UNIVERSIDAD NACIONAL AGRARIA LA MOLINA

FACULTAD DE INDUSTRIAS ALIMENTARIAS

“APROVECHAMIENTO DE RESIDUOS Y/O EFLUENTES

GENERADOS EN PROCESAMIENTO DE ALCACHOFAS”

Integrantes:

● Cortez Neciosup, Ana Pamela

● Jimenez Rivera, Michelly
● Latinez Valdivia, Paola
● Paricahua Martinez, Ana Gabriela
● Zavala Vera, Maria Lourdes

La Molina, 2017

I. INTRODUCCIÓN
 Los subproductos de la industria alimentaria constituyen un problema serio de
residuos en gran parte del mundo debido a que se generan grandes volúmenes
de materia orgánica fácilmente putrescible que, de no tratarse adecuadamente,
puede conducir a alarmantes niveles de contaminación.

Es por ello que la industria alimentaria, persiguiendo su desarrollo sostenible,

está aplicando cada vez más medidas para aprovechar y valorizar los
subproductos generados. Asimismo, este aprovechamiento crea nuevas fuentes
de riqueza que aportan una mayor rentabilidad económica al proceso industrial
de partida (Fernández, 2008).

Las primeras operaciones de los procesos de elaboración de transformados

vegetales, son etapas de acondicionamiento de materia prima, en la que se
generan las mayores cantidades de residuos sólidos orgánicos. El porcentaje de
residuos generado en la elaboración de transformados vegetales es muy
variable, ya que está determinado por diversos factores. Por lo que el porcentaje
de estos puede oscilar desde valores muy elevados como en el caso del cardo o
alcachofa con un 70-65%, hasta valores inferiores como en el tomate con un
15% (Rodríguez, s.f.)

En el caso de los residuos del procesamiento de alcachofas, estos son

habitualmente descartados o destinados a alimentación animal, con un bajo valor
agregado de comercialización. Por lo mismo, la búsqueda de alternativas ha
generado que distintas empresas apuesten por el desarrollo de proyectos de
investigación que permitan su aprovechamiento.

Con el fin de conocer nuevas tecnologías para la mejora en el tratamiento de

residuos de esta industria, en este trabajo se presentarán las diversas
alternativas que se están desarrollando específicamente para el
aprovechamiento de los residuos durante el procesamiento de alcachofas, los
cuales como ya se mencionó anteriormente, son volúmenes muy elevados que
deberían ser reutilizados.

II. APROVECHAMIENTO DE RESIDUOS SÓLIDOS EN LA INDUSTRIA

2.1. Generalidades
La industria de procesamiento de vegetales genera una gran cantidad de residuos
líquidos y sólidos. La disposición inadecuada de estos residuos sólidos puede dar
origen a la contaminación del aire generando malos olores y del suelo. Por otra
parte, la disposición de estos residuos en rellenos sanitarios, puede provocar serios
problemas de operación en el relleno, por el alto contenido de humedad que
presentan los residuos (CONAMA, 1998).

El destino idóneo de los residuos agrícolas producidos en origen sería el reciclaje o,

en su defecto, el vertedero. Los residuos producidos por la industria agroalimentaria
deberán ser regulados mediante ordenanzas municipales, cambiando el concepto
de residuo por el de subproducto siempre que sea posible (CONAMA, 1998). Los
subproductos obtenidos en el procesamiento de la alcachofa son empleados en la
alimentación del ganado (Maroto, 1992; Llorach et al., 2002; Viniegra et al., 2002).

En los meses de enero y febrero del año pasado, se ha exportado un peso neto
promedio 2023.7 toneladas de alcachofas en conserva (SUNAT, 2016), y
considerando un 80 por ciento de residuos sólidos generados en el procesamiento
de alcachofa, se habrían generado en promedio 8 094.8 toneladas de residuos, los
que adecuadamente gestionados podrían ser fuente de compuestos fenólicos y/o
elaboración de compost. Con esto se evitaría su disposición final en un relleno
sanitario, espacio que debería ser empleado para la disposición de residuos
peligrosos y no para residuos a los que se les puede dar una valoración
determinada y disminuir así la generación de lixiviados y gases que podrían
contaminar el medio ambiente.

2.2. Residuos generados según el sector de la industria

Los residuos sólidos provienen generalmente de las etapas de limpieza, lavado,

corte, pelado y descorazonado de los productos vegetales. (CONAMA, 1998;
Llorach et al., 2002; Maroto, 1992).

El porcentaje de residuos generado en la elaboración de transformados vegetales

es muy variable, ya que está determinado por diversos factores. El principal es el
tipo de materia prima a procesar;los vegetales destinados a transformación son muy
diferentes en tamaño, forma y partes aprovechables, lo que implica que los niveles
de residuos sean distintos en cada caso. El porcentaje de residuos puede oscilar
desde valores muy elevados como en el caso del cardo o alcachofa con un 70-65%.
Entre los residuos sólidos más comunes generados por este tipo de industria de
procesamiento de alcachofa encontramos: tallos y puntas, brácteas externas,
productos defectuosos, envases y embalajes.

El sector de la alcachofa genera dos tipos de desechos. Los más importantes los
genera la industria transformadora de este producto. El 70% en peso de la flor de la
alcachofa corresponde a las hojas externas o brácteas no destinadas al consumo
humano. Sin embargo,estos desechos son útiles para la alimentación animal y están
destinados a la elaboración de forrajes ensilados (Megías et al., 1991). Por otra
parte, la alcachofa contiene sustancias con aplicabilidad terapéutica como cinarina,
cinaropicrina, inulina, flavonoides y sales potásicas(Hammouda,1993).

2.3. Potencial aprovechamiento de los residuos

Actualmente, en la industria de transformados vegetales, el principal destino de los

residuos sólidos orgánicos generados en sus procesos es la alimentación animal,
especialmente para bovino y ovino (Maroto, 1992; Llorach et al., 2002; Viniegra Et
al., 2002; Velarde, 2006; Zuorro, 2014). Sin embargo, existe una fracción importante
que va a vertedero, y contribuye a aumentar el problema existente de falta de
espacio. Para contribuir a la sostenibilidad del medio y satisfacer las necesidades de
las generaciones actuales, sin comprometer la satisfacción de las necesidades de
las generaciones futuras, se hace necesario recuperar, en lo posible, estos residuos.

Los residuos de esta industria al ser de origen vegetal, pueden ser aprovechados de
diversas formas, ya sea para compost, producción de biogas, extracción de
compuestos fenólicos, entre otros.

Así menciona Martínez, M. (2016) que los residuos procedentes de la

industrialización de alcachofa pueden generar compuestos bioactivos, de valor
agregado bastante atractivos, en términos económicos y tecnológicos y que
diversas investigaciones conducidas sobre alcachofa han demostrado su potencial
efecto benéfico en la salud, destacando sus propiedades hepatoprotectoras,
anticarcinogénicas e hipercolesterolémicos, las cuales estarían relacionadas con el
poder antioxidante de sus compuestos fenólicos, de allí la importancia de la
extracción de estos.
III. TECNOLOGÍAS APLICADAS PARA EL APROVECHAMIENTO DE LOS
RESIDUOS.

El procesamiento de la alcachofa en las diversas industrias, genera residuos

importantes a niveles de reutilización de estas, por ejemplo los efluentes del proceso
de blanqueado de la alcachofa, al filtrarse por membranas conduce a impactos
ambientales positivos como reducción del impacto ambiental, recuperación de
compuesto de mayor valor, ahorro de energía y agua.
Las tecnologías aplicadas a estos residuos son diversas, esto se puede observar de
manera general en la figura 1, especificando que para el aprovechamiento de
residuos de la alcachofa se podría utilizar las tres tecnologías, y esto será explicada
a continuación.

FIGURA 1. Tecnologías de valorización de los residuos y subproductos orgánicos

en general. Fuente: Ross et al. (2012)
3.1. Recuperación de compuestos fenólicos
Los residuos de alcachofa, tienen un efecto antioxidante marcado, pues tiene un alto
nivel de compuesto fenólicos derivados del ácido cafeoilquínico y flavonoides
(Sánchez-Rabaneda et al., 2003;Mulinacci et al., 2004; Christaki et al., 2012; Abu-
Reidah et al., 2013; Conidi et al., 2014).
Martínez, M. (2015), utilizó los residuos sólidos (tallos y puntas, brácteas externas y
productos defectuosos) de las alcachofa para la obtención de estos compuestos,
para ello obtuvo la harina de alcachofa (operaciones como el secado y molido), para
luego ser envasado al vació, almacenado en la oscuridad y mantenerlo en
congelación hasta el proceso de extracción. Para la extracción de compuesto
fenólicos se utilizó el alcohol como solvente y por medio de lixiviación bajo agitación
constante y continua filtración y centrifugación se obtuvo el extracto proteico.
3.2. Compostaje
Se obtiene a partir de la descomposición biológica de la materia orgánica, en
condiciones controladas de humedad y temperatura, que oscila entre 50-70°C,
provocando la destrucción de elementos patógenos, y esto garantiza la inocuidad.
Esta materia orgánica mejora la estabilidad del mismo, aumentando su porosidad y
capacidad de retención hídrica, otros de los beneficios es que aumenta la capacidad
del cambio catiónico, favoreciendo en la fijación de nutrientes, por lo tanto el
compostaje genera un regeneración de suelos.
3.3. Biometanización
Esta tecnología es aplicada a cualquier fracción orgánica, independiente de su
origen o del grado de humedad.
La fracción de residuos vegetales son susceptible al tratamiento para la obtención
de metano. Esta metanización utiliza los residuos sólidos al proceso de
fermentación anaeróbica de los componentes orgánicos de la alcachofa, esto es
producido por bacterias que se desarrollan en ambientes carentes de oxígeno. Los
residuos de la alcachofa se ven transformados en “biogás”, que se compone de
metano y dióxido de carbono, siendo el primero utilizado como energía eléctrica y
térmica. El contenido de metano va depender de las condiciones físico-químicas de
la digestión de la materia prima.
Es necesario recalcar que esta tecnología se aplica luego de un compostaje, dado
que una vez que al residuo sea digerido, pierde las características idóneas para la
agricultura.
3.4. Bioalcohol
Los residuos vegetales, al contener celulosa, se puede utilizar como energía
renovable, ya que esta se utiliza para la generación de alcohol como combustible.
Esto se hace mediante la fermentación alcohólica de microorganismo anaerobios o
aerobios facultativos, que utilizan los azúcares presentes en biomasa, que en este
caso, primero se fracciona la celulosa, para contar con la glucosa como biomasa.
IV. CASOS
4.1. “Efecto de la adición de harina de brácteas de alcachofa (Cynara
scolymus L.) y tiempo de almacenamiento sobre las características
fisicoquímicas, microbiológicas y sensoriales de yogurt simbiótico batido”.

En el presente estudio se agregó harina de brácteas de alcachofa antes de la

pasteurización de la leche, en cantidades de 0,5%, 1% y 1,5% para la elaboración
de yogurt.

Teniendo en cuenta que las brácteas de alcachofa son el residuo o subproducto del
procesamiento de esta hortaliza y una de las opciones de uso es convertirlas en
harina para incluirlas en diversos alimentos gracias a su alto contenido de fibra.

También en el paper mencionan que un autor incorporó jalea de maca (Lepidium

meyenii) en 20, 30 y 40 % a un yogur probiótico y evaluó la población de
Bifidobacterium bifidum durante almacenaje. Encontró recuentos de 1.7 x 109
ufc/mL de estas bacterias probióticas, las que se mantuvieron altas durante el
almacenamiento sobre todo con el 30 % de adición de jalea de maca.

Los subproductos procedentes del procesamiento industrial de frutas y hortalizas

son baratos y están disponibles en grandes cantidades, son comúnmente utilizados
como piensos para animales o fertilizantes orgánicos. Sin embargo, algunos de
estos subproductos ricos en fibras dietarias provenientes de alcachofas, espárragos,
naranjas, manzanas, mango y pera pueden ser utilizados en la industria alimentaria.

Se sabe que en el Perú y en la región La Libertad se presentan zonas agrícolas

importantes que producen alcachofa, lo cual justifica el uso de harina de brácteas de
esta hortaliza en la elaboración de yogur.

Para la realización de este estudio se desarrolló en Universidad Privada Antenor

Orrego UPAO-Trujillo, de materiales se usó Leche cruda y Brácteas de alcachofa
del Mercado Mayorista de Trujillo-Perú. Y para la elaboración de harina de brácteas
de alcachofa se seleccionaron separando luego se lavaron, se escaldaron por
inmersión, se secaron y posteriormente se realizó una molienda y tamizado con
malla 30. Y después se realizó una producción de yogurt tradicional; en cuanto a la
metodología para la harina de brácteas de alcachofa se evaluó la humedad, cenizas
y contenido de fibra de acuerdo a los métodos de la AOAC. A la leche fresca se le
determinó densidad, sólidos totales, grasa, pH y acidez según los métodos de la
AOAC. Para la medición de la viscosidad y características reológicas se siguió el
procedimiento adaptado de Castillo y Sánchez. La sinéresis fue analizada según el
procedimiento adaptado de Castillo y Sánchez, de muestras de yogur centrifugadas,
midiendo el suero liberado, para la identificación y recuento de bifidobacterias se
empleó el método de siembra en superficie descrito en medio de cultivo se usó agar
TOS propionato. Obteniendo como resultados que La harina de brácteas de
alcachofa presentó una humedad de 11,71 %, cenizas de 6,3 % y 60,5 % de fibra
cruda, la variación de la acidez del yogur batido con adición de harina de brácteas
de alcachofa, aumentó durante el almacenamiento desde 0,97 hasta 1,16%, en este
trabajo las muestras de yogur se encontraron dentro de los valores establecidos por
esta norma que se señala que la acidez del yogur debe estar comprendida entre 0,6
a 1,5% de ácido láctico. Esta acidez trajo como consecuencia que la producción de
aquella puede influir sobre la viscosidad, ya que al día 14 la acidez es mayor y la
viscosidad disminuye en todos los tratamientos.

Por otro lado, cuando se evaluaron las muestras de yogurt a niveles reológicos se
obtuvo que el mayor índice de consistencia C3 a los 7 días de almacenamiento y C3
mostró menor índice de flujo; así mismo, al evaluar la sinéresis que sufre el yogurt al
tiempo se encontró que los tratamientos C2 y C3 mostraron mayor estabilidad al
reportar menores valores de sinéresis, sin embargo, el efecto de la harina de
brácteas de alcachofa y tiempo de almacenamiento no fue significativo sobre la
sinéresis en el yogur batido.

Respecto a la adición de 0,5% de harina de brácteas de alcachofa, se observó un

comportamiento similar a la muestra control; en cambio en las muestras con 1,0 y
1,5% de harina de brácteas de alcachofa, el incremento de bifidobacterias fue mayor
desde el inicio.
Por último, para la calificación sensorial se obtuvo resultados de mayor aceptación
de los tratamientos con adición de 0.5 y 1 % de harina de brácteas de alcachofa.
Finalmente se concluyó que la adición de harina de brácteas de alcachofa y el
tiempo de almacenamiento incrementaron significativamente la acidez y el recuento
de bifidobacterias, pero no influyeron sobre la viscosidad y sinéresis del yogurt
simbiótico. La acidez se incrementó de 0,97 a 1,16 %, el recuento de bifidobacterias
varió desde 1.0 x 105 UFC/ mL hasta 1.0 x 109 UFC/mL, se logra el valor más alto
el día 7 con 1,5% de harina de brácteas de alcachofa. La aceptabilidad general del
yogur fue mayor con 0.5% de harina de brácteas de alcachofa que con 1 y 1,5 %;
fue aumentando respecto al control durante el almacenamiento. La adición entre 0,5
y 1,0% de harina de brácteas de alcachofa permite obtener altos recuentos de
bifidobacterias y buena aceptabilidad general del yogurt simbiótico batido.

4.2. “Obtención de Oligosacáridos prebióticos a partir de residuos industriales

de alcachofa: evaluación de diferentes métodos de extracción”
Introducción
Las brácteas provenientes de la industria conservera de alcachofas pueden
contener compuestos bioactivos, como fructooligosacáridos (FOS). Estos azúcares
juegan un papel importante en la nutrición humana, estimulando selectivamente la
actividad de algunos microorganismos en el colon, mostrando un efecto prebiótico.
La extracción convencional con agua en ebullición es un método ampliamente
utilizado para recuperar sacáridos. Sin embargo, esta técnica requiere altas
temperaturas y tiempos de extracción prolongados, que pueden reducir el efecto
funcional de estos componentes. Las nuevas tecnologías se han utilizado para
desarrollar métodos nuevos y respetuosos con el medio ambiente, reduciendo el
tiempo de procesamiento, mejorando la transferencia de calor y masa y mejorando
la funcionalidad del producto. Uno de estos métodos es el de ultrasonido, el cual
por su naturaleza es un proceso con elevado potencial para extraer estos
sacáridos.
El objetivo de este estudio fue evaluar el efecto de la extracción asistida por
ultrasonido en la liberación de azúcares prebióticos de las brácteas de alcachofa, e
identificar y cuantificar los azúcares del extracto obtenido en la condición
seleccionada.

Metodología
Los residuos de alcachofa provenientes de la industria conservera (brácteas)
fueron recolectados de la fábrica Bom Sucesso (Sao Roque, Sao Paulo, Brasil).
Los sacáridos de las brácteas de alcachofa se extrajeron mediante técnicas
convencionales como método estándar y se compararon con la extracción indirecta
y directa asistida por ultrasonido.
● Para la extracción convencional, la suspensión se colocó en un reactor
encamisado a una temperatura de 85ºC y se agitó continuamente mediante un
agitador digital, a una velocidad de 600 rpm.
● Para la sonicación directa, la suspensión se colocó en un reactor
encamisado, a una temperatura de 60ºC, y la sonda de sonicación se usó en los
reactores con su punta sumergida en la suspensión.
● En el modo de sonicación indirecta, las suspensiones se colocaron en
matraces y se sumergieron en un baño ultrasónico a la temperatura de 60°C.
Para todos los procedimientos, las muestras se tomaron en tiempos de extracción
predeterminados de 5, 10, 15, 20, 30, 45, 60, 90 y 120 min.

Se seleccionó la extracción asistida por ultrasonido usando sonicación directa

porque sus rendimientos fueron los más altos. Luego se llevaron a cabo otros
experimentos para seleccionar las condiciones operativas que mejoran el
rendimiento de azúcar prebiótico.

Resultados y discusiones
Con respecto al rendimiento del extracto seco, solo los tres coeficientes lineales
para las variables estudiadas (temperatura, tiempo y potencia ultrasónica) fueron
significativos. La respuesta del rendimiento del extracto seco aumentó con el
tiempo de extracción. Con respecto a los valores predichos de rendimiento de
extracto seco, a 70ºC de temperatura obtuvieron valores más altos para toda la
potencia ultrasónica estudiada; y a 60 ° C se observó el mayor rendimiento de
azúcares prebióticos para toda la potencia ultrasónica estudiada. El aumento de
temperatura puede promover la aceleración de los movimientos moleculares, la
viscosidad y la reducción de la tensión superficial. La eficiencia del disolvente,
debido a la mayor solubilidad de los analitos. En 360 W, observaron
concentraciones más altas de azúcares prebióticos
Conclusiones
El ultrasonido con sonicación directa durante la extracción es la más eficiente
forma de obtener el mayor rendimiento de azúcar prebiótico. Por lo tanto, para el
ultrasonido con sonicación directa, se investigaron las variables del proceso tales
como la temperatura de extracción, el tiempo y la potencia para mejorar el
rendimiento de azúcares prebióticos. La temperatura y el poder ultrasónico
mostraron influencia en esta respuesta. Los mayores rendimientos de azúcar se
obtuvieron en una condición seleccionada utilizando una sonda de sonicación: 60
C, 360 W y 10 min. El extracto obtenido en este trabajo presentó alrededor de 9,6
mg de sacáridos prebióticos / g de materia prima seca.

4.3. “Potencial reutilización de residuos de alcachofa (Cynara scolimus L.)

para la recuperación de compuestos fenólicos y bioenergía”
Introducción
Los compuestos fenólicos, también conocidos como polifenoles, son una clase de
metabolitos secundarios de plantas caracterizados por la presencia de un hidroxilo
(e OH) grupo unido a un anillo de benceno o a estructuras aromáticas más
complejas. En las últimas décadas, los polifenoles han atraído un interés creciente
de los nutricionistas y científicos de los alimentos debido a sus beneficios de salud
reportados, incluyendo efectos anti-oxidante, anti-inflamatorio y anti-cancerígenos.
Los humanos no pueden sintetizar polifenoles y, por lo tanto, depende de su
ingesta para satisfacer las necesidades dietéticas.
Perú es el cuarto país con mayor producción anual de alcachofas, después de
Italia, Egipto y España. Durante el procesamiento industrial de estas, alrededor del
80 e 85% de la biomasa total de la planta se descarta (brácteas y tallos).
Según estudios la alcachofa es una fuente muy rica de polifenoles, durante el
desarrollo de la planta, los compuestos fenólicos tienden a acumularse en las
partes periféricas de la planta, siendo el ácido clorogénico el polifenol
predominante en brácteas y tallos.
El objetivo de este estudio fue investigar la viabilidad de recuperar compuestos
fenólicos de residuos de alcachofa y utilizar el residuo que queda después de la
extracción para la producción de energía.

Metodología

Las alcachofas frescas se obtuvieron de un mercado local y se mantuvieron

refrigeradas a 4 °C hasta su uso. Las brácteas externas y los tallos fueron retiradas
con un cuchillo, cortado en trozos de 1-2 cm y blanqueado en agua a 85 °C durante
15 minutos para inactivar las enzimas responsables de la oxidación de polifenoles.
El material blanqueado se secó en una deshidratador de aire forzado (Stockli,
Suiza) operado a 40 °C, y pasó por un molino eléctrico (Moulinex, Italia) y
almacenado en la oscuridad.
● Se utilizó un procedimiento de extracción en tres etapas para evaluar el
contenido fenólico de los residuos de alcachofa, el ensayo se realizó a 60ºC,
usando etanol acuoso (50% v / v) como el solvente El tiempo de extracción
se estableció en 30 minutos y el relación líquido a sólido en la primera,
segunda y tercera etapa fue igual a 100, 50 y 25 ml/g. La cantidad total de
compuestos fenólicos en el material vegetal se calculó como la suma de los
valores obtenidos en cada etapa. Los fenoles totales se determinaron
mediante el método de Folin-Ciocalteu y fueron expresado como equivalentes
de ácido gálico (GAE) usando una curva de calibración obtenido con
estándares de ácido gálico.
● El diseño experimental consistió en 20 carreras, que se llevaron a cabo al
azar con el fin de minimizar los efectos de los factores no controlados. En
este diseño las variables fueron la temperatura, el tiempo de extracción y la
relación líquido - sólido de alcachofa.
● El horno de mufla se usó para determinar el contenido de cenizas. El análisis
elemental del residuo se realizó con un CHNS combustión analizador (2400
Serie II, PerkinElmer, Waltham, MAMÁ, ESTADOS UNIDOS). El valor
calorífico se midió utilizando un calorímetro de bomba adiabática (C5000,
IKA-Werke, Alemania). El aserrín de madera para la preparación de
materiales compuestos de combustible se obtuvo de un aserradero local y se
utilizó tal como se recibió.

Resultados y discusiones
El contenido de humedad de los residuos alcachofa fue 84,6 ± 1,4% en peso y se
redujo a 4,6 ± 0,3% en peso por secado a 40 °C. El contenido de polifenoles,
expresado como GAE por unidad de peso seco de sólidos, era 32,2 ± 1,7 mg / g.
Este valor está en línea con los encontrados en estudios anteriores, teniendo en
cuenta la variabilidad entre cultivares.
Se obtuvo además que a mayor tiempo de extracción, mayor será la cantidad de
compuestos fenólicos extraídos y que relaciones más altas de líquido a sólido
mejoran la transferencia de masa de los compuestos extraídos en el disolvente. Sin
 embargo, el aumento del tiempo de extracción sería más eficaz que el aumento de
la relación de líquido a sólido.
Finalmente se obtuvo que a 53,3 °C, 110.4 min y una relación 3,3 ml / g, se obtuvo
un mayor rendimiento de extracción, siendo de 94,7%

El primer punto a destacar es el alto contenido de energía de los dos materiales. El

HHV sin extraer de los residuos de alcachofa estaba 19.1 ± 0.3 MJ / kg. Después
de la extracción, el residuo sólido restante tenía un HHV de 19,6 ± 0,4 MJ / kg. La
cercanía de los dos valores indica que el procedimiento de extracción no afectó el
potencial de energía del material de partida y que los polifenoles extraídos hicieron
solo una contribución marginal al mismo. El C, los contenidos de H y N se
encontraban en las siguientes gamas: 41,2 e 44,1% en peso, 6 e 6,3% en peso y
1,4 e 1,8% en peso. Al colocar estos materiales en un diagrama de tipo Krevelen
van, de acuerdo con sus proporciones atómicas H / C y O / C, los puntos de datos
de ING result- cayeron en la región de la biomasa típica. El contenido de cenizas
se redujo luego de la extracción de 3,8 a 1,6% en peso, lo que sugiere que parte
de los compuestos que forman cenizas fueron retirados durante la extracción
fenólica. Como es sabido, un bajo contenido de ceniza es deseable para un
material combustible.
La alcachofa tiene un bajo contenido de lignina, la producción de
combustibles de los residuos de alcachofa pueden requerir la adición de
pequeñas cantidades de materiales de lignina. Por esta razón, se preparó un
material compuesto de combustible mezclando el residuo de alcachofa, o el
residuo de extracción, con aserrín en diferentes proporciones (de 0 a 100%).
Se utilizó aserrín por su bajo costo y amplia disponibilidad. Los resultados
muestran que el HHV de las mezclas disminuyó linealmente con el aumento
de contenido de aserrín. Sin embargo, las adiciones de aserrín de hasta 20%
en peso dieron como resultado una disminución en HHV menor que 3 -4%.

Conclusiones
Los desechos de alcachofa son una fuente rica de compuestos fenólicos y
pueden ser fácilmente recuperado mediante un procedimiento de extracción
con disolvente respetuoso con el medio ambiente utilizando etanol acuoso
como disolvente.
El valor calorífico alto del residuo que queda después de la extracción fenólica
apoya fuertemente la posibilidad de combinar la recuperación de compuestos
de valor añadido con la producción de bioenergía. Este enfoque integrado no
sólo se traduciría en beneficios económicos para los productores de
alcachofa, sino también contribuir a la protección del medio ambiente y de los
recursos conservación.
La investigación futura debería centrarse en el estudio del proceso a una
escala mayor, con un análisis de costo-efectividad preciso. El posible uso del
residuo de extracción en aplicaciones no energéticas, como la producción de
biofertilizantes o adsorbentes de bajo costo, es otro tema importante que debe
investigarse en futuros estudios.

V. CONCLUSIONES

● Los residuos de alcachofa tienen componentes favorables para su utilización

en diferentes campos, ya sea alimentaria, energético, compostaje.
● Los residuos de alcachofa, pueden ser utilizados potencialmente para la
extracción de sus compuestos fenólicos y la producción de biogás.
● Los residuos de alcachofa pueden ser utilizados en productos que necesitan
mayor contenido de fibra,por ejemplo en yogurt, galleta,etc.

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