Letras
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VISUAL
● MASCO PUMA, MARICARMEN SAIDA
● CUTIPA ALVAREZ, SUDY VILMA
● CAIRA VILCA, CRISTIAN ADRIEL
Tratados desde el ámbito educativo
Estas cuatro dimensiones son importantes para el desarrollo personal y le dan sentido al concepto de educación
integral.
DIMENSIÓN COGNITIVA
● Es esencial, establecer con él un vínculo desde lo personal y no desde el déficit. Esto le da permiso para
diferenciarse e integrar sus propios sentimientos.
● Reducir nuestras propias vacilaciones frente al alumno para no incrementar su inseguridad.
● Permitirle autonomía. No ayudarle si no lo necesita. Hacerle ver sus posibilidades reales.
● No negar sus limitaciones. Preguntarle sobre sus necesidades. Si se quiere saber algo de él, se le debe preguntar
directamente.
● Saludarlo. No jugar a las adivinanzas ni ponerlo a prueba: identificarse.
● Decir las cosas claramente. No evitar palabras relativas a la visión.
● En definitiva conocer las características de este déficit, para actuar con naturalidad y devolverle al alumno la
imagen de una persona valiosa en sí misma, por encima de su deficiencia.
los canales para poder obtener información del mundo en que
viven
● Una estimulación multisensorial, que permita y favorezca la utilización de todos los sentidos, sobre todo tacto y
oído.
● Trabajar sobre objetos y situaciones de la vida real.
● Verbalizar todas las situaciones utilizando un lenguaje concreto.
● Tomar conciencia de los procesos que se realizan y transmitir los datos significativos de los mismos.
● Anticipar verbalmente algunos hechos, sobre todo si el entorno es poco conocido. Evitar sorpresas.
● Dar información adicional en los casos que el alumno no pueda percibir los datos significativos por sí mismo.
● Controlar el nivel de ruido en el aula.
● Tener en cuenta que la percepción háptica es analítica, por lo que el alumno necesita un tiempo mayor que el que
se necesita visualmente para componer mentalmente la globalidad, una vez que ha tocado el objeto de forma
sucesiva y organizada; algo que precisa entrenamiento.
Estos alumnos perciben mejor:
● Los objetos reales o maquetas,
● las representaciones bidimensionales simples y con elementos muy diferenciados,
● las figuras estáticas,
● las figuras que no estén superpuestas o con perspectiva.
● Es necesario también trabajar la exploración con varios objetos a la vez: discriminar los que uno desea,
retirar los otros, clasificar sin perder elementos,
● Debe entrenarse la enseñanza del dibujo: partir de formas estructurales y esquemáticas.
● Cuando el resto visual no resulta satisfactorio para trabajar la lectoescritura en negro, se ha de favorecer y
motivar la utilización del código Braille.
● Además, si queremos que imite algún gesto motor se le ha de permitir que toque el modelo y/o realizar el
gesto en el cuerpo del alumno ciego.
El lenguaje que presenta el niño también nos informa de la
estructura de su pensamiento y los contenidos que posee:
Es necesario potenciar las experiencias personales del alumno en relación con la vida real. Valorar sus experiencias y
fundamentar en ellas el lenguaje.
● Potenciar la búsqueda de relación entre conceptos, la unidad del discurso, la percepción relacionada de las cosas.
● Respetar el ritmo del alumno. A veces hay que darle más tiempo.
● Proporcionarle estrategias muy claras de organización del trabajo.
● Favorecer que planifique su propio trabajo: que haga un hábito de esta planificación.
Todas estas necesidades del alumno ciego y con baja visión deben ser valoradas y consideradas en los distintos niveles de
concreción curricular
Casos de los alumnos con un cierto grado de visión
● Conocer la situación visual del alumno y sus implicaciones desde el punto de vista
educativo y funcional.
● Permitir y facilitar la utilización de las ayudas ópticas y no ópticas necesarias.
● En general, utilizar un material claro, bien contrastado y sin acumulación de imágenes.
● Dar referencias de la situación de elementos en una página.
● Entrenar el formato de los libros de texto, de manera previa o simultánea a su utilización.
Respecto a la ubicación de objetos en el espacio
La presencia de un alumno con baja visión o ciego le obligará a realizar ciertas modificaciones organizativo-didácticas que
pueden resumirse en los siguientes puntos (Martínez Liébana, 2000):
● Ha de hacer uso de medios alternativos a los usuales para el cumplimiento de los diferentes objetivos
curriculares,
● ha de atender, en cada momento, al ritmo con que el alumno realiza las diferentes tareas escolares,
● ha de permitir la instalación en el aula de instrumentos y material didáctico específicos,
● ha de verbalizar cuanto escriba en la pizarra,
● ha de reiterarle la presentación de información,
● ha de ser flexible en la elección de los sistemas de evaluación,
● ha de animar al alumno a la participación en clase y a la interacción con sus compañeros, y
● ha de considerar al profesor de apoyo como un elemento esencial dentro y fuera del aula, con el que ha de
cooperar y coordinarse continuamente.
Las adaptaciones curriculares
Estas son de dos tipos:
a. Adaptaciones del entorno físico: referidas a los cambios materiales que es preciso realizar en el aula y en el centro
escolar para garantizar una adecuada integración física del alumno. por ejemplo:
● organización fija de los distintos elementos y advertencia expresa en caso de modificación de los mismos,
● puesto escolar con espacio suficiente para manejar el material,
● conocimiento exhaustivo de las diferentes zonas por las que ha de desenvolverse el alumno,
● eliminación de obstáculos y barreras arquitectónicas que impidan la accesibilidad,
● posición en el aula en lugar avanzado,
● previsión de espacios donde el alumno vaya a recibir algún apoyo,
● adecuada iluminación,
● pizarra suficientemente visible.
b. Provisión de recursos técnicos: destinados a garantizar un adecuado acceso y reproducción de la información: libros,
materiales en relieve, máquina de escribir braille.
Los Equipos Específicos de Apoyo. El maestro itinerante
El modelo actual de integración educativa de alumnos ciegos y deficientes visuales tiene sin duda en el Equipo Específico
de Apoyo su elemento básico más característico y significativo. Vienen a completar la labor realizada por los Equipos
Psicopedagógicos de Orientación Educativa.
Los equipos específicos se hallan integrados por diferentes profesionales, directamente relacionados con el proceso de
integración educativa del alumno ciego o deficiente visual: psicopedagogos, trabajadores sociales, técnicos de
rehabilitación integral, instructores tiflotécnicos y, sobre todo, por maestros itinerantes.
De las actuaciones del maestro itinerante de apoyo a la inclusión escolar hay que destacar: el asesoramiento a los
docentes del aula, la enseñanza de las técnicas específicas a los alumnos, la adaptación y adecuación de materiales y la
atención a las familias.
La importancia de la buena relación con las familias
Los padres desempeñan un papel relevante en el proceso de integración educativa del niño ciego y
con baja visión.
es indispensable que estos acepten de forma realista la deficiencia visual del hijo; en esta tarea
los equipos de atención temprana y de apoyo específicos desempeñan una importantísima labor.
elemento insustituible para el fomento de la autonomía personal del hijo, para la aceptación por
este de su discapacidad y para la adquisición de un autoconcepto positivo.