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Capitulo 13

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Introduccion:

Al finalizar la enseñanza acerca de la sumisión, Pedro ha compartido


algunas instrucciones muy claras sobre cómo tener una vida feliz; el
problema para sus lectores es que han vivido una pesadilla de persecución
e incluso la muerte que los ha dejado perplejos. Es un dilema viejo: Si Dios
es soberano, ¿por qué permite que los justos sufran? ¿Por qué tengo que
someterme a un amo o marido cruel? Tal vez después de leer estas
promesas tú hayas pensado: “Lo he hecho, y todavía no veo la bendición.”
Ahora vamos a ver que nuestra fe nos permite hacer el sometimiento
máximo: a Cristo. Y esa perspectiva impacta toda la vida.

3:13
“¿Y quién os podrá hacer daño si demostráis tener celo por lo bueno?”
¿Y la respuesta de ellos? “¡Muchos! ¡A veces parece que cuanto más me acerco a
Jesús, más sufro!” Y Pedro responde (él sabe por su propia experiencia): “Vivimos
en un mundo cruel, bajo el dominio del maligno. No hay garantía de que no te
lastimarán a ti, una persona buena. ¡Mira lo que hicieron al Hijo de Dios!” Por
supuesto, no hay lógica en dañar a alguien que sana y salva, o al cristiano que
quiere bendecir a otros, pero esa es la naturaleza de este mundo caído.

1. Pedro no está diciendo que los cristianos no van a sufrir por parte de sus
enemigos, sino más bien, les enfatiza que al hacer el bien, su alma estará en
perfecta protección por parte de Dios.
2. El hombre puede destruir el cuerpo, pero el alma no la puede tocar.

3:14
“Pero aun si sufrís por causa de la justicia, dichosos sois. Y NO OS AMEDRENTEIS POR
TEMOR A ELLOS NI OS TURBEIS,”

1. Pedro dice que si sufrimos por causa de la justicia somos dichosos.


2. Si sufrimos por causa del pecado no somos bienaventurados.
3. Pedro nos exhorta a no tener miedo por causa de aquellos que nos maltratan.
Recordemos que la ayuda divina está de parte de aquellos que sufren por hacer el
bien (Mt. 28:20; Jn. 16:33; 1 Jn. 4:4; Ro. 8:31; He. 13:5; 2 P. 2:9; Sal. 34:19).

3:15
“sino santificad a Cristo como Señor en vuestros corazones, estando siempre
preparados para presentar defensa ante todo el que os demande razón de la
esperanza que hay en vosotros, pero hacedlo con mansedumbre y reverencia;”

1. Este pasaje es muy importante para el cristiano, ya que todos tenemos la


responsabilidad de santificar a Cristo como Señor en nuestros corazones. El debe
de ser el primero en nuestras vidas (Marcos 12:30-31; Mateo 6:33).
2. El cristiano debe de estar siempre preparado para presentar defensa ante todo el
que os demande razón de la esperanza que hay en vosotros.
3. Esto debe de llevarse a cabo con mansedumbre y reverencia. Esto indica nuestra
actitud al presentar defensa. El cristiano no debe de pelear, o enojarse al dar
respuesta de su fe.
4. La palabra “defensa” viene del griego APOLOGIA lo cual denota presentar
pruebas o defensa de lo que se esta argumentando.
5. La única manera de cómo vamos a estar listos para presentar defensa es
estudiando las Sagradas Escrituras y memorizándolas (Sal. 119:11; 2 Ti. 2:15; 1
Ti. 4:13; 1 P. 2:2; 2 P. 3:18).
6. ¿Esta usted listo para presentar defensa?

3:16
“teniendo buena conciencia, para que en aquello en que sois calumniados, sean
avergonzados los que difaman vuestra buena conducta en Cristo.”

1. Todos aquellos que viven conforme a la voluntad de Dios avergonzarán a todos


los que los calumnian injustamente.
2. La palabra “calumnia” denota el hablar mal, levantar falsos de otra persona.
3. Una buena conciencia es aquella que ha sido educada y guiada por medio de la
Palabra de Dios.

3:17
“Pues es mejor padecer por hacer el bien, si así es la voluntad de Dios, que por
hacer el mal.”

1. Esta es una verdad irrefutable. Mejor es sufrir por hacer el bien, que por hacer el
mal.
2. Si usted sufre haciendo el bien, será recompensado por Dios, pero si sufre por
hacer el mal, no tendrá recompensa alguna.
3. Muchos están sufriendo por hacer el mal, y no por hacer el bien.

3:18
“Porque también Cristo murió por los pecados una sola vez, el justo por los injustos,
para llevarnos a Dios, muerto en la carne pero vivificado en el espíritu;”

1. Pedro enfatiza que Cristo murió una sola vez para poder salvarnos (He. 9:28)
2. Jesús fue el justo que murió por los injustos (Ro. 5:8).
3. El profeta Isaías enfatiza lo que Cristo sufrió por causa de los transgresores (Is.
53).
4. Si no fuera por Cristo no pudiéramos llegar hasta donde está Dios (Jn. 14:6)
“…nadie viene al Padre si no es por mi.”
5. Jesús es la única puerta y medio a la salvación (Jn. 10:9; Hechos 4:12; 1 Timoteo
2:5).
6. Jesús murió en carne, pero fue vivificado en espíritu al resucitar de entre los
muertos por la gloria y el poder del Padre (Ro. 6:4; Col. 2:12).
3:19
“en el cual también fue y predicó a los espíritus encarcelados,”

1. Muchas interpretaciones han sido ofrecidas para este pasaje.


2. Algunos han sugerido que Jesús, mientras estaba en el Hades, fue y predicó a
todos los que estaban en tal lugar. Esto fue con el propósito de ofrecer salvación
a los que estaban allí. Esta interpretación está en conflicto con la Biblia, dado a
que el texto no está hablando de esto.
a. Esto no puede ser así, dado a que la Biblia dice que la predicación del
Evangelio se debe de hacer cuando las personas están con vida y no
después. Las personas van a dar cuenta a Dios de lo que hicieron
mediante estuvieron en el cuerpo, y no después (2 Co. 5:10).
3. Otros sugieren que Cristo le predicó a los ángeles caídos, algo que en realidad no
tiene apoyo bíblico.
4. La mejor interpretación que pudiéramos sugerir en cuanto a este pasaje es que
Cristo le predicó las buenas nuevas a los que estaban en los tiempos de Noe.
Entonces, Cristo les predicó por medio de Noe.
5. La frase “fue y predicó” pudiera ser entendida como dando la idea de que Cristo
predicó por medio del ministerio de Noe.
6. La frase “a los espíritus encarcelados” pudiera ser entendida como referencia a
los impíos de los tiempos de Noe, los cuales se encontraban en prisión por causa
de sus pecados.
7. La gente era de “los tiempos antiguos, los días de Noé.” Parece que no se
aplica a la gente de hoy.
8. Son aquellos que desobedecieron y motivaron a Dios a destruir todo el
mundo. Noé estaba construyendo el arca, y aún tenían la oportunidad de
entrar al arca y salvarse, pero se burlaron de Noé. Sin embargo, Dios
estaba esperando pacientemente su arrepentimiento.
9. Sus espíritus quedaron encarcelados. ¿Esperando el gran juicio? ¿En
algún lugar especial? ¿Todavía tenían la oportunidad de arrepentirse?
Muchas veces, cuando usan la palabra “espíritu” en el Nuevo Testamento,
se refiere a los ángeles o demonios. En este caso, serían demonios,
porque están encarcelados. ¿Cómo respondieron cuando Cristo los
predicó?
10. Siguen siendo importantes a Dios, y Cristo fue a través del Espíritu y les
predicó (¿durante su vida aquí en la tierra? ¿durante los tres días que fue
sepultado?). No dice nada de cómo respondieron.
11. Aunque no contestan todas las preguntas, estos versículos que Pedro
escribió en su segunda carta (2 Pedro 2:4 y 5) pueden ayudarnos a
entender estos “espíritus”: Dios no perdonó a los ángeles cuando pecaron,
sino que los arrojó al abismo, metiéndolos en tenebrosas cavernas y
reservándolos para el juicio. Tampoco perdonó al mundo antiguo cuando
mandó un diluvio sobre los impíos, aunque protegió a ocho personas,
incluyendo a Noé, predicador de la justicia.

Pedro aprovecha la experiencia de Noé para introducir el tema del bautismo. Hay
varias cosas en el Antiguo Testamento que son tipos o símbolos de realidades en
el Nuevo Pacto. En esta imagen, Cristo sería el arca que nos salva. Pero Pedro
también dice algo que se tiene que tomar en el contexto de toda la enseñanza
bíblica acerca del bautismo: dice que el bautismo nos salva. Sabemos que el
bautismo es el símbolo de la decisión que tomamos de aceptar a Cristo como
Señor y Salvador. El bautismo es importante; no es opcional que el creyente sea
bautizado en agua como símbolo de la muerte de la vieja naturaleza y el nuevo
nacimiento. Pero el bautismo en sí no te salva.

3:20
“quienes en otro tiempo fueron desobedientes cuando la paciencia de Dios esperaba
en los días de Noé, durante la construcción del arca, en la cual unos pocos, es decir,
ocho personas, fueron salvadas a través del agua.”

1. Estos espíritus encarcelados en otro tiempo fueron desobedientes mientras Dios


esperaba con paciencia el arrepentimiento de ellos.
2. La frase “quienes” es referencia a los espíritus encarcelados.
3. Pedro nos recuerda que sólo ocho personas fueron salvas a través del agua.
4. Sólo ocho almas tomaron la decisión de obedecer el llamado de Dios y la
predicación de Noe.
5. Pedro dice que fueron salvas por medio del agua, lo cual indica que el agua
purifico el pecado en los días de Noe, terminando con la maldad de aquellas
personas desobedientes a Dios.
6. Como podemos ver la frase “a través del agua” indica por medio del agua. El
agua levantó el arca sobre las aguas, evitando de esta manera la destrucción de
estas ocho almas.
3:21
“Y correspondiendo a esto, el bautismo ahora os salva (no quitando la suciedad de
la carne, sino como una petición a Dios de una buena conciencia) mediante la
resurrección de Jesucristo,”

1. Pedro conecta el verso 20 con el 21 para hacer una aplicación muy importante.
2. Ahora Pedro habla del bautismo de Efesios 4, el cual Jesús mandó a sus
discípulos a predicar (Mr. 16:15-16; Mt. 28:19-20). Este bautismo también nos
salva, así como el agua del arca de Noe lo hizo.
3. Pedro enfatiza que el bautismo nos salva, algo que está en perfecta armonía con la
enseñanza de Jesús (Mr. 16:16).
4. El bautismo no quita las inmundicias de la carne física, sino más bien, las
inmundicias espirituales (Hch. 2:38; Ap. 1:6).
5. La persona que se bautiza llega a tener una buena conciencia mediante la
resurrección de Jesús. Tiene una buena conciencia dado a que está tranquila
porque se ha dado cuenta de que sus pecados han sido perdonados por Dios,
mediante este acto de obediencia.
6. La frase “la resurrección de Jesús” indica que es por medio de la resurrección
de Jesús como obtenemos la salvación. Si Jesús no hubiera muerto y resucitado,
nuestra salvación no hubiera sido posible.
7. El bautismo es una semejanza de la muerte, sepultura y resurrección de Jesús (Ro.
6:3-4; Col. 2:12).
8. Algunos argumentan que el bautismo no tiene nada que ver con nuestra salvación,
sin embargo, este texto refuta claramente tal argumento falso.

3:22
“quien está a la diestra de Dios, habiendo subido al cielo después de que le habían
sido sometidos ángeles, autoridades y potestades.”

1. Jesucristo se encuentra a la diestra del Padre. Esta es la enseñanza clara del


Nuevo Testamento (Mr. 16:19; Col. 3:1-2; He. 12:1-2).
2. Cristo en realidad subió al cielo y fue recibido a la diestra del Padre (Mr. 16:19;
Hch. 1:9-11).
3. A Cristo se le sometieron ángeles, autoridades y potestades, ya que Dios ha
sometido todo bajo sus pies (Ef. 1:22-23; Mateo 28:18).
4. Cristo tiene toda la autoridad en el cielo (ángeles) y en la tierra (todo).

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