un vistazo a la obra, explicó que, tras haber hojeado al menos tres
enciclopedias actuales sobre filosofía, no encontró ninguno de los
nombres que cita Ménage en su llamativo libro. El autor italiano
aseguró tras este análisis que “no es que no hayan existido mujeres
que filosofaran; es que los filósofos han preferido olvidarlas, tal vez
después de haberse apropiado de sus ideas”.
117
que pueblan el universo y que actúan en la naturaleza de un modo que
resulta muy familiar: “mónadas”, cada una de las cuales son
indivisibles, y que, además, encierran en su totalidad la complejidad
del mundo. Sin embargo, el concepto de mónada ha pasado a la
historia de la filosofía como un concepto propio del sistema de Leibniz,
quien no tuvo reparos en explicar en distintos lugares de su obra que
las ideas de Conway le habían influenciado hondamente.
118
que así lo quieren los hombres. Los que tienen el poder consiguen que
los súbditos consideren durante mucho tiempo como sus virtudes
apropiadas aquellas cualidades y aquella conducta que agradan a los
gobernantes”.
119
ESQUEMA
UNIDAD 1
120
ACTIVIDAD DE LA PRIMERA UNIDAD
121
UNIDAD 2
El problema antropológico y el
problema epistemológico.
OBJETIVO
122
1. ¿Qué es la Antropología?
Filosofía antigua
Sócrates (filosofo ateniense del S. V a. C.)
123
hincapié en aspectos como: la virtud, el amor, la justicia y el
conocimiento de uno mismo. Su misión era tratar de persuadir a los
hombres para que cuidaran su alma, que era lo más noble, y también
de incentivarlos a que obtengan virtudes y a que sean personas sabias.
124
ni de ninguna otra cosa, antes y más que del alma, para que ésta se
convierta en óptima y virtuosísima"
125
que tuvo anteriormente y pase de la existencia terrena a la pura
contemplación del Mundo de las Ideas. La existencia del alma va más
allá de la existencia terrena.
126
valor y la templanza.
127
separadas: la sustancia es un compuesto de materia y forma, y estas no
se pueden disolver.
128
Aristóteles tampoco estará de acuerdo con la concepción
tripartita del alma planteada por Platón, ya que este filósofo dice que
el alma no tiene partes, ella es única y tampoco se encuentra en un
lugar determinado ya que no es un cuerpo ni forma parte de el, sino
que es una función del mismo.
129
superior a la vegetativa, ya que además de estar capacitada con la
función de nutrición, también controla la percepción sensible, el deseo
y el movimiento local. Dice que este tipo de alma es propia de los
animales ya que les permite disponer de las sensaciones necesarias
para garantizar su supervivencia
130
2. El reino animal (excepto el hombre) posee las funciones
nutritivas y sensitivas.
3. El hombre posee las tres funciones: nutritiva, sensitiva y
pensante. Es ésta última la que le caracteriza esencialmente
como hombre.
Filosofía medieval
131
racional, que informa inmediata y directamente a la materia prima
constituyendo el compuesto "hombre".
132
Entre algunos motivos más sobre la inmortalidad del alma,
según Santo Tomás, podemos destacar lo siguiente:
Filosofía moderna
Descartes (filosofo francés SXVII)
133
consciencia del pensamiento prueba su propia existencia, mantuvo la
existencia de Dios.
134
valor, su dignidad y su condición de persona, y que a estas
características debe corresponder un comportamiento adecuado.
135
En la " Introducción a la Lógica" Kant dice que el campo de la
filosofía se encierra en las siguientes cuestiones:
Filosofía contemporánea
Nietszche (filosofo alemán, 1844-1900)
136
consciente de que se vence a sí mismo mediante la superación.
137
particular, valora a la vida corporal, es decir, la salud, el
placer, las pasiones, la victoria, el éxito.
o Superación: superación de la moral tradicional occidental
cristiana, el hombre no está sometido a ningún precepto
moral ya que se sitúa por encima del bien y del mal. El
superhombre es la máxima posibilidad del ser humano.
o Valores: no solo los valores han sido cambiados sino que
también la forma de valorar. El superhombre se ríe de los
valores tradicionales y rompe con la jerarquía de valores.
o Tierra: vive la fidelidad a la tierra, lejos de la consecuencia
metafísica de los filósofos, lejos de la idea de Dios. Es fiel a
lo terreno, a lo que pisa, olvidando las composiciones
espirituales.
o Poder: Se deja llevar por el deseo de dominar y de no ser
dominado, es decir, esclavo. el superhombre vive la
voluntad de poder, que es la consecuencia de las ansias de
vivir.
o Retorno: el superhombre vive el eterno retorno. Querer el
futuro es volver a querer el pasado, todo ya ha existido.
138
superhombre. Es un paso intermedio entre la animalidad y la
superhumanidad.
139
En conclusión: el superhombre es la afirmación enérgica de la
vida y el creador y dueño de sí mismo y de su vida, es un espíritu libre.
140
si no existo no puedo conquistar mi esencia ni dármela a través de
actos dependientes de mi.
141
intentara establecer una diferencia entre el hombre y el mundo.
Mientras " el ser en sí" es lo que es, careciendo de toda relación, como
masa indiferenciada, refiere al mundo; el " ser para sí" describe la
conciencia humana de modo tal que está en el mundo, en " el ser en
sí", aunque es totalmente diferente de éste.
1.2 Culturalismo
142
filosofía, la antropología, la sociología, la historia, la psicología y por lo
tanto el psicoanálisis, la política. Leían mucho a Marcuse (La Sociedad
Carnívora), a Sartre, a Foucault y a Althusser. Dentro del campo del
psicoanálisis también se notó su influencia. Desde el marxismo y desde
fuera del marxismo. Podemos definir al Culturalismo como la tendencia
que pone el énfasis en los factores sociales y culturales en el desarrollo
de la personalidad y en la generación del conflicto. Esta escuela hace
una valoración superlativa de esta "presión cultural". Entre sus
epígonos dentro del campo psicoanalítico destacaron personalidades
como Harriet Sullivan, Karen Horney y Erich Fromm. Ellos rechazaron la
teoría freudiana de las pulsiones y pusieron en primer plano dos
conceptos: la angustia y la agresividad. La primera como consecuencia
del conflicto del Yo con las exigencias culturales, la segunda como
efecto dela frustración. Esta frustración produce un profundo
resquemor y una agresividad que debe ser reprimida y por lo mismo
está en el origen de la angustia. Esta forma de entender la génesis del
conflicto está totalmente alejada de los postulados freudianos y la
canianos y son los que han desvirtuado el concepto de frustración en el
psicoanálisis, volviendo muy difícil su recuperación. Además de la
constatación de cómo se han apoderado del concepto las escuelas
conductistas. A nivel del pensamiento filosófico, Sartre se ocupó y
mucho del concepto de angustia y dentro del existencialismo y la
fenomenología pensadores como Biswanger y Victor Frankl fueron sus
continuadores. El último de ellos, muy ligado al pensamiento católico y
143
a algunas ideas del junguismo. Sullivan describe por aquél entonces
una angustia que él llamó básica, que es adquirida en las primeras
etapas de la vida, en la infancia, y transmitida por los padres. Esta
ponía en evidente riesgo la necesidad que tiene el niño de seguridad.
Esta necesidad de seguridad no tiene un origen sexual para él, sino que
está fundamentada en la socialización. Se aleja por lo tanto del
concepto freudiano de placer libidinal. De allí surgirá como
consecuencia que al tratar de evitar la angustia, reprimirá todos los
impulsos que puedan entrar en conflicto con las normas culturales.
Karen Horney también considera a la angustia como un efecto directo
de la frustración. Para ella la angustia procura en su intento de ser
disuelta, un aumento de las necesidades afectivas y una búsqueda del
amor exclusivo, sobretodo de la madre. Al no lograrlo totalmente, se
produce agresividad, que lo lleva a experimentar fuertes sentimientos
de culpa y temor a perder el amor primordial. "La personalidad
neurótica de nuestro tiempo". Erich Fromm, que como recordarán
escribió títulos tan importantes como "El arte de amar" o "El miedo a la
libertad", ubica a la angustia como resultado del conflicto infantil entre
la necesidad de independencia y la de reconocimiento.
144
dialécticamente y es ésta interacción la que hace del hombre un ser
fundamentalmente "social". El complejo de Edipo, por lo tanto, es el
producto de una sociedad que él denomina "patriarcal", y el resultado
de la lucha del niño por su individuación. La escuela culturalista llega a
conclusiones radicalmente opuestas a las que llegó Freud. Las actitudes
de la sociedad hacia la sexualidad son para ellos realmente peligrosas,
siendo en última instancia la sociedad la causa de la agresividad y la
angustia. Por supuesto, estas posiciones fueron fuertemente criticadas
por los psicoanalistas clásicos y rebatidas por numerosos trabajos que
investigaron el origen de la sexualidad infantil y el complejo edipo-
castración. Al poner el énfasis en la frustración "realmente" vivida por
el individuo, los culturalistas descuidan el papel de la fantasía en los
conflictos individuales y terminan negando el concepto de inconsciente
tal como lo alumbró Freud y como lo perfeccionó Lacán. Ellos analizan
el conflicto como una "realidad" y perciben a la historia como un
"trauma". Su equívoco más importante es el desconocimiento del
carácter imaginario de la angustia y del conflicto edípico, y de los
conceptos que por aquel entonces estaba elaborando Lacán con la
ayuda de la lingüística, y su descubrimiento de lo Real. El Culturalismo
desapareció como tal, pero muchas de sus ideas siguen vivas en los
movimientos sociales y políticos. Sobre todo en los llamados
"movimientos de liberación de la mujer". El psicoanálisis, con el
crecimiento de la influencia de las ideas de Lacán, dió un paso más allá.
Sin perder de vista los conflictos sociales, no abandona en absoluto el
145
pensamiento de Freud desarrollando nuevas líneas de investigación y
abriendo perspectivas que garantizan la formulación de un
psicoanálisis mucho más completo, moderno y eficaz para entender al
hombre de nuestro tiempo.
1.3 Existencialismo
146
plenamente responsable del modo de ser que va adquiriendo a lo largo
de su existencia. De alguna manera la libertad resulta incómoda,
debido a que hay que saber qué hacer con ella, por lo tanto será la
causa de una gran angustia.
¿Qué es existencia?
Para la DRAE.
En campo filosófico
147
definición se refiere a la esencia. Pero para los existencialistas, este
término tiene un significado restringido, es el modo de ser propio del
hombre.
148
escritores existencialistas se han hecho eco de la creencia de
Kierkegaard de que el individuo ha de elegir el camino propio sin la
ayuda de modelos universales y objetivos. En contra de la idea
tradicional de que la elección moral implica un juicio objetivo sobre el
bien y el mal, los existencialistas han afirmado que no se puede
encontrar ninguna base objetiva, racional, para defender las decisiones
morales. También durante el siglo XIX, el filósofo alemán Friedrich
Nietzsche sostuvo que el individuo tiene que decidir qué situaciones
deben ser consideradas como morales.
Subjetividad
149
los existencialistas fueran irracionales en el sentido de negar toda
validez al pensamiento racional. Han mantenido que la claridad
racional es deseable allí donde sea posible, pero que las materias más
importantes de la vida no son accesibles a la razón o a la ciencia.
Además, han sostenido que incluso la ciencia no es tan racional como
se supone. Nietzsche, por ejemplo, afirmó que la visión científica de un
Universo ordenado es para la mayoría una ficción práctica, una
entelequia.
Elección y compromisos
150
lleve.
Temor y angustia
151
Jean Paul Sartre
Filósofo y escritor Francés (1905 - 1980)
152
filosofías existencialistas y fenomenológicas de Kierkegaard, Heidegger
y Husserl.
153
se proyecta en ella, se reconoce... Ese viejo edificio en ruinas, mi
impostura, es también mi carácter; podemos deshacernos de una
neurosis, pero no curarnos de nosotros mismos.
154
comunicación de que la "existencia precede a la esencia" pero
realmente ¿qué quiere decir?
155
Dios antes de la creación (más o menos como existían las tijeras en la
mente del inventor).
156
emprendido. No negaba la existencia de Dios ni que los humanos
éramos creación de Dios, pero sostenía que la creencia de Dios no era
más que eso: una creencia, un artículo de fe al que uno se aferraba
apasionadamente y no un dato científico o una deducción lógica. Para
él entre el hombre y Dios había un abismo infinito.
157
filosofía puede llegar a ser una filosofía autobiográfica.
158
Fenomenología
2. ¿Qué es la Epistemología?
159
Así, la epistemología también se encarga de estudiar el grado
de certeza del conocimiento científico en sus diferentes áreas, con el
objetivo principal de estimar su importancia para el espíritu humano.
Como tal, la epistemología también se puede considerar parte de la
filosofía de la ciencia.
160
conocimiento y del pensamiento en general. No obstante, hay autores
que prefieren distinguir la epistemología, que se enfoca
fundamentalmente en el conocimiento científico, de la gnoseología.
161
Su discípulo Platón en la reflexión filosófica se extiende al
contenido total de la conciencia humana, no solo se dirige solo a los
objetos prácticos, a los valores y a las virtudes, sino también al
conocimiento científico. La filosofía se presenta como una
autorreflexion del espíritu sobre sus supremos valores teóricos y
prácticos, sobre los valores de lo verdadero, de lo bueno y lo bello.
162
esa manera, a mayor Ser corresponde mayor ciencia. Entonces, sólo es
cognoscible el Ser; mientras que el No-Ser es absolutamente
incognoscible. Pero entre el Ser y el No-Ser existe una categoría
intermedia, que corresponde al llegar a Ser, es decir, el Ser en
movimiento, que tiene algo de Ser, pero sin llegar a la plenitud
perfecta del Ser. Sobre la base de esos tres niveles o grados se
estableció la siguiente triple ecuación: a) Al Ser corresponde la Ciencia,
b) al No-Ser corresponde la Ignorancia, y c) al llegar a Ser, o la mezcla
de Ser y No-Ser, corresponde la Opinión.
163
sentidos, ni por la imaginación, ni por la razón discursiva, sino
solamente por el entendimiento, el intelecto. En consecuencia, Platón
sostuvo que el conocimiento tiene un carácter primordialmente ideal,
que no se deriva de la percepción, precisando que nada es digno de ser
llamado conocimiento que se derive de los sentidos. El único
conocimiento verdadero se refiere a los conceptos. Así "dos y dos son
cuatro" es un conocimiento genuino, contrario a la afirmación "la nieve
es blanca" que está llena de ambigüedad e inseguridad, que no puede
considerarse como verdadera.
164
las cosas, y porque no distingue lo sustancial de los accidental.
Tampoco constituye ciencia el conocimiento que solamente llega hasta
la opinión, porque carece de necesidad, aun cuando pueda ser base de
juicios verdaderos. De modo que el conocimiento científico requiere
fijeza, estabilidad y necesidad de los objetos en los cuales se basa su
certeza. Sólo puede llegar a constituir ciencia el conocimiento
intelectivo. El conocimiento intelectivo es un medio para constituir
ciencia. Mediante este tipo de conocimiento se puede producir
conceptos universales con los caracteres de fijeza, estabilidad y
necesidad.
165
como contrapuesto a lo particular y concreto, sino como
equivalente a fijo, inmutable y necesario. De modo que la
ciencia es un conocimiento "universal", o sea, fijo, estable,
necesario y cierto de las cosas, que llega hasta sus esencias,
las expresa en definiciones y las explica por sus causas.
166
en todas las materias científicas. Por ejemplo, la Física y la Ética no
pueden aspirar a la misma certeza que las Matemáticas.
167
La filosofía de Aristóteles presenta un aspecto distinto, se
dirige preferentemente al conocimiento científico y a su objeto: El ser,
en el centro de su filosofía notamos una ciencia universal del ser.
168
Cuando nuestra razón juzga que una cosa tiene que ser así y que no
puede ser de otro modo; que tiene que ser así, por tanto, siempre y en
todas partes, entonces y sólo entonces nos encontramos ante un
verdadero conocimiento, en opinión del racionalismo Un conocimiento
semejante se nos presenta, por ejemplo, cuando formularnos el juicio
"el todo es mayor que la parte" o "todos los cuerpos son extensos". En
ambos casos vemos con evidencia que tiene que ser así y que la razón
se contradiría a sí misma si quisiera sostener lo contrario. Y porque
tiene que ser así, es también siempre y en todas partes así. Estos
juicios poseen, pues, una necesidad lógica y una validez universal
rigurosa.
169
Ideas son los modelos de las cosas empíricas, las cuales deben su
manera de ser, su peculiar esencia, a su "participación" en las Ideas.
Pero el mundo de las Ideas se halla, en segundo lugar, en relación con
la conciencia cognoscente. No sólo las cosas, también los conceptos
por medio de los cuales conocemos las cosas son copias de las Ideas,
proceden del mundo de las Ideas. Pero, ¿cómo es esto posible? Platón
responde con su teoría de la anamnesis. Esta teoría dice que todo
conocimiento es una reminiscencia. El alma ha contemplado
170
importante adición nisi intellectus ipse. Se puede designar esta forma
de racionalismo con el nombre de racionalismo inmanente en
oposición al teológico y al trascendente.
171
todo conocimiento verdadero, se opone al empirismo que
considera como única fuente a la experiencia.
2. Racionalismo Metafísico que afirma que la realidad es, en
último término, de carácter racional. En su acepción más
general, este término refiere a todos aquellos sistemas
filosóficos que consideran que la realidad está gobernada
por un principio inteligible, accesible al pensamiento y
susceptible de evidencia racional, o bien identificable con
el pensamiento mismo. Según esto podríamos hablar de
"racionalismo platónico", puesto que la realidad para él se
halla ordenada de acuerdo con un modelo ideal, accesible
a la razón mediante la dialéctica y proporcionado por el
mundo inteligible o mundo de las ideas; o de
"racionalismo hegeliano", donde la realidad coincide en
último extremo con la autorrealización de la razón o
espíritu; frente a este racionalismo metafísico se coloca el
irracionalismo o el voluntarismo metafísico.
172
4. Racionalismo religioso, cuando por exigencias racionales
se ha rechazado la posibilidad de cualquier revelación de
la divinidad o se ha dado una interpretación puramente
racional a fenómenos considerados milagrosos o a
personas consideradas sobrenaturales.
173
experiencia.
174
Suele distinguirse una doble experiencia: la interna y la
externa. La interna consiste en la percepción de sí mismo, la externa en
la percepción por los sentidos. Hay una forma del empirismo que sólo
admite esta última. Esta forma del empirismo se llama, sensualismo
(de sensus = sentido).
175
margen de cualquier utilidad. (ini, Carlo (2004), «Empirismo», en
Gianni Vattimo et al., Enciclopedia Garzanti della Filosofía).
176
filosofía en occidente y que hoy caracterizamos básicamente como
racionalismo y empirismo. En realidad responden a dos actitudes y
modos de concebir la función del pensamiento y el sentido de la vida.
Los primeros en mantener una actitud claramente empirista fueron los
sofistas quienes negaron las especulaciones racionalistas sobre el
mundo natural común a sus predecesores, presocráticos y, sobre todo,
Platón; por el contrario se preocuparon "en tan relativas entidades
como el hombre y la sociedad" (Encyclopedia Britannica,
Empiricism"(Empirismo), vol. 4, p. 480).
177
suprema facultad de elevarse a los fundamentos de dichos
conocimientos a través de las causas hasta los primeros principios; es
en esto en lo que el hombre se asemeja a los dioses, el saber de una
Ciencia primera, entendida hasta el siglo XVIII como Metafísica. Esto
solo es posible en la medida en que una sociedad tiene asegurados los
bienes materiales, y por tanto puede dedicar a los «hombres libres» a
la «inutilidad» del pensamiento en búsqueda de la verdad de la ciencia
178
citados: Arquímedes, siglo III a. C., un auténtico teórico y práctico de la
lógica empírica,15 Vitrubio, siglo I a. C., el primero en hacer un tratado
de arquitectura y urbanismo y en medicina Galeno, siglo II d. C.
179
interna (reflexión). Los contenidos, de la experiencia son ideas o
representaciones, ya simples, ya complejas. Estas últimas se componen
de ideas simples. Las cualidades sensibles primarias y secundarias
pertenecen a estas ideas simples. Una idea compleja es, por ejemplo,
la idea de cosa o de sustancia que es la suma de las propiedades
sensibles de una cosa. El pensamiento no agrega un nuevo elemento,
sino que se limita a unir unos con otros los distintos datos de la
experiencia. Por lo tanto, en nuestros conceptos no hay contenido
nada que no proceda de la experiencia interna o externa. En la
cuestión del origen psicológico del conocimiento, Locke adopta, por
ende, una posición rigurosamente empirista. Otra cosa es la cuestión
del valor lógico. Aunque todos los contenidos del conocimiento
proceden de la experiencia. -enseña Locke-, su valor lógico no se limita
en modo alguno a la experiencia. Hay, por el contrario, verdades, que
son por completo independientes de la experiencia y, por tanto,
universalmente válidas. A ellas pertenecen ante todo las verdades de la
matemática. El fundamento de su validez no reside en la experiencia,
sino en el pensamiento. Locke infringe, pues, el principio empirista,
admitiendo verdades a priori.
180
impresiones de la sensación y de la reflexión. Por ideas entiende las
representaciones de la memoria y de la fantasía, menos vivas que las
impresiones y que surgen en nosotros sobre la base de éstas.
181
pueden ver la diferencias fundamentales entre las tres teorías
gnoseológicas (teorías del conocimiento):
Hobbes,
Locke, Estudio de
Empirismo Anglosajones Sensibilidad Sensación
Berkeley, lo empírico
Hume
Descartes,
Deducción Ideas
Racionalismo Continentales Spinoza, Razón
racional innatas
Leibniz
182
Cristicismo: La razón teórica y la razón práctica
53
Cfr. A852-A856
183
2. A partir de la crítica kantiana la metafísica debe ser una
ciencia de los límites de la razón pura, es decir, de la razón
que conoce sin acudir a la experiencia.
3. La metafísica tiene un papel fundamental, en cuanto que
doctrina de legislación a priori de nuestra razón, en el orden
de la naturaleza y, sobre todo, en el de las costumbres.
184
1. Lo que es la forma, estructura, general, a priori, necesario.
185
Sensibilidad: Facultad de tener experiencias o percepciones
cuyos contenidos son siempre particulares.
Voluntad: Facultad de escoger libremente.
Razón: Facultad de producir y aplicar categorías, leyes y
principios generales. Es la capacidad de juzgar que se
expresa mediante proposiciones en las que se atribuye un
predicado general a un sujeto particular.
Juzgar: Subsumir lo particular (una percepción o un acto
particular, por ejemplo) bajo una categoría o un principio
general.
Juicio: Atribución de un predicado general a un sujeto
particular (vg. "este edificio es grande" "este acto es
valiente".
Juicio analítico: Explican pero no añaden un conocimiento
nuevo: "los cuadrados tienen cuatro ángulos".
Juicio sintético: Añaden información: "Todos los alumnos
de esta clase son españoles".
186
Según Kant solo podemos conocer las cosas según la manera
en que se nos aparecen, cuando les aplicamos las categorías (a priori)
de nuestra mente. Estos conceptos a priori solo son válidos cuando se
aplican al orden de los fenómenos, pero no cuando cuando se aplican a
las cosas en sí (noúmeno). Nada se puede decir ni conocer de las cosas
en sí (del noúmeno).
187
La cuestión fundamental estriba en determinar si es posible la
metafísica como saber racional último. La respuesta de Kant es que no,
la metafísica no puede ser una ciencia.
188
Las formas a priori de la experiencia
189
Las formas a priori del entendimiento
190
El entendimiento (inteligencia o razón lógica) es el segundo
nivel de estructuración del conocimiento. Sus formas permiten
constituir verdaderas categorías generales por medio de los juicios.
2. El principio de causalidad
191
Juicios
Juicios singulares -> Juicios universales
Cantidad particulares ->
Unidad -> Totalidad
Pluralidad
Juicios
Juicios categóricos -> Juicios disyuntivos
Relación hipotéticos ->
Sustancia -> Comunidad
Causa
Juicios Juicios
Juicios apodícticos
problemáticos -> asertóricos ->
Modalidad -> Necesidad-
Posibilidad- Existencia-
Contingencia
Imposibilidad Inexistencia
La revolución kantiana
192
2. Conocer es constituir activamente el conocimiento
estructurado y manipulando los datos de la experiencia.
La tentación metafísica
193
La ciencia real es la ciencia en sentido ordinario.
194
1. Que el mundo sea finito y que sea infinito
195
ACTIVIDAD DE LA SEGUNDA UNIDAD
196
PROYECTO DE INVESTIGACIÓN
MEDIO CICLO
197
UNIDAD 3
El problema ético
y el problema axiológico
OBJETIVO
198
1. ¿Qué es la Ética?
La ética, es una ciencia práctica, que estudia cómo se ordenan los actos
humanos en relación con el fin del hombre: no se detiene en la
contemplación la verdad, sino que aplica ese saber a las acciones
humanas, proporcionando el conocimiento necesario para que hombre
obre bien moralmente.
199
Puede decirse que en definitiva es la parte más importante de
toda la filosofía, ya que ayuda al hombre de modo concreto a conseguir
su fin.
El objeto de la ética
200
El objeto material de la ética son los actos humanos, o sea, los
actos voluntarios, que son los que proceden de la voluntad libre: por
depender del hombre y no darse de modo necesario, existe una
responsabilidad moral acerca de ellos.
Partes de la Ética
201
1. La ética general, que estudia los principios fundamentales
acerca de la moralidad de los actos humanos: el fin último
del hombre, la ley moral, la conciencia, el pecado, las
virtudes.
Así, respecto al fin último, demuestra que se encuentra en
Dios, tanto en el aspecto objetivo (aquello cuya posesión
se ha de buscar) como subjetivo (la felicidad). Se
determina que la moralidad de los actos humanos está en
función de su adecuación al fin último, y que se juzga por
su objeto, su fin y sus circunstancias. Se considera la ley
moral como regla objetiva de la moralidad, estudiando los
tipos de leyes morales y sus características (por ejemplo,
la objetividad y universalidad de la ley moral natural). Se
analiza la naturaleza de la conciencia, su obligatoriedad y
los principios que deben regir la correcta actuación moral.
Se estudia la naturaleza de los hábitos morales (virtudes y
vicios) y su relación con la moralidad.
2. La ética social, que aplica esos principios a la vida del
hombre en cuanto miembro de la sociedad.
Entre los diversos temas que esta trata, pueden señalarse,
por ejemplo: en qué consiste el bien común de la
sociedad; qué relación existe entre los individuos y la
sociedad: la función de la autoridad social: la
202
obligatoriedad y moralidad de las leyes; el principio de
subsidiariedad, por el que la autoridad debe respetar y
fomentar todo lo que sean capaces de hacer los individuos
y los grupos intermedios, interviniendo en los temas que
lo exigen: la naturaleza, función y derechos primarios de la
familia como célula básica de la sociedad; los fines del
matrimonio y los obstáculos que se oponen a ellos.
203
de una forma subjetiva, porque normalmente apenas suelen ver las
cosas bajo su propia perspectiva. “Eso es lo que yo quiero, pero no que
eso sea bueno o malo...”- conforme a ellas les convenga o no. De
hecho, las cosas no son buenas o malas. Nosotros solamente las
hacemos parecer de esta manera. Definimos la lluvia como buena
cuando riega nuestro jardín y como mala cuando queremos disfrutar al
aire libre; un fuego en la chimenea es considerado bueno en una noche
fría, pero el calor del verano es malo.
204
podrá vivirla completamente.
Lo que es bueno para uno puede ser malo para otro. Usted
puede dividir el pan con un cuchillo, pero usted también puede matar
con un cuchillo. La “división del pan” de una familia pobre (tirarle el
poco que tienen), de cualquier manera, no es bueno; matar, por
ejemplo, un cerdo puede ser bueno para su dueño pero sería malo si el
cerdo tuviese alguna enfermedad. El bueno puede transformarse
fácilmente en malo y el malo en bueno, y aquello que anteriormente
era conveniente en el momento siguiente puede convertirse en un
fardo.
205
casa nos despierta por la mañana y levantamos de la cama, lo vemos
como malo si no hemos dormido lo suficiente. Sin embargo, cuando
aprendemos a no estar enojados con esto (lo que no es fácil si es una
situación repetitiva), somos tolerantes. Si aprendemos a despertar por
la mañana, y no en la hora del almuerzo (algo que percibiremos
inicialmente como mala y desagradable), superaremos nuestra propia
flojera y ganaremos tiempo que anteriormente perdíamos durmiendo.
206
1.2 Dimensión ética del ser humano
207
ser logrado por la apropiación o por niveles de apropiación, donde se
encuentran los sentimientos, las costumbres y el carácter.
Analicemos lo siguiente:
Valor y Antivalores...
Amor - Odio
Procreación - Aborto
Sabiduría - Ignorancia
Equidad - Desigualdad
Justicia - Injusticia
Paz - Guerra
Amistad - Envidia
Libertad - Esclavitud
208
Bienestar - Miseria
La Dignidad de la Persona
209
se manifiesta como una realidad que conjuga la
dimensión privada y la dimensión pública. Ambos
factores forman parte de su valor ético. Si se reduce
la persona a la dimensión privada se cae en el
individualismo. Si es reduce a lo público, se cae en
un colectivismo igualmente reprobable.
210
Únicamente la persona puede ser origen y centro de
los valores morales y quien puede justificarlos. Esta
afirmación pertenece a la cosmovisión bíblica y la
tradición teológica. Santo Tomas coloca a la persona
como el centro del universo y como el lugar en que
se realizan los valores morales. De esta manera el
ser personal es la categoría ética por excelencia
para formular la moral, para preservarla y
fomentarla.
211
desviación individualista y abstracta del
personalismo.
212
de relaciones igual a aprendizaje, además fundamenta la percepción, la
motivación, el aprendizaje y la adaptación por el intercambio de reglas,
y creencias (Canals), que comenta a James Kennedy y Russell C.
Eberhart, que han dedicado su reflexión sobre todo ello. Dicen que
para modelar la interrelación humana es necesario modelar a los
individuos en un contexto social, interrelacionando entre sí. Comenta
Antonio Lucas Martín en su manual de Sociología, los requisitos de la
acción social: objetivos, adaptación de medios a objetivos y el poder
integrador de los individuos en el grupo mediante normas y
mantenimiento de un modelo en el proceso de socialización. La
sociabilidad entra en interacción con la ética en el momento en que
empezamos a tener amistades, esto quiere decir que la ética y la
sociabilidad, tienen una relación muy estrecha, por que gracias a esta,
el ser humano tiene una gran relación consigo mismo y con los demás,
entonces en conclusión, la sociabilidad y la ética se relacionan por que
tienen moral y conocimiento por conocer a alguien (ver Principio de
solidaridad).
213
1.4 La postura Kantiana
214
sino sólo de modo condicional para conseguir un cierto fin. Esto impide
también que sean universalmente válidas. Por último, son
heterónomas. Es decir la voluntad es determinada a obrar de un modo
u otro por el deseo o inclinación a algo (placer, por ejemplo).
Visto lo anterior, Kant afirma que una ética que pretende ser
universal y racional no puede ser material, ha de ser, por lo tanto,
formal. La ética ha de estar vacía de contenido, es decir: 1) no debe
establecer ningún bien o fin que haya de ser perseguido, y 2) no nos
dice lo que hemos de hacer, sino cómo hemos de actuar.
215
sus clientes. Su acción es conforme al deber. Ahora bien, tal vez lo haga
para asegurarse así la clientela, en tal caso la acción es conforme al
deber, pero no por deber. La acción es un medio para conseguir un fin.
Si, por el contrario, actúa por deber, es decir por considerar que ese es
su deber, la acción no es un medio para conseguir un fin o propósito,
sino que es un fin en sí misma, algo que debe hacerse por sí.
216
Existe una segunda formulación famosa del imperativo
categórico, que es así: obra de tal modo que trates la humanidad, tanto
en tu persona como en la de cualquier otro, siempre como un fin, y
nunca meramente como un medio. Kant entiende que los seres
humanos se caracterizan por su autonomía, es decir, la capacidad de
darse normas a ellos mismos o de seguir de forma crítica las que les
dan otros. Esta capacidad es única en la naturaleza y convierte a los
seres humanos en seres excepcionales, incomparables con cualquier
otro, por lo que no tienen precio, sino que se le aplica un concepto
distinto que es el valor. Este valor es expresable en el concepto ético
básico para la antropología de Kant, la dignidad. La dignidad supone el
deber de actuar con el otro como si fuera un fin en sí mismo, es decir,
la imposibilidad de utilizarlo como una cosa, como un medio para
nuestra conveniencia.
217
sólo se podría dar si fuésemos infinitos, porque supondría una voluntad
santa en este mundo y esto es imposible. Por último, la propia idea de
felicidad supone la existencia de una causa suprema de la naturaleza
dotada de entendimiento y voluntad, es decir, Dios.
2. ¿Qué es la Axiología?
218
considerar que algo es o no valioso, y considerando los fundamentos
de tal juicio.
219
bancaria, un crédito de energía que se construye, se crea una gran
cantidad de energía en el interior, sobre la cual podemos hacer retiros
en cualquier momento. El fruto de estos retiros es que atraen a más
energía, ya que se gastan!
220
Podemos concluir que los valores humanos son esencias
eternas, donde siempre están en la búsqueda de mejorar a un
individuo como persona, e incluso a una sociedad.
221
Polaridad de los valores
222
le gusta, y nadie podrá convencerlo de lo contrario.
223
Se dice y se repite en nuestra sociedad, en nuestra escuela, en
nuestra familia, que nuestra juventud... es víctima de una “crisis de
valores” Es por tanto fundamental para nosotros, el conocer las causas
y los efectos de esa crisis.
224
grave que atraviesan las familias y las sociedades del mundo en
general. Este problema se puede observar en todas las clases sociales,
desde el más rico hasta el más pobre y entre estos están la perdida de
respeto a la autoridad, la impuntualidad, la descortesía, la agresividad,
la discriminación, etc.
Desvalores, comportamientos.
225
preocupada en exceso por el que dirán.
226
de los derechos humanos de los demás.
"El antropólogo no tiene por qué afirmar que todas las culturas
son buenas, pero está en la obligación de someter a todas, incluídas las
propias, a la misma crítica negativa" PEDRO TOMÉ, antropólogo.
227
no es problema para el antropólogo, sino para el ciudadano." CLAUDE
LÉVI-STRAUSS, antropólogo.
228
histórico-político occidental.
229
a entenderlas es percibirlas como diferentes." La metodología que
utiliza, por tanto, es el relativismo metodológico, que implica una
renuncia profesional a los juicios morales (como un/a médico que
llorará si un ser querido ha fallecido por cáncer, pero deberá aparcar
sus lágrimas en la medida de lo posible si quiere investigar un tumor
maligno y tener un mayor entendimiento objetivo y neutral del tumor)
230
desde la comprensión, proponer. Eso es lo que hacemos."
231
televisión.”
232
necesitaba mi ayuda. Mis explicaciones no sirvieron de nada, estaba
tan ultrajado por mis valores como yo por los suyos. Después de
considerarlo una y otra vez durante años, todavía creo que los míos
son mejores. Sin duda él sigue creyendo que los mejores son los
suyos."
233
contrario: como una cultura casta y pura, sin maldad ninguna, o el mito
del "buen salvaje".
234
revés.
235
hace por y pensando en su ser querido fallecido de cáncer y, es más, no
quiere que nadie lo sufra más.
Por eso, Marc Augé tiene un truco que va por este camino, y es
bien simple, de hecho, es una herramienta que los seres humanos la
hemos ido desarrollando durante toda nuestra existencia, y que a
veces parece en peligro de extinción: la empatía.
236
2.4 Subjetivismo: El idealismo subjetivo.
237
morales son en realidad órdenes –decir «X es bueno» es decir, detalles
al margen, «Haz X»–. Las concepciones que hacen en último término
de la moral una cuestión de convenciones -de aquello en lo que
estamos de acuerdo o en lo que la mayoría de la gente está de
acuerdo- también pueden construirse como teorías subjetivas del
primer tipo.
238
percipiente, no podrán de hecho existir en un substrato pasivo, en la
materia. Pero, además, la propia noción de materia se vuelve
contradictoria cuando se la concibe como substrato o soporte de
cualidades. Si se la entiende como subyaciente a sus accidentes o
cualidades, tendría que subyacer igualmente a la extensión, con lo cual,
el mismo substrato tendría que ser extenso, lo cual es una
contradicción.
239
están las almas en el mundo, sino que el mundo está sólo en
las almas."
240
característica esencial sea la actividad y, por ello, algo distinto a un ser
pasivo e inerte y que, además, sea el lugar desde donde esas ideas son
percibidas.
Yo no puedo tener una idea del espíritu ya que éste sería una
idea y, por ello, algo pasivo e inerte. Sólo puedo llegar a tener una
noción del espíritu elaborada a partir de una reflexión interior sobre
nuestra propia existencia.
241
o concebimos son nuestras propias ideas. Cuando dices, pués, que
todas las ideas son ocasionadas por impresiones en el cerebro,
¿Concibe este cerebro o no? En caso afirmativo, hablas entonces de
ideas impresas en una idea, y causantes de esa misma idea, lo cual es
absurdo.
242
ACTIVIDAD DE LA TERCERA UNIDAD
243
UNIDAD 4
El problema metafísico y el
problema político.
OBJETIVO
244
1. ¿Qué es la Metafísica?
245
Como estudia la realidad desde el punto de vista de su ser, el objeto
formal de la metafísica es el ser de la realidad, o sea, el ser de los
entes. Se denomina “ente” a todo “lo que es”: algo que tiene que ser, y
tiene un modo de ser determinado. Dios no es propiamente un “ente”,
pues es su propio Ser y no está limitado a ningún modo de ser
particular o finito; la metafísica estudia a Dios con Causa Primara del
ser de los entes.
246
general (ya que no solo se da esa composición en los entes corpóreos,
sino también en los espirituales).
247
relacionadas de modo externo.
248
Spinoza para, en su Ética explicada según el orden geométrico, tratar
de dar una explicación científica e irrefutable, o en otras palabras,
definitiva, a algunos de los mayores intangibles de la historia de la
humanidad: Dios, el alma, el bien, el mal. Antes hubo otros. El
pensamiento cristiano, que dominó el panorama de la filosofía
occidental durante toda la Edad Media, utilizó su particular
interpretación de ciertas ideas de Platón y Aristóteles para probar la
existencia de Dios y explicar el funcionamiento del mundo que Él había
creado, siendo Santo Tomás de Aquino el máximo exponente de esta
tradición. En cuanto a la prueba de la existencia de Dios, la obra de
Spinoza no es sino una exposición más compleja, más precisa, de los
argumentos de sus antecesores.
249
alcanzar a comprender en su totalidad.
250
radica, como demostraron posteriormente Kant y Hume entre otros,
en que el hecho de que podamos pensar algo no implica la existencia
de este algo. Dicho de otro modo, para poder aplicarle la cualidad de
perfección a un ser, dicho ser tiene que existir, pero si aceptamos su
existencia de antemano estamos incluyendo la conclusión que
deseamos obtener, o sea, la existencia de Dios, entre las premisas.
251
Sin embargo, el creyente no deja de ser un hombre que vive en una
sociedad, que comparte su vida con otros hombres, que a su vez tienen
creencias diferentes. Tratar de demostrar la existencia de cosas que,
debido a su propia naturaleza, no son verificables, ha sido en el pasado
demasiadas veces una estrategia destinada a imponer el modo de ver
el mundo de un cierto grupo de personas, así como a justificar la
necesidad de ciertas conductas que, de otro modo, habrían sido
consideradas no solo contrarias a la ley, sino abominables y más
propias de monstruos que de hombres. Dejaré que ustedes mismos
hallen en la historia estas horribles situaciones. Yo solo espero que,
gracias a ellas, la humanidad se haya hecho más sabia y, de este modo,
lleguemos a entender la necesidad de compaginar las creencias propias
con la tolerancia de las ajenas.
252
están en los cielos como las que están en la tierra -"misterio escondido
en Dios antes de todos los Siglos".: la creación del hombre a imagen de
Dios tenía como fin la Encarnación, se la entienda como se la entienda,
puesto que implica el último grado de comunión entre Dios y el
hombre.
253
apofática y que explica el interés de los Padres por el contenido de la
imago Dei. Para san Gregorio de Nisa, la riqueza de la imagen refleja las
perfecciones divinas, convergencia de todos los bienes, y subraya el
poder propiamente divino de determinarse libremente por sí mismo.
254
El hombre es creado y, sin embargo, no es creado sino nacido
del agua y del Espíritu Santo; es terrestre y celeste, criatura y dios en
proceso de realización. Un dios creado es una de las nociones más
paradójicas, al igual que la persona creada y la libertad creada. La
audacia de los Padres profundiza estas máximas y estos apotegmas a
fin de no entristecer y de no apagar al Espíritu Santo.
255
La crucifixión "El Padre es el Amor que crucifica, el Hijo es el
Amor crucificado, el Espíritu Santo es el poder invencible de la Cruz",
ha dicho magníficamente el Metropolita de Moscú, Filaretes. En cierto
sentido, es la Crucifixión común en la que cada Persona de la Trinidad
tiene su propia manera de participar en el Misterio. La Cruz vivificante
es la única respuesta al proceso del ateísmo en el reino del mal. Se
puede aplicar a Dios la noción más paradójica, la de la debilidad, que
significa la salvación mediante el libre amor: Dios se presenta y declara
su amor, y pide que le paguen con la misma moneda; ... rechazado,
espera a la puerta... Por todo el bien que nos ha hecho no pide a
cambio más que nuestro amor; como pago de nuestro amor, nos
perdona todas nuestras deudas.
256
El Salvador en cruz no es simplemente un Cristo muerto, es el
Kyrios, Dueño de su propia muerte y Señor de su vida. No ha sufrido de
hecho ninguna alteración por su Pasión. Sigue siendo el Verbo, la Vida
eterna que se abandona a la muerte y la sobrepasa. Cuando fuiste
crucificado, oh Cristo, la creación entera ante este espectáculo se
estremeció de horror y los cimientos de la tierra temblaron ante tu
poder.
257
filósofos posteriores del final de la Edad Media, de la Edad Moderna e
incluso de la actualidad.
258
Sin embargo Santo Tomás rechaza el argumento ontológico de
San Anselmo, según el cual, y como también afirma San Buenaventura,
podemos conocer a Dios directamente a priori en el interior de nuestra
conciencia.
259
Esencia: Conjunto de cualidades constituyentes que definen
a un objeto o a un ser de la naturaleza, y le hacen
pertenecer a una clase o conjunto. Por ejemplo la definición
que dió Boecio de persona: sustancia individual de
naturaleza racional. La racionalidad es una cualidad esencial
que distingue a los seres humanos de otras sustancias.
260
el predicado está incluido en el concepto de sujeto, forma parte de las
propiedades de su esencia, por ejemplo cuando digo que el
cuadrilátero es un polígono de cuatro lados, o bien, que el ser humano
es un animal, ambas cualidades forman parte constitutiva tanto del
cuadrilátero, tener cuatro lados, como del ser humano, ser animal. Por
tanto la proposición Dios existe, es evidente en sí misma ya que en
Dios no hay distinción entre la esencia y la existencia, sino que él
mismo es la existencia plena y total Ipsum esse subsistens, pero no
para nosotros, los seres humanos.
261
afirmación de la existencia de Dios.
262
o destruidas, llevan consigo la posibilidad de no existir,
esto quiere decir que hubo un tiempo en el que nada
existió. Luego estos seres contingentes exigen la existencia
de un Ser necesario, cuya necesidad esté en sí mismo y
sea la causa de la necesidad de los demás. A este Ser
necesario todos le llaman Dios.
263
Estas vías, como todo el pensamiento de Santo Tomás son una
síntesis de otros filósofos anteriores, pero la originalidad está
precisamente en su estructuración para demostrar la existencia de Dios
y su principal atributo que es la Aseidad, Dios es la existencia plena, en
él se identifica la esencia y la existencia, es la Causa Sui, fundamento de
los demás seres, incluido el ser humano.
264
corrompido y no han buscado el fin último del estado, que es el bien
común, a través de la ley positiva que es una ordenación de la razón,
dirigida al bien común, dictada por la autoridad competente y
suficientemente promulgada.
265
que el escepticismo radical cae en contradicción ya que al
afirmar que no podemos conocer la verdad, ya está
afirmando una verdad. El único camino que le queda al
escéptico es el silencio.
El criticismo, sostiene que el intelecto humano puede
alcanzar un conocimiento limitado, y que éste no es nunca
definitivo e incuestionable , sino que debe ser siempre
criticado y revisado para corregir errores.
El relativismo, niega la existencia de una verdad absoluta,
rechaza la existencia de un conocimiento objetivo y
universal. Todo conocimiento es subjetivo, es decir,
relativo a cada individuo o contexto social, ya que solo
pueden existir opiniones particulares validas para cada
individuo o grupo social, cultural e histórico. Los sofistas
son considerados como los padres del relativismo.
El perspectivismo, a pesar de ser parecido al relativismo,
hay entre ellos una diferencia fundamental, ya que el
perspectivismo no niega la posibilidad teórica de una
verdad absoluta. Esta teoría sostiene que cada sujeto o
grupo social conoce la realidad desde un punto de vista o
perspectiva particular. Hay una realidad, pero esta puede
ser vista desde diferentes perspectivas parciales. Todas las
perspectivas son verdaderas y si fuera posible reunirlas a
todas tendríamos la verdad absoluta. Ortega y Gasset
266
defendió esta teoría como forma de superar el
dogmatismo y el escepticismo. Afirma que el camino hacia
la verdad requiere de la complementariedad entre las
distintas perspectivas parciales.
267
La Absoluta Negación de la Existencia de Dios
En atención a esto, algunos han ido tan lejos como para negar
que haya quienes nieguen la existencia de Dios, es decir, niegan que
haya verdaderos ateos. Pero esta negación está contradicha por los
hechos. Se acostumbra distinguir dos clases de ateos, es decir, los
prácticos y los teóricos.
268
deseo de esconderse de Dios.
269
espirituales.
270
3. Los ateos capciosos que sostienen que no hay pruebas
válidas de la existencia de Dios.
271
corresponda con alguna realidad. El "Dios" de los modernos
humanistas simplemente significa, "el Espíritu de la humanidad", "el
sentido dela perfección", "la meta de la raza", y otras abstracciones
semejantes.
Otras teorías no sólo dejan lugar para Dios, sino que también
pretenden defender su existencia; pero rechazan efectivamente al Dios
del teísmo, un ser supremamente personal, Creador, Preservador y
Gobernador del Universo, distinto de su creación, y sin embargo, en
todas partes presente en ella.
272
Dios"; pero su Dios realmente no es el Dios a quien los cristianos
alaban y adoran. En verdad, no cabe duda de que en el mundo hay
ateos teóricos.
2. ¿Qué es la Política?
273
política salarial, la política de vivienda, la política de medio ambiente,
etc.
274
social que exista un objetivo a realizar, sea este solidario o particular.
Esto es así ya que una organización social debe existir siempre por una
razón y no por espontáneas variables causales (en cuyo caso no
estaríamos hablando de organizaciones sociales sino más bien de
expresiones comunes de ciertos grupos sociales).
275
objetivos así como también los resultados a conseguir.
276
conducir a ese resultado. ¿Cómo seguir tolerando una organización
económica que limitaba el número de explotaciones? ¿Cómo soportar
más un sistema en el que el siervo estaba siempre adscrito a la gleba y
el aprendiz a su oficio, todo meticulosamente reglamentado y a base
de monopolios? En vez de los señores feudales, que carecían de la
noción del cambio, por lo cual la Edad Media. Fue antes que otra cosa
el reinado de la fijeza y del tradicionalismo, había que abrirle la ruta a
tantas energías sociales en ebullición.
277
señaladas preeminencias, entre otras, la de ser banqueros de los reyes.
Jacques Coeur llegó a establecer 300 factorías en Inglaterra y en
Bélgica. Debe destacarse en ese período la estrecha alianza de la
burguesía mercantil, financiera y manufacturera con el monarca,
fenómeno que tanto contribuyó al establecimiento del Estado
moderno.
278
período dentro de los cuadros tradicionales, ajena por tanto a la
sacudida del Renacimiento y al despertar del individualismo y de las
ansias libertarias.
279
sometidas al principio a la Iglesia, atendió a la necesidad de impulsar
no sólo la ciencia del Derecho, sino otras, vitales para el desarrollo
iniciado. Cuando un artista como Leonardo da Vinci, al par que
contribuía al resurgimiento de la estética y de todas las formas de
belleza hablaba de la importancia que tendría para la agricultura 1a
técnica de la irrigación, se situaba en el espacio del hombre del
cuatrocientos, ávido de creación individual, y de ahí que propiciara la
vuelta al mundo clásico y que exaltara la necesidad de amaestrar la
naturaleza para que le sirviera a la raza humana.
280
arrobamiento: ¡Oh, qué gran milagro es el hombre!
De los soberanos de la primera mitad del siglo XVI fue sin duda
Carlos V el que mejor entendió lo que estaba sucediendo. Coronado
rey de España en 1516 y Emperador en 1519, gracias al apoyo de los
banqueros Fuggers, sintió que su deber era extender su dominación
281
sobre otros pueblos y de ahí su divisa orgullosa: ¡plus ultra! En ese
mismo año de 1519 Hernán Cortés empezaba la Conquista de México y
dos decenios después formaban parte del Imperio Español toda la
costa del Pacifico y la América Central y del Norte. Lo que muestra
mejor la clarividencia de Carlos V fue el convencimiento a que llegó de
que no podían subsistir y ser gobernadas por la misma política dos
regiones tan dispares como la Europa Occidental, volcada ya hacia el
capitalismo, y la Central que todavía se inscribía en el orden feudal. Por
eso en 1522 procedió a dividir el Imperio, con base no en criterios
geográficos sino económicos. El se quedó con la parte marítima, es
decir la Occidental, y le dejó a su hermano Fernando I la Continental, o
sea la atrasada. El mar era en aquella emergencia, España, Italia y los
Países Bajos, como quien dice la fracción del Imperio con apetencias no
sólo capitalistas sino colonizadoras, para lo cual era imprescindible el
control de la navegación ultramarina. El ecumenismo de su religión, la
católica, había de ayudar a Carlos V a hacer del Imperio algo sinónimo
de dominación universal.
282
debe aplaudir, ya que el bien social es el resultado de las acciones
ejecutadas por ese individuo que se comporta como bravo en una
organización del tipo de la capitalista, selvática por naturaleza. Como
señala Laski, antes del advenimiento del sistema capitalista los
hombres vivían dentro de una ordenación en que las instituciones
efectivas -Estado, Iglesia o gremios- juzgaban el acto económico con
criterios ajenos al mismo acto. Ahora el juicio económico se
manifestaba según que el interesado hubiera triunfado o no en la
actividad emprendida. O sea que según el autor citado, el movimiento
del feudalismo al capitalismo es el tránsito de un modo de vida en el
que el bienestar individual es el efecto de la acción socialmente
controlada, a un conjunto de conceptos en los que el bienestar social
aparece como el resultado de la acción individualmente controlada.
2.3 Neoliberalismo
283
Por su parte, el neoliberalismo es un programa de reformas
económicas que pretende hacer que algunos países no se rezaguen en
su proceso de acoplamiento al mundo globalizado.
284
participación y del control sobre el mercado, ya que de lo contrario no
podrían llevarse a cabo los siguientes puntos:
285
economía de los países sea más eficiente.
2.4 Marxismo
286
producir esta teoría apoyándose, pero a la vez rompiendo con ellos, en
los logros de la economía política clásica, la filosofía alemana y el
socialismo francés.
287
propiedad, donde todo, incluso las mujeres y los hijos sería propiedad
de todos, hasta llegar a suprimir al mismo Estado. Para colmo, estas
ideas no eran fruto de una mente afiebrada sino el enjundioso trabajo
de un economista serio, estudioso y extremadamente detallista en sus
razonamientos.
288
Como si esto fuera poco, cuando buscamos la palabra
«socialismo» vemos que las tres veces que la menciona lo hace ‘para
criticar al socialismo de Proudhon; y cuando rastreamos el vocablo
«comunismo» encontramos que tres veces se usa para hablar del
«comunismo de las tribus primitivas» y la otra mención es en carácter
peyorativo: En el Capítulo 37 del tomo 30 dice «Sé que si establezco
esta comparación me acusarán de comunismo. Y para nuestra
sorpresa, no hay otra mención al comunismo, ni al socialismo en su
obra magna. Este recuento estadístico se hace con una finalidad
específica, que intentemos mirar la doctrina de Marx
desprendiéndonos de los prejuicios y simplificaciones que suelen
hacerse.
289
marxismo como teoría científica sin hacerlo al mismo tiempo con su
expresión en la práctica política revolucionaría.
290
La revolución teórica que opera Marx desde la perspectiva del
proletariado supone un cambio radical de los términos en que se
planteaba el problema e inaugura un nuevo espacio teórico, no
regulado por la elaboración de principios ideales imaginarios, sino por
el conocimiento de las leyes objetivas del campo social especifico en
estudio: el Materialismo Histórico. Ciencia que sacará el problema del
terreno de las “filosofías de la historia” y que obrará condicionando la
elaboración de las bases de una nueva filosofía: el Materialismo
Dialéctico.
291
En las anteriores épocas históricas encontramos casi portadas
partes una completa diferenciación de la sociedad en diversos
estamentos, una múltiple escala gradual de condiciones sociales. En la
antigua Roma hallamos patricios, caballeros, plebeyos y esclavos; en la
Edad Media, señores feudales, vasallos, maestros, oficiales y siervos, y
además, en casi todas estas clases encontramos, a su vez, gradaciones
especiales.
292
relaciones de producción, que corresponden a una determinada fase
de desarrollo de sus fuerzas productivas materiales. El conjunto de
estas relaciones de producción forma la estructura económica de la
sociedad, la base real sobre la que se levanta la superestructura
jurídica y política y a la que corresponden determinadas formas de
conciencia social. El modo de producción de la vida material condiciona
el proceso de la vida social, política y espiritual en general. No es la
conciencia del hombre la que determina su ser, sino, por el contrario,
el ser social es lo que determina su conciencia […]. Ninguna formación
social desaparece antes de que se desarrollen todas las fuerzas
productivas que caben dentro de ella […]. A grandes rasgos, podemos
designar como otras tantas épocas de progreso, en la formación
económica de la sociedad, el modo de producción asiático, el antiguo,
el feudal y el moderno burgués.”
293
ACTIVIDAD DE LA CUARTA UNIDAD
294
PROYECTO DE INVESTIGACIÓN
FIN DE CICLO
295
BIBLIOGRAFÍA
296