La Guerra de La Independencia Española

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Guerra de la Independencia española

La guerra de la Independencia española fue un conflicto


bélico de la Edad Contemporánea en el que tropas
españolas, británicas y portuguesas lucharon contra el
ejército francés de Napoleón Bonaparte, quien pretendía
que su hermano José I Bonaparte se convirtiera en el rey de
España. El pueblo se opuso a este nombramiento, siendo su
participación decisiva para la derrota gala en esta guerra.
¿Cuándo empezó la guerra de la Independencia
española?
Se inició el 2 de mayo de 1808, como consecuencia del
levantamiento del pueblo madrileño contra las tropas
napoleónicas.
¿Cuándo terminó la guerra de la Independencia
española?
Finalizó el 11 de diciembre de 1813 tras la firma del
tratado de Valençay, momento en el cual se reconoció a
Fernando VII como rey de España.

Antecedentes de la guerra de la Independencia


española
La Revolución francesa provocó la caída de la monarquía
en Francia y luego el ascenso de Napoleón Bonaparte al
poder. Éste quiso acabar con la flota británica para así poder
invadir el Reino Unido, de ahí que llegara a una alianza con
Carlos IV de España, quien a su vez buscaba recuperar
Gibraltar y mantener las posesiones españolas en América.
Se dejó de lado, pues, la enemistad que se mantuvo con
Francia hasta el año 1796, dando el primer ministro Manuel
Godoy un completo cambio a la política exterior española
con la firma del tratado de San Ildefonso.
Esto provocó un primer enfrentamiento entre España y
Portugal, puesto que esta última apoyaba al Reino Unido. La
guerra de las Naranjas, acontecida en 1801, se saldó con la
victoria española.
Sin embargo, posteriormente los franceses y los españoles
fueron derrotados por los ingleses en la batalla de
Trafalgar (1805), lo que motivó un cambio en los planes de
Napoleón. Así, inició un bloqueo de todos los puertos de
Europa al comercio inglés.

Causas de la guerra de la Independencia española

Bloqueo Continental a Portugal y tratado de


Fontainebleau
El 27 de octubre de 1807, Carlos IV y Godoy, por aquel
entonces hombre fuerte en la sombra, firmaron con
Napoleón Bonaparte el tratado de Fontainebleau. En él
se acordó la invasión de Portugal, nación que mantenía
una alianza con el Reino Unido y que no cumplía el Bloqueo
Continental impuesto por el emperador francés.
Gracias a dicho pacto, las tropas francesas recibieron la
autorización para entrar en la península ibérica con el
objetivo de atacar a Portugal y bloquear sus puertos. Sin
embargo, Napoleón aprovechó la situación para de paso
ocupar múltiples ciudades españolas. En marzo de 1808,
100.000 soldados galos permanecían dentro de la península
ibérica.

Motín de Aranjuez y conflictos internos de la monarquía


española
Esto provocó el descontento de la población española,
circunstancia que aprovechó el hijo de Carlos IV para así
instigar el Motín de Aranjuez contra Manuel Godoy. Dada
la situación, Carlos IV abdicó en su vástago el 19 de marzo
de 1808, quien pasó a convertirse en Fernando VII de
España.
Carlos IV se arrepintió de esta renuncia, motivo por el cual
escribió a Napoleón y solicitó su ayuda para recuperar el
trono. El emperador francés convocó entonces a Carlos IV y
a Fernando VII en Bayona para, en teoría, resolver las
diferencias que existían entre ambos.

Levantamiento del 2 de mayo de 1808


Al tiempo que sucedía esto, el 2 de mayo de 1808 se produjo
en Madrid un levantamiento popular en contra de los
franceses. Fue algo espontáneo y sin participación militar, a
excepción de algunos oficiales de artillería.

Abdicaciones de Bayona
El de 4 de mayo de 1808, Napoleón convenció a Carlos IV
de que lo mejor era que le cediese el trono de España hasta
que la situación se normalizase. Al día siguiente, obligó a
Fernando VII a que abdicara en favor de su padre, quien
previamente había renunciado a la corona.
Las conocidas como abdicaciones de Bayona crearon una
suerte de vacío de poder que Napoleón aprovechó para
nombrar a su hermano José I Bonaparte como rey de
España.

Combatientes de la guerra de la Independencia


española
Los bandos de la guerra de la Independencia española
fueron los siguientes:
 España, Reino Unido y Portugal.
 Imperio napoleónico (Francia).
Además, hay que señalar que en España se produjo una
evidente división política, pues por un lado se situaron los
afrancesados, aquellos que apoyaban a José I y que
estaban de acuerdo con las ideas liberales, y por otro los
patriotas, que no veían con buenos ojos al monarca
extranjero.

Fases de la guerra de la Independencia española

Primera fase: predominio español (1808)


Cuando se produjo en Madrid el mencionado levantamiento
del 2 de mayo de 1808, el mariscal Joaquín Murat, y a su
vez cuñado de Napoleón, ordenó el desarme de todos los
vecinos de la ciudad. Quien anduviera con un arma o la
conservara en su casa sin una licencia especial, recibiría por
castigo un tiro con un arcabuz.
Se prohibió cualquier corrillo que pasara de las ocho
personas, pues se consideró que, con un número mayor, se
trataba de una reunión de sediciosos (si eso sucedía,
también se les disparaba).
De igual modo, si en una villa o aldea se asesinaba a un
francés, el lugar sería completamente incendiado.
Precisamente los fusilamientos del 3 de mayo fueron una
muestra de la represión francesa.
A pesar de estas restricciones, en mes y medio el
alzamiento contra las tropas francesas se extendió por
toda España, destacando la resistencia en León, Burgos,
Zaragoza, Valencia y Gerona.
En un principio se crearon las juntas locales para así hacer
frente a los franceses, estableciéndose luego las juntas
provinciales. Finalmente, las tropas españolas se
organizaron en una Junta Suprema Central, que estaba
integrada por distintas personalidades de la época y que
intentó suplir el citado vacío de poder que existía desde las
abdicaciones de Carlos IV y de Fernando VII.
El avance de los franceses se vio detenido en la batalla de
Bailén, que se inició el 19 de julio de 1808 en la provincia de
Jaén. Fue la primera derrota gala de las guerras
napoleónicas, obligando a que José I Bonaparte huyera de
Madrid y a que los invasores se replegaran hasta el valle del
Ebro.

Segunda fase: intervención de Napoleón (1808-1812)


Sin embargo, Napoleón decidió cambiar de estrategia al
enviar a España lo mejor de su ejército y tomar incluso el
mando de sus propias tropas. Tras romper la línea
defensiva del Ebro, entró en Madrid en diciembre de 1808 y
le devolvió el trono a su hermano.
Las tropas españolas perdieron en la batalla de Talavera
(28 de julio de 1809) y en la batalla de Ocaña (19 de
noviembre de 1809). A pesar de la ayuda británica,
Bonaparte dejó a los españoles casi completamente
derrotados en el año 1810.
La Junta Suprema Central se desplazó entonces hasta
Sevilla y luego hasta Cádiz, ciudad que Napoleón todavía
no había podido conquistar gracias a su condición insular (lo
que facilitaba su defensa). Allí se convocaron las Cortes de
Cádiz y se procedió a la elaboración, aprobación y
promulgación de la Constitución de 1812, a la que se
conoció de forma popular como la Pepa.

Tercera fase: derrota y retirada de los franceses (1812-


1813)
A partir de este último año, Napoleón inició la invasión de
Rusia. Al mismo tiempo, los británicos intensificaron su
ayuda a los españoles, quienes combatían a los franceses
mediante la guerra de guerrillas.
Ésta se hallaba formada por campesinos que se
organizaban en pequeñas partidas para así caer por sopresa
sobre el adversario y desarrollar una guerra de desgaste que
terminaba desmoralizando al enemigo.
El 22 de julio de 1812 se produjo la batalla de los Arapiles,
al sur de Salamanca, en la que las tropas británicas,
portuguesas y españolas consiguieron vencer a los
franceses, quienes se replegaron hacia Levante.
En la primavera de 1813 tuvo lugar la ofensiva final, cayendo
de nuevo los franceses en la batalla de Vitoria (21 de junio
de 1813) y en la batalla de San Marcial (31 de agosto de
1813), esta última llevada a cabo cerca de Irún.
El 11 de diciembre de 1813 se firmó el tratado de Valençay,
mediante el cual Napoleón suspendía las hostilidades que
mantenía con España y reconocía a Fernando VII como su
rey.

Características de la guerra de la Independencia


española
Fue una guerra de liberación, en este caso de las tropas
francesas. Pero también una guerra civil, pues enfrentó a
afrancesados con fernandinos (es decir, a partidarios
españoles de los franceses con seguidores de Fernando
VII).

Consecuencias de la guerra de la Independencia


española

Consecuencias sociales
Provocó la muerte de más de 600.000 personas y una
evidente caída demográfica, tanto por las muertes directas
de la contienda como por la hambruna que ésta generó.

Consecuencias económicas
Supuso un duro varapalo económico para España,
afectando de manera especial a la agricultura, que se
quedó sin mano de obra, y a la industria, destrozada por las
tropas francesas y británicas. Todo lo anterior afectó al
comercio, al igual que la destrucción de infraestructuras tan
importantes como puentes y caminos.

Consecuencias políticas
 La monarquía española perdió el prestigio del que
gozaba en el ámbito internacional.
 Arrancó un primer periodo liberal en España gracias
al fin del Antiguo Régimen y a la implantación del
liberalismo (aunque no de una forma tan profunda y
duradera como a muchos les hubiera gustado).
 Se produjo el exilio de los afrancesados, personas
con un elevado nivel cultural que abandonaron España
para así evitar las represalias de sus compatriotas.
 Se inició un proceso emancipador que llevó a la
independencia de las colonias españolas en el
continente americano.

ANTES DE TERMINAR VAMOS A HACER UN PEQUEÑO RESUMEN EN


INGLÉS.

La Guerra de la Independencia Española fue un conflicto surgido en el


siglo XIX (19) cuando los habitantes de Madrid se levantaron contra
las tropas francesas. Aunque el levantamiento fue duramente
reprimido por el ejército francés, su ejemplo fue seguido por toda
España.
Las tropas hispano-británicas vencieron a los franceses y obligaron al
ejército francés a retirarse.
Napoleón restituyó en el trono a Fernando VII.

The Spanish War of Independence was a conflict that emerged in the


nineteenth century (19) when the inhabitants of Madrid rose up
against French troops. Although the uprising was harshly suppressed
by the French army, his example was followed by all of Spain.
Hispanic-British troops defeated the French and forced the French
army to retreat.
Napoleon restored Fernando VII to the throne.

Espero que este video les haya gustado y a la vez servido de


referencia para conocer un poco más la Guerra de la Independencia
española.

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