Solicita Excarcelacion Extraordinaria.
Solicita Excarcelacion Extraordinaria.
Solicita Excarcelacion Extraordinaria.
PP-19-00-014173-21-00
A decir de Schiavo, “Lo cierto es que la controversia de este instituto viene dada por su
nombre, puesto que el término “extraordinaria” pareciera hacer refe-rencia a que para que el
mismo proceda deberían darse requisitos “extraordinarios”, que transformen el instituto en
una concesión graciosa por parte del magistrado.
La arraigada afirmación de “extraordinariedad” de la “excarcelación” concedida en estos
términos, prácticamente ha llevado a que sean pocoslos casos en que la misma resulta
efectivamente aplicada. Resulta curioso cómo por esta vía el término “extraordinaria”, y tal
cual se señala en el precedente antes transcripto, se transforma de lege ferenda, y a contrario
de lo dispuesto por el art. 3º del CPPBA, en “excepcionalísimo”
El art. 3º del CPPBA establece que toda disposición legal que coarte la libertad personal,
restrinja los derechos de la persona, limite el ejercicio de un derecho atribuido por este
Código, debe ser interpretada restrictivamente; por lo tanto, cuando se trata de aplicar
ello a lo dispuesto por el art. 170 del CPPBA la “excarcelación extraordinaria” no puede
ser transformada en una “excarcelación excepcionalísima”
Por el contrario, el término“extraordinaria”de la“excarcelación”previsto en el art. 170 del
CPPBA debe ser reducido, por imperio de los arts.3º, 144 y 145 del CPPBA, a la mera
oposición con la expresión “ordinaria” de los presupuestos del art. 169 del CPPBA.
Esto quiere significar que si la “excarcelación ordinaria” es dispuesta por el legislador,
como una presunción iuris tamtum de que el imputadono ha de sustraerse de la acción de la
justicia, ni entorpecer la investigación, y la misma sólo puede ser rechazada con argumentos
específicos extraídos del art. 148 del CPPBA, aplicables al caso concreto, en el art.170 del
CPPBA esas presunciones “ordinarias” del legislador no existen, y las mismas quedan
libradas a la ponderación del magistrado de la causa, extraídas del análisis de las múltiples
cuestiones de hecho atribuibles al imputado, que de todos modos permitan afirmar que en el
caso concreto, el peligro procesal puede ser conjurado por aplicación de las obligaciones
generales y particulares (arts. 179 y 180,CPPBA), con más la imposición de una caución
suficiente y adecuada al caso.
Es así que lo “extraordinario”, por oposición a “ordinario”, viene dado por que no hay
ninguna presunción legislativa de “no fuga” o “no entorpecimiento probatorio”, bajo las
condiciones excarcelatorias, sino que las mismas deben ser analizadas por el juez en cada
caso concreto. Pero, cabe reiterar, en modo alguno se exige que estos elementos sean
“extraordinarios” en los términos de “excepcionales”. Para decirlo claramente, el término
“extraordinario” del art.170 del CPPBA es un sustantivo, no un adjetivo. Si se recurriera
a una interpretación del concepto “extraordinario” como “excepcional”, nos encontraríamos
frente a delitos que por el monto de pena se transformarían en inexcarcelables en los términos
ordinarios del art.169 del CPPBA, y a falta de circunstancias “excepcionales”, no
correspondería en ningún supuesto la libertad durante el proceso, conforme el principio
general recogido en los arts. 144 del CPPBA, y 18 de la CN. Sobre la existencia de delitos
inexcarcelables, cabe remitirse al análisis del plenario nº 13 de la CNCP, in re «Díaz
Bessone»”(resaltado y subrayado nos pertenece)
A su vez, se resto especial consideración a que el art. 171 del Código Procesal Penal —
según ley 13.449— sólo establece la denegatoria de la excarcelación para el caso de fuga o
entorpecimiento de la investigación, consagrando, de tal modo, el principio de libertad
durante el proceso, en armonía con el principio general contenido en el art. 144 del mismo
cuerpo (Trib. Casación Penal Bs. As., sala 3ª, causa 24.274, 10/4/2007, del voto del juez
Violini —SD—)colocándolo en una situación de vulnerabilidad.-
3.3 La pena en expectativa no es razón suficiente para denegar la excarcelación:
Atento lo expuesto, también destaca esta defensa que la SALA III de nuestro Tribunal de
Casación Penal en causa 10692 sostuvo que “…la sola invocación del antecedente
condenatorio y el delito por el que P. se encuentra sometido al proceso –a fin de desechar la
posibilidad de disponer, aún con carácter excepcional, una medida menos gravosa durante el
trámite de los actuados- no constituye un argumento eficiente para ratificar el
pronunciamiento denegatorio. El antecedente penal al que se alude no permite “per se”
presumir directa, determinada y necesariamente que, en el caso de morigerarse el encierro
cautelar, habrá de eludir la acción de la justicia, toda vez que una cosa es la violación de la
ley penal, entendida como un cuerpo de reglas mínimas para garantizar la coexistencia
social y otra, muy distinta por cierto, la sujeción o no del imputado al proceso.
Apoyar el fundamento del rechazo exclusivamente en la pena en expectativa, incluso en el
supuesto que, en caso de condena, será de cumplimiento efectivo, integra –desde mi parecer-
una visión que ve en el encierro preventivo una sanción (mecanismo de estabilización)
provisional de (la desestabilización producida por) un delito “probable”, resultando difícil no
ver en esta noción un resurgimiento pleno de la máxima inquisitorial salus publica suprema
lex est y de la poena extraordinaria o pena de sospecha (Julio Maier, Derecho Procesal Penal,
Tomo I, cit. Pag. 309, 2da. Edición, Ed. Del Puerto, Buenos Aires, 1996)…” -negrita me
pertenece-.
A través de una interpretación doctrinal, de la jurisprudencia nacional, como asimismo de
la emanada de los órganos jurisdiccionales del Sistema Interamericano de Derechos Humanos
y el dictado del reconocido fallo plenario nro. 13/2008 “Díaz Bessone” de la CNCP, donde
interpretó los arts. 316 y 317 del CPPN, se determinó que lo único que habilita el encierro
preventivo es la existencia cierta de peligrosidad procesal.
A partir del 13/11/2019, con la entrada en vigencia de los arts. 210, 221 y 222 del CPPF,
ello fue claramente receptado por la normativa procesal, al determinarse que las medidas de
coerción y cautelares solo proceden excepcionalmente, para obtener la comparecencia del
imputado o evitar el entorpecimiento de la investigación.
En atención a ello, cabe mencionar que el nuevo ordenamiento procesal dispone más de
una decena de medidas de coerción para asegurar la comparecencia al proceso, siendo
la prisión preventiva el último recurso, aplicable solo ante el caso de que las anteriores
medidas no fueran suficientes para asegurar los fines indicados.
A su vez, debe ponderarse que se establece un nuevo paradigma normativo en relación a las
prisiones preventivas, con un catálogo de pautas a considerar, en relación al peligro de fuga
(art. 221), y al entorpecimiento de la investigación (art. 222).
En ese contexto, corresponde analizar la situación de mi defendido a la luz de la nueva
normativa procesal, teniendo en cuenta las circunstancias actuales de la presente causa y la
proporcionalidad que debe guardar la medida de coerción con los riesgos procesales.
3.4. Pautas previstas para la prisión preventiva.
Art 148 CPPBA. - “Peligro de fuga”- y “Entorpecimiento probatorio”- Fundamenta. –
Que, del peligro de fuga y del entorpecimiento del proceso, se desprende, que es una
conducta disvaliosa tendiente a menoscabar el procedimiento y el afianzamiento de la justicia
en la investigación para la averiguación de la verdad material a fin , de dar una respuesta; que
como se observa de este primer recaudo el mismo conforme a jurisprudencia y doctrina se
debe basar en elementos y datos objetivos que den motivo del riesgo en cuestión y no de
meros indicios indicativos, inexactos que pongan en jaque el sistema de garantías
constitucionales a los efectos de resguardar los derechos que atañe a mi defendido.-
Con relación a la posibilidad de entorpecer la investigación, no existen elementos
vehementes en la presente causa para sustentar cualquier juicio afirmativo sobre ello y, si por
el contrario VS considere lo opuesto, es natural que existiendo peligros procesales, la
excarcelación con imposición de pautas de conducta y cauciones suficientes es el medio
constitucional, como medida cautelar para contrarestar dichos riesgos y asegurar que el
imputado se presente al eventual juicio.
En otras palabras, NO existe ningún elemento o circunstancia concreta que pueda hacer
presumir con un mínimo de fundamento que la libertad de mi defendido constituya un peligro
real para el proceso. Tiene motivos suficientes para estar plenamente a derecho.
Esta defensa sostiene que está a cargo del actor penal probar la existencia de
peligrosidad procesal, debiendo primar aquí también el principio de inocencia, y el
principio in dubio pro reo.-
Concretamente, el único motivo que habilitaría la imposición de la coerción mas gravosa
como medida cautelar sería que se demuestre cierta y concretamente que el nombrado
entorpeció o entorpecerá la producción de pruebas. Y para ello no basta que existan
pruebas pendientes de producir, puesto que de lo contrario todos los imputados deberían
permanecer detenidos durante la etapa instructora, amén de los cuantiosos recursos con los
que cuentan las instituciones estatales para cautelar la evidencia.
3.5. Arraigo. Art.-148.-1.-
Para merituar sobre el peligro de fuga se tendrán en cuenta especialmente las siguientes
circunstancias:
Arraigo en el país, determinado por el domicilio, residencia habitual, asiento de la
familia y de sus negocios o trabajo, y las facilidades para abandonar el país o
permanecer oculto. En este sentido, la inexactitud en el domicilio brindado por el imputado
podrá configurar un indicio de fuga. (negrita me pertenece)
Que el Señor GARCIA siempre detentó domicilio familiar permanente en la calle Tablada
N.º 5935 del Barrio La Perla, Partido de Moreno, Pcia. de Bs .As.. Que en dicho domicilio
vive su madre y su hermana Fernanda Marisol García, GARCIA sigue teniendo su habitación
como antes de irse a convivir con Natalia Guamantes.
Que el mismo se estableció en el inmueble sito en la calle Chuquisaca con su pareja la Sra.
Guamantes para formar pareja y eventualmente una familia.
Que en relación a su situación económica mi asistido, el señor GARCIA, se desempeña
como albañil-techista empleado de su vecino el Sr. Reddes Alberto Cristian, nacionalidad
Argentina, soltero, instruido, 39 años de edad, soltero, instruido, DNI N° 29.563.872. Que al
respecto GARCIA goza de un EXCELENTE concepto laboral, familiar y vecinal.
Conforme lo expuesto, mi defendido posee arraigo (raíces territoriales, sociales, culturales
y sobre todo afectivas), un núcleo familiar de contención con el cual convive, lazos afectivos
y vínculos familiares, una actividad laboral con la que alcanza a cubrir las necesidades
básicas de su núcleo familiar, un domicilio fijo en el cual reside, lo que de concederse la
excarcelación contrarestará un posible peligro de fuga. -
4. CONCLUSIONES. –
Entiende esta defensa, que no existen riesgos procesales que justifiquen la detención
cautelar del nombrado, y por ello se solicita su excarcelación. A ello cabe aunar la particular
situación de vulnerabilidad en la que se encuentra el justiciable, que en el marco del proceso
puede traducirse como una clara inexistencia de riesgo procesal.
A todos los argumentos ya desarrollados deberá añadírsele, para realizar un análisis serio y
comprometido de la situación de mi defendido, la emergencia carcelaria y sanitaria ya
invocadas, que no pueden ser desconocidas por la justicia. Toda decisión adoptada
respecto a la libertad de una persona, o sobre las condiciones en que cumple su arresto,
debe estar gobernada pura y exclusivamente en una necesidad real, no potencial.
Por todo lo expuesto, SOLICITO SE LE CONCEDA LA LIBERTAD a mi defendido, con la
imposición individual o combinada de alguna de las pautas contenidas en el CPPBA, las que
se proponen en el siguiente punto.
5. CAUCIÓN JURATORIA.
MEDIDAS DEL ART. 160 CPP
Por lo expuesto tu supra, en el marco del art. 160 del rito, BENJAMIN CIRILO GARCIA
se compromete bajo CAUCION JURATORIA a lo siguiente:
1- Someterse al cuidado de su madre CRISTINA CLAUDIA PEREZ, con DNI
20.011.834, con domicilio en la calle Tablada N.º 5935 del Barrio La Perla, Partido de
Moreno, Pcia. de Bs .As.
2- La obligación de presentarse periódicamente, 2 veces por día, por la mañana y por la
tarde ante la Dependencia Policial mas cercana o autoridad que V.S. designe.
3- La abstención de salir del Partido de Moreno, de concurrir a lugares nocturnos, o de
comunicarse con personas perseguidas por la justicia.
4- La promesa jurada de someterse al procedimiento penal, cuando con ésta bastara como
alternativa o fuere imposible el cumplimiento de otra.
5- La promesa jurada de continuar con el estudio de forma no presencial y conseguir en
lo posible un trabajo en modo Home office, en el corto plazo.
6- Caución personal en dinero y/o toda otra medida que V.S. con su elevadísimo criterio
considere necesaria.
Por todo lo expuesto, en el improbable caso que el señor juez decidiera no hacer lugar al
presente incidente de excarcelación SOLICITO SE LE MORIGERE LA PRISION a mi
defendido, bajo la modalidad de arresto domiciliario, con arraigo en el domicilio de su madre
CRISTINA CLAUDIA PEREZ, DNI 20.011.834, con domicilio en la calle Tablada N.º 5935
del Barrio La Perla, Partido de Moreno, Pcia. de Bs .As., con la imposición individual o
combinada de alguna de las pautas contenidas en el CPPBA.
7. RESERVAS. –
Para el improbable caso que el Señor Juez decidiera no hacer lugar al presente incidente de
excarcelación, hacemos expresa reserva de recurrir ante la Excma. Cámara de Apelaciones y
Garantías en lo Penal por vía de apelación o, eventualmente en forma directa, como así
también de recurrir en casación, por inobservancia de las normas prescriptas bajo pena de
nulidad, conforme el art. 448, inc. 1º del CPPPBA, y de recurrir, de ser necesario, ante la
Suprema Corte de Justicia, por la afectación de los derechos y garantías mencionadas
reconocidas constitucionalmente.
8. PETITORIO. -
Por los motivos expuestos, del Sr. juez solicitamos:
1) Tenga por presentes los hechos nuevos. -
2) Forme el correspondiente incidente de excarcelación. -
3) Corra vista a las demás partes en la presente causa.
4) Oportunamente, resuelva de acuerdo a lo peticionado fundadamente a lo largo de esta
presentación, ordenando la excarcelación de GARCÍA. -
5) En subsidio, se tenga presente la morigeración solicitada y resuelva acorde a lo
peticionado previa audiencia del art. 168 bis.
6) Oportunamente, tenga presentes las reservas formuladas en el apartado anterior. -
Proveer de conformidad que
es Justicia