Definición
Definición
Definición
Todos ellos se obtienen al hornear materiales naturales, como la arcilla o el caolín, junto
con una serie de aditivos, como colorantes, desengrasantes, etc., todo ello mezclado y
cocido en un horno sucesivas veces.
Su gran dureza los hace un material ampliamente utilizado como abrasivo y como puntas
cortantes de herramientas.
Gran resistencia a altas temperaturas, con gran poder de aislamiento térmico y, también,
eléctrico.
Gran resistencia a la corrosión y a los efectos de la erosión que causan los agentes
atmosféricos.
Los materiales cerámicos son generalmente frágiles o vidriosos. Casi siempre se fracturan
ante esfuerzos de tensión y presentan poca elasticidad.
Clasificación
Arcilla cocida: de color rojiza debido al óxido de hierro de las arcillas empleadas. La
temperatura de cocción es de unos 800ºC. A veces, la pieza se recubre con esmalte de color
blanco (óxido de estaño) y se denomina loza estannífera. Con ella se fabrican: baldosas,
ladrillos, tejas, jarrones, cazuelas, etc.
Loza italiana: Se fabrica con arcilla entre amarilla-rojiza mezclada con arena, pudiendo
recubrirse de barniz transparente. La temperatura de cocción ronda los 1000ºC. Se emplea
para fabricar vajillas baratas, adornos, tiestos....
Se cuece a unos 1100ºC. tras lo cual se saca del horno y se recubre con esmalte.
Porcelana: obtenido a partir de una arcilla muy pura, caolín, mezclada con fundente
(feldespato) y un desengrasante (cuarzo o sílex). Su cocción se realiza en dos fases: una a
una temperatura de entre 1.000 y 1.300 °C y, tras aplicarle un esmalte otra a más alta
temperatura pudiendo llegar a los 1.800 °C. Teniendo multitud de aplicaciones en el hogar
(pilas de cocina, vajillas, tazas de café, etc.) y en la industria (toberas de reactores, aislantes
en transformadores, etc.).