Anhelando Su Presencia

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Anhelando Su Presencia

Salmos 42:1-2
“Como el ciervo brama por las corrientes
de las aguas, Así clama por ti, oh Dios, el
alma mía. Mi alma tiene sed de Dios, del
Dios vivo; ¿Cuándo vendré, y me
presentaré delante de Dios?”

Salmos 27:4 
Una cosa he demandado a Jehová,  ésta
buscaré; Que esté yo en la casa de
Jehová todos los días de mi vida, Para
contemplar la hermosura de Jehová,  y
para inquirir en su templo.

Desde el comienzo, el proyecto de Dios


para con el hombre siempre ha sido, de
que el hombre disfrutara de la presencia
divina, en las familias, en los hogares, en
los matrimonios.
Pero a raíz de la desobediencia del
hombre, provocó una ruptura en la
relación entre Dios y el ser humano, una
ruptura que hizo una separación a causa
del pecado.

Desde ese momento que el ser humano


pecó contra Dios y la presencia de Dios
se alejó de la raza humana, hubo un
anhelo ferviente del ser humano, por
volver a sentir la presencia de Dios.
Y desde ahí se empezaron a buscar
diferentes medios, diferentes
alternativas, diferentes posibilidades, en
que el hombre pudiera volver a
experimentar la presencia de Dios en sus
vidas.
Ejemplo de los ídolos en el pueblo de
Isrrael
Tal punto que una vez un hombre
dijo: “Quien me diera el saber dónde
hallar a Dios, yo iría hasta su silla”.

Dios sabía que el ser humano necesitaba


de él, (porque el ser humano sin Dios no
es nada) y comenzó a diseñar un plan.

Y dentro de ese plan llamó a un hombre


llamado Moisés, y le dijo a Moisés que
tenía que construir un lugar, donde la
presencia de Dios iba a ser depositada.

Moisés construyó ese lugar conforme a


las medidas, normas y reglamentos que
el Señor le dictó para que construyera el
lugar de reunión, donde iba a reposar la
presencia del Señor.

Ese lugar tenía tres áreas específicas y


especiales
El atrio era iluminado por la luz solar.

El lugar santo era iluminado por


lámparas que estaban encendidas, pero
había otro lugar.
El lugar santísimo estaba iluminado con
una luz propia, que era la misma gloria
de Dios.

Ahí estaba literalmente la presencia De


Dios
Y había un anhelo en el sumo sacerdote
de cada año un día podría entrar y sentir
la presencia De Dios

Te puedes imaginar cómo sería el deseo


y el anhelo de ese sacerdote por entrar y
poder pálpar la misma Gloria De Dios
…..

…………
Y así era en aquel tiempo pero hace más
de 2.000 años Dios volvió a cambiar de
método y se puso aún más cerca del ser
humano

Antes solo uno podía entrar a la


presencia De Dios

No importaba si todos lo anhelaban solo


uno podía entrar

Ahora todo el que quiera y anhele puede


sentir su presencia

……………

Anhelar es desear algo con pasión. Hay


quienes anhelan riquezas, gloria, fama,
reconocimiento, poder, placeres
mundanales.

Pero hay quienes ponen todo esto a un


lado y su anhelo mayor es experimentar
la presencia de Dios en sus vidas.
Para experimentar la presencia de Dios
necesitamos
• Desear esa presencia en nuestro
corazon (no de boca)
Isaías 29:13 “Porque este pueblo se
acerca a mí con su boca, y con sus
labios me honra, pero su corazón está
lejos de mí...”

• Tener comunión con Él (en todo


momento)
• Consagrar nuestras vidas a Él
Para experimentar la presencia de Dios,
Dios debe ser lo más importante en
nuestra vida

Lucas 10:27 “Amarás al Señor tu Dios


con todo tu corazón, y con toda tu alma,
y con todas tus fuerzas, y con toda tu
mente...”
Amar a Dios es hacer todo lo que el te
mande a hacer. Es rendirte a Él de todo
corazón. Amar a Dios es no vivir para ti
sino para Él.
Es saturar tus pensamientos con sus
deseos.
Amar a Dios es preguntarle; ¿Señor cual
es tu voluntad para mi vida? El problema
es que estamos arraigados a esta
tierra…
 Hay que cuidarse: de las ansiedades
de este mundo
 De las aspiraciones por las cosas
terrenales
 De los placeres del mundo que quitan
el hambre y la sed de Dios
 Que reprimen el deseo de buscar su
rostro en oración.
“Mas buscad primeramente el reino de
Dios y su justicia...”

¿Y como puedo buscar a Dios


sinceramente y de todo mi corazón?
• Humillándonos
• Reconociendo mis faltas
• Pidiendo su perdón
• Esforzándonos
• Abandonándonos a la búsqueda de
Dios
No hay nada más hermoso que sentir su
presencia en nuestras vidas

Éxodo 33:14-16
Dios le dijo a Moisés: “Mi presencia irá
contigo, y te daré descanso
15Y Moisés respondió: Si tu presencia no
ha de ir conmigo, no nos saques de aquí.
16¿Y en qué se conocerá aquí que he
hallado gracia en tus ojos, yo y tu pueblo,
sino en que tú andes con nosotros…?”
Nuestra oración debería ser; Señor sin tu
presencia…
• Yo no me muevo.
• No me dejes dar un paso
• No me dejes tomar decisiones si no vas
a estar conmigo
• Desfallecen mis fuerzas
• Se entristece mi corazón

Salmos 119.58 “Tu presencia supliqué de


todo corazón...”
Nuestra oración debería ser; Señor yo
anhelo tu presencia
• En mi ministerio, en mi hogar, el
trabajo, en la escuela, donde quiera que
yo vaya.
• Tu presencia me da vida
• Tu presencia me alienta
• Tu presencia me levanta
• Tu presencia me llena de gozo y
seguridad (Salmos 16:11)
“... En tu presencia hay plenitud de gozo;
Delicias a tu diestra para siempre.”
Mi alma tiene sed de Dios.
 Como el agua es esencial para la vida
física, así Dios y su presencia son
esenciales para la vida del hombre.
 Los verdaderos creyentes tienen
hambre y sed de Dios
 Los verdaderos creyentes tienen
hambre y sed de su presencia.
 Dejar de tener sed y hambre de Dios
es morir espiritualmente.
No podemos permitir que nada
disminuya
Nuestro deseo por las cosas de Dios.
Iglesia; Anhelemos la presencia de Dios
en nuestras vidas
“Como el ciervo brama por las corrientes
de las aguas,
Así clama por ti, oh Dios, el alma mía.”

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