Apellido Revista16 Moriscos

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5 Racionamiento, control social y estraperlo.

Marbella: los años del hambre


Lucía Prieto Borrego

19 El fin de una dinastía: los Domínguez de Marbella


II. Inversiones y dispendios de TTomás
(1843-1886)
omás Domínguez Artola

José Luis Casado Bellagarza

41 La vida cotidiana de los moriscos del alfoz de Marbella:


Ojén, Istán y Benahavís
Lina Urbaneja Ortiz

53 Rehabilitación del Molino de Inca


Juan Fernández Bonnemaison

65 “Los Molinillos”, un complejo industrial de época romana


“Los
en Benalmádena- Costa
Benalmádena-Costa
Gonzalo Pineda de las Infantas Beato

75 La recuperación del yacimiento romano de la


“Finca El Secretario”
Ramón F. Hiraldo Aguilera

81 La industria papelera de Mijas en tiempos de la


industrialización malagueña
José Carlos Balmaceda

103 Un horno romano de época altoimperial en El Saladillo


José Suárez Padilla, José María Tomassetti Guerra, Luis-Efrén Fernández Rodríguez
e Ildefonso Navarro Luengo

113 El castillo de LLaa Duquesa o fuerte de Sabinilla y edificios de


carácter militar en su entorno
Marcos Vázquez Candiles

3ª ÉPOCA. AÑO VIII • Nº 16. 2003


123 Apéndice documental: Ermita del Santo Cristo
Fernando Álvarez Cantos y Vicente Murillo Utor

CILNIANA 3
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y Difusión del Patrimonio Cultural
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4 CILNIANA
RACIONAMIENTO, CONTROL SOCIAL Y ESTRAPERLO.
Marbella: Los Años del Hambre
Lucía Prieto Borrego

Antigua Comandancia de Marina. A la derecha “El Barrio”. Al fondo el cementerio


(Foto cedida por Bar Altamirano. Colección A. Serrano Lima).

S uperadas las interpretaciones, que justifica-


ban la escasez y el hambre padecida por dos
generaciones de españoles como consecuencia
ca autárquica1 . Igualmente, Naredo ha podido
demostrar la ausencia de una caída de los rendi-
mientos en los latifundios andaluces, especial-
de la guerra civil, destrucciones bélicas y del ais- mente en los sevillanos, que apenas padecieron
lamiento impuesto por el enemigo exterior, hoy la guerra y cuyos propietarios serían los prime-
se asume que fue la política económica de signo ros beneficiarios de las concesiones de fertilizan-
autárquico inspirada en la Italia fascista y en la tes y maquinaria. Fue el acaparamiento de la pro-
Alemania nazi la que con sus agobiantes siste- ducción y su canalización hacia el mercado ne-
mas de intervención impidió la recuperación del gro lo que provocó el desabastecimiento, la es-
nivel de vida anterior a la guerra hasta bien avan- casez y la aparición de una economía paralela2 .
zados los años cincuenta. En palabras de Antonio Miguel Bernal, a los gran-
des propietarios de trigo y aceite, dos de los pro-
Los efectos de la guerra sobre la agricul- ductos que más escasearon durante la posgue-
tura han sido matizados por los historiadores rra, el gobierno de Franco los hizo ricos3 .
agrarios. Para Barciela fueron menores que los
anunciados por la propaganda oficial –la falta de Desde otra perspectiva, la autarquía se
maquinaria y abonos no eran elementos estruc- ha interpretado como producto ideológico y
turales y por tanto recuperables– el objetivo de cultural, no sólo político o económico, que
la autarquía fue formulado antes de que España tuvo que ver con el objetivo de mantener ais-
fuera sometida al aislamiento internacional; la lada a España de las influencias exteriores; la
prohibición de importar fertilizantes y bienes de autosuficiencia encarnaba la esencia de la his-
equipo y la intervención de la producción, de la panidad y de la identidad nacional; la autar-
distribución y del consumo y el respeto y protec- quía fue la expresión de un nacionalismo
ción de la propiedad privada de la tierra fueron ultraconservador, que identificaba raza y pa-
los elementos básicos constitutivos de la políti- tria, que permitió la justificación de un ostra-

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MARBELLA: LOS AÑOS DEL HAMBRE

cismo desde el que se negaba la herencia del interprovincial. La distribución y el consumo eran
pensamiento liberal 4 . entorpecidos por una maraña de disposiciones
que impedían la fluidez entre los centros de pro-
Pero la penuria y la miseria tan dilatada- ducción y consumo, el abastecimiento a las po-
mente consentida por el poder y padecida por blaciones se demoraba y la población aguardaba
una gran mayoría de los españoles fue también en pacientes colas la posibilidad, a veces remota,
otra forma de represión, que explica la inhibi- de acceder a los artículos. Las raciones, estable-
ción y la pasividad de una población empeñada cidas en un primer momento en 400 gramos para
en sobrevivir y “olvidar”. El hambre y el miedo el pan, 250 para las patatas, 100 gramos para las
fueron instrumentos para la desmovilización, lo legumbres y 125 para las carnes8 , jamás fueron
que compromete seriamente la supuesta acepta- suministradas en estas cantidades, que se ajus-
ción generalizada del Nuevo Régimen por las cla- taban a los aportes calóricos y proteínicos nece-
ses populares, sometidas a un exhaustivo con- sarios, pero a los que los españoles no accedían
trol de su ámbito privado y familiar. mediante la cartilla de racionamiento. Unas ra-
ciones que en el caso del pan se fueron restrin-
La percepción que del ejercicio del poder giendo hasta tal punto que han sido considera-
tuvieron los individuos o la incidencia que los das inferiores a las facilitadas a los prisioneros
efectos de la guerra tuvo sobre la vida privada en los campos de concentración nazis9 . En 1945,
son hoy objetos de estudio preferente, aborda- uno de los años de mayor agudización del ham-
dos desde la Historia Oral5 . Pero es precisamen- bre, el mismo gobernador de Valencia reconocía
te la profundidad de la vigilancia ejercida sobre que el racionamiento organizado por sus propios
la sociedad española la que nos permite también servicios no alcanzaba más de 953 calorías, la
a través de la documentación generada por la ad- mitad de lo necesario para vivir10 .
ministración municipal y provincial –expresada
en forma de bandos6 , disposiciones, ordenes de En 1940, uno de los años de mayor esca-
la Alcaldía y de los informes particulares elabora- sez, se estableció una clasificación de las carti-
dos por los múltiples agentes del poder: alcal- llas según el nivel de ingresos familiares y el ni-
des, directores de prisiones, párrocos, jueces o vel de vida de las poblaciones españolas 11 . Se
guardias civiles, custodiados en los archivos lo- pretendía garantizar un mínimo consumo de pan
cales– abarcar las dimensiones alcanzadas por el a las familias que no podían acceder a la alimen-
control social sobre un amplio sector de una po- tación fuera de los cauces oficiales, ciertamente
blación hambrienta y amordazada. en la España de entonces, la mayoría. Como en
el resto del país, prácticamente todas las familias
RACIONAMIENTO, ESTRAPERLO de Marbella se inscribieron como pobres. De las
Y BENEFICENCIA 2.113 cartillas censadas, más del 97% eran de ter-
cera categoría12 . Si tomamos como referencia el
El racionamiento surgido como una más grupo familiar predominante, el compuesto por
de las múltiples formas del intervencionismo era cuatro miembros, los ingresos máximos queda-
la respuesta oficial a la escasez de alimentos y ban establecidos en 410 pesetas. A medida que
artículos de primera necesidad. Su implantación el grupo familiar aumentaba los ingresos exigi-
en mayo de 19397 pretendía la regulación del dos eran mayores. En Marbella sólo nueve per-
consumo. La distorsión entre la oferta y la de- sonas tenían derecho a cartilla de primera y por
manda de los alimentos intervenidos tuvo como tanto a menor ración de pan: el médico don Félix
primera consecuencia la aparición de un merca- Zea, el farero, don Francisco Pendón, y los here-
do clandestino, que jamás fue controlado a pe- deros del Mayorazgo. Igualmente, muy pocas
sar de la amplitud de las medidas sancionadoras personas tenían la cartilla de segunda: algunos
ni de los controles que sobre el abastecimiento propietarios e industriales o profesionales aco-
de la población ejercía la Comisaría General de modados como el médico don Antonio Maíz y el
Abastecimiento y Transporte, creada en marzo maestro don José Maldonado. Las personas más
de 1939. humildes a las que según el decreto se quería
beneficiar –“para las que el pan no es sólo un artícu-
En los pueblos eran los alcaldes los res- lo de primera necesidad, sino básico para la vida, por
ponsables de los censos de consumidores a par- constituir su principal alimento”13– mediante la car-
tir de las declaraciones juradas de los cabeza de tilla de tercera categoría presentaban, sin embar-
familia, a quienes se les facilitaba la correspon- go, niveles de renta muy dispares. Los responsa-
diente cartilla, una para carne y otra para el resto bles de los censos debieron escasamente com-
de los comestibles. Los alimentos racionados: le- probar las declaraciones juradas de quienes te-
gumbres, patatas, arroz, aceite, carnes, tocino, nían huertas y tierras; así se explica que junto a
leche condensada, bacalao... necesitaban las lla- un grupo más numeroso que nunca de indigentes,
madas “Guías” para la comercialización alineados también con los pescadores y jornale-

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MARBELLA: LOS AÑOS DEL HAMBRE

ros, aparezcan propietarios agrícolas con posibi- mo15 , pero, independientemente de la ineficacia
lidades más que suficientes de producir y consu- de una política que se reveló incapaz de garanti-
mir: un miembro de la familia de los Chinchilla zar minímamente el consumo básico, en torno al
declaraba no contar ingreso alguno, y otros ilus- pan habría un conjunto de prácticas ilegales que
tres apellidos como algunos Domínguez y alcanzaban desde los grandes productores con
Gutiérrez de Quijada también poseían las carti- capacidad de almacenar y desviar la producción
llas de la gente humilde. al mercado negro hasta al más modesto de los
molineros y panaderos locales. Los con-
troles no podían de forma alguna impe-
dir que el cupo de trigo al que los pro-
ductores tenían derecho se canalizara
fuera del consumo estrictamente fami-
liar. Fue un fenómeno generalizado que
se daba cotidianamente ante unas ve-
ces la complicidad y otras la impotencia
de la autoridad responsable de la políti-
ca de abastos. La población, pese a la
imposibilidad de arbitrar queja alguna,
sabía que la falta de pan no se debía sólo
a la escasez de harina. A don Enrique
Belón, el alcalde, las denuncias le llega-
ban en forma de rumores y se vio obli-
gado a desmentir cualquier complicidad
con las ventas clandestinas de pan, a la
vez que admitía la imposibilidad de con-
trolar el consumo de pan al margen del
racionamiento:
Cartilla de racionamiento. Fuente: Colección particular.
“(...) habiendo poseedores de harina,
Uno de los grupos más empobrecidos es por resultas de sus trigos declarados al
el formado por las mujeres a quienes la guerra S.N.T que tienen autorización para con-
convirtió en cabeza de familia. Su situación apa- sumir, es perfectamente natural y lógico
rece claramente definida a partir unos ingresos que amasen pan en cualquier tahona, no
que, como las 250 pesetas que declaraba la due- siendo posible preveer, ni evitar que estos
ña de una pequeña tienda a cargo de diez miem- poseedores cedan o regalen, por convenios
bros, eran tres veces menores que el mínimo exi- amistosos o familiares, parte de sus exis-
gido, y aun así muy por debajo, en el límite de la tencias a otros vecinos, aunque desgracia-
mendicidad, quedaban algunas como las que te- damente no pueda ser eso todo lo general
nían a los maridos huidos o en la sierra. La muer- que deseáramos para el abastecimiento de
te de tantos hombres, bien en los fusilamientos la población (...)”16 .
del treinta y siete, en los frentes republicanos,
en las cárceles, o su desaparición en la zona re- Olvidaba tal vez el alcalde su obligación
publicana, privaba a sus mujeres de la protección de comprobar las cantidades de trigo de los
que el Régimen concedía a las “víctimas del mar- reservistas y controlar el consumo, teórica-
xismo”. En Marbella, no es arriesgado afirmar que mente reservado para los familiares del pro-
alrededor de un centenar de familias quedaron ductor. Era práctica común la modificación de
en esta situación14 . Muchas de ellas eran además los porcentajes de harina, las moliendas clan-
grupos familiares amplios, de hasta ocho y diez destinas y el tráfico de pan blanco en el mer-
miembros como los que aparecen a cargo de Nie- cado negro.
ves Sánchez, Mariana Cuevas o las viudas del re-
publicano Vicente Pérez Montenegro y de Felipe Para la memoria oral de aquella genera-
Lara, dirigente socialista de San Pedro. ción, la cartilla de racionamiento fue la repre-
sentación material del hambre y de la escasez
El derecho, establecido por decreto, de los de todo tipo de artículos; pero la ausencia en
más pobres a una mayor ración de pan era una la gran mayoría de los hogares de los dos ali-
falacia. Durante aquellos años, el pan blanco se mentos que constituían tradicionalmente el
convirtió en un en un artículo tan deseado como soporte de la dieta alimenticia de las clases
inalcanzable. Es conocido cómo el sector trigue- populares, el pan y el aceite, y el rechazo ha-
ro fue tempranamente intervenido y regulada la cia el consumo de pan integral son evocacio-
producción, distribución, elaboración y consu- nes recurrentes cuya dimensión simbólica y

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MARBELLA: LOS AÑOS DEL HAMBRE

cultural es percibida en los testimonios orales maíz, negro, y te daban un bollito de unos
sobre la posguerra: 100 gramos por persona. El pan blanco
no llegaba (...). Mi madre amasaba hari-
“(...) Yo tenía 16 años en el año cua- na de cebada y maíz y en una hoja de
renta y apenas había para comer. El pan palma lo metía en el horno, estaba malo,
que daban con el racionamiento era de pero peor era ninguno (...)”17.

Calle Virgen de los Dolores. Años 50.

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MARBELLA: LOS AÑOS DEL HAMBRE

“(...) Pan blanco tenía el que tenía tri- vender. “¿Porqué se permite esto en detrimento de
go y amasaba (...), pero la mayor parte nuestro Movimiento?”23, clamaba el alcalde. No era
de la gente carecía de todo (...). Nosotros la única queja; la corrupción del sistema y el es-
en mi casa teníamos más posibilidades cándalo del enriquecimiento ilícito a costa de las
porque mi padre iba de viaje; cuando al- necesidades más básicas fueron frecuentemente
guna vez podía traer una hogaza de pan, denunciados por los responsables falangistas que
aquello era una fiesta (...)”18. por otra parte temían que tales prácticas impi-
“Con el racionamiento daban un dieran el acercamiento de las clases populares al
bollito diario y nada más, 150 gramos. Régimen24.
Yo me lo comía antes de cogerlo, le iba
quitando los picos y cuando llegaba a mi Pero el acaparamiento de productos ali-
casa no tenía (...)”19. menticios no se detenía en los almacenes de la
capital. Una mujer de La Línea de la Concepción,
La cartilla como único instrumento para a quien se había sorprendido con 12 kilos de ja-
acceder a los alimentos fue objeto de una regla- bón, declaró ante la policía municipal que la mer-
mentación tan exhaustiva como ineficaz, a la vis- cancía se la facilitó un comerciante de la locali-
ta de los frecuentes fraudes de tenderos y consu- dad. El precio de compra declarado estaba por
midores; pero la responsabilidad que las autori- debajo del permitido en la ciudad. Pero el avis-
dades locales tenían sobre los Padrones de Ra- pado comerciante al que se acusa de ocultar a la
cionamiento, que estaban obligados a mantener población los artículos racionados los vendía o
actualizados, convertían a las cartillas en uno de cambiaba a las matuteras, mujeres que se dedi-
los muchos instrumentos de control que el po- caban al pequeño comercio clandestino por mer-
der ejercía sobre los individuos, un control que cancías procedente de Gibraltar 25 , que en la
fue intensificado cuando en 1943 se estableció Marbella de 1940 era simplemente un lujo. Que
la cartilla individual. Se pretendía evitar que las en algunas tiendas se reservaran los productos,
ambigüedades o medias verdades sobre el nú- incluso los racionados, para quien podía pagar-
mero de miembros del grupo familiar impidieran los mejor y más rápidamente eran prácticas co-
a las autoridades el control de las raciones. La nocidas y habituales, una de tantas manifesta-
identificación de cada consumidor para obtener ciones de la fenomenología de lo que fue el mer-
la cartilla individual excluía por tanto de la ali- cado negro. Si el racionamiento quiso ser un
mentación oficial a quienes huyendo de su pasa- mecanismo de respuesta oficial a la escasez, el
do político se cobijaban con parientes en otras mercado negro evidencia de forma clara el fun-
localidades, a los huidos en la sierra o a tantos cionamiento real de la economía española, mar-
como en silencio pretendieron salvar la vida pa- cada por una práctica real al margen de la rigidez
sando desapercibidos. del intervencionismo impuesto por la política
autárquica.
El intervencionismo sobre los mecanismos
de distribución retrasaba enormemente la llega- El estraperlo, como el fenómeno fue cono-
da de los alimentos a los pueblos y el acapara- cido popularmente, formó parte de la
miento subía artificialmente los precios. Basta una cotidianidad de los españoles. En sus múltiples
mirada a la prensa diaria para observar como no modalidades de subversión de las leyes vigentes,
todos los productos se distribuían diariamente, tuvo varios niveles, que abarcaban desde los gran-
igual se facilitaba el mismo alimento durante va- des negocios, origen de la aparición de una clase
rias semanas que desaparecía de la oferta; ali- de nuevos ricos que Abella26 ha descrito gráfica-
mentos como el chocolate o la leche condensada mente, hasta la generalización de un mercadeo
raramente llegaban a los comercios20. Determi- clandestino de pequeño nivel que no permitió
nados productos eran retenidos por los sino la supervivencia de quienes se dedicaron a
almacenistas negándoselos a los pequeños ten- comerciar con artículos básicos y alimentos al
deros. En el otoño de 1940, el alcalde de Marbella margen de los cauces legales. Las proporciones
se dirigía de forma desesperada al delegado pro- reales de la economía paralela fueron asumidas
vincial de abastos “por si es humanamente posible por la propia administración franquista, que ha-
conseguir que nos surtan en la medida que permitan bría de generar una amplísima legislación para la
las existencias de que dispongan en la Delegación de penalización de delitos que no existían antes de
Abastos, (...)” 21. Escaseaban productos de prime- 193627.
ra necesidad, como el jabón, y alimentos como
el azúcar, sin embargo los comerciantes locales La incorporación de las mujeres al contra-
los compraban en Málaga a “precios extratosféricos bando y su presencia en las tradicionales rutas
[sic] (...)”22, negándose además a facilitar a las au- del tráfico de tabaco de Gibraltar es un fenóme-
toridades locales el nombre de los acaparadores, no totalmente nuevo que no puede desligarse de
ante el temor de que éstos nos les volvieran a los efectos de la guerra y de la represión y que

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MARBELLA: LOS AÑOS DEL HAMBRE

por otra parte tiene una clara connotación de pectáculo de las “estraperlistas”, escoltadas por
género28. La creciente presencia de mujeres en la la pareja, era familiar. Más de una vez, las que
Prisión Provincial de Málaga por infracción de la podían, dejaban caer los bultos en las mismas
Ley de Tasas a partir de 1941 es indicativa de su escaleras del castillo, antes de ser registradas en
participación en la economía clandestina, pero el cuartel.
el control del contrabando en el ámbito munici-
pal permite también a partir de los expedientes Pero no sólo la circulación de productos
de decomiso 29, aproximarnos a la naturaleza del fuera del abastecimiento oficial era delito, tam-
mercado negro local. A lo largo de 1940, uno de bién lo era la venta de artículos a precios supe-
los años de peor cosecha, toneladas de patatas riores a los de tasa, y el ocultamiento de mercan-
fueron intervenidas por la Guardia Civil. Los pro- cías. Los informes de la policía municipal –más
ductos decomisados eran vendidos a precio de rigurosos sobre los sospechosos de desafección–
tasa y su importe ingresado en el Banco de son indicativos del control ejercido sobre algu-
España. nos comerciantes31 . Los tenderos se espiaban
entre sí controlando los precios de venta, pero
Era infrecuente que los alimentos deco- raramente se atrevían a denunciar a sus vecinos.
misados llegaran a los consumidores. En el vera- Una pequeña tendera fue acusada ante el alcalde
no de 1940 miles de kilos de patatas, destina- de vender judías a 3,50 pesetas, casi el doble de
das a los comedores de Auxilio Social, se pu- lo permitido A esta mujer que tuvo la osadía de
drieron en los almacenes municipales y cientos decirle al temible agente local que vendía al mis-
de kilos de tocino fueron quemados después de mo precio que un conocido falangista, le fueron
haber sido requisados en algunas tiendas de la incautadas más de 100 kilos de legumbres y abier-
localidad 30. Ambos artículos eran esenciales en to expediente ante la Fiscalía de Tasas. Este or-
unas dietas en las que habían desaparecido casi ganismo era auxiliado en los pueblos por una
por completo los aportes de azúcares y de pro- pluralidad de agentes implicados en la represión
teínas animales. De hecho, el tocino, el único del contrabando: alcaldes, guardias municipales,
producto del cerdo –cuya matanza, por cierto, mandos falangistas... Pero aunque la ley estable-
estaba también estrechamente vigilada– sustituía cía que al denunciante le correspondía el 40% de
a la carne en una gran “variedad” de platos de lo incautado, al menos entre la población, las
legumbres, y en muchas familias jornaleras cons- denuncias no eran frecuentes, la necesidad de
tituía la comida principal y única de los hom- sobrevivir unía en una complicada red de com-
bres que lo tomaban simplemente untado en el plicidades a tenderos, distribuidores, almace-
pan. Garbanzos y judías eran facilitados con la nistas y consumidores. Para la mayoría de la po-
cartilla, pero de forma tan irregular y escasa que blación, el silencio constituía la garantía para
no cubría la demanda como demuestra las fre- conseguir comida, aun así poco escapaba al con-
cuentes intervenciones de legumbres en el mer- trol de los agentes del alcalde, que a veces me-
cado local, efectuadas a pequeños tenderos y co- diaba para suavizar las transgresiones de las per-
merciantes, en un volumen mucho menor que sonas más afectas, no hay que olvidar que el con-
las que afectaban a los dueños y conductores de senso en torno al Régimen dependía del grado
camiones y carros con posibilidad de transpor- de satisfacción de los intereses de los grupos que
tar grandes cantidades de mercancías. Es en este lo apoyaban. El alcalde, como delegado local de
nivel, elemental del mercadeo clandestino de ali- abastos, podía o no tramitar un expediente ante
mentos, donde intervienen con mayor frecuen- los delegados provinciales si las partidas no eran
cia las mujeres. Ellas introducirán a lo largo de lo suficientemente significativas. Así, certifican-
toda la década artículos procedentes de Gibral- do que eran para consumo personal, solicita a la
tar y como recoveras o pequeñas corsarias cons- fiscalía la retirada de la multa impuesta a un co-
tituyen una red alternativa pero imprescindible merciante al que se le encontraron siete quilos
para la supervivencia familiar a partir del true- de azúcar y de tres de bacalao, un caso notorio
que de alimentos producidos en los cortijos y de “estraperlo legal”, puesto que la máxima ra-
casas de campo por los artículos que los comer- ción personal de azúcar permitida era de 30 gra-
ciantes locales “atesoraban” en sus trastiendas. mos.
Con frecuencia, en la misma parada de los auto-
buses con destino a La Línea, el omnipresente Si en la España de la posguerra se pudo
policía municipal sorprendía a las mujeres con sobrevivir fue gracias a la alimentación extraofi-
gallinas, aceite o jabón, a las que rápidamente cial, vedada para amplios sectores de la pobla-
quitaba la mercancía y expulsaba del municipio, ción, que durante dos décadas no pudieron sino
tras ser convenientemente “interrogadas”. En subsistir. A partir de los alimentos racionados,
sentido contrario, se introducían café, sacarina era imposible articular una dieta coherente. La
o el llamado “pan inglés”, también en pequeñas irregularidad en el suministro obligaba a combi-
cantidades, cuando los traían las mujeres. El es- naciones imposibles y lo que se podía adquirir

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MARBELLA: LOS AÑOS DEL HAMBRE

Plaza del Generalísimo, hoy de los Naranjos. Postal años 50 (Edic. J. Belón Lima. Foto: O. Cortés).

no aportaba los nutrientes necesarios. Las legum- de sucedáneos, como cebada y algarrobas, y el
bres se cocinaban sin grasa, la carne desapareció azúcar por unos edulcorantes en forma de cris-
de la dieta, los huevos eran artículos de lujo, que tales que amargaban. De la información extraída
se vendían a escondidas y como mucho se daban de nuestros archivos orales32, se deduce una die-
a los enfermos; el café se sustituyó por todo tipo ta monótona y desesperante a base de gazpacho

CILNIANA 11
MARBELLA: LOS AÑOS DEL HAMBRE

en verano, gazpachuelo en invierno, legumbres retiraba al amanecer– y el frío son recuerdos


cocidas y sopa hervida o pescados que antes de aún obsesivos.
la guerra eran despreciados o que hubieron de
ser consumidos a falta de aceite o de harina de El control sobre los tejidos convirtió, asi-
forma muy diferente a la cultura culinaria local. mismo, a la ropa en un artículo de lujo, alcanza-
ble sólo en el mercado negro. Ni siquiera los ar-
La desnutrición y la falta de higiene inci- tículos más baratos llegaban a Marbella a precio
dieron en la aparición de enfer- oficial; los comerciantes de te-
medades infecciosas 33, como la jidos denunciaban ante la Fis-
epidemia de tifus que asoló Má- calía de Tasas la negativa de los
laga en los años cuarenta. Los almacenistas a suministrar teji-
datos aportados por el doctor dos de lana o algodón con los
Maíz Viñal señalan una escasa descuentos correspondientes37.
incidencia de las fiebres Mientras, en la calle de la Cari-
tifoideas en la ciudad, durante dad podían encontrarse todo
la década de los cuarenta. La tipo de artículos procedentes
falta de estudios sobre los ni- de un comercio de La Línea, lla-
veles de densificación urbana mado “La Africana”, e igualmen-
nos impide de momento acer- te se vendía clandestinamente
carnos a las condiciones de en una casa de la calle del Vien-
habitabilidad y por tanto a ex- to. En ambos casos, el negocio
plicar las causas de la ausencia estaba en manos de mujeres
en nuestra ciudad de una de las que ofertaban artículos cuyo
enfermedades de mayor inci- precio y naturaleza quedaba le-
dencia de la posguerra, si bien no hay que des- jos de las posibilidades de la mayoría de la po-
cartar la posibilidad de que muertes por tifus no blación: mantas, camisetas acolchadas, sedas o
se hayan inscrito como tales, debido al rechazo calcetines, medias de señora, aunque también
de la población a las medidas de aislamiento y opal, lanilla de cuadritos y tela de Vichy. No falta-
control impuestas por las autoridades. Sí es sin ban las corbatas, tan desprestigiadas durante “la
embargo significativo el rebrote de fiebres palú- revolución”, que distinguían a sus usuarios de
dicas en el municipio que el citado doctor Maíz los hombres del campo y la mar, ni grandes pie-
relaciona con la pobreza, y el mantenimiento en zas de satén morado, casi con toda certeza des-
1941 de una de las más altas tasas de mortalidad tinadas a túnicas de penitencia, muy demanda-
infantil desde 193034. das en unos momentos en los que la exterioriza-
ción de los sentimientos religiosos en ceremo-
En la actualidad, la incorporación a los nias y procesiones constituían certificados de ad-
estudios históricos de indicadores biomédicos (el hesión. Más de una vez fueron decomisadas par-
peso, la estatura o la masa corporal) permiten tidas de mercancías lo suficientemente importan-
desde las aportaciones de la investigación tes como para que las intermediarias fueran de-
antropométrica establecer la relación entre la baja nunciadas ante la Fiscalía. Los registros efectua-
estatura y las situaciones carenciales o una adap- dos por la Guardia Civil terminaban sacando pa-
tación a las condiciones de vida desfavorables. El quetes de cualquier sitio, el correspondiente in-
nivel de vida biológico de los españoles queda terrogatorio en el cuartel y el traslado de los ar-
reflejado en los reemplazos del primer tículos a la tienda que un comerciante de “or-
franquismo; los niños y adolescentes de aque- den” tenía en la calle Gloria 38. La represión del
llos años llegaron a la edad adulta con menor es- pequeño estraperlo entraña otra dimensión: las
tatura que los de los años treinta35 en una coyun- denuncias ante la Fiscalía de Tasas se acompaña-
tura histórica que se manifiesta como una de las ban de los correspondientes informes sobre la
más críticas de la historia de España. conducta moral y social, de forma que un delito
económico se convertía automáticamente en un
El retroceso de los niveles de renta 36 es- delito político cuando el denunciado era de du-
tuvo acompañado de un total deterioro de la dosa fidelidad al Régimen. En Marbella, el que-
vida material. El racionamiento alcanzó a prác- hacer cotidiano del jefe de la policía municipal
ticamente todos los bienes de consumo y a convertía en desafectos a quienes en el momen-
los equipamientos que hacían posible la vida to de ser sorprendido con cualquier tipo de mer-
cotidiana. Las restricciones en el suministro cancía se resistiera pronunciando “palabras inju-
eléctrico limitaban enormemente las horas de riosas contra la autoridad”. La población en gene-
luz en los hogares. Junto a la falta de alimen- ral y los implicados sabían que las mercancías
tos, la oscuridad –la luz de una única bombilla incautadas volvían, las más de las veces, al mer-
que llegaba a últimas horas de la tarde y se cado negro o que se “perdían” en los depósitos

12 CILNIANA
MARBELLA: LOS AÑOS DEL HAMBRE

oficiales. El estraperlo era en definitiva, el princi- registros de los beneficiarios de la caridad del
pal método utilizado por el gobierno para recau- régimen. Pese a la ínfima calidad que las fuentes
dar un tributo a beneficio de una jerarquía para- orales atribuyen a la comida, la escasez llevó a
sitaria, “los controladores de la comida”39. algunas familias, consideradas de mediana posi-
ción, a utilizar los servicios del comedor. Mateo
Pero no sólo los altos precios del merca- Álvarez, delegado comarcal de Auxilio Social, se
do negro impedían el acceso a la comida, mu- vio obligado a prohibir que se sirvieran comidas
chas familias ni siquiera podía comprar los ali- a un conocido vecino42 porque perjudicaban al
mentos racionados. No faltaron casos de venta racionamiento de las personas más necesitadas;
de cartillas por parte de quienes no podían utili- éstas compartían con los huérfanos unas racio-
zarlas; otras familias las reservaban para comprar nes escasas, pero en muchos casos las únicas a
alimentos destinados a los enfermos y los mayo- las que tenían acceso los hijos de las familias más
res. Para los niños quedaba el recurso extremo pobres, entre los que se encontraban los de los
de alimentarse en los comedores del Auxilio So- pescadores. En los niños de entonces perdura el
cial, una organización asistencial que desde la recuerdo del comedor como la representación del
apertura del primer comedor en Valladolid por hambre: el haber ido o no al Auxilio Social impli-
iniciativa de Mercedes Sanz40 se convirtió en la ca la jerarquización de una pobreza que afectaba
mayor obra benéfico-social del Régimen. Surgi- a amplias capas de la población.
da de la necesidad de atender a los cientos de
niños que la represión y la guerra dejaron des- “Yo he ido a comer al comedor que
amparados supuso tanto una cobertura de ayu- le decía ‘El Falange’, iba porque mi ma-
da humanitaria, atendida por mujeres, como un dre no tenía, lo que recogía era para mi
instrumento de propaganda del Régimen. padre que estaba en una cama, mi ma-
dre habló para que nos dejaran ir a co-
Como en la generalidad de la zona nacio- mer ¡yo no sé con quién hablaría! A mí y
nal, los servicios de Auxilio Social establecidos a mis hermanos nos dijo: tenéis que ir a
en Marbella desde 1937 fueron proporcionales a comer a Falange. El comedor estaba en
los efectos de la represión. El comedor situado el centro, como llegaras dos minutos tar-
frente a la Alameda acogía diariamente, en los de ya no comías, te tenías que lavar las
primeros años cuarenta, entre 25 y 30 niños huér- manos en la pila de los peces ¡con el frío
fanos o abandonados41; eran hijos de fusilados o que hacía entonces! Allí se comía unas
de encarcelados. Aunque la implantación de Auxi- veces sopa, otras arroz y un bollito de
lio Social en el medio rural fue muy limitada, la racionamiento para tres. Yo tenía tanta
instalación de un comedor en San Pedro, que hambre que me ponía en los cristales an-
antes de la guerra no llegaba a los 2.000 habitan- tes de que abriera por ver en qué mesa
tes, revela que proporcionalmente la incidencia estaba el bollo más grande y cuando
de la represión sobre la población infantil fue abría entraba la primera. Por la noche
mayor. En la antigua Colonia 25 niños habían ya abrían, se comía sólo una vez y ya
quedado huérfanos como consecuencia de la hasta el otro día (...)”43.
guerra, hijos de fusilados o desapareci-
dos en la carretera de la costa. Su núme-
ro aumentaría con el reintegro al munici-
pio de muchas mujeres y niños que ha-
bían pasado a Francia.

La beneficencia del Régimen fue


también el único recurso de decenas de
personas mayores y enfermas, incluso
aquellos que por su edad no podían acu-
dir eran alimentados en su domicilio con
la comida que se servía en el comedor
de la institución, bajo control de los de-
legados locales y comarcales de Falange,
una vez que Auxilio Social quedó subor-
dinada a la Sección Femenina, haciendo
realidad un objetivo largamente persegui-
do por Pilar Primo de Rivera en su enco-
nada lucha contra Mercedes Sanz. En los
pueblos, las autoridades municipales ges- Sede del Auxilio Social de la Sección Femenina en Marbella
tionaban los suministros y elaboraban los (Fuente: Colección particular).

CILNIANA 13
MARBELLA: LOS AÑOS DEL HAMBRE

DELINCUENCIA Y CONTROL SOCIAL un almacén particular dio lugar a una investiga-


ción en la que parte del fruto fue hallado en ma-
La delincuencia común en forma de pe- nos de personas que no dudaron en declarar
queños robos y la mendicidad constituyen la ma- haberlas comprado a varios muchachos, proce-
nifestación más evidente del deterioro social, dentes de las calles San Francisco, Bermeja y
siendo prácticas que afectaron a los sectores más Lobatas. El hallazgo de lo que en aquellos días
marginados socialmente, ampliados ahora por los constituían productos básicos de consumo, al-
efectos de la represión y por el aislamiento im- garrobas que los hombres disputaban a los cer-
puesto por los vencedores a los grupos más ale- dos y varios ceretes de higos secos, condujo a la
jados de su cultura y más indiferentes a los valo- cárcel de Málaga a varios de los muchachos acu-
res y normas hegemónicos. sados, en octubre de 1940. Uno de tan sólo 17
años estaba presente cuando tres años antes, vo-
En una población donde más de una terce- luntarios falangistas sacaron a sus padres del do-
ra parte de la población masculina adulta había micilio familiar de “El Fuerte” para matarlos; el
sido represaliada con la muerte o la cárcel, el ejer- padre de otro había sido igualmente fusilado, los
cicio de la violencia política se mantuvo durante demás tenían también familiares encarcelados y
la posguerra en cualquiera de sus modalidades. huidos45. No fueron los únicos “delincuentes” del
La ignorancia intencionada del carácter social de Barrio Alto. El caso anterior es sólo un ejemplo
la mayoría de las transgresiones y el tratamiento de la situación de desamparo que afectó a los
de la mendicidad como problemas de orden pú- hijos de los vencidos, para quienes llegada la ado-
blico sirvieron de pretexto a los agentes del po- lescencia el comedor de Auxilio Social, presidido
der, desde policías municipales hasta falangistas, por los retratos de Franco y de José Antonio,
para mantener bajo control a un amplio sector de dejaba de ser una solución. De las calles San Fran-
la comunidad cercado por el hambre y el miedo. cisco, Santo Cristo, Aduar, Bermeja y sobre todo
Lobatas habían desaparecido decenas de hom-
A partir de 1940 se incrementan las de- bres, algunos permanecían escondidos en la sie-
tenciones por delitos comunes. Se trataba de rra tan cercana que en sus incursiones se llega-
pequeños robos de higos, pasas o algarrobas que ban a la Huerta del Leganitos a recoger ropa y
se castigaban con penas que podían llegar a al- comida. El Barrio vivía bajo sospecha: a menudo
canzar hasta un año de reclusión. Regularmente se efectuaban registros y detenciones. La ausen-
eran conducidos al arresto niños y adolescentes, cia en muchas casas del cabeza de familia no de-
simplemente por coger frutos en huertas ajenas. jaba más recurso para subsistir que el trabajo de
Sólo entre los últimos meses de 1940 y 1941, 23 los menores y las mil estrategias de superviven-
jóvenes fueron detenidos y encarcelados por el cia que las mujeres desplegaban, desde la reco-
delito de “hurto en el cam- gida del esparto al pequeño
po” 44. Nadie escapaba a la vi- estraperlo, pues muchas
gilancia del jefe de los muni- madres, hijas y hermanas de
cipales, un agente tan odia- “rojos” no eran de confian-
do como temido, omnipre- za para servir en las casas de
sente en todos los rincones las “personas de orden”.
de la ciudad, los arrabales y
el campo. De la operatividad Las detenciones de
de su gestión dan cuenta los mujeres por el delito de
exhaustivos informes pre- “hurto en el campo” aumen-
sentados al alcalde: “En la tan desde 1940. Entre 1940
madrugada de hoy he sorpren- y 1945 el 30% de las mujeres
dido (...)”, redactados de tal encarceladas procedentes
forma que no queda duda de del partido de Marbella lo
su eficacia en la labor de atra- son por delitos comunes. En
par a muchachos hambrien- el año 1941 se produce el
tos; por pequeño que fuera mayor número de ingresos.
el hurto ninguno se libraba Como en el caso de la “de-
de pasar 3 o 4 días en el lincuencia juvenil”, la vincu-
arresto municipal. Mayor lación entre algunas de las
pena, hasta 6 años, corres- detenidas y los efectos de la
pondía al delito de robo y represión parecen clara. Sólo
asalto del que sería acusada en el mes de febrero de 1941
una pequeña banda de ado- nueve mujeres fueron arres-
lescentes. La desaparición de Subida al castillo. Propaganda del régimen. tadas por robar frutos del
varios kilos de algarrobas de Posguerra (Fuente: Fondo Temboury). campo, algunas también hi-

14 CILNIANA
MARBELLA: LOS AÑOS DEL HAMBRE

jas y hermanas de fusilados. La supervivencia al Los reclusos mayores de 60 años a los que la ley
margen de la legalidad impuesta por los vence- permitió la excarcelación49 necesitaban, además
dores era la única salida para decenas de familias del patrocinio y de la solvencia moral y material
que volvieron –sobre todo a la Colonia de San de algún vecino, los informes municipales que les
Pedro Alcántara, de donde prácticamente toda la permitieran residir en sus pueblos. Comenzaba
población había huido y la gran mayoría de los
hombres adultos tenían informes negativos–46 de-
jando a sus familiares en Francia o en la cárcel.
Muchas personas, conscientes de que pasar la
guerra en la España republicana era motivo más
que suficiente para ser investigado, vagaban por
los alrededores de la población sin atreverse a
hacerse visibles, sin solicitar la cartilla de racio-
namiento, alimentándose sólo de los frutos que
robaban en las fincas que antes habían trabaja-
do. Cuando eran detenidos, su conducta perso-
nal era minuciosamente informada, llegando has-
ta la jurisdicción militar ante la más mínima sos-
pecha de responsabilidad política. Fue el caso de
un vecino de San Pedro, a quien los celosos in-
formes del alcalde acusaron de encontrar roban-
do, después de haberse evadido de un campo de
concentración. Una acusación de la que no se te-
nía noticia en el Gobierno Militar, donde al indi-
viduo no se le atribuía responsabilidad política
alguna47. Pero la total hegemonía de la justicia
militar no excluyó la instrumentalización de la
justicia ordinaria para el control de los vencidos48.
La incriminación fue una amenaza permanente
que perseguía la sumisión y el silencio para la
eficaz imposición de la dictadura. Al margen de
la represión institucional y económica, elimina-
da toda disidencia y soterrado cualquier resqui-
cio de cultura política, se dieron múltiples for-
mas de coacción sobre una población sin más
responsabilidad que la ignorancia o la indiferen-
cia. Un simple agente municipal, empeñado en
hacerse perdonar su pasado político, hizo de la
Bajada del castillo. Capilla. Años 40 (Fuente: Fondo Temboury).
delación un instrumento de dominio. El ejerci-
cio de las formas más elementales de la violencia de nuevo la peregrinación de las mujeres al Ayun-
en forma de tortura y palizas, fue percibido como tamiento, solicitando la declaración del alcalde
la manifestación más inmediata del poder, que “de no tener inconveniente”. En efecto, alcanzada la
delegaba en sus agentes los métodos más libertad algunos reclusos, entre tanto se gestio-
expeditivos de intimidación. naba su vuelta a sus lugares de origen, habían de
permanecer en otras ciudades. Varias vecinas de
Fue una sociedad estrechamente vigilada. San Pedro solicitan el permiso para la vuelta a la
La obligatoriedad de la identificación personal antigua Colonia sobre la base de la precariedad
para acceder a las cartillas, los permisos para cam- de una situación material que ni les permitía visi-
biar de residencia, las certificaciones de buena tar a los liberados en otras ciudades ni a éstos,
conducta para trabajar o examinarse implicaban en general ya casi ancianos, subsistir sin el poyo
someterse al control de las autoridades. Si al fi- de sus familiares. Igualmente, las familias de los
nalizar la guerra la ley de Responsabilidades Polí- presos que “redimían” su pasado rojo en batallo-
ticas implicó a los alcaldes en la elaboración de nes de trabajo cobraban los beneficios de la asig-
informes de conducta, convirtiendo a los pode- nación familiar a través del ayuntamiento. Ni a
res locales en los agentes más cercanos de la re- los que ya habían cumplido condena ni a los fa-
presión. Después, cuando se hizo necesario des- miliares y vecinos a quienes la paz había exigido
congestionar las cárceles, los beneficiarios de la la vida se les permitió olvidar quiénes eran.
libertad condicional siguieron dependiendo de
las opiniones que los alcaldes y sus agentes tu- El mantenimiento de la vigilancia sobre un
vieran de su comportamiento público y privado. amplio sector de la población mantuvo a la co-

CILNIANA 15
MARBELLA: LOS AÑOS DEL HAMBRE

munidad profundamente escindida. La guerra – la Alameda por encima de la barandilla


que arrasó la cultura política de los grupos que (....). Cuando los del Frente de Juventudes
desde principios de siglo habían sido la base de montaron un hogar que estaba en la Pla-
la militancia republicana y obrera y quedaron con- za de los Naranjos, pusieron cosas muy
finados en los espacios urbanos que les eran pro- novedosas en Marbella como mesas de
pios– levantó fronteras psicológicas y simbóli- ping-pong y ajedrez. Allí íbamos muchos,
cas. Al norte de la antigua muralla, “El Barrio pero yo sabía que también había jóvenes
Alto”, al oeste del río, “El Barrio” de pescadores que no querían entrar y a otros que sus
y San Pedro... El imaginario colectivo de cualquie- padres no los dejaban (...)”52.
ra de los grupos sociales así lo percibió; las com-
plicidades que los unieron y los miedos que los La reacción colectiva de rechazo era
separaron se nos transmiten a través de los re- percibida por el poder y sus agentes con recelo y
cuerdos de dos mujeres que vivían en los dos desconfianza. Las respuestas eran expeditivas
extremos de la misma calle. ante la más insignificante manifestación no ya
de rebeldía sino de simple autodefensa. Con todo,
“Nosotros vivíamos en la calle de fueron frecuentes las denuncias por insultos a la
San Francisco, cerca del Santo Cristo, Mi autoridad, las detenciones por escándalo públi-
madre era lavandera y se levantaba a las co, las amenazas verbales al jefe de la policía que
2 de la mañana a lavar a ‘La Fabriquilla’, le lanzaban las mujeres cuando se llevaba a sus
en el camino de la sierra y cuando había hijos por una simple pelea callejera.
luna me llevaba (...). Los rojos pasaban y
saludaban a mi madre(...,) no le hacían El obsesivo empeño por controlar la mo-
daño, porque ellos sabían de más que mi ral pública y privada supuso la reglamentación
madre no hablaba (...)”50. de los comportamientos colectivos. El mismo
régimen que toleró y reguló la prostitución pro-
“En la sierra había más de uno, hibía y penalizaba la más mínima expresión que
los que estaban aquí los sabían y, con sus pudieran prodigarse las parejas en la vía pública.
propios compañeros, los mandaban a lla- Desde el Gobierno Civil se instaba a los alcaldes
mar para que se entregaran, diciéndoles a mantener bajo estrecha vigilancia los usos y
que no iba a pasarle nada. Vino uno y lo costumbres de la población:
mataron y entonces les mandaban a decir
que ‘ya estaba cara al sol’. Los de la sierra “En la calle, en paseos y en luga-
venían y dejaban preñadas a sus mujeres, res de esparcimiento y recreo, tales como
porque ellos bajaban y ellas también su- teatros, cines, cafés, bares y otros simila-
bían adonde ellos estaban. Nosotras les res, se advierte un relajamiento censura-
teníamos pánico, no nos atrevíamos ni a ble en nuestras costumbres, oyéndose fra-
salir al campo, ni a ir de paseo. Yo vivía ses obscenas, groseras y viéndose parejas
en el Puente Ronda y ni por la calle Ancha jóvenes, que, sin recato alguno, mantie-
subía, y eso que detrás de mi casa hubo nen actitudes más que incorrectas, desver-
uno encerrado un montón de años (...)”51. gonzadas, acusando todo ello una falta
de pudor y poco respeto, que más bien
Sobre los grupos sociales más apartados parece un insulto a las personas honestas
de la cultura de los vencedores se desplegaron y educadas que las observan (...). Importa
una serie de mecanismos de coacción tendentes también considerablemente el mejoramien-
al mantenimiento del orden y el silencio. Aun así, to de las costumbres en la vida ciudada-
estos grupos mostraban su rechazo en el aleja- na, ser inexorables en el cumplimiento del
miento consciente de los procesos socializadores horario de cierre de los establecimientos
vehiculados por la escuela, la Falange y la Iglesia, que cultivan el género frívolo y de ‘caba-
que implicaban la exclusión de unos espacios de rets’, ‘dancings’, ‘boites’ y demás centros
sociabilidad en los que se protegían y de vida nocturna, sobre todo los situados
perpetuaban los valores e intereses de los gru- en las afueras de las ciudades (...)”53.
pos más cercanos al poder.
En efecto, tras la guerra aumentarían de
“Cuando era joven, yo no tenía forma considerable los locales y casas de “mal
conciencia de lo que eran las clases socia- vivir”. La prostitución fue una de las manifesta-
les, pero me daba perfecta cuenta de otras ciones más evidentes de la doble moral de la épo-
cosas, que entonces no me parecían raras. ca, permitida y tolerada. El Régimen crearía el
Cuando había baile en el casino nosotros Patronato de Protección a la Mujer, un organis-
entrábamos para adentro como si nada y mo en el que Iglesia y el Estado compartían el
mucha gente se quedaba mirando desde proyecto de regeneración de las prostitutas. Por

16 CILNIANA
MARBELLA: LOS AÑOS DEL HAMBRE

supuesto, los informes sobre la moralidad públi- amenaza para las buenas costumbres que no dejó
ca elaborados por el Patronato achacaban el de- de preocupar a las autoridades civiles y religio-
terioro de la moral pública en la provincia de sas. Las conclusiones del I Congreso Nacional de
Málaga, no al empeoramiento de la situación de Moralidad en Playas y Piscinas, celebrado en Va-
los miles de mujeres que quedaron viudas y huér- lencia en 1951, instaban a los poderes públicos a
fanas como consecuencia de la guerra y la repre- frenar la invasión nudista extranjera y a mante-
sión, sino al descenso en la capital del nivel mo- ner la prohibición de tomar el sol conjuntamen-
ral durante “el período marxista”, en el que “las te a las personas de ambos sexos, y a la separa-
autoridades rojas se entregaron al libertinaje, desapa- ción de sexos en playas y baños 58. Los círculos
reciendo los matrimonios legales, efectuándose úni- femeninos más cercanos a los procesos
camente la unión carnal de hombres y mujeres a su socializadores del poder político y de la parro-
libre albedrío (...)” 54. quia secundarían esta peculiar cruzada solicitan-
do al alcalde de Marbella una playa donde las
La moral femenina habría de ser especial- mujeres no pudieran ser observadas:
mente controlada por el Estado y la Iglesia, em-
peñada esta, en mantener su hegemonía sobre la “(...) dándose cuenta de las ofen-
vida y la conciencia de las mujeres. Es conocida la sas que las playas mixtas causan al Señor,
intencionada atribución de “una conducta moral per- han prometido a la Santísima Virgen como
vertida” a las mujeres que habían sido represaliadas recuerdo de la Santa Misión solicitar una
por su ideología o su pasado republicano55. playa para el sexo femenino (...)” 59.

La imposición de los principios religiosos No es arriesgado pensar que la iniciativa


como normas reguladoras de la vida familiar y contará con el conocimiento del párroco, don
privada se manifestó en la derogación de la le- Rodrigo Bocanegra, que en aquellos días, según
gislación republicana que permitió el divorcio y sus propios hagiógrafos, tenía el control absolu-
el matrimonio civil y en el restablecimiento del to sobre la vida en Marbella –“Toda la calle es suya,
delito de adulterio, considerado mucho más gra- incluso Marbella es suya”60–, y a quien se ha atri-
ve para el honor y la moral cuando era cometido buido la liberalización de las modas y costum-
por la mujer56. La trasgresión de estos principios bres en la Costa del Sol61, sin que ello excluya la
implicaba que comportamientos que pertenecían prolongación de las formas de control que desde
exclusivamente a la vida privada de los individuos otras iniciativas seguiría desarrollando el poder
eran tenidos en cuenta a la hora de enjuiciar su religioso en paralelo al imparable proceso de se-
conducta política, como ponen de manifiesto in- cularización de la sociedad española.
formes elaborados por las autoridades locales,
todavía en la década de los cincuenta; en éstos
se hacen constar aspectos de la vida familiar de
los individuos, de sus prácticas religiosas de sus Notas
amistades o de sus hábitos de ocio y sociabili- 1
BARCIELA LÓPEZ, C., “Los costes del franquismo en el
dad. Así, de uno de los directivos de una socie- sector agrario: la ruptura del proceso de transformación. In-
dad recreativa se decía: “su conducta dejó que de- troducción”, en GARRABOU, R; BARCIELA, C. y JIMÉNEZ BLAN-
sear llegando al extremo de separarse judicialmente CO, J. I. (eds.)., Historia agraria de la España contemporánea. 3. El
de su esposa, en cuya situación vive actualmente”. fin de la agricultura tradicional (1900–1960), 3 vols., Barcelona,
1986, pp. 383-454. Del mismo autor: “El mercado negro de
Mientras que de otro de los miembros de la mis- productos agrarios en la posguerra, 1939–1953”, en FONTA-
ma junta directiva, conceptuado como “buena NA, J. (ed.), España bajo el franquismo. Barcelona, 1986, pp. 192-
persona”, no se evitaba hacer constar: “no asiste 205 y “La España del estraperlo”, en GARCÍA DELGADO, J. L, El
jamás a los cultos religiosos”57. primer franquismo. España, durante la Segunda Guerra Mundial.
Madrid, 1989.
2
NAREDO, J. M., “La incidencia del estraperlo en la econo-
En efecto, la Iglesia desarrollaría una mía de las grandes fincas del sur”, Agricultura y Sociedad, 19,
combativa actividad en la condenación de todas abril–junio 1981, pp. 82-127.
aquellas actitudes contrarias a la moral cristiana 3
BERNAL, A. M., Economía e historia de los latifundios, Ma-
haciendo a la mujer blanco de un mensaje que la drid, 1988.
4
RICHARDS, M., Un tiempo de silencio. La guerra civil y la
consideraba mitad demonio, mitad inconsciente cultura de la represión en la España de Franco, 1936-1945, Barce-
y por tanto necesitada de una permanente tutela lona, 1999.
material ejercida por padres y maridos y espiri- 5
Son varias los proyectos de investigación centrados en el
tual por los sacerdotes. Estos no tenían reparos estudio del franquismo a través de la oralidad, como el que
en decir a las mujeres, desde el púlpito, cómo coordina en la Universidad de Murcia Encarna Nicolás, vincula-
do al Seminario de Fuentes Orales de la Universidad
tenían que vestirse y comportarse. Complutense, que organiza a su vez Las Jornadas de Fuentes
Orales de Ávila. En Cataluña, bajo el impulso de Mercedes
En Marbella, como en el resto de las zo- Vilanova, se creó en 1983 el primer Archivo de Historia Oral de
nas turísticas, la llegada del turismo supuso una España.

CILNIANA 17
MARBELLA: LOS AÑOS DEL HAMBRE

6
A este respecto, se refiere Encarna Nicolás a la necesidad familias refugiadas en Marbella.
de estudiar la legislación contenida en los Boletines Oficiales 35
MARTÍNEZ CARRIÓN, J. M., “Biología, historia y medio
de la Provincia y a la documentación de los Gobiernos Civiles. ambiente. La estatura como espejo del nivel de vida de la so-
NICOLÁS MARÍN, M.ª E., “Los gobiernos civiles en el franquismo, ciedad española”, Naturaleza y conflicto social. Ayer, 46, 2002, p.
la vuelta a la tradición conservadora en Murcia (1939-1945)”, 116.
en TUSELL, J. (coord.), El régimen de Franco (1936–1945), Ma- 36
CATALÁN, J., La economía española y la segunda guerra mun-
drid, 1993, pp. 135-149. dial, Madrid, 1995.
7
O. 14 mayo 1939. (Ministerio de Industria y Comercio). 37
AMMA, “Correspondencia Oficial”, 1941, C. 184-H.
RACIONAMIENTO. Normas, BOE de 17 de mayo, en ARANZADI, 38
Ibídem.
E., Repertorio Cronológico de Legislación, Pamplona, pp. 371- 39
RICHARD, M., Un tiempo de silencio... op. cit.
372, Hemeroteca de la Diputación Provincial de Málaga 40
La figura de Mercedes Sanz Bachiller, viuda de Onésimo
(AMMA). Redondo, ha sido tratada por PAUL PRESTON en su libro, Palo-
8
Son raciones fijadas para un hombre adulto por el decre- mas de Guerra, Barcelona, 2001.
to de 28 de junio de 1939, que asignaba el 80 % de las raciones 41
AMMA, “Correspondencia Oficial”, 1940, C. 184-H.
del hombre adulto a las mujeres y a los ancianos y el 60% a los 42
AMMA, “Correspondencia Oficial”, 1940, C. 184-H.
niños. 43
Testimonio personal de M. S. S., Marbella, 1933.
9
SUÁREZ FERNÁNDEZ, L., Francisco Franco y su Tiempo, 44
AMMA, “Correspondencia Oficial”, 1940-1941, C. 184-H.
Madrid, 1984. ......................... 45
Los datos contenidos en los informes de la Guar-
10
LLERA, L. de y ANDRÉS–GALLEGO, J., La España de la pos- dia Civil que se conser van en las Cajas de la Correspon-
guerra: un testimonio, Madrid, 1992, p. 43. dencia Oficial correspondientes a 1940 y 1941 permi-
11
O. 15 NOVIEMBRE 1940 (PRESIDENCIA). PAN. RESTRICCIONES EN SU ten establecer los vínculos familiares de los detenidos
CONSUMO. BOE de 19 de noviembre, en ARANZADI, E., Repertorio con los represaliados en 1937. Las circunstancias del
Cronológico de Legislación, Pamplona, pp. 1.216-1.220, Archivo asesinato de José Ramos, fusilado junto a su mujer Ma-
Municipal de Marbella (AMMA). ría Machuca en marzo de 1937 son evocadas de forma
12
Clasificaciones con expresión del cabeza de familia, n.º de recurrente en la casi totalidad de los testimonios reco-
personas a su cargo, domicilio, total de ingresos declarados y catego- gidos en nuestra investigación de la guerra y el
ría, 1940, C. 515-H, Pieza (P.) 8, AMMA. franquismo, minuciosamente narrada por uno de sus
13
O. 15 NOVIEMBRE 1940 (PRESIDENCIA). PAN. RESTRICCIONES EN SU hijos en entrevista personal realizada el 26 de junio de
CONSUMO. BOE de 19 de noviembre, en ARANZADI, E., Repertorio 1989.
Cronológico de Legislación, Pamplona, pp. 1.216-1.220, AMMA. 46
AMMA, “Expedientes de Conducta”, 1937-1942, CC.
14
PRIETO BORREGO, L., La Guerra civil En Marbella. Revolu- 8.553-8.556.
ción y represión en un pueblo de la Costa, Málaga, 1998, pp. 194- 47
AMMA, “Correspondencia Oficial”, 1940, C. 184-H.
195. 48
El estudio de la actividad de los tribunales civiles ha
15
BARCIEL A LÓPEZ, C., “Los costes del franquismo... sido abordado entre otros por MIR, C., “Justicia civil y con-
”, op. cit. trol moral de la población marginal en el franquismo de
16
AMMA: “Correspondencia Oficial”, 1941, C. 184-H. posguerra”, Historia Social, 37, 53-72. También MIR, C., “El
17
Testimonio personal de A. M. Z., Marbella, 1916. sino de los vencidos: la represión franquista en la Cataluña
18
Testimonio personal de A. S. L., Marbella, 1932. rural de posguerra”, en CASANOVA, J. (coord.), Morir, ma-
19
Testimonio personal de M. C. L., Fuengirola, 1937. tar, sobrevivir. La violencia en la dictadura de Franco, Barcelo-
20
En el periódico Sur aparece a lo largo de la década de los na, 2002, 123-193.
40 los productos facilitados a la población, las cantidades y los 49
Boletín Oficial del Estado (BOE), Libertad Condicional,
precios. AMM ( Hemeroteca). 14 de abril de 1940.
21
AMMA, “Correspondencia Oficial”, 1940, C. 184-H. 50
Testimonio personal de E. U. L., Marbella, 1939.
22
Ibídem. 51
Testimonio personal de C. J. L., Marbella, 1911.
23
Ibídem. 52
Testimonio personal de A. S. L., Marbella, 1932.
24
RICHARDS, M., Un tiempo de silencio..., op. cit. 53
AMMA, “Correspondencia Oficial”, 1941, C. 184-H.
25
AMMA, “Correspondencia Oficial”, C. 184-H 54
PATRONATO DE PROTECCIÓN A LA MUJER, Informe so-
26
Son varios los trabajos que describen a través de un rico bre la moralidad pública en España. Memoria correspondiente al año
anecdotario los comportamientos y actitudes de la nueva cla- 1942, Madrid, 1943, p. 151.
se social surgida en la posguerra de la práctica del contraban- 55
Sobre el tema de la moralidad femenina en la posgue-
do. Entre ellos, ABELLA, R., Por el Imperio hacia Dios. Crónica de rra, además de la conocida obra de Carmen Martín Gaite, Usos
una posguerra, Barcelona, 1978; y MARTÍ GÓMEZ, J., La España amorosos en la posguerra española, Barcelona, 1987. Véase ROCA,
del estraperlo (1936-1952), Barcelona, 1995. G., De la pureza a la maternidad. La construcción del género femeni-
27
El delito de acaparamiento fue creado por la Ley de 26 no en la posguerra española, Madrid, 1996.
de octubre de 1939. La legislación sobre represión del contra- 56
SCANLON, G., La polémica feminista en la España contem-
bando en CLARET, P., Las Leyes de Tasas y el Delito vulgarmente poránea 1868-1974, Madrid, 1986.
llamado “de Estraperlo”, Talleres Penitenciarios Alcalá, 1941. 57
Archivo Histórico Provincial (AHP), Sección: Gobierno
28
BARRANQUERO TEXEIRA, E. y PRIETO BORREGO, L., Así Civil, Serie: Asociaciones, C. 928.
sobrevivimos al hambre: estrategias de supervivencia de las mujeres 58
Las conclusiones de este congreso y en general la reac-
en la posguerra española, Biblioteca de Estudios sobre la Mujer, ción de la Iglesia Católica con respecto al fenómeno turístico
CEDMA, Málaga, 2003. han sido abordadas en el trabajo de segundo año de doctora-
29
AMMA, “Correspondencia Oficial”, 1941-1942, C. 184-H. do, realizado por Rafael Lozano Yudeco, que he codirigido con
30
Ibídem. la profesora Marion Reder Gadow, El turismo en la Costa del Sol
31
AMMA, “Correspondencia Oficial”, 1940-1942, C. 184-H. y la Iglesia de Málaga.
32
BARRANQUERO TEXEIRA, E. y PRIETO BORREGO, L., Así 59
AMMA: “Correspondencia Oficial”, 1952, C. 208-H .
sobrevivimos al hambre... op. cit. 60
TORRES, A. A., S. J., Biografía de don Rodrigo Bocanegra,
33
JIMÉNEZ LUCENA, I., El tifus en la Málaga de la posguerra. Marbella, 1974, p. 25.
Un estudio históricomedico en torno a una enfermedad colectiva, 61
El citado trabajo de Rafael Lozano reproduce el conteni-
Málaga, 1990. do de un artículo de Antonio Burgos, publicado en Diario 16 el
34
MAÍZ VIÑAL, A., Geografía médica de Marbella, Marbella, 11 de agosto de 1993 en el que atribuye a monseñor Bocane-
1976. La tasa de mortalidad infantil es superada sólo en 1932, gra, el merito de permitir el bikini “para que las turistas suecas
1939 y 1936. El extraordinario aumento de la tasa en 1936 se estuvieran a sus anchas y entrara mucho dinero en las arcas munici-
debe a la incidencia de la mortalidad entre los niños de las pales”.

18 CILNIANA
El fin de una dinastía:
LOS DOMÍNGUEZ DE MARBELLA
II. INVERSIONES Y DISPENDIOS DE TOMÁS DOMÍNGUEZ ARTOLA (1843-1886)
José Luis Casado Bellagarza

En la primera parte de este trabajo, publicado en el número anterior de esta misma revista, pudimos
comprobar cómo Antonio Domínguez Alburquerque –fallecido en 1866–, mantuvo con dificultades el
patrimonio familiar mientras permaneció al frente del mayorazgo1 . De este modo, los años centrales del
siglo XIX suponen un punto de inflexión en la trayectoria económica de los Domínguez de Marbella.
En esta segunda entrega, abordaremos la gestión de los bienes heredados por Tomás Domínguez Artola:
sus proyectos agrícolas e industriales, sus gastos personales, su falta continua de liquidez; factores que
serán analizados para conocer las causas que condujeron al declive final de la dinastía de los Domínguez.

REPARTO DE LOS BIENES DE ANTONIO calle del Arco, que costaban cada una entre
DOMÍNGUEZ ALBURQUERQUE 15.000 y 18.000 reales.

R ecordemos que las propiedades heredadas


por los hijos de Antonio Domínguez en fe-
brero de 1870, sobre todo inmuebles rústicos,
A Manuela Domínguez Artola –casada con
el abogado malagueño Ignacio Fernández de la
Somera4– se le adjudicaron bienes más disper-
ascendieron a 2.442.675 reales. Al primogénito, sos y variados que a los dos hermanos anterio-
Tomás Domínguez Artola, le correspondieron res: dos casas en Marbella y otras dos en Málaga;
1.574.366 reales, el 62,5% de la herencia, mien- la huerta del Mesón en el pago de Valdeolletas
tras que cada uno de los otros tres hijos recibió por 45.975 reales; las siete hazas de la familia en
algo más de 300.000 reales 2. el término de Ojén, que valían 49.550 reales; las
tres fincas de Casara-
Así, Francisca Do- bonela, por 35.660 rea-
mínguez Artola –casada les; y un cortijo en Ron-
con el abogado y políti- da la Vieja que costaba
co Joaquín Chinchilla y 66.250 reales.
Díez de Oñate3– heredó
las fincas de Puente El primogénito,
Genil, que sumaban Tomás Domínguez Arto-
280.470 reales, entre la, heredó: las fincas rús-
ellas dos grandes corti- ticas de Marbella –a ex-
jos, valorados cada uno cepción de la huerta del
entre 130.000 y 140.000 Mesón que había pasado
reales; completaba su le- a manos de su hermana
gado una parte de la casa Manuela– que sumaban
7 de la calle del Viento casi 900.000 reales; la
de Marbella totalidad de las fincas de
Istán, 242.090 reales;
José Domínguez una casa en Málaga; y
Artola –casado con Pilar aproximadamente la mi-
Chinchilla, hermana de tad de las casas de la fa-
Joaquín– recibió dos ca- milia en Marbella, entre
sas en Marbella, siendo las que destacaba la vi-
la de más valor, 24.950 vienda principal de los
reales, la situada en el n.º Domínguez en el recin-
16 de la calle Ancha, y 12 to del castillo; rotulada
Isabel II. Óleo de Josefa Murillo y Bravo de Vela
casas en Málaga por un fechado en 1862. Fue un regalo de Francisco Serrano con el n.º 1 de la plaza
valor total de 194.899 Domínguez a Antonio M.ª Domínguez Alburquerque. de San Bernabé rondaba
reales, 10 de ellas en la Propiedad de Antonio Romero Domínguez. los 200.000 reales.

CILNIANA 19
LOS DOMÍNGUEZ DE MARBELLA

Como hemos indicado, la for- Quien mantuvo, y acre-


tuna del nuevo titular del ma- centó, el patrimonio hereda-
yorazgo era de algo más de do fue Francisca Domínguez,
1.500.000 reales. conservando hasta el final de
su vida los valiosos cortijos
Los criterios de repar- enclavados en Puente Genil.
to de los bienes adjudicados Situación a la que no sería aje-
responden, en primer lugar, a na la favorable situación eco-
la localización de los nómica de la que gozaba su
inmuebles. Se procuró que esposo, Joaquín Chinchilla, el
cada heredero recibiera las cual labró una gran fortuna
propiedades que estaban en- desde su destino como alto
clavadas en un mismo lugar o funcionario en Filipinas.
en lugares cercanos, para ad-
ministrarlas con mayor facili- TOMÁS DOMÍNGUEZ
dad 5. Además, cada hermano ARTOLA AL FRENTE DE
conservaría una casa en SU HERENCIA
Marbella, para no perder los
vínculos familiares con la ciu- ¿Y qué ocurrió con los
dad que los vio nacer, en par- bienes que obtuvo el primo-
ticular las dos mujeres, quie- génito? ¿Los conservaría
nes estaban casadas con per- Portada de una escritura de la notaría como lo habían hecho sus an-
de Francisco Acosta y Granados.
sonas que no residían en ella. tepasados durante siglos?
18 de septiembre de 1879.
Y cada uno de los herederos Archivo Antonio Romero Domínguez.
¿Cuál sería su estrategia como
recibió una cuarta parte de los agricultor y como industrial?
muebles, 6.170 reales, que más allá del valor ma- Las respuestas no se hacen esperar, pues Tomás
terial de los mismos puede entenderse como un Domín-guez Artola se apresuró a enajenar parte
deseo de conservar determinados recuerdos fa- del legado recibido. La falta de liquidez y los nue-
miliares6. vos proyectos fueron las causas más inmediatas,
aunque no las únicas, de estas primeras ventas.
COMIENZAN LOS CAMBIOS
Así, el 26 de marzo de 1870 Tomás
Muy pronto comienzan los herederos a Domínguez vende a Juan Bautista García Rome-
efectuar transacciones con sus bienes, rapidez ro, para su hijo José García Belón (farmacéutico y
que viene justificada por el retraso acumulado vecino de Málaga), la huerta y el haza de los Ha-
en los trámites para la ejecución del testamento, llazgos, situadas en el Chorreadero, por 30.000
que habían durado cuatro años, desde el falleci- reales la primera y 1.300 la segunda9. Los pre-
miento de Domínguez Alburquerque en 1866. cios fueron considerablemente más bajos que los
reseñados en la partición, que se había
Así, el 24 de febrero de 1870, sólo 5 días protocolizado sólo una semana antes: 33.800 y
después de la fecha de la partición de bienes, 2.590 reales respectivamente. Los Hallazgos se
José Domínguez Artola autorizó a su cuñado Ig- constituiría como colonia agrícola algunos años
nacio Fernández, residente en Málaga, para for- más tarde, concretamente en 187710.
malizar créditos con la finalidad de arreglar las
casas que acababa de recibir en la capital7. La disminución en los precios de las fin-
cas será una constante en la mayoría de las ven-
Otros hermanos esperaron algo más, tas. En alguna transacción se llega a justificar ba-
como Manuela, que el 9 de agosto de 1872 ven- sándose en que los peritos, procedentes de Má-
dió 6 hazas, situadas en Ojén, a los vecinos de laga, aplicaron a los inmuebles de Marbella los
precios de la capital 11. Aunque no hay que des-
cartar otros factores, que influirían en la deva-
Quien mantuvo, y acrecentó, el patrimonio luación, como las crisis económicas acaecidas
heredado fue Francisca Domínguez, durante estos años12, y los momentos desfavora-
gracias a la situación económica de su esposo, bles por los que atravesaron algunos herederos.
Joaquín Chinchilla
En el verano de ese mismo año de 1870
Domínguez Artola resolvió, también con ventas,
Marbella Francisco de Paula Urbano, arcipreste y un conflicto que tenía planteado contra el admi-
cura párroco, y Andrés Galbeño, comerciante, por nistrador de la colonia de San Pedro Alcántara,
14.000 reales8. Ángel María Chacón, con el fin de “recuperar la

20 CILNIANA
LOS DOMÍNGUEZ DE MARBELLA

posesión de la tercera parte de las aguas del río sus ascendientes, los Domínguez de Marbella,
Guadaiza de que ha sido despojado”, y para lo valorados en 1870 en 242.090 reales, fueron li-
cual tuvo que hipotecar la casa solariega de la quidados por Tomás antes de terminar el año
plaza de San Bernabé, como fianza de los 16.000 1873, por una cantidad, que con la rebaja de
reales que le exigió el juzgado para ratificar su precios, no llegaría a 200.000 reales; de todas
denuncia13. Debió pesar la influencia del propie- formas, una fortuna considerable en la Marbella
tario de la Colonia, el marqués del Duero, para de su época.
que Tomás Domínguez se aviniese a un acuerdo,
que firmó un mes después en la ciudad de Málaga Una transacción de menor cuantía tiene
con el propio Marqués14. Éste cedía el cortijo de lugar el 5 de febrero de 1871, al cambiar Tomás
Jurado y la casa venta de Campanillas, ambos pre- Domínguez la casa n.º 9 de la plazuela de la Ver-
dios en la vega de Málaga, y el haza de la Picaza en dura, antes Puerta del Mar, valorada en la parti-
el pago de Guadaiza; a cambio recibió de ción en 5.422 reales, por un haza de secano en la
Domínguez el agua de riego del olivar de Guadaiza, Vega de Guadalpín, 3.000 reales, propiedad de
del haza de Gálvez y del cortijo de la Campana15. La Antonio Guerrero Mancilla, que paga además 500
permuta pone de manifiesto la importancia del agua reales en metálico 22.
en la agricultura de la época, imprescindible en un
cultivo como la caña de azúcar16, el cual se estaba A pesar de los ingresos que percibe por
implantando en San Pedro Alcántara, y se materia- todas estas ventas, la necesidad de efectivo si-
liza en el alto precio de esta cesión, valorada en gue siendo perentoria para Tomás, como demues-
166.500 reales17. Esta inyección económica llegó tra que en diciembre de 1872 se viera obligado a
en un momento muy adecuado para Domínguez, contratar un préstamo de 60.000 reales, al ele-
al poco tiempo de recibir su herencia; él tenía un vado interés de un 10% anual, con Joaquina Díez
gran volumen de tierras y negocios que atender, de Oñate y Prados23. Dos años más tarde, al con-
pero no disponía de efectivo para desarrollar ini- tinuar con problemas financieros tuvo que pro-
ciativas agrarias o industriales; por consiguiente, rrogar el préstamo, ya que abonaba los intereses
conservaría el haza de la Picaza, valorada en 30.000 estipulados de 500 reales mensuales, pero no
reales, pero vendió los predios cercanos a Málaga, podía hacer frente al pago del capital24.
126.500 reales, que junto con los 10.000 reales
que recibió en metálico del marqués del Duero LA MARBELLA DEL ÚLTIMO TERCIO
constituyen, a corto plazo, una aportación de efec- DEL SIGLO XIX
tivo muy considerable, aunque a medio plazo re-
sulta evidente la desvalorización de las propieda- Quizá sea el momento de hacer un parén-
des junto al río Guadaiza, que se convirtieron en tesis en la descripción de la trayectoria econó-
tierras de secano. mica de Tomás Domínguez Artola, y trazar algu-
nos rasgos de la Marbella que encaraba el último
En el mismo año de 1870 podemos se- cuarto del siglo Diecinueve, que reflejaba las di-
guir la pista de nuevas ventas por parte de To- ficultades económicas y los sucesos políticos que
más Domínguez. Son algunas de las fincas que convulsionaban la vida nacional; pero que resurgía
poseía en el vecino término de Istán. Así, el 24 de los fracasos, algunos de los cuales, como la
de octubre de 1870 vende a Miguel Moreno Añón, industria siderúrgica de Río Verde, habían tras-
secretario del Ayuntamiento, cinco fincas en ese cendido, en sus años de esplendor, los límites
municipio, en total 12.745 metros cuadrados por municipales. En fin, una Marbella que plantaba
15.000 reales, observándose de nuevo precios cara al futuro con nuevos proyectos.
inferiores a los reflejados en el reparto de los
bienes de Domínguez Alburquerque; en sucesi- Uno de esos proyectos continuaba con la
vas operaciones durante octubre y noviembre del tradición minera del hinterland marbellí. El 5 de
mismo año vendería a distintos personas otras agosto de 1872 la compañía inglesa “The
11 propiedades por un valor total de 26.500 rea- Marbella Iron Ore” adquiría a Guillermo Malcolm
les18. Las ventas de las fincas panochas continua- varias minas, entre ellas las del Peñoncillo, por
ron en los años siguientes. En octubre de 1871 4.800.000 reales –quizás un precio demasiado
Tomás Domínguez acudió a Istán para firmar nue- alto–, el ferrocarril minero recién construido, por
ve escrituras de compraventa19. En marzo de 1872 2.400.000 reales, y el muelle de hierro, por
vendió, a Jesús Gil Jiménez, 3 hazas contiguas20. 350.000 reales25.
En septiembre de 1873 nos hallamos con un nue-
vo traspaso de propiedad, una de las mayores El muelle de hierro, auténtico símbolo de
parcelas, de 6.843 m², es vendida por 4.000 rea- progreso, representaría durante el medio siglo
les, muy por debajo del precio que se había fija- siguiente el poder de la compañía minera sobre
do en 1870: 7.395 reales21. Los 60 predios que Marbella. Se había abierto al tráfico marítimo en
habían acaparado en el vecino pueblo de Istán enero de 1872 y junto con el que existía en la

CILNIANA 21
LOS DOMÍNGUEZ DE MARBELLA

capital malagueña eran los dos únicos puertos tros a la redonda. Constituía la otra muestra del
de la provincia. Con su peculiar fisonomía se cambio experimentado en las estructuras produc-
adentraba en el mar 277 metros, con una anchu- tivas del municipio. La fábrica, inaugurada en
ra de 14 metros, y permitía el embarque a bu- mayo de 1871, fue la última apuesta financiera
ques de hasta 6,5 metros de calado26. del marqués del Duero en su empeño por com-
pletar el proceso agroindustrial de la Colonia; una
Por todo ello no resulta extraño el incre- explotación que rondaba las 5.000 hectáreas y
mento de las exportaciones, y si en el año 1871 traspasaba la frontera de la fértiles tierras del
el tráfico marítimo fue de 34 buques y 49,82 to- poniente marbellí, para adentrarse en las vegas
neladas de mineral de hierro, en 1872 ascendió del río Guadalmansa, de Estepona, y subir casi a
a 49 buques y 103,74 toneladas 27. las puertas del pueblo de Benahavís, siguiendo
el curso del Guadalmina.
El ferrocarril minero descendía de las cer-
canas montañas por la fuerza de la gravedad, y Esta vez el cambio venía desde la trans-
en los 100 metros previos al embarcadero una formación de la agricultura tradicional. Y si al
calculada pendiente amortiguaba la llegada de las principio, los grandes propietarios de Marbella –
vagonetas, tal como lo describe el escritor José entre ellos los Domínguez– mostraron su escep-
Ortega Munilla en una crónica fechada unos años ticismo, cuando no su sorna, ante las ideas
más tarde28: innovadoras del marqués del Duero, pronto com-
probarían los notables resultados de la tarea co-
“Una amable invitación me propor- lonizadora en torno a la nueva población.
cionó el gusto de hacer el viaje ascensional
á las minas. La pequeña locomotora arras- LA FÁBRICA HARINERA DEL CASTILLO
traba jadeando la larga fila de vagones,
al fin de la cual habían enganchado el Tomás Domínguez, impregnado del espí-
vagoncillo en el que íbamos los expedicio- ritu emprendedor que se respiraba en el munici-
narios. Cada curva de la vía nos dejaba pio, se dispuso a la aventura empresarial a imita-
ver nuevos horizontes espléndidos de luz y ción de las iniciativas que protagonizaban los
de vegetación, el mar dilatándose en am- forasteros. Y que había tenido entre miembros
plia llanura, sólo limitada por la borrosa de su propia familia antecedentes muy notables.
silueta de la costa de África, el promonto- Su bisabuelo Tomás Domínguez y Vargas, a me-
rio de Sierra Bullones y el Peñón de Gi- diados del siglo XVIII, explotó el grafito de
braltar. Benahavís y proyectó la instalación de una fábri-
… ca de crisoles en Marbella29, además de dedicar-
Cuando el sol se fué poniendo, re- se a otros negocios derivados de la agricultura,
gresamos á Marbella en una vagoneta que, lo que supone un caso destacado de ocupación
abandonada a su propio peso, corría por burguesa por parte de la nobleza local30. Y su
el plano inclinado con una velocidad de padre, Antonio Domínguez Alburquerque, había
un kilómetro por minuto. participado en distintas sociedades que tenían
como finalidad la extracción y fundición de plo-
Aquel despeñamiento suave por la mo, siendo director de los trabajos en las minas
hermosa vía, aquella caída sin temores ni de la Fuente de la Cañada de la Encina y La Cam-
angustia desde el nido del águila, aún ilu- pana, situadas en Sierra Blanca31.
minado por la luz diurna, al oscuro valle,
nos produjo viva impresión y dulce aban- El hombre más rico de Marbella, aún con
dono. El vivo vientecillo del mar nos aca- severas limitaciones impuestas por su escasez de
riciaba los sentidos, la luz tenue del hori- efectivo, estaba dispuesto a ampliar su actuación
zonte daba infinita magia a objetos, con- agroindustrial, en este caso relacionada con la
tornos y dintornos. Cuando el extraño ve- molienda del trigo.
hículo se detuvo, nos pareció despertar de
un sueño.” En el interior del castillo instaló la indus-
tria que aparece descrita como una “casa de fá-
Si la luz roja del muelle de hierro de brica de harinas, compuesta de planta baja y alta
Marbella se veía a seis millas de la costa, el humo con varias habitaciones, graneros, patios y de-
de la chimenea de más oficinas ne-
la fábrica azucare- cesarias”32 . Con-
ra de San Pedro Tomás Domínguez, el hombre más rico de Marbella, cretamente en el
Alcántara se vis- amplió su actividad agroindustrial con la instalación n.º 2 de la plaza
lumbraba desde de una fábrica harinera en el interior del castillo de San Bernabé,
bastantes kilóme- recordemos que

22 CILNIANA
LOS DOMÍNGUEZ DE MARBELLA

la residencia secular de los Domínguez ocupaba ce n.º 1, elaborado teniendo en cuenta el inven-
el n.º 1 de la misma plaza, aunque hacía tiempo tario de la escritura de dote.
que el castillo había dejado de ser una de las zo-
nas nobles de la ciudad33. Los bienes de la nueva esposa de Tomás
Domínguez suman 37.233 reales, procedentes de
Para acondicionar el inmueble para la fá- la herencia de una tía suya y de regalos de pa-
brica gastó 82.872 reales, más 2.400 reales de dres, parientes y amigos. Suma importante para
un solar adjunto que compró a Francisco Sánchez la familia de Elisa, que no estaba entre las más
Campos, por lo que su valor total alcanzó 110.000 ricas de Marbella39, y que supone un esfuerzo que
reales. Además, invirtió en “la maquinaria, moli- ha de rendir sus frutos dentro de las estrategias
no, bombas, torno, herramientas, sacos, pesos, de parentesco.
muebles y demás” otros 83.940 reales 34.
Es una cantidad notable para la Marbella
Relacionada con esta fábrica podría estar de la época –donde el sueldo medio de un traba-
la denuncia que presentó el concejal Antonio jador era de 7 reales diarios–, pero que era me-
Álvarez Toro, en agosto de 1872, contra Tomás nos de la mitad de lo que recibió de su propio
Domínguez, por haber dejado sin agua a los ve- esposo al contraer matrimonio, y exigua canti-
cinos del castillo, tras destruir el pilar de la fuen- dad al compararla con el capital total de Tomás.
te de este barrio y romper las tuberías con el Así, la segunda boda del prohombre de Marbella,
paso de los carros35. respondiendo a su contemporaneidad, rompe con
las antiguas costumbres de las bodas de conve-
LA SITUACIÓN FAMILIAR niencia económica mutua y proporciona un fuer-
Y LOS GASTOS DOMÉSTICOS te ascenso social a uno de los contrayentes40.

Conviene acercarnos a la situación fami- El único inmueble que poseía Elisa


liar de Tomás Domínguez, para comprender me- Torralba era una casa en la calle Ancha, valorada
jor al personaje y relacionar los gastos persona-
les con el conjunto de su fortuna.

Su primera esposa, Rosalía Salcedo Roldán36,


tenía 24 años cuando falleció el 3 de febrero de
1873 a causa de una meningitis. Dejaba tres hijos
pequeños: María del Carmen de 4 años, Manuela
de 3 y Miguel con sólo un año de edad37.

Tomás contrajo nuevo matrimonio antes


de que acabara el año, para ser más exactos la
“noche” del 30 de noviembre, con Elisa Torralba
Bolós. Los recién casados “marcharon inmedia-
tamente a la ciudad de Sevilla y llegaron hace
pocos días”, según se dice en la escritura de dote
el 3 de febrero de 1874, que efectuaron al regre-
sar a Marbella tras dos meses de viaje de bodas38.
En esta escritura se resalta la generosidad y cari-
ño de Tomás hacia su nueva esposa a la que rega-
la en concepto de arras 80.000 reales, además
de otros obsequios como un aderezo completo
de oro, perlas, calabrote y medallón de 2.500
reales, un abanico de nácar de 300 reales y un
pañuelo para las manos de 200 reales. En el do-
cumento notarial se incluye un inventario de los
bienes de Do-mínguez, lo que nos permitirá ha-
cer un balance de los primeros cuatro años al
frente del legado paterno, desde que recibió la
herencia en 1870.

AJUAR DE ELISA TORRALBA BOLÓS


Tomás Domínguez con su primera esposa, Rosalía Salcedo,
Pero antes vamos a comentar los bienes a los pocos días de su boda. 1866.
que aportó al matrimonio Elisa Torralba, apéndi- Archivo Antonio Romero Domínguez.

CILNIANA 23
LOS DOMÍNGUEZ DE MARBELLA

en 7.500 reales. Entre las joyas, que suman 3.730 muy variado, como los destinados a la ilumina-
reales, destaca un reloj de oro de 2.140 reales y ción: araña, candelabros, faneles, quinqué, can-
dos libros religiosos, uno de ellos un devociona- deleros de cristal o lámparas de petróleo. Con
rio encuadernado en marfil y plata que valía 180 una gran diversidad de precios. Así, en los mue-
reales. El resto de sus bienes corresponden a ropa bles encontramos desde una cama de caoba de
de vestir y complementos, ropa de casa y obje- 2.000 reales hasta catres de 50, pasando por una
tos personales, como un neceser de costura o dorada de 900 reales. Y diversidad de materia-
cepillos, peines y tarros de tocador. les, encontrándonos muebles de caoba, de nogal
–ropero valorado en 1.300 reales–, o de pino los
Hemos clasificado y agrupado los objetos más corrientes. Variedad que también se refleja
del ajuar, que aparecen con todo detalle en el en los colchones, que oscilan entre los 80 reales
documento notarial. No corresponde aquí su es- que cuestan los de lana hasta los 400 de uno de
tudio pormenorizado, que constituye una fuente muelles (debe de tratarse de un somier), otra
documental de gran valor para trabajos sobre his- muestra del lujo y de la modernidad que impera-
toria de la vida cotidiana. Sólo comentar algunos ba en el nuevo hogar de los Domínguez; y en una
aspectos, como el gran número de vestidos, 16, gran cantidad de sofás, sillones y sillas, siendo el
que suman 10.480 reales, y son de muchos tipos de más valor un juego de sofá con 24 sillones
y precios, desde el más caro que era uno de gros41 por valor de 2.000 reales, tapizado en seda
color café con leche, que alcanza 2.900 reales, adamascada. Completan el mobiliario multitud
hasta otros de diferentes tejidos, como seda, ca- de objetos decorativos, como 43 cuadros y 5 es-
chemir, popelín, percal, o lana, valorado en 100 pejos, entre los que destacan cuatro relojes, tres
reales este último. Otra prenda de lujo es un velo de pared y uno de sobremesa, que valorado en
de chantillí cuyo costo asciende a 2.200 reales. 600 reales resulta el más caro. En cambio, Tomás
Completa el ajuar gran cantidad de ropa: 24 ca- Domínguez Artola no incluye entre sus propie-
misas, 30 pares de medias, 17 enaguas –algunas dades obras de arte, ya que los cuadros al óleo
de organdí o madapolán–; y complementos como son de escaso valor, y tampoco libros de ningún
pañuelos, guantes, corbatas, sombreros, abanicos, tipo, demostrativo de las inquietudes del dueño
quitasoles, botillos y zapatillas. Entre la abundan- de la casa, y del nivel cultural de la ciudad46.
te ropa de cama hay también una gran variedad,
así entre las 16 sábanas encontramos de hilo de También es apreciable el lujo en el mena-
Holanda y de algodón, y entre los cobertores y je de cocina. Una vajilla de loza de porcelana con
colchas se describen un cobertor de lana supe- filos dorados está inventariada en 1.000 reales, y
rior con cenefa celeste y una colcha de damasco completan esta parte del inventario botellas, co-
de seda carmesí 42. pas de cristal tallado y juegos de café.

AJUAR DE TOMÁS DOMÍNGUEZ ARTOLA Otro apartado de gran valor es el de la


ropa, que suma 24.000 reales, entre ropa blanca,
Los objetos domésticos pertenecientes a nueva o usada, y ropa de vestir; y quizás por al-
Tomás Domínguez Artola podemos verlos clasifi- gún recato de masculinidad no se detalla como
cados en el apéndice n.º 2. Este inventario podrá se hizo con la ropa de Elisa Torralba.
compararse con otros de la Marbella del siglo XIX,
que se extraigan de los protocolos notariales, aun- Entre los elementos más personales de
que pensamos que éste constituye, con mucha di- Tomás encontramos un reloj cronómetro de oro
ferencia, el más amplio y de mayor valor43. Y tam- con cadena, asimismo de oro, cuyo costo es de
bién con otros inventarios de la época44, por ejem- 4.800 reales. Asimismo se enumeran varias ar-
plo con los que conocemos del matrimonio de un mas de fuego –3 escopetas, 2 revólveres y 2 pis-
pariente suyo, Fran- tolas–, una caja de
cisco Serrano Do- caudales, un sillón
mínguez hijo homó- El salario medio era de 7 reales. Elisa Torralba de despacho, varias
nimo del general Se- poseía 16 vestidos valorados en 10.480 reales escribanías de metal
rrano45. y una cigarrera. Y
como elementos de
Este inventario aporta múltiples detalles transporte se inventarían un coche, de 2.500 rea-
para conocer el nivel material de existencia de la les, y una montura.
familia Domínguez-Torralba, como la muestra más
representativa de la burguesía de Marbella. Des- LA GESTIÓN PATRIMONIAL
de elementos singulares, modernos y prácticos ENTRE 1870 Y 1874
como una máquina de coser, hasta otros tradi-
cionales y religiosos como una pila de agua ben- Si Tomás Domínguez recibe en 1870 como
dita. El repertorio de los objetos de la casa es herencia 1.574.366 reales y cuatro años después

24 CILNIANA
LOS DOMÍNGUEZ DE MARBELLA

dispone de 1.671.611 reales, su capital ha au- Domínguez Artola, pero han experimentado un
mentado en casi 100.000 reales. Sin embargo, el cambio considerable en tan corto periodo de
resultado no es tan positivo como puede parecer tiempo, pues si en 1870 el apartado inmobiliario
a primera vista, según vamos a analizar teniendo suponía la práctica totalidad del capital, un 98,9%,
en cuenta el cuadro siguiente. En primer lugar, en 1874 sólo alcanza un 85,1%. Este porcentaje
arrastra unas deudas elevadas, 218.181 reales, a oculta un cambio mayor, pues las abultadas ci-
unos intereses muy altos y con pocas posibilida- fras de ventas no se compensaron con otras si-
des de amortización a corto y medio plazo. milares de compras, sino que algunas propieda-
des han sido revalorizadas con fuertes inversio-
nes. Veamos con más detalles las transacciones
efectuadas.

OPERACIONES DE VENTAS

Sabemos que por la huerta y el haza de


Los Hallazgos recibió Tomás Domínguez 31.300
reales, y si por la huerta la rebaja con respecto a
los precios de la partición de 1870 fue de un 11%
en el haza llegó a un 50% de su valor anterior49.
Estas depreciaciones habrá que tenerlas en cuenta
en otras compraventas, en algunas de las cuales
desconocemos el precio exacto de la transacción.
Como es el caso de las 60 fincas que poseía
Domínguez en el municipio de Istán. Según las
escrituras que hemos podido manejar, las fincas
panochas se rebajarían al menos en un 20%, en
relación al precio total de 242.090 reales de la
testamentaría.

Por la venta de los derechos de agua de


las tres fincas junto al río Guadaiza, percibió
166.500 reales por parte del marqués del Duero,
aunque éste sólo pagó 10.000 reales en efectivo.
El resto lo recibió Tomás Domínguez en fincas, y
si bien conservó la Picaza, pronto se deshizo, por
una cantidad que desconocemos, de las fincas
cercanas a Málaga valoradas en 126.500 reales.
El cambio más visible tuvo lugar en los
objetos domésticos, pues si en el momento de la También vendió varios inmuebles urbanos.
herencia constituían una cantidad insignificante, La casa nº 9 de la Puerta del Mar, valorada en
muebles por 6.170 reales, ahora ascienden a 5.442 reales, se enajenó por 3.500. De la casa nº
81.000 reales47, el 4,3% del capital total. El valor 23 de la calle del Muro, que compró a su herma-
del mobiliario se ha multiplicado por 9, y si in- na Manuela en 1871 por 8.000 reales descono-
cluimos las ropas y joyas el factor multiplicador cemos el precio de la venta50. Igual sucede con
llega a ser 13, lo que demuestra la liberalidad de otros inmuebles, de los cuales sólo conocemos
Tomás Domínguez al adquirir estos bienes, que su precio según el inventario de 1870: el solar de
hemos descrito con anterioridad. la calle Solano estaba evaluado en 760 reales; la
casa n.º 6 de la plaza de la Constitución en 61.770
Surgen nuevos capítulos entre las propie- reales; y la vivienda n.º 52 de la calle Angosta en
dades, como el mobiliario afecto a la actividad Málaga en 14.860 reales. Por ello, la cantidad to-
agroindustrial. Así la maquinaria y otros elemen- tal de este apartado oscilaría entre 70.000 y
tos de la fábrica harinera del castillo, junto con 90.000 reales.
herramientas, 2 carros y 4 animales –una mula,
una yegua y dos caballos 48–, y existencias de tri- OPERACIONES DE COMPRAS
go, harina y aceite suman la cantidad de 143.820
reales, que suponen un 7,6 % del capital total. Las compras de inmuebles que hizo To-
más Domínguez son escasas y de poco valor.
Las variaciones más destacadas radican en Destaca la compra, en 1871, a su hermana
el capítulo de inmuebles. Siguen constituyendo Manuela de la huerta del Mesón por 30.000 rea-
el apartado más importante del patrimonio de les, lo que suponía una disminución de un 34,7%

CILNIANA 25
LOS DOMÍNGUEZ DE MARBELLA

sobre los 45.975 reales reflejados en el inventa- el olivo, y también en la industria oleícola. Pero,
rio post-morten. En la misma operación también como ya hemos reseñado, también apostó decidi-
adquiere la casa n.º 23 de la calle del Muro, por damente por una nueva actividad: la industria hari-
8.000 reales 51. nera. En la fábrica de harina del castillo empleó
82.872 reales, sólo en la adaptación del edificio.
Como hemos dicho anteriormente, 30.000
reales es la valoración del haza de Picaza, en el Pero el inmueble más caro que poseía
pago de Guadaiza, que recibió del marqués del Domínguez Artola era su vivienda, la casa nº 1
Duero como parte de la cesión del riego que te- de la plaza de San Bernabé, tasada en 320.080
nía proveniente de este río. reales. A pesar de que en 1847 su padre había
gastado 175.300 reales para la reconstrucción de
El resto de las adquisiciones son de pe- la casa solariega en el castillo de la ciudad, To-
queña cuantía, como un haza en Las Albarizas más desembolsó 120.000 reales para su rehabili-
por 1.800 reales y otra en Guadalpín por 3.000. tación entre los años 1870 y 1873, en una prue-
E igual ocurre con algunas fincas urbanas, que ba más de su gusto por el buen vivir.
suponen 6.700 reales: las casas n.º 11, 17 y 19
de la calle de Ronda por 1.000 reales cada una y A MODO DE BALANCE
las nº 9 y 15 de la calle del Peral por 2.500 y
1.700 reales respectivamente. A la vista de los datos anteriores pode-
mos acercarnos con bastante fidelidad a lo que
OPERACIONES DE MEJORAS fue la gestión patrimonial de Domínguez Artola
entre los años 1870 y 1874.
Si las operaciones de compras que cono-
cemos totalizan 79.500 reales y por las ventas Si a la cantidad de 391.006 reales de las
podría haber recibido en torno a 475.000, ¿en mejoras sumamos los 79.500 de las compras de
qué invirtió Domínguez Artola la gran diferencia fincas, los 83.940 de los enseres de la fábrica, los
que resultó a su favor? 21.000 de herramientas, carros y animales, y los
81.000 de los objetos personales, da como resul-
En primer lugar invirtió en la mejora del tado 656.446 reales. Como los ingresos fueron
patrimonio rústico. Así, en una de sus fincas más unos 475.000 reales, la diferencia en contra es de
rentables, el cortijo de Miraflores, gastó la consi- unos 181.000 reales, que se aproxima a los 218.181
derable cantidad de 140.000 reales, tanto en la reales que Tomás reconoce como deuda54.
casa como el molino de aceite 52, más de lo que
costaba el propio cortijo en 1870, que era En resumen, los cuatro primeros años que
120.000 reales; así su valoración final de 260.000 Tomás Domínguez dispuso de su herencia no se
reales sobrepasa en mucho al resto de los pueden considerar satisfactorios en el aspecto
inmuebles rústicos. Esta inversión corresponde- económico. A un ritmo desenfrenado de ventas
ría a la última reforma del cortijo, que es la que corresponde una fuerte inversión en componen-
ha perdurado hasta nuestros días, tanto en el as- tes de transformación agroindustrial: el molino
pecto arquitectónico como en el industrial53. de aceite del cortijo de Miraflores y la nueva fá-
brica de harinas del castillo; pero al mismo tiem-
Tomás Domínguez mejoró también, aun- po se excede con otro tipo de gastos: la rehabili-
que en menor proporción, otra finca cercana a la tación de la vivienda familiar y la adquisición de
ciudad de Marbella, el haza del Calvario. Empleó numerosos objetos domésticos y personales
28.045 reales para plantar vides y 1.000 pies de como ropas, muebles y joyas; aparte de
olivo. El valor de esta finca pasó de 1.955 a 30.000 dispendios que no han dejado testimonio, aun-
reales. que algunos sí como los empleados de su casa,
que en 1870 eran una nodriza, una niñera, una
Como todos los propietarios importantes sirvienta y un sirviente55. El desequilibrio entre
de Marbella, Tomás Domínguez disponía de un ingresos y gastos le originó un fuerte endeuda-
almacén en la playa, al sur de la Alameda, nece- miento, del cual no lograría recuperarse en los
sario en las operaciones de embarque y desem- años siguientes.
barque de mercancías para el tráfico marítimo.
En su ampliación gastó 20.080 reales, de este LA ACTUACIÓN SOCIAL Y POLÍTICA
modo el almacén alcanzó un valor final de 40.329 DE TOMÁS DOMÍNGUEZ
reales.
Como primogénito de los Domínguez, a
Domínguez Artola invirtió su capital en los Tomás le correspondía ser patrono de sangre del
cultivos tradicionales de Marbella, que a su vez Hospital de Santo Tomás de Málaga56, y adquirió
habían sido los habituales en su familia, en la vid y los derechos de sus antepasados por nombra-

26 CILNIANA
LOS DOMÍNGUEZ DE MARBELLA

miento de 5 de abril de 186957. Por las mismas gobierno municipal. En cambio, tenemos una
fechas, autorizó a su cuñado Ignacio Fernández referencia sobre su pertenencia a la junta de go-
de la Somera, para que promoviera expediente bierno de una asociación religiosa. En 1872 era
ante la Diputación Provincial y se declarara pa- mayordomo de la Hermandad de la Soledad63.
tronato particular la fundación del Hospital, ya
que el organismo provincial pretendía integrarlo Años en los que continúan la dificultad
en su red de beneficencia58. económica para las arcas municipales, pues la
desamortización de los bienes de propios dejó
La primera noticia que conocemos sobre al Ayuntamiento sin una parte sustancial de lo
la actividad política de Tomás nos la proporciona que habían sido sus ingresos durante siglos, y el
un acta capitular de 14 de febrero de 1869, en la pago de los intereses de las láminas
que se insta a Tomás a posesionarse de su plaza intransferibles, como compensación de esos bie-
de concejal. Habría sido elegido en el segundo nes, además de suponer una cantidad menor a lo
semestre de 1868, pero ciertas lagunas documen- percibido con anterioridad se hacían con mucho
tales en la documentación municipal de estos retraso. Como consecuencia el Ayuntamiento se
años nos impiden conocer más detalles de su veía obligado a endeudarse, llegando a deber
incorporación al Ayuntamiento, en esos momen- cerca de 600.000 reales a los hijos de Manuel
tos de agitación política59. Agustín Heredia64.

Tiempos de represión como nos indica la LA FÁBRICA DE EL ÁNGEL


fianza que tuvo que prestar el vecino de Marbella,
el 28 de febrero de 1870, Felipe Laguna Aparicio El cultivo de trigo nunca había sido dema-
a favor de José Casimiro Sindone y Juan de Fuen- siado productivo en Marbella, entre otros moti-
te Sindone, “presos por haber tomado parte en vos por el relieve montuoso de gran parte de su
la última insurrección republicana” 60. territorio, por lo que el déficit de un producto
que entonces era un elemento básico de la dieta
Y tiempos de algaradas, como la ocurrida alimenticia, obligaba a su compra fuera del mu-
en la feria de San Bernabé, en junio de ese mis- nicipio65.
mo año. Primero se oyeron gritos de “¡abajo los
consumos!”, contra los impuestos más odiados No es descabellado pensar que debido a
que gravaban los productos básicos, durante la la conjunción de diversos factores, como la cons-
corrida de toros que se celebraba en la plaza prin- trucción en Marbella del muelle de hierro y la
cipal de la ciudad. Luego, una petición para que articulación de un mercado mundial, que hacía
se matara a un toro, degeneró en asalto al bal- que el trigo extranjero que llegaba por barco fuera
cón del Ayuntamiento donde presidía los feste- más barato que el procedente de las regiones del
jos el alcalde, Pedro Artola Villalobos –tío de To- interior de España, Tomás Domínguez ampliara
más Domínguez Artola–, que tuvo que refugiar- su actividad en la industria harinera, instalando
se en el edificio consistorial, protegido por con- otra fábrica, esta vez en las proximidades del río
cejales, empleados y vecinos, perseguido por los Verde, aprovechando la infraestructura de la des-
revoltosos que ampliaban el repertorio de la pro- aparecida ferrería de El Ángel.
testa con voces de “¡muera el alcalde, ladrones,
pillos!”61.

Algunas de las intervenciones de los


regidores en las reuniones del cabildo son au-
ténticas proclamas, que ensalzan las libertades
conseguidas y proponen mociones que intentan
reflejar el nuevo orden político en la ciudad de
Marbella, lo que no impide que se mantengan
ciertos honores como el nombramiento de hijo
adoptivo a Ignacio Fernández de la Somera, di-
putado provincial, por su preocupación por los
asuntos de Marbella62, entre los que destaca su
papel en el restablecimiento del Hospital de San
Juan de Dios, suprimido desde 1837 y que fue
abierto, tras misa solemne a la que asistió la cor-
poración municipal, el 24 de septiembre de 1870.

En los años que restan del Sexenio Revo-


lucionario, Tomás no participa en las tareas de Caserío de El Ángel, “Fábrica de Arriba”, en un mapa de 1881.

CILNIANA 27
LOS DOMÍNGUEZ DE MARBELLA

Adquirió los terrenos donde se enclava- mejorar las instalaciones, por las que había pa-
ba el antiguo establecimiento siderúrgico, el 13 gado 100.000 reales tres años antes. De todos
de febrero de 1874, a Guillermo Malcolm –éste modos, ese dinero le permitiría afrontar deudas
lo había comprado a su vez, en 1869, a la socie- pendientes y liberarse de los altos intereses que
dad El Ángel, en extinción, representada por Juan ahogaban sus finanzas.
Giró Aramburu y José de la Peña Martínez– por
100.000 reales66. La propiedad estaba constitui- No acabó aquí la relación de Domínguez
da por dos fincas. Una de ellas era la “fábrica o Artola con El Ángel, convertida en colonia agrí-
martinete de El Ángel”, que además de los hor- cola desde febrero de 188070. José Martínez y
nos y talleres contaba con diferentes edificios, Carlos de Cuadra y Viteri71 adquirieron, en sep-
casas para los obreros, e incluso un pequeño ce- tiembre de 1881, numerosas fincas que
menterio. La otra finca era un molino harinero Domínguez poseía entre los ríos Verde y
en el lugar denominado cortijillo del Hospital o Guadaiza, que recibían en su conjunto el nom-
de Galiano. bre de La Campiña o Santa Elisa. Tomás recibió
un adelanto de 60.000 reales, en forma de prés-
El alto precio pagado no se corresponde tamo, y el resto hasta completar 400.000 reales
con la extensión de las fincas, pues la primera le sería abonado en un plazo máximo de 6 me-
tenía una extensión de 6,12 ha y la segunda de ses72. Una importante cantidad de dinero, que
1,93 ha, pero sí con su infraestructura industrial; coincide –de forma excepcional– con la evalua-
así la rueda hidráulica la reutilizaría en la nueva ción de las fincas en los inventarios de 1870 y
1874, aunque supone desprenderse de unas tie-
rras muy feraces y que habían pertenecido a la
Tomás Domínguez instaló una nueva fábrica de familia desde hacía generaciones.
harina en El Ángel, aprovechando la
infraestructura de la desaparecida ferrería La nueva colonia de El Ángel creció consi-
derablemente. Con la incorporación de nuevos
socios aumentó su capital73, permitiendo esta
instalación fabril harinera. En el año 1875 entra ampliación de 463 ha74 –aunque sólo 16 de ellas
mucho más trigo por la aduana de Marbella que se regaban con una presa que recogía las aguas
en los años anteriores, y desaparece la entrada del río Benabolá–. Los propietarios de la flaman-
de otro cereal panificable: la cebada, lo que po- te colonia agrícola revitalizaron la fábrica harine-
dría entenderse como una mejora de la alimen- ra, impulsaron el cultivo de la caña de azúcar y
tación debido a cierta bonanza económica y a la construyeron una fábrica para su molienda, ade-
producción de la industria local harinera67. más de embalses y otras mejoras hidráulicas75.
No iba descaminado Tomás Domínguez cuando
Tomás Domínguez pagaba contribución adquirió El Ángel, cuya potencialidad era innega-
industrial por una fábrica de harina de una pie- ble, pero además del factor tierra se necesitaba
dra en el año económico de 1874 a 1875; en los un importante capital, y él carecía de la liquidez
dos años siguientes la fábrica aparece como de necesaria para la dotación de infraestructura hi-
dos piedras y en el año de 1877 a 1878 contribu- dráulica e industrial. Este fracaso es el último gran
ye por un molino de presa con cuatro piedras68. intento de la burguesía de Marbella para liderar
De lo que se infiere la mayor capacidad tecnoló- la economía del municipio, y muestra de la inca-
gica que impulsó Tomás Domínguez en su indus- pacidad de las clases medias locales para incor-
tria harinera de Río Verde, y la desaparición de la porarse a los nuevos modelos económicos76.
fábrica del castillo.
PRIMER MANDATO COMO ALCALDE,
No le irían bien las cosas a Tomás 1877-1879
Domínguez, porque el 26 de febrero de 1877 se
vio obligado a hipotecar El Ángel en un présta- El 1 de marzo de 1877 Domínguez Artola
mo que le hizo Francisco Reyna y Zayas, vecino toma posesión como concejal en el Ayuntamien-
de Málaga, de 65.773 reales. Vencía el 1 de ene- to que preside Diego Romero Amores. Durante
ro de 1881 y si se demoraba en el plazo tendría los escasos meses de gobierno de éste se susci-
que pagar intereses del 12%. tan bastantes enfrentamientos en la corporación
municipal, los concejales acusan al alcalde de no
Al final de ese mismo año, el 7 de noviem- rendir cuentas, varios de ellos no están de acuer-
bre de 1877, Tomás Domínguez vendió los terre- do en distintas ocasiones con el contenido de
nos e instalaciones de la antigua ferrería a José las actas y algunos intentan dimitir77.
Martínez y Martínez de Pinillos por 170.000 rea-
les69. No sabemos si fue un buen negocio para Tomás Domínguez lo sustituirá como al-
Domínguez, al desconocer lo que invirtió para calde en septiembre de ese mismo año. Con él la

28 CILNIANA
LOS DOMÍNGUEZ DE MARBELLA

tranquilidad vuelve a las sesiones plenarias. Al La corrupción de la administración públi-


renovarse parte de la corporación municipal, es ca se puede seguir a través de las propias actas
nombrado para dirigir el Ayuntamiento por real capitulares. Así, el 4 de abril de 1878, el Ayunta-
orden de 7 de septiembre de 1877, y el día 29 miento argumenta ante una reclamación del mé-
toma posesión. La nueva ley electoral reforzaba dico Juan Bautista de la Torre y Martínez que,
la intervención del poder central con el nombra- recién acabada la carrera de medicina, logró la
miento directo del alcalde en los municipios de plaza por influencia de su padre que era el secre-
más de 6.000 habitantes78. El nuevo sistema de tario de la corporación. El tráfico de favores es
la Restauración encuentra en Tomás Domínguez notorio y cotidiano, y el mandato de Tomás
el candidato idóneo. Su pertenencia a la oligar- Domínguez no iba a ser una excepción. De este
quía tradicional, sus relaciones familiares a nivel modo, el 23 de junio de 1878, su suegro José
provincial y nacional, su red clientelar en el mu- Torralba Cuesta, es nombrado administrador del
nicipio, hacen de Tomás Domínguez el primer fielato con un sueldo de 14 reales diarios, y el 20
cacique, en sentido estricto, del régimen de julio el arrendador de la panera del pósito pide
canovista en Marbella. que se le pague el alquiler, al tiempo que denun-
cia que se haya trasladado al Cortijo de
Resulta sintomático que Tomás firme –lo Miraflores82.
que no hace ningún otro alcalde– en la parte su-
perior de todas los folios de las actas, además de Por ello no es extraño, que al posesionar-
la firma habitual al final del acta con el resto de se un nuevo alcalde, Cristóbal Lara Urbano, el 9
regidores; parece querer demostrar con ello que de julio de 1879, se cambien a los trabajadores del
controla la situación en el Ayuntamiento; y lo hace fielato, y algunos concejales protesten de forma
con tinta morada, rompiendo la monotonía de la reiterada, entre ellos Tomás Domínguez. Durante
tinta negra de los cuadernos capitulares, una el bienio 1879-1881, y a pesar de ser primer te-
muestra más de su interés por las innovaciones, niente de alcalde, no
inquietud demostrada en la implantación de pro- asiste con asiduidad
yectos agroindustriales o en la decoración de su a las reuniones del
propia casa. Ayuntamiento, aun-
que el 8 de abril de
La pervivencia de situaciones sociales in- 1880 recibe el en-
justas se puede comprobar con la existencia, en cargo de ir a Mála-
el municipio, de un gran número de jornaleros ga, a gestionar la
que reciben salarios de miseria; y sobre ellos y venta de los títulos
sus familias recae todo el peso de las situaciones de deuda pública,
de crisis, que no son pocas, y que pueden ser propiedad del Ayun-
originadas por la climatología, una sequía, unas tamiento83. El 1 de
inundaciones, son motivos suficientes para que julio de 1881 al re- Timbre del año 1881 en un
se agrave la precaria economía de la mayoría de novarse la corpora- folio de escritura pública.
la población. Esta situación es remediada, a ve- ción ya no aparece
ces, con arcaicos modelos de caridad. Así, con entre los concejales que continúan su mandato84.
motivo de la boda del rey Alfonso XII, que tuvo Se estaba preparando para la aventura colonial en
lugar el 23 de enero de 1878, el Ayuntamiento Filipinas.
repartió 600 panes entre los pobres, eso sí, eran
de trigo, de buena calidad y de 2 libras de peso, ESTANCIA EN
costando 968 reales79. FILIPINAS

El Ayuntamiento y el arrendatario del im- Aparte de la compra venta de El Ángel, el


puesto de consumos vigilaban para que las mer- resto de transacciones de los años 1874 a 1881
cancías que se vendían en la ciudad pasaran por que hemos podido localizar son de pequeña cuan-
el fielato, donde se abonaba la tasa correspon- tía: en 1874 Tomás Domínguez vende a Ana Artola
diente. En ocasiones extremaban la vigilancia, Villalobos la huerta de los Postigos, por 18.000
como en agosto de 1878 cuando se decidió con- reales85; en 1877 compra el haza de Casasola, si-
tratar más empleados por “transitar de noche los tuada en Río Verde, propiedad de Antonio Céspe-
trajineros de aceite, aguardiente y otras especies” des y Francisco Sánchez, por 4.000 reales86; en sep-
y ser la época del tráfico de fruta con Gibraltar80. tiembre de 1879 vende a Gerónimo González Rubí
El tráfico ilegal de mercancías salpica a sujetos la Huerta del Mesón y la casa contigua, por 35.000
de todas las clases sociales, y es la propia corpo- reales87; y en febrero de 1881 hipotecó su vivien-
ración municipal la que tiene que suspender, ese da, la casa n.º 2 de la calle de San Bernabé, por un
mismo año, al concejal Lucio Chapestro acusado préstamo de 5.000 reales a un 12% de interés, que
de delito de contrabando 81. le hace Luis Solano y Pertura88.

CILNIANA 29
LOS DOMÍNGUEZ DE MARBELLA

Como acabamos de decir, tras abandonar cargos administrativos, militares y políticos, des-
el Ayuntamiento a mediados del año 1881 To- tacando la trayectoria de José Chinchilla, que tras
más Domínguez se prepara para marchar a Filipi- pasar por Cuba y otros destinos llegó a ser minis-
nas. El 12 de julio firma un poder notarial a su tro de la Guerra con Sagasta, entre 1888 y 189095.
esposa y a su suegro, José Torralba Cuesta89, y el Mientras los Domínguez que mantienen su resi-
12 de septiembre otorga testamento90. También dencia en Marbella se ven obligados a vender, los
en el mismo mes de septiembre se había com- Chinchilla –hemos visto los casos de Joaquín y
prometido, tal como hemos indicado, con los pro- Juan– se dedican a comprar, muestra de las fortu-
pietarios de El Ángel para venderles las fin- nas que obtuvieron en las colonias, “don-
cas que componían La Campiña, y aun- de la corrupción y el favoritismo car-
que la venta asciende a una canti- comían la administración pública”96.
dad muy importante Tomás em-
prende el viaje a las lejanas is- LOS INTERESES DE LOS
las, en las que permanecería al PRÉSTAMOS
menos hasta febrero de
188391 . Los altos intereses de
los préstamos, que obstacu-
Allí ejerció de secre- lizan el desarrollo de los
tario de su cuñado Joaquín proyectos de Tomás
Chinchilla, que como Inten- Domínguez, constituyen
dente General de Hacienda una muestra a nivel local del
en la colonia española labró escaso desarrollo del crédi-
una ingente fortuna. En cam- to agrícola en la España del
bio, Tomás no consigue pros- Diecinueve, que tanto frenó
perar y formaliza la venta de las capacidades del campo es-
alguna de las haciendas here- pañol. En la provincia mala-
dadas de sus antepasados, algu- gueña fracasaron diversos pro-
nas de gran relevancia –por su ex- yectos de bancos agrícolas y el
tensión y cercanía a la ciudad de Banco de Málaga, creado a partir
Marbella– como el cortijo de Caba- de las leyes de 1855 por los Larios,
lleros, que pasa al propio Joaquín Heredia y Loring, no pasó de ser un
Chinchilla, y que éste convertiría en Tomás Domínguez durante “instrumento del comercio
residencia favorita durante los últi- su estancia en Filipinas. oligopolista de la plaza para reali-
Archivo Antonio Romero Domínguez.
mos años de su vida. La venta se zar a su favor el beneficio que re-
formalizó el 25 de febrero de 1882, por poderes, sultara de todas las transformaciones mercanti-
al estar comprador y vendedor en Filipinas 92. El les de la misma”97. La creación en 1872 del Ban-
precio, 45.000 reales, estuvo muy por debajo de co Hipotecario, en el ámbito nacional, tampoco
los 59.200 reales del inventario de 1870. resolvió los problemas de los agricultores, pues
se dedicó en su mayor parte al negocio inmobi-
Por estas mismas fechas, el hermano de To- liario urbano.
más, José Domínguez Artola, también marchó a
las colonias, aunque a un destino diferente, Cuba. En el ámbito municipal la única institución
Su viaje estaría más justificado dado la menor for- que en Marbella estaba relacionada con el crédi-
tuna personal de José. Los preparativos son simila- to agrícola era el Pósito, que durante la época de
res, otorgamiento de poder a su esposa, Pilar Chin- siembra –a final de año– repartía el trigo a agri-
chilla y Díez de Oñate, y testamento93. Y similar es cultores y pegujaleros, obligados a devolverlo des-
el alto cargo que ocupa un cuñado, pues Juan Chin- pués de la recolección98. No existe ningún estu-
chilla y Díez de Oñate era Administrador General dio sobre esta institución local, aunque las noti-
de Correos de Cuba; una pista sobre la fortuna de cias que tenemos sobre él nos ilustran sobre los
éste último nos lo proporciona la adquisición en problemas de los labradores y campesinos para
Marbella, a Pedro Artola, de varias fincas por un devolver el trigo prestado, y sobre las deudas que
total de 100.000 reales94. acumulaba el Pósito.

Los Domínguez de Marbella de esta época La moción del síndico Francisco González
no obtuvieron de- Delgado, el 18 de
masiado provecho febrero de 1869,
de sus relaciones fa-
La falta de efectivo y los altos intereses de para “la creación de
miliares. Al contra- los préstamos originaron el endeudamiento un banco u otra aso-
rio de los Chinchilla, de Domínguez Artola ciación o estableci-
que ocuparon altos miento de crédito”,

30 CILNIANA
LOS DOMÍNGUEZ DE MARBELLA

debido a la decadencia de la ciudad y la ruina de Tomás Domínguez Artola inicia a media-


los labradores que denunciaba el concejal, no dos de 1885 un nuevo mandato como alcalde de
pasó de ser una reivindicación más de los años Marbella. Toma posesión el 1 de julio y recibe
del Sexenio Revolucionario99. “como insignia de su honorífico cargo el lujoso
bastón” que él mismo había regalado unos días
Las dificultades de Tomás Domínguez antes al alcalde saliente, junto con otros tres bas-
para hacer frente a los intereses del 10 ó 12%, tones a los tenientes de alcalde107; otra muestra
coinciden en el tiempo con problemas similares del gusto por el refinamiento que protagonizó
de otro hacendado del municipio, ya que el mar- Tomás durante toda su vida.
qués del Duero adquirió en 1870 un préstamo
de 5.700.000 reales al 13% de interés anual, para Desde el 5 de julio el Ayuntamiento co-
la construcción de la fábrica de azúcar de San mienza a prepararse ante la eventualidad de una
Pedro Alcántara –al final, el fuerte endeudamien- invasión de cólera –epidemia que el año anterior
to obligaría al Marqués a vender la Colonia en había tenido un primer brote en la zona de Le-
1873– 100. vante108– que se extendía por España, y que el 26
de junio se había declarado en Cuevas de San
Como excepción podemos considerar algún Marcos, primer pueblo afectado de la provincia
préstamo sin interés, más bien adelanto de capi- malagueña109. En semanas sucesivas la alarma es
tal, proporcionado por los propietarios a sus arren- evidente, sobre todo por la situación de los más
datarios, como es el caso de los 3.850 reales, 20 desfavorecidos, donde la epidemia puede cebar-
fanegas de trigo y 20 de maíz que prestó José Artola se con más facilidad, y su gran número, ya que el
Villalobos a José Cerbán Reyes101. De otra manera censo de pobres con derecho a medicina gratui-
sería ahogar económicamente al campesinado e ir ta arroja una cifra de 4.000 sobre una población
en contra de los propios intereses del arrendador. total de 7.666 habitantes110. Para allegar fondos
se autoriza a Domínguez a negociar en Málaga
Un caso especial de interés lo encon- los intereses de las láminas intransferibles, que
tramos en el préstamo que recibió Pedro Artola si bien no pueden cobrarse en efectivo se pue-
Villalobos de Guillermo Malcolm. Eran 23.000 den convertir en títulos de la deuda pública, y a
reales a pagar en 6 años al 5%, para terminar contratar, si fuera necesario, un préstamo de
de construir una casa 102. Este interés tan bajo 120.000 reales.
es explicable por las relaciones entre el pres-
tatario y el prestamista, pues Artola es el al- Todo hacía presagiar lo peor. El goberna-
calde de Marbella y Malcolm es el empresario dor civil comunica, a finales de agosto, que sal-
que construye el ferrocarril minero; y este úl- drá a subasta urgente el cerramiento del nuevo
timo necesita repetidamente que el Ayunta- cementerio, situado al este de la ciudad111. A co-
miento apruebe diversas concesiones de te- mienzos de septiembre se adoptan medidas sa-
rreno, incluida la venta de algunas parcelas de nitarias ante la aparición de enfermos aislados112.
propiedad municipal 103. Nunca se cita explícitamente el cólera morbo, en
lo que parece ser una ocultación de la enferme-
SEGUNDO MANDATO COMO ALCALDE, dad, según denunciaría la prensa de la capital113,
1885-1886 motivada por las cuarentenas y otras restriccio-
nes que afectarían negativamente al tráfico co-
El año 1884 acabó trágicamente en la pro- mercial del municipio y en general a toda la eco-
vincia de Málaga. El 25 de diciembre un fuerte nomía del mismo.
terremotó afectó sobre todo a los pueblos de la
Axarquía y a Málaga capital, produciendo nume- En la sesión de 20 de septiembre se auto-
rosos muertos y heridos, además de la destruc- riza a Tomás para que viaje a Madrid, y como
ción de muchos edificios104. alcalde gestione cobros pendientes y negocie la
deuda pública propiedad del Ayuntamiento, con
Y un fuerte temporal de viento y nieve el fin de reunir fondos que alivien la penuria eco-
produjo daños muy considerables en los cultivos nómica de las finanzas municipales114.
de la provincia a comienzos de 1885105. El Ayun-
tamiento de Marbella, en su sesión de 20 de ene- El 11 de octubre el Ayuntamiento –
ro, solicitaba ayuda al gobierno provincial, pues Domínguez ya no está en Marbella–, se da por
“si bien este pueblo no ha sufrido tanto como enterado de un escrito del director de la colonia
otros, ha tenido también graves quebrantos por de San Pedro Alcántara, en el cual comunica que
ellos mismos, y por las inundaciones del 21 de el cólera ha invadido esta población. El director
octubre y 2 de noviembre, así como por las hela- rechaza la ayuda ofrecida desde el Ayuntamien-
das subsiguientes, que destruyeron todos los fru- to, respondiendo que la sociedad propietaria y
tos”106. los vecinos de San Pedro disponen de recursos

CILNIANA 31
LOS DOMÍNGUEZ DE MARBELLA

suficientes para combatir la epidemia. Mientras, Los facultativos de Marbella son reforza-
en Marbella continúan la asistencia a enfermos y dos con otros procedentes de Málaga. A los mé-
las medidas de protección115. dicos titulares, José Carrasco Sánchez y Juan Bau-
tista de la Torre y Martínez, se une como delega-
El 7 de noviembre Tomás Domínguez te- do gubernativo José Martín Navarro, que deberá
legrafía desde Madrid para informar que le ofre- comprobar si la enfermedad es cólera morbo, y
cen el 50% del importe de la deuda amortizable dos médicos más, pues a finales de diciembre
al 4%. El Ayuntamiento reconoce la labor del al- Juan Bautista de la Torre está enfermo y se con-
calde, pero no aprueba la venta, porque la deuda tabilizan 160 contagiados121.
cotiza al 75% y, como la epidemia ha decrecido,
se decide esperar por si llega al 100% y de este La Unión Mercantil sigue ofreciendo datos
modo se lograrían unos beneficios de 20.000 sobre contagiados y fallecidos en Marbella du-
reales116. rante el mes de enero de 1886; día 4: 11 y 5 res-
pectivamente; día 5: 9 y 3; día 7: 11 y 0; día 9: 10
A la desgracia de la epidemia se añade otro y 1; día 10: 7 y 3; día 12: 4 y 1; y día 13: 2 conta-
luto, el oficial que se declara por la muerte del giados y 1 fallecido; al igual que sucede en otros
rey Alfonso XII, que tuvo lugar en Madrid el 25 pueblos cercanos, como Monda o Manilva122. El
de noviembre117. corresponsal del periódico en Marbella es me-
nos crítico que la redacción de Málaga –que pone
Hay que esperar al 13 de diciembre de
1885 para que se reconozca que la epidemia
de cólera afecta a Marbella, cuando se cita por Tomás Domínguez era alcalde de la ciudad
primera vez a enfermos contagiados y falleci- cuando fallece en Madrid el 14 de febrero de
dos 118 .
1886. Mientras tanto, una epidemia de cólera
Mientras tanto, el malestar por la prolon- asolaba Marbella
gada ausencia del alcalde es evidente. En la se-
sión del Ayuntamiento de 17 de diciembre los
concejales deciden comunicar por telegrama a de relieve la ocultación y la falta de medios em-
Tomás Domínguez que, dada la alteración de la pleados– e intenta quitarle importancia a la epi-
salud pública, vuelva con objeto “de que la auto- demia, escribiendo que ningún día excedió de
ridad revista toda la fuerza moral que las circuns- 10 defunciones, siendo la mayor parte niños, y
tancias requieren”119. que se tomaron las medidas oportunas cuando
se comprobó que era cólera123.
Para coordinar los esfuerzos contra la epi-
demia se organiza una Junta de Socorros, presi- El 5 de enero de 1886 visita la ciudad una
dida por Joaquín Chinchilla y Díez de Oñate. En comisión presidida por el gobernador civil, Juan
ella se integran la Junta de Sanidad local, repre- Antonio Corcuera, y el presidente de la Diputa-
sentantes del Ayuntamiento y de los propios ve- ción Provincial, Antonio Guerrero Pérez (diputa-
cinos. La Junta de Socorros reparte las medici- do por el distrito Coín-Marbella). El Ayuntamien-
nas, se encarga de las tareas de desinfección, y to celebra una sesión extraordinaria y a las alo-
de la alimentación y otros gastos de los enfer- cuciones de las autoridades provinciales respon-
mos pobres. Para financiar toda esa labor pro- de el alcalde accidental y el arcipreste –no están
mueve suscripciones semanales entre los vecinos presentes ni el alcalde titular, Tomás Domínguez,
pudientes, y el propio Ayuntamiento colabora con ni el presidente de la Junta de Socorros, Joaquín
60 reales diarios y le entrega 12.000 reales reci- Chinchilla–, con palabras de agradecimiento, por
bidos del gobierno provincial120. la visita y las donaciones recibidas124.

El 14 de febrero se tiene noticia de la


muerte, esa misma mañana en Madrid, de Tomás
Domínguez Artola, a causa de una pulmonía ful-
minante. El Ayuntamiento fija para el día 20 las
honras fúnebres por el alcalde fallecido125.

El cólera va remitiendo y el 25 de febrero


el Ayuntamiento disuelve la brigada de desinfec-
ción, por lo que se puede considerar que la epi-
demia había finalizado en Marbella. La última gran
Noticias sobre la epidemia de cólera en “La Unión Mercantil”. epidemia del siglo XIX produjo en la provincia
8 de enero de 1886. Archivo Díaz de Escovar. de Málaga 5.040 enfermos y 1.705 fallecidos126.

32 CILNIANA
LOS DOMÍNGUEZ DE MARBELLA

En el mismo pleno se estudia la documen- casa n.º 3 de la plaza del Puente de Ronda, un
tación económica municipal que tramitaba To- crédito de 5.800 reales en contra de José
más Domínguez, y había entregado su familia127. Domínguez Pérez, y 16.789 reales por muebles y
El 19 de septiembre los encargados de la testa- joyas, entre los cuales sólo se especifica un jue-
mentaría de Tomás entregan al Ayuntamiento go de plata cincelada para té con un valor de
2.700 reales en efectivo y 7.304 en una letra de 3.000 reales.
cambio, quedando a deber 4.269,32 reales, y asi-
mismo una cuenta de los gastos ocasionados por Entre las bajas del capital, y ante la impo-
el viaje del alcalde a Madrid, por 7.665 reales, sibilidad de pagar todas las deudas pendientes
que no es aprobada por la corporación. Unos por falta de liquidez, se enumeran dos créditos,
días más tarde se acuerda rebajarlos a 6.499 rea- uno de 12.000 reales que se debe a José Chinchi-
les, al mismo tiempo que se comunica a la fami- lla y Díez de Oñate y otro de 18.500 a Antonio
lia que paguen cuanto antes lo que queda pen- Lima Fernández.
diente128.
Asimismo se resta la parte que correspon-
LA HERENCIA DE TOMÁS de a los hijos de Rosalía Salcedo y Tomás, y aun-
DOMÍNGUEZ ARTOLA que ella no aportó nada al matrimonio ahora se
recoge la herencia que recibió de sus padres,
L a partición de bienes de Tomás Miguel Salcedo e Isabel Roldán, que supone
Domínguez se protocolizó el 16 de noviem- 28.955 reales, y la de su abuela, Rosalía López,
bre de 1889 129, tres años y medio después de que son 1.000 reales más.
su muerte, que le había sorprendido mientras
residía en la calle de la Gorguera n.º 14 de La baja más importante es el capital pro-
Madrid, recibiendo sepultura en el cemente- pio de la viuda: Elisa Torralba Bolós recupera la
rio de la sacramental de San Lorenzo de la ca- dote, de 37.233 reales, que llevó al matrimonio,
pital 130 . más los 80.000 que recibió como arras por parte
de Tomás al contraer matrimonio en 1873.
En el cuadro siguiente, se ve la distribu-
ción de los bienes de la testamentaría de Tomás De este modo el caudal de la herencia
Domínguez. queda reducido a 344.634 reales, de los cuales
hay que segregar una quinta parte para los hijos
que tuvo Tomás con Rosalía. Así lo decidió él poco
después de su segunda boda, para compensarlos
en relación a los hijos que tuviera con Elisa, los
cuales saldrían beneficiados por el gran regalo,
que en concepto de arras, le hizo a esta última131.

Finalmente, la cantidad a repartir entre los


siete hijos, la legítima, es de 275.707 reales,
correspondiéndole a cada uno 39.387 reales.
Ahora bien, los hijos de Rosalía recibirán otros
22.976 reales en concepto de la mejora que se
acaba de explicar y 9.985 por herencia materna,
en total 72.348 reales para cada uno de ellos:
Carmen, Manuela y Miguel Domínguez Salcedo.
Y los hijos de Elisa: Antonia, José, Tomás y Fran-
cisca Domínguez Torralba recibirán ahora la legí-
tima, pero si le añadiésemos la parte correspon-
diente a los bienes de su madre, podemos calcu-
larle una herencia de 78.465 reales. De este
modo, la pretensión de Tomás de igualar a los
hijos de sus dos matrimonios, aunque no fuera
exacta al cien por cien, logró su objetivo. Lo que
no logró es transmitirle el patrimonio que él ha-
bía heredado, pues de aproximadamente
1.500.000 reales sólo lega a sus hijos un caudal
Los bienes inmuebles continúan siendo de 344.634 reales y, extinguidas las leyes del ma-
parte fundamental del patrimonio familiar, con yorazgo, el igualitario reparto entre sus siete hi-
un 94,8% del volumen final. Completan el 5% res- jos hace que cada uno reciba entre 70.000 y
tante un censo a favor de 4.400 reales sobre la 80.000 reales, cantidad muy alejada de la que él

CILNIANA 33
LOS DOMÍNGUEZ DE MARBELLA

con anterioridad, destacaremos en estas tres eta-


pas las siguientes operaciones. Durante la pri-
mera, efectuada entre 1870 y 1874, Domínguez
se desprendió mediante diversas transacciones
de las 60 fincas que poseía en el municipio de
Istán, por un precio que no llegaría a los 200.000
reales, dada la rebaja que se constatan en diver-
sas ventas. En la segunda etapa, destaca la venta
de la finca denominada La Campiña o Santa Elisa,
efectuada en el año 1877 a los socios de la colo-
nia de El Ángel, que agrupa a los predios citados
en el cuadro desde el haza del Palmar de D.ª Ma-
ría hasta el haza de Picaza, por un valor total de
400.000 reales. En la tercera etapa, entre 1874 y
1889, el inventario de las propiedades vendidas
–sobre todo grandes cortijos de la zona de Las
Chapas– suma unos 200.000 reales, de las cuales
sólo hemos localizado documentalmente la ven-
ta del cortijo de Caballeros a Joaquín Chinchilla
por 45.000 reales en el año 1882.

En cuanto a los inmuebles urbanos, descri-


tos en el cuadro n.º 2, hay que destacar, en primer
lugar, que su valor en conjunto es muy inferior al
de los inmuebles rústicos, y que las operaciones
de compra venta son también más reducidas en su
número y en su precio. Los aumentos más
destacables nos lo proporcionan la rehabilitación
de la vivienda familiar entre los años 1870 y 1874,
vivienda que se mantiene a la muerte de Tomás; y
Tomás Domínguez Artola en los últimos años de su vida. la inversión efectuada, durante las mismas fechas,
Archivo Antonio Romero Domínguez. en la casa n.º 2 de la plaza de San Bernabé para
convertirla en fábrica de harinas.
heredó de su padre. Definitivamente, el poderío
económico de los Domínguez de Marbella se ha- Podemos conocer la forma del reparto de
bía extinguido poco antes de acabar el siglo XIX. los bienes de Tomás a través del legado de uno
de sus descendientes. Se trata de la hijuela de
VENTA DE BIENES INMUEBLES Manuela Domínguez Salcedo, que recibe una sép-
tima parte de la casa familiar, 17.143 reales; la
Constituyendo los mitad del haza Vega del
bienes inmuebles la base Guadalpín, 30.000 reales; la
principal de la fortuna fami- casa nº 4 de la calle del Ce-
liar, haremos mención a la menterio, 16.000 reales; la
evolución de la propiedad de Firma de Tomás Domínguez Artola. casa nº 6 de la calle Chorrón,
las fincas, tanto rústicas 8.000 reales; y 1.204 reales
como urbanas, de Tomás Domínguez Artola. Para en muebles y joyas para completar su legado de
ello, se puede tomar como referencia: la partición 72.348 reales.
de bienes de 1870, mediante la cual Tomás acce-
de a las propiedades de su padre, Antonio Relacionando los bienes que reciben los
Domínguez Alburquerque; la escritura de dote e herederos con los valores de los inmue-bles de
inventario que hace poco después de casarse con los cuadros anteriores sorprende la desvaloriza-
su segunda esposa, en 1874; y la partición de 1889, ción que sufren la mayoría de ellos entre los
tras la muerte de Tomás Domínguez. inventarios de 1874 y 1889. Y si algunos podrían
estar justificados, como la casa n.º 2 de la plaza
La distribución de San Bernabé al
de venta de las fincas abandonarse la activi-
rústicas se recoge en La disminuida herencia de los Domínguez se dad de la fábrica hari-
el cuadro n.º 1. Sin reparte en el año 1889 entre su segunda nera o el haza del Cal-
entrar en detalles, esposa y sus cinco hijos vario por cuestiones
que hemos descrito que desconocemos,

34 CILNIANA
LOS DOMÍNGUEZ DE MARBELLA

Cuadro n.º 1 Cuadro n.º 2

como había vivido, dejando como recuerdo deu-


das pendientes y su afán por las innovaciones.
Una última muestra de estas dos facetas de su
vida la tenemos en un acuerdo del Ayuntamiento
del 15 de agosto de 1886 –seis meses después
de su fallecimiento–, por el que se decide abo-
nar un gasto de 1.200 reales que él había con-
traído, para la compra de un moderno artefacto:
una bomba contra incendios135.

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LOS DOMÍNGUEZ DE MARBELLA

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balance de su actividad económica sólo se puede destacar como
Andalucía (nuevos contenidos para su estudio). inversión la reconstrucción de la casa solariega, emplazada
Granada. dentro del castillo de Marbella, por una cuantía de 175.030
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agobios económicos del marqués del Duero y el se vio obligado a vender. Casado Bellagarza (2002b).
2
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4
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36 CILNIANA
LOS DOMÍNGUEZ DE MARBELLA

vincial. Además, tenía una considerable fortuna; a su matrimo- de julio de 1896 gozó de los beneficios que otorgaban las leyes
nio aportó bienes inventariados por 1.496.824 reales. A.H.P.Ma., de colonización. En 1900 pertenecía a Alejandro García Belón y
F.N., leg. 5156, fols. 1707-1716v. sus hermanas. 26 de mayo de 1900. A.M.Mb., AA.CC., leg. 18-H.
5
Así, las fincas de Puente Genil correspondieron a Francis- 11
Así se recoge en la escritura de compraventa de la casa
ca, a causa de la mayor movilidad geográfica de su marido, que n.º 3 de la calle del Castillo, efectuada entre José Domínguez y
en 1865 era diputado por la provincia de Jaén. Joaquín Chinchilla por el precio de 4.000 reales, y que en la par-
6
Completaban la herencia algunos censos, a favor y en con- tición de bienes se había valorado en 11.350 reales. 11 de mayo
tra, que por su pequeña cuantía no hemos especificado. de 1885. A.H.P.Ma., F.N., leg. P-5439, fols. 221-224v.
7
A.H.P.Ma., F.N., leg. P-4971, fols. 374-375v. 12
Gabriel Tortella enumera doce grandes crisis de subsis-
8
A.H.P.Ma., F.N., leg. P-4971, fols. 930-939v. Situadas en tor- tencias durante el siglo XIX, de las cuales las de 1867-68, 1879,
no al destruido molino de la Fuente Santa o de Don Tomás, se- 1882 y 1887 son coetáneas de Tomás Domínguez. Crisis que
gún el poder dado en Málaga el 1 de agosto de 1872 a Juan tienen como causa inmediata las fluctuaciones climáticas, lluvias
Bautista de la Torre. A.H.P.Ma., F.N., leg. 5121, fols. 1518-1520. excesivas pero sobre todo sequías; sin embargo, sus causas más
9
A.H.P.Ma., F.N., leg. P-4971, fols. 436-441. profundas radican en la organización social, el nivel de desarro-
10
El Ayuntamiento en su sesión de 29 de mayo de 1877 llo económico, el atraso técnico de la agricultura y sus bajos ren-
aprobaba la petición de José García Belón, y el 10 de julio el dimientos, el lento sistema de transporte y la ineficaz
gobernador civil concedía la autorización definitiva. Archivo redistribución de alimentos. Tortella (1995), pág. 29.
Municipal de Marbella (A.M.Mb.), Actas Capitulares (AA.CC.), leg. 13
13 de agosto de 1870. A.H.P.Ma., F.N., leg. P-4972, fols.
17-H. La extensión de la colonia no llegaba a 8 ha, y hasta el 10 872-882.

Apéndice n.º 2

CILNIANA 37
LOS DOMÍNGUEZ DE MARBELLA

14
7 de septiembre de 1870. Ante Joaquín Bugella, notario F.N., leg. P-4979, fols. 811-827v.
de Málaga. A.H.P.Ma., F.N., leg. 5114, fols. 1763-1783. El 16 de junio de 1879 Tomás otorgó un poder notarial para
15
Se indica que el nombre correcto del haza de Gálvez era gestionar la herencia de Isabel Roldán López, abuela de los tres
Algarbe. Estos acuerdos se ratificarían muchos años después, 2 hijos que tuvo con Rosalía. A.H.P.Ma., F.N., leg. P-5435, fols.
de julio de 1885, entre Tomás Domínguez y Carlos de Cuadra 498.499v,
Viteri, representante de la colonia de San Pedro Alcántara y, al 38
A.H.P.Ma., F.N., leg. P-5428, fols. 39-90v.
mismo tiempo, socio fundador de la colonia de El Ángel. 39
El padre de Elisa, José Torralba Cuesta, tenía escasas pro-
A.H.P.Ma., F.N., leg. P-5439, fols. 315-323v. piedades inmuebles. El 30 de diciembre de 1875 gestiona el cobro
16
Hacia 1800 el agua sería motivo de conflicto entre Enri- de 2.760 reales correspondientes a la paga de su hijo José,
que Grivegnée, propietario del trapiche del Prado, y algunos subteniente, fallecido en Filipinas. A.M.Mb. Cuadernos borrado-
propietarios de Marbella; y decidiría al nuevo dueño del trapi- res de la correspondencia oficial, leg. 133-H.
che, Juan Lesseps, a construir uno nuevo junto al río Guadaiza. 40
Aunque se mantienen otras conveniencias, como los ma-
Lucía Prieto (1996), págs. 9 y 10. trimonios de hombres ricos con mujeres mucho más jóvenes
Las captaciones ilegales de agua eran frecuentes. El 7 de que ellos, y los matrimonios de viudos. Así, Ignacio Fernández
agosto de 1875 el Ayuntamiento denuncia ante el juez munici- de la Somera cuando casó con Manuela Domínguez Artola apor-
pal el desvío de agua al cortijo de Miraflores, propiedad de To- tó al matrimonio 1.496.824 reales, y después de enviudar con-
más Domínguez, desde la red de abastecimiento público, acu- trajo matrimonio con su cuñada Luisa Guzmán y Galtier, viuda
sando al arrendatario del mismo como presunto autor del deli- de su hermano Silvestre (que había llevado al matrimonio
to. A.M.Mb. Cuadernos borradores de la correspondencia ofi- 3.600.000 reales, mientras Luisa sólo aportó 44.000). Aunque
cial, leg. 133-H. no dejan de aparecer en los documentos conmovedoras frases
17
Eran 4,5 días de riego de cada turno de 13 días de las relativas al afecto de los contrayentes: “siéndoles ya difícil, des-
aguas del río Guadaiza por la acequia de Levante. Además el pués de la felicidad de la familia, habituarse a vivir en la soledad
marqués del Duero conservaría el riego de la Picaza. del alma que se experimenta cuando la muerte de un ser queri-
18
A.H.P.Ma., F.N., leg. P-4973, fols. 989-994 do viene a desatar los lazos que anudó el afecto…”. Capitulacio-
19
Ante el notario José María Escobar. A.H.P.Ma., F.N., leg. P- nes matrimoniales entre Ignacio Fernández, de 56 años, con Luisa
4936. El mal estado de conservación de estos documentos ha Guzmán, de 37 años, cada uno con tres hijos de su anterior ma-
aconsejado prescindir de una consulta más detallada. trimonio. 16 de septiembre de 1880. A.H.P.Ma., F.N., leg. 5156,
20
A.H.P.Ma., F.N., leg. P-5438, fols. 272-275v. fols. 1707-1716v.
21
A.H.P.Ma., F.N., leg. P-4937, fols. 291-296v. 41
Gro: tela de seda sin brillo, y de más cuerpo que el tafe-
22
A.H.P.Ma., F.N., leg. P-4974, fols. 146-151. tán. Lo hay de Tours, París, Lyon y otras procedencias. Del fran-
23
Joaquina es tía de sus cuñados Joaquín y Pilar Chinchilla cés “gros”. Diccionario de la Real Academia de La Lengua, ediciones
Díez de Oñate. A.H.P.Ma., F.N., leg. P-4977, fols. 1324-1327v. de 1869 y 1884.
24
25 de septiembre de 1874. A.H.P.Ma., F.N., leg. P-5428, 42
Entre las escrituras de Marbella consultadas, correspon-
fols. 767-777. dientes a la segunda mitad del XIX, la más parecida a esta dote
25
A.H.P.Ma., F.N., leg. P-4977, 887-929v. La compañía se ha- es la que aportó María Dolores Torralba Cuesta, tía de Elisa, cuan-
bía constituido el 8 de diciembre de 1871. do se casó con el notario Francisco Acosta y Granados. En total
26
Memoria sobre el estado de las obras públicas en España desde 47.436 reales, entre vestidos (el más caro era un o de
1 de enero de 1873 a 31 de diciembre de 1881, pág. 148. Para que el 840 reales), joyas (la más cara era una de 1.400 reales) y también
lector local pueda hacerse una idea de su tamaño, el actual ropa de casa, muebles y todo el ajuar de la casa. A cambio Acosta
pantalán del hotel Puente Romano mide aproximadamente 62 entregó como arras 8.000 reales. 14 de diciembre de 1848.
metros de largo por 5 de ancho. A.H.P.Ma., F.N., leg. P-4943, fols. 678-679v.
27
Según el informe del cónsul británico en Málaga. Report 43
Así, en la partición de bienes del acomodado vecino de
de 1873, pág. 296. Marbella Antonio Fernández Matoso, 2 de julio de 1870, sobre
28
Del capítulo titulado “Por las costas andaluzas”, año 1887, un líquido total de 434.294 reales los muebles de madera de la
en un libro de viajes del periodista Ortega Munilla (1892), padre casa se valoran en 5.495 reales y la ropa de la viuda en 202 rea-
de José Ortega y Gasset, que estaba emparentado con la familia les. A.H.P.Ma., F.N., leg. P-4972, fols. 641-691.
Chinchilla. 44
De la ciudad de Málaga conocemos algunos inventarios
29
Fernando Alcalá (1980), pág. 46. domésticos del siglo XVIII a través de un artículo de M.ª Begoña
30
“La familia Domínguez será la primera que desde la no- Villar (1997), que explica también las estrategias familiares en
bleza se acerque a posiciones económico sociales a las de la bur- las cuales el matrimonio es utlizado como factor de movilidad
guesa, al controlar, a mediados del XVIII, importantes resortes social.
económicos en Marbella”. Antonio Rodríguez Feijóo (1988), pág. 45
Francisco Serrano, conde de San Antonio, se casó en oc-
244. tubre de 1880 en París con una rica heredera cubana, María de
31
Según se desprende de diversos protocolos fechados las Mercedes Martínez Campos. Ésta aportaba al matrimonio más
entre agosto y diciembre de 1836. A.H.P.Ma, F.N., leg. P-4939, de doce millones de reales y él algo más de cuatro millones,
fols. 73-75v, 81-83v, 119-120v. y 121-128v. entre los que llama la atención una corona condal de brillantes y
32
A.H.P.Ma., F.N., leg. P-5428, fols. 68v. una gruesa perla, que había regalado a su prometida, valorada
33
En el castillo se encontraba el cementerio. Y desde el en 320.000 reales. La novia enseguida se separó de Serrano,
siglo XVIII se puede considerar un suburbio, incluyendo diver- alegando que no había consumado el matrimonio, lo que provo-
sas industrias y vecinos pobres. Según la tesis doctoral que pre- có además de los pleitos consiguientes, un escándalo que salpi-
para Francisco Javier Moreno Fernández. có a los duques de la Torre, publicándose diversos opúsculos a
34
A.H.P.Ma., F.N., leg. P-5428, fols. 79v-80. favor y en contra, uno de los cuales firma el propio Francisco
35
6 de agosto de 1872. A.M.Mb., AA.CC., leg. 16-H. Serrano hijo en unión de su abogado Juan Chinchilla y Díez de
36
El matrimonio tuvo lugar el 14 de febrero de 1866 en la Oñate (1883), del cual hemos extraído los datos de la escritura
iglesia de Santiago de Málaga. Expediente matrimonial de To- de gananciales.
más Domínguez y Rosalía Salcedo, procedente del Archivo del 46
El bajo nivel cultural de la burguesía de Marbella se refle-
Obispado de Málaga. Copia en el Archivo de Antonio Romero ja en el fracaso de la enseñanza secundaria durante el siglo XIX,
Domínguez (A.A.R.D.). Al cual agradecemos su inestimable cola- constatado por Antonio Rodríguez Feijóo (1988), págs. 274-278.
boración en la cesión de los documentos escritos y gráficos, así 47
Muy superior al de otros inventarios que hemos consul-
como su opinión acerca de diversas cuestiones tratadas en este tado, como el efectuado a la muerte de Silvestre Fernández,
trabajo. hermano de su cuñado Ignacio, en el cual los muebles de la casa
37
El 10 de octubre de 1874 Tomás Domínguez hacía una suponían 15.224 reales sobre un capital total de 3.600.000 rea-
declaración formal de herederos para estos tres niños. A.H.P.Ma., les. A.H.P.Ma., F.N., leg. 5137, fols. 1842-1960v.

38 CILNIANA
LOS DOMÍNGUEZ DE MARBELLA

48
Algunos de estos animales compartirían las funciones de 67
Estadísticas del Comercio Marítimo por Cabotaje (E.C.A.B.).
transporte y de labor con las domésticas o las de recreo. Recor- Esta tendencia se invertirá a finales de la década de los ochenta,
demos que en el inventario de bienes consta un coche de caba- coincidiendo con una época de crisis. Casado Bellagarza (2002a),
llo. pág. 10.
49
No repetiremos las citas documentales, ya que son tran- 68
Molino que al año siguiente, 1878 a 1879, aparece a nom-
sacciones que hemos descrito con anterioridad. bre de José Martínez y Martínez de Pinillos, nuevo propietario
50
6 de septiembre de 1871. Escritura ante el notario de de El Ángel. Matrículas de la contribución industrial y de comer-
Málaga Romualdo Hurdisán y Agudo. Copia en A.A.R.D. cio de los años respectivos. A.M.Mb., leg. 3298. En 1881 los pro-
51
Ibídem. pietarios de El Ángel solicitan descuento en el impuesto de con-
52
El alcalde de Marbella remite el 3 de junio de 1875 a To- sumos para una partida de 100 sacos de trigo, procedentes de
más Domínguez, como uno de los productores de aceite más des- Londres, puesto que ya habían pagado impuesto en la aduana
tacados (el otro es Salvador Buendía), un impreso del Consejo de de Málaga. La llegada de trigo al puerto de Marbella en grandes
Agricultura, Industria y Comercio, en vista de la importancia que cantidades podemos conocerla a través de las E.C.A.B, al igual
está tomando el aceite en las exportaciones españolas. Aunque que la consiguiente salida de harina, en los años 1881, 1882 y
sólo un mes más tarde, el 2 de julio, el alcalde responde al gober- 1883, rompiendo la tendencia natural de importación de esta
nador civil que en los pueblos del partido judicial se cosecha poco última. Casado Bellagarza (2002a), pág. 10.
aceite y no es de la calidad suficiente como para llevarlo de mues- 69
Cantidad neta, descontando un censo en contra. A.H.P.Ma.,
tra a la exposición que se está organizando en Filadelfia. A.M.Mb. F.N., leg. 5147, fols. 1891-1902v.
Cuadernos borradores de la correspondencia oficial, leg. 133-H. 70
Aprobación del Gobierno Civil el 4 de febrero. Sesión mu-
53
Coincidente con la apreciación del ingeniero Alberto Díaz- nicipal de 29 de febrero de 1880. A.M.Mb., AA.CC., leg. 17-H.
Maroto, restaurador de la maquinaria del cortijo, que fecha la José Martínez había constituido una sociedad con Pedro López
mayor parte de la maquinaria de la almazara en la segunda mi- Ortiz, contribuyendo éste con la cerca de Río Verde, que había
tad del siglo XIX. Información facilitada por Germán Borrachero adquirido en julio de 1877 a Salvador Delgado Llanos.
Valderrama. 71
Muy relacionado con la vecina colonia de San Pedro
En el libro de Antonio Santiago, Isabel Bonilla y Antonio Alcántara, pues era ingeniero y director en la misma, a la vez que
Guzmán (2001), págs. 239-249, podemos disponer de imágenes familiar de los propietarios.
de la industria aceitera decimonónica en Málaga. 72
A.H.P.Ma., F.N., leg. P-5436, fols. 866-871v. El préstamo en
54
La diferencia de las últimas cantidades, 33.000 reales A.H.P.Ma., F.N., leg. P-5436, fols. 872-877. En un documento de
aproximadamente, puede ajustarse más si tenemos en cuenta 1883 el suegro de Tomás recibe, mientras él se encontraba en
otros apartados del inventario de 1874. Si sumamos los créditos Filipinas, los últimos 80.000 reales de la venta, tras inscribir la
a favor y la existencia de trigo y otras especies, resulta 84.3350 Picaza en el Registro de la Propiedad. A.H.P.Ma., F.N., leg. P-5438,
reales, y si le restamos la depreciación de las fincas de Guadaiza, fols. 80-91.
al perder el agua de riego, por 49.454 reales, nos da 34.898 73
En noviembre de 1881 se constituyó una nueva sociedad,
reales, que se acerca bastante a esos 33.000 reales de descuadre. “López, Janer, Cuadra y compañía”, que adquirió las fincas de La
55
Padrón de 1870. A.M.Mb., leg. 452-H. Campiña y otras más a distintos propietarios.
56
Esta institución -que se mantiene en la actualidad, aun- 74
Algunos vecinos expresaron al Ayuntamiento que debía
que inactiva- fue fundada por Diego García de Hinestrosa, uno actualizarse el amillaramiento de las fincas de La Campiña, antes
de los conquistadores castellanos de la ciudad de Málaga, en su de que se incluyeran en la colonia agrícola, pues contribuían con
testamento de 6 de agosto de 1500. una cantidad por debajo de la realidad. Esto demuestra la
57
A.H.P.Ma, F.N., leg. 5108, fols. 569-575. infravaloración de las fincas. Y como la legislación sobre las co-
58
7 de abril de 1869. A.H.P.Ma, F.N., leg. 5108, fols. 581- lonias las eximía de los impuestos en las mejoras que se realiza-
582v. ran, durante los próximos 25 años sólo pagarían la contribución
59
Se dispone del cuaderno de las actas capitulares desde 1 que tenían antes de la declaración, una posterior subida de la
de enero de 1869 hasta 30 de mayo de 1869, pero falta el cua- cuota de rústica repercutiría sobre el resto de los contribuyen-
derno anterior y el posterior. A.M.Mb., AA.CC., leg. 16-H. tes municipales. 1 de enero de 1882. A.M.Mb., AA.CC., leg. 17-H.
60
A.H.P.Ma., F.N., leg. P-4971, fols. 382-384. 75
El Gobierno Civil había autorizado la construcción de una
61
Informe al juez de primera instancia. 13 de junio de 1870. presa en el río Verde, más arriba de otra que estaba arruinada.
A.M.Mb. Cuadernos borradores de la correspondencia oficial, 15 de octubre de 1882. A.M.Mb., AA.CC., leg. 17-H.
leg. 133-H. 76
Antonio Rodríguez Feijóo (1988), pág. 263.
62
El nombramiento se hace en la sesión de 10 de abril de 77
La crisis interna del Ayuntamiento provocó la destitución
1870, y la gestión del diputado consistió en la compensación de del secretario Cristóbal de Torre Lara. El 25 de octubre de 1877
impuestos que debía el Ayuntamiento por los intereses de las se nombra a Manuel Ortiz de Molinillo, que toma posesión el 2
inscripciones intransferibles procedentes de la desamortización de diciembre y que continuará en el cargo hasta el final del siglo.
de bienes de propios. A.M.Mb., AA.CC., leg. 16-H. A.M.Mb., AA.CC., leg. 17-H.
En 1871 Fernández de la Somera vuelve a presentarse a las 78
Junto con el reforzamiento de las Diputaciones Provincia-
elecciones de diputado provincial, por el partido unionista, y el les y del Gobernador Civil. González de Molina y Gómez Oliver
alcalde informa al gobernador civil que es el candidato que tie- (2000), pág. 278.
ne más probabilidades de salir elegido. 23 de enero de 1871. 79
A.M.Mb., AA.CC., leg. 17-H.
A.M.Mb. Cuadernos borradores de la correspondencia oficial, 80
14 de agosto de 1878. A.M.Mb., AA.CC., leg. 17-H.
leg. 133-H. 81
24 de febrero de 1878. A.M.Mb., AA.CC., leg. 17-H.
63
21 de noviembre de 1872. Poder otorgado por Tomás 82
A.M.Mb., AA.CC., leg. 17-H.
Domínguez Artola para el cobro de créditos a favor de la Her- 83
Ibídem.
mandad de Nuestra Señora de la Soledad. A.H.P.Ma, F.N., leg. P- 84
Ibídem.
4977, fols. 1298-1302v. 85
20 de abril de 1874. En un precio muy inferior a los 25.650
64
Se acuerda firmar una escritura en Málaga, tras el pago de reales con que se evaluó en la partición de bienes, a pesar de
585.559 reales, capital e intereses hasta 30 de junio de 1867, que tenía la ventaja de hallarse extramuros de la ciudad. A.H.P.Ma.,
que se le debían a Tomás Heredia. Sesión celebrada por el Ayun- F.N., leg. P-5428, fols. 305-310.
tamiento el 29 de septiembre de 1872. A.M.Mb., AA.CC., leg. 86
24 de abril de 1877. Con una extensión de 9,15 ha.
16-H. A.H.P.Ma., F.N., leg. P-4980, fols. 359-362v.
65
Un estudio de las fluctuaciones de los precios del trigo y 87
18 de septiembre de 1879. Antes de vender la huerta,
de la cebada en el municipio de Marbella entre los años 1866 y Tomás segregó 4 fanegas de viñas y olivar para agregarlas al
1874 puede verse en José Bernal (2001). cortijo de Miraflores. Escritura ante el notario de Marbella Fran-
66
A.H.P.Ma., F.N., leg. P-5428, fols. 115-142. cisco Acosta y Granados. Copia en A.A.R.D.

CILNIANA 39
LOS DOMÍNGUEZ DE MARBELLA

88
A.H.P.Ma., F.N., leg. P-5436, fols. 171-174. Y Registro de la Pro- A.M.Mb., AA.CC., leg. 17-H.
piedad de Marbella, finca n.º 716. Inscripciones 5.ª y 6.ª, fols. 77-78. 109
Los pueblos más afectados fueron Antequera, Cuevas de
89
Poder general, y en especial para que procedan a la venta San Marcos, Arenas, Archidona, Cañete la Real, Marbella, Nerja,
del cortijo de Caballeros. A.H.P.Ma., F.N., leg. P-5436, fols. 890-895v. Torrox, Vélez-Málaga, Yunquera, Ojén y Archez., según Juan Luis
90
Nombra como albaceas testamentarios a su suegro, José Carrillo (1972), pág. 151.
Torralba Cuesta, y al padre de su primera esposa, Ildefonso 110
16 de agosto de 1885. A.M.Mb., AA.CC., leg. 17-H.
Roldán López. A los tres hijos que tuvo con ésta los mejora 111
30 de agosto de 1885. A.M.Mb., AA.CC., leg. 17-H. En
“por terceras partes iguales a cada uno, en el quinto de todos estos meses también se adquiere un carro fúnebre y un caballo
sus bienes, íntegro y sin descuento ninguno, en consideración para la conducción de cadáveres al nuevo cementerio, alejado
a que sus otros hijos les ha de pertenecer más cantidad por su de la población.
señora madre en razón a las arras y donación esponsalicia que 112
Se abonan indemnizaciones por quemar ropas, camas y otros
le hizo”. A.H.P.Ma., F.N., leg. P-5436, fols. 896-899v. efectos de enfermos sospechosos. En un caso 1.040 reales y en otro
91
29 de febrero de 1883. Su suegro cobra los últimos 80.000 112 reales. 6 de septiembre de 1885. A.M.Mb., AA.CC., leg. 17-H.
reales de la venta de las fincas de La Campiña, que estaban pen- 113
La Unión Mercantil critica el 10 de enero de 1886 las siste-
dientes hasta inscribir la Picaza en el Registro de la Propiedad”. máticas ocultaciones de la enfermedad y las carencias de las fa-
A.H.P.Ma., F.N., leg. P-5438, fols. 80-91. milias pobres, por lo que pedía medidas urgentes de auxilio a la
92
A.H.P.Ma., F.N., leg. P-5437, fols. 108-117v. población. Hemeroteca del Archivo Díaz de Escovar.
93
6 de abril de 1881. El poder en A.H.P.Ma., F.N., leg. P- 114
A.M.Mb., AA.CC., leg. 17-H.
5436, fols. 341-3434v., y el testamento a continuación, fols. 345- 115
El alcalde accidental y el médico visitan a los enfermos y
346v. En 1883 continuaba en Cuba, según se desprende del po- designan las chozas, donde vivían los campesinos, que han de
der otorgado por su esposa a un procurador el 14 de mayo de quemarse, durante una visita a la zona de la torre del Lance de
este año. A.H.P.Ma., F.N., leg. P-5438, fols. 411-414v. Las Cañas. 11 de octubre de 1885. A.M.Mb., AA.CC., leg. 17-H.
94
27 de agosto de 1867. El apoderado en Marbella es su 116
A.M.Mb., AA.CC., leg. 17-H.
padre, Juan Chinchilla y Bernardy, senador. A.H.P.Ma., F.N., leg. P- 117
28 de noviembre de 1885. A.M.Mb., AA.CC., leg. 17-H.
4966, fols. 995-1010v. 118
A.M.Mb., AA.CC., leg. 17-H.
95
Alcalá Marín (1980), págs. 196-197. 119
El 6 de diciembre se recibió una carta de Tomás con re-
96
La cita corresponde a una biografía del general José clamaciones de gastos de procurador y abogados. El Ayunta-
Lachambre Domínguez, primo de Tomás Domínguez Artola. miento responde que se pagaría cuando se dispusiera de fon-
Lachambre fue hijo de Mercedes Domínguez (hermanastra de dos. A.M.Mb., AA.CC., leg. 17-H.
su padre). Anguita Galán y Moreno Gómez (1992), pág. 421. 120
28 de diciembre de 1885. A.M.Mb., AA.CC., leg. 17-H.
97
Gámez Amián (1998), pág. 133. 121
31 de diciembre de 1885. A.M.Mb., AA.CC., leg. 17-H.
98
Como muestra podemos citar los acuerdos del Ayunta- 122
La Unión Mercantil de 8, 10, 14 y 16 de enero de 1886.
miento para “abrir la panera y repartir el grano” el 13 de no- 123
La Unión Mercantil de 12 de enero de 1886.
viembre de 1870 ó el 6 de enero de 1878, este último año se 124
El gobernador pide que las 12 camas que se han traído
distribuyeron 209 fanegas y se exigió garantía hipotecaria, con no se concedan sólo al hospital sino también a los pobres que ha
inscripción en las anotaciones de las fincas en el Registro de la visto dormir en el suelo, y dona 1.000 reales; otros 1.000 reales
Propiedad. A.M.Mb., AA.CC., leg. 16-H y 17-H. entrega el presidente de la Diputación, además de 8.000 del or-
99
A.M.Mb., AA.CC., leg. 16-H. ganismo provincial, junto con el compromiso de pagar el impor-
100
Gutiérrez Álvarez (1992), pág. 20. te de medicinas y desinfectantes. A.M.Mb., AA.CC., leg. 18-H.
101
17 de mayo de 1870. Sirve como fianza la cosecha que Cerbán 125
A.M.Mb., AA.CC., leg. 18-H.
tiene pendiente en la finca arrendada a José Artola, canónigo de la 126
Juan Luis Carrillo (1972), pág. 151.
catedral de Málaga, y el ganado que tiene en medianería con su 127
25 de febrero de 1886. A.M.Mb., AA.CC., leg. 18-H.
hermano Pedro Artola. A.H.P.Ma., F.N., leg. P-4972, fols. 540-541v. 128
30 de septiembre de 1886. A.M.Mb., AA.CC., leg. 18-H.
102
3 de julio de 1870. A.H.P.Ma., F.N., leg. P-4971, fols. 711-720. 129
Ante el notario de Marbella Francisco de Paula Romero
103
Como se puede comprobar en las actas capitulares de Rodríguez. Esta escritura no se encuentra en el A.H.P.Ma., por lo
estos años. En cambio, la compañía minera no tenía tanto mira- que hemos utilizado la información que proporciona la hijuela
miento con modestos labradores, como con María Josefa Añón correspondiente a Manuela Domínguez Salcedo, fechada el 22
y López y su esposo Manuel del Castillo Gutiérrez. Éstos, tras un de septiembre de 1890 ante el mismo notario. Copia en A.R.R.D.
largo pleito con The Marbella Iron Ore, a propósito de la canti- 130
Según el certificado de defunción recogido en la hijuela
dad pagada por la ocupación de terrenos para la vía férrea, no citada en la nota anterior.
disponían de dinero para pagar los 8.182 reales de gastos del 131
10 de octubre de 1874. A.H.P.Ma., F.N., leg. P-4979, fols.
juicio que habían perdido contra la compañía inglesa. Como con- 811-827v.
secuencia, el 7 de marzo de 1881 se procedió a la venta judicial 132
Para completar la dote de Elisa Torralba, sus hijos le
de la finca de María Josefa, en la Fuente del Prado, que se adjudi- cedieron el cortijo de Miraflores, en la cantidad de 24.000 rea-
có a la propia compañía, con una extensión de algo más de 10 les. Ella lo vendería a José Roldán Salcedo casado con su hijas-
ha, aparte de los 200 m² que ocupaba la vía férrea origen del tra Manuela Domínguez Salcedo, según Antonio Romero
litigio A.H.P.Ma., F.N., leg. P-5436, fols. 227-252v. Domínguez (1996), pág. 50. Posteriormente, Manuela siendo
104
El epicentro del terremoto fue en la provincia de Granada, ya viuda donó a sus nietos, hijos de Pilar Roldán Domínguez y
cerca del límite con Málaga. Fueron más de 700 muertos y casi 1.500 Juan Lavigne Gutiérrez, la totalidad de sus fincas valoradas en
heridos entre las dos provincias. García Montoro (1994), pág. 567. 309.400 reales, siendo la de mayor cuantía el cortijo de
105
Según el cónsul británico en Málaga. Reportde 1886, pág. 341. Miraflores, con 200.000 reales. 9 de junio de 1943. Notaría de
106
A.M.Mb., AA.CC., leg. 17-H. Manuel García Mayor. 9 de junio de 1943. Copia en A.A.R.D.
107
Las elecciones en las cuales Tomás fue elegido como 133
Elisa Torralba murió en su domicilio de la plaza de San
concejal fueron el 4, 5 y 6 de mayo, y la donación de los bas- Bernabé, a los 68 años de edad, el 23 de mayo de 1915. Acta de
tones se recoge en el acta de 10 de junio, por lo que parece defunción. Registro Civil de Marbella. Libros de defunciones,
que Domínguez se preparó el regalo para sí mismo. A.M.Mb., tomo 68, folio 156. Copia en A.A.R.D.
AA.CC., leg. 17-H. 134
Esto no exime del cariño de algunos miembros de la
108
El 24 de julio de 1884 se habían establecido medidas familia Torralba hacia los hijos de Rosalía. Así José Torralba Cues-
higiénicas debido a «las circunstancias que amenazan la salud ta, cuando falleció en 1893 deja a su nieto Miguel Domínguez
pública», como era la aplicación de cal a los cadáveres cuando se Salcedo, a quien cuidaba desde los dos años, muebles, efectos
enterraran en el cementerio de Marbella, y también el blanqueo de carpintería, un coche y una escopeta. 1 de febrero de 1894.
de pudrideros en la colonia de San Pedro Alcántara, junto con el A.H.P.Ma., F.N., leg. P-5442, fols. 65-74v
alejamiento de la población de los depósitos de estiércol. 135
A.M.Mb., AA.CC., leg. 18-H.

40 CILNIANA
La vida cotidiana de los Moriscos del alfoz
de Marbella: OJÉN, ISTÁN Y BENAHAVÍS*
Lina Urbaneja Ortiz

Desde estas páginas pretendo esbozar de forma genérica el periodo morisco en los pueblos integrados
dentro de la Tierra de Marbella. Para ello, me voy a ceñir a datos muy puntuales contenidos en la
memoria de licenciatura que, bajo el título “Los moriscos de Istán, 1485-1568” defendí en la facultad
de Filosofía y Letras de la Universidad de Málaga. No pretendo hacer un análisis exhaustivo sobre el
tema, ni detenerme en pormenorizar situaciones concretas sobre cada una de estas alquerías, más bien
trataré en su conjunto la historia social por ser uno de los aspectos menos conocidos de la cultura
morisca.

Istán: población morisca importante tras la llegada de los cristianos.

* Dedicado a Antonio Serrano población a los elementos discordantes, poco fre-


cuentes, pero que en algunos casos se dieron.
1. La sociedad morisca

L
A veces estas actitudes discrepantes eran
as relaciones entre los vecinos de las distin- castigadas con la expulsión del transgresor, pa-
tas alquerías de Marbella fueron armoniosas sando su hacienda a manos de otro lugareño, una
debido en parte al estrechamiento de lazos fami- disciplina impuesta con la finalidad de mantener
liares mediante enlaces matrimoniales, situación controlada a la población. Al respecto podemos
nada sorprendente pues en el Islam la familia está citar a Alonso Laso, considerado públicamente
organizada de tal forma que funciona como una enemigo personal de Tomás de Mora, adminis-
sociedad en miniatura1. Y es la propia cohesión trador de Fadrique de Vargas y máxima autori-
de grupo la que hará resaltar del conjunto de la dad en Istán. Esta enemistad es consecuencia de

CILNIANA 41
L A VIDA COTIDIANA DE LOS MORISCOS DEL ALFOZ

los hechos acaecidos a raíz del impago de los vertía en un grupo cerrado y poco comunicativo,
arrendamientos por parte de Laso, motivando la cuidadoso de mantener sus prácticas mahome-
pérdida de todos sus derechos como miembro tanas pese a bautismos, catequesis y misiones o,
activo de la sociedad local y su exilio en Ojén 2. La como señala Caro Baroja, pese también a proce-
misma situación se dio con Juan Ataly, un alabar- sos inquisitoriales7.
dero que se marchó a Monda tras residir en Istán.
Este morisco dejó un desagradable recuerdo en- Es por ello que ante el intento de
tre sus antiguos convecinos, quienes le conside- aculturación potenciado desde las más altas ins-
raban “Hombre vil e pobre, … borracho … e que tancias del poder, la respuesta fuese una latente
estando ansy, … mató a un hombre”3. resistencia a perder aquellos signos de identidad
que les marcaban como grupo cultural muy defi-
La transcendencia de unas buenas relacio- nido. Este férreo conservadurismo originaría un
nes, ya fuera entre convecinos o con los cristia- problema político de primer orden cuando se
nos viejos, deriva del carácter endogámico de la extendió la sospecha de la manipulación que
población, cuyos enlaces harían de estos pueblos podría ser objeto esta minoría, por parte de las
una inmensa familia 4. El hecho de encontrar un potencias enemigas, en un momento de gran ten-
mismo apellido en alquerías próximas, no puede sión internacional.
considerarse fenómenos aislados, pues son de-
tectadas igualmente en las comunidades moriscas Este temor denotaba un gran desconcierto
de Castilla, Aragón, Valencia y Granada5. sobre su pretendida inclusión en cualquier grupo
social o étnico de la España del Quinientos y una
Una de las características más destacadas total indiferencia hacia el pueblo morisco, que ya
de la población morisca es la movilidad geográfi- manifestaba evidentes síntomas de aculturación.
ca derivada, como hemos señalado, de uniones Por una parte, los dorados años de al-Andalus que-
matrimoniales entre personas de diferentes pue- daban lejos y apenas si eran un breve recuerdo para
blos, lo que motivaba un cambio de residencia los ancianos y, por otra, habían perdido en el deve-
para alguno de los cónyuges. Sobre este punto nir de los tiempos parte de los elementos que les
Juan Haqueni, natural de Monda, afirma tener un caracterizaban como un pueblo dotado de una
hermano casado en Istán aunque no especifica cultura propia. La imposición de la lengua castella-
su nombre; o Lorenzo Almodóvar, igualmente na, unida a la quema de libros escritos en arábigo,
habían incidido en el alto índice de anal-
fabetos, detectado por Cabrillana en
Almería y extrapolable a cualquier zona
del antiguo reino nazarí para la década
de los 50 del siglo XVI, en donde “ape-
nas si encontramos moriscos que se-
pan firmar en árabe, ni en caracteres
latinos”8. Asimismo, el aislamiento de
las comunidades moriscas del medio ru-
ral, les impidió evolucionar hacia la pau-
latina integración con la sociedad
imperante, la cual no siempre mostra-
ba indicios de rechazo, sino que en
muchos casos las relaciones de amis-
tad florecían auspiciadas por las tran-
sacciones comerciales, necesarias e
imprescindibles para la supervivencia,
tan frecuentes entre moriscos campe-
sinos y los habitantes de las ciudades
Cerca morisca con entrada de acequia. Almachar (Istán). cercanas a sus núcleos poblacionales.

residente en las tierras del marqués de Villena, Una de las consecuencias de estos con-
está emparentado con otros vecinos, hermanos tactos pudo ser la aparición de estrechos víncu-
de su mujer, en Istán6. los de amistad entre individuos de ambas comu-
nidades. La proximidad geográfica existente en-
Son datos referentes a moriscos, un co- tre Marbella y los lugares de su ámbito de in-
lectivo que, a semejanza de los cristianos viejos, fluencia fue determinante para incrementar este
no mostraba ningún interés por integrarse en la tipo de relaciones entre sus pobladores. Pero si
sociedad castellana. Esta indiferencia hacia la asi- existieron vínculos amistosos entre ambos gru-
milación proyectada por la Monarquía los con- pos sociales, no era frecuente que los cristianos

42 CILNIANA
LA VIDA COTIDIANA DE LOS MORISCOS DEL ALFOZ

viejos residiesen entre moriscos. En los pueblos sería inconfiscable lo mismo que los bienes apor-
del alfoz marbellí, sólo encontramos dos viudas tados por el morisco a su matrimonio con una
en Ojén9, y los allegados a Cifuentes y Villegas en cristiana. A pesar de que estas novedades pue-
el señorío de Benahavís y Daidín. dan parecer avances sociales, autores como
Cardaillac dudan sobre su eficacia por conside-
Lazos de sangre y amistad, fundamenta- rarlas utópicas para una imposible convivencia,
les para un mayor acercamiento entre pueblos puesto que “a un morisco y a una cristiana vieja
con una misma base cultural e ideológica, hicie- les es difícil vivir bajo el mismo techo, incluso
ron posible que conceptos musulmanes como cuando están unidos por los lazos del matrimo-
Umma o Saria nunca cayeran en el olvido. Por otra nio”13.
parte, su calidad de grupo socialmente diferen-
ciado, y por ello marginado, avivará sentimien- La Iglesia reaccionó con menos celeridad
tos de solidaridad reflejados en la práctica de la y se mantuvo a la expectativa en espera de los
Asabiyya, sin la cual sería muy difícil de explicar resultados. Tuvo que pasar un cuarto de siglo
la pervivencia de ritos, costumbres y modos de hasta que decidiera pronunciarse al respecto. Fue
vida netamente islámicos a pesar de las presio- en el Sínodo de Guadix, celebrado en 1554, cuan-
nes10. do se presentó alguna normativa relativa a favo-
recer las uniones de cristianos nuevos y viejos 14.
Si admitimos la posibilidad de una con-
fraternización, la idea de que entre ambos pue- Dentro del ámbito territorial que compren-
blos surgieran parejas en disposición de contraer de el presente estudio, hemos detectado sólo un
matrimonio, debemos aceptarla con reservas matrimonio mixto, de cristiano viejo y morisca,
debido a las normas eclesiásticas impuestas para en el lugar de Istán. No constan sus nombres,
el no cristiano, el cual debe abrazar la fe católica pero Francisco Bernal, cristiano viejo vecino de
si quiere casarse con un creyente. Esta normati- Marbella, confiesa tener un hermano casado en
va coincide con los planteamientos islámicos: “el Istán15. De sus declaraciones se deduce que man-
matrimonio debe ser entre gente que comparte tenía buenas relaciones con su hermano, pues
una perspectiva común de la vida y la moral y confiesa subir al pueblo con cierta frecuencia, sin
que conjuntamente participan del hecho para que se observen evidencias de rechazo hacia su
cumplir con su destino como representante de cuñada.
Dios” 11.
Pese al oscurantismo sobre este tema, las
Inicialmente uno de los objetivos priori- relaciones de bigamia debieron resultar habitua-
tarios de la Corona fue conseguir la asimilación les entre los moriscos, al estar permitidas den-
de los moriscos, pues se creía que tras convivir tro del Islam. Su legalidad se justifica como una
con los castellanos terminarían adoptando sus forma de equilibrar la población en momentos
usos y costumbres, incorporándose paulatina- de alteraciones demográficas, especialmente des-
mente al espectro social de sus lugares de resi- pués de una contienda, cuando el número de
dencia hasta lograr la plena integración. De acuer- mujeres excede al de los hombres. Para evitar
do con este planteamiento, deben considerarse dejarlas solas y verse obligadas a sobrevivir en
las facilidades dadas por los organismos oficia- un mundo hostil, pueden ser absorbidas por el
les para potenciar los matrimonios mixtos, como sistema familiar a través de la poligamia16.
únicos instrumentos capaces de lograr esta fina-
lidad. No obstante, es difícil detectar en las fuen-
tes este tipo de relaciones. La única excepción la
La política de fomento de este tipo de constituye Ojén, donde dos mujeres llegan a un
uniones fue temprana, pues ya en 1526 una real acuerdo amistoso sobre la herencia del esposo
provisión concede a estas parejas una serie de común, a fin de no continuar el pleito iniciado e
ventajas que incluirían, además, la exención del incrementar las costas. Estas moriscas,
alojamiento de tropas y de préstamo de caballe-
rías, así como el acceso a tierras baldías. Estas Por una parte, Catalina de
mismas disposiciones eran aplicables a los cris- Palaçios, viuda de Francisco de Roxas, e
tianos viejos que se avecindaran en lugares de por otra Francisca Sánchez, viuda de Fran-
moriscos12, aunque en la Tierra de Marbella se cisco de Roxas … Dixeron que por quanto
dieron pocos casos. entre ellas se faga partiçión e dataçión de
los bienes del falleçido Francisco de
La Corona establecía, además, favores es- Roxas 17.
peciales a quienes realizaran este tipo de enla-
ces, destacando por su originalidad las modifica- Se reparten las escasas pertenencias del
ciones que afectaban a la dote de la novia, que difunto. Además de algunas tierras de labor, los

CILNIANA 43
L A VIDA COTIDIANA DE LOS MORISCOS DEL ALFOZ

bienes en litigio lo forman objetos de uso coti- El atuendo masculino de los criptomu-
diano y doméstico, como cuatro paños de da- sulmanes evidencia asimismo un paulatino mi-
masco, una sábana labrada, almohadas, mantas, metismo hacia la indumentaria de los cristianos
cuentas de ámbar, “un cofreçillo” y “unos ferros viejos más influyentes a fin de emular algunos de
de cavallo”18. sus hábitos. En el interrogatorio efectuado a
Brianda Pérez, viuda de Fernando de Valor –Aben
La carencia de datos similares respecto a Humeya– se recogen algunos datos especialmen-
Istán y Benahavís no puede considerarse deter- te significativos en lo que respecta al modo de
minante, ni debe alentarnos a dar por asentado vestir de los moriscos. Aquí es evidente la dife-
el carácter monógamo de las parejas en el ámbi- rencia de ropajes entre hombres y mujeres, éstas
to local. Por el contrario, y a semejanza de lo más apegadas a su tradicional atuendo, en tanto
visto en otros lugares del Reino, pudo tratarse que los varones habrían experimentado un avan-
de una medida socialmente aceptada por un co- ce hacia la integración con el grupo dominante.
lectivo demasiado apegado a sus creencias y tra-
diciones 19. La admisión de unas normas de con- La noche que eligieron por rey a Aben
ducta de carácter consuetudinario, encuentra su Humeya, se encontraban reunidos en el Albaicín
respaldo definitivo en el Corán, que aconseja a granadino un grupo de disidentes, “muchos
los creyentes: “Casaos con las mujeres que os moriscos … y como dieseseis mugeres, algunas
gusten, dos, tres, o cuatro”20. El silencio de las con sus marlotas y otros adereços”. Al ser
fuentes sólo puede interpretarse como un per- preguntada Brianda si los hombres con quienes
fecto entendimiento entre las esposas a la hora trató Valor eran ricos y principales, se ciñe en su
de repartir las posesiones del difunto, conside- respuesta a los ropajes que llevaban, “en su traje
rando innecesario recurrir a la aplicación de unas y ábito, por andar vestidos de negro” y por su
leyes que ignoran la normativa musulmana, no trato exquisito, les parecieron gente “bien y
escrita en muchos casos, pero siempre descon- rica”23. Por el contrario, cuando relata su huida
certante para la mentalidad castellana. de Granada hacia las Alpujarras, no duda en con-
fesar que, a fin de pasar desapercibida, utilizó
2. Las sagas familiares ropa de cristiana vieja y pudo llegar sin proble-
mas a su destino.
En Benahavís, Daidín, Tramores, Ojén e
Istán, encontramos un porcentaje muy próximo Este dato trae a colación el tan manido
al 100% de población de origen musulmán, o tema del aspecto físico de los moriscos, sobre el
quizás sería más prudente hablar de que se han vertido ríos de tinta. El hecho de que
neocristianos, ya que no se puede atribuir un la esposa de Humeya ocultara su verdadera iden-
concepto netamente islámico a los moriscos, tidad bajo los ropajes castellanos sin despertar
cuyo permanente contacto con los castellanos sospechas entre las personas que encontraron en
debió suponer modificaciones no sólo de tipo su camino, evidencia la escasa diferencia física
social sino también conceptual. El roce de am- entre cristianos viejos y nuevos. Sin embargo, los
bos grupos, los asuntos de tipo económico y pro- dos hombres que la acompañaban, su esposo y
fesional, tuvieron que producir inevitables inter- el criado, no tuvieron que ocultar sus ropajes pues
cambios, manifiestos en relaciones de amistad, ya vestían a la castellana. Esta situación sería
enlaces entre personas de distintos credos y ab- imputable al proceso que se venía efectuando con
sorción paulatina de modos de vida y costum- el paso de los años, mediante el cual la cultura
bres, aplicables a ambos sectores sin exclusión. dominadora iba absorbiendo paulatinamente los
rasgos más elementales de los moriscos24. Luces
Benítez Sánchez-Blanco, propone una línea y sombras en unos contactos que, pese a no de-
de investigación basada en la búsqueda de pun- jar huella en las fuentes documentales, son
tos de encuentro entre ambas comunidades, aque- detectables en una lectura entre líneas.
llos rasgos comunes que les unen más que los
que les separan21. De acuerdo con esta propues- Es evidente que las relaciones entre
ta, vislumbramos influencias mutuas dentro de los moriscos y cristianos no debieron limitarse al
hábitos cotidianos que evidencian una sutil con- sector masculino y sería un error por nuestra
vivencia. Una de ellas es la adopción de elemen- parte pensar que sólo se reunirían para efectuar
tos netamente musulmanes en la vestimenta de operaciones mercantiles. Por el contrario, cree-
las mujeres castellanas, los bordados “a la moris- mos que en un ámbito territorial como el que
ca” citados en las relaciones dotales 22, nos plan- nos ocupa, donde prevalecen los grupos inter-
tean una cuestión de difícil respuesta por la par- medios, los encuentros sociales serían práctica
quedad de las fuentes. ¿Acaso los confecciona- habitual. Si excluimos a los nobles e hidalgos que
ban ellas mismas siguiendo las tendencias de la compondrían la élite marbellí –corregidores,
moda o eran encargados a bordadoras moriscas? regidores, etc.– bastante minoritarios por cier-

44 CILNIANA
LA VIDA COTIDIANA DE LOS MORISCOS DEL ALFOZ

to, las familias mantendrían frecuentes contac- plia. Para poder analizarla debemos dividirla en
tos que posibilitarían una amistad más o menos varios grupos. El principal estaría formado por la
estrecha, aunque siempre de acuerdo con sus res- denominada familia nuclear, es decir, el matrimo-
pectivos status. ¿Acaso la sociedad de nuestros nio y sus hijos, los padres que vivan con ellos y
pueblos moriscos era tan lineal que no existían los criados. A continuación se van multiplicando
familias con un elevado nivel económico? las agrupaciones al insertarse ciertos parientes
cercanos que tienen derechos especiales, se mue-
La documentación manejada al respecto ven libremente dentro de ella y con los cuales
presenta un grupo autodenominado “hombres ri- está prohibido contraer matrimonio28.
cos”, lo que evidencia una es-
tratificación social similar a la
castellana. Para la mentalidad
del Antiguo Régimen el concep-
to “rico” era sinónimo de hon-
rado, es decir “persona de cali-
dad”, de ahí que los moriscos
lo usaran profusamente. La ri-
queza, para ser aceptada por sus
convecinos, debía basarse en
factores determinantes como
pudieran ser la posesión de la
tierra y, consecuentemente, de
numerosos ganados25.

Una prueba de la división


clasista de los moriscos
marbellíes la encontramos en
los Expedientes de Hacienda del
Archivo General de Simancas re-
ferentes al año 1561. En ellos Mocaber de Istán. Detalle de una tumba.
se contienen los interrogatorios
efectuados a algunos vecinos para justificar la Este concepto se amplía aún más al incor-
correcta distribución del pago de tercias y porarse, además de la consanguinidad y afinidad,
alcabalas, además de una relación de los residen- la crianza de leche, al-rid’ah. Estos criadores son
tes en cada una de sus alquerías. considerados padres adoptivos del lactante y, por
consiguiente, los hijos pasan a convertirse en
Tramores cuenta con 10 vecinos y en este “hermanos de leche”, cuyas relaciones son simi-
acto intervienen “ocho vezinos del pueblo, de lares a las de sangre, excepto en los asuntos de
diez que somos, para dar quenta”26. Al ser tan herencia29.
reducida su población no hallamos en sus decla-
raciones ningún dato sobre una marcada estrati- Si adscribimos esta normativa a los luga-
ficación social. Acaso señalar al alguacil, Juan res de escasa población que constituyen el eje
Alonso, personaje de relevancia debido a su ocu- de este trabajo, encontramos la familia patriar-
pación. Figura clave dentro de su comunidad, al- cal, compuesta por un determinado número de
gunas provisiones reales les habían facultado para hogares, que en pocas ocasiones superarían la
llevar armas, pese a ser una norma prohibitiva decena, y cuyos miembros se consideran descen-
para el resto de sus convecinos. Otras compe- dientes de un mismo antepasado30.
tencias, administrativas, judiciales y fiscales, ha-
cían que dicho cargo recayera en personas de El comportamiento familiar de los
prestigio y de lealtad contrastada. Para Castillo moriscos seguía las normas de la más pura orto-
Fernández, era un oficio que solía heredarse den- doxia islámica, en donde no es fácil encontrar
tro de un mismo linaje, aunque teóricamente eran una familia atomística, sino que por el contrario
elegidos por los miembros de la comunidad27. suelen convivir tres o cuatro generaciones, sien-
Dentro de ésta destacan otras personas que os- do el miembro más anciano el que ocupe la posi-
tentan una primacía, no siempre basada en la ción de cabeza de la misma31.
posición económica, sino en otras característi-
cas que la sustentaran. En la Tierra de Marbella, algunas familias-
tipo serían los Pacheco, Zuriel, y Atayfor, en Istán;
El núcleo central de la sociedad islámica Mofarrax, Alarabís, Alharrox y Abeniza, en
lo constituye la familia, con una estructura am- Benahavís. La parentela del alguacil Alabus, los

CILNIANA 45
L A VIDA COTIDIANA DE LOS MORISCOS DEL ALFOZ

Daidín. Detalles de edificios.

Alganam y Almutaguan en Tramores; el alguacil aunque su trayectoria sería cuestionada por mu-
Abdudin en Almachar, junto con los Abdalá; los chos de sus correligionarios. Tradicionalmente
hermanos Cordí y los Cazán en Daidín y el algua- se ha venido considerando a Pacheco Manxuz
cil Zaide junto con los Alarguas, Valderramas y como líder indiscutible del alzamiento, no obs-
Hernando de Ruenda, en Ojén. tante, y manteniendo la importancia que tuvo,
su papel se limitaría a mero transmisor de las
En la visita que en 1560 realiza al Obispa- propuestas de los alpujarreños, así como enlace
do de Málaga el inquisidor Martín de Coscojales, entre los cabecillas granadinos y los moriscos del
son procesados numerosos moriscos de la vicaría obispado de Málaga. Si como evidencian las fuen-
de Marbella. En Ojén, se castiga a Hernando de tes, pasó desapercibido durante la sublevación,
Rueda por trabajar los días de fiesta, no acudir a su captura en 1573 es considerada de especial
misa y hablar mal de la Inquisición. De los once trascendencia, pues estaba considerado como
de Benahavís, tres son mujeres acusadas de can- uno de los cabecillas más famosos33. Pero si el
tar leilas y “pintar y componer novias a la moris- liderazgo ideológico era ejercido por hombres
ca”, en cuanto a los hombres, destaca el benefi- de rancio linaje, cuya presencia sería imprescin-
ciado Alonso de Toledo por apoyar a sus feligre- dible para aglutinar en su entorno al resto de los
ses y ocultar libros escritos en árabe, el resto de rebeldes, entonces esta preponderancia debe atri-
varones son castigados por degollar reses “atra- buirse a Alvaro Atayfor34.
vesado”, tocar música a la morisca y cantar en
las zambras y leilas. En Istán, encontramos a tres Los moriscos atrincherados en el fuerte
miembros de la familia Atayfor acusados de tra- de Arboto designaron al Atayfor, Alarabi y otras
bajar los días de fiesta y celebrar bodas con zam- personas de las alquerías levantadas, portavoces
bras y leilas; por último, en Daidín, son cuatro válidos para negociar con el duque de Arcos.
vecinos los procesados, también por hacer fies- Mármol califica a este grupo de “hombres princi-
tas moriscas32. pales” y relata cómo se desplazaron hasta Casa-
res a fin de obtener un acuerdo favorable para
Sobre Alvaro Atayfor, poseemos una infor- los sublevados. Esta misión no obtuvo los resul-
mación de diferente naturaleza. Aparece en la tados apetecidos, aún más, durante su ausencia
rebelión de 1568 como jefe de los sublevados, otro cabecilla, el Meliche de Daidín, convenció a

46 CILNIANA
LA VIDA COTIDIANA DE LOS MORISCOS DEL ALFOZ

sus compañeros de que los mediadores sólo que- A Alvaro Tayfor y Juan Rodríguez
rían proteger sus vidas y vender, por mil duca- Mundara, cristianos nuevos que servían de
dos, “su tierra, su nación y las personas de su guías, veinticuatro panes de a libra que se
ley”35. Años más tarde, Atayfor confesaría que su les dio de raçión para tres días, desde nue-
liderazgo fue efímero, doce días, pues eligieron ve del dicho mes de diziembre hasta once
a otro adalid durante el tiempo que se ocupó en de él, a rrazón de cuatro panes de a libra
negociar “las paces”36. a cada uno ques raçión doble, por librança
del dicho duque Darcos38.
Ignoramos si se produjo algún acuerdo
especial entre Arcos y los moriscos, pero la tra- El pr ofesor Gil Sanjuán localiza al
yectoria de Atayfor es desconcertante, ya que a Atayfor en 1573 en Ronda. Una vez aplastada
partir de este encuentro se iría adaptando a las la rebelión, se había integrado entre los
nuevas circunstancias, no siempre favorables, monfíes, bandoleros moriscos que se dedica-
merced a su instinto de supervivencia. En la rela- rán al asalto de caminantes. En ese año, un
ción que hace Carlos de Villegas en octubre de grupo de monfíes proponen su rendición al
1570 sobre los musulmanes que se acogen bajo corregidor de la ciudad para poder acogerse a
su amparo, aparece Atayfor con dos de sus hijos una amnistía regia39.
y un sobrino pequeño. Como acto de buena vo-
luntad, entrega su arcabuz al señor de Benahavís37. Tan dilatada trayectoria, su comporta-
miento pendular, tendrá como cierre el proce-
Y en 1571 vuelve a aparecer, esta vez al so que la Inquisición le hará en Córdoba, acu-
servicio del duque de Arcos en calidad de guía. En sado por una persona que oculta su identidad
esos momentos el noble se ocupa en perseguir a de ser capitán de los moros alzados e impul-
los moriscos rezagados en las sierras sin querer sar a su pueblo a la rebelión. Asimismo se le
entregar las armas. Para reducirlos necesitan el ase- inculpa de celebrar bodas por el rito musul-
soramiento de Atayfor y sus profundos conoci- mán y poner nombres árabes a los ya bautiza-
mientos del terreno. Su incorporación al servicio dos. El tribunal no pudo hallar al delator para
del noble se evidencia en la relación de personas que se ratificara en sus afirmaciones y la con-
que reciben víveres por desempeñar su trabajo: dena fue mínima 40.

Terrazas de antiguos viñedos moriscos. La vid llegó a tener gran importancia.

CILNIANA 47
L A VIDA COTIDIANA DE LOS MORISCOS DEL ALFOZ

3. La vida cotidiana valles, relativamente próximos al enclave urbani-


zado. A estas características debemos añadir la
Vistas la población y naturaleza de las re- presencia de una torre fortaleza, que pudo servir
laciones que los vecinos mantenían entre sí, nos de residencia al alcaide o algún otro mandatario,
surgen algunas interrogantes: ¿Cómo se desarro- hasta el momento de la conquista.
llaba la vida cotidiana? ¿Cuál era el marco en que
discurría? Son preguntas de difícil respuesta, a A su alrededor se distribuyen las casas con
las que trataremos de contestar basándonos en un elemento común: derivan directamente de la
la información que nos ofrecen las fuentes docu- topografía, implantadas sobre una fuerte pen-
mentales y bibliográfícas, ambas imprescindibles diente en los casos de Almachar, Daidín, Istán y
para llevar a buen puerto este reto. Ojén, y menos pronunciada en Benahavís: sus
calles forman un trazado tortuoso en el que pre-
En primer lugar dibujaremos el entorno dominan los recodos, subidas y adarves. Acaso
en que se desenvuelve la sociedad morisca: el el único ensanchamiento pudo estar relacionado
núcleo urbano, la mezquita, el mocaber, etc., un con la medina.
conjunto de cuya interrelación surgirá la mayor
o menor habitabilidad del lugar, características Fuera del hábitat, aunque en sus cercanías
que serán fiel reflejo de sus moradores. André y, siempre junto a una de las vías principales, se
Bazzana se pregunta cuáles son los elementos encontraba el mocaber. Para su ubicación y en
que pueden explicar la elección de un lugar para aplicación de la tradición islámica, se habría op-
implantar un hábitat. Estima que, en líneas gene- tado por un espacio junto al camino, en una la-
rales, se pueden presentar situaciones englobadas dera frente al establecimiento urbano. Si bien no
en varias opciones. De éstas, seleccionamos las ha sido posible localizar estas necrópolis en to-
que mejor se ciñen a nuestros pueblos: presen- dos los pueblos, al menos conocemos la de
cia de un punto de agua, tierras fértiles, necesi- Istán42, sobre una colina de abundante vegeta-
dad de protección y establecer el asentamiento ción y tierras de labor muy próximas43. En Daidín,
en torno a una fortaleza41. se extiende igualmente sobre una colina que do-
mina el casco urbano, denominada “cerro de la
El entorno de Istán, Ojén y Benahavís, por horca”44, mientras que en Tramores las casas lin-
ceñirnos a los que permanecen habitados, pue- daban con él45. Por el contrario, en Ojén no se
de considerarse favorable para el establecimien- concreta su situación46.
to humano, pues sus posibilidades de defensa
son idóneas, las tierras periurbanas aptas para El Islam marca unas normas muy precisas
los cultivos, y cursos de agua que forman fértiles para los enterramientos. Los cadáveres deben

Daidín. Detalles de edificios.

48 CILNIANA
LA VIDA COTIDIANA DE LOS MORISCOS DEL ALFOZ

depositarse sobre tierra virgen, lo que explica la Dentro de este entorno, los moriscos de-
amplia extensión de las necrópolis musulmanas; sarrollaban otras actividades propias del medio
las fosas no pueden ser más profundas que la al- rural, entre las que destacan la explotación de
tura de la cintura de un hombre y se prohibe el los recursos del bosque, apicultura, carboneo y,
ajuar funerario. La aplicación de estos preceptos principalmente el mantenimiento del ganado, la-
justifica que no se encuentren materiales en las bor encomendada a los más jóvenes55, así como
excavaciones arqueológicas que permitirían cono- el aprovechamiento del matorral para hacer con
cer determinados aspectos de la vida cotidiana47. sus cenizas, la lejía de las pasas.

El espacio cultivado se situaba inmediato Fuera del ámbito laboral la vida cotidiana,
al núcleo urbano y estaría formado por extensio- discurría dentro de unos cánones muy peculia-
nes muy parceladas, utilizadas para la siembra res, pues no podemos afirmar que sus compor-
de productos hortícolas, con un rendimiento in- tamientos estuviesen marcados por los precep-
tensivo que produciría fácilmente dos cosechas tos coránicos ni tampoco por las costumbres del
anuales 48. De esta forma se podrían consumir pueblo castellano. En síntesis, se estaba gestando
verduras y hortalizas frescas prácticamente du- una nueva cultura con reminiscencias de dos ci-
rante todo el año, pues las de verano rotaban vilizaciones opuestas y en la que cada una de ellas
con las de invierno, favoreciendo la dieta alimen- ejercía una considerable impronta, al tratarse de
ticia49. la asimilación y adaptación por parte de un pue-
blo con una profunda ideología musulmana. Una
En las huertas crecían gran variedad de sociedad desconcertada ante los acontecimien-
árboles frutales que se simultaneaban con los tos que le había tocado vivir y en continua evolu-
morales, los cuales convenía tenerlos cercanos a ción hacia una forma de vida y unas pautas de
las viviendas para facilitar la provisión de hojas comportamiento desarrollados por los vencedo-
para alimentar a los gusanos de seda50. Pero la res. La mezcolanza de estas nuevas tendencias
presencia de estos espacios irrigados hubiera sido tuvo que ser determinante en cuanto a un pro-
imposible de no contar con redes de riego adap- fundo cambio de mentalidad para los vencidos,
tadas a las exigencias del terreno, para lo cual se cuyo punto final es una incógnita, pues es evi-
había construido un complicado entramado de dente que, de haber permanecido los moriscos
canales que acercaban el agua a todos los pun- en el antiguo Reino de Granada, acaso hubiése-
tos. Como las huertas se mantienen a un nivel mos asistido a la conformación de una nueva
ligeramente superior al cauce del río, fue nece- cultura andalusí.
sario desviar sus aguas mediante la aplicación de
azudes para subirlas hacia la acequia. Estas bal- Desde esta concepción vamos a exponer
sas se construyen colocando un basamento de dos manifestaciones del pueblo morisco en las
piedras en el curso fluvial, a veces y con el fin de que se observan las tendencias antes expuestas.
subir el nivel de la poza, se requería la coloca-
ción de maleza procedente de la orilla. Tan pri- En primer lugar debe aceptarse que toda
mario sistema de captación necesita una cons- sociedad desarrolla, independientemente de sus
tante atención, pues las avenidas arrasaban las actividades laborales, unos actos encaminados al
piedras, haciendo necesario una revisión gene- solaz y la diversión. En este caso surge la pre-
ral al principio de cada temporada de riegos51. gunta, ¿cómo celebraban sus fiestas los moriscos?
Son conocidas las festividades tradicionales del
Los manantiales y fuentes tuvieron, ya pueblo musulmán –casamientos, nacimientos,
desde antiguo, una utilización y aprovechamien- Ramadán y ruptura del ayuno, etcétera–, sin em-
to independientemente del lugar en que estuvie- bargo, no sabemos tanto de aquellas otras surgi-
ran situados gracias a la canalización de su cau- das espontáneamente con la intención de cele-
dal52. El mantenimiento y conservación de los brar cualquier otro acontecimiento, acaso rela-
canales de riego se hacía a costa de los usuarios, cionado con la finalización de las tareas agríco-
en un sistema y orden que ha trascendido hasta las. Emanadas del propio espíritu islámico que
nuestros días: “Limpiaban cada uno por su pre- las considera parte inherente del ser humano, a
sencia y por cabeçadas de sus tierras, por donde las que trata de potenciar para refrescar la mente
pasaba la dicha agua, limpiando las azequias cada y revitalizar el cuerpo, las fiestas son, más que
un año para el dicho rriego y rregado por sus una tradición, una forma de vida56.
vezes y dulas” 53. El sistema de dulas era un anti-
guo método usado en al-Andalus para organizar Una de las ocupaciones prioritarias de los
la distribución del agua. Se inicia por orden de moriscos estaba centrada en el cultivo de los
altura, comenzando por la finca superior, viñedos, recogida de la uva y elaboración de la
continuándose después con la segunda y así su- pasa, siendo esta última la tarea que mayor nú-
cesivamente54. mero de mano de obra requería. En la época de

CILNIANA 49
L A VIDA COTIDIANA DE LOS MORISCOS DEL ALFOZ

La gente e vezinos del dicho lugar


de Daydin se holgavan, e mataron aquel
día una vaca del conçejo para comer to-
dos. E truxeron la zambra de Hoxen, que
la tenia Pedro Alharras, vezino de Hoxen
e otro; e todos los hombres y mugeres
vezinos del dicho lugar estaban fuera del
dicho lugar, ençima del Chorrón. Y esta-
ban también las mugeres holgándose y los
ombres apartados, unos comían e otros
baylaban e otros hablaban y este
confesante, e Francisco de Vitoria, e Alonso
el Meliche, e Juan Alharras, vezinos del
dicho Daydín, e Pedro Alharras vezino del
dicho Hoxen estavan … sentados debaxo
de los olibos junto al agua que viene al
Chorrón, comiendo sentados. Y estando
comiendo, les faltó el vino. Y el dicho
Alonso el Meliche se levantó para llamar
a un hijo de Francisco de Vitoria para que
les trujese vino58.

Este relato evidencia que se trata de un


acontecimiento importante, que por cierto no se
menciona en todo el pleito, lo cual nos impide
extrapolarlo a otros ámbitos territoriales. A tra-
vés de su lectura, se observa que los moriscos
gustaban del vino y que lo consumían con fre-
cuencia aunque no todos en la misma propor-
ción, pero ahí también entrarían factores ideoló-
gicos y costumbristas que no vienen al caso. En
Daidín, a los comensales les faltó el vino, y uno
de ellos encargó a un muchacho se lo trajese. Es
decir, no consideraban estar realizando una ac-
Torre junto al Ayuntamiento de Benahavís.
ción censurable cuando implican en ello al hijo
recolección, las familias se desplazaban a los de uno de los tertulianos59.
campos para realizar todas las faenas encami-
nadas a tal fin. Estas reuniones estivales eran Esta cita trae a colación el consumo de
motivo de festejos y celebraciones, para ello alcohol. Puesto que el Islam considera prohibiti-
contaban con la presencia de otros vecinos vo su uso, sería lógico que los moriscos acepta-
que, procedentes de las hazas próximas, se ran este precepto, no obstante en este caso se
acercaban para participar del evento, eviden- demuestra la influencia de la cultura castellana,
ciando que la armonía era la nota más desta- pues el vino fue adoptado por muchas comuni-
cada de la sociedad local 57. dades como parte de su dieta60.

Estos festejos eran práctica habitual Es muy posible que sus convicciones reli-
dentro del colectivo morisco, independiente- giosas les impidiesen elaborar su propio vino y
mente del marco geográfico en que se desa- lo adquiriesen en Marbella. La carta de obliga-
rrollaran. Al respecto, contamos con algunas ción otorgada en 1566 por Pedro de Salmerón,
referencias sobre la fiesta celebrada en la al- el Mozo, vecino de Istán, a favor de Juan de
quería de Daidín en mayo de 1540. Ese día, Bustamante parece indicar que se trataba de una
los vecinos decidieron sacrificar una vaca del compra con fines especulativos, ¿comercio al por
concejo para comerla todos juntos en el cam- menor entre los lugareños? Al menos así se in-
po y, con el fin de dar un carácter más lúdico terpreta a la vista del montante de la operación y
al festín, hicieron traer la zambra de Ojén. Para el considerable desembolso que le supone esta
el evento se eligió “El Chorrón”, un paraje jun- adquisición, “myll y çien reales de plata, que su-
to al río, donde la abundante arboleda les pro- man e montan treinta y siete mill e cuatroçientos
porcionaría sombra suficiente para mitigar el maravedís … los quales vos debo. E son por ra-
calor primaveral. En este ambiente, la fiesta zón de quatro arrobas de vino que me vendistes
discurría plácidamente a tres reales menos un quartillo cada arroba, el

50 CILNIANA
LA VIDA COTIDIANA DE LOS MORISCOS DEL ALFOZ

qual está en la bodega de Elbira Sánchez, vuestra relatos del pasado una fórmula ideal para la
suegra, señalado por mí y en dos botas en casa transmisión de ideologías y pautas de compor-
de Pedro de Bustamante, vuestro padre, y una tamiento65.
bota en vuestra casa”61.

Se puede exculpar este hábito, para algu- Notas


nos pecaminoso, aunque el Corán parte de que
el pecador es siempre un ser redimible y ofrece 1
AHMAD, K., La familia islámica, Asociación Musulmana en
una vía de salvación a los que incumplen sus pre- España, Madrid, 1981, p. 33.
ceptos. Es la posibilidad del arrepentimiento, ad-
2
Ibidem.
3
Archivo de la Real Chancillería de Granada (A.R.Ch.G.),
mitida como exonerante, pues la creencia en la cabina 512, leg. 2.343, n.º 3, s.f. Son declaraciones de Diego
existencia de Dios es garantía suficiente para Atayfor, realizadas el 15 de mayo de 1562.
borrar cualquier tipo de culpa62. En estas circuns- 4
Ibidem. Leonor Setenil, vecina de Istán, reconoce que
tancias, si los moriscos, como se ha afirmado en Marcos Zuriel es su sobrino.
reiteradas ocasiones, eran cristianos aparentes y
5
EPALZA, M., Los moriscos antes y después de la expulsión,
Mapfre, Madrid, 1992, pp. 104-105.
moros verdaderos, estarían aplicando la taquiyya, 6
A.R.Ch.G., cabina 3, leg. 1.541, pieza 12, s.f.
o acaso su espiritualidad estuviese tan descon- 7
CARO BAROJA, J., Los moriscos del reino de Granada, Istmo,
certada como ellos mismos y no fueran capaces Madrid, 1985, p. 14.
de diferenciar entre los preceptos coránicos y los 8
CABRILLANA CIEZAR, N., Almería morisca, Universidad de
Granada, 1989, p. 43.
cristianos. 9
Archivo General de Simancas, (A.G.S.), Expedientes de
Hacienda (E.H.), leg. 152. Marina Hernández y Beatriz Rodríguez
Dentro de la vida cotidiana, es obliga- figuran cada una de ellas con esta acepción: “biuda, pobre y
do dejar constancia de algunas tradiciones con criptiana vieja”.
especial relevancia dentro del hogar y que han
10
URBANEJA ORTIZ, C., “La rebelión latente de los moriscos
de Istán”, Las ciudades: Capitalidad y Economía, Actas Congreso
sido ampliamente abordadas por otros auto- Internacional Madrid, Felipe II y las ciudades de la monarquía,
res. Quizás la más destacada sea la transmi- Madrid, 2000, p. 517.
sión oral. Los relatos de historias y leyendas, 11
AHMAD, K., Op. cit, p. 31.
pasaron de generación en generación, 12
CASTILLO FERNÁNDEZ, J., “La asimilación de los moriscos
aglutinando una memoria colectiva gestada en granadinos: un modelo de análisis”, en Disidencias y exilios en la
España Moderna, Actas IV Reunión Científica A.E.H.M., Alicante,
la propia cultura islámica. Estas costumbres 1997, pp. 347-361.
contaron con la decisión de algunos alfaquíes, 13
CARDAILLAC, L., Moriscos y cristianos. Un enfrentamiento
celosos conservadores del pasado, que pusie- polémico (1492-1640), Fondo de Cultura Económica, Madrid,
ron en castellano cuanto pudieron de los au- 1979, p. 22.
14
GALLEGO BURÍN, A. y GAMIR SANDOVAL, A., Los moriscos
tores árabes para rescatarlas del olvido63 . Pero
del reino de Granada según el Sínodo de Guadix de 1554, Estudio
es evidente que, al mantenerse en la intimi- preliminar, Vincent, B., edición facsímil, Universidad de Grana-
dad familiar la “algarabía”, manifestaban su da, 1996, p. 144.
apego al ideal moral e intelectual del que el 15
A.R.Ch.G., cabina 512, leg. 2.343, n.º 3, s.f.
propio árabe era el vehículo único 64.
16
AHMAD, K., Op. cit., pp. 45-46. El autor justifica así la
poligamia: ”Es mejor para la mujer, más causa de felicidad y de
respeto. Por ello, el vivir en poligamia, unida a un hombre solo,
Es por ello que la familia adquiere es- con su hijo legítimo entre sus brazos y rodeada de respeto,
pecial relevancia dentro del contexto social y que el ser reducida y abandonada en la calle”.
cultural del pueblo morisco, pues sus miem-
17
Archivo Histórico Provincial de Málaga (A.H.P.M.), P4875,
s.f., escribano Fernando de Segura.
bros adquieren la experiencia de los mayores 18
Ibidem.
bajo el consejo y las enseñanzas, siendo los 19
LADERO QUESADA, M.A., Los mudéjares de Castilla y otros
estudios... En la página 146 deduce que la monogamia era la
situación general de la población granadina, al menos en el
común del vecindario.
20
El Corán, 4.3.
21
BENÍTEZ SÁNCHEZ-BL ANCO, R., “Las relaciones
moriscos-cristianos viejos: entre la asimilación y el rechazo”,
Disidencias y Exilios en la España Moderna, Actas, IV Reunión Cien-
tífica, A.E.H.M. y Universidad de Alicante, 1997, pp. 335-346.
22
URBANEJA ORTIZ, C., “La mujer morisca”, Jábega, 77,
Diputación Provincial, Málaga, 1997, pp. 32-47.
23
A.G.S., Cª.C. leg. 2.157, f. 18.
24
BERNABÉ PONS, L.F., El cántico islámico del morisco
hispanotunecino Taybili, Institución Fernando el Católico, Zara-
goza, 1988, pp. 35-36: ”Si bien al principio los moriscos po-
dían ser fácilmente reconocidos, sobre todo los de ciertas zo-
nas, por sus evidentes diferencias tribales, lingüísticas o de
costumbres, con el transcurrir de los años fue haciéndose mu-
cho más difícil”.
25
CASTILLO FERNÁNDEZ, J., “La asimilación de los moriscos
Vista parcial de Ojén.

CILNIANA 51
L A VIDA COTIDIANA DE LOS MORISCOS DEL ALFOZ

granadinos: Un modelo de análisis”, Disidencias y Exilios en la moral que linda “con el almocaber”.
España Moderna, Actas, IV Reunión Científica, A.E.H.M. y Uni- 47
BAZZANA, A., Op. cit, p. 248.
versidad de Alicante, 1997, pp. 347-361. “En los pueblos de 48
A.M.I., Executoria..., f. 25v. “Todas las tierras de regadío
moriscos también existía una acusada estratificación social re- que ay a la redonda del lugar de Ystán, todas ellas eran de los
flejada especialmente en la propiedad de la tierra”. vezinos de Ystán que se quisieron pasar aliende”.
26
A.G.S., E.H., leg. 152. 49
GARCÍA SÁNCHEZ, E., “Los cultivos en al-Andalus”, en El
27
CASTILLO FERNÁNDEZ, J., Op. cit., p. 352. agua en la agricultura de al-Andalus, El legado andalusí, Lunwerg
28
AHMAD, K., Op.. cit., pp. 43-44. Editores, S.A., Barcelona, 1995, pp. 41-45.
29
Ibidem, pp. 57-60, En el parentesco, la afinidad incluye a 50
A.M.I., Executoria..., f. 25v. Los morales “podrían criar cada
suegros, abuelos políticos, etc. Los parientes no incluidos cons- año diez onzas de seda”.
tituyen la periferia exterior de la familia y tienen también sus 51
TORRÓ I ABAD, J. y SEGURA I MARTÍ, J.M., “Irrigación y
derechos y obligaciones. asentamiento en el Vall de Perputxent”, en Agua y poblamiento
30
VINCENT, B., Andalucía en la Edad Moderna: Economía y musulmán, Simposium de Benissa, Ayuntamiento de Benissa,
sociedad, Universidad de Granada, 1985, p. 212. Interpreta el 1988, p. 68. A diferencia de lo expuesto por estos autores, en
linaje en el mismo sentido para cristianos y musulmanes, pues la zona objeto de nuestro estudio no se utilizaban para los
agrupa a todos los descendientes de un mismo antepasado. azudes, a los que se les denomina genéricamente “tomas”, los
“Entre los moriscos, sólo cuenta la filiación lineal por parte de tabiques de cañas entretejidas.
padre, y la boda preferente se hace con la primera hermana en 52
PÉREZ BURGOS, J.M. y RONDA FEMENIA, A.M.: “Locali-
línea paterna”. zaciones acuíferas en Benissa y su relación con el hábitat”, en
31
AHMAD, K., Op. cit., pp. 57-60. La familia musulmana, Agua y poblamiento musulmán, Ayuntamiento de Benissa, 1988,
dice el autor, “tiene tres o cuatro generaciones bajo un mismo pp. 59-65.
manto”. 53
A.R.Ch.G., Libro de Apeo de Istán, f. 10.
32
PÉREZ DE COLOSÍA RODRÍGUEZ, M.I., “Los moriscos del 54
Ibidem, f. 10v. “Començando el primero a la toma del
algarve malagueño: Orígenes y presión inquisitorial”, Jábega, agua y prosiguiendo fasta el último de los rriegos y bolbiendo
n.º 56, Diputación Provincial de Málaga, 1987, pp. 20-21. al primero. Y ansí por esta orden”. Sobre los aspectos legales
33
GIL SANJUÁN, J., “Disidentes y marginados de la Serra- del uso del agua en el Derecho musulmán, Cfr. VIDAL CASTRO,
nía de Ronda en el tránsito a los tiempos modernos”, Baetica, F.: “El agua en el derecho islámico. Introducción a sus oríge-
13, Universidad de Málaga, 1991, p. 238. nes, propiedad y uso”, en El agua en la agricultura de al-Andalus,
34
CARO BAROJA, J., Op. cit., pp. 69-77. Sobre los linajes Lunwerg Editores, Barcelona, 1995, pp. 99-117.
moriscos que aún prevalecían en la España de Felipe II y su 55
A.R.Ch.G., Cabina 3, leg. 1.541, pieza 12. Alonso Deldiri
importancia en la sublevación: “En el campo, en la montaña de Morales con doce años vivía en el campo con sus padres, y
alpujarreña, malagueña, rondeña, el respeto a los linajes loca- se dedicaba a cuidar de las cabras.
les reconocidos como ilustres no se había borrado”. En la mis- 56
ABDALATI, H.: Luces sobre el Islam..., pp. 106-107. “La
ma línea, VINCENT, B.: Andalucía en la Edad Moderna..., p. 212, mayor parte de las formas de adoración islámica, por ejemplo,
explica que el linaje agrupa a todos los descendientes de un oraciones, ayuno, peregrinación, presentan ciertas caracterís-
mismo antepasado y de hecho en 1568, cuando estalla el le- ticas recreativas, aún cuando intentan, básicamente y por su
vantamiento, “encontramos al frente de éste a hombres perte- naturaleza, servir a fines espirituales. Pero, ¿quién puede ne-
necientes a linajes de renombre”. gar la constante interacción que existe entre la condición física
35
MÁRMOL CARVAJAL, L. del, Historia del rebelión y castigo y moral del hombre?”.
de los moriscos del reino de Granada, Imprenta Sancha, Madrid, 57
A.R.Ch.G., Sala 512, leg. 2.343, pieza nº 3. Al respecto,
1797, pp. 415-418. Leonor de Setenil manifiesta que cuando subían a la zona de
36
Archivo Histórico Nacional, (A.H.N.), Inquisición, leg. viñedos, “yvan a hazer pasa e higos”, aunque también recolec-
1.953, n.º 11. taban otras frutas. Juan Atayfor, por su parte, insiste en las bue-
37
A.G.S., Cª.C., leg. 2.155, f. 201. De los 74 moriscos que nas relaciones entre vecinos, los cuales pese a la cercanía de
se sometieron a Carlos de Villegas, 29 son naturales de Istán: las tierras “unos vezinos no hazían daño a otros”.
“Alvaro Atayfor, vezino de Ystán, con dos hijos y un sobrino 58
A.R.Ch.G., Cabina 3ª, leg. 1.541, nº 25. Son declaracio-
pequeño; rrindió un alcabuz. Diego Zuriel, vezino de Ystán, nes de Sebastián Zagalete.
con su mujer y un hijo pequeño; rrindió una espada. Diego 59
Ibidem. “Estando comiendo les faltó el vino y el dicho
Atayfor, vezino de Ystán con su madre; dió alcabuz. Alvaro Alonso el Meliche se levantó para llamar a un hijo de Francisco
Zuriel, vezino de Ystán; dió un alcabuz. Diego Comarexi con de Vitoria para que les trujese vino”. En realidad este docu-
tres hijos pequeños; rrindió una lança y una espada”, etc. mento trasciende a los medios oficiales porque se produce una
38
A.G.S., Cª.C., 3ª época, leg. 2.875, s.f. agresión entre los vecinos, quizás debida a los efluvios etílicos.
39
GIL SANJUAN, J., “Disidentes y marginados...”, p. 238: Se 60
El Corán, 5.92: Edición preparada por Julio Cortés. Bar-
trata de “cinco capitanes monfíes, a saber: Atayfor, Jócar, el celona, 1986. Todas las citas coránicas del presente estudio
Romeruelo, el Meliche y Laceraque”. partirán de esta edición. “¡Oh creyentes! el vino, los juegos de
40
A.H.N., Inquisición, leg. 1.953, n.º 11. azar, las estatuas y la suerte de las flechas son una abomina-
41
BAZZANA, A., Maisons d’al-Andalus. Habitat médieval et ción inventada por Satán; absteneos de ello y seréis felices”.
estructures du peuplement dans l’Espagne orientale, Casa de 61
A.H.P.M., Escribanías, Fernando de Segura, P4876.
Velázquez, Madrid, 1992, p. 246. 62
El Corán, 5.94, “Los que creen y hayan obrado bien no
42
Archivo Municipal de Istán, (A.M.I.), Executoria..., f. 138v. serán considerados como culpables a causa de lo que comen,
Se presenta la situación del pago de Alnahala, el cual “comen- si han creído y si están penetrados del temor de Dios, si obran
zaba desde las casas a la salida por donde iban a Aldaidín. Lin- bien y temen a Dios, si creen y temen aún y obran el bien; y en
de con el sementerio de Mocaden y por los cerros por donde verdad, Dios ama a los que obran el bien”.
se iba al dicho Daidín”. 63
GUILLÉN ROBLES, F.: Leyendas moriscas, ed. Sufí, Madrid,
43
BAZZANA, A., Op. cit., pp. 244-247. Este autor pone de 1993, p. 13.
ejemplo el cementerio musulmán de Almenara, situado en una 64
LÉVI-PROVENÇAL, E.: La civilización árabe en España,
pendiente que los habitantes no ocupan, o el de Syasa, forma- Espasa, Madrid, 1982, p. 80.
do sobre el lado no utilizado de un montículo frente al pobla- 65
ABDALATI, H.: Luces sobre el Islam, p. 107. “Los miembros
do. de la familia comparten determinados compromisos comunes.
44
A.H.N., Nobleza, Luque, leg. 322, f. 69. Pertenecen a la identidad y al abastecimiento, a la herencia y al
45
A.H.N., Nobleza, Luque, leg. 84.14. Se cita una casa que consejo, al afecto a los más jóvenes y a la seguridad para los
lindaba por la espalda con el cementerio. ancianos, y a la realización de esfuerzos por asegurar la conti-
46
A.M.O., Libro de Apeos de Ojén, s.c. Juanate tiene un nuidad de la familia en paz”.

52 CILNIANA
Rehabilitación del
MOLINO de INCA
Juan Fernández Bonnemaison

Se refiere este trabajo a la obra completa y necesaria para dejar en condiciones de uso el molino de Inca,
situado en el Jardín Botánico Municipal de Torremolinos. En el estudio preliminar ha sido posible
descubrir el emplazamiento original del molino, así como el sistema de canales, toberas, cubos, bóvedas y
acequias existentes durante la época en la que el molino estuvo funcionando. Hemos podido reconstruir
la distribución original de interior y exterior del mismo, descubriendo los canales de agua de entrada y
salida, gracias a los vestigios existentes. A través de estos datos ciertos, y de los documentos históricos
tomados tanto de los molinos de Torremolinos como de otros molinos de la provincia de Málaga, Anda-
lucía y Levante, hemos determinado la tipología del molino de Inca: molino harinero hidráulico, movido
por rodezno, con salto de agua de 5,11m.y un caudal de agua de 22 l/s.
Por lo tanto hemos podido determinar con exactitud la tipología y medidas de los elementos fundamenta-
les de dicho molino.

E l Ayuntamiento de Torremolinos está reali-


zando las obras de reconstrucción del Moli-
no de Inca, encontrándose las mismas práctica-
mente terminadas. Desde un principio el Sr. Al-
calde de Torremolinos, D. Pedro Fernández Mon-
tes, manifestó su deseo de que la ejecución del
proyecto de rehabilitación del Molino de Inca,
fuese realizada por personal municipal, y así se
ha realizado, pudiendo afirmar que exceptuando
pequeños trabajos de mecánica, fundamental-
mente, los de torneado mecánico, la totalidad de
la obra ha sido realizada por personal municipal.

Así pues, el 95% de la ejecución material


del proyecto de restauración del Molino de Inca
ha sido realizada muy satisfactoriamente, con el
personal del propio Ayuntamiento, habiendo
participado en la realización de dicha obra: car-
pinteros, albañiles, herreros, fontaneros, electri-
cistas, pintores y canteros.

En el estudio preliminar, ha sido posi-


ble descubrir el emplazamiento original del mo-
lino, así como el sistema de canales, toberas, El Cortijo de Inca. Años 60.
cubos, bóvedas y acequias existentes durante
la época en la que el molino estuvo funcio- A través de estos datos ciertos y palpa-
nando. Así mismo, hemos podido reconstruir bles y de los documentos históricos tomados
la distribución original de interior y exterior tanto de los molinos de Torremolinos como de
del mismo, descubriendo los canales de agua otros molinos existentes en la provincia de Mála-
de entrada y salida, gracias a los vestigios exis- ga y en toda la zona de Andalucía, así como del
tentes. Levante hemos podido determinar la tipología

CILNIANA 53
REHABILITACIÓN DEL MOLINO DE INCA

del molino de Inca: resulta fácil averiguar


Molino harinero hi- Lo que Alfacar representa para Granada, o la época de construc-
dráulico, movido Alcalá de Guadaira para Sevilla, representaba ción, aunque parece
por rodezno, con que las partes más
salto de agua de
Torremolinos para Málaga “el sitio donde modernas deben tra-
5,11m. y un caudal mejor harina se hace” tar de las primeras
de agua 22 l/s. décadas del siglo pa-
sado.
Aunque en los documentos consultados
consta un salto de agua de 5,11m. en las medi- La parte que esta mejor conservada es el
ciones reales que hemos efectuado nos encon- cuerpo delantero, en dos plantas, donde en su
tramos con un salto de agua de 4,08 m. Por lo día debió estar la vivienda del molinero. Los mu-
tanto hemos podido determinar con exactitud la ros son de fabrica de mampostería bastarda con
tipología y las medidas de todos los elementos mezcla de ladrillería y piedra, formadas con un
fundamentales de dicho molino, siendo el obje- mortero de cal y barro. El forjado del suelo de la
tivo de este proyecto la construcción de un mo- planta alta esta formado por viguetas de made-
lino de agua, de dos paradas, dotándolo de toda ras recibidas en los muros de carga.
su maquinaria.
Debido al mal estado de conservación del
EL EDIFICIO edificio, en 1.985, se realizaron unas actuacio-
nes previas al proyecto definitivo de restauración,
El molino de Inca es una construcción anti- que consistieron en las obras indispensables para
gua de tipo tradicional, que en su día albergó un consolidar la estabilidad de edificio. El proyecto
molino de dos paradas accionado por agua, ya que definitivo de restauración se ejecutó en el año
se encuentra enclavado en la zona de los manan- 1.994 quedando el edificio totalmente consoli-
tiales de Torremolinos. Dicho edificio consiste en dado.
una superposición de fabricas de albañilería en-
mascarándose unas con otras de tal forma que no ANTECEDENTES HISTÓRICOS

La constitución calcárea de Torremolinos


y de su sierra, unificada a la de Mijas, es un gran
macizo de calizas dolomíticas, derivación del Sis-
tema Penibético, que actúa como una enorme
esponja de agua inagotable. Este inmenso teso-
ro mantuvo siempre una floreciente industria
molinera y dio a sus frondosas huertas sensuali-
dad de enerváticos jardines

Los Reyes Católicos otorgaron a Málaga el


privilegio de estas aguas y la propiedad de sus
numerosos molinos de “pan de moler”, cuyas
acequias, desde una cota de 200 m. permitían
una explotación jalonada hasta la playa. Lo que
Alfacar representa para Granada, o Alcalá de
Guadaira para Sevilla, representaba Torremolinos
para Málaga “el sitio donde mejor harina se hace”.

En 1.843 decía Pascual Madoz que había


en explotación 14 molinos harineros, su buen uso
era de antiguo tan cuidado que, por una Real Pro-
visión de 1.501, se ordenaba a la ciudad de
Antequera: “autorizara a sacar piedras de la sie-
rra para estos molinos, por que en él termino
municipal de Málaga no las había tan buenas”.
Debe referirse a las codiciadas piedras del Torcal
que, además de presentar una masa muy com-
pacta, tienen un color rosáceo. En las
excavaciones realizadas en el molino de Inca, en
la actualidad, hemos encontrado restos de estas
Rodezno de cucharas del molino ya restaurado. Año 2003. piedras.

54 CILNIANA
REHABILITACIÓN DEL MOLINO DE INCA

Las escrituras de propiedad de los Moli- El molino de Inca es comprado en 1877


nos de la Torre dicen, en 1.610, que estaban muy por Don Antonio Márquez y Martín. Tiene las si-
mal tratados por estar a orillas del mar: “no to- guientes características:
das las veces hay molienda en ellos por el peligro
de moros”. Por estas causas el Cabildo Malague- Es un molino harinero de dos paradas,
ño no llegó a explotar esta industria, ni halló señalado con el numero 16, situado en el termi-
quien las tomase en arriendo. Ello motivó una no municipal de Torremolinos, en el pago del Na-
Real provisión del Consejo, dada en Burgos el cimiento, distrito judicial de Málaga, cuyo pre-
20 de diciembre de 1.511, autorizando a la ciu- dio comprendía un terreno adyacente y que me-
dad a dar a censo perpetuo estos molinos de sus día aproximadamente media fanega de cabida; es
propios, “que se hallan cerrados y en malas con- decir, treinta áreas y dieciocho centiáreas con los
diciones, sin encontrar quien los arriende, pues siguientes lindes:
los interesados prefieren como mas seguros los
edificados en Churriana”. Éstos fueron después Por levante, con el camino de Benalmádena
pregonados en almoneda pública y otorgados a y el cauce para los molinos de La Molina y del
censo perpetuo, “con todas las tierras, aguas, Batán; por el norte con tierras del lagar de San
fuentes, cauces, acequias, con que siempre los Julián; por poniente por tierras del mismo, y por
han poseído esta ciudad. Como bienes de here- el sur, con la “ Puentesuela” y atargea que con-
dad fueron secularmente tramitándose sus do- ducía el agua del molino del Batán a buscar el
minios. extremo de la atargea alta, atravesando la colada
de ganados.
Los Molinos de la Torre o Torre de los
Molinos existió como asentamiento antes de la La superficie de su caserío es de 426 va-
llegada de los cristianos, como también “sus in- ras y cinco pies cuadrados; es decir, 298 metros
dustrias molineras”. Tenemos una referencia en cuadrados. El citado artefacto muele con las aguas
la que se dice: “en 1432 en Torremolinos había del nacimiento de La Cueva y del nombrado Inca
unos molinos moros que el adelantado Gómez de Zea y debe parar en los días y horas y corres-
de Ribera los destruyo en una algarada por tierra ponden a los regantes con dichos manantiales,
de Málaga”. Estos molinos reportaban al Rey de según el repartimiento oficial.
Granada, Muhammad IX, una renta anual de más
de mil doblones de oro, por lo que podemos afir- En el mes de junio de 1923, y decretada
mar con rotundidad que, si en 1432, estaban por el Gobernador Civil de la Provincia la expro-
consolidados y rentaban la nada despreciable piación forzosa de la servidumbre de molinos de
cantidad de mil doblones de oro, es lógico pen-
sar que el inicio de la actividad molinera debería
relacionarse con las importantes novedades que, Real Provisión de 1.501 se ordenaba a la
como la intensificación del regadío, los musul- ciudad de Antequera “autorizara a sacar
manes implantaron a su llegada a España a fina-
les del s. VII.
piedras de la sierra para estos molinos, por
que en el término municipal de Málaga
Joseph de Inca de Sotomayor presentó un no las había tan buenas”
memorial que fue leído por el cabildo de la ciu-
dad de Málaga el 22 de marzo de 1700. Inca de-
cía que tenía noticias de que la ciudad poseía un Torremolinos para la nueva y definitiva traída de
pedazo de tierra “inútil para labrar” por debajo aguas a Málaga, se procedió a abrir los expedien-
del molino de la Plana “inmediato al nacimiento tes oportunos. En el que corresponden al moli-
de aguas que llaman Torre Molinos”. no de Inca se citan los siguientes extremos:

La licencia se le otorgó el 8 de agosto de Propietario: don Eduardo Nogales.


1.700, a censo perpetuo a partir de 1.701, edifi- Características: del molino: una parada
cando dos molinos de harina. Luis de la Plana en movida por rodezno.
1.702, había logrado por real prohibición a Joseph Superficie total de la finca: 237.76 metros
de Inca el uso de las aguas y le exigía el derribo. El cuadrados.
litigio fue ganado por Inca, ya que este poseía “or-
den y licencia” otorgados por la ciudad de Málaga. La edificación estaba destinada a vivien-
da de recreo, garaje y huertos, sin utilización
En 1755, el presbítero Francisco de Zea y del molino, que tenía un salto de agua de 5,11
Salvatierra compró a Isidro Inca los dos molinos de caída y una cantidad de 22 litros por se-
harineros, un cortijo con agua, árboles, tierras y gundo, procedente exclusivamente del manan-
el molino de papel de estraza. tial de Inca.

CILNIANA 55
REHABILITACIÓN DEL MOLINO DE INCA

El molino restaurado y, en primer plano, parte del jardín botánico del que ha sido dotado.
El molino de Inca fue visitado por el Rey el Rey toda la galería del manantial del
Alfonso XIII durante su estancia en Málaga en el Albercón, tomando agua del propio naci-
año 1926. miento”.

LA VISITA DE ALFONSO XIII DIARIO DE MÁLAGA. Periódico de la tar-


de (14-02-1926).
Reseña de prensa de la visita real: “Con el Ministro de Fomento, Con-
de del Guadlhorce, Duque de Mondas y
LA UNION MERCANTIL. (14-02-1926). Marqués de Somasuelos, visitando los ma-
“Al regreso de Marbella, hicieron un nantiales de Torremolinos donde le espera-
alto en los manantiales de Torremolinos, ban el Alcalde Señor Gálvez, los ingenieros
dando motivo al Señor Ministro de Fomen- de caminos señores Bores Romero, Delgado
to, para que explicara a S. M las obras que y Ortiz Vallejo, la Duquesa de Parcén, Mar-
se están realizando para la traída de aguas ques de Gañena y numeroso gentío.
y arreglos de canalización y tuberías”. Se mostraron al monarca los pla-
nos de la conducción de agua haciendo
EL CRONISTA. Diario de la mañana. grandes elogios de ellos el Rey. Don Alfon-
(14-02-1926). so y su sequito e invitados fueron obsequia-
La Mañana Regia. dos con un Lunch”.
“ Cerca de la una de la tarde, re-
gresó en Monarca de su paseo, llegando LOS MOLINOS
hasta los manantiales de Torremolinos
donde era esperado por el Alcalde Señor Los remotos orígenes de la fuerza del agua
Gálvez, una numerosa comisión de Conce- en los molinos harineros hidráulicos debieron es-
tar condicionados principalmente por las innova-
ciones en la dieta alimenticia humana y o por la
El Molino de Inca fue visitado por invención, y uso de fuentes alternativa de energía.
el Rey Alfonso XIII durante su estancia
en Málaga en el año 1926 Posiblemente de la observación atenta de
la misma naturaleza aprendieron pronto a dis-
tinguir entre las aguas vivificantes, creadoras de
jales, el ingeniero Señor Bore Romero y riqueza y bienestar y de las fuerzas capaces de
varias distinguidas familias de la ciudad. arrastrar grandes pesos, como troncos de pesa-
Acompañado del señor Gálvez bajó dos árboles que rompían márgenes y gruesas pie-

56 CILNIANA
REHABILITACIÓN DEL MOLINO DE INCA

dra llegando a la conclusión de que su movimien- ras y colocadas en posición horizontal, cuyo eje
to es fuerza en energía. comunica directamente su giro a la piedra volan-
dera, dando el mismo
Los molinos hi- numero de vueltas que el
dráulicos fueron ya cono- Los molinos hidráulicos fueron ya propio rodezno.
cidos e Grecia y Roma, conocidos en Grecia y Roma
Vitrubio (s. I a. C.) en sus El molino de ro-
diez libros De Arquitectu- dezno representa el pri-
ra, nos da detalles sobre su funcionamiento y uti- mer paso en la evolución de los molinos movidos
lización. Hasta entonces parece que los únicos por la fuerza hidráulica, su sencillez o primitivismo
molinos en funcionamiento serían los molinos radica fundamentalmente en la inexistencia de todo
de mano que fueron sustituidos paulatinamente tipo de mecanismos de engranajes o trasmisión ya
por otros mayores de tracción humana o animal que el movimiento se trasmite directamente a la
(molinos de sangre) al aumentar la demanda so- piedra volandera a través del eje. Como artificio
bre todo en las ciudades, lo que constituía el paso técnico representa una máquina de relativa com-
anterior a la utilización hidráulica en tiempos del plejidad, caracterizada por un funcionamiento sen-
emperador Augusto. Se puede decir que la mo- cillo y al mismo tiempo muy preciso.
ción circular se hallaba en un estado de gran com-
plejidad teórica y su utilización práctica se en- Este tipo de molino se asocia a la existen-
contraba en condiciones de adquirir nuevo in- cia de pequeños cursos de agua, con un caudal
cremento. reducido por lo que es necesario la existencia de
una caída vertical considerable, consiguiéndose
Sin embargo es sabido que en la antigüe- esta, a falta de caídas naturales con la existencia
dad se utilizó muy poco la fuerza hidráulica. Es del cubo, con objeto de que el agua adquiera
en la Edad Media cuando aparece un empleo sis- potencia suficiente para mover el rodezno.
temático de la fuerza hidráulica y la técnica de
los molinos hidráulicos debió ir evolucionando La infraestructura hidráulica está com-
hasta ser desarrollada con efectividad en esa épo- puesta fundamentalmente por: un nacimiento de
ca, alcanzándose con los musulmanes una gran agua o un río, las acequias, cubos, saetillo,
difusión, sobre todo en Andalucía. cárcavo, puente, rodezno y la maza.

EL MOLINO DE INCA ACEQUIAS

El molino de Inca se incluye dentro de los Del árabe as-saqiyatu, la corriente de agua,
del tipo de rodezno, rueda compuesta de cucha- son canales, a cielo abierto, situados a un nivel

Acueducto de suministro de agua al molino.

CILNIANA 57
REHABILITACIÓN DEL MOLINO DE INCA

superior al del edificio cuya función es tomar agua y con un estado de conservación que podemos
del nacimiento y conducirla hasta los cubos. calificar sin exageración de excelente, su profun-
Como en la actualidad nuestro nacimiento no didad es de 4.08 m., aunque en los documentos
alumbra agua, ya que quedó seco hace algunos consultados consta el molino de Inca con un sal-
años, hemos colocado a la salida de la cueva del to de agua de 5,11 m, lo que seguramente es
mismo un pequeño embalse que sirve para cap- debido a que en el momento de determinar la
tar el agua impulsada a través de una estación altura del salto, tuvieron en cuenta la cota del
de bombeo y por un circuito cerrado desde el nacimiento en vez de la cota de la boca de los
embalse situado a la salida de los cárcavos. cubos.

Las acequias presentan en general un acep- En el fondo del cubo se produce un estre-
table estado de conservación. Construidas con chamiento que conecta con el saetillo haciendo
una mampostería rica en cal, por lo que podre- que salga el agua con una mayor presión. Cuan-
mos repararla dándoles su aspecto original. En do el molino esta funcionando el cubo permane-
los 100 m. de su recorrido presentan una anchu- ce siempre lleno, a diferencia de cuando esta
ra que oscila entre los 30 cm. y los 80 cm. parado, ya que se deja salir el agua por una tajea
de alivio, situada unos metros antes de la boca
CUBOS de los cubos, con objeto de que la escasa canti-
dad de agua que llega hasta ellos pueda ser eva-
Son unos pozos de sección circular, uno cuada fácilmente por el saetillo con un pequeño
presenta una caída que prácticamente es vertical chorro sin fuerza suficiente para mover el rodez-
con una sección de 48 cm. y el otro de una sec- no, no pudiendo así llenar nunca el cubo.
ción de 57cm., presenta una inclinación bastan-
te apreciable, con lo que en un mismo emplaza- SAETILLO
miento nos encontramos con las dos tipologías
de cubos, generalmente implantadas, en los mo- Es una pieza de forma tronco-piramidal
linos de rodezno, no siendo lo habitual esta con- que se acopla por su base a la caja situada en el
vivencia ya que en los molinos donde existen dos fondo del cubo y su boca se coloca apuntando
o más cubos estos presentan la misma inclina- oblicuamente sobre el rodezno, incidiendo so-
ción. bre las cucharas. La función del saetillo es la de
condensar la fuerza del agua que cae por el tubo
Están constituidos por la superposición de en un chorro lo más potente posible, para poder
atanores de una cerámica de muy buena calidad hacer girar el rodezno.

Interior del molino.

58 CILNIANA
REHABILITACIÓN DEL MOLINO DE INCA

Es frecuente que en la boca del saetillo se nillo del alivio se acorta la vara y el puente sube
produzcan obstrucciones a causa de los cuerpos un poco haciendo que el rodezno y la maza lo
extraños que se introducen en los cubos, así que, hagan tambien y por lo tanto la corredera se se-
para desatascarlo existe en la cara superior del para. La operación contraria se llama asentar,
saetillo una compuerta llamada suspirón o consiste en aflojar el tornillo con lo que la corre-
postiguillo que se mantiene fija con una estaca dera se aproxima a la solera.
que encaja entre ella y el techo del cárcavo.
RODEZNO
En la boca del saetillo se coloca una com-
puerta en forma de guillotina, que sirve para re- Los rodeznos de madera son los más anti-
gular el chorro de salida y es accionada por me- guos que se conocen y están formados simple-
dio de la llave, que es una barra de hierro que mente por tablas de maderas insertadas en un
une la compuerta con el suelo de la sala de mo- tronco de árbol. Éstas formas primitivas evolu-
lienda, terminando en una rosca sinfín que al cionaron a paletas curvas llamadas alavés y a rue-
maniobrarla se regula la salida del agua. Frente a das formadas por cucharas.
la boca del saetillo, se encuentra la pareara que
es una plancha de madera sujetada por dos ba- Nosotros teníamos prácticamente diseña-
rras de hierro que actúan como bisagras, estan- do el rodezno a construir pero en las labores de
do fijada a una cadena que se introduce en la
sala de molienda.
Las cucharas, en un número de 48 para el
Su función es la de detener el giro del ro- molino de Inca, son unas piezas de madera
dezno, sin necesidad de desviar el agua de la ace- compuestas de una cazoleta o pala
quia o de cerrar la boca del saetillo con la llave, y de un mango o cola
para ello se hace bajar la cadena, con lo que la
plancha se interpone entre las cucharas y el cho-
rro de agua, haciendo parar al rodezno. Para po- excavación realizadas en el cárcavo del molino
nerlo en funcionamiento de nuevo se tira hacia de Inca hemos encontrado restos de piezas del
arriba de la cadena, por lo que la plancha deja molino original, algunas de madera y otras de
pasar el agua incidiendo esta sobre las cucharas, hierro, a unos 85 cm de profundidad y en un es-
lo que hace que el rodezno gire de nuevo. trato con una gran humedad hemos hallado una
cuchara completa en un estado más que aprecia-
CÁRCAVO ble y ha sido a partir de este hallazgo cuando
hemos procedido a rediseñar el rodezno.
La bóveda o cárcavo, es una cavidad, en la
que esta montado el rodezno, elemento funda- Consiste éste, en una rueda formada por
mental del molino, y donde va a desaguar el cubo cucharas, sujeta por camones y unida a la maza
a través del saetillo. Sobre el cárcavo se levanta por medio de radios, que gira en posición hori-
todo el edificio del molino por lo que su arran- zontal. El trabajo de construcción y montaje de un
que se hace con sillares generalmente de piedra rodezno es muy delicado, ya que si se quiere obte-
caliza, sus bocas tienen forma de arco de medio ner el máximo aprovechamiento de la fuerza del
punto, siendo característico un cárcavo por cubo agua, es muy importante tener en cuenta todas las
y sólo en contadas ocasiones un cárcavo para dos condiciones que puedan contribuir a lograrlo.
cubos.
Las cucharas, en un numero de 48 para el
PUENTE molino de Inca, son unas piezas de madera, com-
puesta de una cazoleta o pala y de un mango o
Es una viga de madera verde, dura y resis- cola, la primera consiste en el vaciado del taco
tente la humedad, en nuestro caso de álamo ne- de madera de forma que su mitad superior que-
gro, sobre la que se apoya todo el mecanismo de cóncava, la cola disminuye de grosor desde la
del molino, uno de sus extremos esta encajona- terminación de la pala al extremo opuesto en
do en una caja de piedra llamada cárcel, que im- una especie de cuña alargada, siendo encajada
pide su desplazamiento lateral y en su otro ex- una junto a otra, en el hueco o cárcel que queda
tremo se fija el alivio, que es una barra de hierro entre los camones superiores e inferiores de cada
que termina en el suelo de la sala de molienda octavo del rodezno, uniéndose perfectamente
en forma de tornillo sinfín. una cola con otra, para no dejar entre ellas ren-
dija alguna por la que pueda penetrar el agua.
Su función es la de separar o aproximar la
corredera a la solera. El separar la corredera de Los radios unen el rodezno con la maza y
la solera se le denomina aliviar. Al apretar el tor- encajan en un hueco que se practica entre dos

CILNIANA 59
REHABILITACIÓN DEL MOLINO DE INCA

colas contiguas, cortándolas a lo largo por su ma de ella. en su centro tiene un orificio u ojo
mitad, las cucharas son labradas con azuelas de por el que pasa el palahierro que está sustenta-
hoja de acero, curvas y planas. do por un cojinete de madera

MAZA B) Corredera o solera. Es la piedra supe-


rior que gira sobre la solera, siendo sus dimen-
Es un tronco de madera de forma siones iguales a la de ésta, sobre todo en su diá-
troncocónica, en cuya base se inserta la cruz y metro, ya que de lo contrario la piedra de menor
en su parte superior posee una mortaja donde diámetro excavaría en la otra, dando lugar a un
encaja el palahierro; en su parte inferior se ha- reborde saliente en ésta, denominado labio, que
cen unas cajas en las que se incrustan los radios impide la salida fluida de la harina. Su diferencia
fundamental con respecto a la solera, consiste
en que ella posee en su cara inferior una entalla-
En un estrato con una gran humedad hemos dura para que en esta encaje la lavija.
hallado una cuchara completa en un estado
más que apreciable C) El picado. Ambas piedras presentan en
su cara inferior la corredera, y en la superior la
solera, unas estrías y surcos que constituyen la
que unen la rueda al rodezno. picadura. Es idéntica en las dos piedras, aunque
en el sentido inverso, con el fin de romper y re-
PALAHIERRO ducir a polvo el grano, de modo parecido a la
acción de unas tijeras.
Es un eje de acero aplanado en su tercio
inferior que penetra en la mortaja de la maza, La picadura se compone de 4 o 6 rayones
siendo fijada a ella mediante las sortijas que son o canales, surcos mayores que recorren toda la
unos anillos de hierro de diferentes diámetros superficie de la piedra desde el ojo al borde, cuyo
para poder acoplarse en la parte tronco cónica fin es el de evacuar la harina hacia el exterior en
de la maza, para la correcta nivelación del virtud de la fuerza centrífuga desarrollada por el
palahierro usaremos unas cuñas de madera lla- giro de la piedra corredera. Entre estos rayones
madas ventanas que se colocan entre la mortaja se encuentran los abanicos, formados por estrías
de la maza y el palahierro, la continuación de muy finas, trazadas de forma curva con objeto
este es de forma cilíndrica terminando en su par- de que la harina saliese por los rayones.
te superior en un pequeño pivote de menor gro-
sor y de forma cúbica llamado cresta que es don- Los abanicos constituyen el afinadero,
de se introduce la lavija, sustento real de la pie- ocupa aproximadamente los dos tercios de las
dra volandera, citada en la sala de molienda del superficies de las piedras, y es la zona donde se
molino, parte que detallaremos a continuación produce principalmente la molienda del grano y
su conversión en harina, después de haber sido
ALFANJE O PEDESTAL partido o troncado en el tercio que circunda el
ojo de la piedra, denominado tragante o pecho,
Es un poyete de obra, sobre el que des- que está picado de forma más bastarda que el
cansa el juego de piedras, realizándose un reba- afinadero y con una profundidad del doble del
jamiento central donde se asienta la piedra sole- afinadero.
ra, es macizo, con el fin de que la piedra vibre lo
menos posible, beneficiándose con ello tanto la GUARDAPOLVO
calidad de la harina, c como el mejor manteni-
miento de la “picadura”de la misma. Es un armazón circular de madera, que
cubre el juego de piedras, tiene una tapa redon-
PIEDRAS da que tiene un agujero central para permitir la
caída del grano desde la canaleta. Su función es
Son ellas las piezas que llevan acabo la la de proteger las piedras pero sobre todo evitar
molienda del grano de forma directa. El juego de que la harina se pierda por espolvoreo. La harina
piedras está formado por la inferior o solera, fija, que sale de las piedras por los rayones cae en el
y la superior o corredera, móvil. espacio que queda entre ellas y el guardapolvo,
de unos 5 cm. de ancho, de donde es empujada
A) Solera o solero. Es la piedra inferior hacia la piquera, por la que cae al harinal.
que descansa directamente sobre el alfanje, el cual
tiene un rebajamiento en el que encaja la misma Debido a que el trigo se muele algo hú-
hasta casi la totalidad de su grosor, por lo tanto, medo y al calor producido por el roce de las pie-
se mantiene fija mientras la corredera gira enci- dras la harina puede formar una masa que se acu-

60 CILNIANA
REHABILITACIÓN DEL MOLINO DE INCA

Antiguo Molino de Inca.

mula en las paredes interiores del guardapolvo, que se quiere que caiga, así como su mayor o
para evitar el apulgaramiento es necesario lim- menor rapidez, subiendo o bajando el extremo
piarlo con bastante frecuencia. libre, o manteniendolo en la posición elegida,
mediante una cuerda que se sujetaba en el extre-
BANCO mo del canalillo y después de dar dos vueltas al
manillar del banco se colocaba una pesa que sir-
Es un caballete conformado como un cubo ve como contrapeso, dicha cuerda se llama rien-
y realizado por listones de madera, colocado so- da.
bre las tapas del guardapolvo, sirviendo de so-
porte a la tolva. SONAJA

TOLVA Consiste en un cordel que tiene en uno


de sus extremos un trozo de madera que se in-
Es un recipiente de madera en forma troduce en la tolva por su parte superior, que-
piramidal colocado sobre el banco y con su vérti- dando hundido entre el grano. En el otro lado
ce, que se encuentra truncado y abierto, miran- del cordel están amarradas unas piezas de hie-
do hacia el ojo de las piedras. rro, que se quedan colgando por fuera de la tol-
va y encima de la piedra volandera. Al terminarse
Su capacidad es de un poco más de una el grano de la tolva, la diferencia de peso hace
fanega. Su función es la de contener el grano que que los trozos de hierro desciendan y rocen con
se va a moler e ir dándole salida hacia el ojo de la volandera produciendo un repiqueteo. El rui-
las piedras de modo paulatino y regular. El grano do pone en sobre aviso al molinero, que acude
se echa en la tolva mediante una espuerta de es- inmediatamente a parar el molino o a echar mas
parto llamada yuntera. grano en la tolva.

CANALETA O CANALEJA HARINAL

Este mecanismo de caída y regulación del Es el recipiente de madera de forma cua-


grano consiste simplemente en un canalillo for- drangular, en el que cae la harina desde la pique-
mado por dos tablillas laterales unidas a lo largo ra o hueco del guardapolvo. Muchas veces, para
a una base, formando un ángulo, uno de cuyos evitar el espolvoreo de la harina, se coloca un
extremos está fijado a los lados de la boca de la paño cubriendo la piquera, con el fin de que la
tolva y el otro, que queda libre, sobre el ojo de harina vaya cayendo en el harinal sin dispersar-
las piedras. Se puede regular la caída del grano, se.

CILNIANA 61
REHABILITACIÓN DEL MOLINO DE INCA

Alzado.

fabricaban la harina, todo ello dentro de un mar-


CABRIA cado tono didáctico y a su vez entretenido.

Es una grúa de un solo brazo formada por


dos vigas de madera colocadas en ángulo recto y Bibliografía
reforzadas por un travesaño. El brazo horizontal
está dotado de un tornillo, con el que puede ha- ABATE ROZIER. Nuevo diccionario de Agricultu-
cerse subir y bajar, o dos brazos curvos de hie- ra, Madrid, Imprenta de Ignacio Boix 1844.
rro, que poseen en sus extremos unos pernos o AGUIRRE SORONDO, A. Tratado de Molinología,
pivotes que penetran en los agujeros que con este San Sebastián, Eusko Ikaskuntza, S.A. 1983
fin son practicados en los flancos de la correde- BALMACEDA, J. C. Los batanes papeleros de
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dio de dos pivotes giratorios pudiéndose des- Málaga. 1998.
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Hasta aquí hemos descrito los elementos CARA BARRIONUEVO, L. y OTROS. Los molinos
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Molino, el cual estará en disposición de ser visi- Almería, Instituto de Estudios Almerienses 1999.
tado en breves fechas. CARO BAROJA, J. Tecnología Popular Española,
Madrid, Editorial Nacional. 1983.
Con esta actuación municipal, se recupera CALERO SECALL, M. y MARTÍNEZ ENAMORA-
una parte significativa del Patrimonio Histórico DO, V. Málaga ciudad Al-Andalus, Málaga, Univer-
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tantes cómo funciona realmente un molino hidráu- LÓPEZ DE COCA CASTAÑER, J. Estudio sobre
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62 CILNIANA
REHABILITACIÓN DEL MOLINO DE INCA

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CILNIANA 63
REHABILITACIÓN DEL MOLINO DE INCA

Plano de 1926.

64 CILNIANA
Los Molinillos, UN COMPLEJO
INDUSTRIAL DE ÉPOCA ROMANA EN
BENALMÁDENA-COSTA
Gonzalo Pineda de las Infantas Beato

En verano de 2002, las obras de cimentación de un apartotel en Benalmádena Costa, pusieron al


descubierto los restos arqueológicos de un complejo industrial de época romana. Como consecuencia del
hallazgo, se llevaron a cabo las correspondientes excavaciones arqueológicas de urgencia, cuyos resulta-
dos han proporcionado una importante fuente de información para el conocimiento histórico de la cultura
romana en la costa, especialmente en el ámbito socioeconómico.

Horno en proceso de excavación. En el “laboratorium”, ánforas salsarias de la forma Keay XXIII.

E n junio de 2002, se localizaron los vestigios


arqueológicos de un interesante yacimiento
de época romana en un solar ubicado en C/ García
na retroexcavadora que, para la cimentación de
la edificación de un apartotel, había realizado una
zanja de aproximadamente 3 metros de profun-
L orca esquina Avda. Antonio Machado de didad. En los perfiles se podían apreciar estruc-
Benalmádena Costa. turas y abundantes restos cerámicos de época
tardorromana; en consecuencia, se dio traslado
El yacimiento en cuestión había sufrido de los hechos al ayuntamiento competente y, en
importantes daños ocasionados por una máqui- cumplimiento de la Ley 1/1991 de 3 de julio de

CILNIANA 65
LOS MOLINILLOS

Patrimonio Histórico de Andalucía, se solicitó la medias cañas y, en uno de sus ángulos, pocete
preceptiva autorización a la Delegación Provin- con las esquinas curvas.
cial de Cultura para efectuar una Intervención
Arqueológica de Urgencia con el fin de documen- Separada de la anterior por un tramo de
tar y salvaguardar los restos arqueológicos. muro de opus incertum, localizamos hacia la zona
norte otra pileta de mayores
dimensiones aunque de es-
casa profundidad e incom-
pleta (ya que extendía bajo
la medianera de una vivien-
da). Dado el grado de incli-
nación, el vertido de líquido
de ésta a la anteriormente
descrita, era posible a través
de un sumidero de plomo re-
vestido de signinum que atra-
vesaba el muro de separación
entre ambas.

En la zona oeste del


solar se localizaron varios
pavimentos de opus spicatum
que formaban parte de un
torcularium o prensa para la
Pileta de “signinum” para garum de época tardorromana. Presenta escalones y pocete para la elaboración de aceite:
limpieza de residuos.
Uno de los pavimen-
LA INTERVENCIÓN ARQUEOLÓGICA tos de spicatum, presentaba un revoque de 3 ca-
pas de signinum tosco y de poca consistencia
Con el fin de documentar y obtener la que limitaba al norte con un lapis pedicinus o si-
máxima información del yacimiento arqueológi- llar de arenisca con cuatro huecos labrados en la
co, los cortes se plantearon abarcando toda la roca para insertar los postes o de una prensa.
superficie susceptible de ser excavada.
Al norte de esta estructura, se extienden
Los primeros niveles, algo alterados por varias “aras quadrata” también de spicatum que
las cimentaciones de las viviendas y locales de- presentan una red de canales (canalis) por donde
molidos recientemente, estaban otorgando una fluía el aceite y otro lapis pedicinus con dos hue-
cronología muy tardía, en torno al siglo VI-VII cos para la base de los postes.
d.C. No obstante, y a pesar del estado de pérdida
y deterioro, buena parte de las estructuras ar- La zona norte del yacimiento se presenta-
queológicas presentaban un buen estado de con- ba bien delimitada por un muro de opus incertum
servación. que atravesaba el yacimiento de este a oeste y
que, a tenor del material arqueológico hallado
A pocos centímetros de la superficie se extramuros y a la disposición de la secuencia
hallaron varias piletas: la primera de ellas, cua- estratigráfica, fue interpretado como el muro de
drangular (de160 x 130 cm) revestida de opus cierre de la zona industrial por su lado norte.
signinum de buena calidad; presentaba dos esca-
lones de ladrillo revestidos también de signinum Otra pileta de las mismas características
que daban acceso al fondo de la pileta por la es- que la anteriormente descrita (de grandes dimen-
quina suroeste; el ángulo sureste presenta pocete siones y escasa profundidad) fue localizada al este
circular para la lim- del torcularium. La
pieza de posos y re- pileta en cuestión
siduos. Esta pileta Los resultados de esta intervención presenta en su base
fue construida so- arqueológica han proporcionado una varios huecos irre-
bre otra más anti- importante fuente de información para el gulares realizados ex
gua con distinta profeso en una pos-
orientación y fuerte conocimiento histórico de la cultura romana en terior reutilización
enlucido de sig- la costa, especialmente en el ámbito para la inserción de
ninum , esquinas socioeconómico postes o algún ele-
matadas mediante mento de sujeción.

66 CILNIANA
LOS MOLINILLOS

Aunque del material arqueológico corres- LA CERÁMICA


ponde hablar en el siguiente apartado, es digno de
mencionar la abundancia en esta zona, de cerámi- Entre los restos de época Altoimperial, se
ca asociada a contextos de los siglos V al VII d.C. han documentado ánforas para el transporte de
salazones de pescado y para el transporte de acei-
En la zona más oriental, junto a la calle te, muy presentes en los yacimientos de la pro-
García Lorca, se localizó en los inicios del rebaje, vincia y documentados en centros de producción
una estructura en piedra, de forma ovalada per- cercanos como Finca El Secretario. Sin embargo,
teneciente a la parte superior de los restos de un todos estos restos, además de escasos, aparecen
horno. Los materiales hallados en el interior abar- de forma muy fragmentada por lo que ha sido de
caban una cronología de entre mediados del si- gran dificultad su adscripción tipológica.
glo III y el siglo V d.C. El horno fue excavado con
especial cautela para evitar situaciones de pérdi- Entre las cerámicas comunes de cocina,
da o deterioro de la estructura. Se comprobó que se han podido documentar tapaderas de pro-
carecía de bóveda y que gran parte de la cámara ducción itálica bien documentadas en la Ta-
de combustión o laboratorium estaba arrasada. rraconense y con presencia en la Bética; y
La parrilla y la columna que la sustentaba, tam- tapaderas de producción africana de borde
bién habían desaparecido. La cámara, de gran diferenciado y ennegrecido, con amplia cro-
tamaño y forma ovalada, estaba formada por hi- nología, llegando incluso hasta época
ladas de ladrillos superpuestos. Del praefurnium, Bajoimperial, y de gran difusión en el medite-
orientado hacia el este, solo pudo excavarse el rráneo occidental, en Hispania, en la Bética y
tramo que le unía a la cámara de combustión ya en la provincia malagueña.
que el resto se introducía bajo la calle García
Lorca. Un muro de opus incertum, pero de época También tienen cabida en esta interven-
posterior al momento de abandono del horno, ción, las jarras de cuello corto y pico vertedero,
fue levantado con orientación sureste-noroeste similares a los registrados en yacimientos como
y el praefurnium, quedaba arrasa- el Castillón o la Fábrica.
do por éste en su mitad supe-
rior. Entre los productos de vaji-
lla de mesa, aunque muy escasa, se
Aunque del mate- ha podido documentar un fragmen-
rial arqueológico hablare- to de campaniense A; varios fragmen-
mos extensamente en el tos de cerámica de paredes finas de
epígrafe siguiente, hemos producción Bética; sigillatas sudgálicas
de mencionar que aquí se con motivos decorativos vegetales o
produjeron ánforas tardías de ovas y lengüetas; sigillatas hispáni-
para salazón como la Keay cas y fragmentos de sigillata clara “A”.
XXIII y ánforas para vino
bético como la Beltrán 68, Entre los restos de época tar-
ampliamente documentadas día destacan sobremanera las
en la Bética y en la provincia ánforas de origen sudhispánico
malagueña; asimismo se fabri- y las cazuelas de imitación de
caron cazuelas de imitación originales africanos produ-
de cerámica de cocina afri- cidas en este enclave: en-
cana como la Lamboglia 10 tre las ánforas, se han re-
A y la Ostia III, 267. gistrado las salsarias Keay
XXIII y las destinadas al
MATERIAL transporte de vino bético
ARQUEOLÓGICO Beltrán 68, registradas en
yacimientos de la provin-
Del total del ma- cia como calle Cerrojo.
terial cerámico exhu- Estas dos formas, amplia-
mado en esta intervención, mente documentadas en la
destacamos por su abundan- provincia, aparecen amor-
cia, el de época tardía (siglos tizando el laboratorium del hor-
III al VII d.C). En primer lugar, no, en contextos de mediados del
haremos mención a los restos siglo IV o inicios del V d.C.
correspondientes a los prime- Jarro de cerámica común hallado en
ros momentos de ocupación niveles del siglo V-VI d.C. en el transcurso Aparte de éstas formas,
de la zona. de las excavaciones. se han documentado también,

CILNIANA 67
LOS MOLINILLOS

do. Las dos formas que se imitan son: la Ostia III,


267 A y B de borde almendrado, y paredes y fon-
do convexos sin estrías; y la Lamboglia 10 A de
borde engrosado al interior, pared curva y fondo
convexo.

En ambas imitaciones se utilizan pastas


marrones anaranjadas de gran porosidad, con grue-
so y abundante desgrasante y acabados muy tos-
cos; estas cazuelas carecen del típico engobe ana-
ranjado, pátina gris cenicienta y de estrías –tanto
al interior como al exterior–.

Recordemos que, en algunos yacimientos


de nuestra provincia, en Los Matagallares,
Cercadilla, Marchena y en diversos puntos de la
Tarraconense, se realizaron imitaciones de cerá-
mica de cocina africana, en algunos casos tanto
en la forma como en el acabado y en otros, tan
solo en la forma.

Grosso modo, estas formas se ubican


cronológicamente entre los siglos II al V d.C.,
aunque debemos considerar que las imitaciones
deben ser por lo general posteriores a sus origi-
nales. En esta intervención, las imitaciones apa-
recen bien fechadas en niveles de finales del si-
glo IV e inicios del V d.C., asociadas a ánforas
Keay XXIII y Beltrán 68.
Prensa de aceite o “torcularium” de época Altoimperial. Véase el
pavimento de “spicatum”, los canalis y las bases para insertar los postes Durante el desarrollo de los trabajos tam-
(“lapis pedicinus”). bién pudieron documentarse en niveles de los
siglos IV al V d.C. cazuelas de origen africano con
otras de producción sudhispánica como la desti- superficies bien depuradas, pátina gris cenicien-
nada al transporte de salazones Keay XIX susti- ta al exterior y fondo estriado.
tuta de la Beltrán I hacia mediados del siglo III
d.C. y la olearia Keay XIII que también supliría a En cuanto a la vajilla de mesa, destacamos
la Dr. 20 en época Bajoimperial. los fragmentos de sigillata clara “C” y varios frag-
mentos de terra sigillata focense tardía cuya cro-
De los contextos del siglo VI-VII d.C. con- nología de fabricación se situaría entre el siglo V
tamos con restos de pequeñas ánforas de posi- e inicios del VII d.C. ampliamente representadas
ble origen baleárico como la Keay LXXIXA. Para- en yacimientos de la provincia como el Teatro
lelos cercanos los podemos encontrar en Molina romano, colegio de San Agustín, Molina Lario,
Lario o en Torreblanca del Sol. Torreblanca del Sol, Cártama, Antequera,
Villanueva del Rosario y el Serrato.
En cuanto a las de procedencia nor-
teafricana, tan solo se han podido registrar algu- Son también abundantes las cazuelas de
nos fragmentos representativos como la spatheia. borde ondulado, documentadas en yacimientos
costeros así como
Las cazuelas morteros, lebrillos y
de imitación de ce- A lo largo de toda la costa benalmadense dolia.
rámica de cocina existieron abundantes asentamientos de
africana constituyen carácter industrial interrelacionados y que, Las lucernas,
un conjunto cuan- además de exportar productos, abastecieron merecen especial
titativamente im- atención ya que al-
portante. En estas las necesidades de la villa gunas de ellas apa-
imitaciones, en las recieron casi com-
que la semejanza respecto a la forma es bastante pletas. Las piezas más significativa podemos ads-
cercana, el acabado de la pieza es totalmente des- cribirlas a la antigüedad tardía entre las que des-
igual; es decir se imita la forma pero no el acaba- tacan las de arcilla rojiza-anaranjada halladas en

68 CILNIANA
LOS MOLINILLOS

niveles de finales del siglo IV e inicios de V d.C. y gan a presentar un buen estado de conservación,
las de probable imitación local de originales por lo que, alguna de ellas son prácticamente
norteafricanos con una cronología de mediados ilegibles.
del siglo III d.C.; por último, mencionar el hallaz-
go de una lucerna de pasta anaranjada, cuya Entre las monedas más antiguas podemos
morfología podría ser un claro precedente de los destacar un As neopúnico de Malaka con cabeza
candiles emirales del siglo VIII d.C.

Otro capítulo importante dentro del ma- En época tardorromana, la factoría de salazones
terial cerámico en la antigüedad tardía lo consti- se construyó y se reestructuró estableciéndose
tuyen las cerámicas a torno lento, cuyo reperto- sobre los restos de la prensa oleícola de los
rio tipológico se limita exclusivamente a recipien- primeros momentos del Imperio
tes de cocción de alimentos como las ollas y ca-
zuelas de cochura reductora con gruesas y abun-
dantes partículas de cuarzo y mica, superficies de divinidad barbada y birrete cónico; y entre las
poco depuradas y gran porosidad. mas recientes, un numus en los niveles de época
Bizantina. Pero sin lugar a dudas, de entre todas
La cerámica a torno lento documentada la monedas halladas en la intervención, la que
en este yacimiento aparece en niveles de los si- presenta un mejor estado de conservación, es
glos VI-VII d.C.; aunque podría extenderse hasta sin duda alguna, un sextercio de bronce del año
los inicios del VIII d.C. 238-244 d.C. de Gordiano III (Marcus Antonius
Gordianus), en cuyo anverso conserva la leyenda:
Los paralelos más próximos podríamos IMP GORDIANVS PIVS FEL AVG y en el reverso,
hallarlos en las excavaciones del Teatro romano, LAETITIA AVG N / SC.
en Molina Lario o en Torreblanca del Sol.
En hueso se confeccionaron un buen nú-
METALES mero de objetos pertenecientes al tocado feme-
nino. Entre ellos dominan, en número, los acus
Entre los materiales no cerámicos halla- crinalis o alfileres de tocado empleados para fijar
dos en la excavación arqueológica, contamos con el peinado.
una cantidad ingente de utensilios de metal, tan-
to bronces como plomo, relacionados con la pes- CONCLUSIONES
ca, entre los que destacan los utensilios para re-
paración de redes, anzuelos y plomadas. La Costa, gozaría de unas condiciones muy
apropiadas para el aprovechamiento de los re-
Además de estos objetos metálicos, se cursos marinos; la importancia que supuso la in-
hallaron escorias y abundantes fragmentos de dustria pesquera y la elaboración de productos
plomo fundido, muy uti-
lizado para realizar plan-
chas que servían para
impermeabilizar los su-
mideros de las piletas o
los canalis del torcu-
larium.

Los hallazgos nu-


mismáticos han sido de-
terminantes para fechar
las secuencias estra-
tigráficas durante el de-
sarrollo de las exca-
vaciones. Mas de una
veintena de hallazgos
han proporcionado cro-
nologías muy amplias y
otorgan a este enclave
una ocupación que va,
desde el siglo II o I a.C.
hasta el siglo VII d.C. La “Ara quadrata” de “opus spicatum” de la prensa. A la derecha canal o “canalis”
mayoría de ellas no lle- por donde discurría el aceite.

CILNIANA 69
LOS MOLINILLOS

derivados de la misma se manifiesta con el con- fases de ocupación en la zona: primero con la
junto de establecimientos extendidos a lo largo producción de aceite y posteriormente con la de
de todo el litoral andaluz entre los que, salazones.
Benalmádena mantendría una excelente situación
con respecto al conjunto de vías comerciales. Así, Los centros que, decididamente intervinie-
se localizan yacimientos como Torremuelle o la ron en el cometido de la fabricación del aceite
villa romana de Benalmádena Costa. Este hallaz- fueron la villas; en este sentido, se infiere que, la
go casual ubicado en primera línea de playa, a producción de aceite, cumplió una importante
unos 530 m al este de la villa romana de función en la villa de Benalmádena-Costa desde
Benalmádena Costa hace suponer que, a lo largo donde posiblemente se exportó el producto en
de toda la costa benalmadense existieron abun- grandes cantidades.
dantes asentamientos de carácter industrial
interrelacionados y que, además de exportar pro- Los escasos materiales de época republi-
ductos, abastecieron las necesidades de la villa. cana hallados en el curso de las excavaciones,
indican únicamente fenómenos de carácter resi-
En este enclave se desarrollaron importan- dual. A comienzos del siglo I d.C. los materiales
tes actividades industriales desde el siglo I d.C. se intensifican, dato indicativo para ubicar el pri-
hasta al menos, comienzos del siglo V d.C., mo- mer momento de ocupación de carácter indus-
mento en el que se confirma el cese de la pro- trial en torno a esa fecha. Como hemos indicado
ducción de envases destinados fundamentalmen- anteriormente, este primer momento de ocupa-
te al transporte de salazones. ción estuvo vinculado a la producción de aceite;
este producto, de reconocida fama en la Bética a
Gracias a la distribución, superposición de partir del siglo I. d.C. y con una importante pre-
estructuras y lectura de las secuencias sencia en el mediterráneo en época de los
estratigráficas, hemos podido corroborar varias antoninos, fue elaborado en un torcularium de “ara

“Horno de planta ovalada parcialmente arrasado. Véase el muro tardoantiguo construido sobre el “praefurnium”.

70 CILNIANA
LOS MOLINILLOS

quadrata” y pavimento de opus spicatum con al mentos utilizados en la producción de aceite


menos dos prensas que vertían el líquido oleagi- (contrapeso, mola olearia, labrum, lapis pedicinus
noso a piletas o labrum hoy desaparecidas. o cella olearia); contamos por ejemplo con ya-
cimientos como el Gallumbar y Prado del
Este comercio tan floreciente en los pri- Verdún, Finca Garcidonia, Cortijo Valsequillo,
meros siglos del imperio, parece que atravesó Aratispi, Villa de Manguarra y San José de Cár-
por momentos de dificultad a partir de la de- tama. Pero sin duda alguna destacamos la sin-
nominada crisis del siglo III d.C. Este fenóme- gularidad de este yacimiento por su proximi-
no viene a coincidir posiblemente con el cese dad al mar, situado en primera línea de costa
de esta actividad entre mediados del siglo III y sin parangón en la provincia (aunque el ha-
y el siglo IV d. C., llazgo de un lapis
momento en el que pedicinus en Huerta
se intensifican las En este complejo industrial, se fabricaron del Rincón podría
producciones de productos cerámicos de origen Bético y cazuelas revelar en sus pro-
ánforas destinadas de imitación de cerámica de cocina africana ximidades la exis-
al transporte de sa- tencia de un tor-
lazón y las cazuelas cularium de aceite).
de imitación de cocina africana (utilizadas po-
siblemente para acelerar el proceso de elabo- Nos planteamos también el interrogan-
ración del garum). te para determinar el área de distribución del
aceite producido en el torcularium. En el esta-
Con el cese de la producción de aceite, no do actual de la investigación, y con insuficien-
se abandona el enclave, sino que se produce una tes elementos de juicio, resulta difícil esta-
transformación en el tipo de actividad industrial: blecer si se trató de un producto comerciali-
se sustituye esta producción por la de salazones zado para el abastecimiento de las villae más
y derivados de la misma. Este cambio está sobra- cercanas, o si fue un producto de exportación
damente atestiguado con la superposición de a gran escala. Por el momento, carecemos de
estructuras. datos (sellos y tituli picti en los restos
anfóricos) que puedan corroborar las hipóte-
La secuencia estratigráfica de los prime- sis barajadas. Para los enclaves oleícolas de la
ros siglos del Imperio aparece en gran parte alte- comarca de Antequera se ha planteado la po-
rada por momentos de ocupación posterior (de sibilidad de que el óleo fuera transportado
época tardorromana), por lo que la interpreta- hasta el puerto de Malaca, en envases como
ción secuencial de los primeros momentos de odres y cueros, donde serían definitivamente
ocupación ha sido más compleja. Por ello, en- envasado en ánforas abastecidas por los alfares
tendemos que la escasez de material Altoimperial más cercanos. Partiendo de esta premisa, que-
no implica la debilidad de la actividad industrial remos avalar la teoría de que el aceite produ-
sino una pérdida de información en pro de la de cido en “Los Molinillos” sería igualmente trans-
época tardorromana, que causaron las alteracio- portado hasta el puerto de Malaca desde don-
nes estratigráficas. de podía ser distribuido por el mediterráneo
o incluso iniciar las rutas de exportación des-
Estas consideraciones generales en torno de la ensenada de Torremuelle, única vía co-
a la producción del aceite, nos permiten supo- mercial de Benalmádena.
ner que en los primeros momentos de ocupa-
ción de la villa (situada a tan solo 530 metros.) se A grandes rasgos se determina el abando-
iniciaron las actividades industriales a lo largo no de la producción oleícola a finales del siglo II
de toda la costa benalmadense. d.C. o inicios del III d.C. relacionado intrínseca-
mente con la crisis del siglo III d.C.; sin embar-
Es evidente que los olivos, gozaban de go, en gran parte de los yacimiento de la comar-
reconocida fama en la antigüedad como condi- ca de Antequera (donde se concentra el 90% de
mento culinario e incluso como fármaco curati- los yacimientos oleícolas de la provincia), se tie-
vo; sin duda alguna, en la Bética el aceite tuvo nen indicios de que la producción de aceite no
mayor prestigio, no solo por la cantidad sino por cesa al menos hasta finales del siglo IV d.C. o
la calidad del producto. inicios del V. d.C. Este fenómeno no ocurre en el
yacimiento que nos ocupa: la secuencia
Tenemos constancia en la provincia de estratigráfica revela que el cese de la producción
numerosas villae oleícolas, en las que se pro- de aceite no se origina a raíz de la denominada
ducía aceite; en la vega de Antequera y en zo- crisis del siglo III d.C. sino por razones que se
nas del interior se han registrado más de una nos escapan (probablemente pudo estar vincula-
treintena de yacimientos con torcularium o ele- da a cuestiones de rentabilidad del producto), ya

CILNIANA 71
LOS MOLINILLOS

Imitación de cazuelas de cocina africanas de la forma Lamboglia 10A halladas en el “laboratorium”.

que la actividad industrial, aunque sufre una trans- y en tercer y último lugar, es indicativo que gran
formación en el tipo de producto elaborado parte de la infraestructura de la fábrica oleícola
(salazones, garum) continúa hasta al menos el si- permaneció intacta (como el muro de cierre de
glo V. d.C. El cese de la producción de envases, la zona norte), por lo que fue de gran utilidad
se produce a finales del siglo IV o inicios del V para el establecimiento de la factoría en época
d. C. aunque este fenómeno no implicaría el Bajoimperial.
abandono total de la zona, evidenciado por el
registro de material arqueológico, donde se Contamos con indicios arqueológicos en-
observa una continuidad hasta finales del si- tre los que son dignos de mención los estucos
glo VII d.C. polícromos parietales hallados en las cercanías y
que también se localizan en las excavaciones de
La construcción y reestructuración de la la villa romana de Benalmádena-Costa en contex-
factoría de salazones en época tardorromana tos del siglo I d.C.; ello corroboraría la proximi-
continuó ocupando el mismo lugar en el que se dad de zonas residenciales de cierta suntuosidad.
estableció el torcularium de aceite, imaginamos El carácter residencial de algunos establecimien-
que por diversos tos, justifica en al-
factores como po- gunos casos su
dría ser su esplén- El abandono de este enclave no se va a producir asociación con las
dida ubicación, en hasta al menos, finales del siglo VII d.C. lujosas villae a
primera línea de mare itálicas. Por
costa y en un pe- tanto, barajamos
queño promontorio, desde donde era más fácil la hipótesis de la existencia de conjuntos resi-
el avistamiento de las bandadas; y por su proxi- denciales de lujo próximos cuyos propietarios es-
midad a un arroyo que les abastecía de agua dulce tuvieron probablemente ligados a las pujantes
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72 CILNIANA
LOS MOLINILLOS

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74 CILNIANA
La recuperación del yacimiento romano de la
“Finca El Secretario” *

Ramón F. Hiraldo Aguilera

El municipio de Fuengirola viene desarrollando desde hace algunos años una continuada apuesta por la
recuperación de su Patrimonio Histórico, dentro de un proceso en el que cada día va ganando terreno un
sentimiento ciudadano de defensa del desarrollo urbano de nuestro pueblo en convivencia con la conserva-
ción de nuestro rico pasado. Un ejemplo de ello lo constituye el yacimiento romano de la “Finca El
Secretario”, cuyo descubrimiento y primeros años estuvieron marcados por los peores augurios y que,
gracias al impulso dado por la Corporación Municipal, acaba de abrir sus puertas una vez concluidos los
trabajos de recuperación y puesta en valor iniciados en 1997, incorporándose así a la oferta cultural de
Fuengirola.

Vista general de la “Finca El Secretario” en los años cincuenta.

* Este artículo fue presentado en la revista Ateneo, n.º 3,


septiembre (2002).

E
brando con la puesta en marcha de una nueva
n los últimos cuarenta años el municipio de legislación1 y con la progresiva concienciación de
Fuengirola se ha visto sometido a un creci- la ciudadanía. Todo ello está permitiendo un pro-
miento espectacular bajo el impulso del fenómeno ceso paulatino de integración de nuestro rico pa-
turístico. Este proceso ha traído consigo la paulati- sado en armonía con el proceso de crecimiento
na urbanización de su limitado territorio, y con ello, de nuestro pueblo.
al igual que en otras localidades de la Costa del
Sol, una difícil “convivencia” entre la conservación Un ejemplo de ello lo constituye el yaci-
del Patrimonio Histórico y el desarrollo urbano. miento romano de la “Finca El Secretario”, cuyo
descubrimiento y primeros años estuvieron mar-
La tendencia, muy negativa en los años cados por los peores augurios y que, gracias al
sesenta y setenta, se ha ido corrigiendo y equili- impulso dado por la Corporación Municipal, aca-

CILNIANA 75
YACIMIENTO ROMANO DE LA FINCA “EL SECRETARIO”

ba de abrir sus puertas una vez concluidos los 1978, conocida popularmente como “Venus de
trabajos de recuperación y puesto en valor ini- Fuengirola”3. Se trata de una Venus Púdica de 1,44
ciadas en 1997, incorporándose así a la oferta m. de altura, con el cuerpo totalmente desnudo,
cultural de Fuengirola. a excepción de la parte posterior de ambas pier-
nas que cubre con un amplio paño. Carece de
Antecedentes cabeza, brazos y pies. Todo parece indicar que

Este enclave romano, localizado al NE del


municipio en el llamado “Puerto de las Yeseras”,
fue durante largo tiempo un lugar desconocido
salvo para los agricultores de la zona que, cuan-
do realizaban sus tareas de labranza, veían salpi-
car sus tierras con los restos de su antiguo es-
plendor.

Esta dinámica se mantiene en la década


de los años setenta del siglo XX, aunque con una
mayor incidencia para la investigación científica.

Fue durante largo tiempo un lugar desconocido Recuperación de la escalinata localizada en 1987.
salvo para los agricultores de la zona que (...)
veían salpicar sus tierras con los restos de su fue creada en la primera mitad del siglo II d.C. y
antiguo esplendor constituye, sin entrar en mayores valoraciones
artísticas, un dato de indudable interés a cerca
del valor arqueológico de este yacimiento.
En los primeros años se acomete el nuevo traza-
do del ferrocarril Fuengirola-Málaga y unos años Habrá que esperar algunos años, ya en la
más tarde se realiza la variante a la N-340 a su década de los ochenta, para que este asentamien-
paso por nuestra localidad. Los movimientos de to romano nos ofrezca nuevas noticias. A finales
tierra provocados por esta última van a ocasio- de 1987, con motivo de la conversión de la N-
nar la ruptura artificial del yacimiento y la puesta 340 en autovía, se procede a la primera excava-
al descubierto de importantes vestigios construc- ción arqueológica de urgencia en la zona sur del
tivos, fragmentos de estucos, mármo- yacimiento. Fue programada por la Delegación
les, vidrio y cerámica. Estos
vestigios dan pie a la primera
prospección arqueológica del
terreno cuyos resultados que-
dan plasmados en un artículo
de la revista Jábega2. Por aquel
entonces sus autores, D. Rafael
Atencia Páez y D. Antonio Sola
Márquez, ya apuntaban la
existencia “de una importan-
te villa romana”, fechable en-
tre finales del siglo I y fina-
les del siglo III d.C., con in-
dicios de perduración hasta
el siglo V d.C. Al mismo Vista general de la zona excavada en 1991.
tiempo se hacia constar que
algunos datos indicaban la Provincial de Cultura y contó con la colabora-
existencia de un alfar y “res- ción del Ayuntamiento de Fuengirola y de la
tos de piletas destinadas a la empresa concesionaria de las obras. De sus re-
salazón del pescado o de sultados sobresale la aparición de una escali-
la obtención de garum”. nata que conservaba cuatro de sus peldaños
y algunos restos de las pinturas parietales que
Otro hecho a te- la embellecían 4. En aquel momento, dadas las
ner en cuenta es el ha- limitaciones impuestas por la intervención, no
llazgo casual de una es- se pudo determinar su conexión al edificio
Venus de Fuengirola. cultura, en el año termal adyacente 5.

76 CILNIANA
YACIMIENTO ROMANO DE LA FINCA “EL SECRETARIO”

Vista general de las termas (2001).

El último capítulo de estos anteceden- 1995 con la elaboración del Proyecto Básico
tes tiene lugar en 1991. El Ayuntamiento de de Ordenación, Protección y Exhibición del ya-
Fuengirola, con el fin de conocer la viabilidad cimiento romano, a cargo del arquitecto D.
urbanística de los terrenos situados al sur de José Ramón Cruz del Campo. El objetivo mar-
la variante, promueve la delimitación del es- cado es la puesta en valor de los restos ar-
pacio arqueológico. Las excavaciones, desarro- queológicos ya excavados para su incorpora-
lladas por el arqueólogo D. Fernando Villaseca ción a la oferta cultural de la localidad.
Díaz, ponen a la luz un
conjunto de gran interés,
constituido por un área
industrial, formada por
una factoría de salazón y
varios hornos de produc-
ción cerámica (tal y como
hoy los conocemos), y las
primeras estructuras del
un edificio termal. Con
estos resultados queda
palpable su importancia,
procediéndose a su incor-
poración al patrimonio
municipal.

Puesta en valor del


yacimiento

La definitiva recu-
peración de la zona sur
del espacio arqueológico
inicia su andadura en Detalle de estancia con la piscina circular del edificio termal (2001).

CILNIANA 77
YACIMIENTO ROMANO DE LA FINCA “EL SECRETARIO”

Fragmento de pintura parietal (zona de las termas).

Tan necesario proyecto deberá de esperar mente oculto por la autovía colindante). Como
hasta el año 1997 para el arranque de las obras, resultado de las mismas se ha podido poner al
que correrán a cargo de la Escuela-Taller Finca El descubierto una construcción, en muy buen
Secretario en dos fases 1997-1999 y 1999-2001. estado de conservación, que gira entorno a un
A lo largo de todo ese tiempo se producirán al- patio porticado decorado con un mosaico
gunas novedades tanto en el equipo técnico como geométrico policromo, constituido por círcu-
en los resultados arqueológicos. los intersecantes, ampliamente representados
en el mundo romano. En torno al mismo se
En el primer caso la presencia de un nue- distribuyen diversas estancias con uso diver-
vo arquitecto, D.ª Maite Oria Abad, que deberá so. El área que más llama la atención es la zona
atender las sugerencias calefactada, compuesta
marcadas por la Comi- de cuatro habitaciones
sión Provincial de Patri- (dos tepida-rium, un
monio Histórico, dando frigidarium y un
lugar a la modificación caldarium), dos de ellas
de algunas de las ideas con el hipocausto en
originales. muy buenas condicio-
nes. En una de estas es-
En cuanto a los tancias se inserta una
aspectos arqueológi- gran piscina circular.
cos 6 se llevarán a cabo
varias intervenciones Especialmente
arqueológicas de ur- significativos son los
gencia centradas en la aspectos decorativos
delimitación del edifi- del edificio, de los que
cio termal (aún parcial- Placa cerámica decorada. ya hemos apuntado al-

78 CILNIANA
YACIMIENTO ROMANO DE LA FINCA “EL SECRETARIO”

Fragmento de pintura parietal (zona de las termas).

Las excavaciones, desarrolladas por el arqueólogo


D. Fernando Villaseca Díaz (en 1991), ponen a la luz un
conjunto de gran interés, constituido por un área industrial,
formada por una factoría de salazón y varios hornos...”

CILNIANA 79
YACIMIENTO ROMANO DE LA FINCA “EL SECRETARIO”

gún dato. Se han do algunas espe-


encontrado di- Es pues un agradable paseo en el que no sólo nos cies botánicas
versas placas ce- acercamos al conocimiento y disfrute de nuestro muy conocidas y
rámicas decora-
das con motivos
pasado sino que también estamos en condiciones utilizadas mundo romano.
en el

florales, pinturas de comprobar el final feliz de un proceso... en el


parietales “in que un grupo de alumnos, monitores y técnicos de Es pues un
situ”, diversas es- la Escuela-Taller de la localidad han contribuido a agradable paseo
tancias decora- en el que no sólo
la puesta en valor de nuestro legado histórico
das con mosaicos nos acercamos al
en sus suelos así conocimiento y
como fragmentos de mosaicos parietales. De disfrute de nuestro pasado sino que también esta-
este conjunto material cabría destacar los múl- mos en condiciones de comprobar el final feliz de
tiples fragmentos de pintura parietal hallados un proceso que comenzó hace poca más de vein-
en el interior de la gran piscina circular, entre ticinco años y en el que, como ya ocurriera en el
los que se han podido identificar diversos mo- Castillo de Sohail un grupo de alumnos, monitores
tivos vegetales y varias figuras humanas. Todo y técnicos de la Escuela-Taller de la localidad han
contribuido a la puesta en valor de nuestro legado
histórico, esfuerzo que el paso del tiempo será
capaz de valorar en su justa medida.

Notas
1
En 1985 entra en vigor la Ley del Patrimonio Histórico
Español y en 1991 la Ley del Patrimonio Histórico de Andalu-
cía.
2
ATENCIA PÁEZ, R. y SOL A MÁRQUEZ, A.: “Arqueología
romana malagueña: Fuengirola”, Jábega, 23 (1978), pp. 73-84.
3
PUERTAS TRICAS, R.: “Hallazgo de una escultura de Ve-
Plano de planta del yacimiento con el recorrido para nus en Fuengirola”, Mainake, 2 - 3 (1980-81), pp. 122-129.
la visita (2002).
4
La escalinata tubo que ser extraída de su emplazamiento
original para evitar su destrucción, instalándose provisional-
mente en los terrenos que hoy ocupa la Residencia Montemar
ello no hace más que aumentar el interés por (junto al río de Fuengirola). En 1995 fue devuelta al yacimien-
este yacimiento que esperamos se vea aumen- to, integrándose en el pasillo perimetral que circunvala el yaci-
miento.
tado a la conclusión de la memoria científica 5
Los trabajos arqueológicos se circunscribieron a la estre-
de los trabajos desarrollados en el complejo cha franja de terreno por la que iban a discurrir las obras.
termal. 6
A partir de 1997 asumo la dirección de los trabajos ar-
queológicos que tienen lugar en el yacimiento, contando, en la
Un paseo por el pasado romano recta final de los mismos, con la colaboración del arqueólogo
D. Juan Cisneros Franco.
de Fuengirola

El recorrido de este nuevo


espacio cultural abierto al públi-
co se inicia en el pabellón de ac-
ceso en el que los visitantes ob-
tienen los primeros datos acerca
del descubrimiento del yacimien-
to y su proceso de recuperación.
A partir de ahí, a través de un pa-
sillo perimetral, se realiza un acer-
camiento a las tres zonas exca-
vadas: factoría de salazón, alfar y
edificio termal. Cada una de ellas
cuenta con paneles explicativos en
español e inglés en los que, junto
a los datos descriptivos de los di-
ferentes espacios, se da una infor-
mación más general sobre aspec-
tos sociales y económicos. A lo
largo del recorrido se han planta- Vista general del pasillo perimetral y de los puntos de información.

80 CILNIANA
La Industria Papelera de Mijas
en tiempos de la Industrialización Malagueña*
José Carlos Balmaceda

Continuando con la línea de investigación sobre la fabricación del papel en la provincia de Málaga,
iniciada con la publicación del libro “Los batanes papeleros de Málaga y su provincia” (Universidad de
Málaga 1998), en este nuevo trabajo se estudian y exponen algunas cuestiones significativas sobre la
evolución de los aspectos económicos de la fabricación del papel, que convirtió a la villa de Mijas en la más
importante productora de la provincia y el resto de Andalucía durante casi todo el XIX.
Se analizan, también, los aspectos técnicos y sociales más relevantes que sufrió esta manufactura y sus
integrantes desde los orígenes a fines del siglo XVIII, junto al importante incremento de su producción,
durante la industrialización de Málaga, y las causas que produjeron la decadencia de esta manufactura
a fines del siglo XIX.

La villa de Mijas a fines del XIX. Foto: Colección MHEM.


* La industria papelera de Mijas. Una frágil prosperidad en el siglo
de la industrialización española, Colección Osunillas, Museo
Histórico Etnológico de Mijas, 2003

LOS PRIMEROS BATANES PAPELEROS damiento, éstos estaban activos como míni-

L
mo una década antes, o sea, a partir de 1790.
os primeros batanes de papel de Mijas, se- La Real Cédula de Carlos III del 26 de octubre
gún el primer registro documental encontra- de 1780 concediendo diferentes gracias y fran-
do, corresponden a la última década del siglo quicias para el fomento de todas las fábricas
XVIII y eran propiedad de Francisco Saénz de de papel de estos reinos, coincide con la crea-
Tejada. Por los términos del contrato de arren- ción de otros molinos de papel de la provincia

CILNIANA 81
L A INDUSTRIA PAPELERA DE MIJAS

o la adaptación de algún harinero a los que ya En Osunilla se continuó igual hasta la dé-
nos hemos referido. cada del cincuenta que se triplicaron las tinas y
los operarios, curiosamente, en todos los
En el censo de manufacturas de 1784 se batanes, logrando una regularidad más que uni-
contabilizaron noventa y siete batanes en Anda- forme en la producción pero siguiendo con la
lucía, todos movidos por energía hidráulica, sal- fabricación tradicional. Según la ley de contribu-
vo uno en Jerez que lo hacía por tracción a san- ción industrial y de comercio vigente a partir del
gre. Todos se dedicaban a abatanar paños salvo 1 de enero de 1851, firmada por el Ministro de
uno en Jerez que lo hacía con pieles. No se hace Hacienda Sr. Juan Bravo Murillo, se pagaba 90
ninguna referencia que los hubiera relacionados reales por cada tina de papel de estraza y 144
a la fabricación del papel en Mijas o en la costa por las de papel blanco común, blanco o de co-
occidental. El Censo cita 13 molinos de papel lor de embalar.
existentes en Andalucía, 1 en Gandul-Marchenilla
(Sevilla), 1 molino en Santa Mª Transierra en Cór- Los batanes eran alimentados por los na-
doba, 1 en Baza, 1 Guadix y 2 en Vélez de cimientos y arroyos que conducían sus aguas al
Venaudalla en Granada, y en la provincia de Má- cauz o canal, cayendo y presionando sobre una
laga los 5 de Francisco Medina en Antequera, el rueda que al golpearla hacia contrapeso ponien-
molino en Maro (Nerja) de Manuel Centurión y el do en movimiento el árbol de transmisión. Éste
de Frigiliana con una producción de los malague- transfería el movimiento a una serie de mazos
ños de 3300 resmas de papel blanco y 18.700 de madera, que en sus extremos estaban herra-
resmas de papel de estraza, lo que limita esa in- dos con diferentes clavos. Estos mazos batían
formación. Según nuestra investigación, que ya dentro de unas pilas de piedra sobre una base
documentamos en nuestro anterior trabajo metálica, hasta lograr un total y controlado
(1998), casi cien años antes de la fecha del Cen- desfibramiento de los trapos de lino y cáñamo, y
so, se encontraban activos los dos batanes de otras materias útiles, oportunamente preparados,
Torremolinos1 y los dos de la ciudad de Málaga en un caldo o pasta de aspecto lechoso.
(cuadro nº 1).
La forma y la dimensión de los clavos de
Recién en la segunda década del XIX vol- los mazos determinaban la consistencia de la
vemos a encontrar en los repartimientos vecina- pasta y en consecuencia el gramaje de la hoja de
les efectuados por el Concejo municipal la espe- papel a formar o producir.
cificación de sus artesanos, donde figuran
bataneros de papel y la existencia de otros La pasta se llevaba a la tina donde se di-
batanes. luía en las proporciones elegidas en agua y luego
se colaba con la forma, que tiene bordes en sus
Cuadro n.º 1 lados y una filigrana, por lo general, en el centro,
Molinos y batanes de papel en Málaga (1784). compuesta de una red o trama metálica4. La pas-
ta se adhería a la trama de la forma, para luego
ser transferida sobre un fieltro o sayal, interca-
lando de este modo una cantidad de hojas y fiel-
tros hasta completar una posta que se compone
de 261 pliegos.

Luego ambos, o sea, los pliegos y los


sayales alternados, se colocaban en la prensa para
*Fuente: Censo de manufacturas de 1784.
eliminar el exceso de agua y, después de retirar-
**Fuente propia publicada (1998), op. cit.
las de ésta, se procedía a desprender o separar
las hojas, una por una, de los sayales y se condu-
LA FABRICACIÓN DEL PAPEL cían al secadero, ubicado, generalmente, en el
piso superior del batán o molino, que contaba
El proceso de elaboración del papel era con numerosas aberturas o ventanas, ya que el
el mismo que se usaba, prácticamente, desde aire era fundamental en esta fase del proceso. En
la época medieval en Europa 2, hasta el segun- Mijas también se secó al aire libre en zonas repa-
do tercio del siglo XIX, que se incorporan en radas del viento.
algunas fábricas mejoras tecnológicas. La in-
corporación del cilindro holandés es tardía, los Luego las hojas eran encoladas, y por lo
primeros se incorporan en los molinos de tanto nuevamente prensadas y secadas, según la
Benalmádena en la segunda década3 , y luego suerte producida5, alisadas y empaquetadas des-
se agregarán las máquinas de papel continuo pués de ser cuidadosamente seleccionadas, con-
a mitad del XIX. tadas, y agrupadas hasta conformar una resma o

82 CILNIANA
LA INDUSTRIA PAPELERA DE MIJAS

una bala, o sean 500 hojas la primera y 10 resmas Ésta consistía principalmente en el abas-
la segunda, para finalmente proceder a su distri- tecimiento de la materia prima, controlar el régi-
bución y venta. men de agua, con el componente meteorológico
que incidía casi siempre en el producto final, y lo
A continuación anotamos una simple des- más importante, la supeditación a la demanda y
cripción sobre la elaboración del papel de estra- oferta, o sea, la venta del producto.
za 6, que se refiere sólo al preparado de las viejas
alpargatas. Éstas se llevaban al pudridero colo- La fabricación de papel no estaba circuns-
cándolas sin cortarlas, como se hacía con los tra- crita en sí misma, distintos grupos intervenían
pos, ya que se hará con más facilidad estando en ella, escribanos, formeros, sacadores y trans-
algo corrompidas. Se esparcía en el pudridero una portadores de piedras, los encargados de prepa-
cama de alpargatas que luego se rociaba con agua, rar y mantener el cauce y las acequias, taladores
añadiendo otra que nuevamente se mojaba, y así para la obtención de la madera, albañiles, los que
hasta lograr una altura de cinco o seis palmos7 recogían y los que comercializaban el trapo, la
que se apretaban bien y se dejaban en reposo 10 cola, la madera y las cuerdas, principalmente.
o 12 días, en los cuales con aquella poca hume- Aunque uno de los más importantes era el car-
dad “se calentaban tanto como el estiércol”. Lue- pintero, de fundamental importancia en la cons-
go se sacaban del pudridero y cortándose en pe- trucción y mantenimiento de la maquinaria y
dacitos no mayores de dos dedos sobre un pi- otros accesorios del molino8, además de actuar
lón, se llevaban a las pilas del molino de mazos, cuando se lo requería como perito para evaluar
y cuando estaba preparada la pasta se ponía en de forma integral los batanes o molinos junto al
la tina sin otra preparación, formando los plie- maestro de obras, ante quiebras, deudas, litigios,
gos que entre sayales se prensaban y se tendían embargos, disoluciones societarias, sucesiones
en el secadero o mirador, que después y sin nin- y testamentos.
guna otra operación se contaban y se formaban
las resmas para su venta. En la villa actuaban en 1807 como tasado-
res de molinos y casas mesones el maestro car-
EL PROYECTO MIJEÑO pintero José Carlin, los maestros de albañilería
José Gamberos y José Barranquero, y como “pro-
El proyecto productivo mijeño estaba fun- fesor de picapedrero” José García9. En 1837 el
damentalmente basado en la fuerza del trabajo costo de valoración de los maestros de albañile-
impulsado por el extraordinario desarrollo de la ría, carpintería y alamines de una finca con un
industria, el comercio y la demanda malagueña, molino harinero fue de 300 reales10.
compuesto de todos los aspectos materiales que
pertenecen al proceso de producción: el tiempo, A mediados del siglo XIX, Mijas experimen-
los materiales a emplear y demás fórmulas con- ta su época más productiva, y se produce el arri-
tractuales en donde la figura del maestro, que en bo, junto con papeleros del levante valenciano,
la práctica gobierna el batán, oscilaba entre el de un carpintero de Alcoy al que acompaña la
hacedor de la manufactura y el autónomo agen- jerarquización de “mecánico”11. También se ins-
te comercial de su producto. tala en la villa un trapero, con seguridad para estar
junto a la industria donde vende-
Cuadro n.º 2 ría lo recogido por él y el resto
Duración y renta de los contratos de arrendamientos. de los traperos que le proveerían
también de trapos y de otras ma-
terias reciclables, no sólo en la
villa, también en los pueblos ve-
cinos y especialmente en Benal-
mádena que también gozaban de
su mejor época.

Estos vínculos específicos


y funcionales nos muestran que
Elaboración propia. todos juntos constituían una
unión exclusiva de esta manufac-
La tendencia era hacer todo lo relaciona- tura, entre la sociedad y el batán papelero.
do con la fabricación caracterizada por una eco-
nomía familiar o individual, casi siempre ligada a Al comienzo de la fabricación en la villa
la actividad agrícola y ganadera, que a veces pro- sólo el grupo familiar se bastaba para atender la
ducía una discontinuidad en la producción del producción llevada a cabo en estos batanes. Por
papel. lo general, como veremos, eran edificios de apa-

CILNIANA 83
L A INDUSTRIA PAPELERA DE MIJAS

riencia rústica similar a la de cualquier casa, de 500.000 estampas, además de un número con-
reducido tamaño y una capacidad de producción siderable de envases de pasas13.
relacionada a una sola rueda y una sola tina, con-
centrando todas las tareas en el mismo y com- No olvidemos, además, que a partir de 1780
partido, generalmente, con la vivienda del maes- y durante más de veinte años, no sólo los molinos
tro propietario o el arrendatario y su familia. de Arroyo de la Miel, sirvieron el papel blanco y
estraza a la Real Fábrica de Naipes de Macharaviaya,
A partir de 1830 se producirá una trans- también lo hicieron los de Torremolinos y, con se-
formación en las instalaciones y la regulación en guridad, los que estaban activos en esos años en
los aspectos productivos. La cantidad de tinas y el resto de la provincia considerando la crónica
operarios se triplicaron como consecuencia de carestía de papel de la Real Fábrica.
la producción demandada que queda reflejada en
la guía mencionada. Aunque no deja de sorpren- Sólo en el molino de papel blanco Santa
derme tal incremento, que creo excesivo, ya que Rita y la fábrica Nuestra Señora de la Victoria tu-
a fines del XIX volvemos a encontrar a los batanes vieron una producción importante de distintos

Boceto de un molino de papel con sus ruedas. S. XVIII.

trabajando con una sola tina cada uno como en tipos de papel blanco de imprenta, azulado, azul
la primera mitad del siglo. y para lechos la primera, y de envolver y carto-
nes la segunda, que fue galardonada en la expo-
LA ESPECIALIZACIÓN PAPELERA sición de Málaga de 1862 organizada por la So-
MIJEÑA ciedad Económica de Amigos del País, con la
medalla de plata de primera clase al mérito, aun-
El grueso del papel que se producía en la que para esos años sólo Rafael Abad fabricaba
costa se utilizaba principalmente en el empaque- papel blanco, el resto producía una gran produc-
tado del limón, los pilones de azúcar, la ción de papel de estraza de “moldes de marca
especiería, las prensas de lana o seda, y princi- mayor, del medio y chica”14, de envolver, resmas
palmente en la pasa, los higos secos, entre otros para cartuchos grandes y pequeños y los papeles
muchos frutos y mercancías. Para imprenta, es- para lechos de 1º, 2º y 3º clase15.
critura y estampas, que a partir de mediados del
siglo XIX fomentará la creación de fábricas de Nuestro papel de estraza artesanal o de
envases y el desarrollo de varios talleres tina muchas veces definía la ocupación principal
litográficos12 que se ocuparán de imprimir los del molino que se dedicaba a producirlo en ex-
carteles, etiquetas y el famoso papel de lechos, clusividad, como fue el de los batanes de la costa
sobresaliendo la fábrica de abanicos de Rafael malagueña, diferenciándose del que fabricaba el
Mitjana fundada en 1825 e incrementada su pro- blanco. A fines del XIX se limitará su producción
ducción con estampas litográficas en 1830. A con la aparición de los distintos papeles de en-
principios de los cincuenta anexará la elabora- volver que proliferarán con la posibilidad de uti-
ción de papeles pintados. Para 1862 se estima lizar las nuevas materias primas y la maquinaria
su producción en 200.000 abanicos y 400 a para manufacturarlos.

84 CILNIANA
LA INDUSTRIA PAPELERA DE MIJAS

EL PAPEL DE LECHOS personajes incluidos en el diseño de la litografía


de la fábrica de Oliver y Brú, aluden a los que
Uno de los más famosos productos agrí- llevaban estos papeles que fabricaba y por los
colas malagueños fue la pasa, que tuvo una gran que se le premiará en 1862.
demanda y generó un inmenso desarrollo, du- En este periodo pueden recogerse múlti-
rante casi todo el siglo XIX en los batanes de papel ples anuncios, como los de los hermanos Carre-
de la costa, y sobre todo en los de Mijas. ras que informan tienen en su imprenta y librería
“a precios de fábrica papel para cajas de pasas,
La pasa es la uva desecada por la acción con toda equidad”.
del sol. En Málaga se usó principalmente la
moscatel, y también la larga. El sistema que se El establecimiento litográfico de Pérez y
empleaba, y se emplea16, en la provincia fue el de Berrocal incluía en sus anuncios, también de for-
secado por el sol. La acción del aire y el sol enju- ma destacada que “reproducía grabados en ma-
gan esta fruta, evaporando la parte acuosa que dera por procedimientos especiales, viñetas y
puede oponerse a su conservación y dejándola lechos para cajas de pasas, cajitas y cartuchos
azucarada dentro de la película, que se pone flexi- para dulces”.
ble y suave. Estas se colocaban en los paseros, a
los que se les construían toldos con lona o ma- Por su parte el litógrafo Fausto Muñoz, que
dera, que las preservaban de los efectos de la también imprimía “lechos y viñetas para cajas de
noche y en los días lluviosos. pasas y cartuchos”, expuso trece cajas de lujo
para pasas hechas en su fábrica en la exposición
Este procedimiento, o sea, el natural, es organizada por la Sociedad Económica.
el que ofrecía los mejores resultados y así las
pasas de Málaga fueron consideradas Un año después en otro periódico, en un
irremplazables y adquirieron desde antiguo fama extenso aviso, reseñaba los premios obtenidos y
universal. Había otros procedimientos como el reiteraba la impresión de papel para pasas y ofre-
de la lejía que practicaban en Denia y Gandía, o cía la “fabricación de envases para frutos, dul-
el sistema industrial rápido de aire caliente, que ces, y un gran surtido de cajas y cartuchos
consistía en colocar las uvas en unas largas cajas, litografiados, desde la más corriente a las más
de paredes bajas, con una estufa que calentara el lujosas en raso y terciopelo. En la exposición de
aire y que éste pasara sobre las uvas, 1877 Rafael Sturla y Felipe Casado presentaron,
desecándolas. Lamentablemente la filoxera de también, cajas para pasas, y Jaime Janer bande-
julio de 1878 abatió la provincia de Málaga, y jas de papel para el mismo producto.
aceleró junto con otros factores la decadencia
de la industria papelera. Hoy queda una mínima expresión, pero
suficiente para admirar e imaginarnos la riqueza
El tipo de papel que se utilizaba como y variedad de los diseños que se produjeron19. La
soporte y envoltorio de la pasa era el llamado calidad del papel usado varió desde el de estra-
“papel de lechos” que fue el de mayor utilidad za, verjurados y como simple lecho, hasta los más
en la provincia, y que anunciaban y vendían, apar- finos blancos continuos en los envases
te de los fabricantes a pie de fábrica y en sus litografiados de súper lujo.
tiendas, los almacenistas de venta por mayor y
menor de la ciudad17, con un llamado especial. EMPLAZAMIENTO Y VÍAS DE
Los fabricantes catalanes Poch y Creixell, radica- COMUNICACIÓN
dos con comercio e imprenta en Málaga, se re-
fieren a esta suerte, como el “exquisito papel de El núcleo urbano de Mijas se encuentra a
lechos”. 428 m de altitud sobre el nivel del mar y recosta-
do sobre la falda de la sierra que lleva su nom-
Este papel se colocaba en el fondo del ca- bre, o el de Blanca, junto a la llamada Bermeja, y
jón, caja, o estuches llamados “catites” en suce- que alcanza en sus cotas más altas los 1.150 m.
sivas capas de papel, formando una cama, col- Dista 8 km de Benalmádena y 32 de Málaga. Sus
chón o lecho, donde luego se disponían los raci- tierras estaban bañadas por innumerables arro-
mos de pasas alternativamente, aunque había un yos20, siendo los ríos Ojén y Las Pasadas los que,
formato generalizado en el que variaba la rique- unidos para formar el Fuengirola, convierten sus
za de su decoración. Una descripción al referirse tierras en un fértil valle.
a este soporte preparado para los envases de lujo
dice: “los lechos de papel guarnecido de aurífero Según el catastro del Marqués de la Ense-
encaje y matizado por abigarrados colores que nada su extensión y límites eran los siguientes:
describían majos y manolas”18 estampados por “de levante a poniente tres leguas (16,729 km),
la famosa industria litográfica malagueña. Los de norte a sur dos (11.151 km), y de circunferen-

CILNIANA 85
L A INDUSTRIA PAPELERA DE MIJAS

cia diez leguas y media (58.548 km). Linda por la confluía el camino real que unía Álora con
parte de levante con él termino de la villa de Marbella, separándose en la confluencia de los
Benalmádena, por poniente con el de la ciudad ríos Casarabonela y Guadalhorce el camino Má-
de Marbella, por el norte con el de las villas de laga-Ronda.
Alhaurín el Grande y Alhaurín de la Torre, y por
el sur con la playa del mar”. El trayecto en carruaje o a caballo desde
Málaga hasta Arroyo de la Miel se hacía en cua-
El entorno geográfico donde se encontra- tro horas, y a Mijas en cinco o seis según las es-
ban emplazados los primeros molinos nazaríes taciones.
respondía a las condiciones ideales para su fun-
cionamiento, luego se irá agregando el resto de FUERZA MOTRIZ
los molinos harineros, de aceite, hasta la instala-
ción de los primeros batanes de papel en el en- Los factores esenciales en la industria pa-
clave ideal que fue Osunilla. pelera eran el suministro de agua, las materias
primas y la posibilidad de contar con mano de
Uno de los requisitos para lograr un buen obra especializada. El cálculo de agua que se usa-
desarrollo y sobre todo la distribución de la pro- ba en la fabricación manual era de 1.000 a 2.000
ducción, en esos años, era la localización de los litros por kilogramo23. Debemos saber que no
molinos cercanos a la ciudad y sobre todo y, en bastaba que se encontrase en abundancia, sino
este caso, a su puerto. Mijas enviaba casi todos que, además, debía reunir cualidades de limpie-
sus productos desde Fuengirola por el mar21, aun- za y ricas en cal, como una condición primor-
que también tenía una buena comunicación te- dial. Esta pureza condicionaba la blancura del
rrestre que se usaba alternativamente para los papel, ya que si venía sucia, con tierra o tintes,
pueblos vecinos y del interior. Éstos caminos eran sólo se podía utilizar para el papel de estraza,
de herradura. que por el contrario en este caso veía favorecida
su calidad.
La red de comunicaciones partiendo de
Málaga y siguiendo el litoral se hacía por el ca- A partir de fines del siglo XVII y durante el
mino real22 que conducía a Marbella por el oes- XVIII y XIX se crean situaciones problemáticas
te. Por razones de seguridad, se despegaba bas- sobre la utilización del agua para el riego de tie-
tante del litoral pasando por Benalmádena y rras, y por lo tanto, hacer rentable los cultivos.
Mijas, situación que se mantuvo hasta bien en- Algunos vecinos capitalizaban el privilegio de
trado el siglo XVIII, descendiendo a la costa a la posibilitar el pasaje del agua, cobrando muchos
altura de Fuengirola siendo esta ruta segunda reales para el riego, como nos ilustra el contrato
en importancia. El camino de más importancia que llevaron a cabo el molinero Antonio de Luna
era el que unía la capital con la ciudad de Grana- y Rafael de Sepúlveda y Lara de la fábrica Santa
da y que pasaba por Vélez Málaga, Zafarraya y Rita. El primero había construido un molino ha-
Alhama. rinero en los Espartales, y para “el curso de las
dos paradas” contrató, con el primero, abrir a su
El camino que bordeaba la sierra de Mijas costa dos acequias para que llevasen el agua del
por Alhaurín, Coín, Monda, Ojén, era el más lar- nacimiento las Pavitas, una al molino y la otra
go, siendo el más frecuentado, ya que en Coín para el riego de sus huertas, previa autorización
de los peritos que ta-
saron el paso del agua
en la cantidad de 300
reales de vellón a favor
del vendedor, quedan-
do, además, para
Sepúlveda la propie-
dad y el aprovecha-
miento de los árboles
y frutos que se com-
prenden en el margen
de una y otra acequia.
Se aclara también que
las aguas usadas en el
molino sólo podían
conducirlas luego a los
otros hacendados para
Transporte del papel a lomo de burro. Xilografía siglo XIX. riego 24. En 1844 Do-

86 CILNIANA
LA INDUSTRIA PAPELERA DE MIJAS

mingo Sáenz de
Tejada llegó a pagar
1000 reales por la
compra25 de 5 horas
diarias de agua del
nacimiento las Pavi-
tas, cada jueves, con
una tasación pericial
del 4 % de recauda-
ción municipal. Del
mismo nacimiento,
en 1858, ½ hora de
agua se vendía en
250 reales 26, elevan-
do el costo un 150 %
más que la compra
anterior.

Otra especu-
lación fue privatizar
el agua acaparándo-
la en represas, crean-
do por lo tanto mu-
chas tensiones y lle-
Represa de agua frente a un molino.
gándose a procesar a
los especu-ladores27. Un litigio, que llegó a las o represas de agua que llevaban el nombre de
Cortes de Granada, relacionado con las aguas para “Piña” y “del Portón”35, entre otros pequeños cau-
los molinos fue el protagonizado por una de las ces y torrentes ocasionales. Las dimensiones de
hijas de Francisco Sáenz de Tejada, propietario éstas represas eran de 6,68 m de largo por 5,85
de los batanes Antiguo y de Abajo, que impidió m de ancho la primera36, o 14,21 m de largo por
el curso natural hacia los Espartales, aprovechan- 4,18 m de ancho la segunda37. En nuestro traba-
do que el nacimiento se encontraba en sus tie- jo anterior hemos registrado en Torremolinos la
rras 28. utilización de represas para un molino de papel
en 175538.
Sin embargo, el agua era abundante y per-
manente, incrementada al avanzar el siglo XIX Durante el siglo XIX el nacimiento Nue-
con el descubrimiento de nuevos nacimientos y vo o Andalubio, como se le llamó a partir de
el aprovechamiento reglamentado por los alcal- 1830, fue vital para el funcionamiento de va-
des del agua de los cauces y remanentes según la rios batanes, aunque en 1871, también, lo en-
importancia, y por lo tanto las necesidades por contramos llamado “Guillén” 39 nombre que
el aumento de la producción molinera, agrícola y también se usó para llamar a otro cauce y una
sobre todo la papelera. En general, ante la solici- acequia40 .
tud de apertura de un batán, se hacía un estudio
del potencial de las aguas y si el nuevo uso re- En 1877, frente a la utilización que se ha-
querido no podía causar perjuicio “al común o a cía de sus aguas, la ya creada Comunidad de
otros particulares” se autorizaba. Se prohibía la Regantes del nacimiento Nuevo establece una
toma de agua de los molinos a los labradores29. ordenanza ante la necesidad de regular su uso
de manera equilibrada ante la variedad y canti-
En el partido de Osunilla donde se encon- dad de usuarios.
traban la mayoría de los molinos había sido, des-
de el principio, canalizado hasta éstos las aguas Una referencia de suma importancia so-
de los nacimientos llamados “las Pavitas” y “el bre la valoración de las aguas, es la que nos brin-
Pantano”, cercano éste a la ermita de San Antón, da el inventario del molino San Bonifacio de Arro-
llamado antiguamente “el de la fuente de yo de la Miel, que valora sus aguas en 20.000
Osunilla”30, el arroyo de Pedro Gutiérrez31, el na- reales, representando el 14 % del valor total de
cimiento Tejarejos, el arroyo de la Chorrera32 y la fábrica.
el nacimiento del Piojo33.
Por lo tanto la abundancia en Mijas fue un
En Osunilla la Baja se contaba con las aguas factor muy importante ya que determinó la con-
del nacimiento de los Juanes34 y los remanentes tinuidad de la producción de las tinas en canti-

CILNIANA 87
L A INDUSTRIA PAPELERA DE MIJAS

Cuadro n.º 3 MATERIAS PRIMAS


Nacimientos y causes de agua al servicio
de los batanes papeleros. El trapo había sido y era desde la edad me-
dia la materia única y por lo tanto imprescindible
siempre escasa para proveer y satisfacer la deman-
da de los molinos papeleros españoles que durante
mucho tiempo carecerán de éstos por que se
priorizó su exportación a Génova, el gran produc-
tor de papel sellado para la Corona. Precisamente
esa escasez crónica, y agravada, además, a partir de
la generalización del cilindro holandés, conducirá a
Occidente en el siglo XVIII a imaginar sucedáneos
vegetales hasta llegar a la madera, a mediados del
XIX, precipitando su entrada en la era industrial.
Elaboración propia. Fuente: AHPM.
* Desde mediados del XIX proveerá el agua a la mayoría de los molinos. Según el Censo de 1799 se necesitaba para
elaborar una resma de papel sellado, o sea, el de
430 x 315 mm el pliego; 690 gr de trapo, 230 de
dad y calidad convirtiéndose en un valor econó- cola y 5 gr de alumbre.
mico primordial. En muchas otras zonas papele-
ras de España, durante el verano, la escasez deja- Reiteradas prohibiciones de la extrac-
ba inactivos a muchos molinos papeleros total o ción del trapo por parte de los mercaderes y
parcialmente. fabricantes extranjeros 42, y ordenes para que
el recogido en las colonias fuese traído a la
No he encontrado ninguna referencia con- metrópoli, privilegios a ciertos fabricantes para
traria y es muy escasa la inclusión de alguna cláu- poder reservarse el recogido de tal ciudad o
sula especial sobre la escasez de agua en los con- región 43, hacían de estos raídos, usados y su-
tratos de arrendamiento41. cios restos de lino, algodón y cáñamo, un bien,

Choza de traperos a fines del siglo XIX en Málaga. Col. Malagueña. AMM.

88 CILNIANA
LA INDUSTRIA PAPELERA DE MIJAS

más que preciado, absolutamente necesario de Cádiz hacia Barcelona, aunque también se en-
para esta industria. vían a esta ciudad trapos malagueños45.

El trapo era la
materia prima funda-
mental para la elabora-
ción del papel como ya
se ha repetido y su cos-
to de vital importancia.
Éste en el último cuar-
to del siglo XVIII y prin-
cipios del XIX repre-
sentaba, según las va-
riaciones de calidad,
desde el 37 hasta el 66
% del costo total, según
se fueron incremen-
tando la cantidad de
tinas y sobre todo los
cilindros.

Los pequeños y
recién creados batanes
de la costa de Málaga
a fines del XVIII y prin-
cipios del XIX sufrieron
la causa de esta infla-
ción, aunque los tra-
pos requeridos en la
mayoría de los batanes
eran de calidad infe-
rior, como reducido el
consumo de cola, ya
que el grueso de su
producción fue el pa-
pel de estraza. De to-
das maneras, en este
aspecto, la proximidad Mujeres en el escogido de los trapos. Grabado L. J. Gloussier y Bernard. S.XVIII
de las tenerías de Arro-
yo de la Miel y Mijas y de la capital favorecía la Los representantes, especialmente de Bar-
compra de las carnazas, materia base para hacer celona y Valencia, para la venta del papel, resi-
la cola. dentes en las distintas provincias eran los que se
encargaban de la compra del trapo y las carna-
Sólo Mijas consumía por año (cuadro nº zas. Durante el siglo XIX en la ciudad de Málaga
11), siempre tomando la referencia de 1862, se encuentran a varios almacenistas de familias
2.432 Kg de trapos blancos, 69.366 Kg de trapos papeleras de esas ciudades. Esto perseguía obte-
de color, alpargatas de esparto, trozos de redes y ner, además de la materia prima, precios más con-
el reciclado del papel de desecho de pasas y car- venientes en lugares apartados de sus centros de
tones usados, 874 kg de cola y 19 Kg de alum- producción, que en los cercanos.
bre, sin estimar la cantidad de cloruro de cal.
En 1871 el trapero Antonio Casorla natu-
Los trapos se compraban, por lo general, ral de Viator (Granada), se instala en Mijas con su
en la ciudad de Málaga y su traslado por mar se familia. Su mujer era de Alhama Seca y sus hijos
abonaba a 4 reales el quintal44, igual que las car- habían nacido, uno en Santa Fe y el otro en
nazas, y se aprovechaba el viaje para transportar Alhama, ambas de Granada. Los distintos oríge-
el papel a la ciudad, que se pagaba a 4 reales la nes es prueba de la permanente movilidad que
bala de 10 resmas en 1830. les exigía la búsqueda y la compra de trapos y
papeles viejos y usados. Se reciclaba principal-
Por estos años se registran en el puerto mente el papel usado como simple lecho de las
malagueño la entrada de trapos y carnazas des- pasas que luego se descartaba, como el que en-

CILNIANA 89
L A INDUSTRIA PAPELERA DE MIJAS

volvía algunas frutas en su traslado a los lugares Rodríguez, para irse a trabajar a un molino de
de venta al público 46. Torremolinos,

LA EMIGRACIÓN DE PAPELEROS Los fabricantes Antonio Ridaura y Anto-


VALENCIANOS A LOS nio Colomina precedieron a Jaime Romaní y
MOLINOS DE MIJAS Figueras52, otro fabricante que se instala en la
fábrica de papel blanco de Mijas y, por los mis-
A fines del siglo XVIII la fabricación de mos años se produce la llegada de otras familias,
papel en Mijas, como hemos dicho, tenía una in- que figuran en el padrón de 1851, con apellidos
cipiente producción de papel de estraza en los ampliamente conocidos, por su larga relación con
dos batanes de Sáenz de Tejada en Osunilla la la fabricación de papel en Valencia.
Alta, con la finalidad de utilizar parte del mismo
en el comercio de diversos géneros que tenía en La mayoría venían de Alcoy: Antonio
la ciudad de Málaga, el resto se consumía local- Blanes, Juan Almillan, Vicente Peidro, José Molina,
mente. José Cardenal García, José Satorre, Nicolás Pérez,
Francisco Valor, Bernardino Losano Criado, Anto-
A partir del primer cuarto del siglo XIX lue- nio Miralles Abad y Agustín Gil Peidro. También
go de tantas dificultades, ya apuntadas, cobra una los había de Cocentaina: Francisco y Juan Bautis-
mediana importancia, incrementándose conside- ta Blanes: de Tarragona era Ignacio Esteban (o
rablemente a mediados, donde encontramos tra- Estebes) Casullera. José Doménech Valor de Tibi,
bajando, junto a los mijeños, a los papeleros llega- y de Valencia eran Vicente Tolosa Martínez y José
dos del levante valenciano y catalán en busca de Botella, cuyas mujeres pertenecían, la mayoría,
nuevos horizontes atraídos por el impulso indus- también a familias papeleras de esas zonas.
trial que se había generado en Málaga junto con
otros de Coín, Antequera, etc.47, donde la indus- Este primer registro nos muestra un per-
tria papelera de estos pueblos entraba en deca- fil de jóvenes parejas, que en los padrones de
dencia, por muy variados motivos ya expuestos 48. años más tarde encontraremos ya con varios hi-
jos que, como ellos, se implicarán desde niños
En la capital se había producido un conti- en la empresa familiar o se contratarán en otros
nuo crecimiento demográfico49, propiciando a la batanes como aprendices.
mitad del siglo una transformación urbana, favo-
recida, además, por el proceso de la desamorti- No podemos olvidar que en los lugares de
zación, mediante el ensanche de la ciudad, el ati- origen de estos papeleros, a partir de la segunda
rantado y la construcción de nuevas calles, la ins- década del siglo XIX, comenzó a importarse ma-
talación de nuevos servicios urbanos, etc. Es den- quinaria de cardar e hilar, entre otras, producien-
tro de este contexto que los molinos de la costa do un camino muy favorable a la industria lanera
reciben un aumento considerable de papeleros en lo económico y social, principalmente en Alcoy,
que, unos abrirán tiendas especializadas50 y otros afectando a la industria papelera de aquella im-
trabajarán en la fabricación de papel. portante zona, ya que algunos molinos pasaron
a ser textiles, repitiéndose a la inversa lo ocurri-
Ya a partir de su creación la fábrica de pa- do en la mitad del siglo XVIII.
pel blanco Santa Rita tuvo como operarios, ade-
más de sus fabricantes locales, a genoveses, ca- La modernización fue abandonando los
talanes y valencianos que elaboraron papeles jun- métodos artesanos hasta lograr, después de varios
tos con los que llegaron de Antequera, Coín y años, lo que exigía el mercado y las exigencias que
Benalmádena, alternativamente, durante casi el tecnicismo industrial demandaba. Este proceso
todo el siglo XIX, junto al resto de los batanes pudo haber dejado a muchos oficiales y operarios,
instalados en los partidos de Osunilla (Alta y Baja) sobre todo a los más jóvenes, sin ocupación, im-
y los Espartales. pulsando el éxodo a zonas con mayores posibili-
dades laborales y que la “modernidad” no hubie-
Después de los problemas planteados con ra irrumpido con la fuerza de Valencia y Cataluña.
el primer arrendatario de la fábrica, los presbíte-
ros Rodríguez y Sepúlveda propietarios de la fá- Un simple repaso a esas transforma-
brica, contratan como maestro al genovés José ciones53 y sólo por mencionar a las familias de
Ghigliotti51, llegado con toda seguridad años atrás las que luego encontraremos algún integrante en
a las fábricas de papel de su compatriota Félix Andalucía, justificaría su emigración a otras zo-
Solesio, con un ventajoso contrato que abando- nas con posibilidades de expansión.
nará después de muchos años, seguramente de-
bido al cambio en la dirección de la fábrica pro- La viuda de Peidro e hijo, junto con José
ducido a raíz de la muerte del presbítero González de Abad convienen en transformar su

90 CILNIANA
LA INDUSTRIA PAPELERA DE MIJAS

molino de papel. En 1820 Pascual Abad es arren- invierte en la compra de casas y tierras en
datario de un molino convertido. Veinte años Fuengirola, Benalmádena y Mijas en 1872 y 1874.
después Lorenzo Abad comparte su molino de Es evidente, además, su solvencia económica a
papel con la actividad textil. No es extraño en- juzgar por los préstamos efectuados, algunos sin
contrar por lo tanto a Rafael Abad como dueño cobrar intereses.
del único molino que produce papel blanco en
Mijas en el momento de mayor producción. El Antonio y José Satorre junto a Juan Valor
apellido Pérez, conocido también, está asociado compran en 1854 cuarenta acciones, cada uno,
a la industria textil y a la exportación de máqui- de la mina La Victoria recién descubierta en
nas de hilar y tejer movidas ya por vapor en 1851, Benalmadena56 . Ignacio Estebes Casulleras en
como también a la fabricación papelera, de la que 1879 permanecía en Mijas y con asuntos en Bar-
hay referencia de un papelero de nombre José celona donde su padre Ignacio Estebes Domenech
en Tibi. tenía su poder para atenderlos57, Oliver y Brú de
la Pobla de Claramunt también permaneció has-
Por otra parte son muy conocidos los fa- ta su muerte en Málaga, y siguió produciendo
bricantes Botella y José Valor que se había insta- papel su hijo.
lado en la ciudad de Málaga en la década del 30 y
luego en Arroyo de la Miel (Benalmádena), don- Si la oligarquía malagueña practicaba la
de eran propietarios de una fábrica de papel54 y endogamia, la clase papelera también. La mijeña
que fue el primero en producir papel continuo. estaba emparentada entre sí por matrimonio 58,
reforzando y formando una infranqueable barre-
Encontramos una referencia en el partido ra para los demás, y así continuaron.
de Riquer de un Francisco Blanes que poseía tie-
rras lindantes con una fábrica de papel y, a me- Una particularidad de la mentalidad de las
diados del XVIII Luis Blanes poseía un molino de familias papeleras a destacar era la de legar su
papel en el río Molinar. fábrica, que a su vez había sido heredada de sus
ancestros, como en muchos casos los secretos
No sólo fue Málaga destino de estos fa- de la fabricación. Siempre es legada a alguien con
bricantes, en Granada encontramos papeleros la capacidad de ser susceptible de continuar con
emigrados tales como Francisco Pericós casado el trabajo. El resto de los hijos recibe la herencia
con Francisca Gisbert, que se traslada en 1848 en dinero, y en el caso de que sea mujer, ésta se
con dos de sus pequeños hijos, el mayor Francis- casará con un papelero, como veremos en los
co seguirá como papelero en 1888. Vicente Martí capítulos posteriores.
llegó en 1830 y a Francisco Martí lo encontra-
mos activo en 1859, Rafael Pastor ya estaba en Además del intercambio que sin duda se
1825 y Antonio Pastor, viudo, llegará en 1837 produjo entre los locales y los venidos del levan-
con sus dos hijos, José de 17 y Concepción de te, éstos dejaron patente su influencia en los
15. También se instalarán los alcoyanos José mijeños en el cambio de la denominación de su
Bernabé y los hermanos Casanova, entre otros. tarea, de algunos utensilios y productos. Comen-
Por esos años un Pastor fabrica papel en Arroyo zarán a llamarse “papeleros” o “fabricantes” como
de la Miel y más tarde, en 1862, Francisco Pastor en el resto de España en lugar del tradicional
posee dos fábricas, una de papel continuo y otra batanero.
de papel de estraza.
A partir del siglo XX se generalizará, tam-
En 1866 se produce el retorno desde Mijas, bién, el nombre de fábrica, no sólo a la papelera,
suponemos que a su zona de origen, de la mayo- también a las de harina, aceite, conservas
ría de estos papeleros y sus obreros ya que no cárnicas, etc.
figuran como radicados en la villa. La desin-
dustrialización malagueña se producirá claramen- SALARIOS Y TAREAS
te de manifiesto en los años sesenta y una déca-
da más tarde se registra una perdida de pobla- No podemos asimilar la existencia del
ción en la capital, que aunque se recuperará por obrero de la gran fábrica cuya actividad estaba
un importante movimiento migratorio de los pue- enteramente dominada por las necesidades de la
blos cercanos debido al incipiente desarrollo e empresa, a la vida cotidiana del jornalero inte-
involución industrial en los mismos, se agravará grado aún, aunque en parte, a la comunidad ru-
como consecuencia de la irrupción de los prime- ral, pasando por el artesanado.
ros síntomas filoxéricos en las vides malagueñas55.
El artesano papelero, grupo social clara-
Sólo algunos se quedaron e intentaron mente definido59, aparece constituido fundamen-
expandirse a otras actividades. Agustín Gil Peidro talmente por antiguos maestros que entrarán en

CILNIANA 91
L A INDUSTRIA PAPELERA DE MIJAS

la ruina a medida que las nuevas técnicas de pro- conocen la integración de un status similar a los
ducción, y la consiguiente legislación laboral se obreros de fábrica, ni menos aún pueden ser cla-
vayan extendiendo a lo largo del siglo XIX, ante sificados como “pequeños burgueses”60, clasifi-
lo que tendrán que plantearse su actuación futu- cación que ocuparán los funcionarios o el comer-
ra: seguir como artesanos o bien adecuarse al ciante al que le importa el beneficio comercial
nuevo sistema de producción. basado, generalmente, en relaciones de rivalidad
con otros comerciantes.
Aunque éstos se distinguen de los obre-
ros de otras manufacturas conservando una re- Los salarios obreros no cualificados se
lativa autonomía en la organización del traba- sitúan en Málaga en 6 reales, cantidad inferior
jo, ya que dominan una especialización alta- a la de cualquier jornalero. Los jornales mala-
mente cualificada, por lo que no están ínte- gueños en este periodo oscilaban entre los 8
gramente sometidos a una voluntad exterior. y los 14 reales diarios correspondiendo la más
L os maestros papeleros no son mero s alta remuneración a carpinteros, panaderos y
ejecutantes; pese a su situación limitada in- albañiles, y los más bajos al hortelano y jor-
tervienen en la producción y la venta de su nalero de fábrica en 8 a 9 reales diarios, y en-
producto quedando comprometidos en una tre 10 y 12 a los diferentes oficios entre los
estructura económico-social muy particular. No que, como veremos, se encuentran los oficia-
les papeleros.

Se mantiene la diferen-
cia entre los salarios masculi-
nos y femeninos oscilando és-
tos entre la mitad o un tercio
menos del valor que el de los
hombres: alrededor de los 4
ó 5 reales en actividades in-
dustriales, siendo, por otra
parte, verdaderos salarios de
hambre los de la numerosa
población de trabajadores in-
fantiles. Concluyendo, pode-
mos elaborar una escala des-
de los 2 reales de una sirvien-
ta a los 14 de un carpintero,
siendo de 12 reales el jornal
máximo pagado en la indus-
tria papelera local.

Los salarios eran, como


es lógico, diferentes según la
tarea que hacían durante el
proceso de la fabricación del
papel. Se pueden clasificar en
cuatro grupos o clases: trape-
ros, pilateros, oficiales de tina,
aparejadores.

El primer grupo cobra-


ba, según las arrobas del tra-
po escogido, durante las 10
horas diarias de trabajo, entre
10 y 12 reales. La generaliza-
ción de emplear, para estas
tareas, a mujeres sólo perse-
guía rebajar el tanto pagado
por cada arroba, representan-
do del jornal masculino un 30
% menos, como era común en
Oficiales de la tina o del obrador. Grabado Turinés s. XVIII. otras industrias.

92 CILNIANA
LA INDUSTRIA PAPELERA DE MIJAS

En el segundo grupo se encontraban los niños de 6 a 10 años, y su salario era según su


obreros que atendían las pilas o los cilindros y disposición de 15 hasta 30 céntimos de pese-
ganaban por 9 horas diarias en-
tre 6 y 7 reales. Cuando se co-
menzaron a blanquear las pas-
tas estos obreros sufrieron los
efectos nocivos del cloro.

Los que se ocupaban de


la prensa hidráulica, en las fábri-
cas que las habían incorporado,
atendían la producción de dos
tinas, cada uno, por un jornal
semanal de 15 a 17 pesetas, con-
siderando que era un trabajo
muy pesado.

Al tercer grupo pertene-


cían los llamados “oficiales de
tina” o sea, los sacadores,
ponedo-res, levadores y Venta del papel. Xilografía de Torner. s. XIX.
sayaleros. Los dos primeros
ganaban por cada posta61 , que por lo general ta diaria. Los segundos, o sea, los aprendices
les llevaba once horas para cumplir con las con- de 10 a 16 años, ganaban de 2 a 4,5 reales por
día.

Debemos suponer
que estos salarios se apli-
caron, sin descartar varian-
tes, al menos en la elabora-
ción del coste del produc-
to, que es, por otra parte
imposible corroborarlo
ante la falta de documenta-
ción y la inclusión de parte
de la familia en el proceso
Poniendo a secar los pliegos. Xilografía de Torner. s. XIX. productivo.

venidas, un salario de 12,5 reales. La calidad SITUACIÓN LABORAL Y CONDICIONES


de la pasta, con la que formaban el pliego, in- DE SALUBRIDAD EN LOS MOLINOS
fluía mucho en su eficacia. Si tomamos como DE PAPEL
referencia el sueldo de Ghigliotti a principios
de siglo, no hay ninguna diferencia, y éste, Las dimensiones recogidas de los batanes
además, recibía premios por la producción en Mijas en los pocos registros, y en los restos
anual. de los edificios, sin duda con modificaciones
posteriores, que nos han llegado son de reduci-
Del trabajo de los levadores y sayaleros se do tamaño. Además, el grupo familiar del arren-
encargaban los niños, aunque nos parezca increí- datario o el maestro contratado habitaba en ellos,
ble, de 6 a 8 años, y trabajaban las mismas horas que, por lo general, eran pequeños para albergar
que los primeros. En Mijas los registros de niños una familia numerosa, con las consiguientes pre-
en este trabajo son a partir de los 10 años. Los siones y problemas, al convivir integrantes de
levadores, según la disposición, llegaban a perci- distinto sexo, convirtiendo la vivienda o, mejor
bir de 8 a 12 reales diarios. Los sayaleros por su dicho, la habitación en nulas condiciones higié-
parte, según la disposición, cobraban sólo 30 nicas, imposible de mantener la armonía necesa-
céntimos por posta. ria para el esperado descanso.

Finalmente el último grupo llamado “los En algunos, como veremos más adelante,
aparejadores”, se dividía en dos subgrupos. el propietario del batán o molino vivía en la villa
Los llamados vulgarmente “descosteradores” o en la ciudad de Málaga, y sólo usufructuaba la
y los aprendices. Los primeros también eran parte del alquiler sin ningún interés en el pro-

CILNIANA 93
L A INDUSTRIA PAPELERA DE MIJAS

ducto. En los contratos de arrendamiento se de- Las condiciones de trabajo de los obreros
termina que no aceptarían como parte de pago de la industria papelera no se diferenciaban
entregas de papel. Por otra parte es curioso el sustancialmente a otros de su época. En general
antecedente de los batanes llamados “de Arriba” todos vivían los mismos problemas, aunque en
y “Abajo” que el alquiler consistía en la entrega las zonas más industrializadas eran mucho más
de 30 resmas mensuales, cada uno. Sólo se rea- duras y peligrosas La fábrica y sus instalaciones
lizó hasta la muerte del propietario, ya que lue- carecían de higiene y por lo tanto eran
go se cambiaron esas condiciones. provocadoras de enfermedades y accidentes 64.

El responsable del batán repartía las ta- El empleo generalizado de mujeres y ni-
reas de la fabricación, mantenimiento de la ma- ños, bajos salarios y jornadas de trabajo verda-
quinaria y el edificio entre todo el grupo familiar, deramente agotadoras fue la base humana en que
los padres o mayores intervenían en las tareas se apoyó la industrialización durante el XIX en
del batán, los niños y adolescentes eran también España.
de suma importancia en muchas tareas, como se
ha dicho, que intervenían en el proceso, desde el Esta falta de salubridad responde a su pro-
comienzo hasta el final. pia naturaleza, el trabajo era penoso, perjudicial
a la salud provocando como consecuencia muer-
La jornada del maestro inquilino, junto al tes prematuras entre los obreros que se dedica-
resto de los obreros, era de 14 horas, o sea, de ban a ciertas operaciones inherentes a los mis-
sol a sol y cuando lo exigía la demanda en hora- mos, siendo frecuentes los accidentes. En Anales
rio nocturno. Además, la mayoría se ocupaba, del Malagueños se publicaban noticias, por esa épo-
funcionamiento del batán y la venta del papel. ca, de muertes laborales producidas en las fábri-
cas de tejidos y algodones de niñas y niños de
En el padrón de 1878 encontramos regis- 14 y 15 años 65. Aunque como justificación se
trados niños de diez años con la denominación decía que no había ningún varón mendigo hasta
de batanero o papelero como su ocupación, lo la edad de 14 años, pues las fábricas de papel y
que significaba el reconocimiento oficial de su, paños les facilitaba la subsistencia con su traba-
casi siempre, exigente trabajo, aunque éstos des- jo, al estar todos aplicados a él, y sólo en algún
de siempre habían sido utilizados en los molinos caso de falta de ocupación, recurrían a la limos-
y batanes de papel. na momentáneamente, volviendo al trabajo, en
cuanto cesaba la suspensión66.
Aparte de los testimonios recogidos en
múltiples contratos de su actividad y aprendiza- El obrero y su familia no tenían derecho
je, es muy ilustrativa su presencia en los múlti- alguno de indemnización en caso de muerte o
ples grabados y sobre todo las fotografías que incapacidad permanente, no se estipulaba, ade-
reflejaban la actividad de una fábrica de papel en más, en ningún contrato que hemos consultado.
distintos países, y épocas de Europa y que pue- Era igual para el arrendatario del batán.
den consultarse en diversas publicaciones62. El
horario habitual que cumplía un obrero en 1850 En la mayoría de los contratos67 no se con-
en la industria malagueña en verano, se extendía templaba prácticamente ninguna excusa, algunas
de siete de la mañana a siete de la tarde y en tan justificadas, como eran la falta de agua, “ma-
invierno de seis o siete hasta las ocho de la tarde los tiempos”68, enfermedades, accidente, muer-
con tiempo para hacer dos comidas de una hora te, etc. En otros casos se multaba a pagar en rea-
cada una63. les las resmas que por impedimento del maestro
o que el personal no rindiera, y ante alguna en-
Éstos niños intervenían antes de la edad fermedad grave del firmante, “piadosamente” se
mencionada en tareas que llevaban un gran financiaba la deuda o la rescisión del contrato.
riesgo para su salud y desarrollo, manipulan- No olvidemos que se exigía a la firma de éste
do trapos que, por lo general, la suciedad que garantías con propiedades si las tenía el inquili-
los acompañaba era foco de contaminación y no, o de lo contrario de un tercero.
proliferación de enfermedades, hasta el pun-
to de no permitirse su acopio en los centros Para que se tenga una visión de los ries-
urbanos por el riesgo de infecciones que ello gos para la salud del trabajo de un batán o moli-
significaba. En Granada a principios del XVI, no, haremos un breve repaso de las tareas y los
ya hubo un pleito ante la solicitud para insta- obreros que se hacían cargo de ellas, según un
lar un molino a orillas del río Darro en la ciu- documento de la época69.
dad, que finalmente no se autorizó debido a
los peligros de infestación de la población por “El trabajo de los traperos era muy
causas del trapo. perjudicial para la salud. El excesivo pol-

94 CILNIANA
LA INDUSTRIA PAPELERA DE MIJAS

vo del trapo, aún después de haberse qui- bros, como lo demuestra el sinnúmero de
tado en parte, al aire libre, en los lugares obreros lisiados que hay en esta población
destinados al efecto en el exterior de los a consecuencia de esta clase de trabajo”.
edificios, llena por completo el medio am-
biente de las traperas. Y al incidir directa- Muchas veces lo que se consumía para
mente en los órganos respiratorios de los conservar y sostener la vida, no era, en el mayor
obreros, que en ellos trabajan, van produ- número de los casos, el adecuado para recuperar
ciendo lenta y paulatinamente lesiones irre- las fuerzas perdidas en el penoso y continuo tra-
versibles que se traducen en enfermedades bajo. Las comidas generalmente se componían
crónicas y mortales. de frutas de la estación, pan y algunas sopas, y
otros alimentos calientes, pero la mayor parte
Los pilateros se hallan expuestos a no hacía una comida regular hasta la de su casa
peligros idénticos que los traperos, aun- por la noche. No olvidemos, además, que el do-
que por motivos distintos. La infección de mingo era el único día de descanso y en el mejor
la atmósfera que se respira se produce, de los casos también el de la comida más
ahora, por la acción del cloruro que se des- gratificante de la semana.
prende, o evapora, del blanqueo de la
pasta. Agravado, todo ello, por el ex- Cuadro n.º 4
cesivo número de horas diarias que se Edad promedio de los bataneros registrados en los padrones
trabajan en tan insalubre operación. municipales 1851-66.
Los oficiales de tina, al igual
que los anteriores, se hallan también
expuestos a contraer una enfermedad
grave y mortal, hasta el punto que
muchos de ellos, si no todos, no lleguen
a la edad de cincuenta años. Y los que
de ella pasan quedan imposibilitados
para continuar trabajando, por lo que-
brantado que se halla ya su organis-
mo.

Entre las principales causas que


producen tan nefastos efectos figuran
la suma rapidez con que dichos opera-
rios deben realizar su trabajo, lo pesa-
dísimo que éste es en sí, así como la
mala calidad de la materia prima que
se emplea en la fabricación del papel.
Todo ello se traduce en que las pastas
resulten muy inferiores y que haya ne-
cesidad, para poder trabajarlas regu-
larmente, de someterlas a la acción del
calor y mantenerlas a una temperatu-
ra media de unos 38 grados centígra-
dos, obligando a los obreros a sufrir un
calor insoportable que les perjudica en
extremo durante todo el tiempo del tra-
bajo.

Finalmente cabe decir que la in-


dustria papelera es también muy peli- Elaboración propia.
grosa para los operarios encargados de
los martinetes. Ya que, por la edad algo Para cubrir los gastos del presupuesto fa-
prematura de los mismos, por la incómo- miliar mínimo, elaborados por Morales Muñoz,
da posición en que han de realizar su tra- para 6 personas exigía el salario más alto, o sea,
bajo, así como por el excesivo número de 14 reales diarios, sin contar los gastos de ropas
horas de éste, y al efectuarse por la noche, y medicinas. La población trabajadora estaba mal
están expuestos a los accidentes de traba- alimentada, mal vestida y alojada en viviendas
jo, con la pérdida de alguno de sus miem- antihigiénicas, lo que significaba bajo nivel sani-

CILNIANA 95
L A INDUSTRIA PAPELERA DE MIJAS

tario, elevada tasa de mortandad, abundante men- sión intempestiva de los menstruos en los días
dicidad y analfabetismo, en definitiva las bases lluviosos, pues en la larga travesía desde su casa
de la problemática social industrial de la ciudad a la fábrica llegan completamente mojadas, ade-
y los focos de producción. más de afecciones estacionales o crónicas laten-
tes como la clorosis en jóvenes de 15 a 20 años”73.
Es significativo el retraso con que se pro-
pugnarán las leyes sobre la regulación de la cues- Madoz nos informa en su diccionario, que
tión laboral, así como a la inaplicación casi gene- en Mijas las enfermedades más comunes eran la
ralizada de las mismas. Las condiciones de tra- calentura y la pulmonía, aunque leves debido a
bajo de los obreros malagueños fueron terrible- que la villa estaba ventilada y su clima era tem-
mente duras y agotadoras, hasta 1860 que se plado y agradable y no le faltaba razón, sigue sien-
manifiesta una clara preocupación por las condi- do a pesar de la superpoblación actual muy salu-
ciones materiales y morales de las clases obre- dable.
ras, cuando se promulguen tras la presentación
de diversas proposiciones, unas normas Aunque estas afirmaciones sólo respon-
reguladoras básicas de las condiciones de traba- den al criterio higienista que tomó gran auge
jo referidas, sobre todo, a la población obrera desde fines del XVIII hasta que entra en deca-
infantil y femenina. Dichas normas contempla- dencia con el descubrimiento de la bacteriología
rán aspectos como la edad mínima, la duración a fines del XIX. Se partía de la consideración de
de la jornada laboral, la limitación de ciertos tra- la gran influencia del entorno ambiental y del
bajos por su dureza, la prohibición de trabajos medio social en el desarrollo de las enfermeda-
nocturnos de niños y mujeres, etc.70. des, criticando la falta de salubridad en las ciuda-
des industriales, como el trabajo y condiciones
La duración de la jornada entre las 10 y de vida fabriles. Los médicos de este periodo rea-
12 horas diarias era completamente arbitraria, lizaron toda una serie de investigaciones empíri-
igual que los salarios, variando según la zona y cas de tipo sociológico y geográfico74, que en el
los oficios. mejor de los casos no podían prevenir ni paliar
las catastróficas consecuencias producidas por el
La edad promedio, según el registro que cólera, la fiebre amarilla y las enfermedades y
hemos obtenido de la documentación, de los accidentes propios de éste y de otros trabajos
hombres y mujeres que figuran como bataneros, de la industrialización.
papeleros o fabricantes de papel de Mijas, es de
25 años los primeros y de 30,5 las segundas, se- Málaga en el siglo XIX sufrió pestes tales
gún se desprende de los datos que se anotan en como las de 1803-1805 que resultó mortal para
el cuadro nº 4. el 37 % de la población. Las de cólera morbo de
1854-55 y 1860 dejaron también su lamentable
Son muy similares los porcentajes que se saldo, sólo por mencionar las que registran muer-
publicaban en Anales Malagueños sobre el perso- tes en esta industria en Mijas y Arroyo de la Miel.
nal de la empresa de tejidos La industria Mala- En 1855 entre las muertes producidas por el có-
gueña S.A, que ocupaba a 1400 obreros en 1852, lera morbo en Osunilla se encuentra el batanero
de los que 243 eran varones adultos, más 184 de Gregorio Sánchez Porras de 59 años75. En 1885
10 a 18 años. Siendo la cantidad de mujeres se repetirá nuevamente otro brote.
mucho mayor, había 716 obreras de 15 a 25 años
y 275 de 10 a 15 años. Su vestimenta durante el El balance que se hizo en 1853 sobre la
trabajo era la misma de uso doméstico71. fiebre amarilla fue muy negativo. En comparación
con otras del siglo, ésta “había diezmado la po-
Las enfermedades más generalizadas en blación de Málaga”, aunque no se la consideró
Málaga eran las irritaciones e inflamaciones en la endémica, ya que se afirmó que todas estas pes-
membrana mucosa laríngea bronquial. El reuma- tes procedían de las Antillas españolas. Las ante-
tismo originado por los bruscos cambios de tem- riores de 1813 y 1821 fueron las más benignas,
peratura y por la respiración del polvo de los tra- comparándola con la de 1803 que mató a 40.000
pos. Eran muy frecuentes las amenorreas origi- malagueños76.
nadas por la humedad que produce el riego in-
dispensable para la fermentación de los mismos 72. El proletariado, por lo general, será la víc-
tima propiciatoria de la enfermedad. Sus bajos
Entre las mujeres la enfermedad más fre- niveles económicos impiden la inmigración, su
cuente era la anemia, originada al margen de las alimentación, siempre deficitaria, se ve aún más
causas generales que pueda afectar dicha afec- comprometida por la elevación de los precios, el
ción, “tales como deficitarias cuantitativas y cua- cierre de los comercios y los talleres hace dismi-
litativas de las dietas alimenticias, por la supre- nuir los recursos de subsistencia, y la emigración

96 CILNIANA
LA INDUSTRIA PAPELERA DE MIJAS

de las personas pudientes dificulta incluso la jiendo y blanqueando en las diferentes poblacio-
mendicidad. Existió una evidente pérdida de nes donde se desarrollaba esta actividad, igual
maestros de los distintos gremios malagueños77. que en la alfarería y el cocido de los cordobanes
principalmente.
LA MANO DE OBRA FEMENINA
E INFANTIL EN LA FABRICACIÓN La sedería de Coín, establecida en 1852,
DEL PAPEL con 110 telares montados, empleaba 200 muje-
res en 1862. Esta mano de obra femenina permi-
Las mujeres y los niños que trabajaban en tía, al ser inferior su remuneración, bajar o man-
los batanes mijeños representaban, del total de tener los costes del producto enfrentada a los
los obreros, el 31 % las primeras, y el 30 % los mejores precios y mayor diversidad de la textil
niños, según nos muestra el cuadro n.º 5, pero catalana.
estos cálculos corresponden sólo a la informa-
ción de los padrones municipales, que nos dan El empleo de mano de obra de mujeres y
personal aproximado para once batanes con una niños en la fabricación papelera viene, práctica-
tina y un cálculo de ocho operarios para cada uno. mente desde sus orígenes. Ya en el siglo XVI la
mujer era una fuerza laboral no contada, no sólo
Cuadro n.º 5 en las tareas domésticas, sino en otras activida-
Total de bataneros y papeleros des económicas, aunque los documentos apenas
en el de padrón de 1878. recogen noticias directamente sobre ellas.

Retornando a la época de este trabajo,


encontramos algunos datos que afirman lo di-
cho. Tomemos el ejemplo de una de las zonas
papeleras más importantes de Génova, la villa de
Fabbriche. A principios del XVIII el porcentaje de
mujeres ocupadas en los molinos de papel era
de 285 y 118 niños, contra sólo 144 hombres,
Elaboración propia. representando el 74% de la mano de obra em-
pleada.
Durante el gran auge productivo de los
molinos de papel de la provincia que estaban en En Alcoy, de 510 trabajadores 156 eran ni-
la costa de Málaga, el empleo femenino era muy ños78 y en Banyeres de Mariola de 400 obreros
superior (cuadro nº 6), y en cuanto a Málaga el 100 eran niños y un porcentaje mayor de muje-
grueso de la mano de obra se encontraba en res. En la fábrica de abanicos y litografías de Má-
Mijas con una proporción de este personal tam- laga su personal, que se contaba entre 400 y 500
bién superior con un 44% el femenino y 11% el obreros, lo integraban también mujeres y niños.
infantil (véase cuadro nº 7).
De las tareas de selección y envasado de
Cuadro n.º 6 las pasas, almendras, higos secos, llamadas “la
Número de operarios de la industria papelera faena”, se ocupaban cientos de mujeres en los
andaluza en 1862*. locales habilitados por los exportadores.

El trabajo de la mujer, ayudada muchas


veces por los niños, comenzaba con el escogido
*Se incluye el personal (24) de las tres tinas de Jaén. del trapo, donde separaban los de lino y de algo-
dón, los tejidos de lana o los ribetes, apartando
Cuadro n.º 7 el de colores, quitando los botones y deshacien-
Número de operarios de la industria papelera do las costuras, clasificando alpargatas y cuer-
malagueña en 1862. das, y el papel y cartones que se reciclaban. Era
tarea femenina también, en algunos molinos, la
función del levador, que consistía en desprender
Fuente: Francisco Giménez Guited (1862).
cada pliego del sayal. Cuando se completaba la
posta, junto con un muchacho arrastraba la
En toda la Andalucía industrial era, por ponedera o tablero hasta dejarla bajo la prensa,
entonces, abundante la presencia femenina. Es ayudando al laurente y el ponedor que la prensa-
en el sector textil donde se registra una deman- ban para la eliminación del agua.
da de elevada proporción femenina, donde las
niñas también eran parte de la mano de obra Luego de separar los sayales de los plie-
barata, en el manejo de los telares, hilando, te- gos de papel, terminaban llevándolos al secade-

CILNIANA 97
L A INDUSTRIA PAPELERA DE MIJAS

Se cumplían grandes
formalidades en la admisión de
los aprendices. En Valencia a
principios del siglo XIX el tiem-
po en calidad de aprendiz de
un muchacho era de seis años,
corriendo a cargo del maestro
que lo tomaba a su cargo “... el
deber de instruirlo en la creen-
cia católica, cuidarlo y si moti-
vos diere castigarlo y retarlo en
termino regulares”.

El fabricante Francisco
Moltó pagaba al niño Vicente
Carbonell 10 reales los dos pri-
meros años, 14 reales el cuar-
to, 16 el quinto y 20 el sexto
año para alimentos y 6 libras
de salario anual.

Otro documento de
Alcoy de 1776 nos dice que Ni-
colás Martorell pone, dada la in-
clinación al oficio papelero, a su
hijo Matheo en la fábrica de
Pascual Abad por dos años para
Niños esquinzadores. Grabado de L. J. Goussier y Bernard. S. XVIII. “que se le instruya en el ejerci-
cio de esas oficinas y operacio-
ro donde otras mujeres los colgaban, luego de nes que les pareciere al mejor desempeño y servi-
secado los separaban y los apilaban. Las cio”. Aquél recibiría 3 sueldos diarios por vía de
escogedoras revisaban hoja por hoja la totali- alimentos y 14 libras cada año. En el caso de ser
dad de la resma observando los defectos y admitido y si se quedaba en el molino de sus ins-
separaban el bueno del quebrado, del corto y tructores, éstos le pagaban como a un oficial79 .
del roto. Estas tareas, entre muchas otras, po- Pocos lograrían llegar a esa categoría laboral, dada
dían estar ocasionalmente hechas por hom- la cantidad de niños ocupados durante tantos años
bres, pero por lo general las descripciones del en el aprendizaje o, por decirlo más directo, la ex-
siglo XVIII y los grabados que las ilustran nos plotación que se le hacía con el fin de llegar a la
confirman lo contrario, del mismo modo los maestría.
niños también colaboraban en el troceado o
esquinzado de los trapos antes de llevarlos al En Cataluña se empleó en algunos moli-
pudridero. nos durante el siglo XIX el sistema de balaires.
Este consistía en que el propietario se encargaba
En los centros de producción importan- de la compra de la materia prima y la venta del
tes por la organización y estructura, los ofi- papel, y de la fabricación el balaire, al que se le
ciales, aparte de su sueldo, comían y pernoc- pagaba por la cantidad de balas producidas en el
taban en su lugar de trabajo, o sea, la fábrica. molino, de donde se origina su denominación.
Sin embargo, los niños (aprendices) por su
edad comían o, debían de hacerlo, en sus ca- Se responsabilizaba de la manufactura y
sas según ciertas reglamentaciones que a me- se encargaba del alojamiento y comida del per-
diados del siglo XVIII se habían implementado, sonal en el edificio o molino. Debajo de éste,
recibiendo aparte de su salario una cierta can- jerárquicamente, venían los encargados, oficia-
tidad de alimentos. les y aprendices.

Los niños estaban en calidad de aprendi- Es obvio hablar de los abusos que se co-
ces durante cuatro o seis años y luego eran exa- metían, motivo por el que se eliminó a princi-
minados por una comisión de expertos para ac- pios del siglo XX este sistema de producción. El
ceder al rango de oficiales y maestros del arte de balaire asignaba el jornal a los trabajadores, y la
hacer papel, y así poder gozar de la retribución proporción de las 3 pesetas pagadas a los hom-
económica a su nueva responsabilidad. bres, descendía a 6 reales para las mujeres; el 50

98 CILNIANA
LA INDUSTRIA PAPELERA DE MIJAS

% menos. No se contemplaban las horas extras L a instrucción la hacía el padre o el


trabajadas y los aprendices no recibían salario maestro, aunque la madre o la mujer papelera
durante los tres años que duraba el aprendizaje de Mijas también pudo haber cumplido esta
solamente se les daba la comida y se les proveía función de enseñar a sus hijos e hijas las ta-
de la cama en el mismo molino. reas de la fabricación. No olvidemos que algu-
nos molinos de papel de la costa tuvieron
Al pasar a ser ayudantes de máquinas o como propietarias-fabricantes a varias muje-
cilindros recibían del balaire una semana de suel- res. Por otra parte, debemos suponer que las
do de ayudante como recompensa por haber as- exigencias de perfección en el de estraza no
cendido de aprendizaje80. lo eran tanto.

En el norte de Portugal, a mediados del Ya en el catastro del Marqués de la Ense-


siglo XIX, en las fábricas de papel del Concejo de nada (1755) queda registrada Theresa Gallardo
Terras de Santa Maria, se empleaba la mano de como copropietaria junto al también molinero
obra femenina e infantil o “moços” que pertene- Joseph de Roa de un molino de papel en la ciu-
cían a la categoría de aprendices81. dad de Málaga. El batán de papel de estraza lla-
mado “María Josefa” de Benalmádena, lo trabaja-
La fabricación de libritos de papel de fu- ba en 1803 María del Valle y Padilla, y María
mar también utilizó a mujeres y mayoritariamente Fernández del Valle desde 1805 hasta 1852 que
a niñas de 10 a 12 años, a las que le resultaba continuará en él María J. Navarrete.
más fácil y rápida la manipulación de las peque-
ñas hojitas. Teresa Sánchez por su parte se hizo car-
go, al morir su marido, del arrendamiento y pro-
En los batanes de Mijas los niños y las ducción del molino de papel de Frigiliana82.
niñas eran oficialmente bataneros a partir de
los 10 años, lo que no descarta, sino que afir- En Osunilla, como veremos más adelante,
ma, que trabajaban ya antes de la edad en que fueron varias las propietarias de batanes, y agre-
se les empadronaba como bataneros, y sobre gamos ahora, como operarias a Juana Ames
todo por ser los hijos de los encargados o pro- Márquez, que trabajaba junto a su hijo después
pietarios del batán. En la zona valenciana la de quedar viuda, y a Lázara Cortés Ríos, que lo
edad mínima estipulada era de 12 años, aun- hace con el suyo después de separarse del mari-
que como hemos visto en el capítulo anterior do, estado que también quedaba registrado en
no se respetaba. los padrones.

Operarias examinando, plegando, alisando y contando el papel. Grabado de L.J. Goussier y Bernard. Siglo XVIII.

CILNIANA 99
L A INDUSTRIA PAPELERA DE MIJAS

Podemos hacer el seguimiento de los La alfabetización de la mujer, que llevaba


bataneros mijeños durante más de medio siglo, la peor parte, era sólo del 1%. Ésta debía afron-
que han transmitido los conocimientos de pa- tar, además de las tareas del batán, a la que ya
dres a hijos, aunque sin excluir en el aprendizaje me he referido, todas las que les exigía el man-
a otros parientes. tenimiento de la casa y de los hijos.

ALFABETIZACIÓN El censo oficial de población de 187784 fija


el porcentaje de analfabetos en Málaga en el 71.4%
El abandono de la educación de la clase mientras que el nacional se sitúa en el 71.8% y de
popular u obrera sólo procede compararla con la los alfabetizados sólo una mínima parte accedía a
mala nutrición corporal, las menos favorecidas la segunda enseñanza, aunque la población infantil
por el escaso grado de instrucción generando por fuera de la capital se ve a muy temprana edad
lo tanto los mayores niveles de analfabetismo. impulsada a aprender un oficio remunerado.
Hubo acuerdos y mociones adoptadas por la Junta
Provincial de Gobierno de la Nación y la Junta El anuario estadístico de fines del siglo XIX
Provincial de Málaga a favor de una mayor ins- es muy ilustrativo sobre este aspecto en la pro-
trucción de grado, y también los “reglamentos” vincia. De su población de 523.212 habitantes
y “estatutos” de la mayoría de las sociedades saben leer sólo 1.478 personas y leen y escriben
obreras muestran esta preocupación por la ins- 105.499, lo que nos da un total de analfabetos
trucción de la clase obrera83. de 415.892 (74.8%), quedando fuera 543 de las
que no hay datos. De este porcentaje el 72.7%
En la villa, por estos años, como hemos eran hombres y el 76% mujeres. Era menor el por-
dicho, tenían un maestro y una escuela de pri- centaje de analfabetos de la población de la capi-
meras letras que, según los relativos datos de tal con el 64,5%.
Madoz, asistían 184 niños y 120 niñas. En 1866
se había reducido la cantidad de niños que asis- Muy similares nos resultan las cifras da-
tían a la escuela a un total de solo 184: Mijas das para las fábricas de papel de Paços de Brandao
había sufrido las pestes de años atrás y las nue- (norte de Portugal), donde el 89 % de los 223 tra-
vas de cólera morbo de 1854, 1855, 1860 redu- bajadores eran analfabetos85.
jeron la población en 1128 habitantes menos que
los que habitaban la villa en los 1297 edificios en Volviendo a los niños, éstos sufrían los
1851. cambios temporales de ocupación a que esta-
ban sometidos sus padres. He encontrado en
Como vemos, resulta muy significativo el los censos algunos bataneros, figurando alter-
bajo porcentaje de alfabetización representado en nativamente en otras ocupaciones relaciona-
el cuadro n.º 8: sólo el 6% corresponde a los ni- da con el campo.
ños. Mayor es el porcentaje de los hombres con
un 9%, siendo nulo el de las niñas. Reiteramos que El conocimiento exigido para la supervi-
estos porcentajes responden a los padrones, aun- vencia era exclusivo a las tareas que proveían el
que debemos tener en cuenta que era muy supe- sustento diario al grupo familiar, casi siempre
rior el personal que recogemos en el cuadro nº 7. numeroso, fuertemente arraigado a la tradición
del campo y a la conciencia de clase que por en-
Debemos concluir que los niños que tra- tonces era imposible franquear.
bajaban en la zona rural y batanera no recibían
instrucción escolar. Aunque tampoco lo hicieron LOS AÑOS DEL DESARROLLO
todos los que figuran domiciliados en el pueblo.
El desarrollo de la industria
Cuadro n.º 8 papelera mijeña irá paralelo a la
evolución y a los avatares de la in-
Obreros alfabetizados de los batanes de Mijas según
dustria y el comercio de la provin-
el padrón de 1778.
cia. Su especialización, a la que ya
nos hemos referido, fue desde sus
comienzos propiciada para pro-
veer a la producción agrícola y su
comercio principalmente, y siguió
fiel a este cometido, llegando a sus
años más productivos en la déca-
da de los sesenta, y que a partir
de éstos comenzará a reducirse
Elaboración propia. hasta su completa extinción.

100 CILNIANA
LA INDUSTRIA PAPELERA DE MIJAS

Es en estos años cuando encontra- Cuadro n.º 10


mos una sólida estructura de estas fábri- Papeles producidos en los batanes mijeños durante 1862-64
cas y su economía, que hemos volcado en
los cuadros n.º 9 y 10 con la producción,
capital, tinas y la cantidad de operarios,
junto a la lista publicada dos años más tar-
de, los que marcan el momento de mayor
producción papelera, representando el 83
% de las tinas activas y el 70.5% de opera-
rios del total malagueño.

LA PRODUCCIÓN

Hemos elaborado un cuadro aproxi-


mado (n.º 11), tomando como base la pro-
ducción de Málaga y deslindando la canti-
dad de tinas de Mijas y su producción,
promediando como media un peso de 11
Fuente: Francisco Giménez Guited (1862).
libras por cada resma entre los valores más
* Creemos que se trata de Miguel Oliver y Brú, ya que no existe ninguna referen-
comunes de 10 y 12 libras. cia con ese apellido, y sobre todo, si tenemos en cuenta la producción del fabri-
cante y el registro de la compra de un molino próximo al suyo.
Esta aproximación nos acerca a la
cantidad de materias consumidas anual-
mente. Cuadro n.º 11
Materias primas y producción anual de papel en Mijas.

Notas
1
Arrendados por Félix Solesio, asentista de la fá-
brica de Macharaviaya desde 1781 para producir es-
traza y blanco para naipes.
2
En la bibliografía se anotan los principales auto-
Elaboración propia.
res que se han ocupado ampliamente sobre la fabrica-
ción del papel en España. Véase la recopilación de HI- 8
Éstos también se ocupaban de los canalizos de madera y
DALGO BRINQUIS, María del Carmen: “Bibliografía de la histo- su colocación interior en el canal de piedra. El carpintero Juan
ria del papel y sus filigranas”, Actas II Congreso AHHP, Cuenca, Pérez y su hijo cobraban un jornal de 19 reales, siendo la ma-
1997 yor proporción para el padre como maestro. AHPM. Leg. P 4273,
3
BALMACEDA, José Carlos: Los batanes papeleros de Málaga f. 420.
y su provincia, Málaga: Universidad de Málaga, 1998. 9
En Benalmádena integraba el equipo de tasadores un
4
Véase mi trabajo: Filigranas. Propuestas para su reproduc- maestro de molinos.
ción, Málaga: AGNA - Universidad de Málaga. 2001. 10
AHPM Leg. P 4281, f. 39. Partición de bienes de los here-
5
Por lo general el papel de estraza no recibía aglutinante. deros de Rosalía de Vega.
6
GARCÍA SERRANO, Rafael: “El molino del hospital gene- 11
Sólo a este carpintero le acompañaba el término mecá-
ral de Pamplona”, Cuadernos de etnología y etnografía de Na- nico, como distinción de su especialidad.
varra n.º 6, 1974. (León, Rafael lo transcribe en: Se trata del 12
En 1883 Málaga contaba con 15 imprentas y 9 litogra-
papel, Universidad de Málaga, 2001 pp. 350-352). fías. BALMACEDA, José Carlos: “Las tiendas y almacenes de
7
Mas o menos 1.26 m. papel en la Málaga del XIX”, Córdoba: IV Congreso del papel
en España AHHP. 2001.
13
Por su calidad recibió varios galardones en varias mues-
Cuadro n.º 9 tras tal la de Londres de 1851.
Censo de tinas, capital y operarios de los batanes 14
AHPM. Leg. P. 6710, f.253.
mijeños en 1862. La trama de la forma para sacar el papel de estraza podía
llevar sólo 245 hilos al no ser tan cerrada como la de los pape-
les de escribir, 300 hilos, y menos que la del florete que es más
cerrada aún, 320 hilos. SERRANO, Rafael: Op. cit.
15
AHPM. Leg. 3844.
16
Es posible ver todavía en los pueblos de la Axarquía los
paseros orientados hacia el sol.
17
BALMACEDA (2001), “Las tiendas y almacenes...” Op. cit.
18
URBANO, Ramón A.: Guía de Málaga, Málaga, 1898.
19
Existe una valiosa colección de envases litografiados para
pasas en el Museo de Artes Populares Díaz de Escobar de
Málaga.
20
Arroyo los Pilones, Seco, la Cala, la Chorrera, el Cañave-
ral, Blanco, Infierno, Tajo, Ortejones, del Campillo, del Cañuelo,
Espartero, las Cajas, Pajares, Chico, Real y muchos otros.
21
La materia prima y las cargas de papel también se trans-

CILNIANA 101
L A INDUSTRIA PAPELERA DE MIJAS

portaban al molino de Maro (Nerja), por este medio. blanco Santa Rita de Mijas.
22
Eran los caminos construidos a expensas del estado y 62
Se reiteran los abusos en las fábricas de papel: “hay
que comunicaban las poblaciones de cierta importancia. muchos niños de trece ó catorce años, los cuales se mandan a
23
El cálculo de Briquet es de alrededor de 2000 litros de sus casas a las nueve de la mañana para que vuelvan a las cinco
agua por l kg de papel. Janot, citado por Robert Estier (1997), de la tarde a fin de trabajar toda la noche” dedicándolos “a
estableció 700 litros por kg y hora. machacar (se refiere al satinado del papel con el martinete) el
24
AHPM. Leg. P 4273, f.291-2. papel, operación sumamente peligrosa”. “Los niños entran en
25
Comprado a los herederos de Cristóbal de Mérida. AHPM. las fábricas a los seis años y las niñas a los ocho”. PÉREZ
Leg. P 4282, f. 174/5. PLANELLES, Francisco: “Plan estadístico de la villa de Alcoy
26
AHPM. Leg. P 4282, f.176. 1807”. Edición e introducción de Ismael Vallés. Sección de geo-
27
ZAMORA BERMÚDEZ, Manuel: Op. cit. grafía de la Universidad de Valencia. Ayuntamiento de Alcoy.
28
AHPM. Leg. P 4274, f.136. 1983. pp. 290 - 317.
29
AHPM. Leg. P 5482, f.530 63
MARTÍNEZ MONTES, V.: Topografía médica de Málaga,
30
AHPM. Leg. P.4286, f. 140. Málaga. 1852.
31
AHPM. Leg. P.4286, f. 534. 64
En el apartado de inválidos del trabajo en los molinos se
32
AHPM. Leg. P.5432, f. 314. exponía “la falta de higiene que en general tienen nuestras fá-
33
AHPM. Leg. P.4278, f. 1. bricas”, “el hacinamiento en que se tiene al obrero por la estre-
34
AHPM. Leg. P.5434, f. 244. chez del espacio y la falta de separación de sexos”, “con gran
35
AHPM. Leg. P.5434, f. 425. contingente de fallecimientos que la tuberculosis origina en la
36
AHPM. Leg. P.5434, F.267. localidad”. PÉREZ PLANELLES, Francisco (1983): Op. cit., pp. 272.
37
AHPM. Leg. P.5434, F.270. 65
MATÍNEZ MONTES, V.: Op. cit.
38
BALMACEDA, José Carlos (1998): Op. cit., pp. 34. 66
PÉREZ PLANELLES, Francisco (1983): Op. cit., pp. 7.
39
AHPM. Leg. P.4286, f. 40. 67
Véase el capítulo de Torremolinos y Arroyo de la Miel.
40
AHPM. Leg. P.5432, f. 42. BALMACEDA (1998): Op. cit.
41
Sólo se menciona en los contratos de arrendamiento de 68
Se refiere a los momentos de conflictos políticos inter-
Sáenz de Tejada de 1799. nos o externos.
42
Aunque ya se había tratado de impedir la venta de tra- 69
Me he basado en la exposición de los obreros de la in-
pos, será en el XVIII cuando se endurezca la salida de éstos y dustria papelera recogidas en el informe, “Situación laboral y
las carnazas a través de las reales órdenes de los años 1728, socio económica de los obreros de la industria papelera de
1737,1753, 1756, 1765, 1767, 1776, 1778, 1780. Alcoy 1864-1884”, recuperado y publicado por Antonio
43
Con la intención de propiciar una mayor y mejor pro- COLOMA PÉREZ en la ciudad de Alcoy en 1985, que con algu-
ducción se otorgaron franquicias que contemplaban el dere- nas variantes pueden aplicarse a la mayoría de los obreros de
cho a comprar el trapo a fabricantes de Ávila, Madrid, Cuenca, esta industria en cualquier zona papelera y en ese momento.
Cataluña, Galicia, etc. 70
Normas recogidas por la Ley Benot. MORALES MUÑOZ,
44
Equivalía a 46 kg. Manuel: Op. cit.
45
BALMACEDA (2001), “Las tiendas y almacenes...”. Op. cit. 71
MARTÍNEZ MONTES, V.: Op. cit.
46
El fabricante Juan Valor tenía en depósito, según un in- 72
Registramos algunas afecciones de la familia Valor: la
ventario de 1869, 631 arrobas de papel de desecho de pasas. ataxia mató a Matilde, Rita murió de peritonitis puerperal a los
BALMACEDA (1998): Op. cit. pp. 147. 28 años, su madre de apoplejía y su padre Juan Valor y Pérez
47
La industria de estos pueblos era, ahora, principalmen- de una afección al pecho.
te de fábricas de hilados y tejidos de lana, algodón y de aguar- 73
Citado también por Manuel Morales Muñoz: Op. cit.
diente. 74
URTEAGA, Luis: “Miseria, miasmas y microbios. Las to-
48
Véase los capítulos sobre los molinos de Torremolinos y pografías médicas y el estudio del medio ambiente en el siglo
Arroyo de Miel en mi trabajo, (1998): Op. cit. XIX”, Cuadernos críticos de geografía humana n.º 29, Barcelo-
49
Entre 1860 y 1877 la población creció el 23,3% frente al na. 1980.
11% de la media andaluza y el 6% de la nacional, MORALES 75
AHPM. Leg. P.4285, s/f.
MUÑOZ, Manuel: Economía y sociedad en la Málaga del siglo XIX, 76
Ya la peste de los años 1678-80 había interrumpido el
Diputación Provincial de Málaga, 1983 pp. 19-20. comercio entre Málaga y Mijas. Éstas provocaban la paraliza-
50
BALMACEDA (2001), “Las tiendas y almacenes...”: Op .cit. ción y el riguroso aislamiento por parte de las otras ciudades
51
Con toda seguridad son integrantes de la familia pape- comerciales andaluzas no afectadas, reacias a cualquier conta-
lera de la República Ligur, que sus papeles tuvieron una de gran gio, tal el caso de las mencionadas, y sobre todo la de 1637
difusión, desde finales del XVIII, marcados con hermosas fili- que gravitó de manera directa sobre la villa, quedando tan ais-
granas del apellido y la alegoría de Varenna, nombre del to- lada la población que el alcalde asumía atribuciones políticas.
rrente que movía las ruedas de sus molinos. Mijas soportó otros desastres como el terremoto en 1680 que
52
Aunque de origen catalán, había estado residiendo en disminuyó su población de 374 a casi la mitad, derrumbó 37
Granada. casas y el resto quedaron inhabitables. No se informó lo suce-
53
Apuntadas por MOYA MOYA, José: Libro de oro de la ciu- dido en los alrededores donde se encontraba Osunilla.
dad de Alcoi, Alcoy. 1992. 77
CARRILLO MARTOS, Juan Luis: “La enfermedad y socie-
54
Ampliamente expuesta su actividad en BALMACEDA, José dad en Málaga del siglo XIX”, Gibralfaro n.º 24. Málaga. 1976.
Carlos (1998): Op. cit. 78
PÉREZ PLANELLES, Francisco: “Plan estadístico de la vi-
55
MORALES MUÑOZ, Manuel: Op. cit, pp. 21. lla de Alcoy 1807”. Edición e introducción de Ismael Vallés.
56
AHPM. Leg. P. 4282. Sección de geografía de la Universidad de Valencia. Ayunta-
57
AHPM. Leg. P.4288, f. 433. miento de Alcoy. 1983.
58
Fue practicada por todas las comunidades papeleras 79
MOYA MOYA, José: El libro de oro de Alcoi, Alcoy. 1992.
creando, en algunas zonas, verdaderas dinastías familiares con 80
VINYES I VILÁ, Josep M. y otros: Guarro Casas, 300 años
poder e influencias. de historia 1698-1998, Cataluña, 1998.
59
Los papeleros nunca se agremiaron, aunque tenían una 81
SANTOS, Maria José: A indústria do papel, em Paços de
estricta y marcada jerarquía entre los diferentes operarios, y Brandao e Terras de Santa Maria, Camara Municipal de Santa Maria
su especialidad, como su aprendizaje estaba liderado por el da Feira, Portugal, 1997.
maestro en cada batán o molino. 82
BALMACEDA (1998), Op.cit., pp. 24, 49, 128.
60
MORALES MUÑOZ, Manuel: Op. cit. 83
MORALES MUÑOZ, M.: Op. cit., pp. 105.
61
Según un informe obrero de Alcoy, se exigían 18 postas 84
Instituto Geográfico y Estadístico, Madrid, 1877.
diarias, la misma cantidad que producía el molino de papel 85
SANTOS, María José: Op. cit.

102 CILNIANA
Un Horno Romano de Época Altoimperial
en EL SALADILLO
José Suárez Padilla, José María Tomassetti Guerra,
Luis-Efrén Fernández Rodríguez e Ildefonso Navarro Luengo

Durante el verano del pasado año 2002 se excavaron los restos de un horno romano dedicado a la
producción de materiales de construcción, empleados en unas termas cercanas. La fecha de cons-
trucción, uso y amortización del horno ha podido precisarse en la segunda mitad del siglo I d.C. Se
trata del primer horno de planta rectangular de la provincia de Málaga, hecho que, unido a su
excepcional estado de conservación, ha motivado su conservación y la posibilidad de su acondiciona-
miento para visitas.

ANTECEDENTES de un horno en el que se produjeron diversos

A
materiales (tegulae, ladrillos, etc.), mientras que
finales de 2000 se produjo, a raíz de una la intervención arqueológica de urgencia realiza-
inspección arqueológica de obras por parte da en Costalita del Mar2 permitió exhumar los
de los servicios de arqueología del Ilmo. Ayunta- restos de un complejo termal de época romana.
miento de Estepona, el hallazgo casual de una
serie de restos arqueológicos afectados por los PLANTEAMIENTO METODOLÓGICO
movimientos de tierra en las urbanizaciones de- Y RESULTADOS ESTRATIGRÁFICOS
nominadas “Costalita del Mar” y “Pueblo Anda-
luz”. En la excavación realizada en Pueblo Anda- En la parcela afectada por la urbanización
luz1, cuyos resultados preliminares constituyen Pueblo Andaluz se realizaron distintos cortes en
el presente trabajo, se descubrieron los restos dos sectores: uno más al Sur, denominado “Sec-

CILNIANA 103
UN HORNO ROMANO EN EL SALADILLO

tor piscina”, y otro al Norte, “Sector horno”. En tura de combustión. Para ello se planteó, orien-
el primero de ellos se han planteado 6 cortes ar- tado con el sentido del horno un corte dentro
queológicos (C-1, C-2, Z-1, Z-2 y Z-3) y una pos- del área de investigación, que denominamos C-
terior excavación en extensión del área (Z-4), ha- 3. Incluía los trabajos de excavación del relleno
biéndose practicado sólo uno (C-3) en el deno- de la zanja contemporánea, y posibilitaba la do-

A finales de 2000 se produjo, a raíz de una inspección arqueológica de obras por


parte de los servicios de arqueología del Ilmo. Ayuntamiento de Estepona, el hallazgo
casual de una serie de restos arqueológicos afectados por los movimientos de tierra
en las urbanizaciones denominadas “Costalita del Mar” y “Pueblo Andaluz”

minado “Sector horno”. El presente trabajo se cumentación en planta de la estructura y su es-


refiere a los resultados de este último corte, el pacio inmediato.
único que ofreció resultados arqueológicos.
La información obtenida nos ha permiti-
La disposición de este corte ha venido con- do realizar una propuesta, en función de los re-
dicionada por uno de los objetivos prioritarios de sultados estratigráficos, de la construcción y
la inter vención: localizar los restos de la amortización del fornax (horno).
piroestructura identificada en las fases de segui-
miento de los movimientos de tierra en la parcela, Periodo 1º. El sustrato geológico
documentarla y valorar su estado de conservación.
Se trata de una serie de depósitos locali-
El hallazgo del horno se produjo como zados en su punto más bajo a 0.20 m.s.n.m. Su
consecuencia de las labores de excavación lleva- correlación estratigráfica se ha documentado en
das a cabo para instalar en la finca la base de los sectores excavados alrededor del horno, en
hormigón de una grúa. Estos trabajos consistie- las secciones llevadas a cabo en sentido Norte-
ron en la remoción de un espacio de tendencia Sur y Este-Oeste.
cuadrangular, de más de 35 m2, que permitieran
elaborar un encofrado base de un cubo de hor- Está compuesto en su base por margas
migón, de unas dimensiones de 25 m2. muy limpias, de color gris negruzco, identifica-
das en sectores cercanos como propias del
Es precisamente al realizar los trabajos Plioceno local. Sobre éstas se localizan arenas, y
de excavación mecánica cuando se localiza la de nuevo margas, que indican procesos
estructura. Se pudo obser var en el perfil Este geológicos complejos propios de ámbitos litora-
del área excavada parte de una arquería reali- les. La presencia de dunas es un paisaje propio
zada a base de adobes, en buen estado de con- de este sector del litoral occidental3, por lo que
servación, con claros indicios de haber estado creemos que estaríamos ante un paisaje de estas
expuesta a altas temperaturas. El espacio re- características.
sultante entre la excavación abierta que posi-
bilitó la exhumación de los restos y la cimen- Periodo 2º.
tación de la grúa fue vuelto a rellenar por la Fase 1. La construcción del horno
empresa constructora con la tierra extraída de
las inmediaciones. Resulta trascendental para la interpretación
del sistema constructivo la sección obtenida en
Los movimientos de tierra precisos para sentido Norte-Sur, contrastada con la sección rea-
instalar la grúa habían creado un perfil que su- lizada en el eje del horno, en sentido Este-Oeste.
ponía una sección en sentido Norte-Sur de la
piroestructura. La limpieza de este lateral dejó al Podemos interpretar que el primer paso
descubierto un arco construido de adobes y sus para la construcción consistió en preparar el es-
apoyos, observándose gran parte del alzado de pacio subterráneo que iba a albergar la cámara
éste así como los límites laterales del mismo, de combustión de la estructura. Se procedió a
coincidentes con el ancho total de la estructura. llevar a cabo una excavación en el terreno
Por otro lado, en la base de la zanja se pudieron geológico, con tendencia rectangular, que va per-
observar los restos de los soportes de otros dos diendo superficie conforme gana en profundidad.
arcos más, destruidos por la máquina. Esta gran excavación corta paquetes alternantes
de arenas y margas que conforman el sustrato
Con la información resultante de este perfil geológico, para acabar en un sustrato homogé-
pudimos plantear la excavación total de la estruc- neo de estas últimas.

104 CILNIANA
UN HORNO ROMANO EN EL SALADILLO

Una vez conseguida en el sustrato una Sobre los pilares se dispusieron a su vez
superficie regular de tendencia rectangular, se arquerías de adobes, de las que hemos podido
procedió a construir una serie de 4 arcos de ado- contemplar la de S3, que aunque había sufrido
be (ladrillos sin cocer) con unas dimensiones en un ligero desplome, permitía restituir sus dimen-
planta de 2.20 por 0.36 m cada uno y una distan- siones originales. Estaban formadas por una
cia entre ellos de 30 cm, exactamente un pie ro- veintena de adobes, conformando un arco de un
mano. Han sido denominadas para su estudio radio de unos 50 cm. El conjunto de adobes de
como S1, S2, S3 y S4, numeradas en sentido Oes- cada una de las suspensurae había sido regulariza-
te-Este. Estos arcos conformarían, bajo tierra, la do con una capa de barro fresco, aplicado con
cámara de combustión de la estructura. Se trata las manos, que regularizaba el aspecto del con-
de las suspensurae que servirían de apoyo para la junto y garantizaba firmeza a la unión entre las
parrilla. piezas.

El conjunto resultante es una cámara de Una de las suspensurae (S4) previsiblemente


combustión rectangular, que condiciona la for- estaría bien conservada, pero no hemos podido
ma y quizás la función del fornax. Las dimensio- acceder a la misma durante el proceso de excava-
nes de la cámara son más bien reducidas, de 2.50 ción ya que no podíamos garantizar el desplome
m de largo por 2.20 de ancho, lo que viene a ser, de la arquería visible (S3), afectada por los traba-
en medidas romanas, sobre ocho pies y un pal- jos mecánicos de construcción de la grúa. De las
mo por siete pies y un pal-
mo, con un canal central de
0.90 m (tres pies) que distri-
buiría el calor de la combus-
tión practicada en el
praefurnium.

La base de cada arque-


ría está conformada por pila-
res, realizados con grandes
adobes (60 x 37 x 7), dimen-
siones equivalentes a dos
pies de largo, por pie y pal-
mo de ancho y palmo de
alto), cuyo acabado exterior
es alisado para darle un as-
pecto homogéneo a la obra.
Han sido denominados como
Pa (pilar sur) y Pb (pilar nor-
te) en cada arquería. En la ar-
quería mejor conservada para
realizar las mediciones de los
pilares (S2), la distancia entre
pilares es de 0.97 (tres pies y
palmo romanos). El pilar nor-
te mide 0.36 (un pie y un pal-
mo) por 0.60 (dos pies) y el
pilar sur 0.36 por 0.67 (dos
pies y un palmo). La altura de
los pilares hasta el punto don-
de arranca el inicio del arco
se ha podido documentar en
S3, y es de 0.90 cm (tres pies
romanos). Se observa que la
anchura de los pilares situa-
dos al norte (Pb) es un palmo
más larga que los situados al
sur, sin que sepamos inter-
pretar la posible funcio-
nalidad de esta falta de sime-
tría entre los mismos.

CILNIANA 105
UN HORNO ROMANO EN EL SALADILLO

permiten aportar al menos un termino post-quem


para la estructura, como veremos en el capítulo
dedicado expresamente a este aspecto.

Es fácil suponer que en el espacio entre


los arcos se dispusieran una serie de tablas que
sirvieran de límite para impedir que el material
vertido entrase en el espacio entre las suspensurae,
especialmente si tenemos en cuenta que los
maestros lignari debían de haber realizado un tra-
bajo previo de encofrado para la construcción de
los arcos de adobes. Además, el límite de la pa-
red de la cámara de combustión en los espacios
entre suspensurae es simplemente la propia arci-
lla vertida en los huecos, cocida por las propias
hornadas de cocción cerámica, o expresamente
para la consolidación del horno.

En S1, puerta de la cámara de combustión,


se pudo documentar como entre los pilares de
apoyo de las arquerías, en pleno canal central de
la cámara de combustión, (U.E. 22) se habían dis-
puesto dos hiladas de ladrillos, que identifica-
mos como los restos conservados de lo que fue
el praefurnium (Prae) del horno.

Concretamente nos encontraríamos en el


punto de unión entre la bóveda de acceso al hor-
no y la cámara de combustión. Se conservaban
las últimas hiladas de ladrillo, y había desapare-
cido la bóveda que debió de apoyar en ellos. Esta
dos arquerías restantes (S1-S2) sólo se conserva- había sido seccionada por la base de hormigón
ba parte de los pilares de apoyo. El resto había de apoyo de la grúa. Esta bóveda comunicaría
sido destruido. directamente con el canal central del horno, for-
mado por las diversas arquerías de suspensión
En la suspensura documentada, podemos de la parrilla.
evidenciar como una vez concluidos los arcos
dispuestos sobre los pilares se procedió a le- Para llevar a cabo esta substrucción se
vantar varias hiladas de adobes dispuestos debió realizar otra zanja, cuyos laterales serían
sobre el arco y que concluían a la altura más “encofrados” con los propios ladrillos del canal
alta alcanzada por el adobe que servía de cla- de fuego. Es previsible que esta excavación se
ve al arco, constituyendo la superficie de re- llevara a cabo en el mismo momento en que se
cepción de la parrilla. realizó la que sirvió para la construcción de las
Una vez concluido este trabajo, se proce- suspensurae, pero la construcción de la bóveda de
dió a realizar un vertido de diversas capas de ladrillos es inmediatamente posterior a la cáma-
material arcilloso (U.E. 2) que completaron el es- ra de combustión ya que termina apoyando con-
pacio que había restado entre la batería de tra una de las arquerías que la conforman.
arquerías y la gran excavación realizada en el
substrato natural para su instalación (U.E. 12). De la estructura del praefurnium (U.E. 27)
Es en el material usa- se pudieron docu-
do para colmatar es- mentar cinco hiladas
tos huecos (U. E. 2) Creemos, que a pesar de lo escaso del de ladrillos, de dimen-
situados entre las pa- material, su coherencia nos permite aportar siones de 0.15 de
redes de la zanja (U. un término “post quem” para la construcción alto, por 0.30 de lar-
E. 12) y las suspensurae de la estructura en época flavia, momentos go y 0.05 de ancho
de la cámara de com- cada uno. Curiosa-
bustión (S-1,2,3,4) de la segunda mitad del siglo I d.C., mente, para la cons-
donde han sido loca- probablemente sin alcanzar momentos del trucción del lugar que
lizados algunos mate- emperador Trajano iba a estar directa-
riales cerámicos que mente en contacto

106 CILNIANA
UN HORNO ROMANO EN EL SALADILLO

con el fuego se prefirió el uso de ladrillo a ado- circulares, con un diámetro entre 7 y 8 cm, medi-
bes. La profundidad total de la estructura no pudo da coincidente con un palmo (palmipes) romano.
ser documentada, pero no debió ser muy infe- Para su construcción se procedió a insertar ri-
rior a la cota de suelo de la cámara de
combustión, situada aproximadamen-
te a 0.20 m.s.n.m. A partir de esta cota, El abundante uso del “opus testaceum” (fábrica de ladrillos)
situada 20 cm por debajo del nivel en la fábrica del complejo termal, propio de la naturaleza
freático, nos vimos obligados a inte- del edificio, así como de que es a partir precisamente de
rrumpir los trabajos, que resultaban
técnicamente complicados, y podían
Nerón cuando la arquitectura romana hace un uso extensivo
suponer la sobreexcavación de los apo- del ladrillo, inciden en la fecha y propuesta de producción
yos de las arquerías, lo que unido a la de material de construcción (ladrillos, “tegulae”) para el
presencia constante de agua podía po- horno que nos ocupa
ner en peligro la conservación del con-
junto.
pios consistentes en fragmentos de tegulae, (se
Una vez concluida la construcción del observan en el espacio situado entre la S3 y S4).
praefurnium y de la cámara de combustión, con Entre estos ripios se alojan las chimeneas, dis-
sus suspensurae, se procedió a la construcción de puestas en placas potentes de adobe, colocadas
la cámara de cocción. Precisamente de este últi- transversalmente a las suspensurae, formando gru-
mo elemento se nos ha conservado parte de la po de cuatro perforaciones agrupadas de dos en
parrilla (Par) o piso donde se dispondría el carga- dos. La conservación de parte de la parrilla es
mento cerámico. Concretamente se localizan res- una de las características más destacadas en cuan-
tos de la misma, sobre la 3ª y la 4ª arquería (S3 y to al estado del horno, ya que no es frecuente en
S4), y especialmente restos de las chimeneas que hallazgos semejantes.
posibilitaban el paso del aire caliente al exterior,
punto de apoyo de los tubuli que canalizaban el De la cámara de cocción, aparte de su piso,
aire caliente al exterior, garantizando una atmós- se nos ha conservado el arranque de las paredes.
fera de cocción oxidante en la cámara donde se El inicio del laboratorium se desarrolla a partir de
cargaba el material. la parrilla. Consiste en una mancha de rubefac-
ción en el límite de la construcción con el relleno
Evidentemente, las chimeneas están dis- practicado para su compactación. A partir de esta
puestas en los espacios situados entre los apo- altura debió de ser construido, probablemente a
yos de las suspensurae. Se trata de perforaciones base de adobes, algunos de cuyos restos han

CILNIANA 107
UN HORNO ROMANO EN EL SALADILLO

conformado una gran mancha de barro cocido, Periodo 2º.


con algunos trozos de pared, que colmató la es- Fase 2. Reutilización del horno
tructura tras su abandono (U.E. 5).
En un momento en que el horno había
Del resto de la estructura, sólo sabemos dejado de estar en uso, pero aún se podían apre-
que debió de desarrollarse a partir de la cota ab- ciar sus restos emergentes, se realizó una pro-
soluta situada, de media, en torno a los 2 funda excavación a la altura de la antigua parri-
m.s.n.m., y que en función de los restos apareci- lla, que insertó una fosa que fue cubierta con
dos de derrumbe de adobe (U.E. 5), debió ser imbrices (U.E. 6). El conjunto presentaba un relle-
construida con este material. no con abundantes restos de carbón, y debió estar
relacionado con alguna actividad de combustión
El horno, una vez en desuso, se fue que no hemos podido determinar. La excavación
colmatando con un nivel de arena, que rellenó la no llegó a perforar totalmente el arco de adobes.
cámara de combustión, posiblemente empezan-
do desde el praefurnium en un primer momento, Esta estructura fue colmatada por la U.E.
y posteriormente a través de la parrilla. 5, que interpretamos son los restos de lo que
debía ser aún parte el laboratorio que se debía
Sobre lo que sería la superficie del suelo encontrar, al menos parcialmente, en pie.
de uso del horno, y dispuesta en el mismo senti-
do que la estructura del horno, de Oeste a Este, Periodo 2º. Fase 3
se localiza a poco más de medio metro, una es-
tructura realizada insertando algunos fragmen- Sobre la colmatación de las estructuras se
tos de tegulae en el subsuelo, en sentido vertical procedió a realizar, en un momento indetermi-
(U.E. 4), que se encuentra en mal estado de con- nado, otra excavación, que fue colmatada por un
servación. No hay datos sobre su posible utili- depósito en el que se conservan restos de fauna
dad. (U.E. 3)

PROPUESTA CRONOLÓGICA
PARA LA CONSTRUCCIÓN Y USO
DEL FORNAX . ESTUDIO DE
MATERIALES

Ante todo, tenemos que precisar


que el material arqueológico de que dis-
ponemos para realizar las propuestas
cronológicas es muy reducido. No obstan-
te, es variado y las precisiones cronológicas
que aportan resultan bastantes coherentes.

Han sido especialmente provecho-


sas para este estudio las detalladas publi-
caciones de las memorias de excavación de
los alfares del ámbito cercano del Campo
de Gibraltar, de Venta del Carmen y Puente
Grande, que presentan conjuntos de épo-
ca imperial con abundantes materiales ar-
queológicos.

Los datos disponibles proceden, por


un lado, y mayoritariamente, de los frag-
mentos de cerámicas de vajilla de mesa y
cerámica común incluida en el aporte de
relleno de la fosa (U.E. 2) excavada para la
construcción del horno, así como del ma-
terial cerámico contenido en los estratos
de abandono que amortizan la estructura
(U.E. 7).

En los niveles más profundos de la


U.E. 2, concretamente en la limpieza del

108 CILNIANA
UN HORNO ROMANO EN EL SALADILLO

perfil llevada a cabo, se han localizado escasos Otras piezas, como las tapaderas, también
fragmentos de Terra Sigillata Gálica (en adelante tienen paralelos en estos yacimientos (Lám. 5-5)9.
T.S.G.) y algún fragmento atípico de ánfora impe-
rial. Concretamente, destaca un fragmento de una El hallazgo de un fragmento de dolium
forma Dragendorf 29 o 30, dado lo vertical de la (Lám. 5-6) para almacenaje nos remite a su vez a
pieza, con decoración de un friso de ovas y parte una pieza semejante localizada en la excavación
de una cruz de San Andrés (Lám. 4-1), fechable, de la Villa romana de la localidad de los Barrios
de forma genérica, en la segunda mitad del siglo de Puente Grande, con fechas de momentos fi-
I d.C. nales del siglo I d.C. Otro ejemplar similar se lo-

En los niveles más superficiales de la U.E.


2, el material es más abundante. En este conjun- Una vez finalizados los trabajos de excavación y
to, se localizan fragmentos de vajilla de mesa, considerando su singularidad, así como su estado
algún atípico de T.S.G. y mayoritariamente, den- de conservación, que permite interpretar
tro de lo escaso del conjunto, las formas lisas 18 adecuadamente una estructura de estas
ó 27 de Terra Sigillata Hispánica (en adelante T.S.H.)
(Lám. 4-2 y 4-3) y un pequeño fragmento decora- características, se propuso la necesidad de su
do con un motivo difícil de identificar, un par de conservación, facilitada por el hecho de que el
fragmentos de Terra Sigillata Itálica (en adelante horno se ubica en un sector donde está prevista la
T.S.I.), correspondientes a dos bases, una de ellas ubicación de una zona ajardinada
de una copa (Lám. 4-4 y 4-5), y uno de paredes
finas. Este último presenta decoración a la
barbotina. Se trata de parte de lo que sería una caliza en la excavación de la Venta del Carmen,
cenefa decorada con pequeños rombos dispues- en contextos de época de Tito y Domiciano10.
tos al tresbolillo (Lám. 4-6). Este mismo motivo
decorativo está presente en Venta del Carmen, y Sólo se ha conservado un fragmento típi-
se propone una cronología entre Claudio y fina- co correspondiente a un ánfora, concretamente
les del siglo II d. C4. Se trata probablemente de parte del borde de una Dressell del grupo 7-11,
una producción Bética. probablemente una 11. La cronología de este
grupo no llega en sus últimas producciones más
En cuanto a la cerámica común, destaca el allá de la segunda mitad del siglo I d.C., tal como
hallazgo de un fragmento de cazuela (Lám. 5-1), se constata en el ámbito de la Bahía de Cádiz11,
de posible producción norteafricana, tipo Ostia que por la pasta el fragmento bien podía ser el
III5, que presenta una cronología de momentos origen de esta producción, que se aparta de las
avanzados del siglo I d.C., a principios del siglo características de las producciones malacitanas.
II d.C. en contextos cercanos, como es la villa de
Puente Grande. En resumen, la cronología de la Unidad
Estratigráfica 2 se centra en momentos de la se-
Se localiza un fragmento de olla, de borde gunda mitad del siglo I d.C., probablemente sin
exvasado (Lám. 5-2). Se trata de una forma bien alcanzar el final del mismo. La africana de cocina
documentada en los yacimientos romanos del (forma Ostia III), así como la convivencia de T.S.G.
Campo de Gibraltar, con cronologías propuestas y T.S.H. y la presencia de cerámica de paredes
de época flavia y tardoflavia6. finas han permitido fechar conjuntos cerámicos
semejantes en estas fechas. La ausencia de otros
Se documenta un fragmento de borde de productos, como la Terra Sigillata Africana (en
orza, que presenta un engobe grisáceo al exte- adelante T.S.A.), tipo A, que llega a Málaga en
rior (Lám. 5-3). El tipo tiene una amplia cronolo- momentos iniciales del siglo II12, redunda en esta
gía, pero está presente en contextos malague- idea. En contextos cercanos, como el Campo de
ños, concretamente en la Villa de los Castillones, Gibraltar, concretamente en la excavación de la
donde es identificada como la tercera variante Villa de Puente Grande, donde conjuntos arqueo-
de estas piezas. El conjunto está fechado entre lógicos con abundante material arqueológico,
época de Nerón a Trajano7. No se encuentra, cu- estudiados en profundidad, son fechados en épo-
riosamente, en los conjuntos imperiales del Cam- ca de Trajano, presentan en todas las unidades
po de Gibraltar. estratigráficas una significativa presencia de T.S.A.
A13.
Se conserva un pequeño fragmento de bor-
de de ollita de borde vuelto (Lám. 5-4), interpre- En el conjunto están presentes restos de
tado como vasos para beber, a imitación de for- materiales de construcción, de los que hemos
mas de paredes finas8. No podemos confirmar que seleccionado, por su representatividad, dos bor-
este sea el caso del fragmento que nos ocupa. des de tegulae (Lám. 5-7 y 5-8).

CILNIANA 109
UN HORNO ROMANO EN EL SALADILLO

Creemos, que a pesar de lo escaso del coloración de un rojo vinoso muy intenso16, y
material, su coherencia nos permite aportar un tiende a descomponerse en contacto con el agua,
término post quem para la construcción de la es- podría ser un defecto de cocción y ser testigo de
tructura en época flavia, momentos de la segun- la última carga del horno, lo que indicaría al me-
da mitad del siglo I d.C., probablemente sin al- nos una dedicación a producción de material de
canzar momentos del emperador Trajano. construcción.

Para conocer el cese de la producción del La cercanía del horno, así como su proba-
fornax, contamos con los materiales situados en ble coetaneidad al momento de fundación de las
otros estratos arqueológicos. El único situado en termas localizadas en Costalita del Mar, y la apa-
el nivel de uso del horno, al exterior, es un frag- rente brevedad del periodo de uso del mismo,
mento de cerámica común, la boca de un jarro incidiría, como ocurre en otros contextos, en la
trilobulado (Lám. 5-9). Los paralelos documenta- idea de relacionar el horno con la construcción
dos lo fechan entre el siglo I y la primera mitad del complejo termal.
del siglo II d.C. 14. Los mejores equivalentes apa-
recen en la propia provincia de Málaga, en el ya- El abundante uso del opus testaceum (fábri-
cimiento de los Castillones, fechados con preci- ca de ladrillos) en la fábrica del complejo termal,
sión en los niveles de la segunda mitad del siglo propio de la naturaleza del edificio, así como de
I y principios del II d. C 15, es decir, entre época que es a partir precisamente de Nerón cuando la
de Domiciano a Trajano. A su vez, esta pieza pre- arquitectura romana hace un uso extensivo del
senta paralelos en Coninbriga, Alentejo, Medellín, ladrillo17, inciden en la fecha y propuesta de pro-
Mérida, etc. ducción de material de construcción (ladrillos,
tegulae) para el horno que nos ocupa.
El nivel de amortización de uno de los es-
pacios entre arquerías posibilitó el hallazgo de ANÁLISIS TIPOLÓGICO Y PARALELOS
otra pieza, con altos indicios de rodamiento. Se DE LA ESTRUCTURA DE COMBUSTIÓN
trata de un fragmento de T.S.G., una forma Drag.
30 (Lám. 4-7). La información que nos aporta Se han realizado diversas sistema-
simplemente redunda en una cronología post- tizaciones de la tipología de los hornos roma-
quem a mediados del siglo I d.C. para la amorti- nos. Las más famosas y usadas son las de Cuomo
zación. di Caprio18 y la de Flechter19. En general se atien-
de a dos criterios: la forma del horno y el siste-
La cercanía de la cronología de las piezas ma de sustentación de la parrilla. Otras propues-
que fechan la construcción, así como la amorti- tas de sistematización, menos conocidas, tienen
zación, nos lleva a pensar que el periodo de uso en cuenta el número de cámaras y de praefurnium.
de la estructura debió ser muy corto. Esta cir-
cunstancia no es nada extraña, si, como veremos Atendiendo a la primera de las tipologías,
más adelante, la estructura fue concebida para la el horno que nos ocupa, de planta rectangular,
construcción del cercano complejo termal. una sola cámara de combustión, canal central y
praefurnium orientado con la parrilla, correspon-
PRODUCCIÓN DEL HORNO dería al tipo IIb de Cuomo y al 3a de Flechter.

No podemos asegurar la producción del Este tipo de horno, usado indistintamen-


horno excavado, en función de la documentación te para la producción de cerámica común como
arqueológica obtenida. La ausencia de vertederos para la construcción de material de construcción
relacionados con la producción, así como de de- resulta muy común en el mundo romano. En la
fectos cerámicos no permite ser concluyentes a Galia, así como en Britania, es con diferencia el
este respecto. más habitual, tal como se recoge en el estudio

Probablemente, todo el conjunto pertenezca a una de las múltiples villas romanas que
se concentraban en todo el litoral malagueño y que están vinculadas con la
abundante producción de derivados piscícolas, constatadas por el creciente número
de piletas de salazón aparecidas en todo el litoral

No obstante, la presencia de un par de de la región de Gerona, donde, una vez más, este
tegulae completas caídas en el interior del hor- tipo está presente en cerca de un 80% de los hor-
no, espacialmente una de ellas, que presenta una nos descubiertos20.

110 CILNIANA
UN HORNO ROMANO EN EL SALADILLO

Sin embargo, no ocurre así en los territo- tos actualmente conservados correspondan a la
rios malacitanos. En una reciente sistematización práctica mitad de la estructura.
llevada a cabo por el Dr. Baena, se puede obser-
var como mayoritariamente los hornos romanos De las cuatro suspensurae documentadas,
malacitanos son del tipo I de Cuomo, es decir, de dos conservan las arquerías, y otras dos apenas
planta redonda. Sólo se conoce un caso, el des- los arranques de los pilares. Entre las suspensurae
aparecido horno de Bobadilla, cuya planta es re- documentadas, podemos observar restos de la
construida por testimonios, y que coincidiría con parrilla y de las chimeneas, así como el arranque
el tipo de Costalita21. del laboratorio o cámara de cocción.

En fechas recientes, se localizó parte de


un horno de planta rectangular en la ciudad de
Málaga, dispuesto inmediato a uno de planta cir-
cular. Ambos fueron destruidos22.

Las dimensiones del horno de Costalita,


más bien pequeñas, tienen paralelo con los hor-
nos de Peñarrubia, Toscanos y Cuevas del Bece-
rro, lo que los hace el tamaño más habitual en la
provincia.

Junto al horno se documentaron restos de


lo que interpretamos como parte de un canal.
Estructuras semejantes han sido localizadas en
el alfar de Torrox 23, así como en la ciudad de
Málaga, en la intervención de Calle Cerrojo-
Almansa.

CONSERVACIÓN DEL HORNO

Una vez finalizados los trabajos de exca-


vación y considerando su singularidad, así como
su estado de conservación, que permite inter-
pretar adecuadamente una estructura de estas
características, se propuso la necesidad de su
conservación, facilitada por el hecho de que el
horno se ubica en un sector donde está prevista
la ubicación de una zona ajardinada.

No obstante, las delicadas circunstancias El horno de Costalita es el único existente


de los restos (estructuras construidas con ado- de estas características en la provincia de Málaga
be), parcialmente sumergidos en el freático, han hasta el momento. El estado que presenta se
motivado que la primera intervención haya con- puede considerar bueno, a pesar de que se ha
sistido en la consolidación de los restos, encon- perdido casi la mitad de la estructura y se en-
trándose en la actualidad en estudio la viabilidad cuentra expuesto al nivel freático.
de su visita.
CONCLUSIONES
En cuanto a la conservación, en general,
los hornos son estructuras realizadas con mate- En Costalita IV se localizan los restos de
riales poco consistentes, como el adobe, y se un horno de producción cerámica romano. Es una
suelen destruir al concluir su uso24, al menos las substrucción con forma rectangular (2.50 por
estructuras emergentes, lo que permite retirar la 2.20 m) y canal central. Se trata de una estructu-
carga dispuesta sobre la parrilla. ra que conserva parte del praefurnium, parte de
la cámara de combustión y restos de la cámara
Suele ser difícil que se conserve al menos de cocción con parte de su suelo o parrilla.
la parrilla, o restos de las chimeneas o tubuli. En
el caso que nos ocupa, el horno estaba conserva- Se ha podido documentar parte del pro-
do en muy buen estado. Son las circunstancias ceso constructivo, así como proponer una fecha
de su hallazgo (el movimiento de tierra para in- de construcción y amortización, situada en la
sertar la grúa), las que han supuesto que los res- segunda mitad del siglo I d.C., probablemente

CILNIANA 111
UN HORNO ROMANO EN EL SALADILLO

en época flavia o tardoflavia. Existen suficientes cas en el alfar romano de la Venta del Carmen. Los Barrios, Cádiz,
indicios para pensar que su producción consis- Madrid, 1998, p. 203.
7
SERRANO, E.: Cerámica común romana: siglos II a.C. al VII
tió en materiales de construcción destinados a d.C. Materiales importados y de producción local en el territorio
un cercano complejo termal. malacitano, Málaga, 2000, p. 109.
8
CASAS, J.; CASTANYER, P.; NOLLA, J. M.; TREMOLEDA, J.:
En este complejo termal25 se han realiza- “Les ceràmiques comunes locals del N.E. de Catalunya”, en X.
AQUILUE (ed.): Ceràmica comuna romana d’època Alto-Imperial a
do trabajos arqueológicos de urgencia, dirigidos
la Península Ibèrica Estat de la questió. Monografías Emporitantes,
por D.ª Marta Bejarano, que han permitido la VIII, p. 104.
delimitación de los restos de un edificio termal, 9
REDONDO, C; ZAMORA, M.: “Las cerámicas comunes
construido con potentes muros realizados con altoimperiales” en D. BERNAL (coord.). Excavaciones arqueoló-
un encofrado de argamasa y mampostería (opus gicas en la Villa romana del Puente Grande (Los Altos del Ringo
Rango, Los Barrios, Cádiz)-Excavaciones arqueológicas en el alfar
caementicium). Se pudieron distinguir dos estan- romano de la Venta del Carmen. Los Barrios, Cádiz, Madrid, 1998,
cias, de la que se conservan testigos de los sue- p. 243.
los de obra de argamasa. Bajo ellos se documen- 10
REDONDO, C. y ZAMORA, M.: “Las cerámicas comunes y
tar on, en buen estado, canalizaciones y de almacenaje” en D. BERNAL (coord.): Excavaciones arqueológi-
cas en el alfar romano de la Venta del Carmen. Los Barrios, Cádiz,
suspensurae construidos en ladrillo (opus
Madrid, 1998, p. 220.
laeteritium). La cronología del edificio se sitúa en 11
GARCIA VARGAS, E. La producción de ánforas en la Bahía
momentos imperiales, amortizándose en el siglo de Cádiz en época romana (siglos II a.C.-IV d.C., Sevilla, 1998, p.
III d. C. A partir de esta fecha, se siguen 100.
reutilizando los muros antiguos, ya que se loca-
12
SERRANO, E.: “Sigillatas africanas del teatro romano de
Málaga”, en Estudios dedicados al Dr. Alberto Balil. In memoriam,
lizan depósitos asociados a su uso, documentán- Málaga, 1993, p. 92.
dose niveles del siglo VI d.C. 13
BERNAL, D. y LORENZO, L.: “Las cerámicas finas (TSI,
TSG, TSH, TSA A) y otras cerámicas datantes (lucernas, paredes
Probablemente, todo el conjunto perte- finas, africanas de cocina y engobe rojo pompeyano), en D.
BERNAL (coord.): Excavaciones arqueológicas en la Villa romana
nezca a una de las múltiples villas romanas que
del Puente Grande (Los Altos del Ringo Rango, Los Barrios, Cádiz),
se concentraban en todo el litoral malagueño y Cádiz, 2002, p. 137-185.
que están vinculadas con la abundante produc- 14
ALVARADO, M. y MOLANO, J.: “Aportaciones al conoci-
ción de derivados piscícolas, constatadas por el miento de las cerámicas comunes altoimperiales en Augusta
creciente número de piletas de salazón apareci- Emerita: el vertedero de la Calle Constantino” en X. AQUILUE
(ed.): Ceràmica comuna romana d’època Alto-Imperial a la Penínsu-
das en todo el litoral. Claros ejemplos de las vi-
la Ibèrica Estat de la questió. Monografías Emporitantes, VIII, p.
llas romanas en línea costera o villae a mare son 287.
las excavadas en el Castillo (Manilva), las Torres, 15
SERRANO, E.: “Producciones de cerámicas comunes lo-
en la desembocadura del río Guadalmansa cales de la Bética”, en X. AQUILUE (ed.): Ceràmica comuna roma-
(Estepona), Río Verde (Marbella), la Finca del Se- na d’època Alto-Imperial a la Península Ibèrica Estat de la questió.
Monografías Emporitantes, VIII, p.241.
cretario (Fuengirola)y Benalroma (Benalmádena). 16
La gradación de colores bajo la influencia del calor es
Estas instalaciones mantienen una ocupación sintomática de la temperatura alcanzada. Así, una coloración
desde momentos altoimperiales con una fase de roja oscura o viva indicaría temperaturas entre 650 y 850 gra-
abandono al final del periodo tardío. dos. El mínimo para la cocción del barro es de 900 grados, por
lo que se podría intuir que esta pieza no llegó a alcanzar la
temperatura mínima de cocción, y se podría considerar un
defecto de producción. COTIER-ANGELI, F. La cerámica, Barce-
Notas lona, 1974, p. 61.
17
ADAM, J. P.: La construcción romana, materiales y técnicas.
1
Queremos agradecer desde estas líneas a la empresa In- León, 1996, p. 157.
mobiliaria Urbis S. A. y en especial a D. Melchor Díaz las facili- 18
CUOMO DI CAPRIO, N. “Tecnologia nellántichita”, RArch,
dades prestadas en los trabajos de excavación. 1971, pp. 59-81.
2
BEJARANO, M. y PEÑALOSA, B.: Informe-Memoria de la 19
FLECHTER, D.: “Tipología de los hornos romanos de Es-
intervención arqueológica de urgencia realizada en la parcela paña”, AEspA, 38 (1965), pp. 170-174.
C de la urbanización Costalita I. Estepona, (Málaga). Informe 20
TREMOLEDA, J.: “Anàlisi del l’organitzaciò dels tallers
administrativo, inédito. locals de ceràmica a les comarques Gironines”, en X. AQUILUE
PÉREZ-MALUMBRES, A. y MARTÍN, J. A.: “La villa romana (ed.): Ceràmica comuna romana d’època Alto-Imperial a la Penínsu-
de El Saladillo (Estepona, Málaga)”, Cilniana, nº. 14 (2001), pp. la Ibèrica Estat de la questió. Monografías Emporitantes, VIII, p. 88.
87-91. 21
BAENA DEL ALCAZAR, L.: “Arquitectura y tipología de
3
SERRANO, F.: “Características geológicas de las costas de los hornos romanos malacitanos”, en Figlinae Malacitanae, Má-
la provincia de Málaga”, en Itinerarios por espacios naturales de la laga, 1997, p. 98.
provincia de Málaga, Málaga, pp. 217-230. 22
RAMBLA, J. A. y MAYORGA, J.: “Hornos de época
4
BERNAL, D. Y LORENZO, L.: “Las cerámicas importadas y altoimperial en calle Carretería, Málaga”, en Figlinae Malacitanae,
la cronología del complejo alfarero” en D. BERNAL (coord.): Málaga, 1997, p. 75.
Excavaciones arqueológicas en el alfar romano de la Venta del Car- 23
RODRÍGUEZ OLIVA, P.: “Los hornos cerámicos del faro
men. Los Barrios, Cádiz, Madrid, 1998, p. 69. de Torrox (Málaga). En Figlinae Malacitanae, Málaga, 1997, p.
5
AQUILUE, X. “La cerámica común africana”, en X. AQUILUE 282.
(ed.): Ceràmica comuna romana d’època Alto-Imperial a la Penínsu- 24
BAENA DEL ALCAZAR, L.: “Arquitectura y tipología de
la Ibèrica Estat de la questió. Monografías Emporitantes, VIII, p. 68. los hornos romanos malacitanos”, en Figlinae Malacitanae, Má-
6
REDONDO, C. y ZAMORA, M.: “Las cerámicas comunes y laga, 1997, p. 96.
de almacenaje” en D. BERNAL (coord.): Excavaciones arqueológi- 25
Vid. Nota 2.

112 CILNIANA
El Castillo de La Duquesa
o Fuerte de Sabinilla y edificios
de carácter militar en su entorno
Marcos Vázquez Candiles

Fachada este y sur. Castillo de La Duquesa. Manilva.

E l litoral de Manilva se encuentra enmarcado


entre el río Manilva y Chullera, en un tramo
rectilíneo de la costa malagueña que se extiende
tancias especiales en la rompiente de las playas
del término municipal de Manilva. Su territorio
está constituido por una secuencia de lomas que
desde la torre de la Sal en el término municipal descienden suavemente hacia el mar y vaguadas
de Casares hasta el límite con la provincia de recorridas por múltiples arroyos, destacando jun-
Cádiz. Las playas de Manilva poseen una longi- to a la costa las formaciones rocosas de piedra
tud de siete mil ochocientos metros, diferencián- arenisca de la loma del Negro y del Rey y en las
dose éstas en dos áreas o tramos: playas proximidades del lugar donde se encuentra el in-
rectilíneas de baja pendiente con una longitud mueble objeto de nuestro artículo, el cerro del
de seis mil novecientos metros y Punta Chullera Hacho. Las playas de la Duquesa en el frente don-
con novecientos metros de acantilados bajos. La de se ubica el Castillo eran amplias hasta que la
proximidad al Estrecho de Gibraltar genera una construcción del Puerto Deportivo de la Duque-
dinámica en el litoral manilveño que se verá afec- sa cambió la dinámica y con ello la línea costera.
tada por las corrientes atlánticas y la influencia Hoy, este edificio da la sensación de estar más
de los vientos de levante, creando unas circuns- próximo al mar de lo que estuvo en su día.

CILNIANA 113
EL CASTILLO DE LA DUQUESA

El magnífico fondeadero que constituye Este, hacia el arroyo del Estanquillo por el Sur y
el litoral manilveño, la cercanía al río Guadiaro desciende suavemente hasta el arroyo de la
(paso hacia el interior y la Serranía de Ronda), así Peñuela, algo más alejado, por el Norte, quedan-
como la situación del do el Oeste protegido
término municipal de por el cerro del Hacho
Manilva, tan próximo El lugar donde se encuentra ubicado el y Terán. En la actuali-
a Gibraltar y a las cos- castillo de la Duquesa o fuerte de Sabinilla ha dad las múltiples ur-
tas africanas, ha pro- banizaciones y edifi-
vocado a lo largo de tenido una larga trayectoria para la defensa y cios merman su visi-
los años que fuese lu- vigilancia de esta costa bilidad y no permiten
gar fronterizo y por lo hacerse una idea cla-
tanto ejercido una ra de lo que significó
función tanto de vigilancia como de defensa de la fortaleza en este punto de la costa. Desde su
la costa, unas veces por las incursiones piráticas, posición céntrica y dominante se tenía una am-
otras por las armadas enemigas, otras por la lu- plia perspectiva del litoral, siendo desde luego la
cha contra el contrabando1. No es nada extraño más adecuada para la vigilancia y protección del
que encontremos continuamente muestras de fondeadero. También tenemos que destacar que
este pasado en edificios o en su toponimia: las aquí había una abundante y considerable canti-
dos torres de Chullera, la torre de la Duquesa, la dad de piedra y material de las ruinas romanas
torre de la Vela, la torre del Abad...; la casa fuerte del yacimiento arqueológico “Entorno al Castillo
de las playas de Manilva, la casa fuerte de la de la Duquesa”, gran parte de los cuales se utili-
Sabinilla, el Castillo de Sabinilla, el cuartel de zaría en la construcción del fuerte. No es raro
Carabineros de Chullera y el del Castillo; la calle encontrar entre sus muros o en edificaciones
Cuartel, la calle de la Torrecilla o el pozo de los antiguas cercanas a él usado como ripio restos
Metedores entre otros. de estos materiales: “Opus Signinum”, ánforas...4.

El lugar donde se encuentra el castillo de La Guerra de Sucesión, por la que se esta-


la Duquesa o fuerte de Sabinilla ha tenido una bleció la dinastía de los Borbones en España, tra-
larga trayectoria en la defensa y vigilancia de esta jo como consecuencia en la zona la toma de Gi-
costa. No hay que olvidar que en una provisión braltar por los ingleses. La escuadra angloho-
de 1511 ya aparece citada la torre de la Duquesa landesa se movía sin dificultades, dueños del mar,
en las cercanías de aquella playa2 o que, a media- casi sin oposición por lo mermado de la flota
dos del siglo XVIII, en el mismo lugar en el que francoespañola. Los ataques a la costa se multi-
se ubica el castillo, aunque desplazada treinta y plicarían y este hecho supuso que con el tiempo
cinco metros por delante de su acceso, se cons- España se replantease militarmente la necesidad
truyó la casa fuerte de la Sabinilla 3. de reforzar el litoral obligando a un cambio en
las estructuras de defensa. Concluida la guerra,
“El Castillo”, como es conocido este edifi- la España borbónica con sus ideas reformistas y
cio, está situado en una zona mesetada del lito- las relaciones con ingenieros europeos, sobre
ral de Manilva que desciende hacia el mar por el todo italianos, genera la publicación de tratados

Castillo de La Duquesa. Sabinilla-Manilva.

114 CILNIANA
EL CASTILLO DE LA DUQUESA

sobre fortificaciones. La
aparición de ingenieros
militares cada vez más
preparados, y la recupera-
ción política y administra-
tiva durante el reinado de
Fernando VI, que mantu-
vo una política neutral,
fomentó la creación de
fuertes costeros5. De he-
cho, a mediados del siglo
XVIII se diseñan los pro-
yectos de casa fuerte o
cuarteles para las playas
de Manilva. Uno de estos
cuarteles se levantaría jun-
to a la cañada real o cami-
no de los Barrios a
Estepona, a unos 35 me-
tros aproximadamente de Subida al revellín.
donde años más tarde se
construyó el Castillo. Con él se cumplían varios ña todo un cambio que afectará también a las
objetivos, entre otros reforzar militarmente es- costas del reino de Granada. Las reformas en la
tas playas cubriendo las carencias de las torres defensa de la costa llevadas a cabo por el rey se
de la costa. Las reformas del ejercito y la crea- inician con el encargo al mariscal de campo An-
ción de estos cuarteles, en principio un hecho tonio María de Bucarelli de un informe indicati-
intrascendente, supuso que el Estado asumiese vo de la situación. Posteriormente, con la
la defensa y control del litoral y del contrabando promulgación del “Reglamento que Su Majestad
que se producía desde Gibraltar. Este cuartel se manda observar en las diferentes clases destina-
construyó aprovechando los restos de muros ro- das al real servicio de la costa del Reino de Gra-
manos del mencionado yacimiento arqueológi- nada” de 1764, se quería reorganizar la defensa
co, que en algunos casos llegaban a alcanzar más del litoral y evitar la carencia de edificios con ar-
del metro y medio de altura, estando apoyado tillería. En las costas del reino de Granada que se
en ellos. El edificio se acondicionó para acoger corresponde con las actuales provincias de Mála-
un pequeño destacamento de caballería y otro ga, Granada y Almería, se construyeron 21 edifi-
de infantería con su oficial, así como una garita cios nuevos, financiados muchos de ellos por
dando vistas al mar. A raíz de la construcción del particulares a cambio de cargos militares6, como
Castillo la casa fuerte o cuartel pierde su fun- es el caso del Castillo de la Duquesa. El objetivo
ción militar y es usado como venta mesón a lo no era otro que la dotación de la artillería sufi-
largo de todo el siglo XIX y parte del XX, la llama- ciente en el litoral para disuadir con su fuego al
da venta de San Bernardino. Posteriormente el enemigo. Por lo tanto, la decisión de construir el
abandono del edificio provocó el deterioro y hun- castillo estaba justificada. La casa fuerte o Cuar-
dimiento de las cubiertas anunciando su final, tel de la Sabinilla no contaba con artillería, en
que se vería precipitado en la década de los ochen- unos momentos en los que se iniciaban de nue-
ta del recientemente finalizado siglo con la reti- vo las hostilidades y en un lugar en el que se
rada de la capa de tierras fértiles de su entorno requería la mejora técnica para su defensa. El Cas-
para los jardines del Puerto deportivo de la Du- tillo de la Duquesa o Fuerte de la Sabinilla, al
quesa, dejando al descubierto los restos roma- igual que la casa fuerte, se construirá sobre res-
nos. En 1987 el Ayuntamiento de Manilva deci- tos del mencionado yacimiento arqueológico.
dió la construcción de un campo de fútbol en
aquel lugar ocasionando el arrasamiento de un
área del yacimiento romano y la demolición y des- A mediados del siglo XVIII se diseñan los
trucción total de la antigua Casa-fuerte, a pesar proyectos de casa fuerte o cuarteles para las
de la oposición y resistencia que sus muros pre- playas de Manilva
sentaron a la maquinaria pesada que realizó las
obras.
Hasta no hace muchos años, a los pies del reve-
Con la muerte sin descendencia de Fer- llín, se podían ver los restos de “sigilata” y
nando VI el trono lo ocupó su hermano Carlos “teselas” sueltas que el asfalto de la carretera de
llegado de Nápoles. Carlos III supone para Espa- acceso a la barriada ha ocultado.

CILNIANA 115
EL CASTILLO DE LA DUQUESA

En los primeros meses del año 1765 se “... un capitán o subalterno; vein-
había presentado el proyecto de un fuerte con ticinco soldados de infantería con un sar-
batería, siguiendo el Plan que el rey había esta- gento y dos cabos; ocho o diez caballos y
blecido para su construcción en distintos puntos soldados con otro sargento; diez artilleros
con su sargento; un guarda almacén y un
capellán”9.

La llegada de los franceses a estas tierras,


en la llamada Guerra de la Independencia, provo-
có la ocupación del castillo. A él se destinaron
cincuenta franceses desde donde controlaban los
caminos principales. Previamente y para reforzar
las defensas del castillo de Casares los patriotas
se habían llevado todo lo que pudieron usar que
les sirviese para luchar contra los franceses. Se
llevaron los cañones que había en las cercanías
de la torre de la Duquesa y también se hicieron
excavaciones en las playas buscando cañones del
propio castillo o de los lugares donde se sabía
que se habían producido naufragios, encontrán-
dose una culebrina en las cercanías del Castillo
que también fue trasladada a Casares, donde el
artillero José Delgado y el soldado Juan Ortiz la
reconocieron y la encontraron en buenas condi-
ciones para su uso.

Entre las acciones que realizaron los pa-


triotas y soldados para impedir el suministro es-
tuvo la interceptación en el cerro Calabozo de
doscientas cargas de víveres que se destinaban a
los franceses de San Roque; escoltadas por vein-
ticinco o treinta hombres, al ser sorprendidos por
el abundante fuego corrieron por la playa para
Subida al revellín vista desde el patio de armas. refugiarse en El Castillo. De esta acción murie-
ron cinco soldados franceses y fueron hecho pri-
de la costa y según el modelo del Ingeniero sioneros un cabo y un soldado que había sido
Director del Reino don José de Crame. En 1767 herido de bala en un muslo y de una puñalada en
el vecino de Sevilla don Francisco Paulino cons- el pecho. El reguero de sangre que dejaron los
truye a sus expensas el castillo de las playas que huyeron evidenciaba que los heridos eran
de Manilva, al que por este servicio el rey le muchos más, de hecho esa misma noche murie-
concedió el mando de una compañía de caba- ron tres franceses en El Castillo como consecuen-
llería. El diseño de la planta y la dirección de cia de las heridas según aseguraron dos
obra se encargó al Ingeniero don Miguel del manilveños que estaban allí prisioneros10. Pero
Castillo, la obra la llevó a cabo el maestro don fueron muchas más las acciones, las fuerzas si-
José de Vargas 7. El 19 de febrero de 1767 se tuadas en el castillo continuamente fueron hos-
firmó ante el notario don Fernando Nicolás de tigadas y sobre todo las fuerzas de infantería que
Fricio la escritura de obligación hecha por salían de él o los soldados de caballería que ha-
Lázaro Rodríguez, vecino de Manilva y fabri- cían las guardas de los caminos.
cante de ladrillos. Su fiador sería don Francis-
co Díaz Manso. Lázaro Rodríguez se compro- Terminada la Guerra de la Independencia
metía a entregar a don Francisco Paulino la can- y como nos dice Sebastián de Miñano en su Dic-
tidad de 20.000 ladrillos a 100 reales el millar, cionario Geográfico-estadístico de 1826 en esa
antes del mes de abril de ese año. Se entrega- fecha aun había un destacamento. Sin embargo
rían en el fuerte, siendo de la satisfacción de en el Diccionario Geográfico-estadístico de
don Miguel del Cas- Pascual Madoz de
tillo 8. 1841 se dice:
En 1767 el vecino de Sevilla don Francisco
Terminado la Paulino construye a sus expensas el castillo “Esta forta-
fortaleza la tropa que de las playas de Manilva leza que podría, en
se destinó a él fue: cuantas ocasiones se

116 CILNIANA
EL CASTILLO DE LA DUQUESA

presentasen proporcionar a la nación ser- no para cocer pan, y en el siguiente, la


vicios semejantes o mayores a los que ha puerta de otro gran cuartel que servía de
prestado en otras diferentes épocas, se en- alojamiento a los soldados de dicho cuer-
cuentra en el día en un total abandono, po y para almacén de provisiones.
sin un soldado de guarnición, ni aun local
donde se hospede, pues las puertas y ven- En el ángulo del lado oriental del
tanas, antes fornidas, no pueden cerrarse mismo patio se ve la puerta de su espacio-
por falta de sus hojas, las aguas se filtran sa capilla, quedando en el intermedio de
y los embovedados por consiguiente se des- las dos últimas piezas, el lugar común, la
moronan, todo lo cual podría repararse subida al revellín de la batería de grueso
en la actualidad con muy poco costo.” calibre y la escalera que conduce a la pla-
za de armas referida.
La distribución de las dependencias según
Madoz es la siguiente: Inmediato a la capilla y en el lien-
zo siguiente, se halla el cuartel de los arti-
“ Tiene en las afueras de su puerta lleros y el local para su comandante y al
un reducto aspillerado con 15 troneras último frente y mano izquierda de la en-
para fusilería. A la entrada hay un puente trada al patio, el almacén de artillería y
levadizo que cubre toda la puerta, el cual la habitación del guarda-almacén.
se levantaba con dos fuertes cadenas de
hierro pendientes de igual nº de garruchas La plaza de armas es tan dilata-
de bronce, que estaban fijas en los extre- da cuanto lo son las piezas bajas del edifi-
mos del umbral superior y que hoy han cio, pues es la cubierta o azotea de todas
desaparecido al igual que las cadenas. ellas, en la que hay una garita para el
centinela y otra en el revellín donde esta-
Cuenta 99 troneras además de la ba la artillería gruesa montada de que se
del reducto mencionado; 63 de ellas son deja hecha mención.”
altas y construidas en los frentes de la pla-
za de armas y las restantes bajas, que sa- El Castillo permaneció abandonado duran-
len de los cuarteles y piezas de que más te años hasta que fue ocupado como acuartela-
abajo hablaremos. miento por el Cuerpo de Carabineros de Costa.
Pero por las condiciones de insalubridad que pre-
En la misma entrada del castillo y sentaba, se construyó una caseta en tierras de
paso del puente levadizo hay una larga propios a unos cien metros de éste donde se tras-
bóveda o arco prolongado que conduce al ladó la guarnición. Poco después, debido a las
patio; debajo de este arco y a su izquier- dimensiones del edificio y a la necesidad de re-
da, se halla el pabellón del comandante, forzar la vigilancia por el aumento del contraban-
existiendo al lado derecho otras dos loca- do se solicitó de nuevo al Ayuntamiento terre-
lidades, una de las cuales, sirvió siempre nos para una ampliación de la caseta11 (11) y en
de calabozo y lugar de prisión y otra de 1890 se construyó un cuartel. Con la desapari-
cocina del citado pabellón. ción del Cuerpo de Carabineros en 1940 el cuar-

El patio es cua-
drado, cayendo al mismo
las aguas de toda la pla-
za de armas, por cuatro
canales colocados en sus
otros tantos ángulos. En
la primera pieza, a la
derecha de la entrada del
patio, está el cuartel de
la infantería, que ade-
más de los tablados muy
capaces para las camas
de la dotación de esta
arma tenía su cocina y
chimenea. En el lienzo in-
mediato se encuentran
las cuadras de la caba-
llería con pajar y un hor- Cañón a la entrada del castillo.

CILNIANA 117
EL CASTILLO DE LA DUQUESA

tel, que pasó por algunas transformaciones, se po de completa dejadez, el Ayuntamiento de


transfirió a la Dirección General de la Guardia Civil Manilva solicitó el inmueble para museo arqueo-
hasta muy recientemente. lógico y centro cultural. El servicio jurídico del
Estado daría su conformidad en septiembre de
¿Pero qué sucedió con el Castillo después 1993 y el 29 de junio del mismo año el Ministro
de ser desalojado por los carabineros? En los úl- de Economía y Hacienda mostró su conformidad
timos años del siglo XIX el entonces alcalde, don con la propuesta. El 30 de junio de 1994 se fir-
mó la escritura de cesión de la finca otorgada
por el Delegado Provincial de Economía y Hacien-
Más recientemente y tras un lapso de tiempo de da en Málaga, don Santiago Quintana de Blas a
completa dejadez, el Ayuntamiento de Manilva favor del Alcalde Presidente del Ayuntamiento de
solicitó el inmueble para museo Manilva. En la actualidad lo ocupa el área de cul-
arqueológico y centro cultural tura del Ayuntamiento de Manilva como sala
museo, para exposiciones y, por convenio con la
Universidad, sede de los cursos de verano. En la
Diego Ferrer López, aprovechando la coyuntura, actualidad se está ultimando el Proyecto de mu-
y siendo propietario de los terrenos donde se seo etnoarqueológico y para un futuro próximo
encontraba ubicada la venta de San Bernardino, se ejecutarán las obras de restauración.
se apropió de él usándolo como almacén, cuadra
y pajar. El 22 de julio de 1913 se recibió en el ANEXO DOCUMENTAL
ayuntamiento de Manilva una circular en la que
el Gobernador Militar de la provincia comunica- Archivo Municipal de Manilva
ba que, en virtud de un R. D. de 26 de febrero del Actas de Pleno
mismo año relativo a zonas polémicas asignadas
a las plazas y puntos fortificados y de aislamien- Documento 1º
to de edificios peligrosos, se hacía necesaria la
delimitación y amojonamiento de los terrenos de Villa de Manilva, 12 de Diciem-
El Castillo. La colocación de los postes señalizan- bre de 1885
do la zona de influencia creó un conflicto con
Diego Ferrer, que no estuvo conforme con el pro- “Punto3º
cedimiento seguido, ni con la actitud del Tenien-
te de Carabineros que empezó a hacer uso de los De orden del Sr. Presidente diose
pastos sembrados por él, y mucho menos con lectura a un oficio cuyo contenido literal
que el edificio perteneciese al Ministerio de la es como sigue = Al margen dice = Comd
Guerra u otro organismo12. Años después de amo- ª de Cara b de Málaga = Comisión fiscal
jonado y delimitado el espacio correspondiente = Comisionado para la formación de una
al Castillo vuelve a ser ocupado por algunos veci- caseta de nueva planta donde se encuen-
nos que no tenían viviendas, permaneciendo sus tran enclavada la del Cuerpo llamado
“Sabinillas” cuyo expediente no ha sido
aprobado por el Excmo. Sr. Director Gene-
ral del Cuerpo por ser la caseta que se pro-
yecta de mayores dimensiones que la ac-
tual y como quiera por último que hayan
por necesidad de tomarse algunos metros
de terreno con dicho fin, en esta atención
ruego a Vd. tenga la dignación de servirse
manifestar a esta fiscalía a quién pertene-
ce el terreno donde esta dicha caseta y
caso de ser propiedad de ese Ayuntamien-
to de su digna presidencia se digne mani-
festarme la demarcación del terreno que
de acuerdo haga a favor de la Hacienda
encareciéndole a la vez remita acta origi-
nal del mismo = Dios que a V. = Estepona
El castillo visto desde la playa. 27 de Noviembre 1885 = El tente fiscal
= Martín Pescador = Sr. Alcalde Const.
descendientes en él hasta que se construyeron de Manilva.
casas de protección oficial para estas familias jun-
to al arroyo del Estanquillo a cambio de su des- La Municipalidad pues hecha car-
alojo. Más recientemente y tras un lapso de tiem- go del contenido del transcrito anterior

118 CILNIANA
EL CASTILLO DE LA DUQUESA

oficio y teniendo en cuenta que los terre-


nos adyacentes a la caseta de Carabineros
de Sabinillas próxima al Castillo de dicho
nombre es de la pertenencia de este Muni-
cipio, acordó por unanimidad ceder a la
Hacienda todo el que necesite para la am-
pliación o ensanche de dicha Caseta así
como también el que de este particular se
contraiga copia certificada que se remiti-
rá a la aludida comisión fiscal”.

Documento 2º

Sesión Ordinaria del día 10 de


Enero de 1914

“... Por el Sr. Alcalde Presidente se


dio cuenta con lectura íntegra de un escri-
to fecha cuatro del actual presentado por
el vecino de esta villa D. Diego Ferrer López
en el que manifiesta que a su regreso de
un largo viaje a la capital ha observado
que en los terrenos de la finca de su pro-
piedad denominada San Bernardino que
antiguamente se titulaba Venta Mesón,
situada en el sitio conocido por Castillo
de Sabinilla o Duquesa de este término, se
han puesto tres mojones por dentro de la
cerca de piedra seca de la expresada fin-
ca, uno a siete pasos, otro a un paso y
otro a nueve pasos y que hechas por dicho
Sr. Ferrer las oportunas indagaciones para Bastión.
conocer quién o quienes se habían permi-
tido poner dichos mojones sin avisar ni a vitando a esta Alcaldía para que nombra-
él ni al encargado de la anunciada finca, ra un representante suyo toda vez que le
resulta que con fecha 7 de diciembre últi- aseguran que al Sr. Ingeniero que efectuó
mo efectuaron dicho amojonamiento un Sr. el amojonamiento no le acompañaba nin-
Ingeniero Militar y otros auxiliares foras- gún vecino de esta localidad que pudiera
teros, deduciendo por tanto que la opera- ostentar dicha representación para llevar
ción llevada a efecto ha sido en virtud del a efecto la fijación de los referidos mojones
Real Decreto de 26 de Febrero del pasado entendiendo por tanto como propietario
año 1913 sobre nueva demarcación de del terreno de que se le pretende despojar
zonas polémicas asignadas a las plazas y con la operación realizada que el repetido
puntos fortificados y de aislamientos de amojonamiento carece de las formalidades
edificios peligrosos y polígonos de tiro y de mandadas cumplir por el repetido R.D. y
las instrucciones que al mismo se acompa- por consiguiente debe declararse nula.
ñan toda vez que se encuentra entre ellas
el Castillo denominado de Sabinilla con una Al propio tiempo se hacen por el
zona polémica de veinte metros que sin reclamante en el referido escrito ciertas
duda es el que han demarcado, en cuyo aclaraciones sobre el estado pasado y ac-
escrito manifiesta que aun cuando no tie- tual del referido Castillo manifestando por
ne gran importancia el terreno de cuya las razones que aduce que la tradición y
propiedad se le pretende despojar con el concepto particular del Castillo nombra-
amojonamiento llevado a cabo, no por ello do de la Duquesa o Sabinilla procede de
renuncia al derecho de que se encuentra la Sra. Condesa Duquesa de Arcos y basa-
asistido para reclamar contra tal opera- do en los demás hechos que en su escrito
ción, como lo hace por medio de dicha so- consigna el reclamante niega que dicho
licitud, fundándose en que por el Sr. Co- Castillo pueda pertenecer ni a Guerra ni
mandante de Ingenieros se ha faltado a lo a Hacienda ni al Estado y en cambio afir-
que obligan las referidas Instrucciones in- ma que le pertenece a él con más derecho

CILNIANA 119
EL CASTILLO DE LA DUQUESA

za; cuyo oficio quedó cumplido por la


Alcaldía a su debido tiempo en la parte
de publicidad para conocimiento de es-
tos habitantes por medio del oportuno
bando, si bien debe hacerse constar, que
habla de la remisión de planos, siendo
así que no se acompañaba nada más
que uno; por lo cual entendía que debie-
ra acordarse por la presente Corpora-
ción lo que considerara procedente.

El Sr. Concejal D. Pedro Montero


López previa la venia de la Presidencia
expuso que le constaba que el Sr. Teniente
de Carabineros de Infantería del Casti-
llo D. Ramón Calleja García querién-
dose amparar sin duda en la demarca-
ción llevada a efecto del repetido Casti-
llo y olvidando lo que preceptúa la letra
Plano de alzado. “a” en su párrafo primero de las ins-
trucciones aprobadas para el cumpli-
que a ninguna otra persona o entidad tan- miento del enunciado R.D. ha dispuesto que
to por venirlo poseyendo en precario des- por su asistente se le dé de comer al caba-
de hace porción de años y haberlo cuida- llo y que la alfalfa que con anterioridad a
do para evitar que fuera derruido como la fecha que se hiciera el amojonamiento
por ser el más antiguo de los poseedores. se encontraba sembrada en el terreno de
D. Diego Ferrer López señalado como zona
El propio Sr. Presidente manifestó polémica utilizando dicha alfalfa para su
que con vista del escrito de referencia ha uso propio lo que parece demostrar en di-
podido comprobar que los referidos mojo- cho Sr. que a él pertenece el terreno demar-
nes se encuentran puesto en la finca del re- cado y la plantación que se encuentra en el
clamante D. Diego Ferrer López sin que haya mismo lo cual entiende el exponente cons-
concurrido al acto ningún representante de tituye un abuso máxime cuando aun no
esta alcaldía por no habérsele invitado para puede ser firme el amojonamiento practi-
tal operación no obstante el oficio del cado y por tanto no puede tener derechos
Excmo. Gobernador Militar de esta provin- nadie a dichos terrenos ni menos a la plan-
cia fecha 22 de julio último que copiado tación de D. Diego Ferrer López.
dice así “Para su conocimiento y el de sus
administrados, y en cumplimiento de lo que El Ayuntamiento en su consecuen-
preceptúan las instrucciones que acompa- cia teniendo en cuenta las razones y fun-
ñan al R.D. de 26 de febrero
próximo pasado (D.O. nº 46)
relativo a nuevas zonas polémi-
cas asignadas a las plazas y
puntos fortificados y de aisla-
miento de edificios peligrosos y
polígonos de tiro tengo el ho-
nor de remitir a V.S. planos de-
tallados de la zona correspon-
diente al Castillo de ese pueblo;
manifestando a V.S. con este
motivo que los hitos necesarios
para el amojonamiento de la
zona de ese Castillo se están
construyendo y a su debido
tiempo invitará a V.S. para que
nombre un representante suyo
que asista a la colocación de
ellos por parte de la Comandan-
Plano y perfil de las barracas cuartel de la playa de Manilva
cia de Ingenieros de esta pla- y Cala Carbón (Marbella).

120 CILNIANA
EL CASTILLO DE LA DUQUESA

damentos que expone el solicitante y que


por la Comandancia de Ingeniero de Má-
laga no se ha cumplido con el requisito de
invitar a la Alcaldía para el nombramien-
to de un representante no solo olvidando
el ofrecimiento que se hiciera en el oficio
precopiado sino considerando letra muer-
ta la obligación que terminantemente le
impone a ello las instrucciones aprobadas
para cumplimiento del R.D. de 26 de Fe-
brero de 1913 en la parte “Demarcación
de las zonas polémicas” y que entre el Cas-
tillo de la Duquesa o Sabinilla y el cerca-
do de la finca nombrada de San Casa fuerte de la Sabinilla.
Bernardino de la propiedad de D. Diego
Ferrer para el Camino Real de Málaga a Andaluz del Patrimonio Histórico. Sección Infor-
San Roque; visto lo que disponen las ex- mación: Patrimonio Histórico Andaluz. Boletín nº
presadas instrucciones y el reglamento de 36 de 2001(Texto electrónico). Disponible en
22 de Diciembre de 1880 por unanimidad www.juntadeandalucia.es/cultura/iaph/infopha/
acuerda hacer constar que debe declarar- 05textose/boletin36/b3603.html
se nulo el amojonamiento llevado a efecto BAREA FERRER, José Luis:. ”La defensa de la
o en otro caso que se rectifique el ya hecho costa del reino de Granada a mediados del siglo XVIII”.
con las formalidades mandadas cumplir Anuario de Historia Moderna y Contemporánea
por dichas disposiciones, nombrándose una de la Universidad de Granada, 1975-1976, nº II –
Comisión Mixta por la superioridad para III.
que proponga lo que proceda, y con res- CAPEL SÁEZ, Horacio et al.: “Los ingenieros mi-
pecto a los derechos que alega sobre el litares en España. Siglo XVIII. Repertorio biográfico e
Castillo que nos ocupa el reclamante D. inventario de su labor científica y espacial”. Barcelo-
Diego Ferrer López se limita la corpora- na: Universidad de Barcelona, Col. “Geo-Crítica.
ción a hacer constar que sabe lo viene uti- Textos de apoyo”, 1983.
lizando dicho Sr. hace más de diez y ocho CAPEL SAEZ, Horacio et al.: “De Palas a
años entendiéndose que lo hace en con- Minerva: la formación científica y la estructura
cepto de precario acordándose por último institucional de los ingenieros militares en el siglo
que para la resolución que proceda se re- XVIII” Barcelona: Ediciones Serbal/ C.S.I.C., 1988.
mitan certificación de la solicitud presen- CONTILLÓ, Juan Bautista.: “Expediente que com-
tada y de este acuerdo a los Excmos. Se- probará los heroicos servicios hechos à la Patria por
ñores Gobernadores Civil y Militar de esta la villa de Casares en la gloriosa sublevación de la
provincia...” sierra contra los franceses desde el año de 1810 has-
ta de presente”. Algeciras, 1813.
Bibliografía ESPINOSA, Gloria y María del Rosario TORRES:
“Arquitectura y defensa de la Costa Oriental an-
BAENA GALLÉ, José Manuel: “Dos propuestas daluza” Boletín del Instituto Andaluz del Patri-
de itinerarios culturales en Andalucía Occidental monio Histórico. Sección Información: Patrimo-
sobre arquitectura militar”, Boletín del Instituto nio Histórico Andaluz. Boletín nº 40-41 de 2002
(Texto electrónico). Disponible en
www.juntadeandalucia.es/cultura/iaph/infopha/
05textose/boletin40-41/b4002.html
FALCÓN MÁRQUEZ, Teodoro: “El litoral anda-
luz en tiempos de Carlos III”. Sevilla: Consejería de
Obras Públicas. Junta de Andalucía, 1988.
GIL ALBARRACÍN, Antonio: “Las Fortificaciones
de la costa del reino de Granada (España). Estado de
la cuestión”. Biblio 3W. Revista Bibliográfica de
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celona, nº 72, 1998.
JORNADAS EUROPEAS DE PATRIMONIO HIS-
TÓRICO (1997, Andalucía): “Los castillos a través
de la historia” . Coordinación Dirección General
de Bienes Culturales. Servicio de Investigación y
Plano del Castillo de Sabinilla. Difusión del Patrimonio Histórico. Sevilla.

CILNIANA 121
EL CASTILLO DE LA DUQUESA

rres almenaras (costa occidental, Málaga, Diputación Provincial,


1975, p. 49. (Actualmente esta torre se encuentra dentro de
un edificio del camping Chullera III. Sufre un gran deterioro
al realizar los propietarios del edificio que la envuelve una
extracción de piedra para su vaciado).
3
VÁZQUEZ C. Marcos: “El Castillo de la ...”, Op. Cit., pp
193-194.
4
Ibidem: pp 193-194.
5
GIL ALBARRACÍN, Antonio: Las Fortificaciones de la costa
del reino de Granada (España). Estado de la cuestión. Biblio 3W.
Revista Bibliográfica de Geografía y Ciencias Sociales. Univer-
sidad de Barcelona, n.º 72, 1998. Disponible en www.ub.es/
geocrit/b3w-72htm
6
MADOZ, Pascual: Diccionario Geográfico-estadístico-histó-
rico de España y sus posesiones de ultramar. Tomo XI (MAD-MUZ),
Madrid, 1848. MAN., p 178.
7
Ibidem: p. 178.
8
Esta nota ha sido extraída del cuaderno de 1766-67,
documento n.º 16, 32r-33v. del vaciado que hice de los pro-

Plano de la primera planta del castillo de La Duquesa.


Consejería de Cultura, Junta de Andalucía. 1997
HERRERA BERNAL, José y José Ignacio
FERNÁNDEZ-PUJOL CABRERA: “Proyecto de Restau-
ración del Castillo de la Duquesa. Manilva (Málaga)”.
Promotor Ayuntamiento de Manilva. Octubre
1998.
MADOZ, Pascual: “Diccionario Geográfico-esta-
dístico-histórico de España y sus posesiones de ultra-
mar”. Tomo XI (MAD-MUZ), Madrid, 1848.
MIÑANO, Sebastián de: “Diccionario Geográfi-
co- estadístico de España y Portugal”. Madrid, 1826.
TEMBOURY ÁLVAREZ, Juan: “Torres almenaras
(costa occidental)”, Málaga, Diputación Provincial, Plano de la cubierta del castillo de La Duquesa.
1975.
VILAR, Juan Bautista y Ramón LOURIDO: “Re- tocolos notariales de Manilva cuando estaban en Estepona.
laciones entre España y el Magreb. Siglos XVII y XVIII”. En la actualidad se encuentra en el Archivo Histórico Provin-
Madrid: Editorial Mapfre, 1994. cial de Málaga. Protocolos de Manilva, Notario Fernando Ni-
colás de Fricio en el cuaderno de Sebastián Vargas Machuca
de 1767.
9
MADOZ, P.: Op. Cit., Tomo XI (MAD-MUZ), Madrid, 1848.
Notas MAN., p 178.
10
CONTILLÓ, Juan Bautista: “Expediente que comprobará
1
VÁZQUEZ C., Marcos: “El Castillo de la Duquesa”. En Los los heroicos servicios hechos à la Patria por la villa de Casares en la
castillos a través de la historia JORNADAS EUROPEAS DE PATRI- gloriosa sublevación de la sierra contra los franceses desde el año
MONIO HISTÓRICO (1997, Andalucía). (Coord.) Dirección Ge- de 1810 hasta de presente. Algeciras, 1813, pp. 33-34 y 43.
neral de Bienes Culturales. Ser- 11
Archivo Municipal de Manilva. Libros de
vicio de Investigación y Difusión Actas de Plenos. Lega-
del Patrimonio Histórico. jo 1, Clasific. 1.1.1. de
Sevilla. Consejería 1885.
de Cultura, Junta 12
Arch. M. de
de Andalucía. Man. Libros de Ac-
1997, pp 193-194. tas de Plenos. Le-
2
TEMBOURY gajo 2, Clasific.
ÁLVAREZ, Juan: To- Vista fachada de poniente del castillo de La Duquesa. 1.1.1. de 1913.

122 CILNIANA
APÉNDICE DOCUMENTAL:
La Ermita del Santo Cristo
Fernando Álvarez Cantos y Vicente Murillo Utor

En la geografía andaluza es muy común la trilogía Franciscanos–Imagen del Cristo de la Veracruz–Día


de la Cruz. Aún hay ciudades en donde ello se conserva en su estado más puro (Granada, Coín, Alcalá
la Real, Arcos de la Frontera, Brenes o Lebrija). A través de la inserción de varios documentos (escritu-
ras, Breves papales, juicios de conciliación) se demuestra la importancia de la cofradía de la Veracruz,
que obtuvo para la ciudad la Gracia del Jubileo de cuarenta horas y cuyo primer año de celebración fue
1782; y su conexión con la orden franciscana. Mediante los juicios de conciliación, se confirman las
tensiones en el mundo de las cofradías, entre la Vicaría eclesiástica y los hermanos cofrades.

Ermita del Santo Cristo. Calle Ancha. Años 50.

E n una escritura pública1, otorgada el día tres


de agosto de 1782, ante el Notario de la Ciu-
dad de Marbella, Don Antonio María Ximénez,
“Notorio y manifiesto sea a todos los que
la presente Escritura de Dotación e Imposición
de memoria Vieren, Como Nos D. Esteban García
los esposos Don Esteban García Cárdenas, Regi- y Cárdenas Regidor perpetuo de esta Ciudad de
dor Perpetuo de la Ciudad, y D.ª Ana Álvarez Marbella y Doña Ana Alvarez y Muñoz marido y
Muñoz, protocolizaban una “Fundación e impo- conjunta persona de dicha otra y Vecina de la
sición de Memoria en obsequio de su Majestad mencionada Ciudad, precedida la venia y licencia
Sacramentado y del Santísimo Cristo de la Vera que de marido a mujer el Derecho dispone que
Cruz”, cuyo texto es el siguiente: fué pedida, concedida y aceptada en bastante

CILNIANA 123
ERMITA DEL SANTO CRISTO

forma so expresa obligación que yo el dicho Sr. hibido por los otorgantes, literalmente con las di-
Esteban hago de haberla siempre por firme, y no ligencias a el incorporadas, es del tenor siguiente:
revocarla en manera alguna de marido ambos o
dos juntos de mancomún, y por el todo in solidum PIUS PP. VI
renunciando como expresamente renunciamos la AD PERPETUAM REI MEMORIAM
Ley de Duobus res debendos y el aumentica pre-
sente hoc tua de fide iusoribus, y demás Leyes que ad augendam fidelium et animarum saluten
deben renunciar los que se obligan de mancomún: caelestibus Eclesis thesauris pia charitate intenti;
omnibus, et singulis utriusque sexus Christi fidelibus
Decimos: Que deseando llevar el particular vezé penitentibus, et confesis, ac S. communione
afecto y expresa de- refectis, qui Orationi
voción que siempre quadraginta orarum
han tenido a la San- continuatorum, non
tísima Imagen de Je- quem nisi nortis
sucristo Crucificado tempore interpola-
que con el título de tarum, de licencia
la Vera Cruz se vene- ordinarii, in Eclesia
ra en su Ermita y Ca- sua Cappella Pública
pilla pública Calle Eremitario nunct.
Ancha de esta dicha Ssmi. Crucifixi de la
Ciudad extramuros Documento original. Vera Cruz et nunct.
de ella, y queriendo extra muros oppidi
al mismo tiempo proporcionar esta devoción para civitatis parater nunct. de Marbella Malacitan Diocesis
con los demás fieles y vecinos de este Pueblo a fin die tertia mensis Maii instituien per aliquod temporis
de que por ella experimenten los copiosos benefi- spatium devoté interficerint, et ibi pro Christianorum
cios que sin duda les dejará, a la manera que los Principum concordia herexu. extirpatione , ac S. Matris
otorgantes confiesan haberlos recibidos de la Po- Eclesiae exaltatione pia ad Deum preces effuderint,
derosa mano, no habiendo tenido como no tuvie- plenariam omnium pecatorum suorum indulgentiam,
ron otro medio más eficaz ni proporcionado que et remisionem misericordiae in Domino concedimus.
el impetrar de la Santa Sede, Una Indulgencia Ple- Volumus autem, ut vi alias Christi fidelibus in
naria para todos aquellos que Confesados, quocumque alio anni die promissa in dicta Eclesia per
Comulgados y Contrictos visitasen dicho Señor agen. aliqua alia indulgentia similis perpetuo, vel ad
Crucificado en su Ermita el día tres de Mayo, que tempus dondum elapsum duratura concepta fuerit,
es en el que se celebra por la Santa Madre Iglesia illa revocate sit, prites. apostolica autoritate
la Invención de la Santísima Cruz, día también de- revocamus in contrarlione temporibus valituris. Datum
dicado por los otorgantes a la Celebridad de dicho Roma apud S. Petrum sub annulo Piscatoris. Die XIII
Sr., y en efecto concedida que fue la citada indul- Marzi MDCCLXXXI Pontificatus Nostri Anno
gencia por el tiempo de siete años según aparece septimo= J Card. de Couutiby.
en el Breve dado en Roma en Santa María la Mayor
por N.M.S. Clemente P.P. Décimo cuarto (que de Pasado por la Comisaría General de Gra-
Dios goce) A los catorce de Septiembre del año nada, en siete de Mayo de mil setecientos ochenta
pasado de mil setecientos y setenta, fueron y han y uno.=está rubricado.
sido notorios los frutos de fervor concurrencia y
aumento de devoción que en los mencionados sie- Nos Don Manuel Ventura Figueroa Caballero Gran
te años se tocaron; con cuyo motivo hicieron los Cruz de la Real Distinguida Orden de Carlos Ter-
otorgantes nueva súplica a dicha Santa Sede im- cero, Arcediano, Dignidad de la Santa Apostólica
plorando a beneficio de los mismos fieles, y para Metropolitana Iglesia de Santiago del Real Con-
consuelo de los devotos, no tan solamente la per- sejo y Cámara de S.M. Gobernador del Reino de
petuidad de dicha Indulgencia Plenaria, sino que Castilla y Comisario Apostólico General de la San-
esta fuese la del Jubileo de las cuarenta horas para ta Cruzada, y demás Gracias en todos estos
que de este modo no solo los habitantes de esta Reynos y Señoríos= Por la presente y autoridad
Ciudad, sino también los de otros pueblos, pudie- Apostólica, que para ella tenemos, de que en este
ran lograr de la Indulgencia y demás beneficios parte usamos, y mediante la suspensión que por
que proporciona tan Santo Jubileo, de cuya Gracia la Bulla de la Santa Cruzada, y Breves especiales
se carecía en este Obispado a cuyas preces, aten- se haya generalmente por esta a todas las Indul-
diendo con enseñanzas piadosas dicha Iglesia Ca- gencias, la alzamos a las que N.M.S.P.PP. Pio Sex-
tólica, así la concedió por su Breve en Roma dado to, por su Breve dado en Roma a trece de Marzo
en San Pedro a los trece de Marzo del año próxi- próximo ha concedido perpetuamente en favor
mo pasado de mil setecientos ochenta y uno, que de personas de ambos sexos, que habiendo con-
para la mejor validación, y perpetua memoria ex- fesado, y comulgado, asistiesen devotamente a

124 CILNIANA
ERMITA DEL SANTO CRISTO

la oración de cuarenta horas continuas, y no Que de concordar lo preinserto con sus origina-
interpoladas, sino por tiempo de la noche, que les el Infrascrito Escribano doy fe: que devolvió
con licencia del Ordinario se ha de hacer en la a los otorgantes, y por ello firmarán de su recibo
Iglesia, Capilla Pública de el Ssmo. Crucifijo de la y porque todo lo dicho no saciaría la intención
Vera Cruz extramuros de la Ciudad de Marbella, de los otorgantes si después de haber experimen-
Diócesis de Málaga en el día tres del mes de Mayo, tado el fervor, celo, devoción con que en este
y allí rogaran a Dios por la paz y concordia entre presente año que ha sido el primero en que se
los Príncipes Cristianos, extirpación de las here- ha practicado dicho Santo Jubileo pudiese por
jías, y demás necesidades de la Iglesia, como más falta de dotación competente desmayar en algún
por menor refiere el citado Breve, que original se tiempo esta tan particular memoria en que tanto
exhibió ante Nos: y dimos licencia y facultad para se interesa el beneficio común espiritual de las
que se publiquen dichas Indulgencias, con tal de Almas; y el particular de los otorgantes, y su fa-
que no se puedan hacer, ni imprimir sumarios, ni milia y descendientes, deseando acudir a este
cédulas de ellas , sin permiso de esta superiori- remedio, se han convenido con los Sres. Benefi-
dad, ni repartirlos, ni distribuirlos en este modo, ciados de la Iglesia Parroquial de esta Ciudad a
ni otro, con pretexto de que se ganan por dar satisfacer, y pagar a dichos Sres. anualmente la
limosna en dinero, u otra especie, por estar pro- cantidad de ocho ducados de vellón, quedando
hibido por la Santa Sede, con presencia de que si por ello perpetuamente obligados dichos Sres.
lo contrario se hiciere desde luego declaramos, Beneficiados, que de presente son, y que en ade-
que por el mismo hecho quedan suspendidas, y lante fueren, a ir en Comunidad, y en forma de
sin efecto las mismas Indulgencias, cuya publica- Parroquia el día tres de Mayo de cada un año a la
ción mandamos se ejecute sin solemnidad algu- Iglesia o Ermita del Santísimo Cristo de la Vera
na, y que los fieles para ganarlas han de tener el Cruz, ya citada, y en la hora competente cele-
sumario de la Bulla de la Santa Cruzada de la Pre- brar, y beneficiar una Misa solemne en el Altar
dicación del año en que lo intentaren, porque de mayor, que es, donde se venera dicha Santa Efi-
otra manera no las consiguen; y así se declare, gie, como asimismo a manifestar y reservar a su
pena de Excomunión Mayor. En cuya virtud la Majestad Sacramentado con la asistencia debida
damos, firmada con esta firma, sellada con el se- a este acto, en todos los tres días, y a la hora
llo de nuestras armas, y refrendada por el Infras- competente en que se expusiere a este Sobera-
crito Escribano de Cámara en Madrid a siete de no Señor con motivo de dicho Santo Jubileo se-
Mayo de mil setecientos ochenta y uno= D. Ma- gún la intención con que es concedido y práctica
nuel Ventura Figueroa= observada en estos actos, habiendo de verificar-
se el completo de las cuarenta horas según, y en
En la Ciudad de Málaga a veinte y dos de Mayo de los términos que se expresa en dicho Breve, sin
mil setecientos ochenta y uno, el Sr. Don Agustín que por la celebridad de dicha Misa solemne y
Galindo.-Presbítero Abogado de los Reales Con- asistencia, que va referida hayan de llevar, ni pe-
sejos, Provisor y Vicario General de este Obispa- dir mas estipendio, ni cuota, que los ocho duca-
do habiendo visto el Breve antecedente pasado dos, que van señalados, en cuya atención los otor-
por la Comisaria de la Santa Cruzada, por el cual gantes sabedores y ciertos de la obligación de
concede su Santidad Indulgencia Plenaria, y re- que se constituyen hallándose por la divina mi-
misión de sus pecados a todas las personas de sericordia con caudal suficiente para esta dota-
ambos sexos, que habiendo confesado, y comul- ción, sin que por ella perjudiquen en cosa alguna
gado asistieren devotamente por algún espacio a sus herederos, como así lo confiesan, y sin que
de tiempo a la oración de cuarenta horas conti- les haga falta para su sustento, a mayor honra y
nuas, y no interpoladas, sino es por el tiempo de gloria de Dios, culto y veneración de la Majestad
la noche, que con licencia del Ordinario se ha de Sacramentada, y de la Santa Imagen de Jesu-
hacer en la Iglesia, ó Capilla Pública del Santísimo Christo Crucificado de la Vera Cruz, hacen per-
Cristo de la Vera Cruz extra muros de la Ciudad petua imposición irrevocable, que el Derecho lla-
de Marbella en el día tres de Mayo de cada año: y ma fecha inter vivos, de los mencionados ocho
allí rezaren a Dios por la paz, y concordia entre ducados de rédito anual a favor de los Sres Bene-
los Príncipes Christianos, extirpación de las here- ficiados de la Parroquia de esta Ciudad, para que
jías, y Exaltación de Ntra. Sra. Madre Iglesia, y con ellos perpetuamente y en cada un año el día
cuya Pontificia concesión es perpetua: Mando se tres de Mayo, que es el primero del Jubileo de las
use del referido indulto, y Breve Apostólico y daba, cuarenta horas concedido a la precitada Ermita
y dí licencia para la dicha oración de cuarenta ho- de dicho Santísimo Christo, y en el que los otor-
ras en la citada Capilla o Ermita , y así se publique gantes celebran la festividad de este Señor, se
la expresada Indulgencia con arreglo al despacho cante una Misa solemne en dicha Iglesia y Altar ,
del Excmo. Sr. Comisario Apostólico general de la según y como va referido, la que se ha de aplicar
Santa Cruzada, y lo firma Provisor Don Agustín por sus Almas, las de sus Padres, hijos, y demás
Galindo=Miguel Herrera. Notario Mayor. del Purgatorio, y para que asimismo concurran

CILNIANA 125
ERMITA DEL SANTO CRISTO

dichos Sres. Beneficiados y sea de su peculiar obli- En consecuencia de todo lo referido, ciertos, y
gación asistir a exponer, y reservar en los días sabedores los otorgantes de su derecho, y del
que cupieren las cuarenta horas de dicho Jubileo que en este caso les aviso, confesando como con-
el Santísimo Sacramento, que para este efecto se fiesan por verdadera y cierta la antecedente rela-
expone a la veneración de todos los fieles, ha- ción, de su libre y espontánea voluntad otorgan
ciendo de llevar por limosnas, estipendio, dicha por el tenor de la presente por sí, y en voz, y
Misa, como por su asistencia, los referidos ocho nombre de sus Herederos, y sucesores que des-
ducados en que estamos convenidos, los mismos de ahora para siempre perpetuamente hacen im-
que con el propio acuerdo instituimos, impone- posición irrevocable; que el Derecho llama inter
mos y cargamos sobre una heredad de tierras y vivos, de dicho ocho ducados de rédito anual a
Arboleda, que con Casa y Cerca poseemos, como favor de los Sres. Beneficiados de la Iglesia
propia, en lo inmediato a esta Ciudad y sitio que Parroquial de esta Ciudad que son, y que en ade-
llaman el Prado, que linda por la parte de po- lanten fueren, para que con ellos y en cada uno
niente con tierras de Don Miguel Antonio Roldán de los años subsiguientes, el día tres de Mayo de
o por el Norte con otras de Don Juan Cordero, cada uno, que es el primero del Jubileo de las
por el Levante con el camino que va al Trapiche, cuarenta horas concedido por N.M.S.P.PP. PIO
y por el Sur con el que se dirige a las viñas de los SEXTO, que rige y gobierna la Iglesia Católica
Manchones; libres de todo tributo, memoria, hi- Apostólica Romana a la Ermita o Iglesia del San-
poteca, señorío y obligación especial ni general, tísimo Christo de la Vera Cruz, que como dicha
y que sobre si no le tiene, por tal la aseguramos: es se venera en su Capilla Pública Calle Ancha de
esta Ciudad, extra muros de ella y en el
que los otorgantes celebran la festividad
de dicho Señor, se cante, y oficie la Misa
solemne que dejan manifestado, la que
han de aplicar por sus almas, las de sus
Padres, hijos y demás que estén el Pur-
gatorio, y para que igualmente concu-
rran, y sea de su peculiar obligación asis-
tir a exponer y reservar en los días que
cupieren las cuarenta horas de dicho Ju-
bileo, el Santísimo Sacramento para cul-
to veneración de todos los fieles, que a
el concurran con la asistencia debida a
este acto llevando por limosna o esti-
pendio así de dicha Misa solemne, como
por la referida asistencia los insinuados
ocho ducados, que habemos de satisfa-
cer, y nuestros herederos perpetuamen-
te siendo la primera paga de la precitada
cantidad el día tres de Mayo del año
próximo venidero de mil setecientos
ochenta y tres, y así los demás y subsi-
guientes, y pedimos, y suplicamos a di-
chos Sres. Beneficiados que son de la
Parroquia de esta Ciudad, y a los demás
que les sucedieren admitan esta institu-
ción de memoria, la aprueben y confir-
men, hagan confirmar y aprobar y ano-
tar en el Libro Maestro donde se anotan
todas las memorias; como en la tabla,
haciendo guardar, y que se guarden esta
institución en la forma referida: a la cual
como por todo lo demás han de ser obli-
gados los otorgantes, y sus sucesores en
virtud de esta escritura y el juramento
en las parte en que lo diferimos, y cele-
bramos dicha prueba aunque por Dere-
cho se requiera al cumplimiento y vali-
dación de cuanto dicho es, obligamos
Santo Cristo visto desde el Puente de Ronda. Años 50. nuestros bienes y rentas, muebles y raí-

126 CILNIANA
ERMITA DEL SANTO CRISTO

ces habidos, y por haber, y sin que la obligación


especial vicie, derogue, ni perjudique a la gene-
ral, por el contrario obligamos, y especialmente
hipotecamos la citada heredad de tierra declara-
da la cual dejamos gravada, y especialmente hi-
potecada, con pacto absoluto prohibitivo de toda
enajenación sin la carga de los ocho ducados de
memoria perpetuas que sobre ella llevamos im-
puesta, la cual ha de ser nula y de ningún valor,
ni efecto, damos poder cumplido a los Sres. Jue-
ces y Justicias del Rey Nuestro Señor para que
nos lo hagan cumplir como si fuese por senten-
cia definitiva del Juez competente dada y pasada
en autoridad de cosa juzgada; renunciamos to-
das las leyes, fueros y derechos de nuestra de-
fensa y favor con la que prohíbe la general
renunciación de leyes en forma. y Yo la dicha D.ª
Ana Alvarez y Muñoz expresamente renuncio las
del Emperador Justiniano, auxilio del Velejano
Senado Consulto, Nuevas Constituciones, Leyes
de Toro, Madrid y Partida, y las demás de mi fa-
vor, de cuyos efectos he sido advertida por el
presente Escribano y como sabedora las renun-
cio, y juro por Dios Nuestro Señor, y a una señal
de Cruz, que en toda forma hago, que no me
opondré contra esta Escritura por mi dote, arras,
bienes parafernales, hereditarios, ni mitad de mis
aplicados, ni por otro derecho que me asista, y
declaro que para el otorgamiento de esta Escri-
tura no he sido compulsa, ni ha apremiado por
el dicho mi marido, ni por otra persona en su
Iglesia del Santo Cristo tras la Guerra Civil.
nombre, sino que la otorgo de mi libre y espon-
tánea voluntad por efundirse mi pro y utilidad, y Cofradía de esta Ciudad un ducado y a la de la
que de dicho juramento no he pedido, ni pediré Veracruz dos ducados”.
absolución, ni relajación a quien me lo pueda con-
ceder, y caso de que motu propio me sea conce- En el testamento3 de Fernando de Bazán
dido de el no usaré pena de perjura: En cuyo tes- hijo y heredero de Alonso de Bazán, otorgado el
timonio así lo otorgamos y firmamos como por día 21 de abril de 1579, en una de sus mandas
haber recibido los originales de los documentos dispone “...a cada Cofradía de esta Ciudad me-
preinsertos en esta Escritura que es fecha, y po dio ducado y la cofradía tres ducados, digo a la
nos otorgadas en esta Ciudad de Marbella a tres Cofradía de la Veracruz”.
días del mes de Agosto de mil setecientos ochenta
y dos años, a la cual fueron presentes por testi- Asimismo, en el testamento otorgado por
gos Don Francisco Muñoz, Don Francisco D. Juan de Porras, ante el Notario de la Ciudad
Velázquez, Clérigos Presbíteros y Don Bartolomé de Marbella D. Luis de Alcocer, el día 8 de febre-
del Castillo Santa Cruz, Regidor Perpetuo de esta ro de 1738, el testador dispone “que mando que
Ciudad, y todos vecinos de ella: e yo el Escribano de mis bienes, se dé limosna al Santo Cristo de la
doy fé, conozco a los otorgantes, y que se otor- Vera Cruz, de 30 reales......”4.
gó a presencia de mí, y de dichos testigos, y ante
estos requerí a los interesados sacasen Copia de En las Respuestas Generales de la Ciudad
esta Escritura y la registrasen en el Oficio de Hi- de Marbella, en la contestación a la número 39,
potecas, según está prevenido por Pragmática el día 4 de septiembre de 1752, se responde “...er-
Sanción, y la pasasen a el Archivo de los Sres. mita dos en el Barrio, ambas en la C/ Ancha y de
Beneficiados de esta Ciudad de que quedaron esta la una con el título de Santísimo Cristo de la
entendidos=Esteban García Cárdenas=Ana Vera Cruz.....” 5.
Alvarez Muñoz=Antonio María Ximénez».
En los testamentos otorgados por D. Luis
En el testamento2 otorgado por el alcayde de Cantos y D. Mateo de Cantos, ante el Notario
y regidor Alonso de Bazán, el día 8 de junio de de la Ciudad de Marbella D. Antonio María
1568, en una de sus mandas dispone “.... a cada Ximénez, los días 21 de julio de 1788 y 13 de

CILNIANA 127
ERMITA DEL SANTO CRISTO

marzo de 1789, ambos se declaran “hermanos D. Luis Mazoti compareció Don Ignacio Romero
de la Hermandad del Rosario”6. asociado con su hombre bueno D. Diego Merino
convocando a Juicio de Conciliación a D. José
Teníamos la certeza de la existencia de la Martín Jiménez que asimismo está presente con
mencionada Hermandad, pero no podíamos ubi- su hombre bueno D. Francisco Granados. Sobre
car su sede. Pero en los documentos correspon- que en el día que se convocaron los Hermanos
dientes al Trienio Liberal (1820-1823); y en los del Rosario para celebrar Elecciones, hizo el ex-
documentos relativos a los Juicios de Concilia- ponente la pregunta que en quién paraban las
ción7; gran invento de nuestra Constitución de llaves del arca, a las cuales no estaban presentes
1812; encontramos los siguientes: los Hermanos Mayores que confesaron que ellos
la tenían, y al Sr. Vicario en aquel acto le dijo el
En la Ciudad de Marbella a diez días del mes de Sr. Don José Martín que no hiciera caso en razón
Enero de mil ochocientos veinte y dos años: ante de hallarse bebido. Oído la antecedente relación
el Sr. Alcalde Primero Constitucional Don Rafael por el Sr. José Martín Jiménez dijo: Que su pro-
Alcocer, compareció Fernando Barragán asocia- posición fue la de decir, Sr. Vicario no haga Vd.
do con su hombre bueno Don Cristobal caso que el Sr. es preciso que esté bebido cuan-
Villalobos convocando a juicio de conciliación do se produce en esos términos. Y los hombres
al Sr. Vicario Eclesiástico Don José Martín y Can- buenos expusieron que mediante no ser palabra
tos que asimismo está presente con su hombre denigrativa la expresada por el Sr. Don José Mar-
bueno Don José Escobar: Sobre que el día pri- tín, fueron de dictamen que se sobresea el parti-
mero del año se celebró en la ermita del Santo cular. Y el Sr. Alcalde mandó poner perpetuo si-
Cristo cabildo para elegir mayordomo de la her- lencio al particular mediante a la que queda del
mandad del Rosario, en cuyo acto mediaron va- asunto que se ventila, y lo firmó con los Sres.
rias circunstancias por las cuales el exponente concurrentes.=Luis Mazoti=Ignacio Rome-
diciendo que no se celebraba dicho Cabildo, pi- ro=Diego Merino=Francisco Granados=José
dió testimonio del acto, y el Sr. Vicario le con- Martín Jiménez9.
testó se fuera a la mierda, ojo de culo; quien
eres tú para que yo te dé testimonio=
Notas
Oída la antecedente relación por el Sr. Vicario 1
Archivo Histórico Provincial de Málaga (AHPM). Notarios
dijo: Que no debe contestar a la queja que se da Marbella. Legajo 4.919.
contra él como procedente de actos efectuados 2
Archivo Municipal de Marbella (AMMb), Fondo Bazán,
bajo la investidura de Juez Eclesiástico para los “Testamento de Alonso de Bazán”, 1568. Sig. 371-H-1.
que las Leyes tienen detallado su Tribunal com-
3
AMMb, Fondo Bazán, “Testamento de Fernando de
Bazán”, 1579. Sig. 371-H-2.
petente; dirá sin embargo y en obsequio a la 4
AHPM. Notarios Marbella. Legajo 4.914.
verdad y de la paz que es tan propia de su Minis- 5
Marbella 1752. Según las Respuestas Generales del Catastro
terio que no tiene presente las expresiones in- de Ensenada (Estudio Introductorio de Francisco López González
moderadas de que se le acusa, y si alguna dijo y Lucia Prieto Borrego), Cilniana, Marbella, 2001.
en el conflicto en que le pusieron los hermanos
6
AHPM. Notarios Marbella. Legajo 4.918
7
Los artículos 282-283 y 284 de la Constitución de Cádiz
o cofrades de la hermandad del Rosario fue rela- 1812, regulaban los Juicios de Conciliación para negocios civiles
tiva al testimonio que se le pidió por el Barra- o por injurias. El Alcalde con los hombres buenos, oía al deman-
gán de un acto que no se había formalizado, y dante y demandado; oía el dictamen de los hombres buenos y si
no a su personas. Y los hombres buenos fueron las partes se aquietaban en la decisión extrajudicial, dictaba re-
solución para terminar el conflicto. Nadie podía entablar pleito
del dictamen, que mediante la cortedad del agra- sin que constara que se había intentado la conciliación.
vio que resulta debe en su concepto darse por 8
AMMb, Caja 99-H, pieza 3. Don Rafael Alcocer fue alcalde
concluido el acto, porque el Sr. Vicario ha mani- 11. Constitucional el año 1822; Coronel retirado del Ejército.
festado no fue su ánimo ni su expresión, un agra- D. José Martín y Cantos fue Vicario Juez Eclesiástico el año 1822;
vio directo a la persona del Barragán. Y habién- la Ciudad de Marbella tenía una Vicaría de las ocho Vicarías
que tenía la Diócesis. D. Fernando Barragán, vecino de la C/
dose convenido el Fernando Barragán con el dic- Ancha y de profesión Barbero. D. Cristobal Villalobos fue Alcal-
tamen de los hombres buenos. El Sr. Alcalde de 11.Constitucional en el año 1821, Capitán retirado del Ejer-
mandó imponer perpetuo silencio sobre el par- cito. y poseedor del Mayorazgo de los Domínguez por matri-
ticular, ahora ni en tiempo alguno, y lo firmó monio con D.ª Nicolasa Domínguez. D. José María Escobar, Abo-
gado, Promotor Fiscal y Suplente a Cortes Generales en el año
dicho Sr. con los concurrentes.= Rafael 1822.
Alcocer=José Martín y Can-tos=Fernando 9
Archivo Municipal de Marbella, Caja 99, Pieza 3.-D. Luis
Barragán=Cristobal Villalo-bos=José María Es- Mazoti fue Alcalde 21.Constitucional en el año 1822 y
cobar8 . Subteniente del Ejercito. D. Ignacio Romero, vecino de la C/
Dolores y de profesión Cirujano. D. Diego Merino fue Presbíte-
ro Beneficiado. D. Francisco Granados fue Alcalde 11.Constitu-
En la Ciudad de Marbella a veinte días del cional en el año 1820, Teniente retirado del Ejercito y vecino
mes de Enero de mil ochocientos veinte y dos de la C/ San Juan de Dios. D. José Martín Jiménez, vecino de la
años ante el Sr. Alcalde Segundo Constitucional C/ Aduar y de profesión Herrero.

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PUBLICACIONES
DE LA ASOCIACIÓN CILNIANA

Libros
• PRIETO BORREGO, L.: Aproximación bibliográfica: Marbella y la Costa del Sol Occidental,
1997 (agotado).
• I Jornadas de Patrimonio Histórico Local de Marbella, 2000
• II Jornadas de Patrimonio Histórico Local de Marbella, 2001
• Marbella 1752: según las Respuestas Generales del Catastro de Ensenada (con estudio
introductorio de FRANCISCO LÓPEZ GONZÁLEZ y LUCÍA PRIETO BORREGO), 2001
• ROMERO DOMÍNGUEZ, A.: El Hospital de Santo Tomás. I. La Capilla de San Pedro
y San Pablo de la Colegiata de Belmonte (en prensa)

Catálogos
• III Exposición de Fotografía "Imágenes de Marbella: El casco antiguo", 1998
• IV Exposición de Fotografía "Imágenes de Marbella: La fiesta", 1999
• V Exposición de Fotografía "Imágenes de Marbella: El deporte", 2000
• VI Exposición de Fotografía "Imágenes de Marbella: El Turismo", 2002
• VII Exposición de Fotografía "Imágenes de Marbella: La mar", 2002
• VIII Exposición de Fotografía “Imágenes de Marbella: El campo”, 2003
• El Paso de Istán, 2000
• “ANTIGUO SISTEMA DEFENSIVO: Torres, Fortalezas y Castillos de la Costa Occidental
Malagueña”, 2002

Revistas
• Nº 8, 1996 (agotada)
• Nº 9, 1997
• Nº 10, 1998
• Nº 11, 1998
• Nº 12, 1999
• Nº 13, 1999
• Nº 14, 2001
• Nº 15, 2002

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NORMAS DE PUBLICACIÓN

1.- Los autores enviarán una copia del artículo en disquete duro (preferentemente
en Word) y otra copia en papel (formato folio UNE A4) a la siguiente dirección: Cilniana.
Centro de Adultos, c/ Miraflores, n.º 4, 29600 Marbella.

2.- Los trabajos tendrán un máximo de 30 folios a doble espacio. La extensión


indicada incluye el texto del artículo y las referencias bibliográficas o notas, que irán al
final. No se incluirán en esta extensión las dos páginas que a continuación se señalan:
–Una primera página, no numerada, en donde conste: el título del trabajo; el
nombre del autor o autores; profesión o, en su caso, título académico; la dirección, y un
resumen del contenido con un máximo de 12 líneas.
–Una última página, no numerada, con un máximo de cinco frases a destacar del
texto.

3.- Las notas al final irán numeradas correlativamente, con la siguiente secuencia:
–En el caso de obras, apellidos en mayúscula del autor citado; nombre con la
primera letra en mayúscula, o, en su caso, la inicial mayúscula del nombre; título del
libro (en cursivas); ciudad, editorial, año, y página o páginas a que se refiere la cita.
Ej. POLO, J.: Manifiesto ortográfico de la lengua española, Madrid: Visor, 1997, pp.
27-28.
–En el caso de que se trate de un artículo, en primer lugar se citará el nombre del
autor o autores, título del artículo [entre comillas latinas (« »)], seguido del nombre del
autor, editor o compilador de la obra, si lo hubiere; nombre de la revista o título del
libro o monografía (en cursivas); ciudad, editorial, año y página o páginas.
Ej. de artículo citado en libro:
FONTANA, J.: «La historiografía española del siglo XIX: un siglo de renovación
entre dos rupturas», en S. CASTILLO (coord.) : La historia social en España. Actualidad y
perspectivas, Madrid: Siglo XXI, 1991, p. 328.
Ej. de artículo citado en revista:
PÉREZ-PRENDES, J. M.ª: «Cortes de Castilla y Cortes de Cádiz», Revista de Estudios
Políticos, n.º 126, noviembre-diciembre (1962), pp. 419-428.

4.- Los documentos gráficos (mapas, gráficos, fotos, etcétera) irán numerados en
la parte posterior, secuenciándolos, y deben incluir los pies de foto correspondientes
en la parte de atrás o en hojas adjuntas.

5.- Los textos no incorporarán sangrías ni tabuladores, y los interlineados e


interletrajes serán normales. El tipo de letra debe ser times new roman, cuerpo 12. Los
títulos, subtítulos y ladillos se diferenciarán sólo por el tamaño de la letra. Las citas
textuales se diferenciarán con comillas y letra cursiva. No deben incorporarse subraya-
dos ni negritas.

6.- En el caso de que se tenga que incorporar bibliografía, sólo se hará cuando no
se haya optado por el sistema de notas al final. Esta bibliografía se incluirá al final del
artículo, ordenada alfabéticamente y según la secuencia descrita en el punto 3.

7.- Los trabajos presentados a la revista deberán ser preferentemente inéditos; en


caso contrario, incluirán la descripción de la publicación en donde se hizo por primera
vez, así como la fecha de la misma.

8.- El consejo de redacción resolverá en un plazo máximo de tres meses su publi-


cación o no, comunicando el número en el que aparecerá el artículo.

9.- Cada autor recibirá dos ejemplares de la revista en que se incluya su artículo.

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