Defender Santiago de Peñalba. Losa Con Inscripción Apotropaica
Defender Santiago de Peñalba. Losa Con Inscripción Apotropaica
Defender Santiago de Peñalba. Losa Con Inscripción Apotropaica
DEFENDER LA IGLESIA DE
SANTIAGO DE PEÑALBA.
UNA LOSA DE TEJADO CON
INSCRIPCIÓN APOTROPAICA
DEL SIGLO XII*
Josenú Lorenzo Arribas
rrinconada en la estancia El breve texto (desarrollada en sin descartar sus primeras décadas,
1 Salvo la A, que en la losa exhibe travesaño central y no en el epígrafe de reconsagración (una de las siete A sí), y la
O, romboidal en la losa y ovalada en el segundo epígrafe, el resto de letras son prácticamente idénticas, hasta el
gusto de hacer nexos con la letra T. También hay O romboidales en el epitafio del abad Esteban. El epígrafe funerario
de Petronato, sito en un mampuesto que conforma la saetera del muro oriental de la capilla norte, también contiene
una O romboidal.
2
Podría resolverse la abreviatura como DominO ("con la ayuda del Señor"), si bien la fórmula abreviativa más usual
para esta palabra sería DNO, por lo que optamos por la primera opción.
3 GIL, Juan (1973): "Para la edición de los textos visigodos y mozárabes". Habis, 4, p. 200. Florencio, el amanuense
que copia en el año 945 en Valeránica, se encomienda mediante esta expresión al comienzo de las Homilías de
Smaragdo: "et ut Deo iubante hunc quem scribendi lauorem suscepi [ ... ] obsecro" (ibid., p. 220).
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BIERZO
Santiago de León hallamos que esta Se inscribió eso y solo eso. El con- de Martínez Fuertes (redactada en
fórmula comparece, al menos, en texto hay que restituirlo. 1936 pero editada en 2004). Posi-
tres ocasiones: en una donación de Esta losa, perteneciente sin duda blemente su juicio sobre la "moder-
Ordoño 11 (año 912) confirma Jime- al templo peñalbés, no es inédita. nidad" de la pieza bastó para que
no, obispo de la diócesis asturicen- Significativamente Gómez-Moreno nadie más se animara a tratar de
se, "Deo iubante adiutus"4 ; en otra no la cita en sus trabajos de las dos esta humilde losa, que lleva dece-
del año 990 es otro prelado: "Nunus primeras décadas del siglo XX que nios a la vista de cuanto investiga-
episcopus, veritas vidi ita, et Deo iu- trataron de Peñalba, de lo que se dor ha pasado por el célebre templo.
bante, complevi"); y en una tercera deduce que no la vio o, mejor, que
de 1008 se emplea la fórmula "iu- no la pudo ver, pues no se le hu- UNA LOSA DE TEJADO
bante Domino"5 . En un documento biera pasado por alto un testimonio
fechado en el año 1015, refirién- así. En 1932 el párroco entonaes Desde que hay noticias en los li-
dose al monasterio de Castroferrol de la iglesia de Santiago, Benjamín bros de fábrica de la iglesia de San-
(Colinas de Trasmonte, Zamora), Martínez Fuertes, la documentó por tiago (principios del siglo XVII) hasta
enclavado también en la diócesis de vez primera. Según su testimonio, nuestros días se suceden en estos
Astorga, se lee: "in sedis Astorice de- estaba "[s]obre la pared que cerca registros de contabilidad, las repa-
duxint qua mihi deo iubante ex araro la iglesia por el norte hay una loseta raciones y operaciones de manteni-
volumus ubi tuos uernantes dextera que tiene grabado este nombre: Don miento del tejado. Podemos saber
dei manus monachorum vel ancilla- Jubane", mas no especifica si en el por estos libros que al menos desde
rum continentum choro sub regula propio muro o formando parte de su entonces la iglesia de Santiago siem-
tramite mortificatis carne solo spiri- albardilla10 • Trata de ella, pues, pero pre se cubrió con losa de pizarra, in-
tum vigente dimicantes"6 . Otro docu- leyó incorrectamente ambas pala- distintamente del verbo empleado,
mento leonés de la primera mitad del bras y propuso una lección errónea, pues los papeles hablarán siempre
siglo XI explica: "Deo iubante, nos pues hacía antropónimo donde no de "retejar, trastejar, losar, enlosar,
ibi desideraui sepulturam abere ... "7 , hay sino una fórmula usual. A su cubrir, refaldar, recorrer ... " para sig.-
y en el monasterio de Sahagún, en entender, añadía sobre la pieza que nificar la labor de reponer o aderezar
documento en torno al año 1100, se no se podía "precisar su significado tales lajas de pizarra en la cubierta.
lee: "quidam uir, nomine Martino Pe- lógico ni la época a que pertenece, No hay ni una sola alusión en cuatro
triz [ ... ] quod cum magno desiderio aunque, desde luego, sea relativa- siglos a la presencia, compra, aca-
cepit et, Deo iubante, complebit"ª, mente moderna''. Significativamen- rreo ... de tejas cerámicas.
etc. Es decir, la fórmula, extendida y te, no dibujó este epígrafe, como Los últimos cuatrocientos años
documentada además por toda Eu- sí hace con todos los demás que le del templo han conocido, pues, te-
ropa9, fue muy bien conocida en el ofrecieron interés. En estas páginas jados de losa de pizarra, acordes
reino leonés en los primeros siglos defendemos que la inscripción no a los empleados en la arquitectura
de existencia de la iglesia de Peñal- es moderna, ni relativa ni absoluta- tradicional de la región (civil o reli-
ba. Pero hasta ahora aparecía en di- mente, sino bien antigua. giosa), y también consonantes con
plomas, en escrituras convenciona- Arrinconada la pieza en un lugar las cubiertas pétreas empleadas en
les y no en piedra, y menos aislada, (la estancia norte del templo, junto edificios románicos de prestigio del
sino formando parte de oraciones a un desordenado pero interesante reino leonés 11 • Esta aseveración
más largas, pero, volviendo a la losa lapidario) que no es de acceso pú- está, además, en consonancia con
peñalbesa, no parece que el texto blico, ni siquiera despertó interés las conclusiones de la intervención
inscrito en la laja esté incompleto. cuando se dio a conocer la obra arqueológica realizada a comienzos
4
CARRIEDO TEJEDO, Manuel .(2009): "Locus Sancti Martini (ss. VIII-XII)". Estudios mindonienses: Anuario de
estudios histórico-teológicos de la diócesis de Mondoñedo-Ferrol, 25, p. 63.
5 YÁÑEZ CIFUENTES, M.ª del Pilar (1972): El monasterio de Santiago de León. León-Barcelona, CSIC, nº 66, 72, 81,
Algunas reflexiones en torno a Camarzana de Tera". Brigecio. Revista de estudios de Benavente y sus tierras, 17, p.
101.
7
RUIZ ASENCIO, José Manuel (1990): Colección Documental del Archivo de la Catedral de León (775-1230). IV (1032-
1109). León. Centro de Estudios e Investigación "San Isidoro", doc. 992.
8 GAFFARD Ludivine (2006): "Los monjes de Sahagún a la luz de su escritura.: Imagen de una comunidad y
construcción memorial (León-Castilla, s. XII-XIII)". En Actas del XI Congreso Internacional de la Asociación Hispánica
de Literatura.Medieval (20-24 de septiembre de 2005). León, Universidad de León, p. 557, nota 29.
9
En Cataluña, por ejemplo, solo en el cartulario de un monasterio recoge esta fórmula en sus distintas variantes seis
veces entre el siglo X y mediados del siglo XIII: años 931 ("Christum aiuvante"), 977 ("adiuvante Deo"), 993 ("iubante
domino nostro lesu Christo"), 1003 ("adiuvante Domino"), 1075 ("Deo iuvante"), 1254 ("adivuante Rege celorum")
(BOLOS 1MASCLANS, Jordi, ed. (2006): Diplomatari del monestir de Santa Maria de Serrateix (seg/es X-XV).
Barcelona, Fundació Noguera, docs. 6, 22, 35, 46, 112, 113, 199, pp. 79, 95, 123, 192, 296, respectivamente).
1º MARTÍNEZ FUERTES, Benjamín (2004): Montes y Peñalba. Ensayo histórico-artístico. Adelino Álvarez Rodríguez
y en la provincia, en la iglesia de Santa María del Azogue (Benavente), o en la iglesia del monasterio de Santa María
de Moreruela (Granja de Moreruela). En la ciudad de Salamanca, en la catedral vieja y en la iglesia de San Martín.
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ESTUDIOS
Perfil de la losa con resto del agujero para insertar el clavo de forja que la uniría a la tablazón de la cubiert.a.
zos del siglo XXI que afirman que se extendieron las cubiertas de paja al mantenimiento del edificio comu-
tal cubrición de piedra se puede o de lajas de piedra (lousados, se nitario y, a lo sumq, ·unos cuartillos o
retrotraer hasta el origen del edifi- dicen en gallego), que los vecinos unas cántaras de vino en agradeci-
cio12. Por lo general, Jos gastos en podían construir y mantener por si miento15. Cuando no era asl, a modo
losa en Peflalba suelen desglosar- mismos con menor o mayor fortuna. de facendera, los jornales por estas
se en mano de obra, extracción del Se evitaban asl los gastos de acudir penosas tareas se remuneraban.
material en el monte y acarreo del al tejero, su salario, la materia pri- La hipÓtesis que planteo es que
mismo, y se asocian a otros en ma- ma y los desplazamientos, pues no esta losa se trata de una pieza de
dera (la tablazón sobre la que se siempre las tejeras estaban próxi- tejado. Por dimensiones, bien lo ha
asienta la pizarra, sin formar nunca mas y menos cuando la arcilla esca- podido ser, pues se han utilizado
armadura) y clavos, para fijarla, so- sea, como en esta región. El barro módulos muy variables, siempre
bre lecho de cal y barro. adecuado estaba donde estaba, y grandes. La confirmación de esta
En este sentido, conviene traer tenlan que ser quienes encargaban función se ve reforzada por el res-
este apunte que, aunque referido al las tejas los que se desplazaran a la to del agujero que se aprecia en un
monasterio de San Pedro de Mon- tejera, y luego uno o varios carros lateral (bien advertible en su rever-
tes, explica la dificultad histórica de los que transportasen el pesado ma- so), practicado para insertar en ella
conseguir tejas cerámicas en el va- terial. En Peflalba era una solución el clavo de forja que la anclase a la
lle del Oza. Lo copió el abad Gena- carlsima e inviable por la ausencia estructura de madera que va por de-
dio Ve lasco entre 1781-1 785, y dice: de caminos carreteros en condicio- bajo de tales losas, orificio que en
nes, por lo que históricamente se su anverso se sitúa a la altura de
"Yo procuré traher tegeros para la D de ·la inscripción. Ese agujero,
recurrió a las losas de cuarcitas o
hacer teja para remediar las mu- precisamente, confirma la mayor di-
pizarras locales, trabajosamente
chas goteras que hai, y no fue mensión, al menos en anchura, de
extraídas por el vecindario, para
posible hacerse, después de he- la pieza originalmente. La fractura
conformar la cubrición de los teja-
chado de ver que es mejor la losa hubo de suceder hace mucho tiem-
dos de la arqüitectura del pueblo, la
con su barro y cal, y con la mitad po, pues no hay huellas diferencia-
doméstica y la de la iglesia. Así, en
que los tejados tienen se podrá les de color ni erosión.
los libros parroquiales se documen-
retejar y bien, y es la obra más
ta una calera en La Osma14, uno de Esta losa documenta con un tes-
necesaria. Yo no he podido hacer
los picos más altos de la sierra, junto timonio material la composición
más, de lo que me pesa harto; y el
a Pico Tuerto y la Guiana, y distintos del tejado en la Edad Media, con-
barro se hallará donde se hallaba
acarreos de material, losa de pizarra firma las conclusiones del Informe
para la teja" 13•
futldamentalmente (pero también cal arqueológi~ y testimonia que la
Las tejas no estuvieron al alcance y arena), para conseguir abaratar práctica atestiguada por los libros
de cualquiera en la época medieval, las obras en la iglesia. A cambio se de fábrica no fue sino una herencia
y menos en el medio rural, y por ello obtenla el orgullo de la contribución medieval. Esta inscripción viene, de
12
Ni tampoco de ladrillo. CORTÉS SANTOS, José Luis (2011 ): "La iglesia de Santiago de Pel'lalba (León): nuevos
datos arqueológicos". Antigüedad y Cristianismo, 28, pp. 240, 248-249.
13
Memoria de advertencias de San Pedro de Montes (Archivo Diocesano de Astorga (A.D.A.), Signatura R. 3, p. 47). Al
margen, se explica: "No pudo hacerse teja en Montes·.
14
1789, junio, 27 (A.D.A., Libro 38/1 1, F. 1, f. 146v). Todas las referencias a los Libros peñalbeses pertenecen a la serie
de Fábrica conservada en el A.O.A. (Libro 38111 ), y sigue su correspondiente número.
15 1691, septiembre, 30 (F. 1, f. v); 1697, Uunio, San Juan] (F. 1, f. v); [1887] (F. 3, f. 40r). Todavía se pagaron 6 reales en
1850 por "bajarlas (losas] del monte" (1850, diciembre, 31. F. 2, f. 38v).
- 27.
BIERZO
manera fehaciente, a establecer la de Martínez Fuertes en 1932 para Tenía sentido esta localización, ya
"medievalidad" de la pieza que, por que en ese lapso de tiempo la losa que de este modo la pieza entraba
cierto, no acusa especiales huellas fuera advertida. Lo que pasó fue en relación con otras inscritas situa-
de haber estado permanentemente que en ese ínterin se produjo el des- das en el mismo entorno, como el
expuesta al exterior, por lo que cabe montaje del portal meridional (1928) espectacular epitafio del abad Este-
pensar que estuviera, al menos la donde se instalaba el cementerio. ban en la jamba de la portada norte
parte conservada, protegida de las En esa operación se retiró la inscrip- o ~I más humilde epitafio del abad
inclemencias atmosféricas por otras tio lapidaris de Bernardo Francisco Rodrigo, grafiteado sobre el muro
losas. Esta cronología medieval es Cano y Nava que campeaba en ese occidental de la estancia norte, ya
particularmente importante, ya que espacio y documentaba la interven- estudiadas por Gómez-Moreno y
la pizarra (al contrario que la teja ción de 1772. La obra en la que se entusiastamerite reproducidas por
cerámica) no es susceptible de es- produjo el traslado del cement~rio Martínez Fuertes.
tudios de termoluminiscencia, y solo y se retiró el portal meridional se Este párroco fue personaje culto y
diferencias en su pátina pueden es- realizó al modo tradicional (es decir, amante de las "antigüedades". Co-
tablecer relaciones de posterioridad sin supervisión científica -recorde- menzó su andadura como párroco
entre unas y otras piezas, pero no ·mos que la declaración de la igle- de Peñalba en julio de 1931 (ejerce-
dataciones absolutas, la que sí ofre- sia de Santiago como Monumento ría su ministerio allí hasta 193618),
ce la presencia de esta inscripción. histórico-artístico no ocurre hasta cuando ya esta losa se había re-
1931- y solo después se inician las colocado en el murete antedicho,
intervenciones supervisadas, parti- y esta es la razón por la cual no la
LOCALIZACIONES cularmente las historicistas de Luis pudo ver el erudito granadino.
DE LA PIEZA Menéndez-Pidal), la pieza, se debió
hallar reaprovechada en la amplia
Algunas de esas irregulares pie- cubierta de dicho portal (ya exis- FUNCIÓN
zas, de formato extraordinario, es tente en 1601, según testimonio de
casi seguro que se reutilizarían múl- fray Prudencia de Sandoval1 6), cuyo Además del uso funcional primor-
tiples veces hasta su tardía amorti- faldón se extendía hasta el actual dial que se espera de una teja o de
zación, como históricamente se ha murete del recinto propio del tem- una losa de tejado, es decir, que im-
procedido con los tejados, tratando plo. Se debió descubrir a la par que pida que las aguas traspasen a las
de minimizar el costoso aporte de otra "lápida" funeraria "que se cayó bóvedas, estas piezas fueron oca-
material nuevo. de su sitio" cuando "derribaron el te- sional soporte de significados cul-
Debemos suponer que en una in- jado que cubría en antiguo cemen- turales. Histórica y ocasionalmente,
tervención histórica en el tejado de la terio" (la de Damián, muerto en el desde tiempos romanos las tejas se
iglesia alguien advirtió que esta pie- año 979, hoy desaparecida17), nue- pudieron grafitear con signos y/o
za estaba inscrita, razón por la que vamente se advirtió su singularidad escritura con distintos tipos de fun-
se decidió amortizarla, se bajó del (repitiendo la operación que debió ciones: marcas del tejar, conmemo-
mismo, y se decidió reubicar en otro ocurrir cuando se bajó por primera rativa, contable o profiláctica19• En
lugar privilegiado, dada la plausible vez) y decidió reaprovecharse, casi la Edad Media esta costumbre se
antigüedad de la grafía. ¿Dónde se exponerse, trasladándola al murete mantuvo viva, y cada vez se cono-
dispuso entonces? Para responder norte de dicho recinto propio, un es- cen más tejas inscritas pertenecien-
esta pregunta debemos responder a pacio que en el siglo XIX se llamó tes a este periodo 20 •
otra previa, qué ocurrió entre la visita "cementerio de eclesiásticos", situa- En palabras del filólogo y folcloris-
de Gómez-Moreno en 1906 y la cita do anexo al muro norte del templo. ta José Manuel Pedrosa, al hilo de
16
SANDOVAL Prudencia de (1601 ): Primera parte de las fundaciones de los monasterios del glorioso Padre San
Benito... desde el año DXL... hasta el año DCCXlll/... Madrid, Luis Sánchez, f. 31v.
17 MARTÍNEZ FUERTES, Benjamín (2004): pp. 112-113, 115.
18
El compromiso de este párroco con la que fue su parroquia lo confirma en una carta inédita que envió a Manuel
Gómez-Moreno el 7 de febrero de 1936. La reproducimos parcialmente: "Muy señor mío. Aunque no tengo el honor
y el gusto de conocerle personalmente, me cabe la satisfacción de haber leído con sumo interés algunas de sus
meritísimas obras, especialmente Iglesias Mozárabes, y haber conocido por ellas su decidida vocación y entusiasmo
por la historia del arte. Por lo que a mí toca, no le diré más que soy un desinteresado admirador de usted, que fui
algún día cura de Peñalba (León) y hoy director en el Seminario de Zaragoza, donde puede mandarme. Por todo
lo cual me atrevo a poner en su conocimiento el estado lastimoso de las iglesias de Peñalba y Montes (León) que
usted estudió con tanto cariño( ... ) En la de Peñalba, un viento huracanado se llevó gran parte de las losas del tejado
quedando el trasdós de las bóvedas al descubierto tanto que la gárgola del ábside oriente sale llena de agua cuando
llueve. Todo esto sucedió hace ya un año, y así continúa con peligro de una próxima e inminente ruina.
A su extremado amor y entusiasmo por nuestro arte dejo el tomar las medidas posibles para que no desaparezcan
estas preciosas joyas, en la seguridad que merecerá bien de Dios, de la Iglesia y de la Patria española.
Me es muy grato ofrecer a usted las seguridades de mi consideración personal más distinguida" (Instituto Gómez-
Moreno (Granada), Epistolario digital, f. 18465r-v).
19
Cuestión distinta es la decoración pintada de las bocatejas de algunos edificios, realizada para ser vista (al contrario
que la inscripción peñalbesa) principalmente con un fin decorativo, aun sin excluir otras motivaciones.
20
MARTÍNEZ GLERA, Enrique, ed. (2011). Tejas que hablan. [Estudio y Catálogo de la exposición homónima]. La
Rioja, Gráficas Lizarra.
'28-
ESTUDIOS
Vista frontal de la losa de tejado con la huella del agujero para e cavo.
la documentación de la enorme ex- Si bien la mayor parte de tejas la petición adicional de protección,
tensión de un mito universal vincu- inscritas conservadas pertenecen "Deo iubante", se extendia a algo
ladp a la creencia en el tejado como a cronologías a partir del siglo XVI, más que a las inclemencias climá-
espacio liminal: conocemos también algunas tejas ticas. De este modo, la inscripción
"los tejados han tenido un sim- medievales, principalmente asturia- cumple una función bien conocida,
bolismo religioso muy marcado en nas, con grafitos conmemorativos la de proteger el edificio, o la parte
muchas culturas, porque marcan el fechados en los siglos XIII-XIV que del mismo que cubre (una capilla,
. limes, la frontera entre lo terrestre y registran el nombre del rogatario por ejemplo)23 , lo que estarla en
io celestial, el punto en que acaba el (nombre + fecit) , o incluyen motivos consonancia con la presencia de
mundo (las técnicas, las destrezas) figurativos22 • otros signos de valor apotropaico
de los humanos y comienza a des- Se losó en algún momento del presentes en los grafitos del interior
plegarse el dominio de los dioses, el siglo XII el tejado de la iglesia de del templo pef1albés, y de cronolo-
lugar por el que las almas ascien- Peñalba y se decidió constatar la- gla similar, sobre las paredes norte
den hacia arriba o por el que los dio- pidariamente que la operación se y sur del antiguo coro monástico:
ses observan o intervienen en los habla concluido gracias a la ayuda nudos salomónicos, cruces, estre-
asuntos de abajo"2 1• diylna. Con tal inscripción, además, llas de distinto número de puntas. ..
21
PEDROSA, José Manuel (2005): La historia secreta del Ratón Pérez. Madrid: Páginas de espuma, p. 287. El libro
documenta de manera asombrosa y exhaustiva la extensión de un mito universal vinculado a la creencia en el tejado
como espacio liminal. .
22
MARTÍNEZ GLERA, Enrique, ed. (2011 ), pp. 15, 20, 24; ARGÜELLO MENÉNDEZ, J. y PEDREGAL MONTES, M.
A. (1997): "La expansión de las cubienas de teja en Asturias en la Edad Media: tejas con inscripción en Asturias•.
En La Céramique Médiévale en Méditerranée. Actes du V/e congres de l'AIECM. [Aix-en-Provence, 13-18 novembre
1995). Aix-en-Provence, pp. 703-706; MARTINEZ LORENZO, Luis (2001 ): ·una teja medieval de San Antolín: notas
sobre tejas medievales asturianas y ritos de fundación". Bedoniana Anuario ele San Antolín y Naves, 3, pp. 15-18;
FEANÁNDEZ HEVIA, José María y AAGÜELLO MENÉNDEZ, José Jorge (201 O): "El archivo tallado: documentos de
piedra y barro en la iglesia de San Antolfn de Bedón". Bedoniana. Anuario de San Antolín y Naves, 12, pp. 13-14.
23
Es un proceso mejor documentado en la Edad Moderna, en muy distintos territorios (AAGANDOfílA OCHANDORENA,
Pedro (201 1): "Tejas y ladrillos con grabados, procedentes de Navarra• Kobie. Antropología cultural, 15, pp. 172-176).
- 29 -
BIERZO
Parte de su interés radica en que, pendencia del cercano monasterio pudo seguir a la reconsagración del
si no hay tantas tejas medievales de San Pedro de Montes. Los libros templo cuando se produjo el cambio
inscritas conservadas, esta losa es donados en el testamento del santo de liturgia. En este caso, las carac-
el primer testimonio, hasta donde para circular también por Peñalba, terísticas paleográficas del epígrafe
sé, en que se documenta este ima- las inscripciones monumentales (la darían un terminus a qua, pero la
ginario cultural medieval, lo que la de consagración en la cabecera y la falta de datos ciertos impide conti-
hace todavía más siingular. Ade- de reconsagración en el muro meri- nuar por estas vías especulativas.
más, frente a las incisiones preco- dional; los epígrafes funerarios del
chura de las tejas, asimilables a los exterior, alguno perdido), la propia
grafitos históricos en la mayor parte potencia del cenobio, restaurado OTRO ELEMENTO
de los casos, en este caso el epígra- por el propio Genadio y luego por MEDIEVAL EN EL TEJADO
fe comparte características más con los benedictinos, y la presencia .en
el hábito epigráfico contemporáneo Peñalba de monjes capaces de re- Lo cierto es que ciertos elementos
por sus características internas y producir citas textuales de obras de antiguos de un edificio suelen rea-
externas, por su ambición, en suma. Beda el Venerable y Smaragdo de provecharse con fines simbólicos
Esta petición de ayuda a Dios San Mihiel en unos grafitos de voca- en las fábricas que se renuevan~ En
puede tener un sentido de protec- ción epigráfica realizados hacia los Peñalba, sin ir más lejos, se exhibe
ción parecido al de la teja árabe siglos Xll-Xlll 27 , parecen responder esa curiosa piedra grabada que for-
que apareció (descontextualizada al mismo impulso que la inscrip- ma la parte superior de la ventana
también) junto a la ermita de Santa ción de la propia losa. Había gente meridional de la capilla sur, pieza
Marina en Villamartín de Sotoscue- letrada, conocedora de los corres- reaprovechada de significado dudo-
va (Burgos), edificio fechado hacia pondientes hábitos epigráficos. Las so, pero que claramente se instaló
1456, con unos versos inscritos an- características paleográficas del de origen por el valor añadido que
tes de la cocción copiados del Poe- epígrafe latino inscrito en la losa aportaba al edificio28 . Ya hemos vis-
ma de Fernán González.24 , o como aconsejan vincular la laja al tiempo to que también ocurre en los tejados,
otra teja (esta sí, encontrada en el en que los monjes todavía utilizaban sean de teja o de losa. Estos éle-
tejado del castillo de Novallas, Za- la iglesia de Santiago como oratorio mentos reaprovechados no han de
ragoza) fechada en los siglos XV- monástico en tiempos de retiro as- estar necesariamente a la vista de
XVI, que invoca en árabe a Allah cético, es decir, a su época prepa- los seres humanos que utilizarán ta~
con la conocida jaculatoria: "En el rroquial, por lo que podría tratarse les construcciones, sino que, como
nombre de Dios, el Clemente, el Mi- de una pieza inscrita en la segunda elementos simbólicos que son, han
sericordioso"25. mitad del siglo XII, periodo en que de estar "a la vista de Dios", circuns-
se produce el cambio de naturale- tancia que concurre en los tejados.
za canónica de templo, y dejará la Es lo que parece haber ocurrido con
LA DATACIÓN otra pieza, recientemente identifi-
dependencia del monasterio de San
cada, instalada como ápice de los
No es sorprendente encontrar en Pedro para pasar a ser una dignidad
faldones del cimborrio de la iglesia
la iglesia parroquial de Peñalba un de la mesa capitular de la catedral
asturicense. peñalbesa, en el punto más alto de
texto latino tan bien conformado. El la construcción, lo que refuerza de
lugar apartado en que se convirtió Sería interesante poder vincular por sí su valor simbólico.
la localidad desde que adquirió su la colocación de esta losa en el re-
parroquialidad 26 no ha de hacernos mozado tejado de la capilla de San Se trata de un antiguo cimacio
olvidar que durante los primeros Genadio cuando se recreció esta en procedente de la iglesia originaria
siglos, desde su propia fundación altura en tiempos medievales, o con del siglo X. Fue hallado en la última
por san Genadio, orbitó como de- la posible renovatio material que intervención en las cubiertas, y se
24 VELÁZQUEZ, Isabel (2006): La teja de Vi/lamartín de Sotoscueva (Burgos): los versos más antiguos del Poema de
Fernán González. Segovia. Fundación Instituto Castellano y Leonés de la Lengua. He estudiado esta teja y su
contexto en LORENZO ARRIBAS, Josemi (2015): Estudio histórico-artístico, y diagnóstico del estado de conservación
de las pinturas murales, de la ermita de Santa Marina en Vi/lamartín de Sotoscueva, Burgos. [Informe inédito]. Junta
de Castilla y León, Dirección General del Patrimonio Cultural, pp. 127-131.
25 MARTÍNEZ GLERA, Enrique, ed. (2011 ), pp. 22-23, 40.
26 La misma marquesa de Villafranca, que ejecutó el robo de reliquias en Peñalba en 1603, reconocía que ella
misma "enbió predicadores a San Esteban [de Valdueza]; que los más viejos no se acordavan haver oydo sermón
en su vida" (cit. en FITA COLOMÉ, F. (1903): "Hagiografía. El santo asalto de la Duquesa de Alba en 1603: Relación
contemporánea e inédita", Boletín de la Real Academia de la Historia, 42, p. 78).
27 LORENZO ARRIBAS, José Miguel (2013): "Grafitos históricos (19). Peñalba de Santiago, palabras mayores".
Rinconete. Instituto Cervantes. Centro Virtual Cervantes (12 de septiembre de 2013): https://cvc.cervantes.es/
el_rinconete/anteriores/septiembre_ 13/12092013_01.htm y LORENZO ARRIBAS, José Miguel (2015): "Grafitos
históricos (37). Beda el Venerable en el Bierzo". Rinconete. Instituto Cervantes. Centro Virtual Cervantes (2 de junio
de 2015): https://cvc.cervantes.es/el_rinconete/anteriores/junio_15/02062015_01.htm
28 GUSTAVO LÓPEZ, David (2014): Los últimos priscilianistas. El enigma solar de Santiago de Peñalba y San Miguel de
Celanova. León, Gráficas Celarayn, pp. 19-36 y 55-59; LORENZO ARRIBAS, José Miguel (2017): "Grafitos históricos
(57). Petroglifo de Peñalba". Rinconete. Instituto Cervantes. Centro Virtual Cervantes (21 de abril de 2017):
https://cvc.cervantes.es/el_rinconete/anteriores/abril_17/21042017_01. htm
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ESTUDIOS
f.
ha bajado para p que para la hermosura se levantan en este momento cuando se instaló
conservación29• en forma pyramidal, ya quadrado, ya (o reinstaló, si es que no estaba ya
En 1682 un cu oso asiento docu- ochabado, y con varias labores, que en ese mismo punto del tejado del
mental de los lib os de fábrica Infor- le adornan, y dan hermosa vista". antiguo "chapitel') esta pieza, una
ma del gasto de 1 reales empleados En el caso de Santiago de Peñalba más a sumar al salmer geminad<> y 1
lo ~ás parecido a un chapitel es la a otras piedras que el paso del tiem- : i
en pagar a quie es "hicieron el cha-
pitel"30 del templ El Diccionario de cubierta a cuatro aguas que cubre la po ha respetado de esas estancias
"Autoridades (17 define "chapitel" cúpula del coro, bien individualizada de uso monástico anexas al edificio
como "(r]emate de 1 ~torres, medias del resto de faldones de cubierta, a eclesial peñalbés de las que apenas
naranjas, o semejantes edificios, dos y tres aguas. Quizá pudo ser sabemos nada31. ·
29
MURILLO FRAGERO, José Ignacio (2017): "Secuencia constructiva de la iglesia de Santiago en Peñalba de Santiago
(Ponferrada, León). Reformas de un edificio unitario", Arqueología y Territorio Medieval24, p. 78.
30 1678. F. 1, f. v.
31 De esas oonstrucciones anexas al edificio original, recientemente ha desaparecido otro testimonio: LORENZO
ARRIBAS, José Miguel (2020): "Grafitos históricos (88). Epitafio a un caballo medieval". Rinconete. Instituto
Cervantes. Centro Virtual Cervantes (24 de enero de 2020): https://cvc.cervantes.es/el_rinconete/anteriores/
enero_20/24012020_01 .htm .
• 31 ·
En el artículo, por un error, no pudo aparecer el Del mismo modo, se han reproducido en el pdf
dibujo de la inscripción que realicé, que añado las fotografías en color, pues en la publicación
aquí para una mejor comprensión. figuran en b/n.
05 PÓRTICO
r Antolín de Cela Pérez
07 ESTUDIOS
07 Una iglesia para San Fructuoso en Compludo
1 y apuntes para su iconografía y culto
Miguel Ángel González García
s 139 CRÓNICA
Agosto 2019 -Agosto 2020
Miguel Ángel Pérez Vega
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