Lectura 93. Cierto Orgullo de Ser Peruano
Lectura 93. Cierto Orgullo de Ser Peruano
Lectura 93. Cierto Orgullo de Ser Peruano
Sin embargo, la razón por la que creo que debemos ser optimistas en esta hora es
que esta pandemia ha vuelto a ofrecer un examen de nuestra reacción como
sociedad. En medio de todas las terribles noticias de estos días hemos mostrado
una conciencia por los problemas de distintas partes del país. Desde el inicio de la
crisis, supimos lo que ocurre en el interior. El hecho de que podamos protestar e
indignarnos, cuando ocurre sin prejuicios políticos, es una buena señal. Al fin ahora
nos importa lo que le pasa a muchos si es que realmente la indiferencia ha
disminuido.
Recuerdo muy bien lo que podía verse en el Perú de los años sesenta. Para mi
generación de clase media, la idea de la sierra y la selva peruanas era más bien
distante. Es cierto que hubo movimientos revolucionarios, pero estos se veían como
incidentes lejanos. Por entonces había unos pocos vuelos semanales al Cusco y
nuestra televisión estaba poblada de rostros rubios y sonrientes. Las alusiones a los
barrios marginales eran mínimas. En los años ochenta, cuando estalló el conflicto
de Sendero Luminoso, tardamos en reaccionar porque tardamos en comprender. En
su primera época, las incursiones senderistas se tomaron como asuntos de
provincias secundarias. Solo cuando Sendero fue creciendo y finalmente llegó a
Lima se adquirió plena conciencia de su gravedad entre algunos habitantes de la
capital.
Nuestra crisis tiene villanos, pero también héroes como el señor Mario Romero.
Esta pandemia nos ha mostrado lo peor y lo mejor de lo que somos. Pero algo de la
crisis puede servir como base de lo que podríamos ser: un país más integrado. Por
ahora podemos celebrar nuestro aniversario, con pena, recelo y cierto orgullo.