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Responsabilidad Social y Creación del Valor Compartido

Clase 2. Caso Práctico

Wilmar Humberto López Vélez

Uniasturias

Gerencia de Proyectos

Camilo Martínez

06 de octubre de 2.021
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Clase 2. Caso Práctico: Enunciado

Enunciado

1. A qué se refiere la característica voluntaria de la Responsabilidad Social Empresarial

(RSE)

2. Desarrolla las etapas donde la Responsabilidad Social tiene un Enfoque Interno

3. Define la Responsabilidad Social según la Norma ISO 26000

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Justificación

Las empresas como parte activa de la comunidad se rigen por una serie de normas

establecidas por la sociedad y por el gobierno como garante de derechos y deberes de los actores

de la misma, y están íntimamente liadas al desarrollo económico, social y ambiental de dicha

comunidad. Relacionarse adecuadamente con los demás actores de la sociedad, le permite a las

empresas enmarcarse en procesos de desarrollo sostenible que garanticen el bienestar actual y

futuro de toda la comunidad (Relación empresa sociedad, Uniasturias, 2021)

Entender el concepto de responsabilidad social empresarial (RSE), sus características, los

factores que incluyen en ella, su evolución histórica y la importancia que tiene para nuestras

organizaciones, hará que entendamos mejor nuestro papel dentro de la sociedad y nuestra

responsabilidad con las futuras generaciones a través de la implementación de prácticas y

políticas de desarrollo sostenible en nuestros procesos y proyectos.

En este sentido, “a las organizaciones les resultaría más provechoso ayudarnos a captar y

desarrollar nuestros sentimientos de generosidad y colaboración, en lugar de asumir que nos

movemos únicamente por nuestro propio interés” (Resumen autorizado de: El Pingüino y el

Leviatán, por Yochai Benkler, © 2012 Deusto).

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Solución del Caso Práctico

1. A qué se refiere la característica voluntaria de la Responsabilidad Social Empresarial

Se refiere a la predisposición o iniciativa de la empresa a involucrarse activamente en el

mejoramiento de la calidad de vida de la comunidad en la que desarrolla su actividad económica,

independientemente de la presión social y/o las exigencias normativas que le impone el estado.

Es claro que este carácter de voluntariedad de la RSE se ha ido perdiendo y tiende a

desaparecer básicamente por 2 aspectos:

a) Porque cada vez es más activa la participación de los grupos sociales y/o las

comunidades en la exigencia de sus derechos y la solución a sus necesidades insatisfechas. Es

así como hoy día en casi todos los proyectos se cuenta con participación de las juntas de acción

comunal y/o veedurías ciudadanas que realizan seguimiento no sólo al desarrollo del proyecto en

sí, sino también al papel que los diferentes actores desempeñan en él, en procura de alcanzar los

objetivos propuestos.

Las comunidades ya están más preparadas, conocen sus derechos y los mecanismos que

les brinda la ley para exigirlos.

b) Porque el estado en su calidad de garante de los derechos constitucionales de los

individuos y las comunidades, cada vez genera más normatividad en torno a los requerimientos

que deben cumplir las organizaciones desde el punto de vista técnico, social, medio ambiental y

de seguridad y salud en el trabajo, en desarrollo de sus proyectos, cualquiera sea la razón social

de la empresa.

El tema normativo ha hecho más complejo y costoso el desarrollo de las actividades

económicas de muchas empresas, pero hay que adaptarse y generar estrategias que permitan

armonizar los fines económicos de las organizaciones con la realidad de su entorno.

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Así las cosas, considero que las organizaciones o empresas deben acoger los elementos de

la RSE como parte de su visión empresarial y sus políticas de calidad, rompiendo paradigmas y

estableciendo estrategias internas de trabajo que les permitan no sólo obtener beneficios

económicos, sino también mejorar la calidad de vida de sus colaboradores y la comunidad que

los rodea.

Por lo general, cuando dejamos de ver algo como una obligación y lo vemos como una

oportunidad le sacamos mayor provecho.

2. Desarrolla las etapas donde la Responsabilidad Social tiene un Enfoque Interno

Entendiendo que las empresas deben adaptar su organigrama, procesos, planes y

programas de trabajo a las nuevas realidades que les imponen tanto el estado como la sociedad y

el medio ambiente; es necesario caminar por los diferentes pasos que conlleva involucrar de un

todo el concepto de RSE al interior de una organización, así:

- Primero debemos entender los beneficios que la RSE puede traer para la empresa y

preparar tanto a los socios y directivos, como al personal en el papel que se espera jueguen en

los cambios que se generaran en la empresa. Si el personal no adquiere conciencia de la

importancia de involucrarse en este proceso será muy difícil su adaptación. Preparar

necesariamente implica capacitar.

- Es necesario realizar un Diagnóstico del estado interno de la empresa (Análisis de

organigrama, procesos, políticas, practicas, etc) y del entorno (clientes, proveedores,

comunidades, referentes normativos, etc) como punto de partida para determinar las mejoras que

se deben realizar en todo el esquema de trabajo y/o negocio. Si no nos conocemos difícilmente

sabremos que debemos mejorar.

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- Tras preparar la empresa y realizar su diagnóstico, pasamos a definir las estrategias que

debemos implementar para lograr los objetivos propuestos, siendo importante establecer

parámetros de comparación o indicadores que permitan evaluar la eficacia de la etapa de

implantación. Esta etapa obedece al proceso de planificación estratégica, vital para la

reestructuración que se pretende lograr. Los directivos deben tener claro el horizonte hacia el

cual desean apuntar y traducir ese pensamiento en líneas estratégicas posibles de desarrollar y

disponer los recursos para hacerlo posible.

- Ahora bien, la empresa debe priorizar las estrategias a implantar según sus recursos y

potencialidades, enfocada siempre en alcanzar las metas propuestas durante el proceso de

planificación estratégica. Es importante direccionar esfuerzos en arraigar la cultura de la RSE en

cada uno de los procesos que desarrolla la empresa y en el personal que participa en ellos.

Como todos los cambios generan resistencia, lograr una eficiente etapa de implantación

del concepto de RSE al interior de la organización, será clave para el éxito de este proceso y el

futuro de la empresa.

- Para que el cambio se dé y perdure en el tiempo, es muy importante establecer canales

claros y fluidos de comunicación con los grupos de interés de la organización tanto internos

como externos.

Internamente, el diálogo permanente con los colaboradores genera sentido de pertenencia

e involucra más activamente al personal que se siente incluido y parte importante del proceso de

mejora de la empresa.

Externamente, debemos establecer y generar los medios para difundir y socializar con la

comunidad lo que estamos haciendo en temas de respeto por los trabajadores, nuestros clientes,
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la sociedad y el medio ambiente; esto obedece a la necesidad de mejorar la percepción que los

demás tienen de la empresa como una ventaja competitiva.

- Una vez puesto en marca nuestro plan de RSE, es importante realizar seguimiento y

medición de los resultados obtenidos para establecer si las estrategias han sido eficaces y bien

implantadas, detectar desviaciones en nuestros procesos e identificar opciones de mejora.

Si no se miden los resultados obtenidos no es posible realizar una adecuada

retroalimentación del proceso de planificación estratégica que se pretende desarrollar al interior

de la empresa.

- Tras el análisis de resultados, etapa de revisión, debemos identificar las opciones de

mejora y retroalimentar el proceso; el cual es dinámico en la medida que se van identificando y

corrigiendo las debilidades y se van fortaleciendo las potencialidades de la empresa y su recurso

humano.

Detectar fallas a tiempo en el sistema de gestión de calidad enfocado en la RSE, nos

permitirá ajustar oportunamente los procesos y establecer las acciones correctivas, preventivas y

de mejora que se requieren para optimizar el funcionamiento de la empresa, conservando los

intereses económicos de sus socios o inversionistas.

3. Define la Responsabilidad Social según la Norma ISO 26000

Básicamente es tener claro que toda acción tiene una reacción y en este caso nuestras

acciones y/o decisiones como empresa se traducen en consecuencias positivas o negativas para

nuestro entorno y nosotros mismos; por ello debemos considerar siempre las necesidades de los

demás y la importancia del medio ambiente natural como fuente de recursos. También es

necesario considerar y respetar el marco normativo de nuestra actividad económica en particular.

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Como empresarios debemos tener claro nuestro papel en la sociedad, respetar los

derechos y necesidades de nuestros colaboradores, de nuestros clientes, proveedores y de la

comunidad en general, entendiendo que somos actores principales en el desarrollo de la sociedad

y que tenemos la oportunidad y el deber de coadyuvar a mejorar la calidad de vida de la

comunidad y recuperar nuestro medio ambiente natural; eso es tener RSE y nuestra misión,

visión, políticas de calidad y valores corporativos deben apuntar en esa dirección, sin dejar de

lado el fortalecimiento de nuestra razón social y fines económicos, en armonía con nuestros

deberes legales, sociales y ambientales.

Tener RSE es también dialogar y escuchar a los demás (grupos de interés internos y

externos), entendiendo sus necesidades y tratando de satisfacerlas a la par del cumplimiento de

las metas propuestas con cada proyecto, sin que sean motivo de conflicto sino de oportunidades

para mejorar.

Finalmente RSE también es mantener buenas relaciones con todos los actores de la

cadena productiva, respetando sus diferencias y procurando el bienestar colectivo más que el

particular.
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Conclusiones

La responsabilidad social empresarial o corporativa (RSE) es una realidad que no

podemos evitar y por el contrario debemos incorporarla en todas nuestras actuaciones como

empresarios y miembros activos de la sociedad.

Aunque en un principio la RSE tenía carácter de voluntariedad, con el pasar de los años y

ante la presión social y estatal, se ha vuelto un concepto de obligatoria consideración dentro de

nuestra misión, políticas de calidad, valores corporativos y procesos productivos.

Las organizaciones o empresas que no se involucren activa y positivamente en la realidad

de su entorno social, económico y ambiental, están condenadas a desaparecer porque hoy día ha

cobrado mayor relevancia el concepto de que prima el bien común sobre el particular

(Constitución política de Colombia, Art. 82, 1991).

La RSE debe ser vista más como una actitud empresarial que como una obligación, así

será más fácil interiorizar sus elementos y propósitos, armonizándolos con la razón social de

nuestra empresa y el cumplimiento de nuestras metras económicas.