Resolucion 10 2019112911344600041511

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA CORTE
SUPREMA - Sistema de Notificaciones Electronicas

SINOE
SEDE PALACIO DE JUSTICIA,
Secretario De Sala - Suprema:SALAS CAMPOS Pilar
Roxana FAU 20159981216 soft
Fecha: 28/11/2019 16:08:56,Razón: RESOLUCIÓN
JUDICIAL,D.Judicial: CORTE SUPREMA /
LIMA,FIRMA DIGITAL - CERTIFICACIÓN DEL
CORTE SUPREMA SALA PENAL PERMANENTE CONTENIDO
DE JUSTICIA RECURSO DE NULIDAD N.° 722-2018

DE LA REPÚBLICA ÁNCASH
Presunción de inocencia
En el presente caso, lejos de haberse desvirtuado la
presunción constitucional de inocencia que ampara a los
acusados (artículo 2, numeral 24, literal e, de la Constitución
Política del Estado), se constata una insuficiencia de prueba
de cargo que no permite crear convicción de culpabilidad.
Por ende, al no encontrarse acreditada la responsabilidad
penal de los encausados por el delito incriminado, es
razonable que se declare haber nulidad en el extremo
condenatorio y ratificar, en su extremo absolutorio, la
sentencia emitida por la Sala Superior.
Lima, treinta de enero de dos mil diecinueve
VISTOS: los recursos de nulidad contra la

sentencia del veintinueve de enero de dos mil dieciocho(foja 5214),
emitida por la Sala Penal Liquidadora Permanente de Huaraz de la
Corte Superior de Justicia de Áncash, interpuestos por: a) el señor fiscal
superior (foja 5364) en el extremo que absolvió a Israel Saturnino
Fernández Gómez como cómplice del delito contra la administración
pública-peculado doloso, en agravio del Gobierno Regional de Áncash;
y, absolvió a Richard Cabana Chauca, Francisco Vásquez Carrillo, Luis
Julián Guillermo Azaña y Óscar Nicanor Ruiz Conde, como autores del
delito contra la administración pública-negociación incompatible, en
agravio del Gobierno Regional de Áncash; asimismo, en el extremo que
impuso a Isaías Gualberto Celestino Huamán, Ángel Victoriano Rondán
Ramírez (como autores) y Cristian Arbaham Castro Arquiñigo (como
cómplice), cuatro años de pena privativa de libertad, suspendida por el
periodo de tres años; b) el señor procurador público especializado en
delitos de corrupción (foja 5300), en el extremo que absolvió a Israel
Saturnino Fernández Gómez como cómplice del delito contra la
administración pública-peculado doloso, en agravio del Gobierno
Regional de Áncash; y, absolvió a Richard Cabana Chauca, Francisco
Vásquez Carrillo, Luis Julián Guillermo Azaña y Óscar Nicanor Ruiz
1
CORTE SUPREMA SALA PENAL PERMANENTE
Conde, como autores del delito contra la administración pública-

negociación incompatible, en agravio del Gobierno Regional de
Áncash; c) el encausado Ángel Victoriano Rondan Ramírez (foja 5306), en
el extremo que lo condenó como autor del delito contra la
administración pública-peculado doloso, en agravio del Gobierno
Regional de Áncash, a cuatro años de pena privativa de la libertad,
suspendida en su ejecución por tres años e inhabilitación por dos años, y
fijó la suma de S/ 3 958 400 (tres millones novecientos cincuenta y ocho mil
cuatrocientos soles) por concepto de reparación civil, que deberá abonar
en forma solidaria con los demás condenados; d) el encausado
Christian Castro Arquiñigo (foja 5319), en el extremo que declaró
infundada la excepción de naturaleza de acción deducida y lo
condenó como cómplice del delito contra la administración pública-
peculado doloso, en agravio del Gobierno Regional de Áncash, a
cuatro años de pena privativa de la libertad, suspendida en su
ejecución por tres años e inhabilitación por dos años, y fijó la suma de
S/ 3 958 400 (tres millones novecientos cincuenta y ocho mil cuatrocientos soles) por
concepto de reparación civil, que deberá abonar en forma solidaria
con los demás condenados; y e) el encausado Isaías Gualberto
Celestino Huamán (foja 5346), en el extremo que lo condenó como autor
del delito contra la administración pública-peculado doloso, en agravio
del Gobierno Regional de Áncash, a cuatro años de pena privativa de
la libertad, suspendida en su ejecución por tres años e inhabilitación por
dos años, y fijó la suma de S/ 3 958 400 (tres millones novecientos cincuenta y
ocho mil cuatrocientos soles) por concepto de reparación civil, que deberá
abonar en forma solidaria con los demás condenados. Con lo expuesto
por la señora fiscal suprema en lo penal.
Intervino como ponente el señor juez supremo Figueroa Navarro.
2
CONSIDERANDO
I. Expresión de agravios
Primero. El señor fiscal superior fundamenta su recurso de nulidad (foja

5364) y sostiene lo siguiente:
1.1. Respecto a la absolución del encausado Israel Saturnino Fernández

Gómez como cómplice del delito de peculado doloso.
1.1.1. En su condición de jefe del Área de Adquisiciones del
Gobierno Regional de Áncash, el encausado absuelto tenía el
deber de verificar que el proceso de contratación sea llevado
adecuadamente; sin embargo, tal como lo señaló en sus
declaraciones, no contaban con ninguna documentación referida
a los antecedentes de la adquisición de las ambulancias, situación
que fue inobservada por el citado encausado, llegando a visar la
Orden de Compra número 0248 por el monto de S/ 16 953 400
(dieciséis millones novecientos cincuenta y tres mil cuatrocientos soles), emitida
a favor de la empresa Nissan Maquinarias S. A.
1.1.2. La visación de la Orden de Compra número 0248, a favor de
la empresa Nissan Maquinarias, incrementó el riesgo para el bien
jurídico protegido e hizo posible el trámite de pago a favor de la
empresa en referencia, toda vez que dicho documento era
requisito imprescindible, a efectos de que la empresa realice la
entrega de las ambulancias sobrevaloradas.
1.2. Respecto a la absolución de los encausados Richard Cabana
Chauca, Francisco Vásquez Carrillo, Luis Julián Guillermo Azaña y
Óscar Nicanor Ruiz Conde, como autores del delito de
negociación incompatible.
1.2.1. La Sala Penal consideró erróneamente que el ámbito de

comisión del delito de negociación incompatible solo alcanzaría a
3
la fase de selección de un proceso o procedimiento de

contratación pública; cuando, por imperio de la ley, tiene tres
fases: a) actos preparatorios, b) selección y c) ejecución.
1.2.2. La Sala Superior no expuso las razones objetivas que sustenten
que las conductas de los procesados son omisivas y que están
prohibidas para el delito de negociación incompatible.
1.2.3. La Sala Superior se equivoca al decir que en este delito el
funcionario debe intervenir por razón de su cargo en los contratos u
operaciones; pues no consideró que, en razón de su cargo, los
encausados intervinieron en las diferentes etapas del proceso de
contratación.
1.3. Respecto a la pena impuesta a Isaías Gualberto Celestino Huamán,
Ángel Victoriano Rondán Ramírez y Cristian Arbaham Castro
Arquiñigo.
1.3.1. La Sala Superior fijó la pena en el tercio inferior,

argumentando que los encausados no registran antecedentes
penales; sin embargo, no tuvo en cuenta la existencia de una
agravante, esto es, la pluralidad de agentes.
1.3.2. Así, la pena se encuadraría en el tercio intermedio, en tanto
concurren una atenuante (carencia de antecedentes) y una
agravante (pluralidad de agentes). Aunado a ello, se debe tomar en
cuenta la magnitud del daño causado al Estado (intensidad de la
lesión-principio de lesividad), que asciende a S/ 3 958 400 (tres millones
novecientos cincuenta y ocho mil cuatrocientos soles), por lo que debió
imponérseles cinco años de pena efectiva.
1.3.3. La Sala Superior no explicó las razones por las que se
suspendió la ejecución de la pena, de conformidad con el artículo
57 del Código Penal.
4
Segundo. El señor procurador público especializado en delitos de

corrupción fundamenta su recurso de nulidad (foja 5300) y sostiene lo
siguiente:
2.1. Respecto a la absolución del encausado Israel Saturnino Fernández

Gómez como cómplice del delito de peculado doloso.
2.1.1. El encausado tuvo participación directa en el procedimiento

que fue inidóneo, procurando que el trámite de los bienes
adquiridos sea acelerado y el pago al proveedor también,
conforme se acredita con la orden de compra suscrita por el
citado encausado en calidad de jefe de adquisiciones.
2.2. Respecto a la absolución de los encausados Richard Cabana
Chauca, Francisco Vásquez Carrillo, Luis Julián Guillermo Azaña y
Óscar Nicanor Ruiz Conde, como autores del delito de
negociación incompatible.
2.2.1. Los encausados, en su condición de funcionarios de

confianza en cargos subalternos de la Presidencia y Gerencia
Regional del Gobierno Regional de Áncash, tuvieron interés
particular en adquirir las ambulancias, coordinando con el ex
presidente regional de Áncash César Joaquín Álvarez Aguilar, para
sus fines electorales de reelección.
Tercero. El encausado Ángel Victoriano Rondan Ramírez fundamenta su

recurso de nulidad (foja 5306) y sostiene lo siguiente:
3.1. No se efectuó una debida apreciación de los hechos ni se

compulsó adecuadamente las pruebas ofrecidas por la defensa,
precisadas en la lectura de las piezas procesales, con lo que se
vulneró el derecho a la motivación de las resoluciones judiciales.
5
3.2. El recurrente no suscribió el Contrato de Adenda número 01 al

Contrato número 066-2008-GRA-GRAD-SGAByCP. Tampoco le
correspondía evaluar el contenido de las cláusulas del contrato,
que era responsabilidad de la Subgerencia de Abastecimiento y
Servicios Auxiliares; por el contrario, cumplió con realizar actos
administrativos en cumplimiento de sus funciones, en tanto existía
autorización de pago, ya que las observaciones fueron
subsanadas, por lo que procedía la adquisición de las
ambulancias, las que ya habían sido entregadas al Gobierno
Regional de Áncash.
3.3. El recurrente no fue comprendido dentro del proceso administrativo
en contra de algunos funcionarios, ello en la medida en que no
cumplió falta alguna ni quebrantó lo dispuesto por el Manual de
organización y funciones (Mof) y el Reglamento de organización y
funciones (Rof) del Gobierno Regional de Áncash.
3.4. El Informe pericial en su numeral 2.3 concluye que: “La fase del girado
se cumplió con los procedimientos establecidos en las normas legales y el trámite
del pago se exigió con toda la documentación”; medio de prueba no

considerado por la Sala Superior.
3.5. En el caso concreto, existía la afectación presupuestal, conforme
se desprende del Memorándum número 1857-2009, para el pago
de las setenta y nueve ambulancias, por lo que el gerente regional
de Infraestructura le pidió a la Gerencia Regional de
Administración que disponga el procedimiento de pago, de
acuerdo a los términos del contrato, entregándose el cheque al
proveedor y las ambulancias fueron entregadas.
3.6. El Ministerio Público no acreditó con ningún medio probatorio
idóneo que el recurrente se haya apropiado de los caudales del
Gobierno Regional de Áncash, en tanto que el pago se realizó
6
después de que la Fiscalizadora señalara en el Informe número 001-

2009, que las recomendaciones fueron subsanadas para la
procedencia de la gestión y el pago de las setenta y nueve
ambulancias.
3.7. No se acreditó que el recurrente haya dispuesto de caudales o
efectos para su beneficio, en tanto solo visó el comprobante de
pago a favor de la empresa Nissan Maquinarias S. A.
3.8. No existe imputación concreta. No se llegó a describir cuál fue la
participación del recurrente en el evento delictivo.
En síntesis, no se acreditó ninguno de los elementos típicos del delito de
peculado doloso (objetivo y subjetivo).
Cuarto. El encausado Christian Castro Arquiñigo fundamenta su recurso

de nulidad (foja 5319) y sostiene lo siguiente:
4.1. Respecto a la excepción de naturaleza de acción.

4.1.1. No existe custodia o administración de fondo alguno por
parte de los funcionarios implicados, toda vez que funcionalmente
fue parte integrante para el pago del precio de compra de las
ambulancias, situación que desde el punto de vista legal
correspondería a otros tipos penales, como negociación
incompatible o colusión.
4.1.2. Los hechos imputados no tipifican el delito de peculado, ya
que no se da la relación especial entre los caudales públicos y el
funcionario.
4.1.3. No se cumple con los requisitos típicos de percepción,
apropiación ni destinatario.
4.1.4. El delito de peculado es un delito instantáneo que se
consuma con la apropiación. En el caso concreto no existe
consumación, dado que los hechos se circunscriben a la decisión
7
de comprar, proceso de licitación, contrato y adenda; así como

recepción y giro de cheque, lo que hace imposible la
configuración del delito.
4.2. Respecto al extremo de la condena.
4.2.1. La Sala Superior incurrió en la violación del principio
acusatorio y de congruencia procesal, al condenar al recurrente
por una base fáctica distinta a la que ha sido materia del presente
proceso.
4.2.2. La Sala Superior se basó en la requisitoria oral para emitir
sentencia; sin embargo, debió basarse en la acusación escrita que
es la base del juicio oral.
4.2.3. La requisitoria introduce hechos de los que el recurrente no
fue acusado, específicamente respecto a la recepción y
conformidad de los bienes y el pago.
4.2.4. No se individualizó a cuál de los autores prestó el supuesto
auxilio, tampoco se ha precisado cuáles son los alcances de su
colaboración y qué funciones ha quebrantado.
4.2.5. Existe una errónea valoración de los elementos de
convicción, los que no reúnen el requisito de aporte causal e
imprescindible, propio de la complicidad.
4.2.6. El hecho de solicitar celeridad al Área de Fiscalización no
generó ningún peligro o lesión del bien jurídico tutelado, en tanto
es parte de la eficiencia con que se debe actuar en la
administración pública.
4.2.7. La Sala Superior, para afirmar que el recurrente fue la persona
que ordenó a la empresa Nissan Maquinarias que las ambulancias
fueran entregadas en la ciudad de Chimbote, se basó en la
Resolución Gerencia General Regional número 0128-2011-
8
GRA/GGR, medio de prueba que no ha sido ofrecido ni actuado

en juicio oral.
4.2.8. Existe ausencia de valoración de los elementos de
convicción, pues las acciones del recurrente determinan que no
recibió ni dio conformidad de los bienes, ya que solo cumplió su rol.
4.2.9. Se vulneró el debido proceso, en tanto se varió la acusación
(de autor a cómplice), sin observar la forma legal establecida;
además, se inobservó la formalidad requerida para el retiro de la
acusación sobre el delito de negociación incompatible.
4.3. Respecto a la reparación civil.
4.3.1. La condena estableció una reparación civil ascendente a
S/ 3 958 400 (tres millones novecientos cincuenta y ocho mil cuatrocientos
soles), la cual vulnera flagrantemente el principio de legalidad, tal
como se ha expuesto en el presente recurso de nulidad.
Quinto. El encausado Isaías Gualberto Celestino Huamán fundamenta

su recurso de nulidad (foja 5346) y sostiene lo siguiente:
5.1. El autor de la pericia técnica mecánica valorizadora, quien no fue

nombrado por el Ministerio Público o el Poder Judicial, negó
haberla realizado y no concurrió a juicio; se trata de una consulta
externa realizada por la Contraloría que, respecto al proceso,
concluyó que se pague.
5.2. El representante del Ministerio Público, en su requisitoria oral, varió
de elemento de convicción que sustentaba la acusación, y señaló
que la mal llamada pericia técnica mecánica valorizadora no era
tal, sino que se trataba de un informe de auditoría y que tenía el
carácter de prueba preconstituida.
5.3. La citada pericia no reúne los requisitos necesarios para ser tratada
como tal, por cuanto no fue ingresada y producida dentro del
9
proceso penal. Tampoco puede ser considerada un informe de

control.
5.4. El recurrente, como funcionario del Gobierno Regional de Áncash,
no tenía posibilidad alguna de libre disposición de los caudales
respecto al proyecto, salvo la obligación de pago prevista en el
contrato, consecuencia de un proceso de selección en el que no
tuvo participación.
5.5. La carta emitida por los peritos médicos Ronald Rodríguez Montoya
y Luis Cabrera Salazar señala que las ambulancias cumplen con los
requerimientos técnicos mínimos y cuentan con todas las
especificaciones técnicas de las cabinas de atención médica.
5.6. Se ha indicado que la Nissan debió sustentar el cambio con base
en un estudio técnico sobre la resistencia de materiales y la
metodología estructural; sin embargo, la Adenda número 01 al
Contrato número 066-2008-GRA-GRAD-SGABYCP se basa en que el
proveedor a cargo de la cabina “Rontan Electrometalurgia Ltda.”,
emitió un sustento técnico del cambio del sistema antivuelco, que
constituía una mejora tecnológica y de seguridad para los
ocupantes.
II. Imputación fiscal

Sexto. Conforme a la acusación fiscal (foja 4249), los hechos materia de
imputación son los siguientes:
A. Hechos generales
6.1. El nueve de octubre de dos mil ocho, el Gobierno Regional de

Áncash y la Gerencia General de la empresa Nissan Maquinarias
S. A. suscribieron el contrato número 066-2008-GRA-GRAD-
SGAByCP y acordaron la adquisición de setenta y nueve
ambulancias rurales tipo I-Nissan Frontier del año dos mil ocho, con
10
equipos médicos, accesorios y equipamiento adicional a favor del

Gobierno Regional de Áncash.
6.2. Dicho contrato se suscribió como consecuencia de la Licitación
Pública número 012-2008-OEI-GRA realizada por la Organización
de Estados Iberoamericanos para la Educación, Ciencia y Cultura
(OEI), según Convenio Internacional número 054-2007, suscrito entre
el organismo internacional y el Gobierno Regional de Áncash,
representado por su presidente César Joaquín Álvarez Aguilar, y se
otorgó la buena pro a la empresa Nissan Maquinarias S. A., por el
monto de S/ 16 953 400 (dieciséis millones novecientos cincuenta y tres mil
cuatrocientos soles), a razón de S/ 214 600 (doscientos catorce mil
seiscientos soles) por cada unidad vehicular.
6.3. El diecisiete de septiembre de dos mil ocho, la OEI remitió el

Documento OEI-3029/2008 –que tenía como referencia la Licitación Pública
Local LPL número 12-2008-OEI-GRA-Adquisición de ochenta y cuatro
Ambulancias-Proceso Negociación Directa, derivada de la Licitación Pública
Local LPL número 12-2008-OEI-GRA–, que comunicó la adjudicación de

la buena pro solo en el ítem “Adquisición de setenta y nueve ambulancias
rurales tipo I”; la ganadora fue la empresa Nissan Maquinarias S. A.,
por el procedimiento de negociación directa, con el monto total
adjudicado de S/ 16 953 400 (dieciséis millones novecientos cincuenta y tres
mil cuatrocientos soles) y se solicitó la elaboración del respectivo
contrato.
6.4. El once de marzo de dos mil nueve, el señor Jhonny Carvallo,
representante legal de la empresa Nissan Maquinarias S. A. le
remitió una carta al Gobierno Regional de Áncash, en la cual refirió
que ellos se comprometieron a entregar las ambulancias con un
sistema antivuelco tipo jaula, compuesto por un tubo de dos sin
costura, como aparece en la oferta económica y los parámetros
11
del contrato; sin embargo, le hizo conocer la existencia de un

nuevo sistema de protección más eficiente, que permite un mayor
rendimiento al vehículo y que brinda mayor seguridad a sus
ocupantes, por lo que solicitan la modificación al contrato. Es en
mérito de ello que, el diecisiete de marzo de dos mil nueve, Isaías
Celestino Huamán, gerente de Administración del Gobierno
Regional de Áncash, le remitió al abogado Hernán Molino Trujillo,
jefe de la Oficina Regional de Asesoría Jurídica, el Memorando
número 319-2009-GRA/GRAD-SGABySP, a fin de que emita una
opinión jurídica sobre la carta remitida por la empresa Nissan
Maquinarias S. A.; a su vez, Molino Trujillo expidió el Memorando
número 320-2009-GRA/ORAJ, que tiene la misma fecha: diecisiete
de marzo de dos mil nueve, en el cual se dirige al gerente regional
de Desarrollo Social, licenciado Óscar Ruiz Conde, a efectos de
que en el breve plazo, disponga que la Dirección Regional de
Salud emita un informe técnico que sustente o corrobore, de ser el
caso, la propuesta del representante de la empresa Nissan
Maquinarias S. A.
6.5. Remitida la documentación a la Dirección Regional de Salud,
aparece elaborado el Informe número 001-2009-REGIÓN ANCASH-
DIRES-A-H-VRG/USG/J, del veinticuatro de marzo de dos mil nueve,
que eleva el señor Marco Valencia, ejecutivo de la UTES-Huaraz,
Jorge Alberto Azaña Vergaray, mediante el que se hace referencia
a la evaluación técnica respecto de la propuesta de mejoras
técnicas en las ambulancias rurales, conforme a lo requerido
mediante Memorando número 686-2009-REGION-A-DIRES-DG, en el
que se recomienda acoger la propuesta planteada por el
proveedor, Nissan Maquinarias S. A.
12
6.6. Al día siguiente, veinticinco de marzo de dos mil nueve, Jorge Azaña
Vergaray expidió los Oficios signados con los números 0667 y 0668-
2009-REGIÓN ANCASH-DIRES/DG, dirigidos a Hernán Molina Trujillo y
Óscar Ruiz Conde, remitiéndoles una copia para cada uno del
Informe evacuado por Marco Valencia Rincón, el cual resulta ser
un trámite incoherente, pues al tratamiento de la adenda se le dio
un trámite extrañamente célere, ya que, sin otro trámite adicional,
apareció firmada la adenda contractual, del dos de abril de dos
mil nueve, la cual está visada por la Gerencia General, la
Subgerencia de Abastecimiento y Control Patrimonial, la Gerencia
Regional de Administración y la Gerencia Regional de
Planeamiento, Presupuesto y Acondicionamiento Territorial.
6.7. En este aspecto, resulta coherente concebir que el cambio de
sistema antivuelco se debió a que los denunciados estaban
conscientes de que las ambulancias estaban con sobrepeso.
Posteriormente, las ambulancias fueron entregadas en lugar
distinto al acordado mediante contrato, ya que ingresaron a la
sede del Gobierno Regional de Áncash, cada una de ellas con un
kilometraje de 1065 kilómetros de recorrido, luego de ser
movilizadas por las ciudades de Chimbote, Casma, Huarmey,
Caraz, Yungay, Carhuaz y Huaraz, acompañadas por el propio
César Joaquín Álvarez Aguilar, sin realizar ningún trámite para la
conformidad del producto; aun así, se procedió a hacer el trámite
respectivo para el pago.
6.8. Nunca se realizó un procedimiento idóneo para realizar una
evaluación técnica coherente con la naturaleza del bien
adquirido; por el contrario, se procuró tramitar el pago al
proveedor lo más rápidamente posible, conforme se acredita
mediante la elaboración de la Orden de Compra-Guía de
13
Internamiento número 248, del veintinueve de abril de dos mil

nueve, suscrita por Israel Fernández Gómez, en calidad de jefe de
Adquisiciones; Christian Castro Arquiñigo, como subgerente de
Abastecimiento y Control Patrimonial, y Julián Guillermo Azaña,
como jefe de Almacén. Del mismo modo, el propio Castro
Arquiñigo elaboró el Memorando número 1701-2009-REGIÓN
ANCASH-GRADySGAByCP, del doce de mayo de dos mil nueve,
dirigido al gerente regional de Administración, Isaías Celestino
Huamán, remitiéndole toda la documentación de la compra de
las ambulancias para agilizar el trámite de su afectación y pago; es
decir, cuando aún las ambulancias no habían llegado siquiera a la
ciudad de Huaraz y se encontraban en actividad proselitista del
presidente regional.
B. Imputación concreta
6.9. Por delito de peculado
i) A Ángel Victoriano Rondan Ramírez, en su condición de

subgerente de Administración Financiera, conjuntamente con su
coprocesado Isaías Gualberto Celestino Huamán (gerente regional
de Administración), se le imputa que, el veintiocho de mayo de dos
mil nueve, giró el cheque número 527260489 y suscribió el
Comprobante de Pago número 2765 a favor de la empresa
Nissan Maquinarias S. A. por la suma de S/ 16 953 400 (dieciséis
millones novecientos cincuenta y tres mil cuatrocientos soles). Asimismo, se
le imputa haber participado en la adquisición de setenta y
nueve ambulancias rurales tipo I-Nissan Frontier del año 2008, por
la suma de S/ 16 953 400 (dieciséis millones novecientos cincuenta y tres
mil cuatrocientos soles), pese a que el proceso de adquisición,
recepción y pago adolecía de una serie de observaciones; y
14
haberse apropiado de la suma de S/ 3 918 400 (tres millones

novecientos dieciocho mil cuatrocientos soles), en la medida en que, de
acuerdo a la pericia técnica mecánica valorizadora, se tasó una
ambulancia en S/ 165 000 (ciento sesenta y cinco mil soles); sin
embargo, en su condición de subgerente de Administración
Financiera de la entidad estatal mencionada, conjuntamente
con sus coprocesados, pagó por cada ambulancia la suma de
S/ 214 600 (doscientos catorce mil seiscientos soles). Por tanto, al
haberse adquirido setenta y nueve ambulancias, se pagó, de
más, la suma de S/ 3 918 400 (tres millones novecientos dieciocho mil
cuatrocientos soles), monto que se reputa fue materia de
apropiación.
ii) A Isaías Gualberto Celestino Huamán, en su condición de
gerente regional de Administración se le imputa que, el
veinticinco de junio de dos mil ocho, visó los términos de
referencia para la adquisición de ochenta y cuatro
ambulancias, lo que fue remitido a la OEI. Asimismo, el nueve de
octubre de dos mil ocho, celebró y suscribió en representación
del Gobierno Regional de Áncash, el Contrato número 066-2008-
GRA-GRAD-SCAByCP, para la adquisición de setenta y nueve
ambulancias en la suma de S/ 16 953 400 (dieciséis millones
novecientos cincuenta y tres mil cuatrocientos soles). Por otro lado, el
trece de abril de dos mil nueve, suscribió en representación del
Gobierno Regional de Áncash, la Adenda número 01 al citado
contrato, con la finalidad de acordarse una modificación
estructural en el sistema antivuelco, el cual no fue sustentado
técnicamente por el proveedor, Nissan Maquinarias, más aún si
el personal al que se le solicitó la emisión de dicho informe
técnico no es el indicado, por carecer de colegiatura
15
profesional. Aunado a ello, el veintiocho de mayo de dos mil

nueve, conjuntamente con su coprocesado Ángel Victoriano
Rondan Ramírez (subgerente de Administración Financiera), giró el
cheque número 527260489 y suscribió el Comprobante de Pago
número 2765 a favor de la empresa Nissan Maquinarias S. A., por
la suma de S/ 16 953 400 (dieciséis millones novecientos cincuenta y tres
mil cuatrocientos soles). Cabe acotar que también se le imputa
haber participado en la adquisición de setenta y nueve
ambulancias rurales tipo I-Nissan Frontier del año dos mil ocho,
por la suma de S/ 16 953 400 (dieciséis millones novecientos cincuenta y
tres mil cuatrocientos soles), pese a que el proceso de adquisición,
recepción y pago adolecía de una serie de observaciones; y
haberse apropiado de la suma de S/ 3 918 400 (tres millones
novecientos dieciocho mil cuatrocientos soles), en la medida en que, de
acuerdo con la pericia técnica mecánica valorizadora, cada
ambulancia se tasó en S/ 165 000 (ciento sesenta y cinco mil soles); sin
embargo, en su condición de gerente regional de
Administración de la entidad estatal mencionada,
conjuntamente con sus coprocesados, pagó por cada
ambulancia la suma de S/ 214 600 (doscientos catorce mil seiscientos
soles). Por tanto, al haberse adquirido setenta y nueve
ambulancias, se pagó la suma de S/ 3 918 400 (tres millones
novecientos dieciocho mil cuatrocientos soles). Por tanto, al haberse
adquirido setenta y nueve ambulancias, se pagó, de más, la
suma de S/ 3 918 400 (tres millones novecientos dieciocho mil
cuatrocientos soles), monto que se reputa fue materia de
apropiación.
iii) A Isaías Christian Castro Arquiñigo, en su condición de
subgerente de Abastecimiento y Control Patrimonial, se le
16
imputa que, el veinticinco de junio de dos mil ocho, visó los

términos de referencia para la adquisición de ochenta y cuatro
ambulancias, lo que fue remitido a la OEI. Asimismo, el nueve
de octubre de dos mil ocho, en representación del Gobierno
Regional de Áncash, visó el Contrato número 066-2008-GRA-
GRAD-SCAByCP, para la adquisición de setenta y nueve
ambulancias por la suma de S/ 16 953 400 (dieciséis millones
novecientos cincuenta y tres mil cuatrocientos soles); y, el trece de abril
de dos mil nueve, visó en representación del Gobierno Regional
de Áncash, la Adenda numero 01 al citado contrato, con la
finalidad de acordar una modificación estructural en el sistema
antivuelco, el cual no fue sustentado técnicamente por el
proveedor, Nissan Maquinarias, más aún si el personal al que se
le solicitó la emisión de dicho informe técnico no es el indicado,
por carecer de colegiatura profesional. Por otro lado, el
veintinueve de abril de dos mil nueve, autorizó la Orden de
Compra número 0248, para la adquisición de setenta y nueve
ambulancias tipo I para el Gobierno Regional de Áncash, por
un costo de S/ 16 953 400 (dieciséis millones novecientos cincuenta y
tres mil cuatrocientos soles). Asimismo, participó en la adquisición de
setenta y nueve ambulancias rurales tipo I-Nissan Frontier del
año 2008 por S/ 16 953 400 (dieciséis millones novecientos cincuenta y
tres mil cuatrocientos soles), pese a que el proceso de adquisición,
recepción y pago, adolecía una serie de observaciones; y se
apropió de la suma de S/ 3 918 400 (tres millones novecientos
dieciocho mil cuatrocientos soles), en la medida en que, de acuerdo
con la pericia técnica mecánica valorizadora, se tasó cada
ambulancia en S/ 165 000 (ciento sesenta y cinco mil soles); sin
embargo, en su condición de subgerente de Abastecimiento y
17
Control Patrimonial de la entidad estatal acotada,

conjuntamente con sus coprocesados, visó el contrato y la
adenda, así como autorizó la orden de compra, lo que conllevó
que se realice el pago de S/ 214 600 (doscientos catorce mil
seiscientos soles). Por tanto, al haberse adquirido setenta y nueve
ambulancias, se pagó, de más, la suma de S/ 3 918 400 (tres
millones novecientos dieciocho mil cuatrocientos soles), monto que se
reputa fue materia de apropiación.
iv) A Saturnino Fernández Gómez, en su condición de jefe de
Adquisiciones del Gobierno Regional de Áncash, se le imputa que,
el veintinueve de abril de dos mil nueve, autorizó la Orden de
Compra número 0248, para la adquisición de setenta y nueve
ambulancias tipo I para el Gobierno Regional de Áncash, por un
costo de S/ 16 953 400 (dieciséis millones novecientos cincuenta y tres mil
cuatrocientos soles), pese a tener conocimiento de las irregularidades
en la adquisición de las referidas ambulancias. De acuerdo con la
pericia técnica mecánica valorizadora, se tasó cada ambulancia
en S/ 165 000 (ciento sesenta y cinco mil soles); sin embargo, en su
condición de jefe de Adquisiciones, conjuntamente con sus
coprocesados, autorizó la orden de compra, lo que conllevó que
se realice el pago de S/ 214 600 (doscientos catorce mil seiscientos soles).
Por tanto, al haberse adquirido setenta y nueve ambulancias, se
pagó, de más, la suma de S/ 3 918 400 (tres millones novecientos
dieciocho mil cuatrocientos soles), monto que se reputa fue materia de
apropiación.
6.10. Por delito de negociación incompatible
v) A Richard Cabana Chauca, en su condición de gerente general,

se le imputa haberse interesado en el trámite del Oficio número
1719-2008-REGIÓN-ANCASH, sobre la contratación de una persona
18
natural o jurídica que se encargue de la provisión de bienes

(ambulancias), oficio que fue remitido a la OEI, firmando y
generando un procedimiento célere en grave perjuicio para la
entidad contratante. Asimismo, se le imputa haberse interesado en
los términos de referencia para la adquisición de ochenta y cuatro
ambulancias y, además, a través de sus funcionarios, haberse
interesado en la suscripción del contrato, la adenda y la emisión y
pago del cheque respectivo.
vi) A Francisco Vásquez Carrillo, en su condición de gerente
regional de Desarrollo Social, se le imputa haberse interesado en la
suscripción del contrato y la adenda, dándole trámite con mucha
celeridad, pese a que dicho proceso se encontraba plagado de
irregularidades.
vii) A Óscar Nicanor Ruiz Conde, en su condición de gerente
regional de Desarrollo Social, se le imputa haberse interesado en la
suscripción del contrato y la adenda, pese a que dicho proceso se
encontraba plagado de irregularidades.
viii) A Luis Julián Guillermo Azaña, en su condición de jefe de
Almacén, se le imputa haberse interesado en la suscripción del
contrato y la adenda, visando la orden de compra, pese a que
dicho proceso se encontraba plagado de irregularidades.
III. Tipo penal imputado
A. Peculado
Séptimo. El peculado es un delito de infracción del deber e implica la

tutela del patrimonio público, en la medida en que el funcionario o
servidor público, en el marco del correcto funcionamiento de la
administración pública, está al servicio de los intereses generales y del
manejo de los fondos públicos. En su modalidad dolosa, requiere que el
19
funcionario o servidor público se apropie o utilice, para sí o para otro, los

caudales y efectos patrimoniales pertenecientes a la administración
pública, cuya percepción, administración o custodia le estén confiados
por razón de su cargo.
Octavo. Los componentes de este delito han sido debidamente

interpretados en el Acuerdo Plenario número 04-2005/CJ-116, del treinta
de septiembre de dos mil cinco, emitido por las Salas Penales de la
Corte Suprema de Justicia de la República. Cinco son los aspectos
significativos a ponderar para entender cabalmente los alcances de la
citada figura delictiva. Estos son:
8.1. La existencia de una relación funcional entre el sujeto activo y los

caudales y efectos. La relación funcional alude al poder de
vigilancia y control sobre la cosa, sobre criterios de competencia
del cargo, confianza en el funcionario en virtud del cargo y el
poder de vigilar y cuidar los caudales y efectos.
8.2. La percepción consiste en captar o recibir caudales o efectos de
procedencia diversa, pero siempre lícita. La administración,
engloba las funciones activas de manera y conducción. Y la
custodia se refiere a la posesión con implicancia en la protección,
conservación y vigilancia debida por el funcionario o servidor de
los caudales o efectos públicos.
8.3. En lo atinente a la apropiación o utilización. La primera consiste en
hacer suyos caudales o efectos que pertenecen al Estado,
apartándolos de la esfera de la función de la administración
pública y colocándolos en situación de disposición. La segunda se
refiere a la acción de aprovecharse de las bondades que permite
el bien (caudal o efecto), sin tener el propósito final de apoderarse de
él para sí o para un tercero.
20
8.4. Lo concerniente al destinatario: para sí o para otro. En el primer

caso, el sujeto actúa por cuenta propia, apropiándose él mismo de
los caudales o efectos. En el segundo caso se trata del acto de
traslado del bien, de un dominio parcial y de tránsito al dominio
final del tercero.
8.5. Finalmente, con relación a los caudales y efectos, los primeros son
bienes en general de contenido económico, entre ellos, el dinero.
Por su parte, los efectos constituyen todos aquellos objetos, cosas o
bienes que representan un valor patrimonial público, incluyendo los
títulos valores negociables.
B. Negociación incompatible
Noveno. El delito de negociación incompatible, previsto en el artículo

397 del Código Penal, es una de las modalidades de corrupción que el
citado código regula, cuya orientación no está dirigida a una simple
irregularidad o anomalía administrativa, sino a actos concretos que
importen la intervención del derecho penal como ultima ratio. Así, el
verbo rector en este tipo penal es “interesarse”, esto es, poner una
especial atención en el contrato u operación, con la finalidad de
obtener un provecho propio o ajeno. Por tanto, la norma penal
subyacente al tipo penal de negociación incompatible consistiría en el
mandato al funcionario o servidor público que está a cargo de un
contrato u operación, para que actúe con objetividad y sin sesgo o
interés subalterno para cumplir eficaz y eficientemente el contrato u
operación encargada. Lo que en buena cuenta significa que el
contenido injusto del interés del funcionario se circunscribe a la
desviación de su poder, para favorecerse o favorecer a tercero, con su
gestión oficiosa o irregular, en cualquier contrato u operación en la que
ha de intervenir por razón de su cargo.
21
Décimo. Cabe precisar que este interés puede darse de manera

directa, lo que implica que el sujeto activo personalmente ponga de
manifiesto sus pretensiones particulares, en cualquier momento de la
negociación, o indirecta, esto es, hacerlo a través de otras personas, y
por acto simulado, que está referido a realizar la conducta,
aparentando que se trata de intereses de la administración pública,
cuando en realidad son particulares o personales. Este delito requiere el
dolo directo y, además, su comisión se puede dar en cualquier etapa;
esto es, en la de negociación, durante la suscripción, en su ejecución o
en la liquidación del contrato u operación.
IV. Fundamentos del Tribunal Supremo
Decimoprimero. Antes de ingresar al análisis de los recursos

impugnatorios, se debe precisar que el marco de imputación gira en
torno a la adquisición de setenta y nueve ambulancias para el
Gobierno Regional de Áncash, por la que se llegó a pagar la suma de
S/ 16 953 400 (dieciséis millones novecientos cincuenta y tres mil cuatrocientos soles),
cotizándose cada ambulancia en S/ 214 600 (doscientos catorce mil
seiscientos soles); sin embargo, de acuerdo con la pericia técnica
mecánica valorizadora, el valor real de cada ambulancia debía ser de
S/ 165 000 (ciento sesenta y cinco mil soles) y no el monto acotado. Por tanto,
al haberse adquirido setenta y nueve ambulancias, se pagó, de más, la
suma de S/ 3 918 400 (tres millones novecientos dieciocho mil cuatrocientos soles),
monto que, se reputa, fue materia de apropiación para tercero (esto
último fue introducido en la requisitoria oral).
Decimosegundo. Ahora bien, el monto pagado por la adquisición de las

mencionadas ambulancias deviene del proceso de selección que fuera
realizado por la Organización de Estados Iberoamericanos para la
Educación, Ciencia y Cultura (en adelante OEI), organismo internacional
22
que fue creado en mil novecientos cuarenta y nueve en Madrid, como

consecuencia del I Congreso Iberoamericano de Educación. En lo
atinente a dicha organización se tiene que en el II Congreso
Iberoamericano de Educación, celebrado en Quito en mil novecientos
cincuenta y cuatro, se reformaron los estatutos de dicha entidad y se
convirtió en un organismo intergubernamental con sede permanente en
Madrid. En mil novecientos cincuenta y siete, con motivo del III
Congreso Iberoamericano de Educación, reunido en Santo Domingo, se
aprobaron los actuales estatutos, en un convenio firmado por catorce
Estados miembros entre los que figuraba el Perú, que lo ratificó el ocho
de febrero de mil novecientos sesenta y dos, mediante Resolución
Legislativa número 14003, promulgada como ley de la República el
nueve de febrero del mismo año. Posteriormente, el veintisiete de
diciembre de mil novecientos setenta y ocho, dicha organización firmó
un acuerdo con el Gobierno del Perú (foja 33) para establecer una sede
de representación permanente en Lima, y otorgarle privilegios e
inmunidades.
Decimotercero. En este contexto, mediante Acuerdo de Consejo

Regional número 029-2008-GRA/CR, del veintisiete de mayo de dos
mil ocho (foja 550), el Gobierno Regional de Áncash llegó a aprobar
la autorización para que la OEI realice el proceso de selección,
entre otros, de ochenta y cuatro ambulancias con un valor
referencial de S/ 18 415 022 (dieciocho millones cuatrocientos quince mil
veintidós soles); es así que se firmó el “Convenio internacional marco de
cooperación técnico financiera y de administración de recursos entre el Gobierno
Regional de Áncash y la Organización de Estados Iberoamericanos para la
Educación, la Ciencia y la Cultura OEI N.° 054-2007” (foja 526). Realizado el

proceso de adjudicación, se otorgó la buena pro a la empresa
Nissan Maquinarias S. A., por el monto de S/ 16 953 400 (dieciséis millones
23
novecientos cincuenta y tres mil cuatrocientos soles), por la adquisición de

setenta y nueve ambulancias.
Decimocuarto. El diecisiete de septiembre de dos mil ocho, dicha

organización comunicó al Gobierno Regional de Áncash, mediante
documento número OEI-3029/2008, que el ganador de la buena pro fue
la empresa Nissan Maquinaria S. A., y solicitó que se elabore el
respectivo contrato. En este contexto, el nueve de octubre de dos mil
ocho, se firmó el Contrato número 066-2008-GRAD-SGAByCP, entre el
gerente regional de Administración, Isaías Gualberto Celestino Huamán,
y la empresa Nissan Maquinarias, representada por Carlos Enrique
Chiappori Samengo. Posteriormente, el trece de abril de dos mil nueve,
a solicitud de la empresa Nissan Maquinarias, se firmó la Adenda
número 01 al citado contrato, referida a la modificación del sistema
antivuelco de los vehículos, el cual, de acuerdo con la citada adenda,
no importó, de forma alguna, un incremento al monto originario materia
de adjudicación.
Decimoquinto. El proceso de adjudicación acotado no ha sido materia

de cuestionamiento ni de imputación, conforme se aprecia de la
acusación fiscal. Esto es así, en la medida en que mediante Oficio
número 2249-2009-MP (foja 169), el Ministerio Público solicitó a la OEI que
remita, entre otros, documentación relacionada con el proceso de
selección llevado a cabo para la adquisición de ambulancias para el
Gobierno Regional de Áncash. Es así que, mediante escrito (foja 173), la
citada organización le comunicó al señor representante de la legalidad
que, en mérito al acuerdo internacional celebrado con el Gobierno del
Perú (foja 33), gozaban de inmunidad de jurisdicción, lo que implicaba
que no fuesen sometidos a cualquier tipo de proceso jurisdiccional en el
país, motivo por el cual, indicó, era improcedente lo solicitado. Por lo
24
indicado, no obra documentación alguna sobre el expediente del

proceso de adjudicación. Lo anteriormente visto implica la imposibilidad
de afirmar que el proceso de selección estuvo plagado de
irregularidades que denoten la comisión de delito alguno. En atención a
ello, corresponde analizar los recursos impugnatorios recaídos en contra
de la sentencia emitida por la Sala Superior.
A. Impugnación del encausado Ángel Victoriano Rondan Ramírez
Decimosexto. El encausado Rondan Ramírez ha recurrido la sentencia

emitida en su contra, en el extremo que se le condena por delito de
peculado doloso. Sostiene, básicamente, que no se ha efectuado una
debida apreciación de los hechos ni compulsado adecuadamente los
medios de prueba ofrecidos por su defensa, vulnerándose, de este
modo, el derecho a la motivación de las resoluciones judiciales. Acota
que el Ministerio Público no ha acreditado con medio probatorio alguno
que aquél se haya apropiado de los caudales o efectos del Gobierno
Regional de Áncash. Precisa que tampoco se ha acreditado que el
recurrente haya dispuesto de estos para su beneficio, en tanto que su
conducta se encaminó solo a visar el comprobante de pago a favor de
la empresa Nissan Maquinarias S. A. En este contexto, indica que no se
cumple con ninguno de los elementos típicos del delito de peculado
doloso.
Decimoséptimo. De acuerdo al marco de imputación, se atribuye al

recurrente Ángel Victoriano Rondan Ramírez, básicamente, el haber
girado el cheque número 527260489 y suscrito el Comprobante de
Pago número 2765 a favor de la empresa Nissan Maquinarias S. A. por
S/ 16 953 400 (dieciséis millones novecientos cincuenta y tres mil cuatrocientos
soles), pese a que el proceso de adquisición, recepción y pago,
adolecía de una serie de observaciones, y apropiándose, de esta
25
manera, de caudales del Gobierno Regional de Áncash por el monto

de S/ 3 918 400 (tres millones novecientos dieciocho mil cuatrocientos soles),
conforme se estableció en la pericia técnica mecánica valorizadora.
Decimoctavo. Ahora bien, en el caso concreto, no es materia de

cuestionamiento que el recurrente tenga la condición de
funcionario público y que, funcionalmente, estaba ligado a los
caudales del Gobierno Regional de Áncash. Esta afirmación, por lo
demás, se encuentra acreditada con la Resolución Ejecutiva
Regional número 0171-2009-GRA/PRE, del veintitrés de marzo de
dos mil nueve, por la cual se le designa como responsable suplente
de las cuentas bancarias de la Unidad Ejecutora de la Región
Áncash. De acuerdo con su ROF, tenía, entre otras, las siguientes
funciones: a) administrar los fondos asignados al Gobierno
Regional, así como determinar la posición de caja, centralizando la
recepción de fondos fiscales por toda fuente de financiamiento; y
b) autorizar la apertura de cuentas corrientes y la ejecución de
pagos.
Decimonoveno. Asimismo, tampoco es materia de cuestionamiento

que este haya girado el cheque número 527260489 y suscrito el
Comprobante de Pago número 2765 a favor de la empresa Nissan
Maquinarias S. A., por el monto de S/ 16 953 400 (dieciséis millones
novecientos cincuenta y tres mil cuatrocientos soles), ambos del veintiocho
de mayo de dos mil nueve; toda vez que así lo aceptó en el
plenario. En cuanto a los actos administrativos, del análisis del caso
concreto se debe indicar que estos fueron realizados conforme al
ámbito de sus funciones –establecido en el ROF–, pues ostentaba el
cargo de subgerente de Administración Financiera de la citada
entidad estatal. Cabe acotar que este pago se realizó en fecha
26
anterior, en mérito del contrato suscrito entre el gerente regional de

Administración y la empresa Nissan Maquinarias –ganadora de la
buena pro–, por la adquisición de las setenta y nueve ambulancias.
Vigésimo. Ahora bien, lo que es objeto de cuestionamiento, de acuerdo

al marco fáctico de imputación, es que dicho pago fue realizado, pese
a la existencia de una serie de observaciones en el procedimiento, para
ejecutar el desembolso del dinero por la adquisición de las setenta y
nueve ambulancias. Al respecto, es necesario indicar que, en
contraposición, de acuerdo con la ampliación del informe pericial
contable (foja 3291), suscrito por la perito Dula Florinda Cerrate Ramírez y
ratificada por ella en juicio oral (foja 4927), respecto al proceso de pago,
se llegó a concluir lo siguiente:
La fase de girado se cumplió con los procedimientos establecidos en las

normas legales, el trámite de pago que se siguió con toda la
documentación ya procesada que han sido remitidos a la Gerencia de
Administración del Gobierno Regional de Ancash que estuvo debidamente
visada por las oficinas que participaron en las anteriores etapas, para pasar
a la Sub Gerencia de Administración, Fiscalización y finalmente a Tesorería,
donde se giró el cheque para el pago correspondiente (sic).
Esto es, no se hizo observación alguna sobre el procedimiento de pago.

Independientemente de ello, se cuestiona además que el pago se dio:
“Sin contar con la conformidad y omitiendo las recomendaciones del área de
Fiscalización del Gobierno Regional”, tal como, además, lo ha señalado la
Sala Superior en la sentencia materia de impugnación. Sobre este
punto, Luis Julián Guillermo Azaña, quien se desempeñaba como jefe
de Almacén de la entidad acotada, señaló, en su manifestación
preliminar (foja 497), que recibió las setenta y nueve ambulancias el ocho
de mayo de dos mil nueve, en cumplimiento de la orden de compra.
Dicha orden de compra, que a su vez es guía de internamiento (foja 624),
27
tiene la firma de la citada persona con la siguiente consignación: “Recibí

conforme” como fe del mismo. En dicho documento se encuentra
detallada la descripción del vehículo recibido, esto es, marca, modelo,
clase y año de fabricación, entre otros. Por tanto, al haberse dado
dicha conformidad previamente al giro del cheque y a la suscripción de
la orden de pago, no se verifica, en este extremo, acción ilícita en la
conducta del recurrente.
Vigesimoprimero. Por otro lado, en cuanto a la omisión de las

recomendaciones del Área de Fiscalización –también cuestionada–; en
autos obra el Memorándum 786 (foja 621) suscrito por el gerente regional
de Administración y dirigido al recurrente Ángel Rondan Ramírez, quien
le indicó que se había concluido que las referidas recomendaciones son
documentos complementarios solicitados que no tienen incidencia
administrativa para el pago, ya que se habían adjuntado otros
documentos como las guías de remisión con la firma del jefe de
Almacén, Julián Guillermo Azaña, el Memorándum número 1701-2009-
REGIÓN ANCASH-GRAD-SGAByCP, la Orden de Compra número 0248,
la aprobación del proyecto de inversión para la adquisición de
ambulancias (Acuerdo de Consejo Regional número 029-2008-GRA/CR), carta
fianza de fiel cumplimiento que contaba con vencimiento hasta el
treinta de julio de dos mil nueve, por S/ 1 695 340 (un millón seiscientos
noventa y cinco mil trescientos cuarenta soles), y facturas, entre otros.
Vigesimosegundo. Aunado a ello se tiene la testimonial de Vernardina

Cecilia Alvarado Macedo (foja 1864), quien fuese responsable del Área
de Fiscalización del Gobierno Regional de Áncash y suscribiente del
Informe número 001-2009-REGIÓN ANCASH-GRAD/SGAF-FISC (foja 1823),
en el que se llegó a establecer una serie de observaciones que, de
acuerdo con su testimonio, ratificado en el plenario (foja 4932), se
28
subsanaron con posterioridad, adjuntando, para tal efecto, copia de los

documentos que fueron materia de observación (fojas 1824 a 1863).
Vigesimotercero. Cabe acotar que en la requisitoria oral se precisa que

el recurrente se apropió, para un tercero, de la suma de S/ 3 918 400 (tres
millones novecientos dieciocho mil cuatrocientos soles), monto que
correspondería al producto de una sobrevaloración dada a las
ambulancias adquiridas. Al respecto, el término “apropiación”, en el
delito de peculado, ha sido definido en el Acuerdo Plenario número 4-
2005/CJ-116 de la forma siguiente: “Estriba en hacer suyo caudales o efectos
que pertenecen al Estado, apartándolo de la esfera de la función de la Administración
Pública y colocándose en situación de disponer de los mismos”. Esto es, supone

que el sujeto activo ejerza disposición patrimonial del bien.
Vigesimocuarto. Esta apropiación ha de ser para sí o para un tercero

(otro). Esta última conducta ha sido definida por el citado acuerdo
plenario, de la siguiente manera: “Se refiere al acto de traslado del bien, de un
dominio parcial y de tránsito al dominio final del tercero”. En palabras simples, el
funcionario o servidor público se ha debido apropiar de los caudales o
efectos, obteniendo disponibilidad patrimonial efectiva con este acto,
de manera tal que lo apropiado, sea finalmente destinado al tercero.
Vigesimoquinto. En el caso concreto, el hecho de haber girado el

cheque número 527260489 y suscrito el Comprobante de Pago número
2765 a favor de la empresa Nissan Maquinarias S. A., por la suma de
S/ 16 953 400 (dieciséis millones novecientos cincuenta y tres mil cuatrocientos soles),
no implica peculado por apropiación; al haberse determinado que
dichas acciones administrativas se realizaron dentro del marco de sus
funciones. El cobro del dinero antes mencionado, efectuado por la
empresa Nissan Maquinarias S. A., se dio dentro del marco de la
29
suscripción del contrato –en el cual el recurrente no participó– entre dicha

empresa y el Gobierno Regional de Áncash, luego de que la OEI la
declarara ganadora del proceso de adjudicación para proveer de
setenta y nueve ambulancias; proceso que no ha sido materia de
cuestionamiento por parte del Ministerio Público. En tal virtud, al no existir
medios de prueba que sustenten la responsabilidad del recurrente, su
recurso de nulidad debe ser estimado y debe decretarse su
correspondiente absolución, por insuficiencia probatoria, conforme al
artículo 284 del Código de Procedimientos Penales.
B. Impugnación del encausado Isaías Gualberto Celestino Huamán
Vigesimosexto. En su recurso de nulidad, el encausado Celestino

Huamán, básicamente, alega que se ha vulnerado el principio
acusatorio y de congruencia procesal, al condenársele por una base
fáctica distinta a la que fue materia del presente proceso. Acota que
no se ha individualizado a cuál de los autores prestó el supuesto auxilio,
así como cuáles son los alcances de su colaboración y las funciones
que ha quebrantado. Precisa que existe una errónea valoración de los
elementos de convicción e indica que el hecho de solicitar celeridad al
Área de Fiscalización no ha generado ningún peligro o lesión del bien
jurídico tutelado, en tanto que es parte de la eficiencia con que se
debe actuar en la administración pública. Finaliza sus agravios y señala
que existe ausencia de valoración de los elementos de convicción,
pues sus acciones determinan que no recibió ni dio conformidad a los
vehículos ingresados, habiendo cumplido con su rol dentro de la
administración pública.
Vigesimoséptimo. Así, en el caso concreto, se encuentra acreditado

que el sentenciado era funcionario público (gerente regional de
Administración) y que tenía relación funcional con los caudales, en mérito
30
de la Resolución Ejecutiva Regional número 0171-2009-GRA/PRE, del

veintitrés de marzo de dos mil nueve (foja 1119), de lo que se desprende
que formaba parte del cuadro de personal responsable de las cuentas
bancarias de la Unidad Ejecutora del Gobierno Regional de Áncash.
Conforme al Rof de la entidad estatal acotada, la Gerencia Regional
de Administración era el órgano encargado de la gestión del potencial
humano, patrimonial y recursos materiales, económicos y financieros.
Así, se señala que, entre otras, tenía como función: “Dirigir, controlar y
ejecutar los sistemas de contabilidad, tesorería, abastecimientos, personal y ejecución
presupuestal”.
Vigesimoctavo. Ahora bien, conforme a la acusación fiscal, al

recurrente, básicamente, se le imputa haber visado los términos de
referencia y la suscripción del Contrato número 066-2008-GRA-GRAD-
SCAByCP, para la adquisición de setenta y nueve ambulancias por la
suma de S/ 16 953 400 (dieciséis millones novecientos cincuenta y tres mil
cuatrocientos soles). Al respecto, se debe indicar que los actos
administrativos acotados guardan íntima relación con el proceso de
adjudicación llevado a cabo por la Organización de Estados
Iberoamericanos para la Educación, Ciencia y Cultura (OEI), el cual
no ha sido materia de cuestionamiento por parte del Ministerio
Público, pues dicha organización gozaba de inmunidad, en mérito de
un acuerdo firmado con el Estado peruano. En tal sentido, luego de
haber culminado dicho proceso y haberse dado como ganadora a
la empresa Nissan Maquinarias S. A., correspondía que se efectúe la
firma de contrato. Por tanto, dicho acto no constituye indicio de
peculado.
Vigesimonoveno. Por otro lado, en cuanto a la imputación por la

suscripción de la Adenda número 01, realizada al Contrato número
31
066-2008-GRA-GRAD-SCAByCP, se debe señalar que el recurrente, en su

declaración en el plenario, precisó que antes de que firmase el pedido
de adenda, solicitado por la empresa ganadora Nissan Maquinarias
S. A., que propuso una modificación en el sistema antivuelco de las
ambulancias adquiridas, elevó dicho pedido a Asesoría Legal de la
institución, para que emita un informe al respecto. Tal afirmación se
encuentra corroborada con el Memorándum número 472-2009-
GRA/GRAD-SGABYCP (foja 10 del anexo 5), suscrito por el recurrente y
dirigido al Área de Asesoría Legal.
Trigésimo. Antes de emitirse la opinión legal, se solicitó un informe al Área

Usuaria, por lo que el director de Asesoría Legal, mediante
Memorándum número 320-2009-GRA/ORAJ (foja 88 del anexo 5), le solicitó
al gerente regional de Desarrollo Social (Óscar Ruiz Conde), que su
despacho disponga que la Dirección Regional de Salud emita un
informe técnico que corrobore o sustente la propuesta de Nissan
Maquinarias, pedido que fue materializado mediante Oficio número
266-2009-REGIÓN ANCASH (foja 46 del anexo 5).
Trigésimo primero. En este contexto, se emitió el Informe número 01-2009-

REGIÓN ANCASH DIRES-A-H “VRG”/USG/J (foja 37 del anexo 5), suscrito
por Marco Valencia Rincón, jefe de la Unidad de Servicios Generales
de la Dirección Regional de Salud de Áncash, el cual recomienda,
luego de sustentar su posición: “Acoger la propuesta planteada por el
proveedor Nissan Maquinarias S.A., en cuanto a la solicitud de modificación del
sistema de protección anti-vuelco de la ambulancia”. Este Informe Técnico fue

remitido al director de la Oficina de Asesoría Jurídica, tal como se
desprende del Oficio número 0667-2009-REGIÓN ANCASH-DIRES/DG
(foja 36 del anexo 5). Es así que dicha Dirección, mediante el Informe
Legal número 191-2009-GRA/ORAJ (foja 74 del anexo 5), opina
32
favorablemente por la suscripción de la adenda al Contrato número

066-2008-GRA-GRAD-SCAByCP. El informe legal fue remitido con los
recaudos pertinentes al recurrente, mediante Memorándum número
427-2009-GRA/ORAJ (foja 1 del anexo 5), y se le informó que se opinó
favorablemente por la procedencia de la suscripción de la adenda
relacionada con el sistema antivuelco de las ambulancias, solicitada
por Nissan Maquinarias S. A.; lo que motivó que el encausado firme la
adenda cuestionada.
Trigésimo segundo. En este contexto, es posible inferir que la firma de

dicho documento no fue realizada en mérito de un trámite irregular o
con fines de apropiarse de dinero alguno. Esto es así, en la medida en
que la suscripción de dicha adenda no implicó un aumento en el
monto estipulado para la adquisición de las setenta y nueve
ambulancias. Se cuestiona que el informe técnico del sistema
antivuelco no fue realizado por persona apropiada; sin embargo, al no
existir desprendimiento patrimonial por dicho acto administrativo, esto
no constituiría indicio de peculado sino una anomalía administrativa.
Trigésimo tercero. Por otro lado, también se imputa al recurrente

haber girado el cheque número 527260489 y suscrito el Comprobante
de Pago número 2765 a favor de la empresa Nissan Maquinarias S. A.
por S/ 16 953 400 (dieciséis millones novecientos cincuenta y tres mil
cuatrocientos soles), pese a que el proceso de adquisición, recepción y
pago adolecía de una serie de observaciones; apropiándose de esta
manera, de caudales del Gobierno Regional de Áncash por el monto
de S/ 3 918 400 (tres millones novecientos dieciocho mil cuatrocientos soles). Al
respecto, ya se ha llegado a determinar, al momento de resolver los
agravios del encausado Ángel Victoriano Rondan Ramírez, que el
procedimiento para el pago no fue irregular y que se dio dentro del
33
marco de la ley. Por consiguiente, en este extremo también

corresponde estimar el recurso impugnatorio del recurrente y declarar
su absolución por insuficiencia probatoria, conforme al artículo 284
del Código de Procedimientos Penales.
C. Impugnación del encausado Isaías Christian Castro Arquiñigo
Trigésimo cuarto. En el presente caso, el recurrente Castro Arquiñigo

ha sido condenado como “cómplice” del delito de peculado por
apropiación en su condición de subgerente de Abastecimiento y
Control Patrimonial del Gobierno Regional de Áncash. De acuerdo al
marco de imputación, se le imputa haber visado los términos de
referencia para la adquisición de ochenta y cuatro ambulancias y el
haber visado el Contrato número 066-2008-GRA-GRAD-SCAByCP,
para la adquisición de setenta y nueve ambulancias por la suma de
soles). Al respecto, como ya se ha indicado precedentemente, estos
hechos tienen vinculación con el proceso de adjudicación llevado a
cabo por la OEI para adquirir las citadas ambulancias, el cual no es
materia de cuestionamiento por parte del Ministerio Público.
Trigésimo quinto. Por otro lado, también se le imputa haber visado la

Adenda número 01 al mencionado contrato; sin embargo, como se ha
señalado en la impugnación del sentenciado Isaías Gualberto
Celestino Huamán, la suscripción de dicha adenda se encontraba
justificada, de ahí que su visación no tenga contenido penal. A su vez,
se le cuestiona haber autorizado la Orden de Compra número 0248
para la adquisición de setenta y nueve ambulancias. Al respecto,
dicho documento (foja 624) es a su vez guía de internamiento,
encontrándose suscrito por el jefe del Almacén en el rubro “Recibí
conforme”, quien ha señalado en el proceso que recibió las setenta y
34
nueve ambulancias con los detalles descritos en el mencionado

documento, por lo que le dio conformidad; en consecuencia,
tampoco tiene contenido penal.
Trigésimo sexto. En cuanto al valor real que debió pagarse por las
ambulancias, la diferencia entre lo pagado y lo que debió costar, de
acuerdo con la requisitoria oral, es materia de apropiación para
tercero. Sin embargo, es necesario indicar que la pericia que justificaría
tal acción fue realizada un año después, cuando los vehículos ya
habían sido usados; además, se tomó como muestra un solo vehículo y
se encontraron deficiencias que fueron anotadas en dicho examen, lo
que no reflejaría una evaluación adecuada, ya que el paso del
tiempo, las condiciones de uso y el lugar importarían un mayor
desgaste.
Trigésimo séptimo. Cabe precisar que la orden de compra-guía de

internamiento mencionada refleja las condiciones en las que llegaron
las ambulancias, tal como se puede apreciar del rubro “Descripción”
del mencionado documento, las que se condicen con los peritajes
técnico mecánicos de vehículo automotor, del quince de junio de dos
mil nueve (foja 129 y 132), realizados por peritos de la PNP, los que
concluyeron que: “El vehículo inspeccionado corresponde a una camioneta
panel con carrocería operativo conforme al reglamento nacional de vehículos”. En
este contexto, al no haberse comprobado que aportó con su

conducta a la apropiación de caudales del Gobierno Regional de
Áncash, el recurrente debe ser absuelto por insuficiencia probatoria,
conforme el artículo 284 del Código de Procedimientos Penales.
Trigésimo octavo. Finalmente, se debe indicar que el Ministerio Público

llegó a impugnar el extremo de la pena impuesta a los encausados
35
Isaías Gualberto Celestino Huamán, Ángel Victoriano Rondán Ramírez

y Cristian Arbaham Castro Arquiñigo; sin embargo, al encontrarse
indemne el principio de presunción de inocencia, conforme a lo
glosado con anterioridad, no resulta factible emitir pronunciamiento al
respecto.
D. Impugnación del extremo absolutorio efectuado por el Ministerio

Público y el procurador público especializado en delitos de corrupción,
por el delito de peculado doloso y negociación incompatible
Trigésimo noveno. Los impugnantes, en sus respectivos recursos de

nulidad, cuestionaron la absolución de Israel Saturnino Fernández
Gómez, jefe de Adquisiciones del Gobierno Regional de Áncash, por
el delito de peculado doloso, y le imputaron haber autorizado la
Orden de Compra número 0248, para la adquisición de setenta y
nueve ambulancias para la entidad estatal acotada por un costo de
soles), pese a tener conocimiento de las irregularidades en la
adquisición de las referidas ambulancias, habiendo aportado con su
conducta a la apropiación de S/ 3 918 400 (tres millones novecientos
dieciocho mil cuatrocientos soles), en favor de la empresa Nissan
Maquinarias.
Cuadragésimo. Sostienen, básicamente, que el encausado absuelto

tenía el deber de verificar que el proceso de contratación sea llevado
adecuadamente; sin embargo, pese a no contar con ninguna
documentación referida a los antecedentes de la adquisición de las
ambulancias, visó la Orden de Compra número 0248 por el monto de
soles), emitida a favor de la empresa Nissan Maquinarias S. A., haciendo
posible el trámite de pago a favor de la empresa en referencia.
36
Cuadragésimo primero. Al respecto, conforme al agravio acotado, se

debe indicar, en principio, que el recurrente no participó
funcionalmente del proceso de contratación de las setenta y nueve
ambulancias. Como ya se señaló reiteradamente en la presente
ejecutoria, este proceso fue encargado a la OEI, organismo
internacional que dio como ganador a Nissan Maquinarias, y cuyo
mérito se suscribió el Contrato número 066-2008-GRA-GRAD-SCAByCP;
procedimiento que no ha sido materia de cuestionamiento por parte
del Ministerio Público.
Cuadragésimo segundo. La visación efectuada por el recurrente, como

jefe de Adquisiciones del Gobierno Regional de Áncash, fue realizada
en el marco de sus atribuciones funcionales. Dicho documento también
fue visado por Christian Castro Arquiñigo, subgerente de
Abastecimiento y Control Patrimonial, cuya conducta, conforme se ha
indicado precedentemente, no tiene visos de ilegalidad penal.
Además, cuenta con la firma de Julián Guillermo Azaña, jefe de
Almacén, quien señaló en el proceso que recibió las setenta y nueve
ambulancias con los detalles descritos en el mencionado documento,
dándole conformidad.
Cuadragésimo tercero. En tal sentido, lejos de haberse desvirtuado la

presunción constitucional de inocencia que ampara al acusado (artículo
2, numeral 24, literal e, de la Constitución Política del Estado) se constata una
insuficiencia de prueba de cargo que no permite crear convicción de
culpabilidad. Por ende, al no encontrarse acreditada su responsabilidad
penal por el delito incriminado, es razonable ratificar la sentencia
absolutoria dictada a su favor. En esas circunstancias, el recurso del
fiscal superior y de la parte civil no es amparable.
37
Cuadragésimo cuarto. Por otro lado, los recurrentes también

impugnaron la absolución de los encausados Richard Cabana Chauca,
Francisco Vásquez Carrillo, Luis Julián Guillermo Azaña y Óscar Nicanor
Ruiz Conde, como autores del delito negociación incompatible, en
agravio del Gobierno Regional de Áncash. Al respecto, cuestionaron
como agravio principal que la Sala Penal Superior haya considerado
erróneamente que el ámbito de comisión del delito imputado solo
alcanzaría a la fase de selección de un proceso o procedimiento de
contratación pública; cuando, por imperio de la ley, se tienen tres fases:
a) actos preparatorios, b) selección y c) ejecución; y en cualquiera de
ellas se puede dar la materialidad del delito.
Cuadragésimo quinto. Así, debemos indicar que al encausado Richard

Cabana Chauca, en su condición de gerente general, se le imputa
haberse interesado en el trámite del Oficio número 1719-2008-REGIÓN
ANCASH, referente a la contratación de una persona natural o jurídica
que se encargue de la provisión de bienes (ambulancias), oficio que fue
remitido a la OEI, dando procedimiento célere a este documento, en
grave perjuicio para la entidad contratante. Asimismo, se le atribuye
haberse interesado en los términos de referencia para la adquisición de
las ambulancias, así como en la suscripción del contrato, la adenda y
en la emisión y pago del cheque por la adquisición de las mencionadas
ambulancias.
Cuadragésimo sexto. Al respecto, se debe indicar que el interés en el

trámite del mencionado oficio y en los términos de referencia para la
adquisición de las ambulancias no puede ser constitutivo del delito de
negociación incompatible, dado que estos dieron origen al proceso de
selección que fue realizado, como ya se ha mencionado, por la OEI,
proceso que no ha sido materia de cuestionamiento. En cuanto al
38
interés en la suscripción del contrato, la adenda y el proceso de pago

por la adquisición de las ambulancias; se debe indicar que estos
tampoco constituyen acción ilícita alguna, ya que se han dado como
consecuencia del proceso de selección acotado; aunado al hecho de
que, conforme se ha desarrollado al momento de dar respuesta a los
recursos de nulidad ya glosados, no se ha podido determinar acción
que denote ilicitud en el trámite precitado.
Cuadragésimo séptimo. Por otro lado, en lo atinente a los encausados

Francisco Vásquez Carrillo, Luis Julián Guillermo Azaña y Óscar Nicanor
Ruiz Conde, funcionarios del Gobierno Regional de Áncash, se les
imputa haberse interesado en la suscripción del contrato y la adenda
tantas veces acotada. De igual forma, el devenir de un proceso de
selección que no ha sido materia de cuestionamiento, así como
haberse determinado que el proceso de suscripción de contrato y
adenda no tiene visos de ilicitud, la absolución en favor de los
encausados debe mantenerse, conforme el artículo 284 del Código de
Procedimientos Penales.
DECISIÓN
Por estos fundamentos, los integrantes de la Sala Penal Permanente de

la Corte Suprema de Justicia de la República:
I. DECLARARON HABER NULIDAD en la sentencia del veintinueve de

enero de dos mil dos mil dieciocho, emitida por la Sala Penal
Liquidadora Permanente de Huaraz de la Corte Superior de Justicia
de Áncash, en el extremo que condenó a Isaías Gualberto
Celestino Huamán, Ángel Victoriano Rondán Ramírez (como autores)
y Cristian Arbaham Castro Arquiñigo (como cómplice), a cuatro años
de pena privativa de libertad, suspendida por el periodo de tres
39
años, por la comisión del delito de peculado doloso, en agravio del

Gobierno Regional de Áncash; en consecuencia, REFORMÁNDOLA,
los absolvieron por el delito y agraviado en mención. MANDARON
que se anulen los antecedentes policiales y judiciales que dieron
lugar al presente proceso y que se archive definitivamente lo
actuado.
II. NO HABER NULIDAD en la misma sentencia, en el extremo que
absolvió a Israel Saturnino Fernández Gómez como cómplice del
delito de peculado doloso, en agravio del Gobierno Regional de
Áncash.
III. NO HABER NULIDAD en la misma sentencia, en el extremo que
absolvió a Richard Cabana Chauca, Francisco Vásquez Carrillo,
Luis Julián Guillermo Azaña y Óscar Nicanor Ruiz Conde, como
autores del delito de negociación incompatible, en agravio del
Gobierno Regional de Áncash.
IV. NO HABER NULIDAD en lo demás que es materia de recurso. Hágase
saber; y los devolvieron.
S. S.
SAN MARTÍN CASTRO
FIGUEROA NAVARRO
PRINCIPE TRUJILLO
SEQUEIROS VARGAS
CHÁVEZ MELLA
FN/ulc
40

Resolucion 10 2019112911344600041511

Cargado por

Información del documentohacer clic para expandir la información del documento

Copyright:

Formatos disponibles

Resolucion 10 2019112911344600041511

Cargado por

Información del documento

Título original

Derechos de autor

Formatos disponibles

Compartir este documento

Compartir o incrustar documentos

Opciones para compartir

¿Le pareció útil este documento?

¿Este contenido es inapropiado?

Copyright:

Formatos disponibles

Resolucion 10 2019112911344600041511

Cargado por

Copyright:

Formatos disponibles

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA CORTE

SUPREMA - Sistema de Notificaciones Electronicas

DE JUSTICIA RECURSO DE NULIDAD N.° 722-2018

Lima, treinta de enero de dos mil diecinueve

VISTOS: los recursos de nulidad contra la

Conde, como autores del delito contra la administración pública-

Intervino como ponente el señor juez supremo Figueroa Navarro.

Primero. El señor fiscal superior fundamenta su recurso de nulidad (foja

1.1. Respecto a la absolución del encausado Israel Saturnino Fernández

1.2.1. La Sala Penal consideró erróneamente que el ámbito de

la fase de selección de un proceso o procedimiento de

1.3.1. La Sala Superior fijó la pena en el tercio inferior,

Segundo. El señor procurador público especializado en delitos de

2.1. Respecto a la absolución del encausado Israel Saturnino Fernández

2.1.1. El encausado tuvo participación directa en el procedimiento

2.2.1. Los encausados, en su condición de funcionarios de

Tercero. El encausado Ángel Victoriano Rondan Ramírez fundamenta su

3.1. No se efectuó una debida apreciación de los hechos ni se

3.2. El recurrente no suscribió el Contrato de Adenda número 01 al

del pago se exigió con toda la documentación”; medio de prueba no

después de que la Fiscalizadora señalara en el Informe número 001-

Cuarto. El encausado Christian Castro Arquiñigo fundamenta su recurso

4.1. Respecto a la excepción de naturaleza de acción.

de comprar, proceso de licitación, contrato y adenda; así como

GRA/GGR, medio de prueba que no ha sido ofrecido ni actuado

Quinto. El encausado Isaías Gualberto Celestino Huamán fundamenta

5.1. El autor de la pericia técnica mecánica valorizadora, quien no fue

proceso penal. Tampoco puede ser considerada un informe de

II. Imputación fiscal

6.1. El nueve de octubre de dos mil ocho, el Gobierno Regional de

equipos médicos, accesorios y equipamiento adicional a favor del

6.3. El diecisiete de septiembre de dos mil ocho, la OEI remitió el

Local LPL número 12-2008-OEI-GRA–, que comunicó la adjudicación de

del contrato; sin embargo, le hizo conocer la existencia de un

Internamiento número 248, del veintinueve de abril de dos mil

i) A Ángel Victoriano Rondan Ramírez, en su condición de

haberse apropiado de la suma de S/ 3 918 400 (tres millones

profesional. Aunado a ello, el veintiocho de mayo de dos mil

imputa que, el veinticinco de junio de dos mil ocho, visó los

Control Patrimonial de la entidad estatal acotada,

v) A Richard Cabana Chauca, en su condición de gerente general,

natural o jurídica que se encargue de la provisión de bienes

III. Tipo penal imputado

Séptimo. El peculado es un delito de infracción del deber e implica la

funcionario o servidor público se apropie o utilice, para sí o para otro, los

Octavo. Los componentes de este delito han sido debidamente

8.1. La existencia de una relación funcional entre el sujeto activo y los

8.4. Lo concerniente al destinatario: para sí o para otro. En el primer

Noveno. El delito de negociación incompatible, previsto en el artículo

Décimo. Cabe precisar que este interés puede darse de manera

IV. Fundamentos del Tribunal Supremo

Decimoprimero. Antes de ingresar al análisis de los recursos

Decimosegundo. Ahora bien, el monto pagado por la adquisición de las

que fue creado en mil novecientos cuarenta y nueve en Madrid, como

Decimotercero. En este contexto, mediante Acuerdo de Consejo

Educación, la Ciencia y la Cultura OEI N.° 054-2007” (foja 526). Realizado el

novecientos cincuenta y tres mil cuatrocientos soles), por la adquisición de

Decimocuarto. El diecisiete de septiembre de dos mil ocho, dicha