Anhelando Continuo de Presencia de Dios

ANHELANDO CONTINUO DE PRESENCIA DE DIOS
Salmos 27:4 Una cosa he demandado a Jehová, ésta buscaré; Que esté yo en
la casa de Jehová todos los días de mi vida, Para contemplar la hermosura de
Jehová, y para inquirir en su templo.
cuando David hace referencia a estas palabras, él no está pensando en el
Tabernáculo, ni en ningún otro lugar como el templo de Salomón, pues aún
no había sido edificado.
Este pasaje hace referencia a la casa de Dios en dos sentidos, a la iglesia o
pueblo de Dios el cual es su morada, y por otro a la casa o templo que es
cada creyente individual y en el que Dios habita.
David estaba siempre consciente de la presencia real de Dios; en todo tiempo
y en cualquier lugar donde se encontrará
Anhelar significa deseo vehemente, anhelar es un deseo ardiente y lleno de
pasión.
Salmos 42:1 Como el ciervo brama por las corrientes de las aguas, Así clama
por ti, oh Dios, el alma mía. 2 Mi alma tiene sed de Dios, del Dios vivo;
Salmos 63:1 Dios, Dios mío eres tú; De madrugada te buscaré; Mi alma tiene
sed de ti, mi carne te anhela, En tierra seca y árida donde no hay aguas,2
Para ver tu poder y tu gloria, Así como te he mirado en el santuario.3 Porque
mejor es tu misericordia que la vida; Mis labios te alabarán.
Desde el comienzo, el proyecto de Dios para con el hombre siempre ha sido,
de que el hombre disfrutara de la presencia divina, en la familia, en los
hogares, en los matrimonios. En la congregación
Pero a raíz de la desobediencia del hombre, del pecado provocó una ruptura
en la relación entre Dios y el ser humano,
Desde ese momento que el ser humano pecó contra Dios y la presencia de
Dios se alejó de la raza humana, hubo un anhelo ferviente del ser humano,
por volver a sentir la presencia de Dios.
Donde se empezaron a buscar diferentes medios, diferentes alternativas,
diferentes posibilidades, en que el hombre pudiera volver a experimentar la
presencia de Dios en sus vidas. A tal punto que una vez un hombre dijo:
Job 23:3 !!Quién me diera el saber dónde hallar a Dios! Yo iría hasta su silla.
Éxodo 33:15 Y Moisés respondió: Si tu presencia no ha de ir conmigo, no nos
saques de aquí.
Dios le dijo a Moisés que construyera un lugar, donde la presencia de Dios iba
a estar en medio de ellos
• El atrio
• El lugar santo
• El lugar santísimo
El atrio era iluminado por la luz solar.
El lugar santo era iluminado por lámparas que estaban encendidas, pero
había otro lugar.
El lugar santísimo estaba iluminado con una luz propia, que era la misma
gloria de Dios.
Nosotros tenemos luz propia que nos hace brillar, tenemos a Cristo, él es la
luz de esta iglesia.
Somos una generación que desea la presencia de Dios
Cuando hablamos de generación, tiene que ver con un grupo de personas
que no vivimos influenciados por las costumbres, por la misma música o por
las tendencias que existen.
Es una generación sedienta, por la presencia de Dios. esta necesidad solo la
puede suplir el Dios todo poderoso en nuestras vidas, esa necesidad es el
mover del Espíritu Santo de Dios en medio de la iglesia.
La presencia de Dios era tan evidente en la vida de Abrahán, hasta los impíos
a su alrededor reconocieron la diferencia entre sus vidas y la de él
Génesis 21:22 Aconteció en aquel mismo tiempo que habló Abimelec, y Ficol
príncipe de su ejército, a Abraham, diciendo: Dios está contigo en todo
cuanto haces.
Dios le prometió a Josué que ningún enemigo podría enfrentarse contra él
mientras la presencia de Dios estaba con él: Josué 1:5 Nadie te podrá hacer
frente en todos los días de tu vida; como estuve con Moisés, estaré contigo;
no te dejaré, ni te desampararé. 6 Esfuérzate y sé valiente; porque tú
repartirás a este pueblo por heredad la tierra de la cual juré a sus padres que
la daría a ellos.
El profeta Elías da una declaración muy importante y es que habitaba
delante de la presencia de Dios. 1 Reyes 17 “Entonces Elías tisbita, que era
de los moradores de Galaad, dijo a Acab: Vive Jehová Dios de Israel en cuya
presencia estoy, que no habrá lluvia ni rocío en estos años sino por mi
palabra”
La experiencia más importante que podemos tener los cristianos, ya sea de
forma individual o congregacional, es experimentar la presencia de Dios en
nuestras vidas
Una iglesia donde la presencia de Dios esté ausente no podrá crecer en los
niveles que pretenda hacerlo, ya que lo que puede generar un gran
crecimiento numérico y espiritual en la iglesia cristiana es el toque continuo
de Dios, pues sin su presencia, nuestros mejores esfuerzos van a ser en vano
o quedaran a mitad de camino.

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