Caso Netflix
Caso Netflix
Caso Netflix
Su fundador Reed Hastings creó un nuevo modelo de negocio, primero mediante
el alquiler y posteriormente a través de los servicios de televisión en streaming.
Los clientes alquilaban películas, principalmente en el formato VHS en un local
minorista por un período de tiempo específico.
Netflix estrena un servicio de suscripción que ofrece alquiler ilimitado de DVD por
un bajo precio mensual.En el año 2000, una de las novedades más importantes de
esta compañía fue la incorporación del sistema de calificación y recomendación de
sus usuarios, que servía de referente de consumo para otros. De hecho, esta
modalidad todavía se mantiene y se perfecciona cada día, a través de un área que
se encarga exclusivamente del conocimiento y comportamiento del usuario y que
es muy coherente con las nuevas reconfiguraciones de las audiencias, que se
caracterizan “por la personalización de los contenidos.
Netflix entiende que el cliente se sitúa en el centro de las acciones de la marca con
elfin de satisfacer sus principales necesidades, de entretenimiento, de socialización
y deuso de su tiempo libre.La idea básica de valor de Netflix es dar al público lo
que quiere. Saben que su éxito ypermanencia dependen de la satisfacción de los
clientes que contratan sus servicios.Utilizan algoritmos que analizan los hábitos de
visionado y las actitudes de cada perfilregistrado.Netflix ha denominado a sus
unidades de negocio como segmentos:Streaming nacional o doméstico: Reporta
ingresos por suscripciones mensuales por serviciostreaming dentro de Estados
Unidos.Streaming internacional: Reporta ingresos por suscripciones mensuales por
serviciostreaming fuera de Estados Unidos.DVD nacional doméstico: Reporta
ingresos por suscripciones mensuales por serviciode
El Big Data ha ayuda a Netflix a analizar sus clientes, el mercado y de esta manera
poder seguir creciendo mejorando el servicio a sus suscriptores a través de
contenido, personalización, usabilidad y personalidad. Con la gestión de
información y datos de usuario, Netflix le apuesta por el desarrollo tecnológico con
el fin de ofrecer un servicio totalmente adaptado y personalizado, llevando a la
marca lo largo de su existencia a buscar la mejor forma de manejar los datos y
recoger el feedback de sus usuarios. Este hecho ha sido determinante para
disponer de una oferta totalmente microsegmentada y personalizada gracias a las
inversiones en big data, hasta llegar al algoritmo con el que trabaja la marca en el
que se incluye el adecuado uso de inteligencia artificial. Uno de los usos que le da
Netflix a la inteligencia artificial es la producción de tráileres ‘personalizados’. Para
esto, comparan grandes grupos de información y producen fragmentos de tres
minutos, dirigidos a cada usuario. Cada vez que el usuario ingresa a Netflix y ve su
serie favorita o película, el sistema recopila esa información y arroja un análisis
que se utiliza ya sea para personificar la interfaz, editar tráileres o para entregarle
sugerencias acordes con sus gustos e intereses.
Utilizan algoritmos que analizan los hábitos de visionado y las actitudes de cada
perfil registrado.
Estos algoritmos son capaces de analizar el tipo de contenido que prefiere ver
cada televidente, el tiempo que emplean para verlo, las interrupciones súbitas
(dejar de ver un programa por aburrimiento o cansancio)…
Toda esa información contribuye a decidir qué contenidos le gustan a cada uno de
los usuarios, lo que es usado en las listas de recomendaciones.
A nivel de marketing de contenidos, estos datos ayudan a la empresa a conocer
a a fondo sus clientes y saber a quién se están dirigiendo, lo cual es de gran
utilidad a la hora de establecer novedades y campañas de publicidad.