El Hijo Pródigo
El Hijo Pródigo
El Hijo Pródigo
INTRODUCCIÓN
1. Con la parábola de "El Hijo Pródigo", Jesús alcanza la cumbre en Su respuesta a la acusación de
los fariseos y escribas contra Él...
a. ¿Su acusación? "Este a los pecadores recibe, y con ellos come." – Luc 15:2
b. ¿Su respuesta? Tres parábolas en las cuales ilustra "El Tierno Amor del Padre por el
Perdido"(Hendriksen)...
1) "La Oveja Perdida" – Luc 15:3-7
2) "La Moneda Perdida" – Luc 15:8-10
3) "El Hijo Pródigo" – Luc 15:11-32
4. La parábola revela también mucho más sobre el corazón del hijo mayor que no perdonaba, cuyo
propósito en esta parábola es reprender a aquellos que no están dispuestos a alcanzar y recibir a
los perdidos que se arrepienten
[Así finaliza esta "perla y corona" de todas las parábolas, dejándonos con un marcado contraste
entre el amor del Padre y la envidia del hermano mayor. No es dada ninguna otra explicación, pero
realmente no es necesaria ninguna si contemplamos esta parábola en su contexto.
Para asegurarnos de no observar lo obvio, solo unos pocos pensamientos en relación a...]
CONCLUSIÓN
1. "El Hijo Pródigo", junto con las dos parábolas previas, fueron dichas por Jesús para enseñar
estas lecciones importantes a los fariseos y a los escribas
2. Sin embargo en tanto que se dirigió a ellos, ¡imagine como estas parábolas confortaron los
corazones de aquellos "recaudadores de impuestos y pecados" que se habían acercado a Jesús
para oírle!
a. Aunque considerado inaceptable por la elite religiosa, ¡ellos aprendieron que podrían ser
aceptados por Dios!
b. Que Dios estaba buscando por ellos, ¡y que los recibiría amorosamente si se arrepentían!
-- ¿Es este el mismo mensaje con el que convencemos a aquellos que están perdidos en el
pecado, pero que están dispuestos a acercarse y escuchar el evangelio?
"Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos.
No he venido a llamar a justos, sino a pecadores al arrepentimiento."
(Luc 5:31-32)
Estimado amigo, ¿Tiene el deseo como el hijo prodigo de "volver en sí", dándose cuenta de
qué tan bajo cae alguien cuando se aleja de Dios?
Podría ser movido al arrepentimiento por esta parábola, "el evangelio dentro del evangelio"; ¡y
podría ser que Usted nunca olvide que su Padre celestial espera con ansia su reconciliación con Él!
Junto con Dios, le ofrecemos el evangelio de Cristo (ver Mr 16:15-16) como un mensaje de
reconciliación:
"Así que, somos embajadores en nombre de Cristo, como si Dios rogasepor medio de nosotros;
os rogamos en nombre de Cristo: reconciliaos
con Dios." (2 Cor 5:20)