La Agricultura Desde Principios Del Siglo XX
La Agricultura Desde Principios Del Siglo XX
La Agricultura Desde Principios Del Siglo XX
En los países del Tercer Mundo, estos sistemas, que exigen grandes
aportaciones del exterior, se emplean en las grandes llanuras y deltas
irrigados del sur, sureste y este de Asia, así como en partes de
Latinoamérica y el norte de África, y en otras zonas aisladas. Tienden
a ser explotaciones de monocultivos y/o animal único, orientadas a la
venta, y comprenden los cultivos irrigados de arroz en las tierras
bajas, el trigo y el algodón; Las plantaciones de plataneros, piñas,
palma de aceite y caña de azúcar; las hortalizas en las inmediaciones
de los centros urbanos, y la cría intensiva de ganado y aves.
Estas son las tierras de la llamada revolución verde. Los científicos
desarrollaron nuevas variedades de cereales básicos, consiguiendo
que maduraran antes, lo que permitía recoger dos cosechas al año,
que fueran insensibles a la duración del día, lo que facilitaba su
cultivo en un gran abanico de latitudes, y que produjeran una mayor
proporción de grano en relación con la paja. Estas variedades
modernas fueron entregadas a los agricultores junto con
aportaciones, o entradas, de elevado coste, que incluían fertilizantes
inorgánicos, pesticidas, maquinaria, créditos y agua. Como resultado,
el rendimiento medio de los cereales se ha duplicado en 30 años.
Tomando en consideración el crecimiento de la población en el mismo
periodo, la mejora ha sido de un 7% del total de los alimentos
producidos por persona. Este valor medio, no obstante, oculta
diferencias regionales significativas: en el sureste de Asia, la
producción Per-Cápita de alimentos ha aumentado cerca de un 30%,
pero en África ha descendido un 20 por ciento. Lo que es más, aún
quedan unos 1.000 millones de personas en el mundo cuya dieta no
aporta suficientes calorías para trabajar, de las que 480 millones
viven en hogares demasiado pobres para obtener la energía
necesaria para el crecimiento adecuado de los niños y para mantener
una actividad mínima por parte de los adultos.
Todos estos éxitos tienen tres elementos en común. Han hecho uso
de tecnologías que conservan los recursos, como la gestión integrada
de las plagas, la conservación del suelo y el agua, el reciclado de
nutrientes, los cultivos múltiples, la captación de agua, el reciclado de
desechos, y así sucesivamente. En términos generales, ha habido
iniciativas por parte de grupos y comunidades a nivel local, así como
cierto apoyo por parte de instituciones gubernamentales y/o no
gubernamentales.