Capinota Album

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CAPINOTA

UN LUGAR TURISTICO EXELENTE

La

provincia de Capinota, es considerada una de las más ricas en cuanto a recursos


naturales. Tiene características especiales, pero la principal es que su propósito
es contribuir al progreso y felicidad de sus habitantes. Esto es posible gracias a
una visión diferente de lo que es la inversión. Y es que hay una diferencia
fundamental entre las inversiones privadas tradicionales y las inversiones de las
cooperativas, en este caso, de la Cooperativa Boliviana de Cemento, Industrias y
Cemento (COBOCE Ltda.), según la “Monografía de la provincia Capinota” del
Centro de Investigación y Desarrollo Regional (Cidre).
HISTORIA
El documento del Cidre da cuenta que en el
periodo colonial los conquistadores se
asentaron en un valle fértil, de clima
templado y comenzaron a sentar las bases
de unidades productivas.
El capitán Lorenzo Aldana, quien llegó a
poseer el repartimiento de Tapacarí, fundó a
favor de los padres Agustinos un Patronato,
en su extenso repartimiento de Paria, al que
correspondieron Capinota y Sarcobamba.
Ahí mismo se mandó a construir un hospital
bien equipado, encomendando su administración a dicha orden religiosa.
Los padres Agustinos fundaron Capinota el 27 de abril de 1559, instalando allí un
convento.
Según el exasambleísta departamental por Capinota Leocadio Mamani, fue creada
por ley el 28 de septiembre de 1908 y promulgada el 1 de octubre del mismo año
por el gobierno de Ismael Montes, separándose de la provincia Arque.
SU NOMBRE
Del origen de la palabra Capinota existen dos
versiones, una quechua que cuenta que durante el
reinado del inca Huayna Kapac este envió un
"chasqui" con correspondencia, el que al llegar al
lugar exclamó "Caypi-nota" (aquí está la nota).
La versión aymara, que parece ser más valedera,
proviene de las voces "Kapu-nutha” que significan
"manojo de la punta de la tuna", forma que posee el
cerro Pocotayca.
En el Siglo XVIII, Capinota, como gran parte de los
poblados del valle de Cochabamba sufrió una
epidemia, al parecer por la influencia catarral, que
diezmó a parte importante de la población,
especialmente nativa. Pese a esto, comenzaron a operarse una serie de
transformaciones en la estructura económica del estado colonial.
SU VOCACIÓN
Además de la producción agropecuaria que se daba en latifundios y haciendas, en
las ciudades existían una gran cantidad de artesanos, entre ellos carpinteros,
ebanistas, ferreteros, hilanderos, tejedores, zapateros, armeros, panderos,
chicheros, albañiles, alfareros, etc.
En la monografía del Cidre también hace referencia a una actividad que se
destacaba en las ciudades y villas del valle, como
era la de los plateros u orfebres en plata.
En ese siglo se redujo a ínfimas proporciones la
viticultura, actividad económica que era
característica de Capinota hasta entonces,
reemplazando la producción de cereales y la de
frutales de huerto.
En esa época, la producción de la zona comprendía
principalmente maíz, papa (runa e imilla), cebada,
alfalfa, legumbres, hortalizas y frutas.
Esta provincia también se constituyó en un lugar de
residencia de autoridades administrativas
Es así que Capinota no solo generó un mercado
local basado en la producción agrícola, sino, con la llegada de la red ferroviaria, se
constituyó en lugar de recreo y veraneo de los terratenientes y las familias
inglesas que llegaron al país.
“Se había constituido en una zona tradicional de veraneo y reposo de los oligarcas
de aquella época, además de espacio de servicios para las haciendas de las
alturas”, dice la monografía.
Es en 1971 que en el centro poblado de Irpa Irpa se instala la fábrica COBOCE
Ltda, que “produjo una repercusión económicamente importante por sus
características industriales y su particular dinámica productiva y de
comercialización”.
CUATRO POTENCIALES
Para el exasambleísta Leocadio Mamani, Capinota tiene
cuatro potencialidades desarrolladas, de las que sus
pobladores se sienten orgullosos.
La primera es la producción de vid y el guarapo
artesanal y tradicional. Varios escritores declaran a la
provincia como “la capital del guarapo”.
La segunda es la producción de la semilla de
hortalizas. Capinota fue declarada por Ordenanza
Municipal 050/2011 como “Primer productor de semillas
de hortalizas de Bolivia”.
La tercera es la producción de cemento ya que es en Irpa
Irpa donde se encuentra uno de los más grandes
yacimientos de materia prima, a nivel nacional.
La cuarta es la materia prima de los minerales no
metálicos. La más conocida es la piedra caliza, pero
también están los áridos y agregados.
TURISMO
Los atractivos turísticos en Capinota están fuertemente ligados a la religiosidad y
cultura de sus habitantes. En el centro se encuentra la parroquia de San Pablo
que recibe la visita de feligreses. La devoción a la Virgen de la Asunción o la
Asunta, se expresa con festejos y actos religiosos. Entre sus fiestas costumbristas
destaca el tradicional carnaval capinoteño, donde pandillas llegan desde diferentes
comunidades a compartir las coplas propias de su creación. Luego, está el festival
cultural de Huaych’oma y el tradicional llank’aku o festival del arado. 
-Virgen de Asunción o la Asunta
La fiesta de la Virgen de la Asunción se celebra en Oriente desde el siglo VI y en
Roma desde el siglo VII. El 1 de noviembre de 1950, el Papa Pío XII, estableció  la
Asunción de la Santísima Virgen María como dogma de la iglesia católica. El
dogma consiste en creer que María fue elevada al cielo en cuerpo y alma.
Existe confusión o poca claridad sobre el  origen de esta fiesta. Posiblemente está
relacionado con la fiesta de  alguna Iglesia  y no necesariamente por ser  la fecha
del aniversario de la muerte de María. De cualquier manera, la fiesta y la fecha se
han difundido en el mundo. En casi todos los países se la festeja y su advocación
ha sido apropiada por muchos de ellos. Algunos la declaran fiesta nacional y la
virgen ha sido nombrada patrona o protectora.
En Bolivia sucede lo propio. Muchas ciudades la
han nombrado como Patrona, como es el caso de
Oruro, donde su misma catedral lleva su nombre. 
Llallagua tiene una tradicional fiesta dedicada a ella.
En los últimos años ha ido creciendo en importancia
su fiesta en Quillacollo, aunque en ese proceso ha
ido conociéndose más como Virgen de Urkupiña
que como Virgen de la Asunción, esto por el lugar
donde se la celebra.
En Capinota se le rinde devoción aún antes de que
prosperara la fiesta de Urkupiña.  Hasta hace unas
décadas era la fiesta religiosa más sonada del
pueblo. A partir de la Reforma Agraria y por
influencia de la fiesta de Urkupiña su boato ha ido en disminución.
-Carnaval Capinoteño
Pasó el tan esperado carnaval
capinoteño y dejó una gran resaca en
cada una de sus actividades. Es un
carnaval con agenda propia, ya no es
el carnaval de antaño con aire
campestre, cuando se bailaba y
festejaba toda la semana y se pasaba
de una comunidad a otra para visitar a
los parientes o amigos, para coplear,
bailar con plantas de maíz al hombro y
presenciar el Tinku, que acontecía por
lo menos en cuatro lugares.
Ahora el carnaval se centra en el festejo del día domingo, cuando hacen su
presentación las principales comparsas, que con alguna anticipación se
prepararon para este día central del carnaval capinoteño. En los últimos años han
aumentado las comparsas con carros alegóricos y representaciones de las más
raras y diversas. Casi todas ellas preparadas con mucha habilidad y utilizando
cañahuecas y cartón, forrado con papel lustre.
Sin embargo, como siempre, los grupos
que predominan son los improvisados,
que al calor del baile y la farra utilizan
cualquier indumentaria para disfrazarse
y participar en la “entrada”, que ahora
se llama corso. Se pueden ver
disfraces de mujeres, cholitas,
espantapájaros, vagos y hasta de
espíritus de barro (mayu almas).
Cualquier cosa es conveniente para
entrar bailando.
Un buen número de comparsas
presenta una reina, que normalmente entra bien protegida, en medio de una
cubierta de malla de alambre, so pena de recibir una andanada de globos, muchos
de ellos dolorosos. De cualquier manera no hay reina que no salga mojada por
completo, por lo que se le recomienda entrar en bikini.
-Visita al cementerio y mast’akus para recibir a nuestros difuntos
Como todos los años y como toda la población capinoteña acudimos puntualmente
al cementerio del pueblo a rendir visita a nuestros difuntos. Como todos los años
el cementerio estaba lleno de gente que recordaba a sus muertos con ofrendas
consistentes en velas, flores, comida, bebida, rezos y música. En los últimos
tiempos van aumentando los grupos de niños que rezan para los muertos a
cambio de unos pesos; pero ahora lo hacen en castellano, puesto que se han
olvidado los rezos tradicionales en quechua, que eran propicios para la ocasión,
tal es el caso del siguiente verso:
 “Leuke, Leuke Puka Chaki, Imamamchus
jamurqhanki. Si Diosninchej rikhusonqa,
Chakiyquita phirisonqa”. “Alabado sea el
santísimo, Sacramento del altar. Y la Virgen
concebida, Sin pecado original” Es el
proceso de transculturización que, de a poco, va
reemplazando la lengua nativa y sus contenidos
folklóricos por otros más occidentales y
totalmente en español. Por otra parte, no faltan
los desubicados que en el pueblo tratan de
mostrar algo relacionado con Halloween. Ya
está consolidado el ofrecer música a los
difuntos, para lo que circulan grupos musicales
de viento y uno que otro Mariachi, que ofrecen
sus servicios a 20 Bs. la pieza. La canción más
escuchada es The Sound of Silence, de Simon
and Garfunkel, que con pequeños arreglos se ha convertido en la música de
funeral para acompañar los entierros. Ha desplazado a la otrora marcha fúnebre
oficial: El terremoto de Sipe Sipe.
Los mast’akus se han tendido en las mesas desde las doce del 31 para recibir a
las almas, que se quedan hasta las doce del 1 de noviembre, cuando se vuelcan
las mesas para despedir el alma de los difuntos, que vuelven a su morada eterna.
Generalmente los mast’akus se preparan para los muertos que han fallecido en el
transcurso del último año. En la ocasión visitamos el mast’aku ofrecido a la Sra.
Vitalia Marquez de Rocabado, fallecida en el mes de agosto de 2017. Todos sus
parientes, vecinos y amigos se hicieron presentes para ofrecerle sus oraciones y
recibir en cambio un suculento plato de t’anta wawas y masitas. A las doce del día,
se vació la mesa de todo su contenido, que tenía los platos y comidas que eran de
la preferencia de la difunta, y se volcó la mesa como señal de despedida y deseo
de descanso eterno.
Finalmente, los parientes y amigos que permanecieron en la casa, fueron invitados
con un rico plato y cervezas frías, confraternizando amigablemente, en un
ambiente que en ningún momento deja de ser de recogimiento. Ese, ambiente de
unión es, tal vez, el último aporte del difunto los parientes que quedan vivos.
-Día de Difuntos en Capinota, reencuentro con nuestros seres queridos
Como todos los años asistimos a
la fiesta más importante del año,
la celebración de la fiesta de los
Difuntos. Acudimos puntualmente
a la cita en el cementerio. Allí nos
reunimos los hermanos y
encontramos a amigos y
familiares. Todos llevaban flores
y velas, además de algún traguito
corto para calentar el ambiente.
Limpiamos la tumba de nuestro
padre y de las abuelas. Les
ofrecimos  unas piezas de banda,
principalmente a mi padre, que era muy alegre. Unos boleros y la canción de su
equipo de futbol, el Aurora. Después dimos una vuelta al cementerio, visitando y
saludando a los amigos. Siempre hay gratas sorpresas de gente que llega de lejos
o de mucho tiempo a visitar a sus muertos. Todos se esmeran en limpiar y decorar
las tumbas. Las  velas brillan y alumbran el camposanto. Hay música, bebidas y
reencuentro. Todo en paz y familiaridad.
Al día siguiente debemos cumplir con los parientes y amigos que han partido.
Pareciera que cada año aumenta el número de fallecidos. No nos pudimos dar
abasto con todos. Visitamos a los más conocidos o cercanos. Empezamos con el
mast’aku preparado para Don Félix
Enríquez, bien provisto y con la
participación de varios de sus hijos.
Fue prolífico en su larga existencia.
Rezamos y nos hicimos acreedores
a nuestra ración de masitas y t’anta
wawas.
De ahí partimos al pueblo, a rezar
por el alma de Freddy Larraín, quien
estaba muy visitado y con el apoyo y presencia de todos sus hermanos. Al tiempo
la mesa estaba también ofrecida al cuñado, Guido Galleguillos, quien falleció
coincidentemente este último año. Bien provista de los platitos y golosinas que
ambos apreciaban en vida. Tomamos unos ricos cocteles preparados por el
Negrito, quien era el responsable de las bebidas. Encontramos varios amigos, casi
todos de la misma generación de Freddy. Abrazos y despedidas.
-En la Feria del Guarapo, la plaza tiene vida propia
Puedes sentir el aroma dulce en el aire.
Puedes sentir esa brisa cálida que nos
envuelve en un momento intacto y nos
permite encontrarnos, con la tierra, con
la uva, con la música de nuestros
corazones encendidos.
Cada año acudimos al llamado de una
fiesta que nos transporta en el tiempo y
mueve la esencia misma de nuestra
identidad cultural, de nuestras raíces y
de nuestros instintos.
Hoy es la feria del Guarapo y se
empieza a sentir una atmosfera cálida
que huele a tierra húmeda y a uva
recién pisada. Suena la música y
puedes ver cantaros adornados con
flores mientras cateas jugo de uva
negra macerada con una danza de
sabores, aromas y texturas.
El centro del pueblo es el lugar de
encuentro de amigos, vecinos,
paisanos y desconocidos. Viejos,
jóvenes y niños. La plaza de Capinota
es el alma de una fiesta que nos conecta con lo antiguo de nuestra memoria y nos
recuerda que somos uno.
Mientras paseas por las calles de Capinota puedes ver que el pueblo se prepara
para la gran fiesta. En la plaza se preparan los puestos de venta de guarapo y
exquisiteces culinarias típicas del valle. Después de un lambreado de conejo, y
después de haber cateado las tres variedades de guarapo. me animo a darle mi
primera jarra de uva negra.
Son las cuatro de la tarde y suena el temple endiablado del charango de don Bony
Alberto Terán. La plaza empieza a hervir. El guarapo nos ha poseído. Suenan la
zapateada y las palmas. Empezamos a bailar.
La plaza está repleta. El guarapo de uva blanca de doña Alejita es lo mejor del
universo. Mientras los jóvenes dan vueltas en la plaza, algunos ya se parquearon
en alguna esquina o en frente del Quiosco, que es el escenario ideal para fundirse
con la gente.
-Fin del Carnaval: Tentación en Sak´Amalla
Desde tiempos inmemoriales como
establece la tradición del carnaval
capinoteño, el gran Tinku de Tentación
se realiza en la localidad de
Sak’amalla, cerrando una semana de
diversos festejos populares que
tuvieron lugar en distintas
comunidades aledañas a la capital
provincial.
De la organización se encargaron la Junta de Vecinos de Sak’amalla y los jóvenes
de los equipos de fútbol Sak’amalla (varones y mujeres) y el auspicio estuvo a
cargo del Honorable Gobierno Autónomo Municipal de Capinota, mediante la
Dirección de Desarrollo Humano y Social en su área de gestión cultural.
A la primera hora de la mañana (06 am) del domingo 09 de marzo de 2014, el
estruendoso estallido de una dinamita dio inicio a las actividades previas al gran
“Tinku”. Entre las actividades destacadas estuvieron el partido de fútbol que
disputaron dos equipos, conformados por jóvenes del lugar y de los barrios
circundantes. Mientras que las qhateras (vendedoras) iban llegando a los lugares
señalados el día anterior, para instalar
sus carpas y yanthuchas, bordeando el
escenario deportivo.
Chicote en mano los dirigentes del
evento ingresan al centro de la cancha
después de anunciarse el comienzo de
la actividad central, el esperado Tinku de Tentación. Personas de todas las
edades y provenientes de las comunidades más alejadas se congregan a orillas
del círculo demarcado para restringir a los espectadores.
-En Capinota festejan al Señor de la Sentencia
Como todos los años, se realizó
la celebración que festeja la
imagen del Señor de la
Sentencia que perteneció a la
Sra. Angélica Soria de
Rocabado. La fiesta se llevó a
cabo en el Día de los
Compadres, una semana antes
del carnaval. Es preparada por
los descendientes de la familia
Soria, principalmente de Don
Demetrio Soria, en la actualidad
agrupados en las familias
Larraín, Rocabado, Zeballos y
Arce.
La imagen, de tamaño natural, ahora se encuentra en poder de los descendientes
de Doña Emma Rocabado de Larraín.
Los pasantes de la fiesta fueron los Señores Carlos Arce (hijo) y familia, mismos
que fueron apoyados por una serie de voluntarios que se ofrecieron con
anticipación de un año. Nuevamente brilló el Señor con nuevo atuendo trabajado
por la Sra. Deysi de Arce, mamá del pasante principal.
Después de la misa celebrada antes de mediodía comenzó la celebración hasta
avanzadas horas de la tarde, donde se notó la esmerada atención de los
anfitriones. Buena comida, bebida y mejor música adornaron la fiesta en todo su
transcurso.
Continuando la tradición, se nombraron nuevos pasantes para el año 2015,
recayendo la misma en la familia Rocabado Quevedo, que ya comienza a tomar
sus previsiones para el momento de cumplir la promesa al Señor de la Sentencia.
COMIDAS
-Interesante Feria de la Panadería y la Repostería Capinoteña
Como anunciado, el domingo 7
de abril se realizó la primera
Feria de la Panadería y la
Repostería Capinoteña, evento
organizado por la Alcaldía
Municipal junto con panaderos y
reposteros locales. Pese a
haberse realizado en el día del
peatón, su realización
sorprendió por las múltiples
iniciativas institucionales,
familiares y personales que se
dieron cita en la plaza del
pueblo. Además, sorprendió
porque es una iniciativa que promueve una actividad productiva, el
emprendimiento alrededor de la elaboración del más básico de los alimentos: el
pan y sus derivados.
Pudimos ver la presentación de unos quince puestos, bien presentados, con una
variedad de productos de panificación y una naciente repostería que, de verdad
nos pone optimistas. Más allá de nuestros clásicos panes vallunos, hechos con
harina integral y poca levadura, o nuestras ch’amas con harina cercana al afrecho
o combinadas con harina blanca, pudimos apreciar toda suerte de panes, de
diferente textura y tamaño. Panes redondos, con queso (sarnitas) o sin queso, o
en forma de marraqueta o pan francés. Lo mismo pasó en el arte de la repostería,
donde pudimos apreciar los mayores progresos.
Nos llamó la atención el proyecto de los nueve hermanos Vayne, que tuvo una
presentación impecable, liderados por su mamá, la ya consagrada Susana,
especialista en empanadas, mismas que volaron en tempranas horas de la
mañana ferial. Pese a su edad, Doña Susana dirigió personalmente su stand,
acompañada de simpáticas azafatas y vendedoras, todas conveniente e
higiénicamente presentadas. No olvidemos que la familia Vayne viene de
habilidosos artesanos de la sastrería, que no solo confeccionaron llamativos
uniformes, sino, también, bolsas de tela con el logo de su empresa, útiles y
ecológicos para llevar los panes. Fue uno de los stands más concurridos y
presentables.
-El api de Doña Adela
Si no encuentra donde comer o tiene ganas de algo dulce y caliente, especial para
el frío, en Capinota tiene la opción de tomarse un rico api en la plaza principal, los
días viernes a domingo, a partir de las 20 horas; o muy de mañana, cerca del
parque, donde salen los micros.
La autora es Doña Adela, una
dedicada señora que se ha
especializado en preparar y vender
su sabroso producto.
Complementariamente suele vender
también tojorí o tujuré, pero su
especialidad es el api, producto kolla
por excelencia, de origen
prehispánico y que sólo tiene un
parecido con el atole mexicano. Lo
prepara en ollas grandes, donde
hace hervir el agua con canela y
clavo, y donde va añadiendo los
ingredientes de su receta hasta
lograr el espeso líquido de color morado o blanco, que lo vende de un solo color o
mezclando los dos. El api preferido el de color rojo, que es un sabroso brebaje
hecho de maíz morado o culli. El blanco lo prepara del maíz amarillo. A este
preparado le añade limón para mantener el color y darle cierta acidez. Finalmente,
le adiciona el azúcar. Algunas recetas hablan de añadir pedacitos de cáscara de
naranja y un poco de anís. El secreto a voces es que el mejor maíz es el valluno,
el de Tarata tiene prestigio aunque el chuquisaqueño es reconocido como el mejor
y más caro.
-La Bohemia, el lugar de moda
Sin lugar a dudas la apertura y el funcionamiento de la pizzería La Bohemia han
cambiado la noche capinoteña y están influyendo de manera profunda en un
cambio de hábitos culinarios y de gustos de la población local.
Ya hablamos de los primeros esfuerzos de sus propietarios, Miguel Paz y su
esposa Soledad, cuando comenzaron su emprendimiento como un puesto
ambulante en plena plaza 1ro. de Octubre. Fue una idea genial, con románticas
velitas alumbrando el centro de sus mesas de madera. Más de un año después la
pizzería se ubicó en un local fijo, a media cuadra de la plaza, que ha ido creciendo
en tamaño y número de mesas.
Cuando vimos a los jóvenes
propietarios en sus primeros esfuerzos
dudamos que irían a tener éxito con
una comida tan de ciudad y con toque
internacional, pero la experiencia
demostró que los capinoteños también
estaban cambiando; que sus gustos se
estaban globalizando y sus paladares
abriéndose a nuevos sabores.
La pizza se hace con una masa plana
de harina de trigo, sal agua y levadura,
a la que se le añaden algunos elementos comunes como la salsa de tomate y
queso fundible, generalmente muzzarela. A esta base se le añaden ingredientes
internacionales como salami, champiñones, jamón, aceitunas, etc. o locales como
cebollas, maíz, piña o hasta el locoto. La pizza se originó en Nápoles (Italia) y de
allí se extendió por todo el mundo con infinidad de variantes e influencias locales.
En La Bohemia se puede optar por una de las cuatro pizzas ofrecidas en su menú:
la Napolitana, la Criolla, la de Jamón Tradicional o la Hawaiana. Todas son
servidas en tres tamaños y de manera limpia y profesional.
-Buscar a Doña Constantina
Si usted llega a Capinota y no consigue un lugar para comer, de seguro que Doña
Constantina puede salvarle del problema, principalmente el día sábado, que es el
día menos socorrido en materia de restaurantes. Como es día de cancha todo el
mundo va a proveerse a la ciudad y no cocina. Además, los empleados públicos,
que son los clientes más frecuentes también vuelven a la ciudad por lo que las
ventas disminuyen.
Doña Constantina, desde varios años
apetitosos y de alta consistencia
nutricional. Uno en base a trigo pelado
y, el otro, en base a quinua, el nuevo
“grano de oro”. Evidentemente, usted
puede comprarse un ligero plato de
Phisara por unos 5 Bs. Desde media
mañana, Doña Constantina se coloca
con sus dos tremendas ollas en la
plaza, frente al hotel Capinota, donde
vende sus platillos a una clientela
asidua que sabe lo que está
consumiendo. Quienes no gustan de comer en la vía publica pueden pedir una
porción para llevarse a casa.
Doña Constantina cocina cada día las mejores phisaras de la Provincia, intuyendo
que en cada gramo de quinua vende un buen alimento, rico en proteínas.
-Donde La Benigna
Si tenemos una falencia, esa es la de no contar con muchos lugares dónde comer
de manera decente e higiénica. Existen unos cuantos lugares que salvan a los
turistas y la gente de paso de esta situación de gastronomía precaria, uno de ellas
es el restaurante de Doña Beni o Donde la Benigna, como lo conocen sus clientes.
La mayor parte de ellos asiduos y fieles.
Benigna Irusta es una capinoteña
de cepa, no solo porque conoce
los gustos y los hábitos
alimentarios de sus paisanos, sino
porque los conoce a todos ellos.
Si usted quiere una referencia
sobre algún capinoteño, vaya a
almorzar donde La Benigna y
póngase al día sobre el
movimiento de los capinoteños.
Durante toda la semana, La
Benigna prepara ricos almuerzos,
que en el léxico culinario del
pueblo significa una sopa y un segundo plato. Las sopas de La Beni son
insuperables porque han sido preparadas con anticipación, hirviendo por horas
huesos y carnes, como lo hacían las mamás de antes. Si tiene suerte se topará
con una rica Jak’a Lawa, un caldo de pollo, un chairo cochabambino, una lawa de
trigo o una apetitosa sopa de maní. Los segundos siempre son un buen
acompañamiento de la sopa: carne en olla, ají de pollo, ají de papaliza, fideos
uchu o cualquier otra especialidad valluna.
VIAJE
Existen tres líneas de minibuses.
- 1º de octubre
- Las movilidades salen de la final Avenida Ayacucho.
- Sindicato Capinota
Su parada es en la avenida Panamericana esquina Calle Capinota, en
inmediaciones del Parque Kanata.
- Santa Bárbara
- En la avenida Ayacucho y calle Capinota.

Municipio: Capinota
CARACTERÍSTICA: Tierra del Guarapo
FUNDACIÓN: 1 de octubre 1908
ANIVERSARIO: 1 de octubre
CLIMA: Templado
DISTANCIA: 67 km.
PARADA: Av. Ayacucho y Av. 6 de Agosto
EXTENSIÓN:571,6 km2
FERIA SEMANAL: Domingo
FERIAS: Feria del Guarapo (Domingo de
Resurrección)
FESTIVIDAD: Virgen de Asunta (14 al 16 agosto)

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