Enciclopedia de Las Hierbas Magicas Jorge Restrepo Editado
Enciclopedia de Las Hierbas Magicas Jorge Restrepo Editado
Enciclopedia de Las Hierbas Magicas Jorge Restrepo Editado
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dentadura? Mastique una ramita de saúco e
introdúcela en la pared. Este es el tipo de magia
rápida, nada complicada y sin rituales.
Porque dicha información aviva la imaginación,
algo necesario para que la magia sea efectiva.
La base de la magia con hierbas, y de toda la
magia, es la fuerza. Esta fuerza ha tenido muchos
nombres y formas a través de los siglos; a veces
se mantuvo en secreto su existencia; otras, era de
dominio popular. La fuerza generó el universo y
lo mantiene en su constante evolución. La fuerza
hace germinar las semillas, levanta los vientos y
hace girar nuestro planeta.
Es la energía responsable del nacimiento, de la
vida y de la muerte. Todo en el universo es
creado por ella, contiene un poco de ella, y tiene
una relación directa con ella. En otras palabras, la
fuerza es la fuerza de la vida, la materia de la
creación. Es la propia substancia de la existencia
misma.
Esta fuerza no tiene nombre. Ha sido venerada y
se le ha dado un carácter antropomórfico en miles
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de dioses, espíritus, demonios y otros seres no
terrenales. La ciencia parcialmente inexplicada
aún continúa “descubriendo” algunos de sus
aspectos. La fuerza ha tenido un importante papel
en la evolución de la humanidad, para bien o para
mal. Todas las religiones se han servido de ella
empleando símbolos y ritos diferentes, y todos
los magos han ejercido sus poderes.
La fuerza existe por encima de los ritos, la
religión y la magia, sin cambio en su eterno
cambio. Llámela como quiera, imagínela como
pueda, la fuerza es la fuerza. La magia consiste
en producir cambios mediante el uso de fuerzas.
¿cómo se protege la gente del robo? ¿cómo puede
alguien atraer el amor a su vida? ¿de qué manera,
además de visitar al médico y comprar
medicinas, puede la gente combatir las
enfermedades? Casi nadie podría responder a
estas preguntas, excepto con métodos físicos; un
candado, un nuevo perfume y el descanso
podrían ser las soluciones sugeridas.
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Estos son buenos principios, pero han de estar
apoyados por métodos más seguros, pueden
respaldarse con la magia.
La magia puede emplearse para resolver estos y
otros problemas, pero es indispensable cuando se
trata de temas ocultos. ¿necesita echar una ojeada
al futuro? Llaga un té con capullos de rosa y
bébase inmediatamente antes de irse a dormir, y
recuerde sus sueños. O lleve tina lechuga
silvestre envuelta en un paño amarillo. ¿cree ser
objeto de algún embrujo o maldición? Esparza
pimienta roja alrededor de su propiedad y
después se bañe en flores de mimosa.
La magia, por simple que parezca, da soluciones
prácticas a los problemas.
La fuerza que se esconde tras la magia de las
hierbas no tiene forma, es indefinida y eterna. Es
lo mismo invocar en nombre de una diosa pagana
o de la virgen maría, o si la usa fuera de cualquier
marco religioso.
Ella siempre está allí, presente y en abundancia,
sin importar dónde estamos o a dónde viajamos
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por el universo. Aún sin forma, la fuerza adopta
muchas formas: un antílope tiene la fuerza, y
también la tiene una computadora o un diente de
león.
Algunos materiales contienen concentraciones
más elevadas de fuerza que otros; por ejemplo,
las plantas, las gemas y los metales. Cada
substancia contiene diferentes tipos de fuerza, o
frecuencia vibratoria. Las vibraciones de un trozo
de madera de pino son diferentes a las de un
diamante tallado.
Esta frecuencia vibratoria está determinada por
varios factores: composición química, forma,
densidad, etc. Los poderes en las hierbas están
determinados por el hábitat de la planta, su
fragancia, color, forma y otras consideraciones.
Las substancias similares normalmente poseen
vibraciones similares. Para que tengan el máximo
efecto, las hierbas elegidas para un hechizo deben
poseer vibraciones que concuerden con su
necesidad. El cedro es bueno para atraer el
dinero, pero no sería útil en un hechizo para la
fertilidad.
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La práctica de la magia de las hierbas requiere el
conocimiento de los poderes de las plantas.
La magia de las hierbas es fácil porque los
poderes y/o las vibraciones yacen en las hierbas
mismas. No es preciso la intervención de alguna
fuerza externa, ya que la fuerza reside en el
interior de la materia orgánica. Todo lo que hace
falta son unos cuantos procedimientos sencillos:
“ritos” tales como hacer nudos, hervir agua,
encender velas, coser, o enterrar objetos.
¿cómo funciona la magia? En primer lugar, tiene
que haber una razón para recurrir a los poderes
mágicos. La razón se llama necesidad. A veces,
un deseo puede enmascararse como si fuera una
necesidad, pero en magia un” deseo” no es
suficiente; debe existir una necesidad absoluta.
La naturaleza de esa necesidad determina qué
planta debe usarse. Atraer el amor, por ejemplo,
es una necesidad mágica común y hay varias
docenas de plantas que realizan dicha labor.
Un hechizo o ritual podría ser diseñado; gran
parte de la magia con hierbas no precisa un
hechizo completo, pero en algunos casos sí. El
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hechizo puede ser tan sencillo como envolver las
hierbas en un trozo de tela, o colocarlas alrededor
de la base de una vela, encender la vela y
visualizar lo que necesite.
Si lo desea, el encantamiento puede ser
complicado, consistiendo en hervir agua en un
caldero colocado sobre un fuego con leña de
mezquita, en las laderas de un desierto,
esperando que salga la luna antes de arrojar las
raíces y hojas dentro del recipiente.
El encantamiento se lleva a cabo con seguridad y
secretos absolutos. Cuando el hechizo se haya
realizado, debe olvidarse. Esto le permite
“prepararse” y hacer que su necesidad se
manifieste.
(cuando se cuece al horno un pastel, si se abre el
horno para mirarlo a cada instante, el pastel se
estropeará. ¡en magia, lo mismo que en la cocina,
mantenga el horno cerrado!) Intente olvidar el
hechizo por completo.
Así funciona la magia de las hierbas. ¿le parece
elemental? Pues lo es. Estos son los primeros
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pasos. Como en cualquier otro arte, el estudiante
puede llevar la magia más lejos, explorando
extraños rincones. Es lógico que pocos deseen
aventurarse a alejarse demasiado de esta magia
familiar y casera.
La fuerza es neutral. No puede ser dividida en
energías positivas y negativas. La fuerza es la
fuerza. Es responsabilidad nuestra como magos
(operadores de las fuerzas) trabajar con ellas para
fines benéficos. No necesitamos convertirnos en
santos para ayudar a los demás, o para mejorar
nuestras vidas. Todo lo que necesitamos es
utilizar las hierbas de forma bondadosa.
La aplicación de la fuerza produce una sensación
maravillosa y una mayor responsabilidad.
Sin embargo, cuando la magia se usa con fines
positivos enriquece y aporta más felicidad a
nuestras vidas.
¡pero damos la bienvenida a aquellos que desean
ayudarse a sí mismos y a los demás sirviéndose
de los antiguos métodos de la magia con hierbas!
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Los antiguos crearon los sistemas mágicos con
diversos grados de complejidad. Un área que
destacaron fue el arte de sincronizar los rituales
de acuerdo con los fenómenos astronómicos.
Algunos de estos sistemas estaban controlados de
forma rígida por las fases de la luna; otros tenían
en cuenta las estaciones, las estrellas y su
posición en el firmamento. Varios de estos
sistemas todavía se utilizan hoy con buenos
resultados.
Pero cualquier sistema puede aniquilar la
espontaneidad e impedir que la magia rinda su
efecto, incluso su misma realización. El
momento es en verdad importante, pero sólo
deberá haber una regla inviolable: la magia se
emplea cuando es necesaria. Si tengo un dolor de
cabeza que me perturba el sueño o me impide
trabajar, no puedo esperar a que la luna entre en
el signo adecuado o a que salga la osa mayor;
necesito alivio inmediato.
Esto es un ejemplo trivial, pero se hace verdadero
en toda la magia. No sirve de nada esperar tres
semanas a realizar un hechizo para obtener
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dinero si las facturas deben pagarse al final de la
semana. No discuto que el sincronismo con los
planetas, las estrellas, las estaciones, las fases de
la luna, etc. No proporcionen fuerza extra a los
encantamientos; simplemente disiento de la
necesidad de esta fuerza extra.
Si la magia funciona, lo hará a cualquier hora del
dia o de la noche. Aveces los magos se quejan:
“no pueden hacerse encantamientos de amor
cuando la luna se encuentra en cuarto
menguante”. “los encantamientos de dinero no
funcionan a menos que se realicen en un jueves
de primavera mientras la luna se encuentra en
tauro, en la tercera o décima hora de la noche”.
Tales afirmaciones son comunes en personas que
ejercen poco o nada la magia práctica. Los
encantamientos no precisan de las condiciones
astronómicas, estacionales o atmosféricas para
tener éxito. Quienes deseen seguir los viejos
métodos de magia sincrónica con el sol, la luna y
las estrellas pueden hallar esa información en
cualquier libro de magia que sea bueno, pero no
es en modo alguno necesario.
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Si necesita valor antes de afrontar u n a entrevista
para obtener empleo, no tenga en cuenta la fase
de la luna, ¡tome un poco de tomillo y siga
adelante! Aunque se mencionan algunos
ejemplos de magia sincrónica, sobre todo en lo
referente a la recolección de plantas, éstos
pueden seguirse o no, como usted guste, pero los
resultados serán casi idénticos.
La magia de hierbas requiere pocos utensilios.
Para machacar las hierbas y las semillas necesita
un juego de mortero y un cuenco de madera o de
cerámica para encantar las hierbas. Utilice un
vaso o recipiente grande esmaltado (evítense los
metales) exclusivamente para elaborar infusiones
o “pócimas”.
Herramientas básicas de costura (agujas,
alfileres, tijeras, hilo de algodón, dedales)
vendrán muy bien al hacer bolsitas o muñequitos,
y será preciso una buena provisión de trapos de
algodón o lana e hilos de distintos colores. Las
velas y las hierbas, desde luego, son
indispensables, lo mismo que el incensario (quem
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ador de incienso), palmatorias, trozos de carbón y
recipientes donde almacenar sus hierbas.
El altar
También llamado la mesa de encantamientos o
mesa de trabajo, el altar es el lugar donde se
hacen los encantamientos. También puede
utilizarse como mesa de trabajo donde se
encantan las hierbas, confeccionan saquitos, y
donde, en general, se realiza todo el trabajo
mágico.
Un altar puede ser cualquier superficie plana
sobre la que se puedan colocar velas, un
incensario, hierbas y cualquier otro material
necesario para el encantamiento. Puede ser la
parte superior de una mesa, o en un rincón en el
suelo. Cualquier sitio que usted considere con
espacio suficiente. Algunas personas que desean
manifestar sus creencias religiosas colocan sobre
el altar símbolos de su fe.
Son comunes las imágenes y los libros sagrados,
pero cualquier objeto con el que usted se sienta
cómodo puede colocarse sobre el altar, tales
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como amuletos de la suerte, fósiles, rocas,
conchas, etc. Los objetos naturales pueden
fortalecer aún más su magia.
La magia debe ser práctica.
El altar es sólo un lugar para hacer magia y el
único límite es su imaginación.
La técnica de magia más “avanzada” que precisa
la magia de hierbas es la visualización', es decir,
formar en su m ente la imagen de lo que necesita.
Normalmente, la habilidad se halla presente,
aunque entorpecida por las inhibiciones.
¿puede ver en este momento, el rostro de su
madre? ¿el de su amigo más íntimo, o el de su
peor enemigo? Eso es visualización. En magia, la
visualización se utiliza para dirigir la energía
formando una imagen de aquello que necesita: un
auto, un amante, un empleo, etc.
Si precisa algún objeto, imagínese en posesión de
él; si se trata de un empleo, imagínese
trabajando; y si es amor lo que necesita, visualice
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un anillo deslizándose por su dedo, o cualquier
otro símbolo que usted asocie con el amor.
Aquello que sea necesario debe visualizarse
como si ya lo hubiera conseguido, o como si ya
lo hubiese logrado. Utilice su creatividad y su
visualización natural para ver realmente aquello
que necesita. No piense en las razones
imposibles; sólo véalo de manera tangible.
Como en todas las cosas, desde jugar al fútbol
hasta aprender un arte, la práctica hace maestros.
Incluso en el caso que no fuera capaz de
visualizar por completo su necesidad, la magia
funcionará mientras exista la intención.
Cuando sea posible, báñese antes de hacer magia.
Una bolsita de hierbas purificadoras vertidas en
el agua puede ser, también, una gran ayuda.
Vístase con ropas limpias y cómodas o no se
ponga nada en absoluto, como le plazca. Algunos
practicantes visten túnicas y se adornan con
joyas, pero no es necesario.
Tampoco es necesario abstenerse del sexo, de
alimentos o de líquidos antes de la magia, llágalo
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si lo desea, pero no es un requisito. La mayoría
de la magia que hay es práctica y se ocupa de
problemas de la vida diaria. No obstante, en los
hechizos importantes, sobre todo en aquellos que
tienen que ver con otros seres humanos, realice
una adivinación, para asegurarse que el hechizo
es necesario, antes de utilizar la magia.
Como norma general, no haga hechizos para los
demás, a menos que haya obtenido su permiso.
Una manera de evitar tales problemas es
confeccionar saquitos y cosas similares para ellos
y dárselos como regalos.
¡explique sus usos y poderes y la otra persona
afectada podrá elegir entre llevar o no tales
vibraciones a su vida, de acuerdo con sus deseos!
Sobre todo, diviértase con la magia de hierbas. A
un que sea serio cuando las encante y las
visualice, no considere lodos los aspectos de la
magia de hierbas de un modo solemne. Debe ser
agradable.
Principios mágicos
1. La magia es natural.
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2. No haga daño a nadie —ni siquiera a usted
mismo —con su uso.
3. La magia requiere esfuerzo. Recibirá lo que
ponga en ella.
4. La magia, normalmente, no es instantánea. Los
hechizos precisan tiempo para ser eficaces.
7. Puede hacer magia en su propio beneficio,
pero sólo si esto no perjudica a nadie.
8. La magia es un acto divino.
9. La magia puede emplearse para defenderse,
pero jamás para atacar.
10. La magia es saber, pero no solo sobre su
forma y sus leyes, sino también sobre su eficacia.
11. La magia es amor. Toda magia debe hacerse
por amor. En el momento en que la ira o el odio
tiñan su magia, habrá cruzado la frontera que le
adentra en un mundo peligroso, que, finalmente,
acabará con usted.
Las hierbas pueden encantarse antes de ser
utilizadas en la magia. El encantamiento ajusta
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las vibraciones de las plantas con relación a su
necesidad mágica. Este proceso aumenta la
eficacia de las hierbas.
El encantamiento puede llevarse a cabo con una
sola hierba o bien con una mezcla, pero no debe
hacerse hasta unos momentos antes que las
hierbas vayan a ser utilizada. Luego todas se
mezclarán. Un encantamiento preliminar puede
realizarse si la hierba ha sido recogida de un
jardín o en el campo. Mientras se corta la hierba
para un hechizo específico debe resaltarse la
necesidad, como también el papel que va a tener
la planta al satisfacer tal necesidad, por ejemplo:
Yo te recojo, romero, hierba del sol,
Para aumentar mis facultades mentales y la
concentración.
Esto da inicio al proceso de encantamiento,
aunque sólo sea preliminar. Sólo se necesitan
unas pocas herramientas: un cuenco de madera o
cerámica, dos palmatorias y una provisión de
velas de colores. Coloque el cuenco en el centro
del altar, las palmatorias con las velas del color a
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d ecu ad o a cada lado (véase apéndice 1 para los
colores y sus usos mágicos). Las hierbas que se
van a encantar deben colocarse alrededor del
cuenco, dentro de sus recipientes. Encienda las
velas y sosiegue la mente, descuelgue el teléfono
y cierre la puerta con llave. Si lo desea, elimine
la luz artificial de la habitación. Encante las
hierbas (y realice toda magia) sólo cuando esté a
solas y libre de interrupciones.
Preparación
Vierta la cantidad necesaria de hierbas secas
dentro del cuenco. Siéntese o permanezca de pie
en silencio y mire las hierbas con atención.
Sienta las vibraciones que aguardan dentro de las
hojas, las flores y los tallos; véalas emerger de la
planta o en estado expectante. Las personas que
poseen facultades psíquicas pueden ver las
vibraciones que emanan de las plantas en varias
formas, tales como nítidas líneas irregulares,
lentos espirales o cometas resplandecientes.
Inclínese sobre el cuenco y coloque su mano de
poder dentro de él, tocando las hierbas,
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manténgala inmóvil durante unos cuantos
segundos y visualice con fuerza su necesidad.
Encantamiento
Pase sus dedos por las hierbas mientras visualiza
con fuerza lo que necesita y envíelo hacia la
hierba. Sienta que las puntas de sus dedos cargan
de energía las hierbas. Si le resulta difícil
mantener la imagen en su mente, recite unas
palabras sencillas que se adapten a su necesidad,
como, por ejemplo:
Milenrama, milenrama,
Haz que crezca el amor.
Recite esto sin parar y en voz baja. A medida que
pasa sus dedos por las hierbas, sienta que éstos
infunden a la planta su necesidad. Cuando sienta
que la planta vibra por la energía (o cuando
perciba que la operación de encantamiento se ha
completado) retire la mano. La planta ha quedado
encantada.
Si hay que utilizar otras plantas en la mezcla,
añada cada una de ellas a la vez, volviendo a
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encantar la mezcla con cada adición. Si desea
encantar hierbas que vayan a ser empleadas por
separado, retire las hierbas encantadas del cuenco
y límpielo con una toalla seca. Vuelva a colocar
las velas con los colores adecuados a las nuevas
hierbas y repita el procedimiento. Cuando haga
incienso, infusiones, bolsitas, muñequitos y cosas
similares, desmenuce o espolvoree las hierbas (si
es necesario) antes de encantarles.
Si van a en cantarse raíces o ramas, sosténgalas
en su mano de poder, visualizando y/o recitando,
o déjela en la parte superior del cuenco, entre las
velas, en la antigüedad “encantar” significaba
cantar o recitar. Una vez que haya recitado su
canto a las hierbas, estarán listas para ser
utilizadas. Desde luego el encantamiento no es
absolutamente necesario, pero es un método para
obtener mejores resultados. El buen herbalista
nunca omite los encantamientos.
Procedimientos mágicos
Si el texto le aconseja “llevar romero”, por
ejemplo, deberá hacerse en una bolsita. Estos
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procedimientos no son necesarios en todos los
casos.
Bolsitas
Las hierbas que van a llevarse o van a ser
colocadas en la casa (sobre las puertas, las
ventanas, etc.) Deben introducirse en bolsitas.
Una bolsita es una bolsa pequeña o un trozo de
tela que contiene las hierbas en su interior. En
magia vudú se llama, con frecuencia, “bolsa
encantada” o “bolsa de raíces”. Son muy fáciles
de fabricar. Tome un trozo pequeño de tejido (de
forma cuadrada, redonda o triangular) del color
adecuado. El fieltro se trabaja bien y es
relativamente barato.
Coloque las hierbas encantadas (normalmente no
más de una cucharada sopera o similar) en el
centro del tejido. Una los extremos y átelos con
un trozo de cordón o de hilo del color adecuado.
Visualice aquello que necesita mientras ata el
cordón fuertemente (hágalo duran te todo el
proceso). Haga dos nudos más y la bolsita estará
terminada. Cuanto más pequeñas sean las
bolsitas, más fáciles serán de llevar en el bolsillo.
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Las bolsitas para el hogar pueden hacerse de
mayor tamaño.
Muñequitos
También se los conoce como “muñecos vudú”,
aunque se han venido utilizando en magia desde
hace unos 4.000 años, y sólo recientemente se los
ha asociado con el vudú. Los muñecos se han
fabricado de raíces, patatas, plomo, corcho, papel
y otros materiales, pero en la magia de hierbas
los muñequitos se hacen de tela y de hierbas. El
muñequito está hecho para representar a la
persona a quien se va a ayudar por medio de la
magia.
Los muñequitos se fabrican la mayoría de las
veces para acelerar la curación, y también para
tener dinero, amor y todas las demás necesidades
mágicas. Los muñequitos son fáciles de hacer:
dibuje la silueta de una figura humana (de unos
veinte centímetros de longitud). Traslade dicha
silueta a un trozo de tela doblada de color
apropiado. Córtela y saque dos trozos de tela
idénticos. Únalos con alfileres y comience a
coserlos por los bordes. Cuando haya cosido tres
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cuartas partes del muñeco, rellénelo con las
hierbas encantadas convenientes. Por ejemplo, si
necesito ayuda para curar un catarro, rellenaré el
muñeco con hojas de eucalipto trituradas.
Una vez terminado el muñeco, sosténgalo en su
mano de poder y visualice aquello que necesita.
Exprese con palabras sencillas que ha diseñado el
muñeco para beneficiar su salud, para obtener
dinero, etc. Las hierbas que hay en el interior del
muñeco comenzarán a actuar al manifestar su
necesidad. Por ejemplo, el muñeco relleno de
hierbas curativas le representa a usted “lleno” de
salud. Coloque el muñequito sobre el altar.
Encienda las velas de los colores adecuados y
mírelo fijamente, mientras visualiza su
necesidad. Guárdelo en un lugar seguro cuando
no lo utilice. Después que haya realizado su
cometido, deshágalo y entierre las hierbas y la
tela.
Infusión
La infusión es el origen de la “pócima”, tan
identificada con las brujas. Consiste en un
proceso de remojar hierbas en agua caliente. Sin
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embargo, hay ciertas recomendaciones. No
utilice recipientes de metal cuando hierba agua ni
durante el proceso de remojo, ya que estorba los
poderes de las hierbas. Mantenga el líquido
tapado durante la infusión para que no pierda
vapor. Por último, encante todas las hierbas antes
de la infusión. Caliente agua hasta que empiece a
hervir. Agregue una cucharilla de café de hierba
seca por cada taza de agua y tape el recipiente
por 9 ó 13 minutos, luego cuele el agua y déjela
enfriar antes de usar. Las infusiones se beben
como el té, pero también se añaden al baño, se
frotan en los muebles y pisos, y se untan en el
cuerpo. No sobra advertir, que nunca deben
hacerse infusiones de plantas venenosas.
Baños
Los baños también se utilizan en la magia de
hierbas, por ser una manera fácil de extender el
poder de una hierba por todo el cuerpo. Hay dos
métodos: uno es hacer un saquito de estopilla e
introducirlo en el agua caliente del baño (usar de
medida una taza de la hierba encantada
adecuada). Otro método consiste en preparar una
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infusión (véase arriba) y añadir el líquido filtrado
en la bañera. A veces, también se añaden al baño
aceites volátiles. Solo unas cuantas golas
bastarán para la mayoría de los aceites; si se
vierte demasiado puede irritar la piel.
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