Nº 95 146. Julio Agosto 2020
Nº 95 146. Julio Agosto 2020
Nº 95 146. Julio Agosto 2020
www.caimanediciones.es
EDICIÓN DIGITAL
Especial
VOLVEMOS
AL CINE 3,49 EUROS
SALAS PEQUEÑAS Y ALTERNATIVAS / RICHARD LINKLATER / JONATHAN GLAZER / JESSICA HAUSNER / SPIKE LEE
Especial SUMARIO
VOLVEMOS AL CINE JULIO-AGOSTO 2020 NO 95 (146)
S C R I P C IÓN
¡I N
ABIERTA!
7ª EDICIÓN
MÁSTER
DE
CRÍTICA
CINEMATOGRÁFICA
200 HORAS
PROFESORADO Dirección académica: Caimán Cuadernos de Cine
Carlos F. Heredero
Àngel Quintana MATERIAS DE ESTUDIO FECHAS
Carlos Losilla Introducción: 1 sesión / 3 horas Del 28 de septiembre de 2020,
Andrea Morán Ferrés Módulo 1: Historia y teoría de la crítica al 15 de junio de 2021
Violeta Kovacsics (11 sesiones / 33 horas)
LUGAR
Fernando Lara Módulo 2: La lectura de las imágenes
ECAM (Escuela de Cinematografía y del
(17 sesiones / 51 horas)
Lola Mayo Audiovisual de la Comunidad de Madrid)
Jordi Costa Módulo 3: Aplicaciones Ciudad de la Imagen (Pozuelo de Alarcón)
(15 sesiones / 45 horas)
Javier Ocaña PRECIO DE LA MATRÍCULA
Módulo 4: Taller práctico
Luis Martínez
(22 sesiones / 66 horas) 1ª convocatoria
Sergi Sánchez (hasta el 5 de agosto, 2020): 2.400 euros
Roberto Cueto PARA MÁS INFORMACIÓN
SOBRE EL PROGRAMA O CUALQUIER 2ª convocatoria
Santos Zunzunegui (hasta el 21 de septiembre de 2020): 2.900 euros
CONSULTA:
Domingo Sánchez-Mesa e-mail: [email protected] DOCUMENTACIÓN A PRESENTAR
Javier H. Estrada www.ecam.es
www.caimanediciones.es l Formulario de inscripción cumplimentado
Jaime Pena l Fotocopia DNI, pasaporte o documento
José Enrique Monterde equivalente
CLASES
Antonio Santamarina l Currículo
Días de la semana: l Carta de motivación
Carlos Reviriego Lunes y Martes, de 16,00h. a 19,00h.
Asier Aranzubia Horas lectivas: 200
Ana Torres 66 sesiones de 3 horas SE OFRECE A LOS ALUMNOS
Jara Yáñez +
Juanma Ruiz Asistencia a pases de prensa y l Una suscripción anual a la edición digital
Luis E. Parés proyecciones especiales de Caimán Cuadernos de Cine
Jonay Armas l Una película en DVD / Blu-ray
ALUMNADO
Enric Albero Máximo: 30 alumnos
l Diploma acreditativo
Felipe Rodríguez Torres (la celebración del máster está condicionada a que Y también:
se alcance un mínimo de 20 alumnos)
l Una suscripción
Anual Básica a
Editorial
CARLOS F. HEREDERO
Director
Carlos F. Heredero
Coordinador en Cataluña:
Àngel Quintana
Consejo de redacción:
Enric Albero, Manuel Asín, Fernando
Bernal, Roberto Cueto, Javier H.
Estrada, José Antonio Hurtado,
Eulàlia Iglesias, Violeta Kovacsics,
Carlos Losilla, Beatriz Martínez, José
Enrique Monterde, Andrea Morán
Ferrés, Luis E. Parés, Jaime Pena,
Antonio Santamarina
Redacción: Jara Yáñez
Secretaria de redacción:
Carmen Córdoba Epifanía y catarsis ante una pantalla: La mirada de Ulises
Consejo Editorial:
Jordi Balló, Jean-Michel Frodon,
Leonardo García Tsao, Román
Regreso a Ítaca
Gubern, Adrian Martin, David Oubiña,
Manuel Pérez Estremera, José María
Prado, Jonathan Rosenbaum, Jenaro
Talens, Santos Zunzunegui
H
Colaboran en este número:
José Luis Álvarez Cedena, Cristina
Aparicio, Jonay Armas, José Félix
Collazos, Carlos Fernández Castro,
ace ya más de tres meses, forzados por los imperativos inherentes al com-
Ignasi Franch, Pablo López, Raquel bate sanitario contra la COVID-19, reconvertíamos sobre la marcha nues-
Loredo, Adrian Martin, Áurea Ortiz
Villeta, Rubén de la Prida, Quintín, tra edición de abril en un número exclusivamente digital en el que –ante
Daniel Reigosa, Felipe Rodríguez el cierre sobrevenido de las salas de cine– optábamos por dedicar nuestra
Torres, Javier Rueda, Miquel Zafra,
Santos Zunzunegui reflexión y nuestras críticas a las diferentes expresiones fílmicas y audiovisuales que
Dirección de arte y maquetación: en ese momento eran accesibles online y en las diferentes plataformas. Aquel número
Itala Spinetti
Publicidad:
daba testimonio de la irredenta vocación de Caimán CdC de acompañar siempre, desde
Pedro Medina una irrenunciable perspectiva crítica, a la actualidad cinematográfica de cada momento,
Coord. y redes sociales: sea esta la que sea y se encuentre donde se encuentre.
Juanma Ruiz
La sociedad española emprende ahora, desde finales de junio, un nuevo proceso que
REDACCIÓN
C/ Soria, nº 9, 4º / 28005 Madrid trata de recuperar la normalidad perdida y, con ella, también la de las salas cinemato-
(España) gráficas, que empiezan a abrir progresivamente y a recuperar, poco a poco, su necesario
Tel.: (+34) 91 468 58 35
Mail: diálogo con los espectadores. Lo que toca ahora, por tanto, es acompañar a este proceso:
[email protected] un camino que conduce a la reconquista de los espacios icónicos por excelencia en los
que se despliega de manera más intensa la comunicación colectiva entre las imágenes
del cine y las audiencias plurales, entre los aficionados y las grandes pantallas.
Esas pantallas que han estado también tantas veces en las imágenes de celuloide, igual
que ahora lo están frecuentemente en los píxeles digitales que dan forma a multitud
Director General
Pedro Medina de ficciones. Las pantallas de las salas oscuras, las pantallas de los cines al aire libre y
Caimán Ediciones, S.L. las pantallas de los drive in..., todas ellas han comparecido –filmadas por los cineastas–
C/ Soria, nº 9, 4º
28005 Madrid
como escenarios de historias, de sueños imaginarios y de emociones vividas por los
Tel.: (+34) 91 468 58 35 personajes de las películas, a veces con tanta o más pasión, incluso, que aquella con la
[email protected] que los espectadores de tales filmes asistían al desarrollo de los argumentos respectivos.
www.caimanediciones.es
Pantallas que convocan momentos de decisivas epifanías emocionales o morales; pan-
PUBLICIDAD tallas que dialogan –de forma figurada o real, imaginada o estrictamente física– con los
[email protected]
Tel.: 91 468 58 35 espectadores de las plateas que vemos en las películas; pantallas que son hogar y refugio
SUSCRIPCIONES
de las criaturas imaginadas por guionistas y directores; pantallas alrededor de las cua-
[email protected] les proyeccionistas, taquilleros, vendedores de palomitas o conservadores de filmotecas
Tel.: 91 468 58 35 organizan su vida íntima y personal; pantallas que cifran los ritos de paso de la cinefilia
DISTRIBUCIÓN: Sociedad General o que albergan los primeros temblores de la adolescencia; pantallas que convocan los
Española de Librería (SGEL).
IMPRESIÓN: www.LITOFINTER.com
deseos sexuales más explícitos; pantallas pequeñas o alternativas, también, que acogen
Depósito Legal: M-48464-2011
al cine de versión original o las expresiones más personales del cine de autor.
ISSN: 2253-7317 De todas esas pantallas, de muchos de esos cines que salen en las películas, hablamos
Las opiniones expresadas por los colaboradores
no son compartidas necesariamente por Caimán
en este número especial de Caimán CdC a lo largo de un extenso dosier de 45 páginas
Cuadernos de Cine.
concebido no para evocar de forma nostálgica aquellos espacios filmados por el cine,
Esta revista ha recibido una ayuda a la edición del
Ministerio de Cultura y Deporte. sino para reflexionar sobre el rol que estos han jugado para los creadores y para sus
espectadores. Acompañamos así, con esta lectura cinéfila para el verano, el camino
Actividad subvencionada por el Ministerio de
de regreso al lugar de esa comunión laica, a veces inefable, que se produce cuando la
Cultura y Deporte.
mirada del cineasta impacta en la mirada de una audiencia colectiva. Camino de retorno
a la tierra perdida, a la Ítaca soñada y vivida por miles y miles de espectadores. Porque
'los cines' también están en 'el cine'. Y al cine volvemos este verano.
CON LA LLEGADA DEL VERANO, HEMOS VUELTO A VER CINE EN LAS SALAS TRAS EL LARGO
CIERRE DE ESTAS FORZADO POR EL CONFINAMIENTO. PARA CELEBRARLO, ABRIMOS AQUÍ
UNA AMPLIA Y PLURAL REFLEXIÓN SOBRE EL PAPEL QUE HISTÓRICAMENTE HA JUGADO, Y
SIGUE JUGANDO TODAVÍA HOY, LA REPRESENTACIÓN DE LA SALA CINEMATOGRÁFICA EN LAS
IMÁGENES DEL PROPIO CINE. OCHO LARGOS ARTÍCULOS TRANSVERSALES Y 38 PEQUEÑAS
RESEÑAS DE OTROS TANTOS MOMENTOS EMBLEMÁTICOS COMPONEN ESTE DOSIER ESPECIAL
CON EL QUE NOS SUMAMOS, ENTUSIASTAS, A UN RETORNO LARGAMENTE ESPERADO.
EL CINE, LA VIDA…
EPIFANÍAS FÍLMICAS
JAIME PENA
P
El largo día acaba (Terence Davies)
PATERSON (2016)
Los cines en el cine
infancia a mediados de los años cin- El propio haz del proyector vehicula
cuenta en Liverpool, el periodo ‘más también otra secuencia de montaje,
feliz de su vida’, como ha confesado quizá la más significativa de la pelí-
en distintas ocasiones el cineasta. Ese cula, sostenida sobre la voz de Debbie
contraste se construye a partir de la Reynolds cantando Tammy. Sobre esa
banda sonora, compuesta tanto de luz, un travelling cenital recorre la
canciones populares como de diálo- platea de un cine llena de espectado-
gos de películas británicas o america- res, muchos de ellos fumando. La luz
nas. Por ejemplo, en el mismo inicio del proyector y el humo desaparecen y
vemos una calle llena de escombros esa platea se convierte en una iglesia,
bajo la lluvia mientras escuchamos mientras seguimos escuchando que
a Nat King Cole cantando Stardust, “Tammy’s in love”, aunque, cuando
cuya melodía enlaza con una frase otro encadenado transforma la iglesia
Vida en sombras (Llorenç Llobet Gràcia) extraída de El quinteto de la muerte en un aula, se cuelan algunas líneas de
(Alexander Mackendrick, 1955) y la diálogo de Ocho sentencias de muerte
epifanía, el nacimiento del cine. Sin primera línea de diálogo del prota- (Robert Hamer, 1949) y Private’s Pro-
duda, Erice, nacido en 1940, se ins- gonista, Bud, pidiéndole dinero a su gress (John Boulting, 1956). Y así es
piró en su propio descubrimiento del madre para ir al cine. El ambiente no como Davies liga el cine con la reli-
cine, en la San Sebastián de aquellos es tan pesaroso como el de El espíritu gión y con la educación a través de
tiempos. A tal efecto, en 2006, filmó de la colmena, pues ese mundo Davies un espacio, el de la sala de cine, que
un documental, La Morte Rouge, que lo había retratado ya en su película puede mutar en otras funciones, algo
evoca aquel momento y que, visto en anterior, Voces distantes (1988), pero que vuelve a quedar de manifiesto en
retrospectiva, conecta su biografía el cine sigue representando tanto la última secuencia de la película, en
con la de muchos cinéfilos y/o cineas- una escapatoria como el espacio de la que la voz de un profesor se com-
tas, empezando por el propio Carlos la felicidad. Para comprobarlo basta bina con los diálogos de Cadenas rotas
Durán de Vida en sombras. con la primera imagen de Bud en el (David Lean, 1949) y con unas cam-
Para Erice el cine representa ese cine, sentado en el anfiteatro junto a panas, mientras vemos a Bud y a su
mundo soñado o idealizado que con- su madre y hermana, la luz del pro- amigo Albie de espaldas sentados (en
trastaba con la opresión de la dicta- yector dirigiéndose hacia una pantalla lo que parece un cine) contemplando
dura, algo que está también en la base que no vemos pero de la que sí oímos un largo atardecer.
del discurso de Terence Davies en El su banda sonora, la música compuesta Llobet Gràcia también sacaba mu-
largo día acaba (1992), película igual- por Rodgers y Hammerstein para Ca- cho partido a la luz del proyector en
mente autobiográfica, basada en su rrusel (Henry King, 1956). Vida en sombras en una escena en
David Lynch
DANIEL REIGOSA
El sur (Víctor Erice): la fachada del cine y la película que se proyecta en su interior
la que Carlos, ya adulto (Fernando Fer- también Ana, como si su tema hubiese se proyecta sobre su propia vida en
nán-Gómez), va al cine con Ana y su encendido alguna chispa entre ellos. la forma de Ana y Clara, sus ‘seño-
madre a ver Romeo y Julieta (George Llobet Gràcia los encuadra desde atrás ras De Winter’. Carlos sale a mitad
Cukor, 1936). La escena es muy extraña. besándose, como si fuesen ellos los que de proyección, pero no puede dejar
Primero se proyecta un noticiario so- finalizasen la historia con un happy de reconocer la perfección narrativa
bre carreras y accidentes automovilís- end, anticipando lo que viene a conti- de la película, lo que reanima su gran
ticos y a continuación se encienden las nuación, su boda. vocación y le lleva a retomar la cámara
luces dando lugar a un largo descanso Después de la guerra, Carlos se ha cinematográfica, ahora sí ya decidido a
con el que Carlos no puede disimular alejado del cine culpándolo indirecta- reconvertirse en director.
su disgusto (la escena forma parte del mente de la muerte de su esposa. Luis Desde su mismo nacimiento, los mo-
primer montaje del film, previo a su y Clara consiguen llevarlo a ver Rebeca mentos capitales de la vida de Carlos
paso por censura). Por fin comienza la (Alfred Hitchcock, 1940), una tenta- Durán acontecen en una sala de cine;
película y la cámara se desvía hacia la ción difícil de resistir, pues el cine está son los puntos de inflexión de su bio-
luz del proyector, sobre la que se pro- justo enfrente de la pensión donde grafía, como si la sala y la película que
duce una elipsis que nos lleva hasta el viven. Carlos vuelve entonces a entrar se proyecta en cada momento repre-
final de la sesión. Carlos parece since- en una sala de cine, visita de la que sentasen una revelación que imprime
ramente impresionado por la película, no saldrá ileso. La historia de Rebeca un giro a su vida. Decía que estas
JOKER (2019)
Todd Phillips
CRISTINA APARICIO
LE MÈPRIS (1963)
Los cines en el cine
Jean-Luc Godard
JOSÉ FÉLIX COLLAZOS
Michael Mann
CARLOS F. HEREDERO
LA PANTALLA Y LA PLATEA
ESPEJOS REFLECTANTES
E
CARLOS F. HEREDERO
l disfrute espectatorial de en ella y precipitándose sobre la calle. culas eróticas de la historia. Gestos
ver una película dentro de El dispositivo fílmico y la experiencia de interlocución que se adelantan, en
una sala nunca ha sido una real dialogaban ya entonces, de manera ¡siete años! al famoso plano del ban-
experiencia pasiva, ni ha determinante y efectiva, en los dos dido que dispara contra los especta-
circulado jamás en una única direc- sentidos: desde la pantalla hacia los dores al final, o al principio (según
ción. Cuando los asombrados ciuda- espectadores y desde la vivencia de los distintos montajes que circularon
danos parisinos vieron por primera estos hacia la pantalla. del film), de Asalto y robo de un tren
vez La llegada de un tren a la estación, (Edwin S. Porter, 1903), ese famoso
el 25 de enero de 1896, se asustaron no EL BATISCAFO DE NOËL BURCH ‘plano emblema’ (Noël Burch dixit)
solo porque creían que el convoy que El cine tomó conciencia reflexiva y que buscaba provocar una reacción en
avanzaba desde la pantalla se iba a metalingüística de ese diálogo muy sus espectadores dirigiéndose frontal-
precipitar sobre ellos (como efecto del pronto, tal y como ponen en evidencia mente a ellos desde la pantalla.
ángulo sesgado de la toma elegida por las múltiples miradas directamente a La ruptura de la cuarta pared, la
los hermanos Lumière), sino porque cámara, acompañadas de gestos expre- mirada ‘concertada’ hacia y con el
en su memoria estaba todavía reciente sos que interpelan a los espectadores espectador de la sala cinematográ-
el descarrilamiento del expreso París- por parte de la mujer que se desnuda fica, implica “la ‘desaparición’ de la
Granville que, solo tres meses antes, ante su marido, en muchas de las cámara en tanto que vehículo de iden-
atravesó entera –longitudinalmente– diferentes versiones existentes de Le tificación espectatorial, en tanto que
la estación de Montparnasse, echán- Coucher de la marièe (Albert Kirchner, ‘batiscafo’ invisible que nos transporta
dose encima de los viajeros que había ‘Lear’, 1896), una de las primeras pelí- al universo de las stars” (Burch, de
TRÁGICA CONFUSIÓN
Explorar esta confusión entre el espa-
cio de lo real y el espacio de lo imagi-
nario ha sido otra las de las vías por las
que el cine se adentró también desde
fechas muy tempranas. Confusión
que Dziga Vertov amplió a los lími-
tes entre el documental y la ficción
e, incluso, entre el proceso de fabri-
cación de la película y el rito de su
visionado, que parecen desarrollarse
simultáneamente en El hombre de la Perdita Durango (Álex de la Iglesia)
cámara (1929), donde asistimos a esos
dos momentos en paralelo, lo que nos 1997), se imagina transportado al oeste Sabotage), en cuya banda sonora –muy
permite contemplar, alternativamente, de Veracruz (Robert Aldrich, 1954) intencionadamente– no resulta posible
lo que los espectadores filmados por –mediante una sobrevenida fusión distinguir la detonación de un disparo
Vertov están viendo en una sala de cine entre la ‘imagen real’ y la imagen fíl- ‘real’ (que mata a un espectador sen-
y, ¡atención!, la filmación de lo que ellos mica– y se ve a sí mismo ocupando el tado en la sala) del que corresponde
y nosotros vemos a la vez mediante una lugar del Burt Lancaster agonizante a al disparo ‘ficcional’ que tiene lugar
‘puesta en abismo’ que se cierra suge- quien Gary Cooper mataba en aquel en la enorme pantalla sobre la que se
rentemente sobre sí misma. film, grabado a fuego en su memoria proyectan las imágenes que contempla
La relación de los personajes con las desde los días de su infancia. la audiencia. Unos espectadores a los
pantallas no se ha contentado, eso sí, La confusión estrictamente física que Hitchcock hace prisioneros de una
con una mera aproximación espacial entre la realidad de la sala y la fic- diabólica operación (la superposición
o táctil, pues en ocasiones la confusión ción de la pantalla puede resultar casi y acoplamiento del universo diegético
entre un espacio y otro (la pantalla y el siempre peligrosa cuando no mortal, y el universo ficcional inserto en su
patio de butacas, lo real y lo ficcional) parecen decirnos –de hecho– algunas interior) sustentada en el sofisticado
ha permitido a los cineastas ‘entrar’ en de las ficciones que más afortunada- racord del disparo, que consigue atra-
la mente de sus personajes: una posibi- mente han jugado con esa posibilidad, vesar distintos universos ficcionales,
lidad a la que Álex de la Iglesia consi- entre las que dos de ellas resultan como bien detectó Jesús G. Requena.
guió darle forma cuando Romeo (Javier emblemáticas. Por un lado, el Sabotaje Por otra parte, la fatídica confusión
Bardem), en el último suspiro antes de que Alfred Hitchcock filma en 1942 de la que es víctima Bobby, paralizado
morir (casi al final de Perdita Durango, (no confundir con su film de 1936: y confundido entre el personaje
Tsai Ming-liang
JONAY ARMAS
GREMLINS (1984)
Los cines en el cine
Joe Dante
PABLO LÓPEZ
EL ESPACIO ACOGEDOR
L
EULÀLIA IGLESIAS
a secuencia más recor- de atrás de una pantalla de cine. Los títulos de Hitchcock que ofrecen una
dada de Sabotaje (Alfred Verloc habitan en el mismo edificio del sabrosa interpretación psicoanalítica
Hitchcock, 1936) es aque- cine que regentan, aunque en su caso del cine como dispositivo. El británico
lla en la que el joven her- no se trata de un hogar feliz. Cuando se permite incluso una fugaz observa-
mano de la señora Verloc (Sylvia Sid- arranca la película, la sala, como el ción de la crueldad latente en una de
ney) transporta sin saberlo una bomba resto de la ciudad, se ha quedado sin las Silly Symphonies de Disney. A pesar
por las calles y un autobús de Londres. luz a causa de un atentado. Hitchcock de este detalle, Sabotaje presenta una
Pero antes nos encontramos otra esce- vincula desde el inicio las activida- experiencia de la sala en la que la pelí-
na de especial interés, cuando el mis- des subversivas del señor Verloc con cula no es lo más importante.
mo muchacho acompaña al agente de el hecho de que gestione una sala de En How I Fell in Love with Eva Ras
incógnito a una puerta que conduce cine. En El agente secreto, la novela de (2016), de André Gil Mata, la veterana
a un espacio siempre oculto: la parte Joseph Conrad en la que se inspira el proyeccionista Sena Mujanovic ha con-
film, el espía protagonista trabaja en vertido su espacio de trabajo (una
otro tipo de establecimiento, así que el vetusta sala en Sarajevo) también en
cambio de oficio fue idea del director su hogar. Lleva a cabo sus tareas y
británico. En el caso de Verloc, la pan- rutinas cotidianas en este viejo edifi-
talla de cine cobra una significación cio que el director portugués retrata
añadida porque él lleva a cabo su doble desde el interior y sin apenas aden-
vida oculto literalmente tras ella. Es el trarse en la platea: las múltiples imáge-
gestor de un cine cuyos actos clandesti- nes de filmes de la antigua Yugoslavia
nos provocarán, en la parte final, que el que veremos se muestran, sobre todo,
público salga violentado de la proyec- desde el punto de vista de la cabina de
How I Fell in Love with Eva Ras (André Gil Mata) ción. Sabotaje se une así a tantos otros proyección, como si solo existieran
John Carpenter
JUANMA RUIZ
para la protagonista. Las escenas de las gan. Las salas, ya sean lujosos pala- antigua del cine España (2017), Pedro
películas recomponen el sueño trun- cios para acoger un espectáculo de Burgos Barrantes planta la cámara en
cado de un proyecto político que dis- masas, estructuras de sobria elegancia el interior del ruinoso cine de su pueblo
puso de su momento de euforia y de su racionalista y arquitectura art déco, o cacereño, Albalá, cuya economía flore-
propio star-system alternativo, encabe- modestos establecimientos de barrio ció en los años cincuenta gracias a las
zado por la actriz Eva Ras del título. En popular, han sufrido una pertinaz des- minas de uranio que proveían a la esca-
La forma del agua (2017), de Guillermo protección patrimonial que las ha con- lada nuclear estadounidense. Nieto del
del Toro, Sally y su vecino, dos perso- denado a ser borradas, en el más puro responsable del cine, el director entre-
nas cada una a su manera marginadas, sentido físico, de la memoria colectiva laza en su documental la memoria
viven justo encima de una suntuosa de pueblos y ciudades. Más allá de títu- familiar con la de toda una comunidad,
sala a la que ella a veces se escapa y los de ficción como The Last Picture e incluso con la colectiva respecto a la
donde se refugiará la criatura anfibia Show o Cinema Paradiso, en los últimos historia reciente de España. Entre los
cuando huye de la casa. años el cine documental ha recogido detalles que se desgranan, destaca el
El tradicional desprecio por parte también el amor por el cine a través de conflicto político soterrado entre los
de ciertas instituciones hacia el cine establecimientos concretos a punto de responsables del cine y las autoridades
se extiende a los edificios que lo alber- desaparecer o ya apagados. En Historia franquistas, pero también la aten-
TABÚ (2012)
Los cines en el cine
MISTERIOSO ASESINATO EN
MANHATTAN (1993) Woody Allen
JUANMA RUIZ
John Carpenter ofrece –vía Stephen Aunque se configure en torno a tagonista recuerda cuando su madre
King– el reverso terrorífico de la idea- una pantalla sin techo ni muros, el soltera y embarazada renuncia a aban-
lización de la cultura del automóvil drive-in poco tiene que ver con los donar su pueblo porque decide, a úl-
de los años cincuenta y principios de cines al aire libre habituales de los tima hora, acudir a la sensación del
los sesenta a través de ese nerd que se veranos de tantos territorios o con momento: el estreno de un film ex-
empodera a lo Mr. Hyde a través de su las formas precarias de exhibición tranjero en el cine al aire libre. La
coche vintage y su progresiva trans- en lugares carentes de infraestruc- protagonista nace bajo las estrellas y
formación maléfica en un greaser. No turas. Estamos hablando aquí de rodeada de los vecinos durante la pro-
por casualidad, una de las escenas más esas no-salas como la que retrataba yección de Victory Over Death (1967),
terroríficas tiene lugar en un drive-in. Memorias del cine - Electric Shadows el clásico albanés de Gëzim Erebara y
La mayor parte de la zona permanece (2004), de Xiao Jiang, algo así como Piro Milkani sobre dos heroínas de la
oscurecida fuera de campo mientras la la respuesta china a Cinema Paradiso resistencia antinazi. Un escenario en
novia del protagonista queda atrapada en su recorrido nostálgico por una las antípodas, por tanto, de la forma
dentro de esa máquina celosa y mortal vivencia infantil y adolescente del de exhibición tardocapitalista que
que es Christine. cine en los años setenta. Allí la pro- supone el drive-in.
VERANO DEL 42 (1971) El cine como ritual de los primeros escarceos amorosos
ROBERT MULLIGAN y, en retrospectiva, como una suerte de evocador paraíso
cinéfilo: en el cine de Nantucket se anuncia Sargento
JAIME PENA York (H. Hawks, 1941) y se proyecta La extraña pasajera
(I. Rapper, 1942), las películas que podríamos asociar
con esa época. La de Rapper parece interesarle muy
poco a Hermie, centrado como está en acariciar el pecho
de la chica que lo acompaña (en realidad, su hombro),
pero también un tanto incómodo desde que sabe que
Los cines en el cine
TOCAR EL CINE
E
VIOLETA KOVACSICS
y Vincent Paronnaud
RAQUEL LOREDO
certado cuando, después del beso que que lleva al protagonista a todo tipo
viene a sellar el happy end, la película de archivos hasta desembocar en una
que se está exhibiendo en esos momen- escena gore, donde en vez de la película
tos muestra a la pareja con hijos. En el son los intestinos del coleccionista lo
cine de Keaton, las máquinas siempre que se proyecta. El carácter físico del
terminan ayudando al personaje. Es celuloide se vuelve aquí visceral.
el caso del proyector, que ofrece una Muchas de estas películas son ver-
suerte de educación sentimental. daderas elegías a un soporte que hoy
Por un lado, hay algo inevitablemen- La vida útil (Federico Veiroj) en día está cada vez más en desuso
te maravilloso en estos filmes, que debido a la proliferación del DCP. En
tiene que ver con el hecho de poner trar un título de culto, ‘La Fin absolue Malditos bastardos, si la proyección
en imágenes el mismo lugar donde el du monde’, que según dicen solo se hubiera sido digital, y no de celuloide,
espectador está sentado (las butacas, vio una vez en el Festival de Sitges. Hitler no habría muerto abrasado por
las plateas, la pantalla). Por otro, estas Carpenter convierte las pesquisas de las llamas de la tonelada de películas
secuencias revelan algo concreto, rela- este rastreador de películas perdidas de nitrato que Shosanna Dreyfus tenía
cionado con lo material, con los apa- en una investigación detectivesca, en su sala.
ratos, con los espacios y con los es-
fuerzos. Lo sentimental se mezcla tam-
bién con lo físico en La vida útil (2010),
de Federico Veiroj, que trata del afán
del encargado de una cinemateca.
Encerrado en los espacios ocultos del
cine, él lo hace todo, incluso grabar las
notas promocionales.
En El club de la lucha Tyler comen-
ta que las marcas que avisan del cam-
bio de rollo se conocen en la industria
como ‘quemaduras de cigarrillo’. Ciga-
rette Burns (2005) es precisamente el
nombre del capítulo que John Car-
penter dirigió para la serie Masters of
Horror. En él, un proyeccionista y pro-
gramador recibe el encargo de encon- El moderno Sherlock Holmes (Buster Keaton)
Richard Linklater
JUANMA RUIZ
RITOS DE PASO
vanguardia Objetif 49, que acabó pre- sus compañeros cahieristas convo-
sidiendo Jean Cocteau. caban sin cesar las imágenes que les
Y también Louis Skorecki, antiguo habían conmovido a ellos mismos.
colaborador de Cahiers du cinéma en Jean-Luc Godard, en Vivre sa vie
los años sesenta y residente en Estados (1962), nos muestra la emoción incon-
Unidos, realizó en 1988 Les Cinéphiles tenible de Nana en el interior de una
1, 2 y 3, dos largos y un cortometraje sala frente a las imágenes de La pasión
en los que habla del desencanto de la de Juana de Arco (Dreyer, 1927), y en
cinefilia y en los que muestra a los jóve- Le Mépris (1963) nos muestra a Fritz
nes cinéfilos como unos seres de gran Lang, Brigitte Bardot y Michel Piccoli
sobriedad que, después de consumir cuando salen de ver Viaggio in Italia Innisfree (José Luis Guerin)
todo tipo de películas en las salas, solo (Roberto Rossellini, 1954).
saben hablar de cine. A su vez, la experiencia vital de la filia irrumpiera como cultura autóc-
cinefilia y su relación con el desarrollo tona. Vida en sombras (1949), el único
LA MEMORIA Y LOS FETICHES de la Cinémathèque francesa marcó el largometraje que pudo filmar, es una
Más allá de los filmes que hablan de devenir de un cineasta como Bernardo película sobre la vampirización pro-
forma directa de la cinefilia, si analiza- Bertolucci, para quien –según confe- ducida por el cine, pero también es
mos de qué modo el cine vio los dife- sión propia– la mejor escuela de cine un canto de amor hacia la sala como
rentes pasos de la cinefilia durante el del mundo era la Cinémathèque y el espacio de atracción y experien-
paso de la infancia a la edad adulta, nos mejor profesor era Henri Langlois, cia. Su protagonista, Carlos Durán,
encontramos con una generación de su fundador. No era casual, por tanto, nació con el cinematógrafo, tra-
directores cinéfilos que mostraron en que Bertolucci mostrara en la con- bajó de operador, se declaró a su espo-
sus películas su propia experiencia. trovertida Soñadores (2003) cómo la sa después de ver Romeo y Julieta, de
Para algunos cineastas, filmar la experiencia del mayo del 68 tuvo su Georges Cukor, y perdió a su mujer
sala o los rituales asociados a ella era prolegómeno en la manifestación de mientras salió a filmar con la cámara al
un modo de revivir una experiencia. apoyo a Henri Langlois frente a la sala comienzo de la Guerra Civil. El duelo
François Truffaut, en Los 400 golpes de Chaillot, en febrero de 1968, cuando de la pérdida lo lleva a odiar el cine,
(1959), filma el momento en el que Langlois había sido destituido como pero siente una extraña revelación al
Antoine Doinel roba un fotocromo director del templo. observar las luces de la sala Coliseo de
publicitario de Un verano con Mónica Barcelona, que anuncian la proyección
(1953), de Ingmar Bergman. Los foto- LA CINEFILIA ESPAÑOLA de Rebeca, de Hitchcock. La redención
cromos y los carteles publicitarios En España, Llorenç Llobet Gràcia se pasa por volver a Manderley, el paraíso
fueron los auténticos fetiches de los formó en la tradición del cine amateur soñado que solo puede materializarse
cinéfilos coleccionistas, mientras que y empezó a filmar antes de que la cine- a partir de la sala cinematográfica.
ESPLENDOR EN LA PLATEA
E
CARLOS LOSILLA
n la cultura cinéfila, en su hacerlo con el de la butaca de al lado, Cinéphiles 2. Eric a disparu (1989), uno
época dorada e incluso en dicho sea de paso). de esos chicos parece extraviarse entre
los primeros momentos de Seguramente por ello, antes de los propios fotogramas de la película,
decadencia, la sala de cine fue uno caer en eso, Louis Skorecki prefirió como despidiéndose ya no del amor,
de los lugares privilegiados del amor. el exilio. Autor de Contre la nouvelle sino incluso de la vida física, hasta el
Se trataba de crear un ámbito ideal, cinéphilie, practicante convencido de extremo de renunciar a su cuerpo en
parecido al de la pantalla, donde la los mandamientos contenidos en los beneficio de la gran fusión orgiástica
sensualidad de las imágenes a media evangelios cinéfilos, filmó una trilo- con las imágenes. En Les Cinéphiles 3.
luz y la invitación al goce que propi- gía que intentaba dar cuenta del fin Les Ruses de Frédéric (2007), aparece
ciaba la penumbra acabaran creando del cine sin melancolía alguna. En Les por fin la sala, pero no como escenario
algo así como una nueva erótica del Cinéphiles 1. Le Retour de Jean (1989), del contacto íntimo, sino del adoctri-
espectador. Pero había algo más, una nunca vemos a los jóvenes protagonis- namiento, de una repetición de viejos
aspiración de raíz mística, acorde con tas en el interior de una sala. Siempre clichés que ya no conduce a nada.
los resabios espiritualistas de aquella esperando a algún Godot inexistente Skorecki tenía en gran estima Les
cinefilia con vocación clandestina, en las inmediaciones, haciendo cola Sièges de l’Alcazar (1989), de Luc
según la cual el éxtasis que eran capa- o encontrándose y reencontrándose Moullet, otro crítico reconvertido en
ces de provocar las películas debía sin cesar, nunca dejan de hablar más cineasta y uno de los grandes olvida-
necesariamente obtener su reflejo en de cine que de sí mismos, ya no diga- dos en las nóminas habituales de la
el patio de butacas, concebido como mos de amor, y cuando interactúan lo Nouvelle Vague. La película, al con-
el espacio de la iniciación y también hacen en escenas de sexo impávidas y trario que la primera parte de Les
de una eucaristía en la que el alma del asépticas. En los años ochenta, sugiere Cinéphiles, filmada el mismo año,
espectador se fundía con la del auteur Skorecki, ya no hay nada que hacer, transcurre casi enteramente en una
(al tiempo que su cuerpo intentaba toda pasión ha desaparecido. En Les sala, el Alcazar del título, donde
Todd Haynes
CARLOS F. HEREDERO
Mes petites amoureuses (Jean Eustache): el adolescente fascinado ante la Ava Gardner de Pandora y el holandés errante (Albert Lewin)
viceversa. En La piel dura (1976), de No es de extrañar, en este sentido, inspiración. Algo de eso había tam-
François Truffaut, dos chicos y dos que L’Enfant secret (1981), de Philippe bién, aunque expuesto de una manera
chicas acuden también al cine del Garrel, contenga la escena más elu- muy distinta, en Un pequeño romance
pueblo con el fin de otear allí la posi- siva pero también más conmovedora (1979), de George Roy Hill, donde dos
bilidad de un beso robado, e incluso que jamás se haya rodado en una sala adolescentes utilizaban un cine en
de algo más, y se encuentran, sobre de cine. No vemos la pantalla, solo el que se proyectaba El golpe (1976),
todo uno de ellos, con que la cosa no oímos una banda sonora musical que curiosamente también de Roy Hill,
es tan fácil. El otro se abraza a las dos podría pertenecer a alguna película como sala de espera antes de besarse
muchachas y él termina marginado en muda o de animación. Y ahí están los por primera vez bajo un puente vene-
un rincón, con los ojos fijos en la pan- protagonistas, una pareja y su hijo ciano. Sin embargo, ¿acaso no había
talla, tras haber visto en ella escenas pequeño, filmados desde un ángulo ahí ya algo de amaneramiento auto-
de confraternización íntima entre las casi inverosímil, irreal, al hilo de un rreferencial, tanto en la artificiosidad
muchachas francesas y los soldados encuentro familiar que quiere ser el del procedimiento como en la elec-
norteamericanos tras la guerra. De inicio de algo nuevo, de una especie de ción de la película citada?
alguna manera, la decepción y el fra- purificación tras el frenesí anterior, de El cine clásico casi nunca había
caso en materia amorosa se instalaba vuelta a los orígenes (o al ‘nacimiento necesitado la sala de cine para evocar
en el cine al mismo tiempo que un del amor’, en terminología garreliana) el sentimiento amoroso. Se bastaba a
cierto presentimiento acerca de su en la que las imágenes fílmicas más sí mismo para hablar de eso, no tenía
inevitable decadencia. inocentes actúan a modo de espejo e nada que conmemorar porque
FANTASMA (2006)
Los cines en el cine
LA SALA DE CINE X
EL TABÚ Y SU TRANSGRESIÓN
A
FELIPE RODRÍGUEZ TORRES
unque la sala X y
el cine porno acaba-
ron encontrando su
lugar bajo el marco de la legalidad,
siempre ha sido un lugar rodeado de
tabúes y de prejuicios por parte de
una sociedad que ha mirado de soslayo
al género, a sus consumidores y a sus
espacios de exhibición. No es de extra-
ñar, por tanto, que la sala X como loca-
lización haya sido uno de los ámbitos
donde el cine convencional ha posado
su mirada. Un lugar de lo oculto y de
la transgresión, pero también de la
socialización transgresora, donde la
conexión entre las imágenes proyecta-
das y la mirada que las observa desde
la oscuridad ha permitido explorar las
calidoscópicas posibilidades que tal
escenario puede aportar al fondo y a la
Serbis (Brillante Mendoza) forma de lo narrado.
BELTENEBROS (1991)
Los cines en el cine
Pilar Miró
CARLOS F. HEREDERO
LA GRAN APUESTA DE
LAS SALAS ALTERNATIVAS
DESDE HACE AÑOS LAS PEQUEÑAS SALAS DE CINE, DISEMINADAS A LO LARGO DE NUESTRO
PAÍS, CONSTITUYEN UNA IMPRESCINDIBLE Y VALIOSÍSIMA RED DE EXHIBICIÓN A FAVOR DEL
CINE INDEPENDIENTE, DE AUTOR Y EN VERSIÓN ORIGINAL. LA PANDEMIA Y LOS ESTRAGOS
DEL CONFINAMIENTO HAN SUPUESTO PARA ESTAS FRÁGILES Y VULNERABLES ESTRUCTURAS
INDUSTRIALES UNA SITUACIÓN PARTICULARMENTE COMPLEJA. NOS ACERCAMOS A ALGUNAS DE
ELLAS, A TRAVÉS DE SUS RESPONSABLES (DIRECTORES Y/O PROGRAMADORES), PARA ENTENDER
DE QUÉ MANERA ENFRENTAN EL RETO DE REINICIAR LA ACTIVIDAD Y ENFOCAR EL FUTURO.
Miguel Angel Pérez, fundador y director de la dis- El pasado 12 de junio el Cinema Numax (Santiago de
tribuidora independiente Surtsey Films, siempre Compostela) volvió a abrir sus puertas con la proyección de
quiso tener una sala de exhibición: “Como cual- Opening Night, de John Cassavetes, una forma muy apro-
quier amante del cine, esto siempre ha sido un sueño”, piada de dar la bienvenida a los espectadores. “La primera
explica él mismo. Desde el 3 de julio es director de semana fue muy buena, aunque el verano es la época más difí-
los nuevos Cines Embajadores de Madrid, la pri- cil para los cines independientes y de proximidad, por el tipo
mera sala que abre sus puertas en la ciudad después de estrenos con los que trabajamos y nuestro tipo de público
de años en los que los cierres (y su posterior trans- específico. Esperamos que se normalice la asistencia y que
formación en tiendas) han sido masivos. “Mi madre en septiembre podamos recuperar el ritmo de otros años”,
vivía por este barrio que, además, tiene una gran asegura Ramiro Ledo, director y programador de Cinema
actividad cultural: salas de teatro, galerías de arte, Numax, Duplex Cinema (Ferrol) y Numax Distribución.
bares y el gran eje conformado por el Museo Reina Además de la reducción del aforo, que ahora se encuentra
Sofía, La Casa Encendida o el Circo Price”, afirma. en Galicia a un 75%, y de la obligación del uso de mascarilla,
“Pero le faltaba el cine”, añade. Después de casi un geles hidroalcohólicos y desinfectar la sala entre sesiones,
año buscando encontró un local que fue una antigua también se ha hecho hincapié en la distancia. “Se trata de
sucursal de La Caixa, con techos muy altos y pocas volver un poco a un modelo más antiguo: las colas en el exte-
columnas, del que han salido tres salas (una de cien rior, el despacho de billetes con mampara y, eso sí, un lector
butacas y dos de cincuenta). QR externo específico que garantiza que no se realiza contacto
Pero a quince días de abrir, la pandemia cortó de físico en el corte de la entrada”. Y otro cambio importante
raíz todos los planes. Se retoma ahora un proyecto de afecta a la programación: la mayoría de estrenos se han
sala alternativa que busca programar cine de autor reprogramado y están pensando en cómo reconducir los
(sobre todo europeo y español) y en versión original, eventos previstos. “Al no haber Festival de Cannes este año,
con un perfil ecléctico que les permita convertirse por lo menos con el mismo alcance que antes, no creo que vaya
en un lugar de encuentro a través de actividades y a haber tanta saturación como a la que estábamos acostum-
eventos asociados a las proyecciones. “Dedicaremos brados. Muchos títulos saldrán directamente a plataformas
además una muy especial atención al público infantil durante el verano. Creo que el impacto será más acusado a
porque es una demanda concreta que hemos recibido medio plazo, cuando se noten los efectos del parón en la pro-
de la gente de aquí”, explica Pérez. “Nos debemos al ducción de películas en rodaje, pero cualquier especulación en
cinéfilo pero también al barrio”, añade. Tienen ya este sentido es demasiado aventurada”. Ramiro Ledo tiene el
programadas las reposiciones de películas como objetivo de fortalecer la relación de sus cines con los espec-
Dersu Uzala o Cinema Paradiso, además de unas con- tadores, tras meses alejados de las salas. “La popularización
versaciones con Achero Mañas veinte años después del visionado online de películas ha permitido tanto fortale-
del estreno de El Bola. “Abriremos también un club cer la afición por el cine durante el confinamiento, como que
de socios”, añade Pérez. “Y esperemos que el verano pueda valorarse mucho más la experiencia de la proyección en
se nos dé bien porque, aunque las expectativas suelen sala. Cambiarán los hábitos, pero lo principal es que el público
ser malas para estos meses, son momentos extraños y será más exigente con la exhibición y los exhibidores debemos
la pandemia nos ha dejado muchas limitaciones para estar constantemente repensando nuestro trabajo para que
el disfrute del ocio. Creo que el cine se puede convertir cada vez que alguien pague por una entrada al cine le haya
en una muy buena alternativa”, concluye. JARA YÁÑEZ merecido la pena”, concluye Ledo. FERNANDO BERNAL
ZUMZEIG / BARCELONA
“En estos días en los que los cines reabren, desde el ZumZeig pro-
ponemos un espacio para la reflexión y la lentitud”. El barcelonés
cine ZumZeig anunciaba así en redes que posterga su reaper-
tura hasta septiembre. Si atendemos al modelo de gestión de
esta sala, que hace apenas cuatro años pasó a ser una coopera-
tiva, la decisión no resulta extraña. Tampoco sus maneras de
anunciarlo y argumentarlo, apelando a un tempo, podríamos
decir que, contracultural.
“Nos hemos reafirmado sobre qué es el ZumZeig: es un espa-
cio físico, un punto de encuentro”, comenta Anna Brufau, que
forma parte del equipo coordinador. “Nuestro modelo se basa
en la relación entre espectadores y cineastas”, añade. Cuando habla de la sala, lo
hace en términos de participación, y aunque señala que el auge del cine online
seguramente siga dándose, insiste en que deben ser modelos que cuiden eco-
nómicamente a los cineastas. Desde el ZumZeig aprovecharán esta pausa para
rediseñar su imagen, y en ningún caso querían volver con prisas: “Barajamos
diferentes hipótesis”, explica Brufau. “Evidentemente, la de abrir en septiembre
era con la que perdíamos menos dinero, pero la decisión se basó en la progra-
mación: los estrenos que teníamos previstos se han pospuesto hasta otoño”. De
hecho, ZumZeig suele cerrar medio mes de julio y todo el mes de agosto, así que
la decisión resulta todavía más lógica.
La fecha de la reapertura no es la única preocupación que persigue a las salas
de cine; la segunda es la de los aforos. Albert Triviño, otro miembro del equipo
de ZumZeig, señala que la sala es pequeña (tiene 73 butacas) y que “por las carac-
terísticas de nuestro bistrot, si no puede coincidir el público de una sesión y otra,
es todo más difícil”. Triviño y Brufau echan la vista atrás, a cuando se declaró
el estado de alarma y se precipitó el cierre de las salas: “Nadie podía imaginar
que estaríamos tantos meses. Así que íbamos haciendo previsiones: primero, para
abrir en mayo; luego, en junio... Hicimos asesorías económicas. También, un ERTE.
Pero, en general, económicamente estamos bien”, explica Brufau. Y Triviño apos-
tilla: “En algunos aspectos, ser un cine pequeño nos beneficia. Hace cuatro años,
cuando pasamos de S.L. a cooperativa, ZumZeig ya estuvo cuatro meses cerrado.
Ahora tenemos una dinámica de ingresos sólida, que no solo depende de la taquilla.
De hecho, entonces ya comenzamos desde cero; si lo tenemos que volver a hacer, lo
haremos de nuevo”. VIOLETA KOVACSICS
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y también en:
SANTOS ZUNZUNEGUI
CONFIDENCIAS
l diccionario de la Real Academia enun- de llevar a cabo la adaptación, Visconti y sus colabo-
cia como tercera acepción el que se ha radores prescindieron de los dos capítulos finales, el
convertido en el sentido más atribuido VII y el VIII, titulados respectivamente ‘La muerte del
a la palabra ‘secuela’: obra literaria príncipe’ y ‘El fin de todo’, ubicados veinte y cuarenta
o cinematográfica que continúa una años después de la peripecia principal narrada en el
historia ya desarrollada en otra anterior. Aunque no relato literario.
estaría de más atender a las que propone en segundo ¿Existe una secuela cinematográfica de El gatopardo?
y primer lugar. La segunda, porque apunta en su apa- Sí y no. No, si aplicamos criterios estrictos que, por lo
rente dimensión médica (trastorno o lesión que queda mismo, suelen resultar banales. Sí, si nos atenemos
tras una enfermedad o traumatismo) al daño, a veces a la idea de “consecuencia o resulta de algo”. Y creo
irreparable, que determinadas ‘continuaciones’ causan que hay al menos dos razones que pueden aducirse
a las obras que se suponen prolongan como al conjunto para sostener que cuando Visconti rueda, diez años
que la nueva acaba for- después, el film titulado Confidencias
mando con la que le ha (Gruppo di famiglia in un interno, 1974)
precedido. La primera, no podía dejar de ser consciente de
porque, al contrario, abre ellas. La primera tiene que ver con algo
el panorama conceptual que puede parecer insuficiente para
hacia nuevos horizontes poder hablar de ‘secuela’: el deseo de
justamente gracias a la 1
volver a rodar con Burt Lancaster, quien
simplicidad de la pro- había encarnado de for-
puesta: “Consecuencia o resulta de algo”. ma memorable al prín-
Una rápida visita por el universo fíl- cipe Fabrizio di Salina
mico reciente confirma la intuición de en El gatopardo (¿qui-
que la secuela (y esos objetos cinema- zás una de las grandes
tográficos no identificados –OCNI– que interpretaciones mascu-
algunos bárbaros lingüísticos denominan linas de la historia del
2
‘intercuela’, ‘medicuela’, ‘paracuela’...; cine?) [Imagen 1]. Antes
me detengo aquí por prudencia) se ha convertido en de poner sobre la mesa la segunda, quisiera recordar
una mera fórmula cuyo objetivo no suele ser otro que que el protagonista de Confidencias (inspirado, cuen-
ordeñar hasta el infinito cualquier potencial narrativo tan, en el estudioso del arte Mario Praz) carece de
que pueda ocultarse en una obra de éxito. No discutiré nombre propio en el film, será solo El Profesor. Quizás
el caso, que todos tenemos en mente, de alguna secuela esto pueda ayudar a entender la segunda razón que
que amplía de manera creativa los parámetros maneja- Visconti podía tener (poco importa si era consciente
dos por la obra original. Prefiero centrarme en un caso de ello o no) para embarcarse en el film de 1974: dar
que considero ejemplar de esta noción entendida, antes un final definitivo a ese personaje que era una mix-
lo hemos visto, como la primera que pone sobre la mesa tura del Príncipe/Burt Lancaster/Profesor. Como si el
nuestro diccionario oficial. nuevo film permitiera a Visconti, con el fallecimiento
En 1963 Luchino Visconti llevó a la pantalla la adap- en el hospital del Profesor [Imagen 2] cerrar el círculo
tación de la novela homónima de Giuseppe Tomasi di mortuorio que, proveniente de la novela, se desarrolla
Lampedusa, El gatopardo (Il gattopardo) aparecida, sin completarse del todo en El gatopardo con los suce-
de forma póstuma, en el otoño de 1958, para ser reco- sivos rosario, tedeum y viático (en la novela, el Príncipe
nocida de inmediato como una de las obras esencia- lo recibirá en su lecho mortuorio; en la escena final del
les de la literatura italiana del siglo XX. La tinta que film, el príncipe se cruzará en la noche palermitana con
hizo correr el film no fue menor que la que suscitó el un sacerdote que lo porta).
texto literario, ni las diferentes lecturas que se hicieron Ante lo cual lo mejor es cerrar con las palabras que
tanto de la película como de su relación con la novela Giuseppe Tomasi di Lampedusa eligió para abrir su
menos interesantes. Me detendré en un aspecto menor texto y que, sin duda, Visconti nunca olvidó: “Nunc et
pero sugestivo. Todo el mundo conoce que a la hora in hora mortis nostra”. Amén.
Radiografías en femenino
FELIPE RODRÍGUEZ TORRES
E
n su 48ª edición, el Festival Internacional de Cine de Huesca en la intimidad y aparente seguridad
ha sorteado de manera inteligente y efectiva los cambios del hogar, a partir de una técnica y
que la irrupción del COVID-19 han provocado en la industria una puesta en escena que hace uso
cinematográfica –en concreto en la manera de desarrollar y de materiales del pasado a modo de
disfrutar de un festival de cine– a partir de tres ejes vertebradores: collage, donde el discurso desde el
las proyecciones presenciales con limitación de aforo para los presente se fusiona en el plano con
habitantes de la ciudad de Huesca en el Teatro Olimpia; un autocine con capacidad retroproyecciones del pasado. Dos
para doscientos coches y, en tercer lugar, una versión online gratuita que ha dado mundos, el interno y el externo, que se
la posibilidad de visionar los ochenta cortometrajes a competición (iberoamericano, integran para entregar finalmente una
internacional y documental), además de poder disfrutar de actividades paralelas dolorosa y valiente confesión acerca de
vía streaming que, en ocasiones no 'excepcionales', eran un elemento neurálgico la pérdida de la inocencia infantil.
de las pasadas ediciones. Sin olvidar el mérito de haberse convertido en el primer La mujer también es el centro de
festival en Europa que ha reabierto las salas tras el confinamiento. Carne, el cortometraje de animación
Un certamen que ha situado en el centro de su selección oficial la mirada femenina brasileño de Camila Kater que se alzó
y feminista, ya sea desde detrás de las cámaras o entregando el protagonismo de con el premio Danzante Documental
sus relatos y las temáticas de los mismos a los conflictos, dificultades, denuncias y Iberoamericano José Manuel Porquet, y
problemas que han tenido que soportar las mujeres en el pasado y en el presente. del que ya rendimos cuenta en nuestro
Buenos ejemplos de ello los encontraríamos en tres de las piezas que se han alzado informe de los cortometrajes más
con algunos de los galardones más importantes del encuentro. En primer lugar, destacados de 2019 (Caimán CdC, nº
Julieta y la luna, de la directora chilena Milena Castro. Una denuncia de los abusos 90/141) y Alive, del cineasta sueco
R
partir del uso de primeros planos del
rostro de su protagonista, de indagar ecuerdo el insulto como si fuera ayer, aunque han pasado casi cuarenta
en los pensamientos y sentimientos años. Al final de una presentación sobre análisis fílmico (una de las pri-
de la misma, convirtiéndose en meras que hice), un joven del público me lanzó este comentario conde-
radiografías del alma. natorio: “¡Formalismo burgués!”.
También la mujer y su despertar Formalismo burgués… ¿es que estábamos de repente en la Rusia estalinista?
sexual se encuentran en el corto- ¿Volvía a ser un pecado o un crimen examinar los elementos formales y estilísticos
metraje francés Odol Gorri, de la de una película, o de cualquier obra artística?
directora Charlène Favier, merece- Es asombrosa la tozudez con la que el término ‘formalismo’ ha mantenido esa
dor de la Mención Valores Humanos connotación negativa en la historia cultural mundial, incluso en boca de aquellos
Francisco García de Paso. Un tra- que, sin darse cuenta, probablemente utilizan ideas propuestas por la escuela
bajo que, a partir de una puesta en formalista rusa que incluyó a Roman Jakobson, Vladimir Propp y Viktor Shklovsky
escena inquieta y directa que alude entre las décadas de 1910 y 1930.
a los convulsos cambios interiores Desde Leon Trotsky en 1924 a cualquiera que esgrima hoy ese insulto, la polé-
de la infancia a la adolescencia mica antiformalista ha sido siempre la misma. Dice: aquellos que examinan con
de una joven inmigrante de futuro demasiada atención y de forma exclusiva las formas del arte están evitando la
incierto, sabe oscilar sin derrum- realidad, la historia, la política. Son elitistas, sobreespecializados, están alienados.
barse en un frágil equilibrio entre ¡Levantad la vista del texto y mirad al mundo exterior!
las paternidades buscadas y el sín- En particular, los cinéfilos, en todos los países y momentos, a menudo han sido
drome de Lolita, con ecos sobre la menospreciados como formalistas mal desarrollados, obsesionados con el más
ruptura de la tradición que aluden a pequeño detalle fílmico, desconectados de los problemas sociales más acuciantes.
Papicha, la ópera prima de Mounia Recuerden la enérgica respuesta del crítico, cineasta y programador Peter von
Meddour. Igualmente estimable sería Bagh cada vez que le decían que la cinefilia es un formalismo vacío: “¡Las pelícu-
la aportación de Ferrotipos, el corto- las son la vida misma!”. O, como mínimo, ciertamente son una parte integral de la
metraje de la española Nüll García, corriente de la historia moderna.
acerca de la explotación del cuerpo Pero miremos hoy una reacción común al campo de los ‘ensayos audiovisuales’
de la mujer y que recibió el Premio online: un área donde el formalismo del análisis minucioso ha renacido con orgullo y
del Público Aragón Televisión. Un de forma democrática. Recientemente, la académica británica Michele Aaron adver-
alegato acerca del machismo oculto tía duramente contra esta tendencia creciente: “Mientras el poder transformador
bajo las formas del arte elevado de la era digital influye en los estudios fílmicos, yo prefiero que su fuerza nos haga
y reivindicación del cuerpo de la mirar hacia fuera en lugar de volverse hacia dentro”. Como si 'volverse hacia dentro'
mujer, a partir de unas formas claus- (que es lo que todo cineasta hace necesariamente cuando trabaja en sus planos
trofóbicas y quirúrgicas que aluden y cortes) fuera automáticamente un gesto erróneo, incluso malvado en la debida
tanto a las atmósferas de La piel que apreciación del arte.
habito, de Pedro Almodovar, como al Contra esto, Eugenie Brinkema en Estados Unidos llama a lo que describe como
cromatismo expresivo del giallo y del un formalismo aún más intenso y radical:
cine de Peter Strickland. O el Primer “Mi postura especulativa es que el formalismo radical, entender la forma como
Premio Danzante Iberoamericano, Ni prioridad (como lo primero y más importante), permite al lenguaje estético llevar en
oblit ni perdó, del cineasta catalán exclusiva el peso de una seria reflexión sobre ética,
Jordi Boquet, que entrega, desde los historia, política, etc. Para mí, el problema no es que Adrian Martin es un crítico
ojos de la hermana de una víctima las humanidades se distraigan con la estética y pier- y conferenciante freelance
de la violencia fascista, una lúcida dan el verdadero hilo de las preocupaciones serias: residente en Barcelona. Su
último libro es Mysteries of
mirada a las heridas de un presente el problema es que, de hecho, nunca hemos sido lo Cinema (Amsterdam University
provocadas por la oscuridad y el bastante formalistas”. Press), y su página web es:
dolor del pasado. Traducción: Juanma Ruiz www.filmcritic.com.au
L
tan o más capacitadas que ellos para
a pareja creativa formada por Lars Mering y Claudia Boderke se ha dedi- llevar a cabo cualquier cometido, aquí
cado a facturar un sinnúmero de comedias que han gozado del favor del son los aspirantes a enfermeros los que
público danés, si bien permanecen inéditas en nuestro país; ahí están tendrán que desplegar un abanico de
Klassefesten (Niels Norlov Hansen, 2011) y todas sus secuelas y demás cualidades tradicional y equívocamente
derivados, películas que utilizan como pretexto un encuentro entre antiguos alumnos asociadas a lo femenino (delicadeza,
de un instituto para descorchar el champán de la comicidad. Alejada de ese sentido pulcritud, sensibilidad) para desmentir su
del humor estentóreo, pero manteniéndose en lo alto de la escala de los índices de falsa inferioridad. A partir de una historia
popularidad, se sitúa The New Nurses, la teleserie que Sundance TV empezará a emi- extraída de un caso real, los guionistas
tir el próximo 30 de julio a las 22,30 horas a razón de dos capítulos semanales y que Mering y Boderke hacen que los hom-
ha sido un éxito para el canal TV2 Charlie, además de colarse en las nominaciones de bres desempeñen un rol con el que, por
los premios de la academia danesa. norma y por desgracia, siempre han car-
Estamos en 1952. Dinamarca batalla contra las secuelas que ha dejado la Segunda gado sus compañeras: aquí son ellos los
Guerra Mundial. Una de las consecuencias provocadas por el conflicto no es otra que despiertan recelo, son ellos los que
que la escasez de enfermeras. Para salvar ese contratiempo el gobierno del país deben cambiar sus uniformes, ellos son
admite por primera vez que los hombres ingresen en las escuelas de enfermería. El –por defecto– los torpes, los despistados
Fredenslund Hospital será uno de los centros que empezará a desarrollar el nuevo y los inútiles; ellos serán los que deberán
programa. Nos encontramos, pues, ante un period drama cuya pátina clásica lo demostrar con creces que valen para el
acerca más a Downton Abbey (Julian Fellowes, 2010-2015) –solo hay que ver el uso puesto. Por una vez, ellos son ellas.
de la música y de las localizaciones– que a otras ficciones médicas contemporáneas;
aquí estamos lejos del furor erótico-romántico de Anatomía de Grey (Shonda Rhimes,
2005-?), por más que abunden las relaciones amorosas y las infidelidades, de la
vertiginosa casuística multitrama sobre la que flota New Amsterdam (David Schulner,
2018-?) o de personajes definidos por su singularidad como el Shaun Murphy (Freddie Destacados
Highmore) de The Good Doctor (David Shore, 2017-?). En esta teleficción danesa, JULIO-AGOSTO 2020
que fue vista en su país de origen por una media de 480.000 espectadores en su pri- MADE IN ITALY
mera temporada y que ya ha sido renovada hasta la cuarta (Sundance TV emitirá la La serie que propone un viaje al Milán de los 70.
segunda en agosto), todo es más pausado: solo hace falta ver como se aprovecha la Un episodio cada jueves a las 22:30 horas.
primera visita de los estudiantes para describir todos los espacios en los que desarro-
OTRO MUNDO ES POSIBLE
llará la ficción de manera que la audiencia siempre sepa donde está sucediendo cada Los martes de agosto se dedican al cine como
cosa, una secuencia que podría ser mucho más breve y que, sin embargo, funciona a espacio de denuncia y reflexión.
modo de establishing shot.
Lecciones de realidad
CRISTINA APARICIO
F
iel a su cita anual, el Festival de cine alemán de Madrid celebró por un lado, El arte lo dices según te
su 22ª edición de forma online manteniendo la habitual calidad sale decirlo, una reflexión sobre el pro-
de los trabajos seleccionados a pesar de haber visto reducida su ceso de creación como terapia personal
programación. Doce largometrajes divididos en documental y ficción y encuentro, que parte de las obras (y
(dos de estos últimos dedicados al público infantil, otra de las señas no de las discapacidades que tienen
de identidad del certamen) que, junto a trece cortos rescatados del sus autores) para entender sus meca-
ciclo de 2019, ofrecieron una panorámica muy precisa de una cinematografía que, nismos. Por otro lado, Schlingensief,
en esta ocasión, se mostró más preocupada por su presente que por las heridas una voz rompiendo el silencio, un atí-
del pasado. pico biopic sobre el artista y cineasta
Free Country (Christian Alvart), su cinta inaugural, es la que más se aleja, a priori, Christoph Schlingensief, donde Bettina
de esta preocupación: un remake de La isla mínima (Alberto Rodríguez, 2014) Böhler combina imágenes de archivo
que mantiene idéntico tono y conflicto narrativo, e incluso buena parte de su estilo (ya sea filmadas en la infancia por el
visual. Pero a pesar de las similitudes, lo más destacado del film es precisamente propio Schlingnsief o de sus apariciones
la distancia que toma respecto a su antecesor: si aquel mostraba dos Españas públicas en televisión) con fragmentos
coexistiendo (la neonata democracia y los anquilosados restos franquistas) de las películas y actividades perfor-
encarnadas en la pareja protagonista, aquí vuelven a convivir un nuevo régimen mativas del artista. Y por último, Lost in
y los vestigios –y vergüenzas– de un pasado reciente, en una Alemania en pleno Face, el hermoso retrato de Carlota, una
proceso de reunificación. mujer incapaz de reconocer los rostros
Entre los largometrajes de ficción, tres cintas dirigidas por mujeres (un aspecto debido a la prosopagnosia, y dedicada
muy cuidado en la selección de títulos del festival) que ponen el acento en lo a pintar autorretratos. Valentin Riedl
tecnológico como antídoto para la desconexión y aislamiento social. Así, El espacio consigue la difícil proeza de mostrar el
entre las líneas, adaptación de las novelas de Daniel Glauttauer, muestra el mundo que Carlota percibe (y que tiene
romance que dos desconocidos mantienen por Internet. Un incesante intercambio un fuerte componente táctil y emocio-
de correos electrónicos que Vanessa Jopp filma con ingenio (intercambiando el nal) gracias a la combinación de distin-
punto de vista, y transformando la lectura de los emails en una dramatizada voz en tos lenguajes (incluida la animación) y
off de sus personajes), sin caer en clichés del género o soluciones manidas. Una formas visuales geométricas, lineales,
historia donde el amor, a pesar de surgir de las palabras, se cuenta con imágenes. mutables y agresivas con las que repre-
Con un registro cercano al documental, Daphne Charizani dirige En el fuego, una sentar su mirada. Una hermosa película
mirada desprejuiciada sobre el papel de la mujer en el conflicto bélico y la crisis de que refleja el espíritu de un festival pre-
identidad de los migrantes. Con una imponente fuerza visual, un desolador paisaje ocupado por su presente.
se descubre ante los ojos de su protagonista, en un
ejercicio de iluminación que muestra las sombras que
habitan dentro de los hombres. Y destacó también
Nada más perfecto, la sorprendente ópera prima de
Teresa Hoerl, ganadora del Premio del Público, que
aborda el terrible problema del suicidio adolescente.
Hoerl convierte en parte del relato las imágenes que la
joven Maya comparte en una web prosuicida, haciendo
partícipe al espectador, por un lado, de lo pública que
es su intimidad y, por otro, de lo lejos de ella que está
su entorno real. Hay una impactante belleza en la forma
en que el agua aparece a lo largo de todo el relato,
simbólica representación del aislamiento en el que
Maya parece sentirse.
Pero sin duda, es en los filmes documentales donde
se encontraron los trabajos más sugerentes del festival: Free Country (Christian Alvart)
FUNDACIÓN SGAE
El corazón de la cinefilia
CONECTA FICTION
L U
n amigo cinéfilo me contó que está pasando los mejores días de su
a Fundación SGAE vida. Encerrado en su casa por el confinamiento obligatorio (que en
y Conecta FICTION, Argentina amenaza con prolongarse para siempre) dedica sus horas
el primer encuentro a ver más películas que de costumbre, revisa la obra completa de sus
internacional dedicado directores favoritos y descubre joyas de la historia del cine a las que no les podía
exclusivamente a la coproducción dedicar tanto tiempo como cuando tenía que atender su trabajo (mi amigo es de los
de ficción para televisión, han que cobran un sueldo del Estado y su economía personal no corre riesgos).
dado a conocer los seis proyectos Esa felicidad cinéfila tiene mucho de infantil, pero hay que decir a su favor que le
seleccionados para participar permite a sus practicantes ejercer la libertad de un modo radical, aunque paradójico
en la que será la cuarta edición e inesperado. Después de todo, dicen que Cervantes concibió el Quijote tras las
del Pitching de Proyectos de los rejas, y no son pocos los que aprovecharon la prisión para leer e ilustrarse, aun en
Laboratorios Fundación SGAE. tiempos previos a las descargas digitales.
Los seis proyectos seleccionados Pensaba en estas particularidades de la vida cinéfila cuando en el número
son: Demokracia (Pedro García anterior de los Caimán [véase Caimán CdC nº 94 (145), junio de 2020] leí una
Ríos y Rodrigo Martín Antoraz), entrevista de Carlos F. Heredero a Marcos Uzal, el nuevo redactor jefe de Cahiers
Gente guapa (Martín Suárez), du cinéma, el lugar en el que tomó forma definitiva una pasión que tuvo siempre
Herencia (Fernando Cámara), La algo de apostolado y mucho de vicio, como se comprueba en mi amigo, dispuesto
sirena (Joana M. Ortueta), Qué a vitorear las plataformas mientras tenga una pantalla cerca. Una nueva etapa en
bien se te ve para lo jodida que los Cahiers (que no pasaban ciertamente por su mejor momento) a cargo de gente
estás (Juanpe Gálvez) y Umbra inteligente, competente y abierta es una buena noticia, y a todos los que alguna vez
Dei (Matías García). Todos ellos se ejercimos la crítica nos gustaría que la revista volviera a ser una referencia en el
han originado en el VII Laboratorio mundo cinematográfico como se proponen Uzal y su equipo.
de Creación de Series de Ahora bien, ¿cuál es la mayor dificultad con la que hoy se encuentra una revista
Televisión Fundación SGAE que se de cine con esa ambición? A mi juicio, el problema es el que se refleja de algún
desarrollan durante seis meses con modo en la extenuante actividad de mi amigo el cinéfilo: su objeto de interés
el objetivo de promover la creación entró en una fase de expansión comparable al Big Bang. La revolución digital
e impulsar las experiencias trajo DVD, VOD, descargas ilegales y series entre otros formatos de producción
colaborativas y el intercambio y diseminación (a los que Uzal promete prestar atención). Para colmo, el crítico
de ideas entre los creadores ruso Boris Nelepo (a quien Uzal nombra dos veces en la entrevista de Caimán)
contemporáneos. Durante esos impugna con impecables fundamentos el mecanismo por el cual los festivales han
meses los realizadores tiene la concentrado la mirada del universo crítico en un conjunto de películas homogéneas
oportunidad de mantener reuniones y mediocres, omitiendo la programación de otras mucho más valiosas y diversas
de trabajo con distintos cineastas que no se adaptan al patrón uniforme y sin riesgos vigente.
para la puesta en común de Reformulo el problema. Por un lado, hay demasiadas películas; por el otro, las
inquietudes creativas. que valen la pena son prácticamente invisibles fuera del
Ahora, todos ellos tendrán que cerrado universo de cierta cinefilia dura. Los Cahiers
Quintín fue uno de los
presentar sus trabajos (los días clásicos justificaron su importancia histórica de dos fundadores de la revista
2 y 3 de septiembre en la edición maneras: una, eligiendo un núcleo alrededor del cual argentina El amante, que
presencial de Conecta FICTION construir una idea sobre el cine; la otra, acercando dirigió entre 1991 y 2004. Fue
también director del Festival de
prevista en Pamplona), ante ese núcleo a un lector ajeno a la actividad profesional. Cine Independiente de Buenos
profesionales de todo el mundo Como resultado de las decisiones lúcidas de la revista, Aires (Bafici) entre 2001 y
(productoras, canales de televisión la crítica de cine se convirtió en una disciplina atractiva 2004. Actualmente escribe
sobre cine, libros, política y
e inversores). El propósito será y el cine mismo en un objeto de reflexión importante.
deporte en el blog La lectora
alcanzar acuerdos de coproducción Creo que se trata de hacer lo mismo. Solo que ahora provisoria (lalectoraprovisoria.
internacional. Caimán CdC es mucho más difícil. wordpresss.com).
Relatoras
CRISTINA APARICIO
U
na de las creaciones más impor-
tantes de Ursula K. Le Guin fue
Terramar, un mundo ficticio (que
originó toda una serie de novelas)
donde las palabras eran la fuente
de poder y la forma de dominar
todas las cosas. La fantasía soñada (entendida y
creada) por Le Guin no tenía nada de escapista: par-
tía de lugares reales para construir los espacios ima-
ginarios que más tarde poblarían sus personajes, con
el incesante objetivo de comprenderse a uno mismo.
La 28ª edición de la Mostra Internacional de Films
de Dones de Barcelona, que se ha adaptado como
tantos otros eventos al formato virtual, contiene parte
de esa esencia que recoge la película inaugural, Los The Cancer Journals Revisited (Lana Lin)
mundos de Ursula K. Le Guin: "La magia más potente
está compuesta de lo mismo que los libros: de palabras". Así, algunos de los trabajos Algunos de los trabajos más suge-
más destacados del certamen tienen este componente testimonial que da fuerza a la rentes se encontraron dentro de la
voz de las mujeres, un reconocimiento que otorga la palabra escrita. Entre ellos des- sección de cortometrajes. Este es el
tacó la cinta de Pelin Esmer Queen Lear, el viaje emprendido por una compañía teatral caso de Hitting My Head on the World,
de campesinas que representan el clásico de Shakespeare por lugares recónditos de el experimento sonoro de Anna Vasof,
Turquía. El texto repetido durante los ensayos pasa a un segundo plano mientras la una melodía urbana creada al golpear su
cámara registra los paisajes de ensueño y los encuentros con las comunidades que cabeza por diferentes espacios y lugares
visitan. Por otro lado, The Cancer Journals Revisited, de Lana Lin, también tiene como (postes, puertas, peceras...) de distintas
eje central un texto, Los diarios del cáncer, de Audre Lorde. La proeza del documental ciudades. Una sarcástica y acertada
radica en la traslación a la pantalla de la difícil tarea que Lorde lleva a cabo en su libro panorámica social conseguida gracias al
(hacer tangible el dolor y romper el silencio que rodea la enfermedad), al crear una hábil montaje, la precisa elección de los
coral de mujeres que recitan ante la cámara fragmentos de las memorias mientras espacios y una cantidad indiscutible de
la imagen se transforma en un testimonio táctil del sufrimiento. Los cuentos de Las ingenio. Por su parte, Agustina Comedi
mil y una noches son el hilo conductor de In the Name of Scheherazade or the First también se sirve de la manipulación for-
Beergarden in Tehran, un híbrido entre ficción y documental donde Narges Kalhor iro- mal (en este caso de las imágenes) para
niza con la situación de los migrantes a partir de una puesta en escena heterogénea, la reescritura de historias en Playback.
desinhibida y ambiciosa. Ensayo de una despedida. A partir de
En un sentido similar, The Archivettes reconoce esta importancia casi inherente de los vídeos caseros del Grupo Kalas (drag
lo escrito para la pervivencia de la historia. Una incursión en los mayores archivos queens de la escena trans en Argentina
mundiales de cultura lésbica que da cuenta de la importancia de un espacio de reco- de los años ochenta), la cineasta desvela
nocimiento y afirmación en la construcción de la cultura. Una edificación que no se la historia que hay tras las imágenes con
limita a la escritura, como se aprecia también en los trabajos de Andrea Testa (Niña el objetivo de inventar finales felices y
mamá) y Ronja Hemm (For Your Sake), dos relatos donde la oralidad es la forma de construir fantasías revolucionarias.
encarar la realidad y sus distintas vivencias, ya sea por la disonancias intergeneracio- Al igual que las novelas de Le Guin,
nales en la cinta de Hemm o por la crudeza de unos testimonios descarnados, caren- donde la ciencia ficción facilitaba la com-
tes de elaboración, en la cinta de Testa. prensión de un mundo plural y libre, la
La retrospectiva de este año estuvo dedicada a Marta Rodríguez, un referente del Mostra de Dones posibilita un cambio de
documental antropológico, con la proyección de cinco de sus documentales. Una perspectiva, una nueva forma de mirar la
cineasta centrada en la lucha de la clase trabajadora de Colombia (y que aborda la realidad demostrando que otras formas
precariedad laboral de las mujeres) que hace del documental un acto revolucionario. de hacer y de ser son posibles.
L
ola Millás, activa promotora cultural, cofundadora de festivales interna-
cionales de cine como el de Comedia de Peñíscola, además de crea-
dora y coordinadora del Área Audiovisual de la Casa de América en
Madrid, puso en marcha en 1979 el ambicioso proyecto de una filmo-
teca para la Agencia Española de Cooperación Internacional para el
Desarrollo (AECID). Asociada a esta filmoteca surgieron además una
fonoteca, una biblioteca, una videoteca y la sala de proyecciones 'Cine Iberia', que
hoy forman parte de un importante legado que Millás dejó al centro en 2008, cuando
abandonó la dirección de la Filmoteca, y que hoy toma su nombre en homenaje a ella En el centro, Lola Millás, fundadora y
directora de la Filmoteca AECID hasta 2008
después de su fallecimiento el año pasado.
Adscrita al Departamento de Cooperación y Promoción Cultural, esta fil-
moteca nace con la idea de dar a conocer el cine español y utilizarlo como
vehículo para el acercamiento de nuestra cultura a otros países a través del
apoyo y la colaboración con las embajadas, los centros culturales y los dis-
tintos centros de formación que programan cine desde el exterior y con los
que se proponen, se coordinan y se favorecen ciclos y muestras de cine
español. Para ello la filmoteca cuenta con un fondo estable de unos 200
títulos de largometrajes de ficción y documentales, además de cerca de
110 cortometrajes. Cada año, sin embargo, este fondo se amplía y renueva
en base a una reunión en la que se cuenta con representantes de las insti-
tuciones cinematografiadas públicas (ICAA, Instituto Cervantes, Academia
de Cine) así como del sector privado, incorporando a revistas especializa-
das, críticos de cine y referentes del sector. La sede de la AECID
"Nuestras propuestas de acuerdos y programaciones están siempre
muy vinculados al compromiso social que la propia AECID mantiene en todas sus Por otra parte, el compromiso de la
acciones", explica Elvira Cámara López, Jefa del Área de Actividades Culturales del filmoteca AECID con Iberoamérica,
Departamento de Cooperación y Promoción Cultural. Muestras y ciclos que se rela- tratando de impulsar aquella industria
cionan con los objetivos que marca el plan director de AECID, a través de asuntos audiovisual y de dinamizar la produc-
como los derechos humanos, género, infancia, temática LGTBI, cine africano, cine en ción de nuevos proyectos, se materia-
otras lenguas o problemática de afrodescendientes, que vertebran una programación liza además en la financiación de dos
elaborada en colaboración también con otras instituciones o festivales."En este sen- premios. El primero de ellos es el de
tido, por ejemplo, la colaboración con el Festival de Cine de Derechos Humanos de mejor película iberoamericana de los
Barcelona nos proporciona cada año una variedad de títulos que después nosotros Premios Goya. El segundo es el Premio
ponemos a disposición, gratuitamente, de las embajadas y de los demás centros de de Cooperación a la película iberoameri-
España en el exterior", añade Cámara López. cana que contribuya mejor al desarrollo
La relación con el Instituto Cervantes es particularmente estrecha y productiva ya humano, la erradicación de la pobreza
que, además de formar parte del Comité de selección, se sirve del catálogo AECID y el pleno ejercicio de los Derechos
para su programación cultural. En contrapartida el Instituto provee del subtitulado de Humanos, del Festival de San Sebastián.
las películas para que puedan llegar a todos los lugares donde está implantada esta Un compromiso con la cinematografía
institución. Ahora, con los retos que ha planteado la pandemia, se ha establecido un iberoamericana que propició asimismo la
acuerdo más allá: "El Cervantes ha puesto a nuestra disposición su canal de Vimeo organización de un ciclo que incluyó las
para que nosotros pudiéramos seguir organizando durante el confinamiento varias películas ganadoras de las últimas cinco
muestras online con nuestros fondos", añade Cámara López. Entre ellos un ciclo divi- ediciones del Festival de San Sebastián
dido en tres partes dedicadas a los 'clásicos' que propuso en mayo las sesiones de y que se proyectó en Casa de América
'Clásicos en blanco y negro', que ha programado para julio 'Clásicos en color' y que con motivo de la Semana de la Red de
en septiembre llevará a las salas 'Clásicos contemporáneos'. Centros Culturales.
CARLOS LOSILLA
La banalidad de la vida
¿Dónde estás, Bernadette?, de Richard Linklater
C
onfieso que las películas de de un a priori que acaba limitándolas, medio de una hojarasca retórica a veces
Richard Linklater que más aunque solo sea un poco, e impidien- demasiado evidente. Eso ocurre en los
me fascinan a día de hoy do que asome algo parecido a la liber- mejores momentos de Una pandilla de
son aquellas que huyen de tad más o menos absoluta. En cambio, pelotas, en la totalidad de dos películas
cualquier tipo de voluntad cuando Linklater no se siente tan obli- tan distintas, pero también tan suicidas
explícitamente autoral. En Boyhood, en gado a pagar este tributo, cuando par- y emocionantes, como Me and Orson
la trilogía que empieza con Antes del te de un material no tan llamativo, o in- Welles y Bernie, en las escenas más ínti-
amanecer, incluso en Todos queremos cluso cuando se embarca en proyectos mas y sinceras de La última bandera… Y
algo vista como continuación de Dazed que vistos desde afuera podrían parecer se adueña de ¿Dónde estás, Bernadette?
and confused, me parece atisbar, en oca- ‘menores’, quizá el resultado no sea tan hasta convertirla en uno de sus trabajos
siones, una leve sombra de impostación. brillante, pero a mí me deja entrever con más personales, aunque se trate de la
Por mucho que me gusten, y me gustan mayor nitidez al cineasta que ha brega- adaptación de un texto ajeno, la nove-
mucho, es como si todas ellas partieran do con esas imágenes, aunque sea en la de Maria Semple, y sea la primera
ÀNGEL QUINTANA
E
n 2013, Scarlett Johansson allá de los cofines naturales. Lo único suntamente ha tenido un accidente. En
se convirtió en voz. En Her, que sabemos es que su cuerpo es el epi- el proceso de transformación aparece la
de Spike Jonze, abandona- centro de la película y que esta es algo figura de una especie de misterioso vi-
ba su corporalidad y pasaba más que una exploración cartográfica de gilante, encarnado por un extraño mo-
a ser una voz que alimenta- sus aptitudes. torista, que aparecerá en determinados
ba un mecanismo virtual que servía de En la vieja tradición del cine moder- momentos de la película para certificar
guía, confidente y amante a un hombre no, muchas veces una actriz convertida su poder. No sabemos si este persona-
perdido en un mundo alienado y glacial. en mito se enfrenta a un entorno que es je es el ángel exterminador que utiliza a
En Under the Skin, de Jonathan Gla- adverso. El contraste con el mundo con- una mujer alienígena o, simplemente, es
zer, Scarlett Johansson deja de ser una tradice la naturaleza del cine como refu- un auténtica figura frankensteniana que
voz para transformarse en un cuerpo ca- gio de nuevas falsas diosas de un cierto después de desafiar a los dioses vigila la
si sin palabra. Lleva una peluca morena, Olimpo. Ingrid Bergman fue en Strom- pervivencia de su criatura.
tiene los labios pintados de rojo, condu- boli, de Roberto Rossellini, una extraña. La ‘mujer de ninguna parte’ entra
ce una furgoneta y sus únicas palabras Se instaló en un paisaje extremo para constantemente en contacto con una
son para pedir a una serie de persona- crear una tensión entre su condición de serie de hombres, generalmente no ac-
jes si la pueden guiar en su camino. Ella extranjería y la crudeza del mundo real. tores, a los que seduce y ofrece la opor-
empieza conduciendo por las calles de Scarlett Johansson es una extraña inhu- tunidad de descubrir su enigmática se-
Glasgow para acabar perdida en un in- mana que se pasea por un mundo teóri- xualidad. La actriz (Scarlett Johansson)
cierto lugar de las Highlands. Si en Her camente humano, pero en el que domi- entra en relación con seres del mundo
la voz de la actriz se acoplaba a un dis- na la inhumanidad. real, con personajes anónimos que pa-
positivo virtual, en Under the Skin su En el prólogo de Under the Skin asis- sean por los barrios periféricos de Glas-
cuerpo no es humano. Es extraño pero timos a un extraño proceso de encarna- gow y que inicialmente han sido filma-
seductor, es una mantis religiosa y una ción. Un cuerpo robótico o una supues- dos por una cámara escondida, sin que
vampiresa. No sabemos si busca algo o si ta alienígena se transforma en carne. La formen parte de la ficción. Algunos en-
simplemente inicia una nueva vida más mujer usurpa el cuerpo de otra que pre- tran en la furgoneta de la protagonis-
Extraño vínculo
The Father, de Kristina Grozeva y Petar Valchanov
CUADERNO CRÍTICO
U
llega tarde al entierro?, ¿por qué pare- cilla, pero de gran solidez, los símbolos
ce un invitado el protagonista de la pe- son trasladados a la pantalla con plena
na de las certezas más lícula? Esta ambigüedad en torno a la funcionalidad. A través de un teléfono
aceptadas dentro de la imagen ha estado presente en las dos móvil que porta mensajes del más allá,
psicoterapia apunta que anteriores películas de Grozeva y Val- lo que se inicia como una versión pater-
los apegos ambivalentes chanov. Si en La lección (2014) era una nofilial de la fraternal Personal Shopper
son los más resistentes. profesora la que descubría sus propias (Olivier Assayas, 2016) concluye recor-
Tampoco caben muchas dudas de que contradicciones morales, y en Un mi- dando a Nebraska (Alexander Payne,
el entorno familiar es uno de los con- nuto de gloria (2016) se desnudaba la 2013) en el este de Europa.
textos donde más se proyecta esta arit- hipocresía política, en The Father el Se percibe un gran control en las
mética emocional. Kristina Grozeva y choque generacional entre Pavel y Vasil transiciones entre tonos dentro de
Petar Valchanov consiguen plasmar en remite a las herencias que la sociedad una misma escena. Sirvan como ejem-
la primera escena de The Father toda la búlgara ha ido asimilando, no siempre plo dos situaciones: el padre sacando
ambigüedad y complejidad que subya- de manera armónica. Las primeras in- fotos compulsivamente al cuerpo de
cen al axioma anteriormente expues- su mujer en el inicio, o la hilarante y
to. La primera imagen captura varios gráfica secuencia de Pavel subiendo a
cuerpos desenfocados, mientras se es- un carro que ha robado Vasil, mientras
cuchan unas oraciones de una liturgia
The Father escapan hacia un destino incierto. Otro
Bashtata. Bulgaria, Grecia, 2019
ortodoxa durante un funeral. Desde el Dirección: Kristina Grozeva, Petar Valchanov de los hallazgos de la cinta es la radio-
fondo, Pavel se va aproximando hacia Intérpretes: Ivan Barnev, Ivan Savov, grafía de la Bulgaria actual con el bis-
el primer plano donde se encuentra Tanya Shahova turí de lo anecdótico: la escena de la
con Vasil, su padre. Mientras su movi- Distribución: Elamedia comisaría remite a la perezosa buro-
miento provoca que las figuras vayan Estreno: 21 de agosto cracia, las sectas que proliferan hablan
de un país que abraza lo paranormal, el
teléfono móvil convertido en vehículo
de la mentira (tema recurrente en su
filmografía), o un programa de televi-
sión que hace emerger los fantasmas
(comunistas) del pasado. En esas dos
generaciones condenadas a entender-
se, aceptarse y sobre todo a escuchar-
se, la dupla de directores compone su
obra más conciliadora y luminosa. En
la modélica escena final, en la que to-
das las piezas anteriormente disemi-
nadas encajan, The Father resuelve la
valía de su vínculo, no tanto el de sus
protagonistas, si no el que el especta-
dor paladea (aquí con sabor a merme-
lada) con unos realizadores cuyo cine
siempre cae de pie.
CUADERNO CRÍTICO
M
ás que un autor, Will
Ferrell es un subgé-
nero en sí mismo. No
tiene sentido hablar
de películas con Will
Ferrell. A todas luces se trata de pelícu-
las de Will Ferrell, por más que nunca
se haya puesto detrás de la cámara co-
mo director, aunque sí como productor,
y muchas de sus mejores películas lle-
ven su firma en el guion. Sin duda, Fe- nado con participar –y ganar– en Euro- Tap (Rob Reiner, 1984) que Eurovisión,
rrell es el gran cómico del siglo XXI, el visión desde que viera a ABBA vencer por más que las actuaciones de Fire Sa-
mejor actor de las dos últimas décadas, con su Waterloo en el cuerpo de otro ga parezcan inspiradas en algunos de
capaz por sí solo de definir un estilo de actor que no sea Ferrell, ataviado unas los desastres escénicos del grupo de la
comedia que, partiendo de la parodia, veces de vikingo, otras de pescador, con película de Christopher Guest. Lo de-
le da la vuelta hasta el punto de que nos una melena que parece estar a medio muestran las propias canciones ori-
acabamos tomando en serio sus histo- camino entre la de un James Benning ginales, puros pastiches, sí, pero unas
rias (que, como todas las parodias, no y la del Hansel que interpretaba Owen canciones que, caso de las dos de Fire
son más que una acumulación de tópi- Wilson en Zoolander (2001, la propia Saga, Double Trouble o Husavik, po-
cos) y, sobre todo, a sus personajes, en ‘nota Speorg’ cumple aquí la misma drían triunfar holgadamente en cual-
cuya manifiesta idiotez no tardamos en función de la ‘mirada Magnun’ de De- quier concurso tipo OT; Ja Ja Ding
reconocernos. Las parodias de Ferrell rek Zoolander, dicho sea de paso). Ine- Dong es digna de Georgie Dann.
no buscan que nos sintamos superiores vitablemente, la película de David Dob- En una de sus anteriores colabora-
a sus personajes, sino que los reconoz- kin es un monumento al kitsch y, por ciones con Dobkin, De boda en boda
camos como iguales, sin rastro alguno eso mismo, un homenaje al festival eu- (2005), Will Ferrell interpretaba a un
de cinismo. Pasado de vueltas (Adam ropeo de la canción por antonomasia desencantado ligón que ya no tenía
McKay, 2006) es a priori una parodia que, con los cameos de algunas de sus energías para seducir a las damas de
de NASCAR, pero acaba constituyendo últimas figuras, se muestra inasequible honor en las bodas y que había acaba-
una de las mejores películas de carreras ante cualquier intento de ridiculiza- do decantándose por los entierros y
automovilísticas. No hay nada más se- ción. Nada más lejos de This is Spinal las viudas. Falsa premonición: Ferrell,
rio que una parodia de Ferrell. que parecía mucho mayor a los trein-
Festival de la Canción de Eurovisión: Festival de la Canción de ta (cuando Movida en el Roxbury, 1998),
la historia de Fire Saga puede ser uno tampoco parece haber envejecido aho-
de los proyectos más absurdos e impo-
Eurovisión... ra. Veinte años después, con su edad in-
Eurovision Song Contest: The Story Of Fire
sibles en los que se haya visto involu- Saga. EE UU, 2020 definible, todavía es capaz de interpre-
crado Ferrell. Al mismo tiempo es in- Dirección: David Dobkin tar a los mismos personajes aniñados e
concebible sin su participación: cómo Intérpretes: Will Ferrell, Rachel ingenuos encerrados en un corpachón
si no hacer creíble la historia de un ni- McAdams, Pierce Brosnan de uno noventa. Con la misma impasi-
ño islandés de cincuenta años obsesio- Disponible en Netflix ble comicidad y con la misma ternura.
A
salamandra de Alain Tanner, La Chi- los protagonistas con la militancia.
noise de Jean-Luc Godard, Comrades Así, Périot por un lado resalta el
partir del trabajo con el de Marin Karmitz y Avec le sang des (presunto) contraste entre la politiza-
material de archivo re- autres del Grupo Medvedkine de So- ción de los jóvenes de esa época fren-
lacionado con la RAF, chaux. El visionado de estos remakes te a los actuales. Y por el otro dejaría
en Una juventud alema- se complementa con entrevistas con clara su intención didáctica: su trabajo
na (2015) Jean-Gabriel los chicos y chicas que los han elabo- tendría que ver con iluminar y formar
Périot llevaba a cabo el retrato de una rado, que responden a cuestiones cla- a estos estudiantes en la lucha política
generación de jóvenes a través de su ve de la lucha política, como para qué a partir de esta reconstrucción de frag-
militancia política radical. En Nues- sirve un sindicato, qué es la revolución, mentos de los referentes fílmicos de la
tras derrotas busca un objetivo simi- la utilidad de una huelga o incluso qué época. Hasta aquí, Nuestras derrotas
lar, esbozar un perfil colectivo de los entienden por felicidad. Las drama- deja un sabor extraño que tiene que
jóvenes franceses actuales desde su tizaciones están filmadas en texturas ver con el lugar en el que se sitúa el di-
vinculación con la política, pero lo de- que evidencian su naturaleza cons- rector respecto a los jóvenes a los que
sarrolla a partir de una estrategia dife- quiere retratar y la perspectiva unila-
rente. En este caso, prescinde del found teral de la conversación. En este senti-
footage y explora diferentes niveles do, la película se situaría lejos de pro-
de dialéctica.
Nuestras derrotas puestas similares como Últimas Con-
Nos défaites. Francia, 2019
Nuestras derrotas surge de un en- Dirección: Jean-Gabriel Périot versas, de Eduardo Coutinho, donde
cargo del instituto Romain Rolland en Intérpretes: Swann Agha, los adolescentes expresan sus propias
Yvry-sur-Seine, donde Claire Simon ya Ghaïs Bertout-Ourabah, Jackson Ellis inquietudes en lugar de, como parece
rodó Primeras soledades. En la primera Distribución: Numax aquí, responder a un interrogatorio o a
parte de la película vemos lo que sería Estreno: 24 de julio un examen oral.
Pero el segundo bloque del film aña-
de una nueva capa dialéctica que re-
define el primero. Un suceso concreto
que sí apela a los protagonistas propi-
cia una nueva reinterpretación y su
movilización combativa. Périot ahora
los filma de forma diferente. Los encua-
dra de pie y en un exterior invernal (no
en un interior sentados en un aula),
y sus cuerpos un tanto temblorosos
subrayan la rabia que manifiestan fren-
te a la rigidez un tanto incómoda que
se les notaba antes. Nuestras derrotas
finalmente triunfa porque, aunque sea
de forma involuntaria, también acaba
hablando del fracaso de acercarse a los
jóvenes exclusivamente desde los su-
puestos de una generación anterior.
CUADERNO CRÍTICO
El cineasta francés Jean-Gabriel Périot ron una serie de energías que finalmente
es conocido sobre todo por su trabajo estallaron. Por otra parte, no me interesa
con el material de archivo en películas hacer cine político o militante tal como
que reflexionan sobre el papel de la se entiende habitualmente. Intento ser
© ENVIE DE TEMPÊTE
violencia en la historia del siglo XX y la modesto y para mí lo más militante es
construcción de discursos hegemónicos compartir situaciones e ideas. Nuestras
al respecto, como Eût-elle été criminelle derrotas me ha permitido hacer presen-
(2006), Nijuman no borei (2007) o Une taciones en escuelas, que no tienen el
jeunesse allemande (2015), aunque mismo ambiente que los festivales. El me gusta internarme en los elementos
también ha firmado largos de ficción objetivo es encender el debate político. documentales de la historia, en lo que
como Lumières de été. Como habitual me aportan los actores, etc. La única
del circuito de festivales, L’Alternativa de ¿Cómo se planteó la puesta en escena diferencia podría ser que el documental
Barcelona le dedicó una retrospectiva y el montaje? La puesta en escena, expresa cuestiones directas y la ficción
el pasado mes de noviembre. Ahora se más que plantearla, apareció poco a parte de los pensamientos del cineasta,
estrena su nuevo film, Nuestras derrotas, poco. Dependía mucho de la palabra, y persigue fundamentalmente que se oiga
que fue presentado en el pasado Festival también de las ideas que se intentaban su voz, mientras que en el documental
de San Sebastián y que traza vínculos y expresar en palabras. La película, en esa voz aparece mezclada con otras.
al mismo tiempo se distancia desde la el fondo, no consiste en otra cosa que
no ficción de su práctica habitual con el en una serie de personas que nos ¿Le interesa la relación entre los
found footage. cuentan sus experiencias. Hicimos jóvenes y la política? Ya la trató, por
las entrevistas con inusitada rapidez, ejemplo, en Une jeunesse allemande…
¿Cómo surgió este proyecto? Es una dejando muchas cosas en manos del Me interesan mucho los modos de
película diferente, que procede de una azar. Y montamos atendiendo también politización de la juventud, y cómo
invitación que acepté sin dudar, pues a la palabra. En muchas ocasiones me eso tiene que ver con los ambientes
se trataba de actuar como realizador quedaba perturbado por las respuestas, culturales de los que proceden, si
pero también, casi, como profesor, y de pero también me interesaban mucho los eso puede llevarles o no más hacia
acabar haciendo el film que los alumnos silencios, los ritmos, el tiempo entre una opciones de izquierda o… Con Nuestras
quisieran. Y debíamos ser conscientes cosa y otra. Hicimos un primer montaje derrotas intenté continuar un poco el
de que la película resultante tenía que y se lo mostramos a los estudiantes. Y camino de Une jeunesse allemande,
ser algo inesperado, que nos cogiera a a tenor de sus impresiones, cambiamos aunque finalmente me he decantado
todos por sorpresa. algunas cosas, poco a poco, primero por reflejar lo más elemental: los gestos,
porque lo último que quería es que se las risas, el movimiento, los cuerpos…
¿Es un film sobre la posibilidad del com- sintieran incómodos con el resultado en esos jóvenes que están en pleno
promiso político en los tiempos actua- y, después, porque algunos de los proceso de cambio. El título viene de
les? Bueno, eso apareció finalmente primeros intentos quedaron demasiado todo eso: las derrotas son las nuestras,
casi por azar, en la última parte del film. deprimentes. las de los adultos. Somos responsables
Se trataba de aprender la diferencia de todo esto porque no hemos sabido
entre discurso y acción, y ahí surgió un ¿Qué diferencias ve entre relato y aprender demasiado de ello. En cambio
problema. A mí me interesa la Historia en registro de lo real? No me gusta los jóvenes, curiosamente gracias a sus
general, pero lo que para mí eran imá- diferenciar entre documental y ficción. contradicciones, puede que consigan
genes contemporáneas, para los chicos No acaba siendo lo mismo, claro, el resurgimiento de algo que de verdad
era historia antigua. Y en ese intercambio pero cuando hago un ‘documental’ tenga que ver con la política.
mutuo llegamos poco a poco a un cierto también hay un trabajo formal, también
enfoque de lo que puede considerarse hay protagonistas, también hay Declaraciones recogidas en el Festival de San
‘cine militante’. En el proceso, acumula- ensayos… Y cuando hago ‘ficción’, Sebastián, el 21 de septiembre de 2019.
jor símbolo con el que acompañar el tical capaz de generar una especie de
vaivén de los cuerpos, la desnudez de intimidad salvaje, una suerte de identi-
las emociones y ese desesperado deseo ficación desesperada con el personaje,
de sobrevivir como si hacer un cine de porque obliga a quien observa a sentir
denuncia, aún hoy, fuese un acto fur- que camina junto a él y que es el único
tivo, un gesto prohibido y clandestino testigo de su epopeya cotidiana.
que debe ejecutarse con prisas antes de Y es importante que todo en Ayka es-
A
que alguien advierta que son miserias té filmado de la misma manera: los su-
humanas lo que se ha venido a filmar. frimientos y anhelos se expresan todos
yka es una inmigrante También es el gesto de la ausencia de por medio de la imagen. La palabra aquí
ilegal a la que persiguen futuro, en él no puede haber movimien- no vale nada, casi lo mismo que las per-
las deudas. Acaba de te- tos excelsos ni líneas rectas porque se sonas. De algún modo, este periplo mo-
ner un hijo y ya no hay anda pero no se sabe muy bien hacia numental de Ayka supone un paseo por
miedo, no hay pruden- dónde. Y es, a su vez, un plano que el museo de todos los males del país, en
cia, solo hay un inagotable sentido de siempre parte de un rostro o desembo- el que tener un niño no está al alcance
la supervivencia que la empuja a atra- ca en él, porque es el gesto cinemato- de cualquiera y los derechos humanos
vesar Moscú para poder seguir ade- gráfico que desvela, con fulgurante in- son pisoteados. Casi se diría que es El
lante. Sergey Dvortsevoy, una década mediatez, lo que de vulnerable hay en arca rusa (Aleksandr Sokúrov, 2002)
después de haber concebido Tulpan las acciones solitarias de los personajes que pasea por las cloacas del sistema
(2008), ha abandonado aquellos aires ante el mundo. Es una decisión grama- en lugar de pasear por un lustroso pa-
de comedia para retratar una situación trimonio que debería celebrarse. Solo
de injusticia social en toda su crudeza, que aquí no hay pirueta tecnológica ni
saliendo de Kazajistán y filmando en fuegos artificiales, sino una pura carre-
la capital rusa.
Ayka ra contrarreloj por conseguir dinero.
Rusia, Alemania, Polonia, Kazajistán,
Como ocurrió en el cine europeo de China, 2018 No es una cuestión gratuita, porque
corte social en los años noventa, y co- Dirección: Sergey Dvortsevoy a pesar de sus diferencias formales, sí
mo antes que él en las películas más Intérprete: Samal Yeslyamova que se percibe en Ayka un desafío esté-
atrevidas de los setenta, se diría que la Distribución: Paco Poch tico que tiene mucho que ver con per-
cámara al hombro sigue siendo el me- Estreno: 10 de julio en Filmin seguir el itinerario infinito. Largos pla-
nos que registran cada paso, en un in-
tento por revelar la verdad del mundo.
Y el poderoso virtuosismo de la coreo-
grafía que tiene lugar ante la cámara a
veces juega en contra de esa búsqueda
de la naturalidad: se acaba por imponer
una ley de la teatralidad que hace que
todo se aleje de ese encuentro con lo
verdadero. Son efectivamente los ani-
males de la clínica veterinaria, o un be-
bé con su comportamiento igualmente
imprevisible, los que tienen la culpa de
ese atisbo de verdad tras la cámara. Pe-
ro esa duración y esa crudeza cristali-
zan en otra más de las estrategias de la
película: poner a prueba la resistencia
del que observa parece la única mane-
ra que queda de agitar conciencias.
La memoria y el legado
Zombi Child, de Bertrand Bonello
CUADERNO CRÍTICO
y Bonello retrata así a las élites de una sidad que cobra el paisaje. El bosque
Francia actual en la que retumban los que habita el zombi se muestra cons-
fantasmas del pasado colonialista. tantemente apagado, gris, hasta que
Bonello plantea tránsitos constan- de repente las hojas lucen un verde
tes, entre tiempos y estados de áni- brillante y en el cielo luce el sol. Si la
mo diversos. El hombre haitiano que imagen era opaca, de pronto es radian-
se levanta de su tumba queda atrapa- te. Entre esta luminosidad repentina,
do entre la conciencia y la duermeve- vemos el plano de una mujer que mi-
L
la, en un estado que no dista tanto del ra a cámara. Se trata de una evocación,
trance de los personajes de De la gue- pues el zombi por fin recuerda. Se trata
a cámara pasea por el es- rre (2008), cuando, en un bosque, se de un instante de transformación (otra
pacio sin buscar realmente sumergen en una rave. Los cuerpos de forma de tránsito), y es una de las es-
a los personajes, a los que, aquella película se corresponden con cenas más sugerentes de la filmogra-
más bien, encuentra”. Es- los de las chicas de Zombi Child, que se fía de Bonello, una manera volátil de
to decía Bertrand Bonello mueven entre el baile tribal y el ritmo revelar cómo el no-muerto recobra la
en una entrevista con motivo de Casa de la música rap. conciencia. Quizá, porque Zombi Child
de tolerancia (L’Apollonide, 2011), una Uno de los momentos más bellos de trata precisamente de la memoria: del
película que transcurre entre las cua- la película es aquel en el que el perso- legado de los antepasados y de la his-
tro paredes de un burdel en la frontera naje recupera algo de su conciencia. toria. De nuevo, la película se instala en
entre el siglo XIX al XX. El cine de Bo- Bonello lo filma a partir de la lumino- una zona intermedia, entre lo particu-
nello vive en constante tránsito. Zombi lar y lo universal. Las huellas del pa-
Child se balancea entre el Haití de los sado resuenan constantemente en los
años sesenta y la Francia actual, don- pasillos del internado contemporáneo.
de se aposenta en un internado de au-
Zombi Child “En el siglo XIX se inventó la historia”,
Francia, Haití, 2019
las blancas y asépticas, una institución Dirección: Bertrand Bonello dice en un momento uno de los pro-
fundada por Napoleón y destinada a Intérpretes: Louise Labeque, Wislanda fesores del internado. Bonello pone en
los hijos de todos aquellos que han si- Louimat, Adilé David, Ninon Francois duda la concepción lineal de la historia
do condecorados con la Legión de Ho- Distribución: Flamingo Films para proponer una aproximación más
nor. El cóctel no puede ser más patrio, Estreno: 7 de agosto rizomática. De hecho, en Casa de to-
lerancia ya proponía una idea similar,
cuando al final vinculaba lo sucedido
en una película que se sitúa a princi-
pios del siglo XX con la prostitución en
nuestra época.
Bonello fluye por tiempos distin-
tos, mientras la cámara, como él mis-
mo decía con motivo de Casa de to-
lerancia, se pasea hasta encontrar a
los personajes. En un momento de
Zombi Child, por ejemplo, la cámara
y una de las protagonistas observan a
sus compañeras jugar al balonmano,
una figura que no tendrá ningún tipo
de continuidad en la trama. En este
deambular, en este desprenderse de
los corsés de la lógica narrativa, Bone-
llo encuentra el tono de su película.
CUADERNO CRÍTICO
cuyos argumentos de telefilm operan con varios de los
más reconocibles clichés. La familia que tú eliges podría
entrar en ese ‘subgrupo’, pero el viaje que propone no
El colapso (T1)
encaja exactamente en ningún género aunque transita por
la comedia dramática, las historias de amistad y la estruc-
Guillaume Desjardins, Jérémy Bernard, Bastien Ughetto tura episódica de las road movies alternando la carretera
L’Effondrement. Francia, 2019 con los bellos deltas fluviales de Carolina del Norte. Zak
Intérpretes: Bellamine Abdelmalek, Lubna Azabal, Lola Burbail (Zack Gottsagen) es un joven con síndrome de Down,
Estreno: 14 de julio en Filmin mal ubicado por las autoridades en un hogar de ancianos
del que se escapa para cumplir su sueño de dedicarse a la
lucha profesional. Tyler (Shia LaBeouf ) es un cangrejero
Apenas cinco años han pasado desde que en Francia sur- inadaptado que huye de la policía y unos matones a los que
giera con fuerza la ‘colapsología’, una teoría que augura el se ha enfrentado. Juntos se embarcan en una aventura con
inminente colapso de la civilización (probablemente antes ecos de Mark Twain por los ríos y bosques olvidados del
de 2030) y que se apoya en el agotamiento de los recursos sur atlántico estadounidense. Y a ellos acabará uniéndose
naturales y el cambio climático. Esta corriente de pensa- Eleanor (Dakota Johnson), la empática cuidadora de Zak,
miento sostiene el discurso de la serie escrita y dirigida por que lo busca y acaba encontrando más de lo que esperaba.
el colectivo galo Les Parasites, cuyas primeras imágenes Los debutantes Tyler Nilson y Michael Schwartz consi-
llegan a través de un televisor: los saltos de un canal a otro guen elevar su propuesta por encima de materiales simila-
dan cuenta de la situación en la que se encuentra el país, res con una puesta en escena que sigue los pasos del indie
fragmentos de noticias sobre la emergencia climática y las americano y, sobre todo, a través del trabajo de sus intér-
advertencias de expertos, entre banales y superfluos reali- pretes, que pivota alrededor de la genuina composición de
ties que acreditan el ensimismamiento de la audiencia. Gottsagen: un actor con diversidad funcional que parece
Bastan ocho episodios para armar una completa panorá- entregar una versión sin filtro de sí mismo, capaz de dar
mica de la desesperación en la que queda sumida la sociedad giros sarcásticos a muchas de sus líneas de diálogo. Así, el
francesa durante 170 días de debacle. Ocho planos secuen- personaje de LaBeouf se despliega en varias capas a medida
cia que convierten a la serie de Jérémy Bernard, Guillaume que profundiza su vínculo con Zak y el film crea una cone-
Desjardins y Bastien Ughetto en un atrevido (y ambicioso) xión entrañable y orgánica entre ellos que sortea lo prede-
ejercicio de estilo cuyo valor fundamental es narrativo: en cible con las espontáneas decisiones de los personajes. En
medio del caos y la angustia, la cámara acompaña a los per- contraposición, el arco dramático de Eleanor se percibe
sonajes en sus tentativas de huida o resistencia, hasta con- reducido en esta historia de tres extraños que forman una
cretarse en primeros planos de sus rostros. Así, el relato se familia sustituta, atravesando los paisajes enmarcados en
ajusta a la escala del hombre haciendo coincidir el punto pantalla panorámica por Nigel Bluck, operador de True
en el que se encuentran los seres humanos en ese contexto Detective, que (re)construye un mundo primitivo y senso-
social distópico con el espacio fílmico. rial en esta fábula puesta al día sobre el movimiento perpe-
A pesar de la exigencia técnica que impone la filmación tuo y las posibilidades infinitas. JOSÉ FÉLIX COLLAZOS
de las largas secuencias, hay cierta libertad en el modo
en que se registran las escenas, una deriva que la cámara
coreografía y que desvela un código ético de reconocible
compromiso civil. La moderación en la descripción del
comportamiento ante la catástrofe y la verosimilitud de
la elección de los escenarios (el desabastecimiento en los
supermercados o el abandono de los mayores en las resi-
dencias de ancianos...) son algunos de los elementos más
significativos de este retrato de la hipervulnerabilidad de
las sociedades modernas. Una ficción demasiado oportuna
en estos momento, cuyas imágenes muestran una realidad
que ya no parece tan improbable. CRISTINA APARICIO
CUADERNO CRÍTICO
los personajes en los primeros minutos de Solo las bes-
tias. La señora Lojewski advierte a Alice que no deje de
querer a su marido. A pesar de tratarse de una inofensiva
anciana que vive que en un solitario entorno rural fran-
cés, sus palabras remiten al movimiento que subyace en el Supa Modo. Todos somos héroes
interior de las imágenes. Dominik Moll mantiene intacto Likarion Wainaina
su talento para el thriller, al que ha dedicado toda una Supa Modo. Kenia, 2018
filmografía que se inició con aquel estudio de personaje Intérpretes: Stycie Waweru, Nyawara Ndambia, Marrianne Nungo
que era Harry, un amigo que os quiere (2000). En este Estreno: 10 de julio
caso, la narración adopta trazas más corales, formularias
(ese puzle que solo encaja al final) y moralistas, a través
de un guion fragmentado en diversos personajes cuyas La proyección de películas de superhéroes y de acción es
identidades orbitan en torno a la desaparición de Evelyn la terapia más efectiva para Jo, una niña de nueve años que
(Valeria Bruni Tedeschi). pasa sus días en un hospital a causa de una enfermedad
El prólogo ubicado en Costa de Marfil genera descon- terminal. A pesar de la crudeza de la premisa, Supa Modo
cierto, activando la tensión desde la distancia geográfica y se sitúa al otro lado de la tragedia, en ese espacio reser-
sociocultural que lo separa del (supuesto) contexto prin- vado para la esperanza y el idealismo, sin caer (del todo, o
cipal del relato. Como si los huecos de la trama alimenta- al menos sin mucho perjuicio) en el sentimentalismo. La
sen el propio desarrollo de esta, las certidumbres dan paso primera escena resulta toda una declaración de intencio-
(Alice ama a Joseph, desatendiendo la advertencia inicial) nes: una película de kung-fu (que empieza mostrándose
a nuevas cuestiones. Damien Bonnard resulta excelente en una imagen desenfocada que desemboca en la espalda
en su interpretación de la enigmática conducta de Joseph. de la joven protagonista) es la responsable de los rostros
Esa búsqueda de filmar los agujeros en los personajes (las de emoción y las risas de un grupo de niños que miran
ausencias, la pérdida o sus carencias) alcanza a capturar embelesados la pantalla. Así, el hospital en el que viven,
una de las imágenes más poderosas del film: ese cuadrado tan asociado al dolor, es el espacio en el que comparten esa
vacío en el interior del pajar que se solapa con la foto del experiencia cinematográfica, colectiva y de evasión. No
infante Joseph junto a su madre muerta. será hasta que aparezcan la hermana y la madre de Jo (ins-
Hacia la mitad del metraje, cuando se desvela la conexión tante en que se adopta una perspectiva externa) cuando se
entre entornos tan diversos como la campiña francesa o imponga la realidad y con ella la dureza del momento y el
el bullicio nocturno de Abiyán, empieza a surgir una nada lugar en el que están.
complaciente reflexión sobre las relaciones coloniales. Más Este es, quizá, el eje vertebrador de todo el relato: la dua-
sutil y menos lograda que la pesquisa policial, Moll consi- lidad en la que se encuentra el destino de Jo (la vida y la
gue, como lo hacía Bertrand Bonello en Zombi Child (2019), muerte, lo real y lo imaginado) y que va a condicionar a todo
que una desaparición termine por desnudar las carencias su entorno. Resulta fundamental el concepto de comunidad
de una sociedad francesa en la que aún se aprecian reminis- que recoge la cinta (que está presente en la proyección ini-
cencias coloniales (estimulante plano final). JAVIER RUEDA cial), un aspecto que se describe con sutileza, sin recurrir a
sobreexplicaciones. Del mismo modo, destaca la forma en
que Likarion Wainaina prescinde del exceso de informa-
ción: los acontecimientos se suceden (antes incluso de saber
si son imaginados o pactados) sin la urgencia de desvelar su
naturaleza. Pero lo más notable del film es la manera en que
el realizador recurre a los mecanismos de la ficción dentro
de la propia película, y la tesis no puede ser más hermosa: el
cine es la única herramienta para hacer realidad un sueño.
Es el formato que permite convertir la realidad en fantasía
y hacer visibles los sueños imposibles. Porque es gracias a
una pantalla que los héroes perduran para siempre, y con
ellos la esperanza. CRISTINA APARICIO
CUADERNO CRÍTICO
vieja guardia (obra de Greg Rucka y Leandro Fernández
para Image Comics) ofrece una mirada lúcida y diferente
a dos subgéneros como la action movie y las adaptacio-
LITTLE JOE
La ciencia de la empatía
JUANMA RUIZ
E
l travelling lateral es una XX, desde The Twilight Zone, de Rod ra (¡nos separa!) de sus criaturas, como
herramienta que permite Serling, a La invasión de los ladrones de invitando al espectador a desprender-
desplazar la cámara sin cuerpos, de Don Siegel. Sin embargo, la se de su propio afecto por los persona-
variar la distancia que la influencia que late con más fuerza en el jes, solo para constatar que eso es, por
separa de los persona- film de Hausner es la del remake de es- fortuna, imposible. Si el cine es, como
jes. Jessica Hausner basa ta última filmado por Philip Kaufman decía Roger Ebert, “una máquina de
buena parte del dispositivo visual de en los años setenta. Al fin y al cabo, la generar empatía”, la propia película es
Little Joe en este recurso, y no por ca- soterrada alerta anticomunista de Sie- el mejor antídoto contra la metafórica
sualidad: en un hábil gesto, la cineasta gel (tan propia de la ciencia ficción de amenaza que retrata y denuncia.
deja que toda la película se impregne los cincuenta) no tiene cabida en un Pero lo más enigmático de este cuen-
de la frialdad y la falta de empatía que film que, bajo la apariencia de una fá- to perverso se encuentra, probable-
son el centro emocional y discursivo bula sobre los peligros de la ciencia, mente, en la riqueza de interpretacio-
del relato. La premisa es sencilla, casi versa en realidad sobre la deshumani- nes (algunas incluso contradictorias)
ingenua a primera vista: por medio de zación del mundo moderno; y que pro- que propician sus imágenes, absolu-
la manipulación genética, un equipo de pone perversamente la represión de las tamente ambiguas y siempre llenas de
científicos crea una flor cuyo polen de- emociones para huir del sufrimiento. posibilidades malévolas: ¿es esa psicó-
bería, teóricamente, inducir la felicidad En consecuencia, todo en Little Joe loga (que siempre viste estampados flo-
de quien lo inhala. Pero huelga decir es aparentemente frío y aséptico, des- rales, trabaja en una consulta de color
que los resultados no son los esperados de los higiénicos tonos verdosos que rojo y “le gusta que le hablen”) el verda-
por sus creadores, y lo que se constru- bañan la imagen –sobre todo, pero no dero objeto de la metáfora de la planta
ye a partir de ahí es un thriller para- solo, en las escenas que transcurren en alienante del film? ¿Es deseable la sus-
noico de identidades usurpadas que el laboratorio– hasta las angulaciones titución de los sentimientos genuinos
disfraza de calma y quietud la desa- y movimientos de cámara que parecen por una mera imitación de los mismos
sosegante tensión de sus imágenes. La más propios de un sistema de videovi- en pro del orden y la estabilidad, o in-
película se sitúa como clara heredera gilancia. Y, sobre todo, esos constantes cluso de una aparente felicidad? Antes
de una cierta tradición alegórica del desplazamientos laterales con los que que ofrecer respuestas fáciles y acomo-
género fantástico, que vivió su apogeo la directora mantiene inmutable la dis- daticias, Little Joe prefiere dejar en el
en las pantallas a mediados del siglo tancia física y emocional que la sepa- aire sus incómodas preguntas.
DA 5 BLOODS
What’s going on
VIOLETA KOVACSICS
U
na semana después del
asesinato de George
Floyd, Spike Lee colga-
ba un vídeo en Twitter
en el que montaba las
imágenes de la muerte
de Eric Garner a manos de la policía en
2014, de Floyd en 2020 y de Radio Ra-
heem en la película del propio Lee de
1989, Haz lo que debas. El título de es-
ta pieza de apenas un minutos y medio
era ¿Dejará de repetirse la historia? Y es
justamente en torno a la Historia como
Lee lleva tiempo construyendo sus pelí-
culas. En la misma Haz lo que debas, la
fatalidad de Radio Raheem estaba pre-
cedida por un ajuste de cuentas con la
historia: los chicos afroamericanos del te de cuentas con la Historia. Lo hace en cesiva– no será la mejor película de su
barrio no comprendían por qué el pizze- un escenario, el de Vietnam, que todavía director, Da 5 Bloods revela algunas es-
ro italoamericano no tenía la fotografía deja a la vista sus heridas. La parte más timulantes excentricidades. De entra-
de ninguna celebridad negra entre las lúdica de Da 5 Bloods incluye un movi- da, Lee prescinde del maquillaje digi-
instantáneas que lucían en las paredes miento de cámara que revela, primero, tal cuando se adentra en los flashbacks
del local. la tarima de un DJ con un cartel de Apo- que revelan a sus protagonistas durante
En Da 5 Bloods, la última y oportuna calypse Now de fondo y que cuando el la guerra: el cuarteto aparece con canas
película de Lee, un grupo de veteranos plano se abre muestra una publicidad de y arrugas, algo que, hoy por hoy, pare-
negros viaja a Vietnam con la intención Budweiser en la mesa del pinchadiscos. ce casi contracultural. Por otro lado, in-
de desenterrar, por un lado, el cuerpo de ‘Esto es ahora Saigón’, dice Lee sin su- siste en realzar los gestos: los abrazos
un compañero fallecido en la guerra y, tilezas. Este tono festivo, en torno a lo entre unos y otros se filman dos veces,
por el otro, un tesoro que dejaron atrás que parece un viaje del Imserso, se va rompiendo cualquier ilusión de conti-
en los años setenta: un botín de lingo- modificando después. nuidad. Por último, hace que sus perso-
tes de oro con el que pretenden cobrar- Si Lee es un cineasta directo en su dis- najes atraviesen la selva cantando a ca-
se los servicios prestados a una patria curso político, lo es también en su pues- pela What’s Going On, de Marvin Gaye.
que nunca los ha considerados ciuda- ta en escena: es quizá el mejor rasgo de Y he aquí quizá el auténtico mantra de
danos de plenos derechos. Las palabras un cineasta que acostumbra a enarbolar la película. La canción se va repitiendo
de Martin Luther King, de Angela Davis sus alegatos a partir de la singularidad. y revela perfectamente el tránsito de un
y de Muhammad Ali, entre otros, sirven La mejor manera de situarse en con- tono lúdico a una cinta bélica y, final-
de mantra para evidenciar cómo los sol- traposición al supremacismo blanco es mente, a un desazón ejemplificado en el
dados negros fueron peones en aquella encontrar unas herramientas estéticas personaje encarnado por Delroy Lindo:
batalla, expuestos en la primera línea de propias. Y aunque por su desmesura un votante de Trump atormentado por
fuego. Una vez más, Lee plantea un ajus- –demasiadas tramas, una duración ex- los fantasmas de una guerra sin fin.
JMADRID diferentes pandemias en diferentes perio- nos de jueves a domingo durante todo
BILL VIOLA dos. Las tres primeras sesiones serán acce- el mes de julio. Entre los confirmados:
Espacio Fundación Telefónica. Julio. sibles online a través del canal de Vimeo Mi vida con Amanda (Mikhael Hers),
El centro reabre sus instalaciones con las del Museo, y la última será presencial con Little Joe (Jessica Hausner), Habitación
exposiciones Bill Viola. Espejos de lo invi- la reapertura del Auditorio Sabatini y el 212 (Christophe Honoré), ¿Dónde estás,
sible, un amplio recorrido por la trayecto- preestreno de dos películas a nivel nacio- Bernadette? (Richard Linklater), Under
ria de uno de los grandes artistas pioneros nal. Barbara Hammer, David Wojnarowicz, the Skin (Jonathan Glazer), Ayka (Serguey
del videoarte y Gila al aparato, dos mues- Pepe Espaliú, Jean-Daniel Pollet , Yervant Dvortsevoy), Nuestras derrotas (Jean-
tras que quedaron interrumpidas por la Gianikian o Rita Azevedo Gomes son algu- Gabriel Périot) y Apocalypse Now Final Cut
COVID-19, así como la exposición perma- nos de los nombres protagonistas de este (Francis Ford Coppola).
nente Historia de las Telecomunicaciones. ciclo.
VAMPIROS
TIEMPOS INCIERTOS II CINE DE VERANO CaixaForum. Hasta el 6 de septiembre.
Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía. Instituto Francés. Hasta el 24 de julio. El mito del vampiro y el cine han estado
Hasta el 22 de julio. Cada viernes, a las 22 horas, el Instituto vinculados a lo largo de los siglos XX y
El programa regular de cine y vídeo pausó organiza las sesiones de Cine de verano XXI en una relación simbiótica e ilusoria.
su actividad motivado por la emergencia en el Patio. La programación se concentra La exposición ‘Vampiros. La evolución
sanitaria de la COVID-19, al igual que el en el homenaje al actor, productor y reali- del mito’ recupera esta vinculación para
resto de la actividad presencial del Museo. zador francés Michel Piccoli, fallecido el sumergirse en el mundo de los vampiros y
‘Tiempos inciertos. Representar la pande- pasado 12 de mayo. conocer las relaciones entre sus diferentes
mia’ se puso en marcha como ciclo audio-
visual (centrado en su primera parte en la ESTRENOS
experiencia del confinamiento) y ahora Cine Estudio. Círculo de Bellas Artes. Julio. FILMOTECA DE VALÈNCIA
arranca su segunda parte, que nos presen- El Cine Estudio programará estre- La sala reabre hasta el 5 de julio con
tará en cuatro sesiones cómo una serie de una programación simbólica para des-
artistas y cineastas de distintas genera- pedir la temporada que incluye cuatro
ciones han abordado la representación de FILMOTECA DE CATALUNYA títulos de los ciclos Fassbinder, amor y
La sala abre con una triple sesión: Sed de rabia y Centenario Fellini, las dos gran-
J F I L MOTE CAS mal de Orson Welles, Habemus Papam
de Nanni Moretti y Do the Right Thing
des retrospectivas que han vertebrado la
programación de los últimos meses y que
de Spike Lee (con una relación evi- continuarán en La Filmoteca después
FILMOTECA ESPAÑOLA dente con la actualidad). Además en del verano. Desde el 31 de julio al 30 de
Desde las salas del Doré se mantie- julio se recuperan muchos de los ciclos agosto se organizará la programación al
nen dos sesiones al día durante todo que quedaron interrumpidos durante el aire libre Filmoteca d’estiu (en los jardi-
el verano. La programación recupera período de confinamiento: Carta blanca nes del Palau de la Música) y que esta edi-
títulos icónicos, películas en las que nos a Jaume Plensa, Aula de cine, Trávelin ción lleva por título ‘Summer Was Sexy!’
gustaría vivir, que congrega una amplia por el cine asiático, El Japón de ahora, y está compuesto por películas en las que
y plural variedad de cinematografías, Tesoros del cine eslovaco, programación la sensualidad estival es la protagonista.
donde el cine español también tiene familiar y algunos homenajes póstumos La selección de películas es breve pero
mucho que aportar: Almodóvar, Cuerda, como los dedicados a Lucía Bosé, José diversa: cine americano, francés, alemán,
Neville, Trueba, Miró, pero también Luís Cuerda, Sue Lyon, Ivan Passer, Kirk japonés... de diferentes épocas y estilos
Chytilová, De Sica, Edwards, Godard, Douglas, Michel Piccoli, Anna Karina narrativos. Desde la deslumbrante joya
Gutiérrez Alea, Kitano, Kusturica, (en su vertiente de actriz y de directora). del mudo Gente en domingo, hasta ese
Miyazaki, Tabío, Tati… En esta progra- También se ha programado una retros- hito del cine popular ochentero que es
mación de carácter extraordinario se pectiva completa de Carlos Reygadas Dirty Dancing, pasando por Preminger,
mantienen algunas secciones fijas como en julio (en colaboración con el Festival Rohmer y Kawase. La diversidad se
La muerte del cine o La imagen renacida Grec de Barcelona) y, en agosto, el ciclo extiende también a los sujetos del deseo,
(que se ha programando online y se recu- Los mejores filmes del año y la tercera con la presencia de la mirada homosexual
perará en salas a partir de septiembre), temporada de Twin Peaks: The Return de (Call Me By Your Name) y la reivindica-
pero también Cinéditos, que llevará a la David Lynch, como acompañamiento de ción del deseo femenino. La sesiones del
sala el drama romántico de Anna Karina, la exposición Lynch/Fellini que perma- ciclo irán introducidas, a modo de aperi-
Vivre ensemble. Tampoco se dejan de necerá abierta hasta el 30 de agosto. tivo, de varios montajes de fragmentos de
lado los trabajos de recuperación y difu- películas domésticas conservadas por el
sión del patrimonio audiovisual, que CGAI archivo fílmico de La Filmoteca, secuen-
continúan ofreciéndose semanalmente La sala permanecerá cerrada hasta sep- cias filmadas por amateurs que muestran
en el canal en streaming ‘Doré en casa’. tiembre. las formas de ocio estival del pasado.
EL FINAL ES EL PRINCIPIO
CARLOS F. HEREDERO
La mirada de Ulises comienza con unas imágenes de Las hilanderas. El ruido producido por el motor de un
proyector nos indica, sin embargo, que no estamos solo ante la película filmada por los hermanos Manakis en
1905, sino ante una proyección de aquel celuloide, todavía no sabemos dónde ni delante de quién. Sobre ellas,
una voz en off –preñada de respeto y emoción– comenta que se trata del primer film rodado en la península
balcánica y se pregunta: “¿Es ésta realmente la primera película, la primera mirada...?”.
Al final del relato contado por Angelopoulos, un contraplano nos deja ver al espectador que contemplaba
aquellas imágenes. Reconocemos entonces la voz en off que se escuchaba al principio: es la de A. (el cineasta
sin nombre que conduce el viaje narrado por el film). Acto seguido, la cámara se aleja pudorosamente hasta
dejar al personaje en un plano distante y levemente picado, que reduce su tamaño, lo muestra inerme y des-
vela su desolación. Comprendemos así que el itinerario recorrido por A. no era otra cosa, en realidad, que
el despliegue de la memoria –y el reflejo de la Historia sobre ella– que surge en la cabeza de este cineasta
durante la proyección a la que asistía en la sala casi derruida de la Cinemateca de Sarajevo. Lo real engendra
lo imaginario: las imágenes de Las hilanderas (imágenes-madre) engendran y dan a luz la historia metafórica
de todo un siglo. Es “la inserción del tiempo del hombre en el tiempo del mundo, cuyo encuentro conforma la
Historia”, en palabras de Barthélemy Amengual.
Estamos entonces ante el rostro de un cineasta convulsionado por el dolor de la Historia y sobrepasado
por la contemplación de esa mirada primigenia, de esa inocencia perdida (su Ítaca soñada) en la que, al con-
templarse él mismo, toma conciencia de que la suya nunca podrá volver a ser ya de ninguna manera inocente.
“Había soñado que este sería el final de mi viaje y, sin embargo, mi final es mi principio”, dice A, tras contem-
plar el gesto fundador en el que un cineasta moderno trata de reencontrar su perdida capacidad para mirar
el mundo a través de la cámara. Angelopoulos corta a negro inmediatamente después y nosotros tomamos
conciencia, en ese momento, de que, si bien nunca será posible recuperar ya la integridad perdida, sí que será
preciso aprender a mirar de otra manera para embarcarnos en nuevos viajes y poder volver a mirar el mundo
The End
desde el fondo de nuestra memoria y con los ojos de hoy. Lección de cine y lección de Historia.