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REFERENCIA A LAS PAREJAS DE HECHO 1.-

Legislación aplicable.
• Ley 5/2002, de 16 de diciembre, de Parejas de Hecho de Andalucía.
• Decreto 35/2005, de 15 de febrero, por el que se constituye y regula el
Registro de Parejas de Hecho de Andalucía.

¿Cuándo se habla de pareja de hecho 2?

Se entiende por pareja de hecho, según la legislación Andaluza, la unión de dos
personas, con independencia de su opción sexual, a fin de convivir de forma estable,
en una relación de afectividad análoga a la conyugal, cuando al menos uno de sus
miembros tenga su residencia habitual en cualquier municipio de Andalucía.

No podrán formar parejas de hecho:

a. Los menores de edad no emancipados.
b. Los que estén ligados con vínculo matrimonial o a la pareja de hecho
anterior inscrita.
c. Los parientes en línea recta por consanguinidad o adopción.
d. Los colaterales por consanguinidad en segundo grado.

¿Cómo se constituye?
Para constituir una pareja de hecho es necesario:

1) La declaración de voluntad de las partes de constituir una pareja de hecho. Esta

declaración podrá realizarse:
a) mediante comparecencia personal de los interesados ante el titular del órgano
encargado del Registro correspondiente o ante el Alcalde, Concejal o
funcionario en quien delegue;
b) mediante el otorgamiento de escritura pública o por cualquier otro medio de
prueba admisible en Derecho.

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También se utilizan otras denominaciones, como: uniones libres, parejas no casadas, concubinato,
matrimonio aparente o de 2ª clase, situación fáctica paramatrimonial o relación “more uxorio”.
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Sobre pensión de viudedad en parejas de hecho, ver el siguiente video
https://www.youtube.com/watch?v=LepEaY8NFaw&index=2&list=PL0412361C018C90BA
Sobre este tema de la pensión, la Ley 40/2007, de 4 de diciembre, de medidas en materia de
Seguridad Social, que modifica el art. 174 LGSS, establece que: “A efectos de lo establecido en este
apartado, SE CONSIDERARÁ PAREJA DE HECHO la constituida, con análoga relación de
afectividad a la conyugal, por quienes:
• no hallándose impedidos para contraer matrimonio
• no tengan vínculo matrimonial con otra persona
• acrediten, mediante el correspondiente certificado de empadronamiento:
o una convivencia estable y notoria con carácter inmediato al fallecimiento del
causante
o con una duración ininterrumpida no inferior a cinco años.
La existencia de pareja de hecho se acreditará
• mediante certificación de la inscripción en alguno de los registros específicos existentes en
las comunidades autónomas o ayuntamientos del lugar de residencia
• mediante documento público en el que conste la constitución de dicha pareja.
Tanto la mencionada inscripción como la formalización del correspondiente documento público
deberán haberse producido con una antelación mínima de dos años con respecto a la fecha del
fallecimiento del causante.
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2) Inscripción en el Registro de parejas de hecho.

¿Qué pactos se pueden inscribir en el Registro de Parejas de Hecho?

• Respecto a los pactos personales 3 :
Sin perjuicio de la libertad de los miembros de la pareja de hecho para
regular los derechos y deberes derivados de sus relaciones personales, las
Administraciones Públicas de Andalucía no inscribirán en el Registro
pactos que atenten contra los derechos fundamentales y las libertades
públicas de cualquiera de sus integrantes. De la misma forma velarán por
el respeto de los derechos de los menores.
En cuanto a la adopción, ya en el año 2005 con la regulación del
matrimonio homosexual se introdujo en España la adopción dual por
personas del mismo sexo, siempre que estuvieran unidas en matrimonio.
Con la reforma llevada a cabo por la Ley 26/2015, de 28 de julio, de
modificación del sistema de protección a la infancia y a la adolescencia
en el Código civil, se equiparan los derechos de los adoptantes que sean
cónyuges con las parejas unidas por análoga relación de afectividad. A
este respecto el art. 175.4 CC establece que: “nadie puede ser adoptado
por más de una persona, salvo que la adopción se realice conjunta o
sucesivamente por ambos cónyuges o por una pareja unida por análoga
relación de afectividad a la conyugal”.
• Respecto a los pactos patrimoniales 4

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EFECTOS PERSONALES. Un sector de la doctrina es unánime en aceptar que entre hombres y
mujeres que se unen extramatrimonialmente, como falta el consentimiento que genera el status
matrimonial, los efectos personales del matrimonio no surgen, tales como el deber de actuar en
interés de la familia, el deber de fidelidad, de socorro y ayuda mutua, el deber de vivir juntos, el
deber legal de alimentos. (de hecho, la ruptura de tales deberes es causa de desheredación, pérdida
del derecho legal de alimentos –antes de 2005 era causa de separación y divorcio-). Otro sector, sin
embargo considera que el reconocimiento de estos efectos personales en la pareja no casada son
ineludibles, si bien, la falta de cumplimiento de estos deberes no producirá los mismos efectos que
en el matrimonio, ya que no existen como deberes jurídicos, pero sí privará a la relación de la
calificación de convivencia “more uxorio”.
Sobre este tema, la ley andaluza, declara la libertad de los miembros de la pareja de hecho para
regular los derechos y deberes derivados de sus relaciones personales (Art. 7), sin más límite que los
derechos fundamentales y las libertades públicas que todo individuo posee, y los derechos
prioritarios e indisponibles de los menores que se hallen a su cargo.
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EFECTOS PATRIMONIALES. En concreto en Andalucía, en el ámbito PATRIMONIAL se
consagra un principio de libertad de pactos, siempre que no sean discriminatorios, ni atenten a la
dignidad o a las normas imperativas (Art. 10 Ley andaluza). Además, se establece la posibilidad de
recabar orientación necesaria a través de la Administración de la JA, para hacer viable la fijación de
las reglas acerca de las contribuciones a las cargas familiares, régimen de titularidad y disposición
de bienes y ganancias, derecho a alimentos, efectos patrimoniales derivados de la disolución de la
pareja de hecho, indemnizaciones a favor de alguno de los cónyuges.
Señalar que las distintas fórmulas a utilizar por los convivientes a fin de ordenar las cuestiones
económicas que surjan o vayan a surgir de la convivencia podrán ser varias:
1) Si bien el TS ha reiterado que no podemos aplicar por analogía los regímenes económicos
previstos para el matrimonio (gananciales, separación y participación), cabría tal posibilidad si
se pacta, es decir, si existe un convenio entre los convivientes a favor de estos regímenes para
que se les apliquen (SSTS 18-5-92 [4907] y 23-7-1998 [6131], 27-3-2001, 5-7-2001). Sin
embargo, dado que, por ejemplo el régimen de gananciales también genera una reglas de
responsabilidad frente a terceros acreedores, que en las uniones de hecho no pueden hacerse
valer por la privacidad de esos pactos que no alcanzan al Registro de la Propiedad o al Registro
Civil, aun cuando pueden pactarse algunos aspectos propios de la sociedad de gananciales, no
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En cuestiones patrimoniales rige el principio de libertad de pactos.

Así podrán, en el momento de su inscripción, establecer el régimen
económico que mantendrán tanto mientras dure la relación como a su
término.
Pueden elaborar un documento en el que quede reflejado el régimen
económico voluntariamente pactado entre sus miembros, pudiendo
solicitar su anotación en el Registro, así como sus posteriores
modificaciones. En dicho documento podrán acordar entre otras las
siguientes cuestiones:

parece que puede ser posible trasladar en bloque este régimen jurídico a las uniones
extramatrimoniales.
2) También se puede pactar la creación de una cotitularidad en proindiviso sobre cosas o derechos
concretos, con libertad de fijación de cuotas al amparo del Art. 392 y ss. CC. Así, se pueden
convertir en condominio
• los bienes que uno de ellos ostentaba individualmente,
• compartir la titularidad de los bienes y derechos conforme se vayan adquiriendo, o
• acordar un régimen de comunidad futura sobre bienes inconcretos todavía no adquiridos.
Esta última posibilidad no es admitida por toda la doctrina que considera necesario que se
pacte la comunidad en el momento de adquirir cada cosa o derecho (a favor STS de 18 de
febrero de 2003 [1049]).
3) Otra posible opción sería la sociedad civil regulada en los artículos 1665 y ss. CC, que es un
contrato de colaboración que se materializa con la puesta en común de un fondo consistente en
dinero, trabajo, bienes, o el uso de un bien. La sociedad civil puede ser universal o particular.
Parece que se ajusta mejor al tema que nos ocupa la primera, ya que la sociedad civil particular
tiene por objeto cosas determinadas, por ejemplo, una empresa, una vivienda donde uno aporta el
uso y el otro las reparaciones y reformas.
La sociedad universal puede serlo de todos los bienes presentes o de las ganancias. La primera no suele
constituirse, pues es más gravosa implicando que pasaran a ser propiedad común todos los bienes que en
el momento de constituir la sociedad les pertenecen (excepto los heredados o donados) y las ganancias
que adquieran.
En una sociedad civil universal de ganancias forman parte de la sociedad lo que adquieran los socios por
su industria o trabajo durante la vigencia de la sociedad, pero los bienes que pertenecen a cada uno en el
momento de celebrarse el contrato continúan siendo de dominio particular, pasando a la sociedad sólo el
usufructo.
Esta última parece la opción por la que se decanta el legislador andaluz, que en su Art. 11 prevé que las
parejas de hecho interesadas en suscribir un documento en el que quede reflejado su régimen económico
voluntariamente pactado podrán constituir, en su caso, una sociedad universal en cualquiera de sus
modalidades.
¿Qué elementos hay que tener en cuenta al momento de pactar este régimen de sociedad?
Fundamentalmente, los siguientes:
- criterios de distribución en caso de liquidación,
- fijar las causas por las que se disolverá o extinguirá la sociedad (cese de la convivencia, muerte
de uno de los socios, voluntad unilateral, fecha o término, pérdida de las aportaciones)
- cómo se responderá de las deudas. De no decirse nada, los socios responden subsidiariamente, en
defecto de bienes sociales suficientes. También se puede pactar la solidaridad.
- En ausencia de pacto, la administración recaerá sobre los dos convivientes, y los cambios
realizados sobre el fondo común requieren el consentimiento de ambos.
Estos aspectos y otros que tengan por conveniente incluir se recogerán en escritura pública, cuando lo
que se aporta al acervo común es algún inmueble. Resulta bastante difícil admitir la existencia de una
sociedad cuando la pareja no formalizó la constitución, aunque ellos internamente, funcionasen como tal.
En estos casos los tribunales hablan de sociedades tácitas o irregulares, en la medida en que no se han
cumplido todos los requisitos legales, (pero se suelen rechazar cuando no resulta demostrada la intención
de los convivientes de compartir todos los bienes que adquieren. Se tiene que demostrar un elemento
subjetivo, algo que siempre implica dificultad en su prueba, que requiere acreditar la voluntad de unión,
de correr en común ciertos riesgos y de participar en las ganancias).
Por último, dicho régimen económico puede reflejarse en el Registro de Parejas de Hecho, estos Pactos
NO perjudican a terceros.
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o La contribución a las cargas familiares.

o Régimen de titularidad y disposición de bienes y ganancias, con la
constitución, en su caso, de una sociedad universal en cualquiera de
sus modalidades.
o Derecho a alimentos.
o Efectos patrimoniales derivados de la disolución de la pareja de
hecho: distribución y adjudicación de bienes, atribución del uso de la
vivienda y del ajuar familiar; contribución a las cargas familiares y
alimentos, indemnización a favor de alguno de sus miembros. Así,
pueden establecer una compensación económica cuando tras el cese
de la convivencia se produzca un desequilibrio económico en uno de
los convivientes, en relación a la posición del otro y que suponga una
merma con respecto a su situación previa al establecimiento de la
convivencia.
o Sobre ruptura de la pareja de hecho, vid. el siguiente enlace con
algunas sentencias sobre el tema: http://www.rupturas.es/la-accion-de-
enriquecimiento-injusto-tras-separacion-pareja

¿Qué derechos se le reconocen a la pareja de hecho?

-En las materias no reguladas expresamente en la Ley andaluza 5/2002, de 16 de

diciembre, las parejas de hecho quedarán equiparadas al matrimonio en las
relaciones jurídicas que puedan establecer con las diversas Administraciones
Públicas de Andalucía en su propio ámbito de competencias, con las únicas
limitaciones que puedan resultar impuestas por la aplicación de la normativa estatal.
Se equiparan a los matrimonios en las siguientes materias:
o Normativa andaluza en Derecho Público.
o Centros residenciales para personas mayores.
o Rehabilitación de drogodependencias.
o Información e intervención sanitaria.
o Vivienda pública.
o Normativa autonómica fiscal y tributaria.
o Función pública.
o Sobre pensión de viudedad en parejas de hecho, ver el siguiente
video https://www.youtube.com/watch?v=LepEaY8NFaw&index=2&
list=PL0412361C018C90BA

-En relación a los derechos en la economía privada para la equiparación con el

matrimonio de los miembros de cualquier tipo de pareja respecto a las licencias, ayudas
de acción social, condiciones laborales y similares, se estará a lo que se recoja en los
convenios colectivos y contratos laborales.