Analisisdelas Tendencias Pedagogicasen Educacion Superior
Analisisdelas Tendencias Pedagogicasen Educacion Superior
Analisisdelas Tendencias Pedagogicasen Educacion Superior
CUARTO SEMESTRE
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
ÍNDICE
Presentación………………………………………………………………………. 3
Objetivos…………………………………………………………………………… 4
Metodología……………………………………………………………………….. 5
Evaluación Diagnóstica…………………………………………………………. 6
CAPÍTULO I
Introducción
Educación y Pedagogía
Introducción………………………………………………………………………… 9
Educación y Pedagogía…………………………………………………………… 22
Fundamentación de la Pedagogía………………………………………………. 22
Concepto de Educación…………………………………………………………... 33
El Proceso Educativo……………………………………………………………… 46
CAPITULO II
Los Autores
La Tradición Renovadora…………………………………………………………. 61
CAPÍTULO III
La Crítica Autoritaria…………………………………………………………….. 107
CAPÍTULO IV
La Perspectiva Sociopolítica Socialista……………………………………… 154
CAPÍTULO V
Dos Puntos de Vista desde América Latina
Entorno Político, Social y Económico de la Escuela…………………………... 209
Introducción………………………………………………………………………… 209
Propósito……………………………………………………………………………. 210
Sociedad y Educación…………………………………………………………….. 211
Política Educativa………………………………………………………………….. 212
Política Educativa en México…………………………………………………….. 213
CAPÍTULO VI
Teorías de la Educación
El Constructivismo…………………………………………………………………. 223
La Teoría Socio Histórica Cultural de Vygotsky………………………………... 226
La Teoría del Aprendizaje Significativo de Ausubel…………………………… 229
La Etnografía Crítica………………………………………………………………. 232
La Pedagogía Crítica……………………………………………………………… 233
Cuestionario……………………………………………………………………….. 235
Bibliografía………………………………………………………………………… 242
Cuarto Semestre 2
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
PRESENTACIÓN
Esta antología no está elaborada para especialistas sino para los educadores,
como un instrumento sencillo y aplicable a su quehacer cotidiano. Para superar el
transmisionismo y el instrumentalismo en que ha estado sumida la concepción que
se ha tenido de Pedagogía.
Cuarto Semestre 3
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
OBJETIVOS
Cuarto Semestre 4
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
METODOLOGÍA
Cuarto Semestre 5
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
EVALUACIÓN DIAGNÓSTICA
Cuarto Semestre 6
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Capítulo I
Introducción
Educación y Pedagogía
Cuarto Semestre 7
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
INTRODUCCIÓN
Cuarto Semestre 8
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
La nueva educación
A fines del siglo XIX surgió un movimiento renovador con el que se identificaron
múltiples innovaciones pedagógicas, el cual fue clasificado con el rubro de educación
nueva. Con este movimiento se relacionan figuras célebres de la educación como
John Dewey, Maria Montessori, Celestin Freinet, Jorge Kerschensteiner, Alfredo
Binet, Eduardo Claparede, Adolfo Ferriére. Iconoclasta, el nuevo pensamiento
educativo inició su desarrollo proclamando una ruptura de principio con la pedagogía
tradicional, particularmente con el método de instrucción. A pesar de sus formas
particulares de discurso, todos los teóricos de la educación nueva insisten en una
crítica a la tradición aristotélica, al afirmar que la escuela no es un medio para el
desarrollo de un fin último ni para el despliegue de potencialidades ocultas, que
llegarán a manifestarse a través de la educación. En otras palabras, el eje del
movimiento de la educación nueva es una crítica a la educación que pretende
preparar para el futuro: preparar al niño para ser adulto, ya sea para un oficio o ya
sea para fines trascendentes impuestos desde el exterior. La escuela nueva, por lo
contrario, es una escuela de la vida, es una escuela que quiere preparar para el aquí
y el ahora.
Vista de este modo la educación tradicional, parecería que el siglo XIX no aportó
ideas nuevas a lo dicho sobre este tema durante el siglo XVIII. Sin embargo, lo que
hace novedosas e importantes las ideas del movimiento de la educación nueva es el
contexto en que aparecen.
A pesar de las aportaciones geniales de los pensadores del siglo XVIII, la idea de
que la educación tradicional no sólo se oponía a la formación correcta de los hijos de
las clases altas sino que además era incompatible con una educación popular,
generalizada y democrática, no aparece tan clara en Rousseau como en Dewey o
Freinet.
Cuarto Semestre 9
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Son las nuevas condiciones del industrialismo las que sustentan las críticas al
sistema tradicional. El fin de la nueva educación no es hacer con ella un aristócrata,
ni un académico, ni siquiera un hombre de la clase media, sino un hombre moderno,
adaptado a tas nuevas estructuras urbanas y a los nuevos sistemas democráticos de
gobierno, En este sentido, la educación nueva se define en primer término como
secular, y en segundo como instrumental o pragmática.
Cuarto Semestre 10
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Por último, habría que hacer notar la íntima relación de estos elementos contextuales
con las propuestas de la psicología respecto del aprendizaje de los niños. ¿No eran
estos tres elementos —libertad, actividad y descubrimiento— con sustanciales a la
naturaleza del niño? Si esto es así, el vínculo entre lo que debe proporcionar la
escuela sin violentar la naturaleza del niño y los valores de la sociedad se establecía
de manera casi natural.
Propuestas pedagógicas
A continuación reseñaremos las características comunes de la escuela nueva en
cuanto a sus propuestas pedagógicas.
Como hemos visto, algo que las unifica es su acuerdo unánime en denunciar los
vicios de la educación tradicional: pasividad, exceso de autoridad del maestro,
verbalismo, enciclopedismo, etcétera.
Destacaremos las coincidencias positivas que se dieron como opción a sus críticas:
a) La educación nueva es una educación centrada en el niño, sea cual fuere la
interpretación que acerca de la psicología del niño desarrolla cada teórico. El hecho
común es que la educación debe basarse en las características de las necesidades
propias del niño y no en imposiciones externas.
Cuarto Semestre 11
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
b) La escuela es por definición activa. Debe desarrollar todas las formas de actividad
humana, ya sea manual o intelectual, social o individual, u otras, y no puede
reducirse a ninguna de ellas. Para alcanzar este fin se han desarrollado diferentes
métodos, que ahora conocemos ya formalizados como método Freinet o método
Montessori, etc., aun que en su formulación original no pretendieron ser dogmas sino
apoyar el principio de la educación activa.
d) El saber deja de emanar de una única fuente —el maestro— para concebirse
como un proceso de construcción, de hallazgo, de descubrimiento, cuya fuente
original y verdadera es el interés y cuya verificación es la utilidad. Esta noción
excluye toda idea de un programa fijo y preestablecido.
g) Toda escuela activa, además, pretende desarrollar el espíritu creador de los niños.
Este capítulo de la educación nueva en sus diferentes manifestaciones aparecerá
bajo el rubro de actividades libres, actividades que permitan al niño enfrentar
situaciones de lo que será su vida futura real, para la cual requerirá una enorme
Cuarto Semestre 12
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
La crítica
Todas y cada una de estas tesis o propuestas metodológicas han estado y siguen
estando sujetas a constante revisión. Señalaremos algunas de las críticas que nos
parecen más importantes.
En relación con la afirmación de que en la educación no hay otros fines más que el
desarrollo del niño, es claro que debemos preguntarnos si el concepto mismo de
desarrollo no encierra ya juicios de valor, ¿Por qué el estado B es mejor que el
estado A y debemos fomentarlo?
Por otra parte, si la escuela tiene como finalidad —como lo planteó Durkheim— la
socialización del niño; es decir, rescatarlo de su egocentrismo e incorporarlo a la
sociedad, la pregunta es: ¿puede la escuela negarse a cumplir esta función?,
¿puede negarse a trasmitir los valores y la cultura intelectual depositados en ella?
Escuelas de este tipo se han desarrollado sin ningún control por todas partes,
originando la desconfianza en sus capacidades educativas.
Cuarto Semestre 13
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
La educación socialista
Al hablar de las nuevas teorías de la educación no podemos dejar de mencionar a la
educación socialista. Para algunos autores la escuela politécnica socialista es la más
clara expresión de la educación nueva, la verdadera. Para otros, la educación nueva
sería imposible en un régimen autoritario. Sin embargo, la escuela politécnica se ha
tomado como paradigmática de la educación socialista, porque a diferencia de lo que
ha sucedido en Occidente con las escuelas nuevas, la politécnica sí ha logrado reunir
teóricamente en un proceso a la educación y a la producción material (el trabajo
manual y el trabajo intelectual), lo que representa un avance sobre la escuela
occidental que, aunque modernizada en teoría, sigue recluida a una espacio cerrado:
el espacio escolar.
Cuarto Semestre 14
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Pero ¿es suficiente esto para hablar de una nueva pedagogía marxista?, ¿qué
características tendría?
Cuarto Semestre 15
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Sin embargo, estas ideas de la escuela politécnica fueron cambiando poco a poco y
se eliminaron totalmente para el periodo estalinista. Una nueva idea de educación
politécnica tomó su lugar: politécnico vino a significar el aprendizaje sólido y
sistemático de las ciencias, especialmente química, física y matemáticas. El proyecto
del método complejo fue olvidado e incluso prohibido. El control de la escuela se
centralizó y el manejo colectivo fue rechazado. Finalmente, hacia 1932 se
introdujeron currículos unitarios para todas las materias. Se volvió a la cátedra como
principal método de transmisión y al libro de texto como principal material didáctico.
El entrenamiento vocacional fue guiado hacia la producción de cuadros muy
especializados pero estrechamente formados. Estos cambios dejan mucho que
desear de una educación socialista.
La tecnología educativa
El siglo XX ha presenciado una extraordinaria revolución en los medios y
procedimientos de la enseñanza y, de hecho, la pedagogía moderna ha tendido a
privilegiar el tema de los problemas metodológicos y técnicos sobre el tema de los
mismos conocimientos que se trasmiten. Esta tendencia histórica de la evolución del
pensamiento pedagógico podría calificarse, con justicia, como metodologismo.
Cuarto Semestre 16
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Cuarto Semestre 17
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Es más importante decía Franklin Bobbit en 19181 que quienes trabajamos en esta
profesión (el diseño curricular) lleguemos a un acuerdo sobre un método de
descubrimientos curriculares (currículum discovery) a que arribemos a una
conformidad sobre los detalles de contenido de un currículo.
Bobbit, quien escribió el primer libro específico acerca de currículos (The currículo,
1918), destacó la necesidad de encontrar principios generales para el diseño
cunicular y la conveniencia de establecer objetivos para la educación a partir de un
estudio previo de las necesidades sociales. Para ello debemos tener claro el criterio
decía de que “los estudios son medios y no fines y que cualquier cosa que no es
eficiente es una cosa equivocada”.
Cibernética y educación
La segunda fase en el desarrollo de este desplazamiento del objeto pedagógico se
relaciona con la aparición de la cibernética y la aplicación de los principios de la
computación o programación a numerosos campos de actividad social. Un referente
histórico para el inicio de este nuevo desarrollo es la Segunda Guerra Mundial, pero
1949 fue, en especial, un año significativo en el cambio educacional. Este año Ralph
Tyler publicó su libro Basic principles of curriculum and instruction que sirvió de
syllabus para su curso en la Universidad de Chicago. “Más que ningún otro
documento, este libro fue el responsable del renacimiento del interés en diseño
curricular.” La idea de Tyler se resume en estas líneas:
Cuarto Semestre 18
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Ahora, los aspectos más íntimos del encuentro maestro-alumno se hallan sujetos a
programación. La libertad, como tal, se ha extinguido. Todo lo que acontece en el
aula es previamente programado por un grupo de “expertos”, quienes seleccionan
contenidos educativos, definen su organización, los tiempos en que se desenvuelve
el proceso, etc. De hecho, las reglas del scientific management que tanto éxito
obtuvieron en la empresa se aplican ahora en la escuela con el atributo de una
supuesta cientificidad.
Cuarto Semestre 19
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Cuarto Semestre 20
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Este reto cobra mayor fuerza en la perspectiva de los avances formidables que ha
tenido el campo de los recursos técnicos de la educación. El desarrollo de la
televisión y de las comunicaciones por satélite, la aparición de la microcomputadora y
el invento de la video casetera, son creaciones que representan una auténtica
revolución en los medios educativos en la que se dibuja la sociedad futura.
Apropiarnos de todos estos avances es nuestra tarea. (6)
Cuarto Semestre 21
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
EDUCACIÓN Y PEDAGOGÍA
FUNDAMENTACIÓN DE LA PEDAGOGÍA
Cuarto Semestre 22
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Cuarto Semestre 23
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Cuarto Semestre 24
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
ambición comprensiva, ha de estar abierta a otras disciplinas que bucean bajo otra
perspectiva en la misma naturaleza del hombre. ¿Es que duda alguien de la
autonomía de la medicina, a pesar de su fundamentación en la biología, en la
química, en la física, etc., que son también llamadas “ciencias básicas médicas”?
Con tal de que la medicina no se reduzca química, física o biológicamente, tendrá
validez como saber nuevo la ciencia de la curación del hombre enfermo. De una
manera similar, la pedagogía puede apoyarse en ciencias básicas, sin perder su
autonomía epistemológica y sin reducirse a esas mismas ciencias básicas.
Recorriendo la larga historia de la educación, hemos de llegar a concluir que son tres
las ciencias humanas que fundamentan la pedagogía; éstas son la biología, la
psicología y la sociología. Y que hay otra cuarta fundamentación —la filosofía, con
sus distintas disciplinas o asignaturas—que responde también a previas
aseguraciones de la ciencia de la educación. Por este motivo, el resto del capítulo
que dará dividido en dos grandes partes; por un lado, estudiaremos la
fundamentación filosófica de la pedagogía y, por otro, su fundamentación científica,
Los capítulos de la teoría epistemológica nos han preparado para entender esta vieja
cuestión renovada por todos los teóricos de la educación. Es natural que la
fundamentación filosófica haya sido la de mayor concurrencia, porque amparó todo el
saber anterior al siglo XIX; en tanto que la fundamentación científica es más
moderna, por haber sido posterior al nacimiento de las ciencias humanas, que
emergieron hace un siglo del proceloso piélago de la filosofía.
Fundamentación filosófica
Huelga recordar que la única fundamentación indagada es la de la pedagogía; que
para nada nos referimos ahora a la teoría de la educación. Sí debemos, no obstante,
delimitar nuestro estudio a los aspectos teóricos de la pedagogía contrapuesta a la
práctica educativa, de la que obviamente prescindimos ahora. La fundamentación
filosófica aquí contemplada abarca a la pedagogía general, sistemática o
fundamental; en una palabra, a cuanto tenga categoría científica, en sentido estricto,
sobre educación.
En una revisión diacrónica de este tema nos hemos de referir, en primer lugar, a la
fundamentación en la política. El primer teórico, con nombre propio y autor de obras
llegadas a nosotros, fue Platón quien, aunque puso últimamente en la metafísica la
fundamentación de la pedagogía en una aproximación más directa, insertó en su
política la concepción educativa. En La República, como parte integrante de la ciudad
utópica por él soñada; en Las Leyes, como realidad innegable de la ciudad
verdaderamente existente. A tos responsables de la república les incumbe la
formación de los tres tipos de ciudadanos, necesarios para su mantenimiento; a los
más inferiores, a los de naturaleza menos privilegiada, se les prepara para que
sepan realizar las labores conducentes a la conservación de la ciudad; a los
guerreros o guardianes se les preparará a fin de que sepan defenderla de los
ataques de los enemigos; y por fin los magistrados, llamados a gobernar, han de
Cuarto Semestre 25
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
“No puede negarse, por consiguiente, que la educación de los niños debe ser uno de
los objetos principales de que debe cuidar el legislador; dondequiera que la
educación ha sido desatendida, el Estado ha recibido un golpe funesto... Como el
Estado todo sólo tiene un solo y mismo fin, la educación debe ser necesariamente
una e idéntica para todos sus miembros, de donde se sigue que la educación debe
ser objeto de una vigilancia pública y no particular... La ley debe arreglar la
educación, y ésta debe ser pública”.
Cuarto Semestre 26
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
No ha quedado en filosofía, sino que como toda decisión política, esta doctrina ha
impulsado a los regímenes absolutistas y nacionalistas totalitarios de la Europa
moderna, a controlar y dominar en exclusividad la educación del pueblo. Tal el
camino seguido por el social- nacionalismo alemán; y tal el imitado por la teoría
marxista de la educación. Es más, también en constituciones democráticas
contemporáneas pervive, escondida, la misma idea: la fundamentación poli tica de la
pedagogía. ¿Qué otra cosa defendió J. Dewey, cuando ideó una forma apta de
educación para la democracia americana, forma encarnada en su instrumentalismo y
en el progresismo pedagógico al que da origen? La única forma de asegurar la
constitución americana es una formación ciudadana e individual de cara a la
participación, porque sólo los pueblos cultos están preparados para participar.
Y desde esta teoría alentada por Aristóteles y la visión salvífica cristiana, llegamos al
empirismo inglés, en el cual Locke reitera la doctrina de la fundamentación ética de la
pedagogía. El hombre, al nacer, es indiferente en el terreno ético; no hay innatismo
en el conocimiento, y tampoco hay inclinaciones buenas o malas en el momento de
abrir los ojos a la luz; el hombre no nace bueno ni malo, sino éticamente indiferente.
Cuarto Semestre 27
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Cuanto el hombre llega a ser se lo debe a la educación que es ante todo, una
disciplina moral, fruto de un hábito de autocontrol. La virtud es la primera condición
del gentleman, y sin ella no podríamos triunfar socialmente, pues gracias a ella
somos apreciados por los demás. Y entre los fines de la educación está la formación
de hábitos, uno de los cuales es la virtud o hábito moral.
Cuarto Semestre 28
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Cuarto Semestre 29
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
— Cuando existe indecisión, duda o disputa sobre la “vida buena”; es decir, la vida
que debemos aprobar o seguir; puede tratarse de un problema de contenidos del
currículum, de procedimiento metódico en la disputa, de evaluación de las técnicas
docentes a través del análisis, procedimientos administrativos que no puedan ser
evaluados por las ciencias exactas.
Cuarto Semestre 30
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
“Filosofía significa, o por lo menos debe significar para nosotros en este libro,
concepción del universo. Su objeto es la integración de todos los conocimientos en
una concepción total...; la filosofía es la ciencia
El reduccionismo filosófico establece una igualdad entre filosofía y pedagogía, sin dar
preferencia a ninguna de las dos, puesto que hay quien reduce la pedagogía a
filosofía y también quien reduce la filosofía a pedagogía. La Ilustración francesa fue
el primer movimiento culturalista que estableció la igualdad entre filosofía y
pedagogía, al sostener que todo había de acabar en educación del pueblo, incluida la
literatura. Arrastraron este lastre algunas teorías pedagógicas de los siglos XIX y XX.
Podemos citar tres autores como ejemplo de este reduccionismo. Sea el primero el
psicólogo norteamericano Stanley Hall: “La sola filosofía verdadera, rica y completa,
es la que dirige a la pedagogía”. G. Dilthey es ambiguo e indeciso en esta cuestión:
“Lo que explica que desde un punto de vista general, la floración y fin de toda
verdadera filosofía es la pedagogía en su más amplio sentido: teoría de la formación
del hombre”. “Si una teoría no introduce ninguna diferencia en el trabajo educativo,
tiene que ser artificial”.
Cuarto Semestre 31
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
A esta primera definición añade otra que da matiz social a la educación. Esta misma
actitud mantiene la italiana Ma. Montessori, quien, por su formación médica,
pretendía fundamentar biológicamente la educación no sólo de los niños deficientes,
sino de los sanos y normales.
Cuarto Semestre 32
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
sentimientos, tímido esbozo de una psicología empírica, sin que hubiese renunciado
aún a sus muletas filosóficas. El educador es deficiente, siempre que ignore a la
psicología: “Yo por mi parte, durante veinte años he acumulado metafísica y
matemáticas y, además, observaciones personales, experiencias y experimentos, sin
hallar más que los fundamentos de la verdadera idea psicológica. Y el móvil de estas
nada fáciles”. (3)
CONCEPTO DE EDUCACIÓN
El concepto de educación es sustancial en una antología de Corrientes
Contemporáneas de la Pedagogía por ser el factor estratégico de desarrollo que
permite el aprovechamiento de las oportunidades, haciendo posible que los
integrantes de la sociedad sean agentes de cambio en el desarrollo, al adaptarse al
ritmo de vida que la evolución exige.
La palabra que fue usada pare significar el concepto implicado en “educación” fue el
de chanza, que denoto las dos clases de ayuda que los adultos pueden prestar a los
seres en desarrollo: la material, mediante el alimento y la protección; la psicológica
mediante el control y la educación. Aún hoy el sustantivo “crío” se aplica a aquel
hombre que precise del auxilio de un adulto; la belleza del termino radica en cierto
paralelismo con la palabra “crear’, reservada para la aparición de algo, procediendo
de la nada por virtud divina, Como si por la educación se crearan realidades
inexistentes y salieran, a su modo, de la nada.
Cuarto Semestre 33
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
La crianza, con su doble alcance (material y espiritual) nos habla de la doble atención
que los adultos han de prestar al ser en desarrollo; materialmente, las atenciones van
mas dirigidas al cuerpo, y solo a través de él llegan a lo psíquico, que precisa unos
fundamentos biológicos desarrollados y sanos; espiritualmente, las atenciones se
dirigen a lo psíquico, aquella parte más noble del hombre en la cual tienen realidad
las funciones mas espirituales y típicas del ser humano.
Se cree también que puede derivarse del vocablo latino educare, que tendría el
significado de guiar o conducir hacia afuera, Como queriendo indicar que desde
dentro, del interior del hombre, de su potencialidad radical va manifestándose a la luz
cuanto ha recibido de sus progenitores y de la naturaleza; que la educación es una
conducción.
Cuarto Semestre 34
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
La actitud táctica, en segundo lugar, supone un giro copernicano, porque huye del
mundo de las ideas para situarse en el de los hechos concretos; en este caso, no
preocupa el concepto, sino el hecho educativo, y se determinan los factores en él
intervienen. Si, a excepción de Platón, en la actitud conceptual se olvidó el carácter
social de la educación, en esta segunda actitud la dimensión sociológica es, esencial,
ya que se contempla el hecho de la educación encuadrado en la órbita de la
sociedad, bien sea como trasmisora de cultura, bien como institución, bien como
condicionante, bien como arbitro que fija los contenidos de la información según las
necesidades de las épocas y de las comunidades para las que se educa. La actitud
táctica es una actitud psicosocial, que atiende a la vertiente individual y social del
hecho educativo, estudiados por la psicología y la sociología de la educación.
Cuarto Semestre 35
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Idealistas
Platón: son varias las definiciones sobre educación en las leyes; “hemos dicho, y
con razón, que una buena educación es la que puede dar al cuerpo y al alma toda la
belleza y toda la perfección de que son capaces”; “la educación es el arte de atraer y
conducir a los jóvenes hacia lo que la ley dice ser conforme con la recta razón y a lo
que ha sido declarado tal y como lo más sabio y más experimentados ancianos”.
Cuarto Semestre 36
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Realistas
Locke:”el llegar a poseer una mente sana en un cuerpo sano es el fin de la
educación. No es de la incumbencia de la educación en perfeccionarle al muchacho
en ninguna de las ciencias, pero sí, por medio de ellas, abrir y estimular las mentes
para disponerlas lo mejor posible para adoptar cualquiera, cuando llegue el momento
de optar por una rama del saber”.
Herbart:”la educación tiene por objeto formar el carácter en vista de la moralidad”;”es
el arte de construir, de edificar y de dar las formas necesarias”.
Naturalistas
Rousseau:”la educación es obra de la naturaleza, de los hombres, o de las cosas”.
“La educación es el arte de educar a los niños y formar a los hombres”. “La
educación no es sino la formación de hábitos”.
H. Spencer:“la misión de la educación no puede ser otra que la de prepararnos a
vivir la vida completa”.
Perennialistas
Aristóteles: “desde la primera infancia, como dice muy bien Platón, es preciso que
se nos conduzca de manera que coloquemos nuestros goces y nuestros dolores en
las cosas que convenga colocarles, y en todo esto es en lo que consiste una buena
educación”.
Cuarto Semestre 37
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Culturalistas
Dilthy:”por educación entendemos la actitud planeada mediante la cual los adultos
tratan de formar la vida de los seres en desarrollo”.
E. Spranger:”educación es una formación esencial del individuo unitiva y
organizada, posible de desarrollo, provocada por influencias culturales, que capacita
para valiosos rendimientos y sensibiliza para valores culturales”.
Psicosocial
García Yague:”educación es la actividad que ayuda a los seres que entran en
relación a interpretar de forma coherente y profunda la existencia, a integrarse
eficientemente en ellas y a superar la lucha por mantener el equilibrio, la unidad y los
fines personales ante un contorno exigente y desordenado”
Analistas lógicos
Peters:”el ser educado implica el dominio de ciertas prácticas, el conocimiento y la
comprensión de principios. Para que este ideal se concrete, es necesario aprender
una gran cantidad de cosas diferentes. En consecuencia, es lógico que
comencemos a considerar la existencia de más de un proceso educacional”. Los
procesos educacionales son: “el entendimiento, la instrucción y aprendizaje por
medio de la experiencia, la enseñanza y el aprendizaje de principios, la transmisión
del pensamiento crítico, la conversación y el hombre total”.
Cuarto Semestre 38
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Cuarto Semestre 39
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
La teoría del alemán Francisco Brentano sobre la intencionalidad del acto psíquico es
útil en este sentido, lo mismo que la referencia del acto humano en Karl Jaspers. La
educación es una actividad de esta índole; sin ella, no sería acto específicamente
humano en la mente de estos dos filósofos. Nada se desbarata con ella tal y como
medrosamente temiera Rousseau, cuando inculpaba a la sociedad de corromper a
“Emilio”; lo realmente sorprendente es ver que la artificiosidad que la educación
postula es magnificente y engrandecedora, mientras que la espontaneidad de la
naturaleza puede ser perfeccionada múltiplemente.
Si la verdad no fuera comunicable, habría tenido razón el sofista Gorgias, en las que
el hombre es un islote perdido en el mundo, incomunicado a incomunicable. La
Cuarto Semestre 40
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Cuarto Semestre 41
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Cuarto Semestre 42
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Cuarto Semestre 43
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
La educación es una función social, faceta muy destacada por quienes subrayan el
carácter social de la institución escolar, cosa hoy sumamente frecuente, a pesar de
que las teorías sean poco socialistas o sociales, o socializadas. Es tan fuerte el
influjo de la sociedad en la educación y viceversa, que no puede olvidarse la
dimensión social de la educación.
Cuarto Semestre 44
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Clases de educación
No pretendemos entrar en detalles de clasificaciones y taxonomías; sólo abordamos
esta cuestión, porque nos persuade más de la complejidad de la educación, ya de su
complicada y, en consecuencia, dificulta el vaciarla en una fórmula definitoria.
Las instituciones están creadas por la sociedad para satisfacer necesidades básicas
del grupo; la familia da seguridad y alimento, la Iglesia satisface el sentimiento
religioso, el Estado protege, la escuela hace real la instrucción y la formación. La
educación realizada en la institución escolar es una educación institucional. La
característica típica de la educación institucional es ser realizada mediante la relación
personal entre educador y educando de una manera técnicamente regulada.”
Sociológicamente puede decirse que la educación institucional es una acción
organizada, ejercida por agentes especiales y con medios especiales.” La educación
institucional se reviste de distintivos propios de los tiempos y del grupo social que
más presión sobre ella; en la organización patriarcal romana esta dominada
Cuarto Semestre 45
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
EL PROCESO EDUCATIVO
Cuarto Semestre 46
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
De aquí que el proceso educativo sea una antropogénesis y sea convertible con los
procesos de hominización y humanización, mediante los cuales el hombre evoluciona
biológica y entitativamente, técnica y culturalmente, se adapta al medio y se torna
motor impulsivo de engrandecimiento. La humanización tiene un sentido filogenético
y ontogenético; filogenéticamente el hombre ha llegado a ser tal en un prolongado
lapso de tiempo, y tanto más se humaniza cuanto más se aproxima culturalmente a
la plenitud humana. Ontogenéticamente, en cada biografía individual, se verifica un
proceso similar al de la especie, proceso que aquilata y similares, tan estudiados
hay por la antropología cultural. La mente humana ha evolucionado en sus bases
biológicas y en su configuración cultural, circunstancias que ha tenido presentes la
teoría educativa para acomodar la educación al lugar y tiempo actuales. En los
mementos históricos contemporáneos la humanización es más ardua, pero más rica
y amplia, porque nos fijamos metas mas ambiciosas y disponemos de técnicas más
eficaces. La hominización, como, evolución filogenética, no ha terminado aún, pues
los biólogos comprueban el desarrollo constante del cerebro humano, y la inmadurez
grande aún , del cerebro interno, al que corresponden las funciones emocionales a
instintivas. La hominización es un proceso de la naturaleza, y la educación sólo
puede influir sobre ella de forma indirecta, a través de la estimulación ambiental que
demanda aceleración y adaptación al sistema nervioso para relacionarse con el
medio. La humanización, sin embargo, es tarea educativa, y constituye la
antropogénesis de cada individuo, sujeto indiscutible de educación.
Desde otra perspectiva, el proceso educativo es el esfuerzo diario por adquirir mayor
autonomía y responsabilidad, a la vez que una realización más acabada de la
persona.
La teoría naturalista ha dicho que la naturaleza del hombre, tal y como, ha salido de
su autor, es el principal elemento del proceso educativo, y ha subrayado la
espontaneidad del desarrollo, como lo verdaderamente sustantivo.
Cuarto Semestre 47
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Cuarto Semestre 48
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
La teoría del análisis filosófico afirma, por boca de R. S. Peters, profesor del
Instituto de Educación de la London University, que “el concepto de educación no se
refiere a ningún proceso particular, más bien contiene referencias a los criterios a
que deben ajustarse determinados procesos”. El criterio básico es el de rendimiento,
o mejor aún, el de tarea-rendimiento que nos depara un medio utilitarista, externo y
evaluable de entender la educación. Peters no habla en singular del proceso
educativo, consecuente con sus principios, sino de procesos educacionales;” y si se
le urgiese a que indicase cuál es el verdadero proceso de educación respondería que
Cuarto Semestre 49
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
la iniciación, en el sentido de que una persona que aprende es iniciada por otra en
algo que deberá apropiarse.
El hombre es un proceso espiritual nunca cumplido, tal y como han enseñado las
antropologías de signo dialéctico Hegel, O. Gentile, y las de solera evolucionista
darwiniana. La verdad es que el hombre es continuo cambio y evolución; hay que
prepararle para ese cambio y esa evolución, y esto y no otra cosa es educar. El
proceso educativo no es clausurable en el tiempo, porque jamás se puede dar por
realizada una persona, en tanto aliente en ella el espíritu de vida. La historia de cada
uno es un libro inconcluso, en el que los capítulos se suceden, cuando al margen de
lo anecdótico el hombre es novedad.”
Cuarto Semestre 50
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Cuarto Semestre 51
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Cuarto Semestre 52
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
La razón ordenadora, elemento esencial fue muy tenido en cuenta antes del
descrédito de los racionalismos y de los movimientos neokantianos y antes de que
los “irracionalismos” intuicionistas y axiológicos sustituyeran las ya poco fidedignas
doctrinas racionalistas. Así como las tesis tomistas han sido muy divulgadas en
Occidente, cuanto se refiere al estudio del elemento esencial educativo ha sido
materia reservada a eruditos. Para el tomismo el elemento esencial del proceso
educativo es la actividad ordenadora de la razón del educando, o la luz de su
inteligencia o entendimiento agente, vieja herencia aristotélica. Alrededor de este
elemento esencial se habla de elementos instrumentales primarios, que son los
primeros principios o principios fundamentales; y de elementos instrumentales
secundarios, es decir, la adquisición de conocimientos, que suponen el paso de la
inmadurez a la madurez cultural o contenidos de la enseñanza aprendizaje. Lo
admisible es atribuir a la razón una especial intervención en el proceso educativo, tal
y como, con otra perspectiva, se ha dicho de la inteligencia.
Cuarto Semestre 53
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
1. Los elementos tienen origen fuera del educando, limitando este a mero receptor de
la ciencia y perfeccionamiento, que le son otorgadas por el entorno.
Cuarto Semestre 54
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Cuarto Semestre 55
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Cuarto Semestre 56
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Cuarto Semestre 57
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
La palabra alemana tiene una clara raíz, que hace relación a un modelo o ideal, que
es una manera muy germana de concebir teleológicamente la educación; formación
significa configurar una “imagen”, moldearla, plasmarla en un ser real. Entre nosotros
se le ha dado el sentido de dominio de un oficio, y se ha reservado actualmente a la
preparación laboral, a la que se le llama “formación profesional”
La formación es posible allí donde la vida late con unas estructuras concretas, que
dan oportunidad de que existan diferentes “formas de vida”, que ha sido igualmente
una expresión germánica.” La evolución de las especies va moldeándolas y
plasmándolas en sus modos de ser presentes do acuerdo con las estructuras
inscritas por la naturaleza, hacia las cuales han ido aproximándose mediante
procesos de adaptación y asimilación. El hombre, además de las estructuras vitales,
ha sido creado según el patrón de la imago Dei y del “hombre nuevo”,
formulaciones bíblicas demasiado conocidas en Occidente, como para ser inactivas a
la hora de discurrir sobre el proceso educativo del hombre; es decir, que hay factores
especulativos, biológicos, místicos y religiosos justificantes del concepto de
formación, como sinónimo, en profundidad, del de educación.
Cuarto Semestre 58
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Cuarto Semestre 59
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Capítulo II
Los Autores
Cuarto Semestre 60
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
TRADICIÓN RENOVADORA
Como es fácilmente constatar, las reformas generales coinciden con las grandes
conmociones que atraviesan un país o un conjunto de países, sean conmociones
simbólicas o revolucionarias. No debe, por tanto, extrañar que, corno veremos en
seguida, el mayor número de reformas generales de la enseñanza en nuestro siglo
se haya producido, especialmente, en el transcurso de, o nada más acabar, las dos
grandes conflagraciones mundiales. En este sentido, es curioso comprobar cómo
países como Bélgica o Italia, que habían hecho el anuncio de grandes reformas
escotares al acabar la guerra, han ido siendo tanto más incapaces de llevarlas a
cabo cuanto más se han ido alejando los efectos de la conflagración. Por otra parte,
la escuela ha sido siempre y es —como tendremos ocasión de ver— un reflejo de la
sociedad y por ello es siempre sensible a los problemas que en esta se plantean. En
la enorme cantidad de críticas y recriminaciones La que la escuela da lugar hay que
ver, como lo hace G. Snyders «el signo de una sociedad en mutación que no
reconoce ya sus valores y su estilo en lo que la escuela propone, y que está en vías
Cuarto Semestre 61
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
de elaboración de un nuevo sistema escolar, a la vez por las obras teóricas y por
ensayos efectivos indisolublemente unidos a ellas>. Cuando en una sociedad
determinada persisten aún restos de una educación concebida para un tipo de
sociedad diferente, el conflicto es inevitable.
Cuarto Semestre 62
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Cuarto Semestre 63
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
unas estrategias, de unas «técnicas» que mediaticen la nueva filosofía. Así es como
plantea el problema R. Skidelsky: ¿qué buscaban los progresivos? La palabra
“técnica” responde en parte a esta pregunta. Los maestros progresivos se
horrorizaban ante la ineficacia de los métodos tradicionales. Los antiguos
educadores querían que el niño aprendiera, pero al mismo tiempo producían una
atmósfera de resentimiento contra el aprender. Intentaban ocultar una moral
descamada pero con demasiada frecuencia sólo lograban producir mentes verdes” y
personalidades pervertidas. Desatendían casi por completo campos enteros del
potencial humano: virtualmente ignoraban al chico normal. Los progresivos
propusieron reemplazar las técnicas coercitivas y de coro” por otras que estimularían
aprovecharían los intereses y potencialidades inactivos. Expresado de esta manera,
el movimiento progresivo se convierte en gran parte en una revolución en la técnica y
comprensión, que proporcionaría métodos más eficaces para la obtención de los
objetivos del educador, fueran los que fueran.
Cuarto Semestre 64
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Esta confianza, este respeto y esta libertad que se confieren al niño en particular, se
extiende también a la consideración del grupo-clase. Aunque, como en los demás
aspectos, el grado de autonomía y autogobierno que se permite a los escolares es
variable según los autores, todos ellos defienden, como veremos en seguida, la
supresión de la autoridad adulta en el ámbito escolar (y en el extraescolar, por
supuesto).
Cuarto Semestre 65
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Entre los que más han intentado potenciar este aspecto están, sin lugar a dudas, los
pedagogos « libertados» de Hamburgo, cuya práctica ha sido ampliamente discutida
por R. Schmid. Según este autor, los maestros de las comunidades escolares
evitaban toda intervención directa, ya fuera de aviso, de llamada al orden, como de
castigo o censura. De este modo, los escolares aprendieron que no podían contar ya
con sus maestros, sino que debían de hacerlo con ellos mismos y que los maestros
no deseaban ni poner jamás un orden, sino que lo esperaban de los mismos niños.
Sólo les quedaba cargar con esa responsabilidad y así lo hicieron») Debe, no
obstante, tenerse en cuenta, según los mismos hamburgueses, la defendían la
eliminación del maestro y su autoridad no significaba en la práctica la separación de
una persona y su
Cuarto Semestre 66
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
A.N. Whitehead supo plantear con claridad el problema al escribir que «sólo existe un
tema para la educación, a saber, la vida en todas sus manifestaciones. En lugar de
esta unidad simple ofrecemos a los niños: Álgebra que para nada sirve; Geometría,
de la cual nada se saca; un par de idiomas nunca dominados; y, finalmente, la más
monótona de todas, la literatura, representada por obras de Shakespeare, con notas
filosóficas y cortos análisis de argumento y carácter. ¿Es posible afirmar que una la
semejan te representa la vida?» Si los programas tradicionales estaban
determinados no por requisitos temporales o mundanos, sino por los temas eternos
de la humanidad los educadores progresivos estaban con vencidos de que las
experiencias cotidianas de la vida eran mucho más capaces de despertar el interés y
de proporcionar temas para las «lecciones» mucho más instructivos que los
proporcionados por los libros. Buena parte de los educadores creían que lo más
importante del aprendizaje tenía lugar fuera de las aulas —ten la vida—; si a esto se
le teme que se buscan experiencias vividas y directas, que se anhelaba lo
imaginativo y lo intuitivo mucho más que lo racional, se comprendería perfectamente
que muchos educadores se vieran impulsados a salir de la escuela para buscar, en
contado con la naturaleza, nuevos contenidos para la enseñanza. A muy pocos de
los nuevos pedagogos les gustaba que sus alumnos aprendiesen en los libros; en el
mejor de los casos, los consideraban suplemento como de los demás modos de
aprender.
Cuarto Semestre 67
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Los autores
La larga historia y la extensión de la Escuela Nueva, a las que nos referimos al
principio, hacen que este movimiento tenga un importante elenco de autores entre
los que existen diferencias que van desde detalles anecdóticos hasta principios
básicos sustanciales. Es habitual dividir la historia del movimiento progresivo en Las
etapas siguientes: en primer lugar, La que ya hemos calificado corno etapa
«individualista, idealista y lírica», que es la etapa romántica de la Escuela Nueva;
Rousseau, Pestalozzi, Froebel, Tolstoy, Key son nombres que van asociados a esta
primera oleada de reformadores segunda es la etapa de los grandes sistemas, la que
más autores, obras y experiencias proporcionó al movimiento; Dewey, Montessori,
Decroly, y Ferriére caracterizan esta fructífera etapa del movimiento. Puede
distinguirse un tercer momento hecho emparejado con el anterior— surgido sobre
todo a raíz de la guerra de 1914-1918, entre quienes se puede distinguir a los
franceses Cousinet y Freinet, los ingleses Neill, Reddie y Hahn, a los americanos
que pusieron en marcha nuevos planes experimentales y a los alemanes que en las
escuelas de Hamburgo practicaron la «camaradería». Hay, a nuestro juicio, un
momento de madurez de la Escuela Nueva que es sistemáticamente y dejando de
lado en las clasificaciones habituales esta etapa de madurez, cuya materialización
podrá ser el Plan Langevin-Wallon para la reforma de la revolución francesa tendría
sin lugar a dudas en Henny Wallon su más eximio representante.
Puesto que aquí no podemos —ni estamos interesados en— centramos en todos
ellos, que sea necesario justificadamente las elecciones que hemos hecho. La que
menos necesita justificación de todas es la de Rousseau; nadie duda que él está en
el origen de los movimientos reformista en educación en las páginas que le
dedicamos, nos ocuparemos sólo de su obra pedagógica clásica: el Emilio.
Cuarto Semestre 68
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Célestin Freinet caracteriza toda otra etapa del movimiento de la Escuela Nueva. Si
hemos dicho antes que con Wallon ésta llegaba al punto culminante de su desarrollo,
estamos igualmente convencidos de que la figura de Freinet así como su práctica
pedagógica, señala un punto de madurez para nosotros indiscutible Por su obra y por
la del movimiento a que dio lugar, por la riqueza y abundancia de sus escritos, por
sus caracteres y aportaciones originales, el estudio de Freinet es insoslayable.
Hemos renunciado sin embargo a renunciar a los grupos freinetianos franceses e
italianos por considerar que era suficiente en considerar a Freinet, y que los
materiales de que disponemos de estos grupos no nos permitían una profundidad. El
grupo Freinetiano italiano, una de las alternativas actuales más vigorosas en
materia de educación, no se limitó a repetir o a adaptar para Italia las ideas da
Freinet, sino que presenta caracteres muy originales y divergencias importantes con
respecto a su inspirador: el libro de Fiorenzo Alfieri El oficio del maestro, los de Mario
Lodi y otros.(9)
Cuarto Semestre 69
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Cuarto Semestre 70
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Cuarto Semestre 71
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Por tanto, la educación del individuo depende de esta interacción entre pedagogía y
política, que constituye una racionalidad científica. Además, la entrada en la sociedad
condicionará el aprendizaje de la represión cultural. Rousseau no disocia la política
de la moral. Si él es “pueblo con el pueblo”, lo es con el propósito de combatir la
desigualdad y los desórdenes sociales e instituir el contrato social.
Cuarto Semestre 72
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Cuarto Semestre 73
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Cuarto Semestre 74
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
purificación, del amor que es, al mismo tiempo, odio hacia si mismo y amor hacia el
otro, así como odio hacia el otro y amor hacia sí mismo; y del matrimonio como
fuente de libertad y esclavitud. En el mismo orden de ideas, la educación es
sometimiento y libertad. Por otra parte, son numerosas tas paradojas que inducen a
la polisemia, tales como aquellas que se deducen de las relaciones psicoeducativas
entre la vida y la muerte, o entre ganar y perder el tiempo. Como podemos ver, esta
polisemia deriva de los sentimientos y de la temporalidad. En El Contrato Social,
volvemos a encontrarla en el campo de la dominación del pueblo, de la libertad y de
la democracia. En definitiva, este discurso polisémico propio del campo político
depende de lo factible. Ahora bien, las fronteras de lo factible pueden recorrerse,
siendo, además, posible extender sus aperturas. Debido a ello, Rousseau nos dice
que la transformación ética y sociopolítica es consecuencia de la complejidad de las
combinaciones y de las articulaciones de lo antiguo con lo nuevo, y de la
potencialización-actualización del proceso. Si aparenta llevar a lo absoluto un modelo
antropológico y un tipo de sociedad, es para estudiar su función de ruptura con el
mundo antiguo y las condiciones de emergencia de un mundo nuevo. Dicho de otro
modo, la interacción del sistema abierto con el sistema cerrado, y la dialéctica de
potencialización y actualización de los posibles significados, vuelve multipolar una
lógica de transformación pedagógico-política. Impregnado de una polisemia
significativa de su modelo de humanización, el discurso de Rousseau asume las
transiciones de la historia. Dentro de otra dimensión de tiempo y espacio, une lo
caduco a lo emergente, lo que subsiste a lo que desaparece y lo que surge a lo que
permanece oculto. El resultado, nos parece, es paradójico: Rousseau produce un
pensamiento pedagógico-político en esencia probabilística.
Desde nuestro punto de vista, la recíproca implicación entre pedagogía y política que
caracteriza toda visión de un cambio profundo en la sociedad, es productora de una
génesis. Cual fermento ya la vez fermentación, esta interacción constituye el proceso
fundamental a partir del cual Rousseau erige a su manera el tiempo y el espacio, la
temporalidad y la especialidad, en una concepción arborescente, múltiple y compleja.
De esa manera, en niveles diferentes e integrados del individuo (Emilio), del grupo
(La nueva Eloísa), y de la sociedad (El Contrato Social), estudia los fundamentos de
este proceso y de sus efectos más significativos. La coherencia de su proyecto
depende, como escribe en Emilio, de una triple formación del marido, del patriota y
del ciudadano, apta para la creación de una sociedad fundada en la familia, el pueblo
soberano, la patria, el Estado y, por tanto, la república. Esto es lo que intentaremos
demostrar al estudiar, sucesivamente, el contrato autoridad-libertad, la educación
negativa y la institución del sujeto de derecho.
Cuarto Semestre 75
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
El contrato autoridad-libertad
La noción de contrato, pilar del proyecto pedagógico-político de Rousseau, asume la
presencia de dos factores —la libertad y la autoridad— en interacción. ¿En qué
consiste el contrato en pedagogía y en política? ¿Qué es lo que constituye cada uno
de estos factores en el aprendizaje de la autonomía por medio de la herramienta y en
la soberanía política?
Cuarto Semestre 76
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Con todo, el preceptor debe “amar a la infancia”, al niño como tal y tratarlo de
acuerdo con su edad. De esa manera, considera a “ambos aprendices” de la
experiencia y del sentimiento, porque éstos son “nuestros verdaderos maestros”.
En definitiva, el contrato sólo es posible si los objetos, las cosas, y los hechos
exhiben el principio de realidad en que se fundamenta lo propiamente humano. A la
imagen del preceptor, se yuxtapone y combina la de la realidad externa. Por tanto, el
aprendizaje de la autonomía implica una interacción entre la autoridad del hombre y
la de los hechos, representando estas últimas herramientas a disposición del sujeto
en formación.
El objetivo estratégico fundamental es el de vivir libre y no contar más que con uno
mismo. Sin embargo, habida cuenta de su complejidad, es necesario aprender “a
sufrir” y “a morir” para afianzar el desarrollo del niño Emilio. La adquisición de
conocimientos y la producción de ideas también definen otros objetivos a alcanzar.
En el campo intelectual, parecen, sin embargo, estar subordinadas al propósito de
investigar y de “suscitar el amor a la verdad”, así como a la ciencia. Coherentes! con
estos objetivos, los medios elegidos vuelven a agrupar, en un orden descendente de
prioridad, a la naturaleza, las cosas y los hombres. ¿Por qué? Porque la concepción
pedagógica recalca la práctica aquella del mundo físico, que Rousseau asocia al
sentir de la propia existencia. En efecto, vivir es actuar y, como los hechos orientan a
la acción pedagógica, la experiencia impartirá las lecciones necesarias. Dicho de otra
manera, el aprendizaje de la autonomía se lleva a cabo mediante el uso de las
herramientas que representan las cosas, la acción. Se trata, en esencia, de servirse
de los instrumentos que nos ofrece la existencia, sin importar el mundo al que
pertenezcan. Si la vida concreta, fisiológica, permite poseer y emplear instrumentos
frente a la naturaleza, Rousseau no olvida la educación de los sentidos (ligada al
instrumento que es el placer. Por otra parte, los sentimientos y las pasiones que se
experimentan cumplen una función pedagógica instrumental —Rousseau emplea con
frecuencia el término instrumento de producción de humanidad. Así, la sociedad, los
Cuarto Semestre 77
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
“dejad venir al niño” y a sus preguntas, a fin de imprimir los ejemplos externos “en su
mente, con la imagen que mejor le convenga”, lo que hace es construir la lógica
preestablecida y potencial de las conductas del niño. Además, prefiere que el niño
“no haga nada contra su voluntad”, porque debe experimentar el deseo de atender.
Pero, si “a él corresponde desear aquello que habrá de aprender”, al maestro
corresponde “suscitar hábilmente este deseo y ofrecerle los medios para satisfacer
lo”. Así, la interacción maestro-alumno se lleva a cabo de una manera genética, dado
que el maestro materializa aquellos estímulos inductores del deseo del alumno. En
consecuencia, el fundamento mismo del racionalismo de Rousseau parece radicar en
el deseo del niño, confrontado con la realidad de las cosas. Sólo hay reconstrucción
de los objetos en la medida en que el deseo del alumno se manifieste bajo la forma
de peticiones dirigidas al maestro. Tal es, afirma Rousseau, la condición esencial
para la búsqueda de la verdad y de la ciencia. De ahí se desprende que la
modernidad de Rousseau se expresa en una tesis suya, según la cual el deseo del
sujeto en formación es capaz de construir una racionalidad distinta. Posición
antidogmática, si la h contradictoria del modelo apriorístico; nos indica, sin embargo,
que este modelo es inductor del proceso de cambio de los sujetos, el cual se verifica
en función de sus deseos, de sus capacidades conscientes e inconscientes, de un
potencial que el maestro, portador del modelo, tiene obligación de actualizar y con
formar. Dicho en otros términos, el proyecto de ruptura pedagógico política que
subyace al contrato autoridad-libertad tiene su origen en la afectividad de las
personas. Sólo puede existir bajo la condición de que los más orgánicos de los
Cuarto Semestre 78
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Los parámetros autoridad y libertad funcionan dentro del marco de una interacción
caracterizada, al parecer, por una problemática de la alteración. En efecto, no
obstante sus miras desarrollistas, el proyecto es descrito en términos de esclavitud,
sometimiento y constricción. De manera más profunda aún, lo pedagógico es ligado
al sentimiento de la muerte: “No sabría enseñar a vivir a quien esté obsesionado por
evitar la muerte”. Más allá de la dialéctica vida-muerte, se encuentra la idea según la
cual ser educado pone en juego un proceso de cambio de la persona, de las
representaciones del ser. Aquello que deja de existir una vez consumado el acto
pedagógico. Si el objetivo es integrarse a la humanidad por la vía social, Rousseau
enuncia con lucidez y bajo forma de lítote, el objetivo y el efecto de la educación.
Cambiar mediante la educación equivale a admitir la muerte del ser viejo. De ahí que
para Rousseau el educador es un personaje importante que tiene entre sus manos la
vida y la muerte del niño, esto es, una especie de taumaturgo. Por tanto, su
capacidad pedagógica de transformación del otro depende de la adhesión del
alumno, o sea, del reconocimiento de su autoridad.
Debido a ello, la autoridad es una cosa necesaria: significa ser amado, respetado por
el alumno, a condición de que el maestro se entregue y ame a los demás. Como
Cuarto Semestre 79
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Rousseau reconoce que la infancia posee sus propias maneras de ver, pensar y
sentir, sugiere al maestro cuidarse de no provocar su resentimiento al imponerle su
voluntad. Al contrario, se trata de dirigir al niño, con la fuerza de las cosas, hacia
donde se quiere, “por las simples leyes de lo posible y de lo imposible”. Sin embargo,
la ambivalencia complica la interacción entre los dos factores, en la medida en que
se hace difícil distinguirlos. Rousseau, refiriéndose al alumno, hace el siguiente
análisis: “crea él que siempre es el amo, y sedlo vos de verdad. No hay sujeción tan
completa como la que presenta la apariencia de la libertad, porque así está cautiva la
voluntad misma”. Concluido el papel del preceptor, la autoridad de éste permite al
alumno convertirse, a su vez, en autor y, así, construir su propia imagen de la
autoridad. Sin embargo, semejante formación depende de la ilusión que se haga el
alumno de ser poseedor de la autoridad. Considerar la libertad del alumno como una
representación de la dependencia es una condición que permite la apropiación
permanente de esta imagen. De esa manera, la libertad no sería más que una
recíproca ilusión de la ilusión de autoridad.
Por tanto, no existiría tal cosa —deja entender Rousseau—, y esta filosofía de la
libertad nos la describe como pura invención del espíritu, una ilusión que la vivencia
pedagógica de la captación necesita. Asimismo, sería de idéntica naturaleza para
aquellas personas sometidas a una lógica de encerramiento. Entonces, se podría
hablar de la libertad como de una aceptación de la necesidad. Y la labor simbólica
exigiría concebir a la autoridad como una imagen inductora de esta aceptación. En
efecto, Rousseau insiste mucho en esta acción pedagógica de la dialéctica
imaginario-real-simbólica: “...sólo lo que quisiereis que haga, debe él querer”. Al
confundirse el poder y la autoridad del maestro en la noción moral de voluntad, la
libertad se convierte en un instrumento pedagógico de aprendizaje en función del
deseo del niño. Estimular el deseo del niño supone despertar sus ilusiones con toda
su potencia. De ahí se desprende que una pedagogía de la ilusión debe conducir —
luego del enfrentamiento del deseo ilusión con la realidad, a través de la libertad-
ilusión— a la destrucción de las ilusiones, a la toma de conciencia de las carencias y
a una captación certera de lo real. Desde este punto de vista, el maestro modula su
intervención en función del avance del proceso. Su actitud cambia a fin de volver
más frustrante, más perturbadora la relación, en tanto que las representaciones del
alumno evolucionan median te una simbolización genética. Aquí, diferenciaremos el
contenido de las obras a fin de esclarecer esta evolución. También La nueva Eloísa
des cribe la evolución de la autoridad. Sin embargo, dentro del contexto de una
comunidad y de la relación amorosa, dicha autoridad asume dimensiones
específicas. A partir del sentimiento, la dramatización impulsará a Saint-Preux-
Rousseau a proyectar en la persona de Julie su culpabilidad de iniciador, de maestro.
Anhela hacerla culpable, por ser ella la autoridad que le confiere el derecho a morir y
la responsabilidad de su propio tormento amoroso. Puesto que es la autoridad la que
dieta el anhelo de ser amado, la muerte se impone como remedio al dolor causado
por el desamor. Así, el diálogo amoroso se entabla a partir de un intercambio de
agradecimientos, fundador de la transferencia de autoridad. Julie gobierna a dos
cuerpos. El resultado de ello es una sublimación de tipo religioso. Interviene el
respeto hacia el otro, porque la única autoridad reconocida es la figura cristiana y
Cuarto Semestre 80
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
divina del padre, de cuya imagen Julie es portadora. Para mayor seguridad, Julie
identifica a Saint-Preux con una figura paterna, de ese modo se interpone entre los
dos la prohibición del incesto, es decir, un principio de inviolabilidad. Parece buscar
una imagen no angustiante de autoridad, a fin de poder permitirse experimentar el
amor, o sea, el sentimiento. ¿Es ésta una etapa o una paradoja, considerando que el
desprendimiento habrá de ocurrir en ocasión de la consumación de su amor con
Saint Preux y de su matrimonio con Wolmar? O quizá, cuando Julie magnifica al
filósofo, al maestro del saber, es decir, una autoridad externa a su sentimiento,
Claire, su prima, fantasea una arcaica relación madre-hija con Julie; una regresión
que la protege contra la realidad. Además, dentro del matrimonio, la autoridad no se
disocia de la dialéctica constricción-libertad, en la medida en que ésta alimenta al
sentimiento conyugal.
Opera la sustitución al grado de crear una identificación autoridad = amor, “el padre
de la vida” y una nueva identidad. Es meta de la autoridad, concreta en la institución,
traer la libertad alas mujeres, a los amantes curados, al triángulo Saint-Preux-Julie-
Wolmar, a la comunidad y, por fin, la felicidad. Así, la autoridad trae consigo el orden,
combate lo fortuito, y reglamenta a la institución como una totalidad. Con su carácter
universal, dialéctico, instituye la necesidad, la libertad que consiste en “no estropear
al hombre de la naturaleza, adaptándolo a la sociedad”. Así, la autoridad crea un
nuevo modelo de hombre susceptible de modificar por egocentrismo la sociedad
ambiente. Ejerce sobre Saint Preux una suerte de efecto terapéutico el asentar su
identidad y su autoridad personal de filósofo en el corazón de la comunidad de
Clarens.
Cuarto Semestre 81
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
La soberanía política
El Contrato Social describe la esencia de los elementos que, sobre el plano político,
constituyen la soberanía política característica del contrato autoridad-libertad. ¿Qué
contenido atribuye a cada factor?
Primero, este contrato instituye un orden social, es decir, un derecho sagrado que
concreta una necesidad como base de todas las demás. No obstante, este derecho
es convencional y no natural. Ahora bien, por el hecho de que el hombre nace libre,
de una libertad natural inalienable, sin tener derecho a desprenderse de ella, no
existe fundamento alguno para la tiranía, la eliminación de la libertad. De ese modo,
Rousseau anhela la liberación del pueblo oprimido, cualquiera que sea. Luego
fundamenta el cambio político, y su legitimidad en la institución de la libertad,
excluyendo ésta una relación de dominación o el sometimiento.
Cuarto Semestre 82
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
concepción religiosa del poder civil, afirma la especificidad convencional del estado
social que asumen las leyes.
¿Cómo lograrlo?
No se trata de someter a una multitud, sino de regir a una sociedad. Sólo hay
sociedad si se crea una asociación. La pluralidad no debe impedir una ley, en un
principio unánime, de la sociedad. Por otra parte, tal asociación depende de una
primera convención, es decir, la del acto de creación del pueblo, “el auténtico
fundamento de la sociedad”. Dicho en otros términos, la noción de pueblo induce,
según Rousseau, las de bien público, de cuerpo político, en la medida en que
constituya un principio unificador de la sociedad. Cuando cada quien se une a todos,
obedeciendo a sí mismo y gozando de su libertad de derecho, existe una forma de
asociación defensiva, de protección de la persona y de los derechos de cada socio:
en eso consiste el contrato social.
Cuarto Semestre 83
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
En este sentido, Rousseau prevé una posible ruptura del contrato social cuando el
gobierno abusa de su poder y limita la soberanía. Así, la autoridad soberana sólo
puede sostenerse gracias al pueblo unido, que es quien posee la autoridad, y por
tanto, la legitimidad. Desde este punto de vista, la representación del pueblo por
diputados con funciones de legisladores, es una manera de imponer la voluntad
general, o sea, la autoridad de la ley. Pero la representación implica un riesgo de
Cuarto Semestre 84
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
muerte del pueblo. Dicho en otros términos, Rousseau estudia las modalidades de
establecimiento de la ley, acto de soberanía política del ciudadano que instituye el
contrato social.
Por otra parte, como la voluntad general es indestructible, las asambleas del pueblo
no pueden menos que tener por objetivo intemporal el definir siempre la ley del orden
público. En este sentido, la pluralidad, condición de la libertad, no impide que domine
la sola voluntad general del pueblo, y que se practique el acto individual de soberanía
del ciudadano. Dicho de otro modo, la ley del pacto social supone unanimidad: el
reconocimiento de la autoridad que depende también de las voluntades particulares
asociadas. Sin embargo, las leyes, las instituciones, la religión y la ética deben
conservar la unidad social. Rousseau demanda entonces la b de una coherencia de
la autoridad en el establecimiento de la ley —qué es el acto más significativo de
soberanía política— y en la imagen que simboliza la articulación de la ley con el
sistema construido o habilitado. Ahora bien, semejante orden simbólico es posible
sólo si es activa la soberanía política, el soberano es pensamiento y acción en
permanencia. Y esto, al grado de que Rousseau afirmará que la soberanía no tiene
límites constitucionales. De se modo, el soberano tiene poder de autodisolución
sobre las instituciones, así como de modificación de los gobiernos; tanto puede
autoimponerse una ley como infringirla. Por consiguiente, no hay tal ley fundamental
para el pueblo y El soberano, por la sola razón de serlo, es siempre lo que debe ser.
En otros términos, el pueblo posee la autoridad soberana y todos sus atributos.
Garantiza la permanencia de una identidad política y asume, de hecho, todas las
posibilidades de evolución del orden simbólico. Por esto, la existencia de la
soberanía política del pueblo constituye un determinante esencial del contrato social
y una invariante de su evolución.
—o el soberano que define a éste como cuerpo político—, no puede haber autoridad
ajena al pueblo. La legitimidad proviene del pueblo, su acto de soberanía es ley, de
ahí que la autoridad del pueblo es soberana y, por ello, indivisible.
Cuarto Semestre 85
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Cuarto Semestre 86
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Pero todos ellos no dejan de ser precursores. Como escribe Piaget, «los nuevos
métodos sólo se han construido verdaderamente con la elaboración de una
psicología o una psicosociología sistemática de la infancia; la aparición de los
métodos nuevos data, por tanto, de la aparición de esta última>. La psicología
genética moderna está prácticamente, según Piaget, en el origen: los nuevos
métodos.
Estos métodos han ido utilizándose, casi de manera coetánea, en distintos países y
por autores no siempre relacionados entre si. De este modo, a principios de siglo
encontramos trabajando con el nuevo estilo y con una nueva concepción del niño y
su desarrollo a John Dewey en Estados Unidos. Dewey, uno de los más grandes
iniciadores de la nueva pedagogía, creó en 1891, en Chicago, su «escuela labora
tono» o «escuela experimental»; centrándose en los intereses y las necesidades de
cada edad, Dewey intentó dar en ella a los niños una educación intelectual adecuada
y una formación moral para la autonomía y la democracia. La finalidad de la
educación no era, para él, preparar al adulto que el niño llevaba dentro, sino ayudar a
éste a solucionar los problemas que el contacto con los medios ambientes físico y
social le suscitaba. El método empleado por Dewey era el del problema», que no era
otra cosa que la utilización con fines didácticos del método experimental del
Cuarto Semestre 87
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
En Italia, en sus Case dei Bambini, trabaja Montessori. En su trabajo con niños
atrasados, Montessori descubre una serie de principios que en seguida trasladará a
la educación de los niños normales. Ante todo, la libertad de los alumnos (piedra de
toque de la pedagogía científica» según Montessori); no sólo se permite al niño ser
espontáneo, sino que se alienta y estimula su espontaneidad.
Necesidad de la transformación
En 1921, en el Congreso de Caláis, se fundó la Liga internacional de la Educación
Nueva. De este Congreso escribiría Wa bastantes años más tarde, que «era el
resultado del movimiento pacifista que había sucedido a la Primera Guerra Mundial.
Pareció entonces que para asegurar al mundo un futuro de paz, nada podía ser más
eficaz que el desarrollar en las jóvenes generaciones, por medio de una educación
apropiada, el respeto a la persona humana. Así podrían florecer los sentimientos de
solidaridad y de fraternidad humanas, que están en las antípodas de la guerra y de
las violencias)); ya se ha visto cómo el movimiento de la Escuela Nueva nace,
fundamentalmente, a principios de siglo, pero la Primera Guerra Mundial espoleó la
conciencia de los educadores y el período entre las dos grandes guerras conoció una
actividad intensa, multiplicándose las iniciativas en busca de métodos nuevos. Y ello
por dos razones fundamentales: una acaba de ser apuntada por Wallon; si se
consigue que los niños y los jóvenes tengan una educación apropiada que les
enseñe la cooperación y la solidaridad, el fantasma de la guerra se alejará tanto
Cuarto Semestre 88
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
cuanto sean capaces de ascender las nuevas generaciones, imbuidas del nuevo
espíritu. La otra razón es apuntada por Ferriére en La educación autónoma (cuyo
subtítulo, dicho sea de paso, es Arte de formar ciudadanos para la nación y para la
humanidad) y en ella se señala a la escuela como uno de los culpables de la guerra:
«En todos los países de Europa la escuela se ha esforzado en formar al niño para la
obediencia pasiva, y no ha hecho nada, sin embargo, para desenvolver el espíritu
crítico, ni ha tratado nunca de favorecer la ayuda mutua. Fácil es ver a dónde hubo
de conducir a los pueblos ese adiestramiento paciente y continuo».
La Escuela Nueva, la Escuela Activa, intenta ofrecer una alternativa, intenta poner su
gran grano de arena en la transformación de la educación y, con ella, de la sociedad.
Cuarto Semestre 89
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Pero, como el mismo Ferriére lo señala, con demasiada frecuencia se encuentra aún
el foso que separa la teoría de la práctica, la psicología de la pedagogía. En realidad,
una y otra son mutuamente complementarias: «el único medio de hacer progresar la
práctica pedagógica es el de conformar su acción al método científico, edificando una
teoría justa basada en la experiencia práctica». La práctica nueva es, por lo menos,
tan fundamental como la teoría del cambio; y la práctica la hacen los maestros. De
ahí que se sienta la necesidad de un nuevo objetivo en su formación; no se trata de
que las escuelas normales enseñen otras técnicas, más adaptadas a las
necesidades y terminologías del momento; se trata de que sean capaces de imbuir
un espíritu nuevo en los maestros, otra concepción de la educación y unas actitudes
nuevas hacia el niño y el proceso educativo.
Cuarto Semestre 90
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Por lo que a los programas se refiere, la escuela tradicional recurre a la razón pura
con niños que no son capaces de ejercerla y utilizarla por falta de posibilidades y de
materiales adecuados; esto implica que se recargue cada vez más la memoria con
unos conocimientos que no tienen fin; así, las escuelas aplican y defienden lo que
Ferriére denominaba «el principio de diez incompetencia» sirviéndose de un tedio
cotidiano, acompañado de infusiones de lógica abstracta, de gramática, de
clasificaciones científicas, o de fechas históricas en altas dosis’. La escuela ocasiona
de esta forma el agotamiento que conduce a la mediocridad. Contenidos tan
antinaturales, tan antipsicológicos, no pueden ser impartidos si no es por la fuerza.
Los métodos escolares son, por ello, fundamentalmente autoritarios, impositivos.
Como si no estuviera claro que imponer al niño desde fuera una serie de ideas o
acciones que el adulto ha creado y decidido de antemano es una aberración que
apenas puede excusarse en la tradición y la comodidad; como si se ignorase que la
actividad forzada, realizada a regañadientes, ni es verdadera ni es útil ni creadora.
Nada hay más contrario a la naturaleza del niño que los métodos escolares; todas las
vidas de todos los niños caen bajo su yugo, a todas las sujeta y las moldea, y
permanecen bajo su acción horas, meses y años enteros. En donde reinaba la
alegría del vivir, la escuela hace que reine la inquietud. Donde imperaba el regocijo,
se impone la gravedad. En lugar del movimiento espontáneo exige inmovilidad; en
lugar de los gritos y las risas, el silencio. Y pretende que todo esto ha de ser así para
hacer hombres y mujeres dignos de este nombre. ¡Qué ilusión! Y este proceso
encuentra su culminación en los exámenes estereotipados e inmutables, fastos por
un doble motivo: primero, por ser un auténtico «lecho de Procusto de las inteligencias
que deben sufridos»; segundo, por haberse convertido en la llave que abre a los
adolescentes que la poseen las puertas del porvenir; el examen lleva al título y el
titulo a la discriminación. El examen tiende, además, a uniformar, con lo que no hace
sino reflejar una de las características de la escuela libresca, en la que cada clase se
parece a las demás clases, cada asiento se parece a los demás asientos y cada niño
se parece a los demás niños.
Cuarto Semestre 91
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
del niño está formada por dos realidades separadas, la escolar y la extraescolar; las
conductas y los hábitos de la una no pertenecen a los de la otra. Por lo demás, los
niños reaccionan de diferente forma. Los hay que se interesan por todo y que todo lo
soportan; estos son, para Ferriére el tipo por excelencia de la mediocridad en todas
las cosas, los «pozos de nada» que la escuela excava y que aceptan pasivamente lo
que les echen. Otros niños rechazan la educación que reciben en la escuela y
escapan como pueden de sus coerciones. Pero hay aún un tercer tipo de niños,
descrito por Ferriére con gracia: «Se somete, consiente y absorbe lo que le dais,
pareciendo abdicar de su autonomía; pero no os engañéis: lentamente,
subterráneamente, su naturaleza se desdobla.
Creéis tener ante los ojos un niño y tenéis dos en realidad: uno dócil, sumiso,
humilde, el cual no es más que una apariencia, una semejanza, una imagen
hipócrita; otro invisible que escapa a vuestra acción, que vive su vida, sobre el que
no ejercéis. y que se educa par sí solo, donde puede y como puede».
Hay dos leyes muy queridas por Ferriére la del progreso y la biogenética. Según la
primera de ellas, todo ser viviente progresa encaminándose a una diferenciación y a
una concentración que acrecientan y complementan sus facultades y energías. La
escuela tradicional prepara sus programas sin tener en cuenta el grado de
diferenciación de los niños a los que van destinados; así, como hemos visto un poco
más arriba, obliga a retener y memorizar sin coordinación. La escuela tradicional
aplica, de fuera a dentro, un barniz de conocimientos y una regla de vida artificiales,
que no sólo no son útiles, sino que son nocivas para el desenvolvimiento y progreso
psíquico del niño. La Escuela Nueva reacciona sosteniendo, por el contrario, que al
niño debe colocársele en un medio tan variado y abundante corno sea posible,
poniéndole Constantemente en presencia de hechos que activen su comportamiento
y soliciten su acción y reflexión. Este procedimiento evita, según Ferriére, el doble
escollo de la escuela tradicional que da a los niños demasiada materia abstracta y
que la da demasiado pronto para su grado de madurez. «El único verdadero
“conocimiento” es el que nace de los ensayos fructuosos e infructuosos repetidos y
grabados en el organismo bajo la forma de “engranes”» y sólo el verdadero
conocimiento hace posible el verdadero progreso. La otra ley tan destacada por
Ferriére es la ley biogenética: la Ontogénesis recapitula la filogénesis, el desarrollo
Cuarto Semestre 92
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Otro tipo de leyes tiene relación con los intereses de los niños y sus esfuerzos. Ya se
ha apuntado que el interés es el motor de la acción y, por ende, del conocimiento, así
corno que los intereses evolucionan con el desarrollo del niño. En efecto, las etapas
biogenéticas se revelan por el interés que manifiesta el niño y se realizan por el
esfuerzo que acompaña a la prosecución de los intereses.
Cuarto Semestre 93
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Esta escuela se asienta sobre el respeto a las necesidades físicas y psíquicas del
niño. Por otra parte, intenta responder activamente a esas predisposiciones e
intereses en una atmósfera de respeto al niño, de libertad, de actividad espontánea.
Cuarto Semestre 94
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Por lo que a la educación intelectual se refiere, se puede decir que lo que la Escuela
Nueva preconiza el primado de la acción. La psicología genética ha descubierto que
la práctica antecede a la teoría y nunca va detrás de ella; ha descubierto que nada
puede resistir a la acción cuando ésta tiende al progreso y además lo realiza. La
nueva pedagogía saca sus conclusiones: los cursos dictados deben ser prohibidos;
los manuales deben reducirse, si no suprimirse, para ser sustituidos por notas
elaboradas por alumnos y maestros; al niño se le debe colocar en presencia no de
ideas abstractas, sino de hechos concretos; su razón debe ser despertada por el
contacto asiduo con la realidad; se le debe hacer accionar y reaccionar, una y otra
vez, Frente a objetos visibles y el espíritu infantil debe ser llevado de lo concreto a lo
abstracto a través de un proceso de larga duración, sin intervención prematura e
intempestiva del pensamiento reflexivo adulto. Consecuentemente, en la acción se
liare todo el hinca pié que era de esperar: se intensifican los trabajos manuales; se
utiliza el juego profundamente “el juego es un verdadero trabajo por el ejercicio a que
da lugar, por el fin que marca a la actividad, por los medios que pone en acción y la
disciplina a la cual niño] se somete”. El nuevo espíritu introduce la vida en la escuela
y abre la escuela a la vida.
Cuarto Semestre 95
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Por otro lado, está el problema de los métodos en lo relativo a la educación moral. La
Escuela Nueva no impone poco nada en este terreno. Se limita a hacer posible la
autonomía de los escolares y a facilitarles el aprendizaje de la libertad. Según el
nuevo espíritu, el ideal al que se debe tender es a que el niño se conduzca a sí
mismo: tras un período más o menos largo de aprendizaje, todo niño debe llegar a
dirigirse a sí mismo. Al igual que las ideas que el niño ad quiere contra su voluntad
son estériles y muertas, mientras permanecen vivas las que han nacido de la
curiosidad y el interés sólo son morales los hábitos que se han adquirido no a través
del adiestramiento, sino por la experiencia de la relación con los compañeros, por la
reflexión personal sobre la vida y la acción propias. «La vida escolar, los roces con
los camaradas que ella lleva consigo, la lucha por la vida en pequeño con sus
choques dolorosos, pero también con sus alianzas, sus amistades, su práctica de la
ayuda mutua y del sacrificio hecho de todo corazón: he aquí la educación moral de la
Escuela Nueva»; una educación que tiende no a hacer al niño de una u otra manera,
sino a hacerle posible elegir el modo en que quiere hacerse a sí mismo.
Cuarto Semestre 96
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Piaget y la educación
Según Piaget, en los últimos años han surgido diferentes tipos de institutos
pedagógicos, con particulares orientaciones respecto de la educación. Pueden
distinguirse las academias de ciencias pedagógicas, que ocupan un puesto de honor
en las repúblicas populares del Este, los institutos de ciencias de la educación o
departamentos de educación ligados a las universidades, como facultades,
departamentos o institutos interfacultades, y los centros, oficiales o no, de
investigaciones independientes.
Cuarto Semestre 97
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
En cuanto a los fines y los medios, para Piaget estos últimos dependen más de la
psicología que de la sociología. Según él, Durkheim simplificó mucho las cosas
cuando afirmó que el hombre que va a educarse es producto de la sociedad y no de
la naturaleza; Piaget subraya que la naturaleza no se somete a la sociedad salvo en
ciertas condiciones y que conocerlas aclara, en lugar de dificultar, la elección de los
fines sociales. Estas tesis han ejercido influencia indudable en los diversos modelos
de planificación de la enseñanza a nivel mundial.
Cuarto Semestre 98
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Por otro lado, en relación con algunos aspectos de la didáctica especializada, Piaget
hizo algunas observaciones: los métodos de enseñanza de tas matemáticas las
consideraba un tanto paradójicos. Hay a su juicio estudiantes evidentemente
inteligentes en otros campos que fracasan consistentemente en matemáticas,
disciplina que puede concebirse como extensión de la lógica, “hasta el punto en que
actualmente es imposible trazar una frontera estable entre los dos campos”. Piaget
no concibe que personas bien dotadas para la elaboración y utilización de las
estructuras lógico-matemáticas espontáneas de la inteligencia se encuentren en
desventaja frente a problemas que se refieren en términos abstractos a aquello de lo
que derivan tales estructuras. El problema radica según él en la falta de criterio que
ha predominado para la adaptación de los métodos de enseñanza, al no ajustar
recíprocamente las estructuras operatorias espontáneas propias de la inteligencia
con el programa o los métodos relativos a los campos matemáticos enseñados.
Mediante este recurso, las estructuras más abstractas y generales de las
matemáticas contemporáneas se incorporan a las estructuras operatorias naturales
dé la inteligencia y del pensamiento mucho mejor de lo que lo hacían las estructuras
Cuarto Semestre 99
CINADE Análisis de las tendencias Pedagógicas en la Educación Superior
Otro problema pedagógico importante para Piaget fue el referente a la formación del
espíritu experimental. Tradicionalmente la enseñanza de laboratorio es una actividad
pedagógica menor. Se creía que la formación experimental podía suministrarse
iniciando al alumno en los resultados de experiencias pasadas o dándole el
espectáculo de resultados o demostraciones hechas por el profesor, como si
aprender a tocar guitarra pudiera lograrse con la mera observación. Para Piaget, la
formación experimental consiste más en desarrollar la inteligencia que en entrenar
eruditos o lograr prodigios de memoria. La enseñanza de la física ha planteado un
problema similar. Esta disciplina tuvo que esperar veinte siglos para nacer después
de las matemáticas, diferencia histórica que también apunta hacia la misma dificultad
de que lo experimental es más difícil de lograr que lo especulativo. Sin embargo
señala Piaget, el niño adquiere entre los 11 y 12 años y entre los 14 y 15 años los
instrumentos intelectuales necesarios para la experimentación propiamente dicha.
Estos instrumentos son de dos clases. En primer lugar, instrumentos de pensamiento
en forma de una combinatoria y de operaciones preposicionales que permiten oponer
las implicaciones y las no implicaciones, las disyunciones no exclusivas con las
exclusivas y toda otra serie de operaciones propias de! pensamiento formal, como ya
se ha visto. En segundo lugar, el adolescente adquiere ya la capacidad de disociar
estos factores en hipótesis previas y en hacerlos variar experimentalmente uno a
uno, neutralizando los otros o combinándolos de distintas maneras. Para quien no
entiende la terminología lógica, lo que el adolescente hace consiste en poner a
prueba distintas combinaciones de los factores en juego para resolver un problema,
para lo cual recurre a “hipótesis” o arreglos de combinaciones que probablemente
conduzcan a la solución del problema.
Piaget afirma que el niño, al pasar del nivel de las operaciones concretas a las
operaciones formales, ya tiene la capacidad intelectual de verificar hipótesis
experimentales; si esto es cierto queda claro que es precisamente en la escuela
donde deben desarrollarse estas capacidades, estimulando tempranamente el
espíritu experimental, insistiendo más en la investigación y el descubrimiento que en
la repetición.
Llaman su atención los métodos activos de enseñanza, por considerar que son
adecuados para promover la formación social del niño y por permitir que la acción
juegue un gran papel. Sin embargo, Piaget subraya el hecho de que las actividades
que el niño realice sean verdaderamente significativas y permitan el desarrollo del
espíritu experimental, si no puede caerse en el defecto más común de las escuelas
activas: convertirse en un taller de convivencia y de trabajos manuales.
Los métodos intuitivos son otra alternativa que Piaget considera en sus trabajos.
Señala que por lo general se limitan simplemente a proporcionar a los alumnos
representaciones imaginadas parlantes, ya sea de los objetos, de los mismos
acontecimientos, o del resultado de las posibles operaciones, pero sin conducir a una
realización efectiva de éstas. Piaget acepta que, si bien implican cierto progreso,
estos métodos no son de ninguna manera suficientes para desarrollar la actividad
operatoria. El conductismo, con su producto más clásico, la instrucción programada,
también fue analizado por Piaget. La instrucción programada, técnica de enseñanza
nacida del esquema estímulo respuesta, alrededor de los trabajos de HulI, Tolman y
en particular Skinner, es un enfoque que parte del modelo de la “caja negra”, es
decir, del modelo en el cual se hace abstracción de toda la vida mental para
ocuparse técnicamente del comportamiento en sus aspectos más materiales, por
tanto no busca explicaciones en la vida interna sino que pone en evidencia cómo las
leyes del aprendizaje se cumplen en terminas de conducta observable. El principio
de programación consiste en que el alumno avance paso a paso, sacando de cada
segmento de información las respuestas que el considere correctas o eligiendo entre
varias opciones, a manera de un examen de opción múltiple, para que a continuación
verifique si el resultado aportado o elegido por él es correcto o no, y de este modo
recibir una confirmación o retroalimentación (reforzamientos). Acerca de este
método, Piaget acepta que en los casos en que se trata de recibir información, como
en algunos aspectos de la enseñanza de las lenguas o de la geografía, queda fuera
de duda que la máquina proporciona los servicios reconocidos, en particular en
ahorro de tiempo y de instructores, ya que el material es típicamente de auto
instrucción. En lo que se refiere a contenidos que impliquen razonamiento, si bien la
máquina tiene cierta efectividad, a final de cuentas sólo conduce al fastidio y a una
cierta mecanización inútil.
LA PEDAGOGIA FREINET
Podemos considerar a Freinet como uno de los promotores de la nueva educación.
Intentó construir una pedagogía activa capaz de conciliar las exigencias de la
escuela llamada “nueva” con las propias del ajuste del niño a las necesidades de
aprendizaje impuestas por el mundo contemporáneo. Como señalan Leif y Biancheri
(1966):
No es por casualidad que encontramos reunidos hoy en día, bajo su autoridad moral,
procedimientos tan opuestos filosóficamente hablando como lo son el texto libre y la
expresión espontánea por una parte, y las máquinas de enseñar (cajas educadoras)
y la enseñanza programa (cintas educadoras), por otra.
La escuela debe centrarse en torno a la persona del niño, a quien se debe considerar
como un miembro de la comunidad. El niño debe desarrollar su personalidad en el
seno de una comunidad que le sirve y a la que debe servir.
¿Qué hace el aprendiz en la escuela moderna? Experimenta con la vida misma, sólo
después intervienen las reglas y las leyes. Al encontrarse inmerso en un clima
favorable que le incita al trabajo, el alumno de la escuela Freinet es activo, dinámico;
es “una llama a la que se alimenta”. No se siente presionado ni forzado, se confía en
él: él es dueño de sus propias necesidades y evoluciona libremente. Examina,
compara, prueba; dicho en otras palabras, puede proceder por tanteo experimental.
En cuanto al educador, funge como guía experimental que orienta el trabajo y evita
que la labor se torne árida o estéril. Su actitud es comprensiva y fraternal, es
responsable de la atmósfera que alimenta la necesidad de crear, realizar, construir,
una atmósfera que hace nacer la dignidad del trabajo.
Pare realizar esos principios, Freinet propone las siguientes herramientas, las cuales
pueden ser adaptadas a diversas circunstancias de tiempo y lugar.
El material de trabajo
El primer material mediante el cual Freinet se dio a conocer es la imprenta que,
además de incitar al niño a expresarse, permite la conservación y el intercambio de
textos producidos en clase.
Por último la naturaleza, a través del contacto directo y la observación que ella
permite es considerada como una herramienta privilegiada de aprendizaje. Las
clases de nieve, tas ciases “verdes” o las clases “rojizas” surgieron del
reconocimiento de la riqueza que constituye el contacto directo con la naturaleza.
¿Cómo utilizar las técnicas Freinet? Recordemos que la base de esas técnicas es la
libre expresión. Esta libre expresión se lleva a cabo mediante:
1. El texto libre. Los alumnos redactan, cada uno, un texto libre, no impuesto, ni
sugerido. La mayor parte del tiempo, los alumnos son alentados a presentar un texto,
porque este puede, eventualmente, ser seleccionado para el periódico escolar.
2. Elección del texto. Una vez terminada la redacción, los textos son leídos en clase
y, por voto mayoritario, un solo texto es elegido. Este texto se convierte en el centro
de todas las actividades de: español aritmética, ciencias, geografía, lectura.
(obsérvese como Freinet coincide con Decroly y Dewey).
3. La impresión del texto. La imprenta impone la calidad: hace necesarios la precisión
del vocabulario, así como el rigor ortográfico y gramatical. Impone la cooperación
permanente; para la impresión, el mantenimiento y las finanzas. Es algo más que un
trabajo manual (porque no interesa al niño si sólo se trata de imprimir resúmenes),
constituye una herramienta de desarrollo. A falta de una impresora Freinet, el
limógrafo, la máquina de escribir común, así como una microcomputadora dotada de
un módulo impresor y de un dispositivo de grafismo pueden permitir el logro del
objetivo deseado.
4. El periódico escolar. Uno escribe para ser leído por otros, y el periódico de la
escuela permite la difusión, los contactos con los demás. Ésta es la razón por la que
los diferentes textos libremente elegidos, ilustrados y luego impresos, son reunidos
en un periódico escolar que será distribuido dentro y fuera de la comunidad escolar.
5. La correspondencia interescolar. Permite los intercambios individuales y colectivos
y, así, evita el retraimiento. Puede ser escrita (camas) o sonora (grabación
magnética, magnetoscópica, diaporama, etcétera).
6. La cooperativa escolar. Contribuye a la formación cívica y social. El Consejo es
nombrado por los alumnos. Se encarga del tratamiento del material, de las relaciones
entre los alumnos así como entre adultos y alumnos.
7. La conferencia. El alumno elabora un informe acerca de una investigación
efectuada personalmente. La exposición es presentada oralmente ante todos los
compañeros, lo cual acostumbra a mantener la propia compostura frente a un
auditorio.
8. El plan de trabajo. Se elabora a principios de la semana y apela a la
responsabilidad de cada alumno.
9. El control mediante certificados. El niño debe adquirir el dominio máximo de las
ramas vitales de actividad. Este dominio es controlado mediante el certificado, una
especie de diploma que certifica que el alumno asimiló una serie de destrezas
deseadas, mediante un contrato firmado por el mismo y el educador (y a veces, los
padres).
10. El control mediante la autoevaluación. La autoevaluación permite conocer la
reacción personal del alumno frente a su trabajo.
Capítulo III
La crítica antiautoritaria
LA CRÍTICA ANTIAUTORITARIA
Los autores
Es difícil seleccionar críticos del autoritarismo escolar, pues el antiautoritarismo
recorre las obras de todos los autores que se han preocupado de la crítica a la
educación tradicional. Con todo, el problema se simplifica si nos centramos en
aquellos autores cuya característica definitoria sea el antiautoritarismo, en aquellos
autores que colocan a la libertad como motor y como meta de la educación.
Ferrer Guardia será el primer autor en el que nos centraremos. Por definición, la
pedagogía libertaria es una pedagogía antiautoritaria; Ferrer es un destacado
pedagogo libertario, y sin duda el más destacado de entre los españoles. Por otra
parte, el merecido redescubrimiento de que su obra está siendo objeto en la
actualidad entre nosotros, es una buena razón para elegirlo con preferencia a otros
importantes pedagogos libertarios.
El agrupar en un capítulo a todos estos autores no quiere decir que los metamos a
todos en un mismo saco. Entre ellos hay diferencias tan importantes corno las que se
analizarán a continuación. Si los analizamos juntos es porque también tienen, como
señalamos en la Introducción, puntos comunes: su defensa de la libertad en
educación y su oposición al autoritarismo de la vieja escuela. (9)
Allí comenzará su experiencia docente, en los Cursos Comerciales del Gran Oriente
de Francia, y como profesor de lengua castellana. Y es, precisamente, a
consecuencia de esto, como podrá llegar a concretarse la fundación de la Escuela
Moderna cuando una de sus antiguas alumnas, Ernestine Meunier, le legue en
herencia, en abril de 1901, una importante cantidad (una propiedad por valor de un
millón de francos, de la que pueden extraerse rentas considerables). El objetivo de
fundar una Escuela en Barcelona es, pues, un hecho que podrá materializarse
inmediatamente.
No hay que olvidar, a pesar de todo, que las tensiones sociales e ideológicas
provocadas par la cerrazón oscurantista del clima social y político dominante pueden
conducir, en algún caso, a posiciones de ingenuo radicalismo, algo contradictorio,
incluso, con el uso libre del método intuitivo. Pero, finalmente, la vida misma es
siempre lo suficientemente ambigua y se encarga de dejarnos bien claro que no
podemos desprendernos fácilmente de nuestras mismas contradicciones. Podríamos
encontrar algo de esto en cierta decantación racionalista que quizás no dejaba
espacio a las formas no dogmáticas de espiritualidad, o en el uso exclusivo de la
lengua castellana, tan característico de un supuesto cosmopolitismo universalista
que compartían algunos sectores del movimiento obrero y del pensamiento libertario.
Ferrer aducía siempre que se cuestionaba la exclusividad del castellano ante el
pequeños progresos sin que ello afecte mi convencimiento pleno de que al final
logrará tener éxito en la vida.» Esta confianza se extiende en NeilI hasta la
humanidad misma «La humanidad tiene un poder innato para sobreponerse los
males que se le imponen.» Pero todas estas afirmaciones deben ir seguidas de
condicionales: el niño es y será bueno si no se le fuerza a dejar de serlo, si se le deja
entre gado a sí mismo, sin sugestiones de los adultos que intenten imponerle una
forma de comportamiento y de vida; sólo así el lacio bueno del niño aflorará
automáticamente y se desarrollará hasta donde es capaz de desarrollarse. Sucede
igual en la escuela: el niño está siempre ávido de aprender cosas, de saber, de
explorar, y sin embargo cuanta más «educación» recibe, menos interesado parece
estar: «en realidad la pereza no existe; el concepto apropiado es el de “ausencia de
interés”». Lo que da problemas al niño no es su propia naturaleza —Neill es un
enemigo acérrimo del pecado original— sino la influencia adulta.
Esta influencia adulta es, en primer lugar, una influencia paterna. Neill ha repetido
que no existe el niño problema, sino los padres problema. Según Neill, muchísimos
niños con problemas sufren las consecuencias de las represiones, los odios ocultos y
las frustraciones de sus padres: «Ningún padre tiene derecho a enseñar el evangelio
del pecado original, puesto que nunca ha existido pecado original alguno ni de
ninguna otra clase. Lo que llamamos pecado no es más que enfermedad, resultado
de la ignorancia y el miedo, pues lo que cuando los niños son libres jamás piensan
que otro sea un pecador.»
La segunda influencia es, como ya vimos, la que el niño recibe en la escuela, que,
lejos de solucionar los problemas que la familia había ocasionado, los amplifica y
potencia:
Pero en el fondo, y como ya quedó claro, «el verdadero problema es una sociedad
que origina problemas una «humanidad problema», un mundo enfermo, neurótico,
propenso al odio y a la guerra e incapacitado para educar a sus más jóvenes
miembros de manera que ellos puedan, algún día, montar un mundo en el que ser
naturalmente bueno no sea tan difícil.
2. La finalidad de la educación
¿Cuál será, por lo tanto, para Neill el objetivo de la educación? El niño tiene que vivir
su vida, no la que le programen padres y educadores; el fin de la vida es, por otra
Como se ve, la educación es para Neill algo mucho más amplio que las cuestiones
puramente escolares; es más, según él se debe dar mucha más importancia a la
emotividad que a la inteligencia, al subconsciente que a la conciencia. El plan de
estudios de esta educación tendría un presupuesto básico: libertad fundamental en la
escuela; libertad para explorar el mundo, a los demás y a uno mismo; libertad para
estudiar, para jugar; libertad para ser feliz. Implica esta con opción que los maestros
tienen que hacerse unos miembros más del grupo infantil, que tienen que renunciar a
toda clase de superioridad, a toda artificial dignidad, y que su papel tiene que ser de
facilitar formas y medios de creación a los niños, por una parte, y el de enseñar
cualquier materia que los niños soliciten, por otra. Uno de los principios básicos el
amor es capaz de curar y sólo la libertad hace posible la felicidad: « ¿cómo puede
darse la felicidad? Mi respuesta personal es: Abolid la autoridad. Dejad que el niño
sea él mismo. No lo empujéis. No le enseñéis. No le sermoneéis. No lo elevéis. No lo
obliguéis a hacer nada. Quizá no sea vuestra respuesta. Pero si rechazáis la mía, es
de vuestra incumbencia encontrar otra mejor.»
Lo que debe evitarse a toda costa es indoctrinar a los niños con principios y valores
morales; según NeilI, la intervención moralizante del adulto pervierte al niño — idea
tomada de Homer Lane—; mientras que si se deja al niño libre para escoger elige el
bien, si se intenta persuadirlo se le crean unos conflictos internos que perturban su
equilibrio y le convierten en un inadaptado o un delincuente. NeilI dice que los niños
se vuelven automáticamente buenos cuando se logra destruir toda la educación
moral que han recibido; por otro lado, «es una gran injusticia someter a los niños a
vuestro gastado código de moral y de conducta». Quiere ello decir que el adulto debe
renunciar a algunas de sus tradicionales prerrogativas sobre el niño si realmente
desea que éste se desarrolle de acuerdo con su naturaleza, debiéndose llegar, de
este modo, a una especie de transacción con el niño que dé a cada uno su puesto y
su cometido sin invadir el puesto y el cometido del otro.
Como se ve, la educación así entendida tiene un gran parecido con algún estilo
terapéutico. Y es que la educación tiene para Neill un valor profiláctico, «preventivo»,
diríamos, y, en su caso un valor curativo. Frente a una educación enemiga del placer
y la libertad, impartida por padres, médicos, maestros e Iglesia, padres y maestros
deberían educar a los niños de manera que no necesitasen después tratamiento
terapéutico. La tarea del maestro, según él, es impedir que el niño adquiera
complejos:
3. Libertad
Si hubiese que caracterizar en una sola palabra lo que es Summerhill, ésta sería la
de libertad: «lo único importante es la libertad», llega a escribir Neill vimos antes
cómo el “vive y deja vivir” presidía el estilo de la escuela y cómo se pretende que en
ella el niño goce de libertad para desarrollarse a su modo y a su tiempo. Sobre el
alcance y los límites de lo que Neill entiende por libertad, hay infinitas referencias en
sus obras; la idea es siempre la misma: libertad significa hacer lo que se quiera
mientras no se invada la libertad de los demás; los niños pueden hacer exactamente
lo que deseen mientras no quebranten la paz de los otros niños ni las leyes
establecidas en las asambleas de escuela; la libertad de los otros nunca debe ser
interferida; el niño tiene derecho a vivir su propia vida, pero no a perturbar la de sus
compañeros o sus padres. Aquí estriba, según NeilI, la diferencia entre libertad y
libertinaje o permisividad: dejar al niño hacer absolutamente todo lo que quiera sin
más, es educar a un joven tirano»; no darle libertad es tiranizarlo. Así describe un ex-
summerhilliano la forma en que se entiende la libertad en la escuela: «Algunos tienen
la idea de que al ser una escuela libre no existen reglas y cada cual hace lo que le
viene en gana. No es verdad. El que una persona viole, de la forma que sea, los
derechos de otro no lo consideramos libertad. Contamos como una lista
increíblemente larga de leyes elaboradas por la comunidad, para que los derechos
de los demás queden a salvo de la gente desconsiderada.» Además de estas leyes
elaboradas por la asamblea escolar, están las establecidas por Neill; éstas son las
mínimas y son siempre relativas a la salud y seguridad de los niños (horarios de
sueño, prohibición a los más pequeños de bañarse en el mar sin profesores
presentes, etc.) y a la supervivencia de la escuela (se prohíbe, por ejemplo, a los
adolescentes tener relaciones sexuales completas, no porque se considere que es
moralmente reprobable, sino porque una alumna embarazada supondría el cierre
automático de la escuela). Es, por tanto, evidente que la libertad del niño no es total:
sus propias leyes, como dice NeilI, lo cercan por todas partes; únicamente en los
casos que le afectan a él y sólo a él puede hacer lo que quiera.
Ahora bien, hay un aspecto importante que destacar aquí: lo que a NeilI le interesa
es, por encima de todo, la libertad interior, la individual; es la que más importa que el
niño «aprenda»: «En un sentido más profundo nosotros procura más que los niños
aprendan a ser libres en su interior, libres de todo miedo, de toda hipocresía, del
odio, de la intolerancia.» Como es lógico, nadie intenta «enseñar» la libertad en
Summerhill; como dijo Homer Lane y repitió después, la libertad no puede darse; es
un estado natural y la única actitud válida del adulto es abstenerse de erigir barreras,
no inmiscuirse en el camino del niño.
Esto no resulta sencillo: «No es fácil darle libertad a un niña. Ello significa que nos
negamos a enseñarle religión, o política, o conciencia de clase.» Decir que dar
libertad al niño es dejarle vivir su vida parece fácil; pero el asunto se complica si se
piensa en la inveterada costumbre de enseñar, moldear, sermonear y coaccionar al
niño. En pocos aspectos insiste NeilI tan machaconamente en sus escritos: obligar a
un niño a adoptar valores que no está dispuesto o capacitado para asumir, no sólo
dificultará, en el momento oportuno, la adopción de esos valores, sino que induce a
la neurosis. Para Neill es tan nefasto enseñar cristianismo como enseñar
humanismo, enseñar militarismo como enseñas pacifismo: a los niños no se les debe
vaciar en ningún molde ni convertir a ninguna creencia: «La misión de la enseñanza
consiste en estimular el pensamiento, no en inculcar doctrinas. La formación y
moldeación del carácter es, según NeilI, una maldición; nadie, además, es lo
suficientemente bueno —ni en lo moral, ni en lo religioso, ni en lo político— para
servir de modelo a los demás. En nada se opone Neill tan violentamente a la
enseñanza tradicional como en esta violencia que introduce en la mente del niño al
obligarle a sustituir sus procesos originales de pensamiento por otros a los que se
considera más aceptable, más civilizado o más útil. El alumno, dice Neill debería
estar a salvo de los maestro que predican que tal autor o tal idea es mejor que tal
cual otro: parte de la verdadera educación consiste en que el niño descubra esto por
si mismo. Algo parecido señala respecto a la educación religiosa: es imposible
enseñar religión sin causar complejos y angustias, pues la religión exige reprimir los
deseos e impulsos humanos menospreciando el cuerpo en favor del alma: «La idea
de que la enseñanza del cristianismo es necesaria para que los niños sean buenos
es una estupidez supersticiosa; por el contrario, los inhibe y convierte sus buenos
impulsos en impulsos malos, transforma su amor natural en miedo y en odio, y
posiblemente lo peor de todo: hace de ellos unos perfectos hipócritas presumidos.»
Neill se opuso siempre con especial virulencia a la educación religiosa de cualquier
tipo de credo porque consideraba que era la forma más irrespetuosa de inculcarle al
niño unos valores y de moldearle el carácter. Muy posiblemente estaba, también en
este punto, bajo la influencia de H. Lane; para éste, el niño nace bueno y si luego se
convierte en malo la culpa es de la autoridad. Según NeilI, lo que hace malo al niño
es la educación moral (la bondad renace al destruir esta educación):
«La que crea el delito es la ley. La libertad no hace buenos a los niños, simplemente
les posibilita serlo.» Muchas neurosis son simples manifestaciones de esta lucha
entre los principios morales enseñados y los impulsos y tendencias del muchacho. Y
la solución está en la libertad.
Pero, como es evidente, la libertad y el temor no pueden coexistir. Quiere ello decir
que la disciplina debe desaparecer si se quiere dar libertad al niño. Libertad y amor,
porque la disciplina es una proyección del odio a uno mismo y hace de su víctima
una persona que lo odia todo.
4. Antorregulación
Se ha citado ya en varias ocasiones a Homer Lane como maestro de Neill en cuyo
pensamiento influyó enorme mente. La otra gran influencia de su vida —según él
mismo ha reconocido— le vino de otro psicoanalista y también un amigo suyo:
Wilhelm Reich. Si aquél le sirvió de gran ayuda para sus ideas sobre la autogestión
escolar, éste le fue muy útil, según él —y aparte de otros aspectos.—, para perfil su
idea de la autorregulación Es necesario aclarar aquí que éste, como otros principios
básicos de su ideario, no le fue inspirado a Neill por Reich; es cierto que el contacto
de estos dos autores fue muy útil a NeilI de cara a pulir y concretar algunos de sus
puntos de vista y que ese contacto animó a Neill a profundizar más en algunos
aspectos de su trabajo pero no puede sostenerse, como algunos estudiosos han
pretendido, que Summerhill sea una escuela basada en las teorías de Reich. El
mismo Neill lo dice claramente en un libro suyo de 1949; «Mi escuela ya funcionaba
veinte años antes de que conociera a Reich y lo hacía de la misma manera que lo
vengo efectuando hasta hoy día.»
5. Autogobierno
Hemos estado hablando hasta aquí como si el niño fue un ente aislado que tiene
suficiente con las posibilidades de su naturaleza para desarrollarse. La realidad, y en
especial la realidad escolar, es bien distinta: lo normal es que el niño esté rodeado de
otros niños, y crezca en constante interacción con ellos. Lejos de ser una
coexistencia de individualidad aislada, la vida social en Summerhill es de una
extraordinaria importancia.
El principio fundamental que regula esta vida es, como no podía ser menos, la
libertad:
«No puede haber libertad los niños no se sienten completamente libres para
gobernar su propia vida social. Cuando hay un jefe no hay verdadera libertad, y esto
se aplica aún más al jefe benévolo que autoritario. El niño de espíritu puede
rebelarse contra el jefe duro, pero el jefe blando hace al niño impotentemente blando
e inseguro de sus verdaderos sentimientos.» Para que vida social pueda ser
libremente regulada por los niños, decir, para que el autogobierno y la autogestión
sean posibles, el maestro debe renunciar a toda autoridad, a toda pretensión
jerárquica, a todo tipo de dirigismo.
En Summerhill el asunto funciona de esta manera: la vida social es controlada por los
propios niños y no por personas que consideran que saben cómo debe ser
controlada. Son niños quienes establecen las normas y quienes se encargan de que
se cumplan. Las infracciones son estudiadas por tribunal que, elegido por la
asamblea de la escuela, can todas las semanas. Cualquier niño puede llevar a otro
tribunal, ya sea por haber infringido las normas, ya por haber actuado
incorrectamente en cualquier aspecto de la vida comunitaria. Lejos de lo que los
tópicos sobre la crueldad infantil podrían hacer suponer, las asambleas escolares se
desarrollan en un clima de tolerancia .y de justificación de los hechos que los demás
niños han cometido. Según Neill el autogobierno no puede tener éxito si no se cuenta
con una minoría de alumnos mayores que ya tengan sentido social. Neill ha insistido
en este punto incluso cuando un determinado grupo no mostraba interés por
autogobernarse o parecía considerarlo demasiada responsabilidad. Corno se ve, el
autogobierno es el correlato en la vida social de lo que la autorregulación era en la
vida individual. El principio es el mismo pero aplicado a un nivel y en una esfera
diferente.
Tal y como NeilI lo planteaba, el autogobierno aporta además dos grandes ventajas.
La primera de ellas es que, en contra de lo que puede parecer y de lo que se suele
criticar, una escuela que se autogobierna está llena de autoridad, una autoridad que
trata sinceramente de armonizar los derechos del individuo con los de la
comunidad»; en definitiva, la autoridad en Summerhill reside en el conjunto de la
6. Corazones, no cabezas
Este título de uno de los libros de NeilI, sintetiza todo un conjunto de afirmaciones,
esparcidas en todos sus escritos, relativas a la capital importancia de las emociones
en la educación. NeilI cree que la escuela ha atendido solamente las cabezas,
menospreciando los corazones de los niños; que se ha concentrado exclusivamente
en el pensamiento dejando sistemáticamente de lado las emociones; para él, «la
educación es, primordialmente, un asunto de emociones, sin que esto quiera decir
que se intente educar las emociones. Lo menos que se puede hacer es crear un
ambiente propicio en e que las emociones se desarrollen y expresen»; la única
educación buena que el hogar o la escuela puede proporciona es la que deja las
emociones en libertad.
El camino más rápido para dejar en libertad las emociones es la supresión del miedo.
Esta es uno de los punto que Neill repite con insistencia: el miedo debe ser
erradicado de la educación de una forma absoluta; mientras que padres y maestros
sigan transmitiendo a los niños el miedo placer y la vida, la educación no puede
lograr sus verdaderos objetivos y la vida del niño no puede ser plena: «El miedo debe
ser eliminado por completo: el miedo a los adulto al castigo, a la desaprobación, a
Dios. Lo único que puede prosperar en una atmósfera de miedo es el odio.» Mientras
que «introducir el miedo en la vida de un niño es el peor é todos los crímenes», «la
falta de miedo es la cosa más hermosa que puede ocurrirle a un niño. El niño
educado e una atmósfera de miedo dirá siempre que no a la vida, serán un inferior y
un cobarde; no se desarrollará nunca plenamente.
Uno de los caminos para eludir la aparición del miedo en la vida del niño es evitar
que tenga sentimientos de culpabilidad; hacer que un niño se sienta culpable y
pecador es, según Neill hacer de él para siempre un borrego presto a todo tipo de
domesticaciones: «al niño no hay que asustarlo nunca, nunca hay que hacer que se
sienta culpable» Por otro lado, la supresión de los sentimientos de culpa es un gran
aliado del desarrollo feliz del niño, corno lo demuestra, por ejemplo, el hecho,
aducido por NeilI, de que los niños que no reciben enseñanzas moralizadoras y
culpabilizadoras sobre el sexo, llegan a una adolescencia sana, no a una
adolescencia de promiscuidad.
La supresión total de los castigos es una lógica consecuencia de todo lo anterior. «El
castigo es siempre un acto de odio», escribe Neill y el odio no puede generar sino
odio; al igual que el amor hacia un niño le demuestra aprobación y es, a su vez,
pagado con aprobación, las riñas y las violencias —el odio— del adulto hacia el
niño hacen imposible u convivencia armónica. Además, el castigo no resuelve nada,
es inútil: El niño castigado es cada vez peor. Más aún, se convierte a su vez en un
padre punitivo o en una madre punitiva y el ciclo del odio sigue a través de los años.»
El camino adecuado es precisamente el contrario: En una escuela libre, el factor
amor es el único importante; la relación adulto-niño debe estar impregnada de cariño.
7. La terapia de Summerhill
La influencia de Lane sobre Neill no fue seguramente tan decisiva en ningún aspecto
como en el de la concepción de la terapia, del tratamiento de los niños problema. Las
idea de Lane al respecto eran ciertamente curiosas; para él, la desviación de los
muchachos era consecuencia de la pérdida de libertad, de la educación que habían
recibido desde la primera infancia en adelante. Según la intensidad de esa falta de
libertad, la desviación podía manifestarse en pérdida de potencia vital o en
delincuencia. Si ésta era la causa, remedio había que buscarlo por el camino inverso:
en lugar de relacionarse con los niños a través del odio, el rechazo el castigo, Lane
se servía del potencia! regenerador del amor Lane creía que «la mejor forma de
curar un vicio es ser indulgente con él». Cuando un niño de su «Little Cornmor
wealth» se escapaba, Lane le atajaba y le daba dinero para viaje. Neill aprendió bien
la lección de su maestro.
Así es como Skidelsky cuenta la forma en que Neill «curaba» a los chicos: la “cura”
de NeilI (...) consistía en aprobar plenamente el síntoma neurótico particular a través
de que el niño buscaba entonces alivio; en darle plenas oportunidades para
sublimaciones “creativas”; en emprender, fuera necesario, un análisis directo con el
fin de descubrir las raíces de la neurosis (él lo llamaba “lecciones privadas”) y, de
modo más general, en proporcionar una atmósfera más rosa, aprobatoria y
permisiva, que permitiera al niño “desenvolverse”, descansar y ser él mismo»» En los
primeros años de Summerhill, las «lecciones particulares» eran frecuente Neill
pensaba que los niños se curaban gracias a su análisis pero observó que los niños
que se negaban a recibir «lecciones particulares» también se curaban, con lo que
concluyó que la cura no se producía gracias a la psicología, sino a libertad: la libertad
que daba a los niños la posibilidad ser ellos mismos. Llegó así al convencimiento de
que la libertad por sí sola era la que curaba a la gran mayoría los niños y de que la
terapia no era necesaria cuado los niños podían librarse de sus problemas con la
libertad. Viendo que los niños eran capaces de resolver la mayoría de sus
dificultades si se les ponía en el ambiente adecuado y si, al mismo tiempo, se les
hacía saber y sentir que contaban con el apoyo y con la aprobación de los adultos,
No pudo concluir: «A decir verdad, tengo mucha mayor fe en libertad del ambiente
que en el tratamiento psicológico si no fuera porque se trata de un problema
complejo, deja que fuera sólo el ambiente el que realizara todo el trabajo.» No
obstante, y así lo acabarnos de esbozar, además de con la libertad el niño necesita
contar con el apoyo y la aprobación adulta; con su amor, en términos neillianos. Si
partimos, como Neill lo hace, del supuesto según el cual la mayor parte de los
problemas de la conducta infantil son fundamentalmente problemas suscitados por la
falta de amor, habremos de concluir con él, y siguiendo a Lane, en la fuerza
formadora y regeneradora del amor. La filosofía básica de Neill, según uno de sus
alumnos, es que «si un muchacho se siente amado y animado para hacer cuanto le
plazca —con tal que no resulte peligroso para él ni molesto para los de más— se
convertirá en un adulto más feliz y maduro». Tal es la confianza de Nelly en la fuerza
del amor que, según él, nadie salido de Summerhill llegará a odiar a los judíos o los
negros, nadie pegará a un niño, nadie moralizará a otras personas ni se convertirá en
un padre que intente educar hijos a su imagen y semejanza.
Corno es obvio, el ambiente hacía algo más que curar los trastornos: preparaba a los
chicos para una vida adulta más feliz y más plena; de hecho, como vimos antes, Neill
estaba más entusiasmado por la idea de profilaxis social que por la de terapia. Un
estudio de E. Bernstein realizado sobre ex- alumnos de Summerhill para valorar la
influencia de la escuela en ellos, demostró que los ex-summerhillianos reunían una
serie de características comunes, huella, sin duda, de su paso por la escuela de
NeilI: la investigación demostró que antiguos alumnos de Summerhill tendían a ser
tolerantes
—en el sentido de aceptar a las personas tal como son—, no dificultades para
desarrollar relaciones satisfactorias con personas de otro sexo, tenían una actitud
sana respecto a lo sexual, eran espontáneos y sinceros y se desenvolvían con
confianza y naturalidad cuando se encontraban ante personas investidas de
autoridad.
8. La enseñanza
El hecho de que hasta este momento de problema de la enseñanza en Summerhill
no haya sido ni apenas esbozado, es significativo de lo que sucede en la escuela: al
trabajo escolar se le da allí muy poca importancia. Todas las clases son optativas en
Summerhill; no existen allí grados académicos ni calificaciones parciales ni globales.
Además, los niños que deciden ir a clase son enseñados muy al estilo de la
enseñanza tradicional, como si Neill y su equipo de profesores no estuvieran al tanta
de las nuevas metodologías didácticas. En realidad, no era así; R. Hermmings, que
formó parte del profesorado de Summerhill, lo explica de esta forma: «Si se negó a
animar a su profesorado a elaborar métodos didácticos avanzados no fue sólo por
falta de visión de los problemas académicos, sino por el bien fundado temor de
introducir con ello un caballo de Troya en su escuela.» De hecho, parece que Neill
sentía casi más temor hacia el pedagogo ingenioso y «moderno» que hacia el
tradicional, ya que el maestro imbuido en las corrientes de la nueva pedagogía tendía
a recortar la libertad y la autonomía de los niños sirviéndose de su poder de
persuasión, cosa que ligaba poco con los intereses de Neill, primordialmente
preocupado por la libertad a todos los niveles, incluido el académico.
Si Neill se negaba a enseñar cosas a los niños por la fuerza era porque juzgaba que
obligar a un niño a estudiar latín es algo tan improcedente como obligarle a adoptar
una región determinada impuesta por el gobierno. Hemrmings lo ha expresado de
manera bien precisa: «La libertad que NeilI ensalzaba podía resumirse a nivel
educativo diciendo que e la libertad para no encontrar obstáculos para el
autoconocimiento, y la libertad concomitante para explorar las relaciones con el
entorno.
El niño educado en una atmósfera de libertad no necesita que ningún maestro le diga
lo que debe estudiar. A este respecto, Neill tiene una confianza absoluta en la fuerza
directriz de un desarrollo emocional sano; está convencido de c si se educan las
emociones, el intelecto se cuidará solo: «Cuando la emotividad es libre, el intelecto
actúa por cuenta propia y un niño que es libre emocionalmente sabe escoger y
escoge el tipo de estudio que a él más le conviene o le interesa.
En una línea liberadora están las teorías de K. Jaspers, de Iván lllich, de Somos
aguas, de la educación personalizada...
Influencias recibidas
El primer contacto intelectual de J. Dewey fue con una teoría filosófica y educativa,
que poco tiene que ver con lo que iba a ser su postura definitiva; nos referimos al
idealismo hegeliano, aprendido a través de W. T. Harris, el que fuera líder de la
filosofía idealista educacional en Estados Unidos, a donde había acarreado la
corriente alemana en boga a mediados del siglo XIX; Harris fue lector de los
originales de las primeras obras de J. Dewey, le estimuló ardientemente en su
carrera y a él debe su vocación filosófica.
Hay autores que piensan que J. Dewey aprendió en el evolucionismo tres de los
principales conceptos de su teoría educativa: la noción de la experiencia, la
naturaleza del hombre y del pensamiento humano, y la negación de fines fijos.
Filosofía de J. Dewey
Será fácil disculpar, al final de esta lección, las páginas dedicadas a la filosofía de J.
Dewey; sin ellas resultaría incomprensible su teoría de la educación, que está
imbricada en su visión del mundo. El mismo pedagogo norteamericano, tras haber
expuesto los puntos más destacados de su teoría educativa, hace una revisión y
escribe:
Epistemología
La teoría del conocimiento parte de que la mente tiene una base cultural, que la
inteligencia es una actividad adaptativa y que el aprendizaje es una realización
práctico-vital. La inteligencia es la capacidad para solucionar problemas y situaciones
nuevas; la inteligencia es, pues, un instrumento de soluciones. Esta concepción de la
inteligencia es muy biológica y muy evolucionista; los procesos vitales del individuo le
La segunda etapa es disponer de datos, porque “el material del pensar no son los
pensamientos, sino las acciones, los hechos, los sucesos y las relaciones de las
cosas. En otras palabras... debemos haber tenido u obtener ahora experiencias que
nos ofrezcan recursos para vencer la dificultad que se presenta. Una dificultad es un
estímulo indispensable para pensar: pero no todas las dificultades provocan
pensamiento”. Los datos los extrae el alumno de su memoria, de la observación, de
la lectura y de la comunicación; el pensador ha de disponer de recursos y estar
habituado a revisar sus experiencias pasadas para ver lo que le ofrecen, Dewey
ataca a las escuelas que abusan de la acumulación informativa, repetible en el
examen. Esto no es conocer, es sólo disponer de datos.
La tercera etapa la constituyen las ideas, que son la fase crea dora, la previsión de
los resultados posibles, la invasión de lo des conocido, un salto hacia lo porvenir, una
incursión en lo nuevo, una invención. Ideas son también las sugestiones, las
inferencias, los sentidos conjeturados, las suposiciones y explicaciones de ensayo.
La originalidad creadora no se confunde con lo extraordinario y fantástico; la
originalidad estriba en la aplicación de lo cotidiano a lo que no se le había ocurrido a
los demás; la originalidad es lo nuevo, no los materiales. Todo pensamiento es
original para quien lo tiene, para quien lo autodescubre; las soluciones no son
vendidas por el maestro, las descubre el alumno; sólo quien descubre, piensa; lo
demás es alma cenar. En consecuencia, las ideas no pueden ser comunicadas de
unas personas a otras; son comunicables los datos, pero no las ideas, que son
anticipaciones de soluciones posibles.
“El pensar es, en otras palabras, el esfuerzo intencional para descubrir conexiones
específicas entre algo que nosotros hacemos y las consecuencias que resulten, de
modo que ambas cosas llegan a ser continuas.”’”El pensar es así equivalente a
hacer explícito en nuestra experiencia el elemento inteligible. Hace posible actuar
con un fin a la vista. Es la condición para que tengamos fines”. “Considerar el efecto
de lo que ocurre sobre lo que puede ser, pero que no es todavía, es pensar”. “El
objeto de pensar es ayudar a alcanzar una conclusión, proyectar una terminación
posible sobre la base de lo que está ya dado... Es un proceso de indagación, de
observar las cosas, de investigación.”
La aventura del pensamiento está en que arrastra el peligro que supone la invasión
de lo desconocido, al entrar en la zona crepuscular de la investigación.
No puede hacerse dentro del mundo del espíritu el análisis y la reorganización de los
hechos, es menester hacer algo a las cosas y alterar las condiciones; la experiencia
es un método filosófico.
La metafísica
Se ha acusado a J. Dewey de no tener metafísica, por el excesivo esfuerzo
epistemológico y el poco empeño evidenciado en el estudio de la realidad. La
existencia, la naturaleza y la realidad son una continuación de la experiencia, que
sólo puede darse en la naturaleza.
Hay quien incluye a Dewey entre los relativismos metafísicos. Por la relatividad
entiende la propiedad de los sucesos de mostrarse polifacéticamente. La realidad
empírica es una cadena de sucesos cualitativos.
La antropología
J. Dewey se opone resueltamente al dualismo platónico superviviente aún en la
época del pensamiento y la materia son cualidades de la misma realidad y jamás
existen por separado. El cuestionarse sobre el dualismo es atentar contra la
evidencia y Esa experiencia. El hombre es, a la vez, una realidad corpórea, vital,
mental y social; la vieja cuestión de las relaciones entre el alma y el cuerpo es
bizantina. El funcionalismo de J. Dewey es una psicología holística, opuesta a todo
atomismo, concretamente al estructuralismo elementalista de G. Wundt:
“La tesis de Dewey sostenía que tales distinciones (entre estimulo y respuesta) no
son sino meramente funcionales, y no se basan en diferencias activas de la realidad
existente, sino en los diferentes pape les que desempeñan los actos que se dan en el
proceso total”
J. Dewey hizo serias objeciones a la doctrina del arco reflejo de la psicología rusa y
su acomodo norteamericano en el conductismo, por que su concepción antropológica
difería notablemente de la de ambas escuelas. No obstante, hizo guerra también al
método introspectivo, asegurando que sólo son admisibles en psicología, materiales
y procedimientos objetivos derivados de la fisiología, la biología y demás ciencias.
Para Dewey, los procesos mentales no admiten otra explicación que la
instrumentalista, es decir, entenderlos como instrumentos para el cuerpo.
La axiología
Es peligroso pretender fundamentar una axiología de valores inmutables y absolutos,
después de conocer su epistemología y su metafísica. Tanto su axiología como su
ética están elaboradas sobre conceptos de cambio, relatividad... La epistemología y
el pro ceso cultural-social exigen una axiología flexible y cambiante.
Los valores extrínsecos son lo contrario; son aquellos que permiten establecer
comparación, estimarlos mayores o menores. Para hacer esa estimación o juicio, se
impone hacer una relación con una tercera cosa, con algo ulterior. De estos valores
extrínsecos es de los que más habla Dewey. Se dicen entonces valores
instrumentales, porque son medios respecto a ese fin ulterior; y creemos que llama
instrumenta les a todos los valores externos, o, al menos, a una parte de ellos. A los
valores instrumentales dedica unas sustanciosas páginas.
Valores “per se” son aquellos bienes que no son apreciables por su utilidad
subsiguiente; son sinónimos de valores intrínsecos. Valor supremo “es el
despegamiento pleno, armonioso, rico en perspectivas y posibilidades ulteriores, de
nuestras facultades activas”.
Una asignatura del currículum, por ejemplo, tendrá valor, si logra resultados prácticos
pedagógicos.
Hay confusionismo interpretativo, pues mezcla los bienes en su integridad con los
bienes por sus circunstancias y sus resultados.
Sabemos que los intereses, los fines y los valores son conceptos interrelacionados.
Los valores no pueden ser fijos, cuando “con el rápido cambio de los intereses
políticos, científicos y económicos del último siglo, ha debido atenderse a nuevos
valores” Esta es una de las tesis principales en su manifiesto Mi credo pedagógico.
Ahora podemos comprender el problema de la jerarquización de los valores. No es
muy difícil interpretar el pensamiento de Dewey en torno a esta cuestión, pues nos lo
expresa él mismo en forma diáfana:
Esta frase lo sintetiza todo: “Ninguna clasificación puede tener más validez que
provisional”; aunque haya aparentemente una contradicción con esta obra: “Es
naturalmente posible clasificar de un modo, general las di versas fases valiosas de la
vida”. Esta clasificación sólo es válida operativamente, «para dar flexibilidad y
amplitud a la empresa de la educación; pero constituye un grave error considerar
estos valores como fines últimos a los cuales están subordinadas las satisfacciones
¿Es posible, establecidos así los principios axiológicos, formular un juicio de valor?
Los juicios de valor en el experimentalismo no existen; son meras descripciones y
puntos de partida para constituir una axiología; son válidos operativamente, pero en
su misma entraña late su efimeridad. Las proposiciones relativas a los valores y las
preocupaciones científicas tienen un carácter hipotético y experimental; han de ser
verificadas.” Más detalles sobre los juicios de valor habrían de recogerse de su obra
Teoría moral; es decir, se plantea el problema de los juicios de valor en s terreno
ético. Y recuérdese que, como acontece con la inteligencia, la moralidad tiene un
sentido biosocial, La bondad suprema del individuo está relacionada con la bondad
social del grupo.
Ética
Aunque aludida reiteradamente, resta otra dimensión importante en la filosofía de
Dewey: la e’tica. Son varias las obras dedicadas a esta disciplina filosófica. Su ética
no descansa en unos fundamentos metafísicos de fixino e inmutabilidad, pues la idea
de “bien” no se engalana con estas características. Por el contrario, la ética
deweyana descansa en la axiología de la relatividad.
Indicamos antes que el bien individual estaba supeditado al bien del grupo, tal y
como había enseñado Hegel, del que se diferencia en que éste pensaba en todo el
universo y Dewey en las comunidades humanas. La moralidad es una adaptación
que nos brinda seguridad; esta adaptación tiene tres facetas: acomodación,
reconstrucción y religión. La religión tiene vinculaciones con la ética y es interpretada
también biosocialmente.
Teoría de la educación
Naturaleza de la educación. Hay varias definiciones descriptivas deweyanas de
educación:
“La experiencia misma consiste primariamente en las relaciones activas que existen
entre un ser humana y su ambiente natural y social”; “la educación intelectual o
escolaridad debe presentar un ambiente tal que esta interacción efectúe la
“El proceso educativo tiene dos aspectos inseparables; uno psicológico y otro social.
El primero es el básico: los instintos y las capacidades del niño constituyen el punto
de partida, la materia prima de toda educación... Este desarrollo completo es el
centro de las actividades escolares, en lugar de la mera adquisición en los
conocimientos que constituía el eje del antiguo
La sociedad suele recibir un calificativo más en consonancia con las ciencias del
desarrollo humano; se suele calificar de “ambiente”. La educación tiene una función
social; he aquí el título del capítulo segundo de su principal obra. Esta función social
constituye el ser de la educación como transmisión de cultura. Ambiente y medio
significan la continuidad de los lugares más próximos al hombre con sus propias
tendencias activas:
Cuando las actividades específicas de un ser están asociadas con las de otros, el
ambiente es un ambiente social. El ambiente social configura el proceso educativo,
de modo especial, en lo que se refiere a hábitos del lenguaje, a las maneras, al buen
gusto y a la apreciación estética. La educación se realiza mediante el control que
sobre el ambiente ejerce el educador: “Nosotros nunca educamos directamente, sino
indirectamente por medio del ambiente”. El ambiente escolar ha de ser simplificado,
eliminador de los rasgos perjudiciales para que no deterioren los hábitos mentales,
contrarrestados de los elementos restrictivos para crear un ambiente más amplio.
crea seducción en la tarea a realizar. A través del concepto de Interés arriba Dewey
a una educación individualizada, pues el educador que admite el interés como punto
de partida de la instrucción, se persuadirá pronto de que los intereses son
específicos de cada alumno. No basta con apelar al espíritu del hombre, en materia
educativa; aquél sin el cultivo del interés ha sido uno de los factores explicativos de
las deficiencias de la educación tradicional y pasiva. Con esto no se alista entre los
partidarios de una pedagogía permisiva y no-directiva hasta el extremo; Dewey
defiende abiertamente que el “meollo de la educación está en apoderarse de las
aficiones del niño y de sus actividades, encauzándolas”. Así se unirán
armónicamente interés y disciplina. Los intereses están también sometidos a la
evolución, y, en consecuencia, no se estabilizan ni puede pretenderlo la educación;
más bien, ésta ha de estimular el cambio y observarlo para adecuarse lo mejor
posible al gusto y a la afición del alumno.
La escuela ha de estar de acuerdo con la vida real, de la cual han de sacarse las
experiencias, que engendran conocimientos. La escuela óptima es aquella que no
almacena conocimientos en la memoria, sino que capacita para resolver situaciones
nuevas y conflictivas. La escuela ha de reflejar la vida, al modo como la refleja el
hogar, la calle, el barrio, el campo de juego... El patrón primero de la escuela —el
parvulario— ha de ser la familia y la vida doméstica; con ella debe empalmar y a ella
debe continuar y completar. En la vida real hay oportunidades de experimentar, de
interesarse, de convivir, de aceptar una autodisciplina. Donde hay vida, hay trabajo;
la escuela ha de ser igualmente centro de trabajo; que no desvincule el mundo del
trabajo adulto de aquel otro que el niño ha de realizar en la escuela.
al futuro, y cuando agrupando sus condiciones causales nos esforzamos por generar
un resultado semejante”. La aspiración es una previsión anticipada del fin o
terminación posible; “es un fin previsto”, “da dirección a la actividad”.
“Y es bueno recordar que la educación como tal no tiene fines. Sólo las personas, los
padres y maestros, etc., tienen fines.”
¿Cómo compaginar esta frase con aquella otra en la que niega que la educación
tenga fines fuera de sí misma? Tal vez mejor que responder, será recordar que los
fines jamás pueden ser fijos y que los fines educativos varían con las situaciones y
las coyunturas.
En primer lugar, es imposible establecer una jerarquía de valores entre los estudios.
No puede haber otra justificación qué la inclusión de los valores educativos en el
grupo de valores intrínsecos: “En tanto que todo estudio tiene una función única o
He aquí una definición de los valores intrínsecos: “algunos bienes no son buenos
para nada; son justamente bienes”.
La instrucción moral se rige por las mismas normas que el resto de la instrucción; no
pueden darse lecciones morales, como pretendió Kant, por ejemplo, con la
esperanza de moralizar, porque esas lecciones son conocimientos de los otros, pero
no del sujeto cognoscente. Y esto no instruye verdaderamente ni puede moralizar. La
vieja cuestión de si la virtud puede lograrse por la instrucción queda resuelta, si por la
instrucción entendemos el pensamiento originario vinculado a una experiencia. No es
que el conocimiento moralice, de suyo; sino que en las actividades escolares en las
que experimentalmente se aprende, se forman disposiciones buenas. Y si la
experiencia tiene significación social, contribuirá más poderosamente a crear esas
disposiciones moralizadoras. La escuela, como institución social y como comunidad,
es terreno apto para el cultivo de la virtud. La contribución social es precisa en la
educación moral, porque ésta requiere satisfacer una doble faceta: la psicológica y la
social.
Sociología de la educación
En diversos momentos hemos llamado la atención sobre la escuela como comunidad
y como institución social. Este pensamiento se reitera innumerables veces en la
pluma de Dewey; pero adquiere forma de postulado en “Mi credo pedagógico”:
“El maestro no está en la escuela para imponer ciertas ideas o para formar ciertos
hábitos en el niño, sino que está allí como un miembro de la comunidad para
seleccionar las influencias que han de afectar al niño y para ayudarle a responder
adecuadamente a estas influencias. En la institución escolar el maestro controla el
ambiente y elige los métodos más aptos para conseguir sus objetivos, a sabiendas
de que los métodos han de variar y evolucionar, a la par que varían y evolucionan las
situaciones. También los métodos son alcanzados por el flujo constante y la
variabilidad. La razón suprema es la evolución biosocial que preside la institución
escolar. Se da la oportunidad a la escuela de convertirse en una comunidad en
miniatura, en una sociedad embrionaria. Tal es su fisonomía básica... Cuando se
realiza esto, se promueve en cada una de nuestras escuelas una vida comunitaria
incipiente, donde bullen todas esas actividades que reflejan la vida de la otra
sociedad más grande. Siempre que se logra iniciar e ir adiestrando a cada niño...,
como miembro de una pequeña comunidad de este tipo..., se logra la garantía más
firme y segura de que la otra sociedad más grande será una sociedad digna, bella y
armoniosa? Hay otro aspecto del carácter social y de la escuela; la escuela de la que
Dewey habla es básicamente la escuela pública y gratuita norte americana, y ésta es
la más capaz para socializar al niño.
No todo resulta tan simple y sencillo como pudiera parecer; la concepción escolar
democrática ha realzado unas veces el aspecto individual y otras el social. Han
surgido, de hecho, “escuelas centradas en el niño” y “escuelas centradas en la
sociedad”. La democracia cuida la escuela, porque un gobierno apoyado en el
sufragio universal, sólo puede triunfar en ambientes culturalmente promocionados.
La democracia es un modelo y una forma de educar. En una palabra, la teoría
educativa de Dewey está pensada para un modelo político democrático concreto, el
de los Estados Unidos de América. Cada país y cada generación han de inventar su
democracia y su escuela demócrata.
Filosofía de la educación
No Ignora Dewey que la filosofía nació en Europa como una teoría del procedimiento
educativo, cuando los sofistas, “primer cuerpo de educadores profesionales”,
lanzaron al aire una serie de interrogantes que vinculaban el proceso del
conocimiento con el proceso educativo.
La razón última por la que Dewey se vio forzado a deducir estas conclusiones, es su
doctrina epistemológica sobre la reconstrucción que de la experiencia hace el
proceso educativo, el cual es en definitiva conocimiento. No se arredra, si para ello
ha de llegar a aceptar cuanto Sócrates y Platón enseñaron sobre la adquisición de la
virtud mediante el conocimiento. Lo acepta también. Y queda así a salvo la
coherencia de su pensamiento. Le ayudó su actitud pragmatista que le hizo rechazar
la división aristotélica y kantiana entre filosofía teórica y filosofía práctica. Todo es
filosofía práctica. Cualquiera otra postura mental es reduccionista, porque entendería
la filosofía como juego simbólico o verbal, o una satisfacción sentimental para unos
pocos; un mero dogma arbitrario. Familiarizado con la terminología científica y
experimental, dice que “la educación es el laboratorio en el que llegan a concentrarse
y comprobarse las distinciones filosóficas”. Pero no escatima palabras para aclarar
su oposición a toda otra manera de filosofar. Nada de filosofía con principios
trascendentes a priori, ni revelaciones, ni injerencias clericales, porque “mi teoría se
caracteriza por la importancia que atribuyo a las experiencias cuyo objeto es el
conocimiento”.
Respecto al contenido del aprendizaje, quizá sea mejor expresarlo con las precisas
palabras de Rogers. El aprendizaje social más útil en el mundo moderno es el
aprendizaje del proceso de aprendizaje que significa adquirir una continua actitud de
apertura frente a las experiencias e incorporar al sí mismo el proceso de cambio.
Aprender a cambiar
“Sólo son educadas las personas que han aprendido cómo aprender, que han
aprendido a adaptarse y cambiar, que admiten que ningún conocimiento es firme,
que sólo el proceso de buscar el conocimiento da una base para la seguridad.
La provisión de recursos
La flexibilidad respecto a los recursos utilizables es considerable. No lo es tanto, sin
duda, en lo que se refiere a los recursos que no deben utilizarse (a no ser que el
facilitador experimente necesidades o presiones insalvables en sentido contrario): el
facilitador no pone «deberes»; no dicta una bibliografía obligatoria; no dicta clases ni
da lecciones magistrales (a no ser que los estudiantes le pidan que hable sobre
alguna materia, de modo ocasional, y di acceda a hacerlo); no evalúa ni critica los
trabajos de los estudiantes (a no ser que se le solicite); no pone exámenes
obligatorios y no es el único responsable de la evaluación exigida por la institución.
El problema de la evaluación
El de la evaluación no es un problema secundario en la pedagogía rogeriana. Y no lo
es tanto en sí cuanto en sus implicaciones. Hablemos por un momento del asunto.
Si el núcleo organizador de un curso está constituido por los objetivos del individuo y
el grupo; si esos objetivos se logran en la medida en que se consiguen aprendizajes
significativos; si la función del facilitador es hacer posibles estos aprendizajes, sólo
hay una persona, concluye Rogers, en condiciones de evaluar el grado en que ha
alcanzado sus metas y esa persona es el estudiante mismo; al igual que en la terapia
centrada en el cliente el foco de evaluación residía en el cliente, en la enseñanza
centrada en el estudiante, este es el foco ideal de la evaluación. El aprendizaje
autodirigido automotivado, no puede ser sino autoevaluado.
Un tercer orden de limitaciones vendrá dada por la edad de los estudiantes; como es
obvio, a un niño no se le puede pedir que decida por sí solo acerca de su destino; si
bien la educación debe organizarse de tal manera que el niño acabe cuanto antes
por poder hacer cargo de su propia vida, resulta evidente que la libertad del conocer
algunas limitaciones que le vendrán impuestas predeterminadas características del
desarrollo. Un cuarto tipo limitaciones proviene de los estudiantes: quizá no todos
ellos se sientan a gusto en el ambiente de libertad de la enseñanza centrada en el
estudiante, y prefieran la orientación del rector; si son libres, deben poder elegir entre
un aprendizaje autodirigido o una enseñanza pasiva. Por último están las limitaciones
que provienen de todas las instituciones que están colocadas por encima de
facilitador y estudiante; limitaciones contra las que lucharán educador y alumno con
todas sus fuerzas, pero que no dejan de estar ahí. Tal vez parezcan demasiadas
limitaciones; según Rogers, «el principio esencial quizá sea el siguiente: dentro de
las limitaciones impuestas por las circunstancias, la autoridad, o impuestas por el
educador por ser necesarias para su propio bienestar psicológico, se crea una
En efecto, cuando se deja libertad a los alumnos para que estudien a su manera, los
conceptos que elaboran tienen, según Rogers, más profundidad, comprensión y
duración porque son más autónomos y están basados en enfoques empíricos más
firmes.
Capítulo IV
La perspectiva sociopolítica
del marxismo
Por lo que a la problemática que nos ocupa se refiere, la aportación marxista que va
en una doble dirección: por un lado ha dado su propia teoría de la educación; por
otro, ha aplicado sus categorías de análisis a la escuela existente, haciendo rigurosa
crítica de su funcionamiento, de su significado, papel que cumple en la sociedad, etc.
En este capítulo vamos a centrarnos tanto en un aspecto como en otro;
examinaremos tanto la teoría marxista de la educación como la teoría marxista a la
escuela capitalista. En lo que respecta teoría marxista de la educación, hablaremos
de la pedagogía socialista, por la cual, junto con Dietrich, entendemos las
concepciones, con sus distintas variantes y modificaciones, de la educación, de la
escuela y de la enseñanza que apoyan en la doctrina de Marx».
Los autores
Como en los capítulos anteriores, la elección de los autores no ha sido una tarea
sencilla. Creemos que los elegidos se mueven dentro de un amplio marco del
marxismo que da cabida a una rica diversidad de análisis en el interior de la misma
perspectiva. Marx y Engels están incluidos aquí por la misma por la que se incluyó a
Rousseau en el primer capítulo «Marx, como Rousseau, pertenece indudablemente a
la categoría de los iniciadores y de los estimuladores.» Si Engels (que aparecerán
aquí siempre unidos) son incluidos es porque sin sus planteamientos serían
difícilmente legibles los que siguen tras los suyos. Después de Marx, Engels es casi
obligado incluir a alguno de los pedagogos soviéticos que se enfrentaron con la
dificilísima tarea de educar en la Rusia postrevolucionaria; Makarenko es, sin duda,
el más conocido de esos pedagogos y de él nos ocuparemos en primer lugar. Por
razones obvias no hemos querido añadir análisis de ningún otro pedagogo soviético
de la época; por el objetivo que nos trazamos al principio tenemos que renunciar
constantemente a escribir la historia de cada uno de los movimientos que van
apareciendo a lo largo del libro.
Por último, Suchodolski podría representar una línea actual cuyos esfuerzos se
centran en la elaboración de una nueva pedagogía socialista que dé respuesta no
sólo a las exigencias del momento actual sino también a las del futuro. Por otra parte,
su perspectiva «integradora» nos será, como veremos, de gran utilidad. (9)
En 1842, Carlos Marx conoció a Federico Engels, con el que entabló una amistad
humana e intelectual profunda a partir de 1844, año definitivo en la simbiosis Marx-
Engels; constituyeron un tándem modélico, circunstancia que justifica la publicación
conjunta de escritos, el esfuerzo común por la difusión de su mentalidad, etc.
La dialéctica hegeliana, con sus famosas tesis, antítesis y síntesis, sirvió a Marx para
hacer una interpretación dialéctica de la naturaleza; le bastó con sustituir el concepto
del “espíritu” hegeliano por el de materia. Resultó así el Materialismo dialéctico.
La materia está regida por tres leyes fundamentales; la Ley de los contrarios, la Ley
de la negación y la Ley de la transformación.
La epistemología marxista tiene relación con las tesis sobre la interpretación realista
de la ciencia, las mutaciones de formarla. Si la filosofía marxista ha sido calificada de
realista, racionalista, materialista, infinitista y reduccionista, la única fuente del
conocimiento es la realidad. El pensamiento real transpuesto y traducido en el
cerebro humano es el reflejo del movimiento. El concepto de reflejo es la explicación
última del conocimiento. En la epistemología marxista lo real es el origen del
conocimiento, y la praxis es su objetivo. Añádase a esto el carácter sociológico del
conocer y se habrá obtenido la primera imagen de la epistemología marxista. El
conocimiento humano es típico para cada generación histórica y está arraigado en
las circunstancias temporales. También el conocimiento humano evoluciona,
progresa y sigue unos cauces dialécticos:
realidad objetiva; lo que fue verdad hace dos siglos no puede ser nunca falso; pero sí
puede ser completado cuantitativa y cualitativamente. Esto es el relativismo marxista.
“La alienación es el tipo general de las situaciones del sujeto absolutizado que se ha
dado un mundo propio, un mundo formal, rechazando por ende lo verdadero
concreto y sus exigencias.”
—“opio del pueblo”— que se pretende ejerza en los proletarios sobre sus miserias.
Es posible que Marx pensara únicamente en el Estado absolutista creado por Hegel,
ya que el marxismo, en éste sentido, es una crítica a la filosofía política hegeliana.
Para nuestro empeño nos interesa resaltar el Estado y la religión, como efecto y
exigencia del sistema capitalista de producción y como medio para dominar a la
clase explotada. Concepto marxista de educación
Suelen distinguirse dos etapas en las génesis del pensamiento marxista: la primera
abarca de 1818 a 1845, y se caracteriza por la progresiva liberación de las
alienaciones; la segunda, que se extiende desde 1845 a 1883, es la etapa de
madurez, principalmente a partir de 1857, y se caracteriza por la praxis como fuerza
transformadora de lo real y eje de las “formaciones sociales”.
“Enseñanzas para todos los niños, indicadas desde el primer momento que puedan
prescindir de los cuidados maternos, en instituciones nacionales y a expensas de la
nación. Enseñanza y trabajo de fábrica juntos.”
“Enseñanza pública gratuita a todos los niños. Abolición del trabajo de los niños en
las fábricas en su forma actual. Unificación de la enseñanza con la producción
material”
“La cuestión de saber si el pensamiento humano puede tener acceso a una verdad
objetiva, no es una cuestión del terreno de la teoría, es una cuestión de la práctica.
Es en la práctica donde el hombre ha de demostrar la verdad; es decir, la realidad y
pujanza, la parte más próxima del pensamiento.”
Los investigadores sobre teoría educativa comunista suelen concluir que los cambios
operados en la política comunista educativa a lo largo del siglo XX no han sido tales
que hayan modificado sustancialmente el concepto marxista de educación.
“Las ideas nada pueden realizar. Para realizar las ideas se necesitan hombres que
pongan en marcha una fuerza” La educación es eminentemente social, ya que una
de sus finalidades es capacitar a los individuos, mediante el aprendizaje de un oficio
o profesión, para que se inserten en la sociedad. Y como la sociedad es
revolucionaria, hay que disponerle para la lucha y la revolución educación es un
medio para mentalizar a los ciudadanos y para ayudarles a dar el paso desde una
sociedad capitalista a una sociedad comunista, misión en la cual colaborará el
sistema transitorio de la dictadura proletaria.
Establecido que el fin primordial es la consecución del hombre nuevo, del marxista
ideal, la teoría del fundador del comunismo es más que una interpretación
sociológica, en la que el hombre interesa casi exclusivamente como pieza y
engranaje de la colectividad, que es bastante menos que la comunidad. La
educación técnica de la que habló FC. Jaspers tiene aplicación en el totalitarismo
marxista, porque se pierde el sentido de comunidad, para suplantarlo por el de la
colectividad; el hombre es una máquina e interesa, en realidad, para ser una pieza
en la cosmovisión técnica.
Ya en 1844 Marx usó por vez primera el término “omnilateral” aplicado al hombre:
La “ciudad sin clases” habrá surgido, cuando el progreso haya llegado a consumarse;
el hombre marxista privará así a la burguesía de la trampa en la que caía el
proletariado esclavo, al fomentar la división de clases y su lucha interna. El “reino de
la necesidad”
En el Manifiesto del partido comunista aparece por vez primera el pensamiento del
maridaje entre el trabajo manual y la escuela, entre la instrucción y el trabajo
mecánico. Insistamos en esta idea, dando el uso de la palabra a Engels en Principios
del comunismo:
“Instrucción de todos los niños, empezando por el primer momento en que pueda
prescindir de los cuidados maternos, en instituciones nacionales, a expensas de la
nación. Instrucción y labor de fábrica juntas (Fabrikation).”
“escuela única del trabajo”. Un punto muy discutido en los intérpretes del
pensamiento marxista ha sido el alcance de la “instrucción intelectual”: contenidos,
asignaturas e intensidad horaria.
El trabajo instructivo fue recibido como el talismán que, con sólo su contacto,
cambiaría la sociedad burguesa, y elevaría la clase obrera por encima de las clases
superiores y clases medías”. La solución no la consideró apta para aquel momento
sino válida para el porvenir:
La vinculación del trabajo con la instrucción es consecuencia del relieve que la praxis
tiene en el materialismo dialéctico. La instrucción correspondería al pensamiento y la
práctica a la acción real. El trabajo es factor que “actúa sobre la naturaleza exterior y
la transforma, transforma también su propia naturaleza desarrollando las facultades
que en ellas dormitan”. Suchodolski ha interpretado correctamente la mentalidad
marxista, al escribir:
“A los mitos tradicionales, sobre el trabajo como condena del hombre expulsado del
paraíso por sus pecados y del trabajo de Sísifo como esfuerzo estéril..., el mito
auténtico del trabajo concebido como la actividad humana gracias a la cual la
realidad se vuelve verdaderamente humana y el hombre un hombre real y auténtico.”
El “reino de la libertad”
La contraposición del “reino de la libertad” al “reino de la necesidad” está implicada
en el tema del contenido de la instrucción. Al “reino de la necesidad” corresponden
las asignaturas científicas; al «reino de la libertad”, las humanas. Marx no se atreve a
barrer todo vestigio de la enseñanza humanística, pero es dudoso que las haya
admitido en el currículum escolar. Estos conocimientos son necesarios para
redondear la formación del hombre, pero su cultivo es extra- escolar, relegado a las
horas del ocio y tiempo libre; en éste reina la libertad, el desinterés.., Se está
polemizando sobre si el reino de la libertad tiene cabida en la institución escolar o no;
dos opiniones encontradas son las de Gutiérrez Zuloaga, que niega la posibilidad de
inclusión, y de Ortega, que la admite.
Los contenidos de la instrucción escolar son para algunos los indicados por Marx en
las Instrucciones a los delegados: educación física, adiestramiento politécnico y
enseñanza intelectual científica, Las ciencias, en la mente marxista, podemos
clasificarlas en ciencias matemático-naturales y ciencias humanas. Parece cierto que
Marx excluyó del currículum escolar las ciencias humanas, que deberían aprenderse
como actividad intelectual extraescolar. Las ciencias humanas no son parte de la
instrucción intelectual, porque el proletariado no está preparado, por una parte, para
recibirlas y, por otra, no pueden ser enseñadas con asepsia, de igual manera por un
librepensador, por un católico o por un ateo. Las ciencias naturales y la gramática
son la plataforma instructiva de la escuela marxista. La filosofía y las ciencias se
disociaron por los años en que Marx fijaba sus tesis y sus postulados; y como la
filosofía no es gramática ni ciencias naturales, la filosofía está excluida también del
“reino de la necesidad”. (3)
La política educativa
El problema de la política educativa roza con las supraestructuras estatal y
confesional, porque una de estas dos realidades capitalistas es la que ha de
configurar los cauces ortodoxos de la organización escolar, los derechos y deberes
en materia educativa, etc. Marx defiende teóricamente que, tan pronto el periodo de
transición dé paso a la utopía comunista, ni el Estado ni la Iglesia ha de ejercer
injerencia alguna en la vida escolar. Pero la realidad es que mientras esto suceda, la
familia se ve avasallada por el Estado totalitario y éste controla, inspecciona y
planifica la vida escolar no con menos énfasis que lo hace Estados Unidos, nación
señalada y recriminada por Engels y Marx.
“durante la dictadura del proletariado nadie tiene derecho a enseñar sino el Estado;
pasado este periodo circunstancial, ni el Estado ni la Iglesia existirán y menos aún
podrán intervenir”.
El marxismo
Es tarea por demás compleja resumir brevemente las ideas de Marx y sus
aplicaciones en el campo educativo. Dividimos su estudio en cinco vertientes, a
saber:
a) Teoría marxista del conocimiento.
b) El método marxista.
c) La concepción marxista del hombre.
d) La concepción marxista de la historia.
e) La escuela socialista.
El método marxista
Puede calificarse como crítico, estructural, histórico y dialéctico. Es crítico en virtud
de que pone en tela de juicio lo dado, lo establecido, lo conocido, sin menospreciarlo
o ignorarlo. Todo hecho, todo concepto, toda afirmación debe ser reconquistada y
reconstruida.
Es estructural puesto que afirma que todo fenómeno, toda situación, se entiende y
cobra su verdadero significado sólo dentro de una estructura o marco de referencia.
Para entender un fenómeno debe situarse dentro de un sistema, de un contexto;
dentro de la estructura de la cual forma parte. Para entender un fenómeno debe
analizarse la totalidad, con sus mutuas interacciones. Así, lo educacional no puede
entenderse si no se relaciona con su marco económico, político, social, cultural, etc.
Una parte no puede analizarse independientemente del todo del cual forma parte y
en el cual se inserta.
Es histórico ya que asevera que los fenómenos, lo mismo que las estructuras y los
marcos de referencia, deben analizarse en su historia: es decir, en su génesis,
dirección, sucesión, fin y sentido.
El trabajo es la expresión de la vida humana. Por este motivo, para que el hombre
sea libre, el trabajo debe ser libre. El mundo en que vivimos es la negación del
hombre. Es el reino del tener, no del ser; es el mundo de la alienación del trabajo y
del trabajador, y de la dominación del débil por parte del fuerte, Por tanto, la vida del
hombre se convierte en lucha, y éste lucha por la vida, es un revolucionario.
La escuela socialista
Es la antípoda de la escuela capitalista. Mientras ésta pretende, hipócritamente ser
apolítica pero sigue las políticas del sistema, la escuela socialista da primacía a la
formación política. La escuela capitalista enseña a vivir dentro de la sociedad de
consumo, bajo el dominio de la burguesía y de los terratenientes.
En un país socialista la educación debe servir para llevar hasta el fin la revolución
socialista; para ello es necesario formar un nuevo hombre, transformar sus hábitos y
sus estructuras mentales con una nueva visión del mundo que coloque al hombre y a
sus valores por encima de las cosas, de los mitos, de las supersticiones, del sentido
mercantilista de la vida y de los anti valores de la sociedad de consumo. En el
socialismo, todo: el arte, la poesía, etc., tiene un contenido político.
La figura política e ideológica fue V. Lenin (1870-1924), que supo rehacer al pueblo
ruso de las huellas de la Primera Guerra Mundial y de reiteradas pugnas nacionales,
para someter a algunos generales zaristas. Lenin, ante las dos vertientes que a él se
presentaban, optó por centrar la marxización en Rusia y no en el mundo entero, de la
que era partidario el gran Trotsky. El confusionismo subsiguiente a esta polémica
impidió que las ideas utópicas de Marx y Engels fueran viables, acabándose por
implantar la “dictadura del proletariado”.
“MAKARENKO, SU VIDA”
Su nombre, ANTON SEMIONOVICH MAKARENKO, de origen Ucraniano, nace en el
año de 1888, hijo de un obrero ferroviario, pintor de brocha gorda, que trabajó en una
fabrica de vagones, él mismo trabajó en ésa fábrica desde 1905, ya como maestro y
después de haber obtenido la formación pedagógica más rudimentaria, debido a su
Concluyó así su primera etapa de actividad pedagógica, la segunda etapa duró hasta
su muerte, en ella sé dedicó a difundir sus principios educativos por medio de
conferencias dirigidas a maestros y padres de familia, las cuates fueron reunidas y
publicadas en español bajo el título de: “PROBLEMAS DE LA EDUCACION
ESCOLAR”.
Su posición pedagógica
Makarenko sostiene en efecto, una posición pedagógica llena de originalidad,
además se queja de no contar con técnicas pedagógicas válidas y para él la literatura
pedagógica es pura charlatanería, está vacía de técnicas, de métodos y de
instrumentos válidos para su aplicación por un educador cargado de problemas.
Afirma además, que los pedagogos no saben absolutamente nada de educación, que
están siempre en las nubes, le llama PEDAGOGIA DEL OLIMPO, en éste solo valen
las teorías mientras las técnicas son tenidas como herejías, siendo radical su
oposición al movimiento paidológico y al ideario de la nueva escuela.
Cada joven debe saber subordinarse en el momento de ser subordinado pero aclara
que la subordinación debe ser al camarada, no al amo o al rico, y que a la vez debe
saber mandar al camarada cuando se le faculte para ello.
Como se puede observar su posición teórica y su estilo personal son muy peculiares,
es un educador duro, exigente y no da lugar a que exista abandono, dejadez o fallas,
plantea y organiza una serie de actividades a realizar exigiendo su cumplimiento
satisfactorio, convencido de que es necesario que el hombre se presente a sí mismo
grandes exigencias, pues de tal manera se educa.
Objetivos educativos
Los objetivos que Makarenko asigna a la educación se asientan en dos pilares
fundamentales:
El objetivo que Makarenko se propone, no es otro que el de convertir a los niños bajo
su cargo en CONSTRUCTORES ACTIVOS Y CONSCIENTES DEL COMUNISMO, el
de hacer de cada individuo un miembro activo de su época y su sociedad, el de
formar individuos que se conviertan en constructores y fortalecedores del estado
proletario, hacer de cada alumno un comunista activo y consciente.
• Inmediata
• Mediata
• Lejana
Dentro de estas perspectivas, algunas de las cualidades que deben ser fruto de la
educación y que todo ciudadano soviético debe tener:
• Ante todo un profundo sentimiento del deber y de la responsabilidad para con los
objetivos de la Sociedad Soviética.
• Un espíritu de colaboración, solidaridad y camaradería diametralmente opuesto a
cualquier tipo de fantasía o egoísmos individualistas.
• Una personalidad disciplinada, con un gran dominio de la voluntad y con las miras
puestas siempre en los intereses de la colectividad.
• Unas condiciones personales y un modo de actuar que impidan la sumisión y la
explotación del hombre por el hombre.
• Una sólida formación política que hiciera de cada colono un comunista convencido
y un propagandista de sus ideas a través de su acción y su palabra.
• Una gran capacidad para conocer a los enemigos del pueblo así como para
combatirlos.
La única tarea digna puede ser la creación de un método, que siendo común y único,
permita al mismo tiempo que cada personalidad independiente desarrolle sus
aptitudes, conserve su individualidad y avance por él camino de sus vocaciones, la
proyección de la personalidad, debe ir precedido de un análisis de los fenómenos
ínter colectivos y personales.
La educación colectivista
Makarenko, perseguía un nuevo estilo y una nueva forma de organización, y partía
de que la base de la educación es ante todo un proceso socia! y que, en
consecuencia, el hombre soviético no podía ser educado bajo la influencia de una
sola personalidad; entendía que la esencia de la educación no estaba en las
conversaciones con el niño, en la influencia directa que un educador podía ejercer
sobre él, sino “EN LA ORGANIZACION DE LA VIDA DEL NIÑO Y EN EL EJEMPLO
Así mismo, se mostró siempre orgulloso de su colectividad feliz y consideró que ésa
colectividad tenía un potencial educativo y terapéutico profundamente eficaz.
El trabajo no era pues una táctica educativa, sino una actividad productora de la
riqueza necesaria para la colonia y para el país, es en este sentido como Makarenko,
se refiere a él como un trabajo creador, de ahí que uno de los objetivos de la
educación sea la formación del hábito del trabajo creador. Puesto que el trabajo tiene
un sentido social y no meramente educativo, debe someterse a la disciplina social y
no quedar al arbitrio de los deseos o veleidades individuales. En base a lo anterior,
Makarenko, recomienda a los padres que acostumbren a sus hijos desde pequeños a
realizar tareas, que no les interesen y que les resulten poco agradables, con objeto
de que se habitúen a buscar en el trabajo no el entretenimiento, sino su utilidad y
necesidad social: “Esta educación será eficaz cuando se llegue al punto que el niño
ejecute tareas desagradables pacientemente sin quejas y paralelamente con su
crecimiento adquiera una sensibilidad tal que el trabajo menos grato llegará a
proporcionarle placer y se comprenda su utilidad social.
Makarenko, intentó explotar las posibilidades educativas del trabajo, aunque ello le
supusiera en ocasiones nuevos enfrentamientos con los “MORADORES DEL
OLIMPO PEDAGOGICO”; ahora bien, los colonos pasaban la media jornada en la
fábrica trabajando, la otra mitad en la escuela, estudiando, y se remarca ésa
diferenciación entre horas de trabajo y horas de estudio porque es partidario de que
no exista relación entre lo uno y lo otro: el trabajo dice, NO DEBE ESTAR LIGADO
AL ESTUDIO, no niega el valor educativo tanto del trabajo como del estudio y es
consciente de que ambos determinan fuertemente la personalidad, pero se niega a
establecer nexos entre ellos.
tradicionales, lo único que da a conocer es que había una escuela completa, que en
ella los chicos aprendían mucho y que de ella sacaban conocimientos parecidos e
incluso superiores a los que otros niños obtenían en escuelas normales.
La disciplina consciente
Es este el aspecto más controvertido de la praxis y del ideario pedagógico de
Makarenko, la cuestión de la disciplina, pues de entrada para él, lo considera como
un objetivo, una meta hacia la que debe tenderse, entendida como el resultado de la
labor educativa, ahora bien, otro sería entender que el REGIMEN, es el conjunto de
medios utilizados para conseguir ese resultado, para Makarenko, este es sinónimo
de ORGANIZACION, ya que para él: es la organización de la colectividad educativa,
su régimen, lo que da como resultado la disciplina.
Sin embargo, lo que no concuerda muy bien es la forma en que éste método
pretende separar la escuela con el trabajo. En base a lo que propone Makarenko, se
puede crear un método único y común, que permita que el educando desarrolle una
personalidad independiente, la cual vaya precedida de un análisis de los fenómenos
Intercolectivos y personales, dentro de los cuales el educando sea consciente de la
realidad social que en que vive, y que se resalten actitudes como la honestidad, la
responsabilidad que conlleve un nuevo tipo de conducta que sean resultado de la
actividad pedagógica que se lleva a cabo.
Para Marx y para los marxistas, éste es un problema histórico. Algunos han
sostenido que el problema es de alienación; otros afirman que es de fuerza, de la
acción de los aparatos del Estado (sistema jurídico represivo) sobre la clase
trabajadora. Los estudios más recientes se han preocupado por dar mayor peso a lo
que Gramsci llamó la hegemonía en la sociedad; es decir, la dominación fundada
sobre la base del consenso. En este contexto, la educación cobra una gran
importancia para el marxismo, pues es la forma más organizada de’transmisión de
ideología.
Gramsci y la educación
La preocupación de Gramsci por los problemas pedagógicos y educativos debe
entenderse relacionada con el conjunto de los problemas políticos y culturales que él
mismo enfrentó en su militancia por una sociedad nueva, una sociedad socialista.
El primer tema, el de los intelectuales, tiene relevancia para Gramsci en tanto hace
referencia a la relación político-pedagógica a través de la cual el Estado —entendido
en un sentido amplio corno sociedad política más sociedad civil, o en otras palabras,
aparato jurídico-coercitivo y aparato hegemónico educativo— educa en el consenso,
difunde una concepción de la vida y elabora una conciencia colectiva homogénea.
Los intelectuales son el instrumento de dominación de la clase dominante sobre las
clases subalternas, o en términos típicamente gracianos, los intelectuales son la
relación básica de la hegemonía. Por hegemonía entiende todo el complejo de
actividades prácticas y teóricas con las cuales la clase dirigente no sólo justifica y
mantiene su dominio, sino también logra mantener el consenso activo de los
gobernados; el Estado, entonces, no es sólo coerción sino consenso.
En este proceso de construcción teórica, Gramsci desarrolla una actitud crítica hacia
el sistema escolar establecido: contra la escuela clásica, la instrucción profesional y
la universidad por su incapacidad de formar al hombre “nuevo” que demanda la
sociedad.
Esta propuesta deberá basarse —dice Gramsci— en dos procesos de la vida real
que constituyen la base del industrialismo:
Todos estos proyectos de Gramsci están sujetos hoy a discusión en lo que se refiere
a sus contenidos concretos, en tanto que son propuestas históricas, no dogmas; pero
su visión del Estado, el concepto de hegemonía y su análisis de las superestructuras
constituyen actualmente un amplio horizonte para la indagación teórica y la acción
práctica en el terreno educativo.
La autocrítica ha vuelto otra vez por el camino planteado por Gramsci, pero con un
nuevo conocimiento para incorporar: los aspectos micro sociales del proceso
educativo, la dimensión epistemológica del conocimiento escolar y la necesidad de
encontrar un puente entre estos procesos y las dimensiones macro sociales. (6)
Capítulo V
Los autores que hemos estudiado hasta aquí han aparecido agrupados en capítulos
en los que se estudiaba a otros autores de su escuela o con los cuates, tenían
ciertas afinidades en los planteamientos. Los autores del primer y tercer capítulos
pertenecían a las «escuelas» reformistas y marxistas, respectivamente, y tos del
segundo estaban agrupados bajo el común denominador de la defensa de la libertad
contra el autoritarismo de la escuela tradicional. Paulo Freire e Iván Illich, que son
los autores en los que nos centraremos a continuación, aparecen uno al lado del otro
en este último capitulo en razón del marco geo-político en que surgieron la práctica
del primero y las teorías del segundo.
Es evidente que ni Freire ni lllich podían estar ausentes en nuestro repaso a la crítica
contemporánea a la escuela. Pero la especificidad de los planteamientos de cada
uno de ellos hacía difícil su ubicación en ninguno de los capítulos anteriores. Por otro
lado, el hecho de haber desarrollado sus actividades en el marco latinoamericano
(Freire en Brasil y Chile, lllich en México) obliga a nuestros autores a adoptar
posiciones que quizá no hubieran tenido lugar en países industrializados y con un
aceptable nivel de desarrollo cultural. Mientras que la preocupación fundamental de
estos países suele ser la de cómo mejorar el nivel de educación de sus ciudadanos,
la de algunos países de América Latina está todavía centrada alrededor de los
problemas del analfabetismo generalizado y la educación primaria. No es de
extrañar, por consiguiente, que las críticas y las alternativas que de allí provienen
tengan un carisma distinto. Incluso podría pensarse que de haber elaborado sus
prácticas y teorías en el momento presente —en el que los países de América Latina
han conocido un rápido progreso en algunos de los aspectos que comentamos—,
sus orientaciones habrían sido ya distintas.
Es en función de estas razones que Freire e lllich aparecen aquí uno junto a otro. En
realidad, es difícil encontrar en sus planteamientos puntos en común, tanto a nivel de
análisis como de alternativas, como esperamos se haga evidente en las páginas que
siguen.
Freire, en las sociedades así colonizadas se instala una élite que gobierna según los
dictámenes de la potencia colonizadora. El pueblo no es tenido en cuenta, no
participa, es más «objeto» que sujeto». Se forman así las «sociedades cerradas»
sobre las que después hablaremos; nace la «cultura del silencio» y la opresión de las
masas es reforzada por instituciones ajenas —al menos en teoría— al Estado, de
entre las cuales la Iglesia se ha destacado siempre. A medida que estas sociedades
se iban abriendo, el papel de las masas populares ganaba en protagonismo. Pero
siempre había un golpe de Estado a mano para volver a imponer el statu quo
precedente: «En América Latina, el golpe de Estado ha sido la respuesta de las élites
militares y económicas a las crisis provocadas por la emergencia popular». Un statu
quo caracterizado por la opresión y el reglamento a la nada de las masas populares,
privadas de sus derechos más elementales. No debe, por tanto, extrañar que el del
analfabetismo haya sido un problema constante para estos países, puesto que la
opresión se hace fuerte en la ignorancia; perpetuar esta ignorancia era una de las
condiciones del mantenimiento de las élites. El número exacto de analfabetos es muy
difícil de determinar, entre otras cosas por las ocultaciones que las estadísticas
oficiales realizan. A. Silva habla de más de setenta millones de analfabetos para el
sur del continente americano; la cifra no puede ser exacta y especialmente las
oficiales son totalmente inexactas.
Otra de las experiencias realizadas es la propugnada por Paulo Freire, sobre la que
nos centraremos en seguida; sus resultados parecen muy optimistas. Para llIich, el
problema se presenta en otros términos: él parte de un análisis de las sociedades
industriales avanzadas y del sistema escolar que en ellas existe y se convence de
que es un camino que no lleva a ninguna parte. Sus propuestas son una «oferta» a
los países en vías de desarrollo para que no cometan los errores político-sociales
que han llevado al borde del abismo a los países más desarrollados. Las de Freire e
lllich son, pues, dos perspectivas distintas y no es lícito agruparlas si no es en
función del marco geográfico, político y social en que surgieron y se desarrollaron. En
base a estas consideraciones los unimos aquí para presentarlos, pero como veremos
a continuación, sus planteamientos son de signo muy distinto.
Parece ser que las razones para sospechar este declive escolar no es la
defectuosidad de la propia institución —aunque se citan defectos corregibles—, sino
la evolución misma de la sociedad, estructurada de modo tan distinto al actual, que
muchas de las instituciones sociales vigentes corren el riesgo de desaparecer.
Entre ellas estaría la escuela. ¿Qué habrá de real en esta previsión? ¿De qué forma
puede ser sustituida la escuela? ¿Cómo se producirá entonces el proceso educativo?
¿Será el educando el maestro y agente de su desarrollo cultural? ¿El
autoaprendizaje habrá sustituido al heteroaprendizaje? ¿Se idearán otras
instituciones sustitutivas más eficientes en el entorno sociocultural de entonces?
Estos interrogantes serán respondidos por la evolución real de la humanidad, pero no
por teorías ideales previsoras. Mientras todas las naciones aceptan el reto y el
desafío de aumentar la escolaridad obligatoria y gratuita de los ciudadanos e
invierten sumas abruma doras de dinero en la escolarización, si bien con el espíritu
abierto a posibilidades futuras, más adecuadas para los sucesivos cambios
imaginables.
Educación liberadora
La educación liberadora es un movimiento de amplia base, de en raizamiento
filosófico muy dispar, coincidente siempre en entender la educación como el medio
más apto para evitar la manipulación y fomentar el proceso de autorrealización en la
círculos de cultura, que habían de durar tres meses, capaces de alfabetizar en este
breve tiempo a dos millones de brasileños. El golpe de estado cortó en flor el
movimiento alfabetizador de Paulo Freire, que terminó en la cárcel, donde
permaneció sólo algunos meses, tras los cuales se refugió en Bolivia y luego en
Chile. En este último país estuvo tres años, colaborando en la emprendida Reforma
Agraria. En 1967 se incorporó a la Harvard University, como profesor. En 1970 se
trasladó a Ginebra, como consejero del Consejo Mundial de las Iglesias. Paulo Freire
sufrió, de joven, una crisis religiosa durante un año; pero después ha sido fiel a su
catolicismo, del que ha criticado aspectos criticables, sinceridad que le ha merecido
la repulsa de algunos círculos confesionales católicos.
“Una vez más los hombres, desafiados por la dramaticidad de la hora actual, se
proponen a sí mismos como problema. Descubren qué poco saben de sí y se
preocupan por saber más. Por lo demás, en el reconocimiento de su poco saber de
sí radica una de las razones de esa búsqueda... El problema de su humanización, a
pesar de haber sido siempre desde un punto de vista axiológico, su problema central,
asume hoy el carácter de preocupación ineludible.” Concientización es descubrir el
sentido de las cosas, tener una visión crítica, razonar los acontecimientos.
Concientización es luchar por la liberación propia y la de los alumnos; es la respuesta
dada por el hombre a los acontecimientos de la historia, que le desafían y le
interpelan. Concientización es lucha contra la deshumanización, que priva al hombre
de libertad en el trabajo. La concientización es una toma de conciencia de la
contradicción sociológica opresor-oprimido, porque cada una de las dos partes
intervinientes están alienados, y por que es distinta la alienación de cada hombre en
las múltiples realidades sociales de los países.
Las opresiones tienen el mismo signo que tienen las manipulaciones; son políticas,
religioso-morales, socioeconómicas, publicitarias, etc. La concientización comienza
por una insatisfacción y una frustración, testificadoras de que en el mundo las cosas
no marchan tan bien como pudieran. La insatisfacción no debe llevar a un complejo
formado ante tanta insistencia de que somos incapaces, enfermos, indolentes. La
concientización es darnos cuenta del opresor que cada uno de nosotros llevamos
dentro, hacer lo posible por erradicarlo y crear un hombre nuevo:
El método liberalizador
No es principalmente el aspecto didáctico el que nos interesa, sino la teoría que
subyace. Las características fundamentales del método liberador son la actividad, el
carácter dialógico y la participación del educando, fácilmente deducible de los textos
transcritos y de los conceptos de Freire dados ya a conocer. El método liberador
comprende cinco fases:
Cuarta fase: elaboración de fichas, como medios auxiliares para los coordinadores
en su trabajo de animación. Estas fichas no han de ser rígidas, sino tales que
permitan al coordinador una elasticidad grande, dentro de la cual la actividad y
originalidad de los alumnos puede tener cabida.
Quinta fase: elaboración de fichas con familias de fonemas en torno a las palabras
generadoras seleccionadas. Las palabras generadoras son 17 y, por consiguiente,
son 17 las fichas que componen esta fase última.
El método liberador termina en lo que Freire califica como decir palabra. No basta
con enseñar a leer, ni a silabear, sino que la meta fijada es el despertar crítico del
analfabeto, y que junto con el proceso de alfabetización se haga el de
concientización. Las palabras generadoras son la ocasión para plantear una serie de
cuestiones, relacionadas con las situaciones más frecuentes y problemáticas en la
vida del alumno para, a través de ellas, crear cultura y modificar la naturaleza.
En materia educativa Freire ideó una praxis, muy cargada de sentido, apta para los
grupos destinatarios, discutible didácticamente, pero sin que estuviese amparada por
una teoría educativa original y seria.
Freire es un símbolo del clamor unánime de las personas inquietas del Tercer
Mundo; contagió a los dotados de espíritu igualitario, anticapitalista y redentor del
oprimido; ha sido fiel a su pensamiento cristiano, a pesar de que sus acomodaciones
sean inculpadas teológicamente de distorsión y cierto alejamiento de la pureza
ortodoxa; ha tenido un gran coraje para enfrentarse a los oligarcas y terratenientes,
sufriendo la privación de libertad por ser fiel a sí mismo. En este sentido, Freire es
admirable. Por otra parte, tiene las cualidades de todo líder; Freire es un líder de la
alfabetización campesina en una nación del Tercer Mundo. Buscar algo más en
Freire, es olvidar que ha sido traductor e intérprete de difusos y hondos sentimientos
humanitarios muy difundidos entre personas sensibles a lo social en esas latitudes,
Freire ha sido un sociólogo de la educación, de carácter práctico, y se ha servido de
la educación para liberar al hombre y hacer política contraria a la de los oligarcas
rectoras de las naciones sudamericanas. Tal vez tenga más importancia en el terreno
político que en el de teoría de la educación. El proceso educativo equivale más a una
revolución clasista que a un perfeccionamiento humano de personalización. Textos
de Freire son:
“En verdad, no hay humanización sin liberación, así como no hay liberación sin una
transformación revolucionaria de la sociedad de clases, dentro de la cual no cabe la
humanización.
“Mi respuesta no puede ser otra que mi praxis histórica; en otras palabras, mi praxis
revolucionaria.” Es uno de tantos intentos de usar la escuela y la educación para
transformar la sociedad.
Iván Illich reconoce que su amistad con E. Reimer, que data de 1958 en Puerto Rico,
fue de suma trascendencia para la evolución de su pensamiento desescolarizador.” Y
más decisivo aún fue la fundación del CIDOC en 1961, cuyo precedente había sido
un centro intercultural creado en Nueva York; el CIDOC acaba de ser disuelto este
mismo año.
Sin hacer juicios de valor sobre una serie de circunstancias que rodean la vida de
Iván. lllich, sí queremos resaltar las bases sociológicas de su contestación escolar.
En primer lugar, su espíritu revolucionario se manifestó en la contestación a la
institución eclesiástica establecida en Hispanoamérica, donde la clase dirigente de la
Iglesia pertenecía o estaba envuelta en la clase política y social más elevada,
constituyendo así un entorpecimiento para el progreso social, en lugar de un acicate
en el establecimiento de unas relaciones sociales más justas. Frente a la clase
dirigente eclesiástica establecida presenta una comunidad primitiva carismática, que
es la garantía teológica de la destrucción de las instituciones. La receta que curará
todos los males es la supresión del clero oficial, lo que creará una comunidad
fraternal inundada de espíritu.’
Las instituciones suscitan en lllich la sospecha de que ahogan la valía del hombre,
cercado por los inventos sociopolíticos de los gobiernos democráticos que no
renuncian a desarticular ese cerco manipulador y alienante de la sociedad. Y por si
las instituciones fuesen poco lastre para el desarrollo del hombre, hemos de añadir la
burocratización, carcoma de las propias instituciones, que atenazan al hombre. De
esta manera el hombre llega a sentirse incapacitado para pensar. Las instituciones
manipuladoras han de dar paso a las abiertas, donde se respire el aire fresco
liberador. La consecuencia final es clara: invertir las instituciones;’ desenmascaradas.
lOS grandes países industriales para la extensión de sus mercados. Hay que vender,
porque se fabrica; no lo contrario: servir al hombre en sus necesidades. Fruto de esta
política industrial y del mercado es la publicidad, asfixiante y cohibidora de todo
pensamiento original.
“Por escuela no entiendo toda educación formal y organizada: empleo aquí la voz
escuela y enseñanza para definir una manera de ocuparse de los niños, y sobre todo
un rito de paso, que aceptarnos como normal.”
“La escuela es el lugar en que se reúnen seres humanos de una edad dada
alrededor de profesores; están sometidos a una presencia obligatoria y a la
necesidad de seguir ciertos programas.”
proceso que específica edad y se relaciona con maestros y exige asistencia a tiempo
completo a un currículum obligatorio”. Son, pues, tres los elementos destacados
edad, profesores y alumnos, asistencia a jornada completa. En cuanto la edad, lllich
establece tres premisas: a los niños puede enseñárseles solamente en la escuela; a
los niños les corresponde estar en la escuela y los niños aprenden en la escuela. Su
condenación al influjo que los profesores ejercen sobre los alumnos:
Repasa a continuación los hechos salientes de la existencia, para concluir que todo
eso lo hemos aprendido fuera de la escuela: a hablar, a pensar, a amar, a sentir, a
jugar, a blasfemar, a politiquear y a trabajar. La asistencia a la escuela a jornada
continua convierte al profesor en custodio, moralista y terapeuta, coronado por una
tiara invisible como el Papa de Roma. La asistencia durante gran parte del día hace
de la escuela útero sagrado, cárcel en la cual están recluidos los alumnos
desarraigados de su ambiente ordinario y del entorno social real, haciéndoles vivir en
un mundo fantástico y romántico. La escuela es el ídolo de la religión secular, es la
iglesia universal de nuestra cultura occidental decadente, es una iglesia secularizada
nimbada del halo misterioso propio de la religión. La escuela secunda el mito de la
productividad y del consumo en nuestra sociedad industrializada: “La escuela es el
ritual de consagración mediante el cual los novicios son admitidos en la clase
sagrada de los utilitarios progresivos del consumo.” Los maestros son una especie
de sacerdotes intermediarios entre los poderosos y los humildes; y la escuela es una
lotería obligatoria, a la que juegan todos, con desigual fortuna. La escuela es la
nueva religión mundial y el mercado de trabajo. Son muchos, dice lllich, los que
reconocen que la escuela es la “base de todas las relaciones de dependencia, las
alienaciones y las nuevas estructuras de clase”.28 La escuela seduce sobre todo a
cuantos ocupan estratos sociales inferiores, y espera arribar a situaciones de
privilegio. La escuela es una droga que ilusiona a los desheredados de la
socioeconomía, talismán que cambiará su indigencia en opulencia y su ignorancia en
sabiduría. Es como una vicaría por la que han de pasar todos los aspirantes a ricos y
sabios; pero una vicaría secular. Esta visión de la escuela, asimilada a las
instituciones religiosas predispone a lllich para lanzar contra ella los mismos
anatemas dirigidos contra la Iglesia establecida. La escuela es una institución
burocratizada, descompuesta, falseada e incapaz de cumplir los objetivos que se
propone contra la escuela
Son muchos los argumentos esgrimidos por lllich para repudiar la escuela. En primer
término, la escuela confunde los métodos de adquisición del saber y los contenidos
de la enseñanza; confunde enseñanza y aprendizaje. No es económica mente
rentable. Una escolaridad idéntica para todos es absurda en economía.
Por otro lado, como institución social adolece de lacras que la hacen también
despreciable; crea funcionarios docentes sin que se “tenga en cuenta lo que enseñan
a sus alumnos; es un falso servicio”; la escolaridad obligatoria produce “una
segregación en el seno de la sociedad, permite igualmente una especie de
clasificación entre las naciones”; las relaciones del maestro- alumno no garantizan el
respeto a la libertad individual; la escuela es un reducto de ilusiones utópicas, de
espaldas a la realidad de la vida de la comunidad; la escuela esclaviza al hombre; la
escuela es la culpable de la alocada carrera en el consumo.
“Hay que dar una importancia igual a otros tipos de educación. Y si en la escuela no
se aprende ciertamente un oficio, tampoco se beneficia uno de una educación del
espíritu. La institución escolar obtiene tan mezquinos resultados, en primer lugar
porque quiere alcanzar todos los objetivos a la vez y porque no reconoce más que
los programas de enseñanza obligatoria, en donde se confunden todas las materias.”
Los profesores son fruto de la burocracia docente y sus funciones en la escuela son
inútiles y deformantes, porque insertan al educando en un mundo alienante y en una
sociedad hambrienta de mano de obra dócil y manejable; explotan su situación bajo
el amparo de la convicción creada de que sin ellos el aprendizaje es más difícil o
imposible. Son los sacerdotes de esta religión laica que es la enseñanza; y están tan
burocratizados como el clero católico. Su intervención perjudica al proceso educativo;
son tan rechazables como la escuela que regentan.
“La escuela es el más grande y más anónimo de todos los patrones. De hecho es el
mejor ejemplo de un nuevo tipo de empresa, sucesora del gremio, de la fábrica y de
la sociedad anónima.” La revolución se puede hacer a través de la desescolarización,
por que la nación- estado está armada para defenderse, mientras que la escuela es
inerme y, por tanto, la liberación conseguida con su supresión es incruenta.
Alternativas a la escuela
Si la escuela muere y desaparece, lllich excogita alternativas o sucedáneos, que han
de ser una “trama de oportunidad”, que permita alcanzar los tres objetivos de un
buen sistema educacional: acceso a recursos disponibles en cualquier momento de
la vida a quienes lo deseen; brindar ocasión a los deseosos de comunicar saber,
para que puedan hacerlo; brindar situaciones fa borradles a la presentación a debate
público de temas, Esta “trama de oportunidad” debe facilitar el contacto de quienes
quieren aprender con las cosas y personas que pueden ayudarles. Las
oportunidades de educación, en un sistema abierto, que reemplaza la escuela, son
básicamente cuatro; en el fondo, al huir de las instituciones existentes y,
concretamente, de la escuela, ha de confiarse a instituciones nuevas.
Desescolarización sí; pero no desinstitucionalización; invertir las instituciones, pero
no erradicadas. La financiación de los cuatro organismos por él ideados se haría
mediante “bonos educativos” o mediante créditos ofrecidos principalmente a sus
padres de sus más necesitados. Completarían esta financiación oficinas de
información, cuya misión sería establecer relaciones entre sus cuatro organismos, h
pruebas de calificación y vigilar la monopolización. El papel del maestro se
desdoblaría en el conocimiento de las materias y el conocimiento de las aptitudes,
Más craso aún es su error, cuando extrapola su actitud crítica y contestataria a todas
las instituciones sociales, a las que, en términos generales, acusa de abuso de
poder, so capa de teológico origen de la autoridad, precisamente en momentos en
los que la sociedad se seculariza y desacraliza. Igualmente maximalista es su
extrapolación a la escuela, interpretada con esquemas teológicos y con una
cosmovisión de quien está altamente preocupado por el sentido de las cosas y las
instituciones. Es decir, en la contestación de lllich hay una amalgama religiosa,
mística, política y social. Sus diatribas son paralelas a las dirigidas contra la Iglesia
establecida; y su demagogia guarda paran con su posición en la asamblea de
creyentes, que fue de privilegio. ¿Posible extender la misma actitud a lo temporal y
político, que a lo religioso y eclesiástico? ¿Puede secularizarse ideológicamente el
CIDOC, por el hecho de una falta de intelección con la Curia romana? ¿Es igual
preparar misioneros que politiquear?
Las alternativas a la escuela ideadas por lllich desarman más aún a su autor de
fuerza probatoria. Si la crítica negativa es censurable, por exagerada, las soluciones
positivas son muy pobres, ilusorias, utópicas y vulnerables. Ni Platón, ni las utopías
modernas han llegado, en su imaginación, a inventar una nomenclatura y unos
organismos supletorios de la escuela. Si ésta es inadmisible, si ésta no ha podido
subsanar los males sociales que nos aquejan, los organismos propuestos por Illich
son más débiles aún, y sus “funcionarios” son los educadores de antes con otro
ropaje más pomposo. Pienso que todas las funciones asignadas a estos nuevos
organismos pueden ser satisfechas por la escuela reformada,
INTRODUCCIÓN
Al hablar del proceso de aprendizaje que sigue cualquier persona está implícito que
éste se construye desde que un sujeto tiene contacto con objetos y relaciones con
otros individuos. De esta manera, la familia constituye el primer agente educativo y
socializador, seguido por la comunidad que lo rodea y por la escuela. Estas
instituciones por sí mismas conforman organizaciones complejas y de gran influencia
en el proceso educativo, y constituyen tres eslabones inseparables e interactivos que
inciden permanente mente en el desarrollo de un individuo.
Las relaciones que se establecen entre estos tres contextos propician la construcción
de aprendizajes cognitivos, afectivos y morales que permiten la construcción de la
propia identidad, la de las instituciones donde se actúa y la de la misma sociedad.
Lo anterior permite observar que hablar de educación implica ir mucho más allá de
las puertas de una escuela: implica trabajar en forma responsable y coordinada con
los agentes educativos involucrados en la convivencia diaria quienes contribuyen a la
formación de los niños y jóvenes que en un futuro serán los participantes directos en
el desarrollo social, político y económico de nuestra nación.
PROPÓSITO
Que el que participa en la educación identifique, dentro de su comunidad educativa,
el impacto que tienen los contextos político, social y económico en la educación y su
influencia en el desarrollo social y económico de la nación.
SOCIEDAD Y EDUCACIÓN
En todo sistema educativo existen diferencias que propician que la educación tenga
que equilibrarlas para lograr la equidad en la prestación del servicio, logrando esto
por medio de estrategias diseñadas específica mente para dar atención a estas
prioridades. Así vemos que es necesario estimular la participación de la mujer en los
diversos contextos de la sociedad con objeto de ampliar las expectativas del papel
que puede desempeñar en los diversos campos de la vida, y también apoyar a las
comunidades de población indígena que poseen diferentes lenguajes y culturas,
cumpliendo con los fines educativos de la nación pero a la vez rescatando la cultura
particular. Otros ejemplos son los sectores de discapacitados, emigrantes, habitantes
de zonas rurales y marginadas, y analfabetas, entre otros, que requieren un sistema
educativo flexible para alcanzar la equidad educativa y aprovechar los
conocimientos, habilidades y actitudes con las que cuentan para su pleno desarrollo
individual y social.
POLÍTICA EDUCATIVA
Política internacional de la educación
La Comisión Internacional sobre la Educación para el Siglo XX realizó una
investigación en diferentes países y con especialistas de diversas partes del mundo,
para conocer las necesidades educativas y de formación que demanda el siglo XXI.
Los resultados publicados en el Informe de esta Comisión plantean la necesidad de
desarrollar una política educativa basada en cuatro aprendizajes, que en el
transcurso de la vida de cada persona representaran pilares del conocimiento:
aprender a conocer, aprender a hacer, aprender a ser y aprender a convivir.
Aprender a convivir. Significa aprender a vivir con los demás. Valorarse a sí mismo y
reconocer a los otros, así como fomentar el diálogo y el intercambio de argumentos
por medio del trabajo con proyectos y objetivos comunes, es necesario para lograr
una educación en la cual los valores del pluralismo ante el individualismo, la
comprensión mutua y la paz sean característicos del siglo XXI.
Las políticas educativas que se implanten en cada país deberán hoy, más que
nunca, contribuir a desarrollar en los seres humanos la libertad de pensamiento, de
juicio y de sentimiento para que alcancen su plenitud.
A partir de la modernización educativa se reconocen retos que hay que superar para
llevar al sistema educativo mexicano a responder a las necesidades nacionales que
adquirió al ingresar, con el Tratado de Libre Comercio, a la sociedad económica
global; también se plantean soluciones de cambio. Los retos educativos y las
estrategias de solución que se plantean se refieren a:
Esta situación se debe a que muchos profesores se sienten seguros con su trabajo y
el cambio representa una inestabilidad.
Dentro de las políticas generales de las bases para el Programa 2001-2006 para el
Sector Educativo del presente gobierno, se marca la necesidad de un esfuerzo de la
sociedad en conjunto con los diferentes niveles de gobierno.
Políticas sustantivas
• Programa educativo centrado en el aprendizaje.
• Atención a la dimensión formativa.
• Concepción de la educación como necesidad vital y proceso permanente.
Políticas de apoyo
• Estructuras de apoyo eficientes.
• Instituciones educativas dignas.
• Informática educativa.
• Financiamiento suficiente asignado con criterios claros.
• Programas compensatorios.
• Federalismo.
• Participación social.
Como política educativa nacional, permite observar que están plasma dos los
requerimientos de una sociedad diversa, de una nación con características
geográficas y de población heterogéneas que requiere un sistema educativo flexible
y adaptado a las necesidades regionales, sin perder de vista los fines nacionales. La
realidad económica actual de México está presente, al reconocer la globalización del
mercado, la necesidad de una educación que responda a la política económica
nacional, a la optimización de recursos locales, a la necesidad de fuentes de
financiamiento educativo y a la participación de la sociedad para el logro de una
educación de calidad y con mayor cobertura.
educación de calidad solamente a las clases privilegiadas. En otros casos existe una
deficiente distribución del gasto educativo a causa de la falta de recursos,
propiciando la inequidad en las oportunidades educativas de los pueblos, por lo que
se debe evitar que se acentúen o perpetúen los rezagos y las diferencias.
Conclusiones
• El entorno político, social y económico da vida al sistema educativo, ya que por
medio de un proyecto global educativo se logrará o no la formación del perfil del
egresado que requieren la sociedad y las necesidades económicas de la nación,
estado o región.
• La política educativa, por su parte, plantea los procedimientos mediante los cuales
se llevará a cabo el proceso educativo en una nación, entidad o región, y se
encuentra legislada en la Constitución. Esta legislación permite que la educación sea
un derecho del cual gozan los ciudadanos.
• A partir de esta legislación y, en la mayoría de los casos, de una legislación
específica para la educación desprendida de la Constitución, se plantea el Plan de
Desarrollo Educativo, el cual representa el proyecto global al que se aspira. En dicho
proyecto se plasman propósitos, metas, perfiles de egreso, metodologías, contenidos
programáticos, concepto de profesor y estudiante, evaluación, participación de la
sociedad, y todos los elementos con los que cuenta el proceso educativo.
Existen algunos estudios realizados por la UNESCO que permiten conocer las
necesidades educativas de diversos países, la política global que se vive en la
actualidad y los retos que enfrenta la educación para el futuro. Ante este análisis, la
Comisión Internacional sobre la Educación para el Siglo XXI plantea indicadores
generales que es importante que consideren las políticas educativas mundiales.
Estos indicadores con forman cuatro pilares de la educación, que de acuerdo con los
requerimientos educativos actuales y futuros es necesario desarrollar en los
estudiantes: aprender a conocer, a ser, a hacer y a convivir. Se habla aquí de un
aprendizaje por medio de la vida.
Capítulo VI
Teorías de la Educación
EL CONSTRUCTIVISMO
El constructivismo, en sentido estricto, no es una sola teoría sino un conjunto de
teorías, desarrolladas fundamentalmente desde la psicología cognoscitiva, que se
refieren cada una de ellas a diversos aspectos de la construcción del conocimiento.
Un lugar destacado dentro de di cha perspectiva lo tiene el psicólogo suizo Jean
Piaget. Otros dos autores que han aportado importantes elaboraciones conceptuales
sobre el aprendizaje escolar son Lev Vygotsky y David Ausubel y colaboradores.
El primer atributo quiere decir que la inteligencia está formada por estructuras o
esquemas de conocimiento, cada una de las cuales conduce a conductas diferentes
en situaciones específicas. En las primeras etapas de su desarrollo, el niño tiene
esquemas elementales que se traducen en conductas concretas y observables de
tipo sensomotor: mamar, llevarse el dedo a la boca, etc. En el niño de edad escolar,
aparecen otros esquemas cognoscitivos más abstractos, denominados operaciones.
Estos esquemas o conocimientos más complejos se derivan de los sensomotores por
un proceso de internalización, es decir, por la capacidad del niño de realizar
mentalmente lo que antes hacía con su cuerpo. Esas operaciones se refieren a la
capacidad de establecer relaciones entre objetos, sucesos e ideas. Los símbolos
matemáticos y de la lógica representan expresiones más elevadas de las
operaciones.
asimilarlo, pero sólo puede hacerlo de una manera indiferenciada, proceso que se
denomina asimilación generalizadora. Después de ella se produce la asimilación
recognoscitiva, mediante la cual ese estímulo es reconocido y finalmente integrado.
Como es fácil de apreciar, en la referencia a esta interacción entre realidad,
asimilación y acomodación se ve la concepción constructivista de la teoría del
aprendizaje de Piaget. El conocimiento se va construyendo en esa interacción.
El proceso de equilibración
Si bien la formación de los esquemas surge del juego de los procesos de asimilación
y de acomodación, el desarrollo intelectual propiamente dicho se origina de la forma
que toma la relación entre ambos procesos, específicamente, de las situaciones de
equilibrio y desequilibrio que se producen entre ellos. Cuanto mayor sea el equilibrio,
menores serán los errores en la interpretación de los casos que se presentan a la
experiencia de la persona. Pero, por otro lado, el aprendizaje o cambio cognoscitivo
surge de situaciones de desequilibrio entre la asimilación y la acomodación.
Por ejemplo, para adquirir el concepto de fuerza, el niño debe relacionarlo con otros
conceptos de menor jerarquía que ya posee, como son los conceptos de masa y
movimiento. El equilibrio ocurre cuando se produce la integración en un nuevo
esquema cognoscitivo. De no suceder esto, se produce un desequilibrio entre los
esquemas existentes, un conflicto cognoscitivo (“es esto que no puedo entender”).
Siempre hay que tener presente, como se dijo antes, que el aprendizaje ocurre en
situaciones de desequilibrio, que se procura llevar a situaciones de equilibrio entre
En las secciones que siguen se amplían estos conceptos junto con otros que son
relevantes en la teoría socio histórica cultural de Vygotsky. De lo dicho hasta aquí,
debe conservarse la importante caracterización del aprendizaje como internalización
de los significados que tienen los elementos culturales en contextos de interacción
social.
La mediación
La esencia de la conducta humana la constituye el hecho de estar mediada por
herramientas materiales o técnicas y por “herramientas” psicológicas o signos.
Vygotsky decía, tomando una cita de Sacan, que: “Ni la mano desarmada ni el
intelecto dejados a sí mismos son de mucho valor. Las cosas se hacen con
instrumentos y medios.” Con tal referencia, el psicólogo ruso quería decir que el
hombre no se enfrenta al mundo con su sola naturaleza biológica, sino que su
conducta está mediada —ayudada— por los dos tipos de herramientas o medios que
hemos señalado.
Las herramientas materiales le proporcionan al hombre los me dios para actuar sobre
el ambiente que lo rodea y para modificarlo.
Uno de los sistemas más importantes de signos y significados está constituido por el
lenguaje, tanto en su forma escrita como hablada. Su internalización y su práctica es
una herramienta principal para el desarrollo del pensamiento y su organización. Las
primeras voces del niño se conectan con su pensamiento directo y con su des arrollo.
Luego el niño une ese pensamiento al lenguaje externo, con lo cual se origina el
pensamiento verbalizado (el lenguaje tiene su representación en el pensamiento y
éste en el lenguaje). Poco a poco, el niño va asimilando la comunicación externa que
le permitirá participar en el diálogo y la conversación con otras personas y, con ello,
participar en la comunidad cultural de la cual forma parte. En este proceso de
interacción entre pensamiento y lenguaje se producen cambios radicales en la
actividad mental.
En el desarrollo cultural del niño toda función aparece dos veces: primero, entre
personas (de manera ínter psicológica), y después, en el interior del propio niño (de
manera intrapsicológica). Esto puede aplicarse igualmente a la atención voluntaria, a
la memoria lógica y a la formulación de conceptos. Todas las funciones superiores se
originan como relaciones entre seres humanos. Según lo afirmado en esta ley de la
doble formación, el aprendizaje precede temporalmente al desarrollo mental, a
diferencia de lo sostenido por Piaget, para quien ese desarrollo es condición
necesaria para el aprendizaje.
próximo, que Vygotsky define como “la distancia entre el nivel real de desarrollo,
determinado por la capacidad de resolver independiente un problema, y el nivel de
desarrollo potencial, determinado por medio de la resolución de un problema bajo la
guía de un adulto o en colaboración de otro compañero más capaz”. En otras
palabras, el niño tiene, en un momento dado, un cierto nivel de desarrollo real, que
puede ser medido individualmente, por ejemplo, mediante una prueba, y otro nivel de
desarrollo potencial, en el mismo campo de conocimiento, constituido por funciones
mentales que están en proceso de maduración y que pueden llegar a su madurez
con la colaboración de un adulto (por ejemplo, el profesor) o de un compañero más
competente.
Pero es importante tener en cuenta, en este último paso que, según la teoría que
estamos exponiendo, lo que el niño puede hacer con la ayuda de un adulto, puede
hacerlo luego por sí solo. Vygotsky precisa que a la zona de desarrollo próximo no se
llega mediante la práctica de ejercicios mecánicos, aislados, atomizan do una cierta
materia.
Tipos de aprendizaje
Según Ausubel, «ningún interés teórico es más esencial ni más urgente, en el estado
actual de nuestros conocimientos, que la necesidad de distinguir con toda claridad
los principales tipos de aprendizaje”. Esta importancia lo lleva a diferenciar, por un
lado, el aprendizaje por recepción (o memorístico) del aprendizaje por
descubrimiento, y, por otro lado, el aprendizaje por repetición del aprendizaje
significativo. Entre los extremos de ambos pares se ubican grados intermedios, así
como subtipos de los tipos principales.
De acuerdo con lo dicho, hay un aprendizaje por recepción y por repetición, a la vez,
cuando el contenido total de lo que se va a aprender se presenta en forma ya
terminada, de modo que el alumno no tiene que descubrir por sí mismo. Por ejemplo,
aprender el alfabeto, aprender un poema, un teorema, etc. En el caso opuesto, en el
aprendizaje por recepción y significativo, el material potencial mente significativo es
comprendido durante el proceso de internalización. Por ejemplo, el comprender
relaciones entre conceptos.
Sólo después de que esto sucede, ese contenido puede ser incorporado a la
estructura cognoscitiva del alumno y así volverse significativo. Como sabemos, la
mayoría de los contenidos de estudio se ad quieren mediante el aprendizaje por
recepción. En cambio, los problemas cotidianos se resuelven por descubrimiento. En
situaciones de laboratorio, este tipo de aprendizaje comprende el método cien tífico
y puede dar lugar a conocimientos muy importantes.
Siendo así [significativo], también a edad temprana los conceptos y las proposiciones
se adquieren comúnmente a fines de la primera infancia, en la edad preescolar y en
los primeros años de la escueta primaria a consecuencia del proceso inductivo de
resolución de problemas o haciendo descubrimientos autónomos. El niño muy
pequeño, por ejemplo, adquiere el concepto de silla abstrayendo los rasgos comunes
de ésta a partir de muchos encuentros incidentales con sillas de muchos y diferentes
tamaños, formas y colores y generalizando luego tales atributos. El aprendizaje por
recepción, por otra parte, aun que también a edad temprana, no se convierte en un
rasgo sobresaliente del funcionalismo intelectual hasta que el niño madure en lo
cognoscitivo lo suficiente para, sin experiencia empírica ni concreta, comprender
conceptos y proposiciones expuestos verbalmente (hasta que comprenda, por
ejemplo, el significado de “democracia” o de “aceleración” basándose en definiciones
de diccionario).
LA ETNOGRAFÍA CRÍTICA
La etnografía crítica coloca el estudio de la cultura, los significa das de las personas
y las experiencias de vida en una dimensión política, con metas democráticas y
emancipadoras- Sus fuentes se encuentran en el interaccionismo simbólico, en
algunas formas de neomarxismo y en orientaciones de los movimientos feministas.
Sociedad. Los procesos sociales deben considerar las relaciones asimétricas que se
dan en determinado contexto social e histórico. De acuerdo con algunas formas de
neomarxismo, los etnógrafos críticos conceden especial importancia a la dialéctica
entre las condiciones materiales y la conciencia. La realidad social está fuertemente
es estructurada por las relaciones materiales que están implícitas en formas
culturales.
LA PEDAGOGÍA CRÍTICA
La pedagogía crítica plantea que la formación e información que se imparte en las
escuelas debe considerar el contexto social concreto de la sociedad en la cual se da
la educación. Justamente, el eminente educador brasileño Paulo Freire ha sostenido
que el cambio educacional debe estar acompañado por transformaciones profundas
de las relaciones de producción y de sus expresiones políticas e ideológicas. En ese
proceso, la pedagogía crítica debe ser el principal instrumento para el desarrollo de
una “conciencia crítica” entre los pobres. Tal conciencia, dice Freire, no puede ser
formada en abstracto, sin la debida consideración del contexto histórico concreto
dentro del cual el conocimiento es producido y traspasado.
La imposibilidad de ser neutros frente al mundo, ante el futuro que lo entiendo como
un tiempo para ser hecho a través de la transformación del presente nos coloca
necesariamente ante el derecho y el deber derecho y el deber de posicionamos
como educadores, el deber de no callarnos, el derecho y el deber de ejercer la
práctica educativa en coherencia con nuestra práctica política.
Conviene tener presente que la pedagogía crítica no sólo con tiene propuestas
meramente teóricas, sino que abre un fértil campo a la investigación social,
económica y política en cuanto a la descripción de las condiciones concretas en las
cuales se ofrece la educación en nuestros países, entre ellas, las múltiples
desigualdades y limitaciones sociales y culturales que impiden o bloquean los
intentos por conseguir objetivos pedagógicos de especial importancia para la
formación de los escolares, con el propósito de actuar en una sociedad
verdaderamente democrática.
Por su lado, Henry Giroux, otro representante de la pedagogía crítica, dice que las
escuelas deben ser lugares de resistencia, de un esfuerzo conjunto entre profesores
y estudiantes para trabajar dentro de un marco pedagógico liberador. En la misma
posición de la pedagogía crítica se encuentra el profesor de la Universidad de
Barcelona, Ramón Flecha, según se expresa en el artículo “Las nuevas
CUESTIONARIO
1.- Concepción de la evaluación en la escuela tradicional.
a) Como examen.
b) Centrada en la respuesta.
c) Centrada en los conocimientos.
d) Todas las anteriores.
3.- Nombre que recibe el movimiento renovador con el que se identifican múltiples
innovaciones pedagógicas.
a) Escuela tradicional.
b) Escuela aristotélica.
c) Escuela nueva.
d) Escuela innovadora.
12.- Problemas que considera Jean Piaget, más comunes en la educación actual.
a) La falta de educación científica, la inclinación de la mayoría de los estudiantes por
las carreras humanísticas, literarias y sociales.
b) La deshumanización de los estudiantes debido a la socialización.
c) La falta de educación humanística y la inclinación de la mayoría de los
estudiantes a carreras científicas.
d) Ninguna de las anteriores.
19.- Desde el punto de vista de Neill Summerhill, el camino más rápido para dejar en
libertad las emociones es:
a) Hacer lo que se cree justo.
b) La supresión del miedo.
c) Meditar y en seguida actuar.
d) Todas las anteriores.
24.- Nombre del pedagogo que cree que el ser humano posee una potencialidad
natural para el aprendizaje.
a) Freinet.
b) Carl Rogers.
c) Rousseau.
d) Neill Summerhill.
28.- Hechos destacados en el campo pedagógico en los años 1917 a 1929 en Rusia.
a) La implantación de la coeducación, erradicación del sentimiento religioso en la
enseñanza, la masificación y autonomía universitaria, supresión de los títulos
académicos, la eliminación de las facultades de historia, filosofía y derecho.
b) Implementación de la educación básica para el obrero.
c) Autonomía de la educación media superior y eliminación de títulos.
d) La masificación de la coeducación y eliminación de las facultades de ciencia y
humanidades.
36.- En que Implican las políticas para el desarrollo de los procesos educativos.
a) Superación de los docentes de ambos géneros.
b) Funcionamiento regular de los centros educativos.
c) Centros educativos de calidad y cultura de evaluación.
d) Todos los anteriores.
BIBLIOGRAFÍA
Cobertura
La reorientación general de las políticas hacia metas cualitativas comienza a
ser facilitada por el descenso del ritmo del crecimiento demográfico, perceptible ya a
finales de la década de 1970. Sin embargo, no todos los niveles experimentaron su
efecto de manera tan clara como la educación básica; ya que en el nivel medio
superior la población potencialmente demandante creció a un ritmo mayor que las
nuevas oportunidades educativas. Por lo mismo, la cobertura como objeto de la
política educativa reviste hoy en día características diferentes de las que tuvo hace
treinta años.
Un primer factor que debe tomarse en cuenta para afrontar las exigencias
nacionales en materia de cobertura es la dinámica de la educación básica. En este
nivel el rezago se combatirá durante los próximos cinco años. En la escuela primaria
el rezago llega a una tercera parte de la población en edad de estudiar el sexto año,
y a un 60 por ciento por lo que se refiere al último grado de secundaria.
Otro factor que incide en los problemas que atañe a la educación media
superior y superior es el crecimiento desigual en la oferta de oportunidades en el
bachillerato y en el nivel superior. Entre 1980 y 1994 el bachillerato creció 83 por
ciento, mientras que la población estudiantil en educación superior creció sólo 68 por
ciento. Comenzó, así, la acumulación de un nuevo tipo de presión, de efecto menos
inmediato que el experimentado en los años setenta. Una proyección al futuro de
estas tendencias esboza un escenario de crecimiento de más del 25 por ciento de la
demanda por educación superior para el año 2000, en relación con el año 1995.
Líneas de acción
Se crearán estatales o regionales de oferta y demanda para los niveles medio
superior y superior encargadas de anticipar la oferta y la demanda en cada ámbito.
Las comisiones propondrán fórmulas para una mayor coordinación institucional ante
los procesos de selección y orientación de los aspirantes.
Calidad
Líneas de acción
Se impulsará la superación del profesorado de las IEMS y de las IES para
multiplicar el número de profesores con posgrado en las IES. La identificación y
Pertinencia
Una economía largamente protegida por altos aranceles inhibió el desarrollo
tecnológico y la capacitación de técnicos. Bajo estas condiciones se instauró una
inercia que conduce al grueso de la población que egresa de la educación básica
encaminarse, con independencia de su aptitud académica, a la educación superior, y
dentro de ella a la vertiente universitaria. Como resultado, el número de estudiantes
que termina sus estudios es bajo (entre 50 por ciento y 60 por ciento de los que
ingresan) y la demanda por programas de licenciatura se sigue concentrando en las
profesiones tradicionales.
Es necesario que cada institución perfile con nitidez su vocación regional y las
ventajas comparativas de sus programas de estudio. En ello juegan un papel
insustituible los siguientes factores: a) la comunicación a la sociedad de los
resultados y la calidad de los procesos educativos; b) los ajustes curriculares
regulares en consonancia con los cambios en el conocimiento y en la demanda de
conocimiento; c) la participación de actores de los ámbitos comunitario y productivo
en procesos relevantes de las instituciones educativas; d) la flexibilidad de las
instituciones para emprender expeditamente asociaciones con actores externos; e) la
figura del servicio social del estudiante y su compromiso de contribuir a la
satisfacción de necesidades; f) la relevancia de la investigación, mediante figuras
estatutarias que faciliten la colaboración con empresas y en proyectos conjuntos, y
que reconozcan los beneficios personales e institucionales que de ellos se deriven, y
g) la venta de servicios educativos y de investigación por parte de las instituciones
académicas, con el doble propósito de obtener fondos por esta vía y de relacionarse
orgánicamente con la sociedad y el mercado.
Líneas de acción
Organización y coordinación
La coordinación interinstitucional cuenta con instancias probadas como el
Cosnet, la Anuies y la FIMPES. En 1978 se instauró el Sinappes, que comprendió la
creación de consejos estatales y regionales para dotar de entornos adecuados a la
colaboración entre múltiples instituciones, con las autoridades y entre el sector
público y el privado. No obstante, la efectividad del sistema de planeación ha sido
desigual; existen propuestas que se han consolidado, pero también hay largos
periodos de reducida actividad.
Líneas de acción
Se revisarán e impulsarán las tareas de planeación y evaluación en las IEMS
e IES, en especial las que producen la Conpes y la Conaems. Se estudiará la
conveniencia de reestructurar el funcionamiento de los órganos de planeación,
evaluación y coordinación entre instituciones y sectores en los niveles estatal y
nacional además:
Consideraciones finales
La educación superior tiene que responder a las complejas aspiraciones que
se derivan de nuestra historia como nación y de los desafíos de la globalización. Las
metas de nuestra sociedad se han ratificado a lo largo del desarrollo nacional:
consolidar un sistema democrático y una economía competitiva que puedan sostener
el bienestar colectivo de la población y la reducción de la desigualdad social. Para
producir una sociedad basada en estos principios fundamentales, la educación, la
tecnología y la ciencia deben de funcionar con la máxima calidad y eficiencia.
Los actores
El artículo tercero de la Constitución mexicana precisa las competencias y
obligaciones respecto al sistema educativo, en especial las de los poderes públicos –
Federación, estados y municipios, lo que se llama globalmente Estado (no confundir
con los estados, que constituyen la Federación). Se establece una diferencia entre la
educación básica que el Estado “imparte” y los otros tipos y modalidades educativos
incluyendo la educación superior – que “promueve” y “atiende”. La educación
superior no se menciona, pues, sino en un inciso, y la educación media superior no
figura explícitamente. Del mismo modo, la Ley General de Educación no trata
prácticamente estos niveles, de no ser en lo que concierne a la formación de
maestros de educación básica.
Así pues, la Federación tiene una fuerza: aporta la mayor parte de los medios
financieros. Pero también tiene una debilidad: dada la autonomía de las
universidades, no ejerce influencia directa más que sobre el sector tecnológico y, con
los estados, sobre las escuelas normales. 1 Si se considera además la parte que
corresponde a la educación privada, puede decirse que los poderes públicos sólo
ejercen una influencia directa sobre una proporción que no llega a la quinta parte de
la matrícula de la educación superior y que es del orden de la tercera parte para el
nivel medio superior; de cualquier modo, una institución como el IPN, llamada
“desconcentrada”, o el CONALEP, “descentralizada”, parece gozar de una gran
autonomía de hecho.
1
Tres de ellas no son formalmente autónomas y dependen de los estados donde se ubican. Pero, salvo el
nombramiento de los rectores, no parece cambiar demasiado la situación.
quejan de que las decisiones financieras se tomen según reglas que no entiende,
que estarían más bien vinculadas con las costumbres históricas o con el peso político
de unos y otros. En resumen, esta competencia no les ayuda a progresar. En los
últimos años, no obstante, el gobierno federal ha comenzado a introducir estímulos
en algunos aspectos, a través del Fomes, del que ya hemos hablado.
que no sean muy globales. Durante nuestras visitas, también nos impactó el número
de estudiantes que han cambiado de campo de estudios, a menudo perdiendo el
beneficio de lo ya cursado, pero no se nos pudo dar ninguna cifra. Otra laguna
concierne las tasas de transferencia entre la educación media y la educación
superior: no se dispone ahí más que de una cifra global, por cierto sujeta a caución
en la medida en que la definición de los recién inscritos es poco clara, pero no hay
ningún dato, por ejemplo, sobre la proporción de bachilleres de la rama tecnológica
que siguen luego a las universidades, o los institutos tecnológicos; tampoco hay nada
sobre el número total de candidatos al ingreso a la educación superior (o media
superior), lo cual sin embargo resulta políticamente importante. Sería pues deseable
insistir sobre las informaciones y los estudios relativos a las tasas de transferencia al
final de cada año, los flujos y las trayectorias. Además, para ello no es necesario
recopilar cifras exhaustivas, ya que puede bastar con el seguimiento de muestras
representativas.
Sin embargo, más allá de los datos sobre el funcionamiento interno del
sistema, los factores externos y su interpretación están en la base de cualquier
estrategia. Pero si bien se toma en cuenta la dimensión demográfica, no se dispone
de ninguna información sobre el origen social de los estudiantes. En cuanto a su
destino en el empleo, sólo es objeto de estudios limitados, sin ninguna metodología
nacional, y sólo para los titulados, sin preocuparse por quienes abandonan los
estudios a medio camino. Sabemos que en México se estudia actualmente las
características de un sistema de información sobre el destino de los egresados: la
OCDE se ha esforzado por facilitar este trabajo y podría contribuir a su aplicación.
Consideramos, de manera más amplia, el establecimiento de un observatorio de las
relaciones formación/empleo como una prioridad. Existe además un sector en el que
es responsabilidad de la SEP establecer previsiones: el de reclutamiento de
maestros de educación básica.
un rápido vistazo a los trabajos efectuados, nos parece que se basan muy poco en
elementos cuantitativos, sin duda porque éstos no existen en forma suficiente.
Concertación y planeación
Sin embargo, los estudios estadísticos y prospectivos sólo son una base y hay
que disponer de un sitio donde se realice la concentración que desemboca en la
definición de una política. Existe sin duda un número importante de organismos que
podrían participar en tal definición: hemos conocido más de una decena en el ámbito
nacional, sin contar aquellos que se han creado en el ámbito de los estados o de
grandes regiones que agrupan a varios estados. Su funcionamiento parece, sin
embargo, muy desigual; algunos están en vida latente o nunca han funcionado
realmente. Sin duda convendría simplificar este paisaje, que también parece muy
complejo.
• No puede ser efectuada sólo por el gobierno federal, sino que todos los
actores deben estar asociados: la Federación, los estados, las instituciones
de educación superior, nosotros añadiríamos a representantes de la
sociedad y en particular del mundo económico.
Tal organismo podría adquirir gran autoridad, aun cuando no tuviese poder de
decisión y sus propuestas e informes se presentaran al Presidente y fuesen
discutidos periódicamente por el Congreso. Una de sus primeras tareas podría por
cierto consistir en preparar una ley-marco que precisara las misiones de la educación
superior, los grandes objetivos a alcanzar y algunos principios de organización en el
nuevo contexto económico y político. Sin embargo, su eficacia exige todo un trabajo
de estudio y de preparación entre diversos participantes. Puede pensarse en
particular en los estados: cada uno debería preparar su propia planeación y podría
crear un ámbito para discutir juntos sobre sus políticas de educación superior y
examinar sus relaciones con la Federación en ese terreno.
La aplicación
Desde nuestro punto de vista, la situación es muy distinta según se trate de la
educación media superior y superior, y examinaremos en forma separada ambos
niveles. Para el primero, la autonomía de las instituciones no tiene ninguna
justificación y recomendamos crear un sistema nacional con sus características
propias, como existe en los demás países. Para el segundo, en cambio, debe
respetarse la autonomía, como en la mayoría de los países, pero habrá de ser
redefinida: debe ejercerse en el marco de la política fijada a nivel federal.
Una red necesita ser conducida, en el sentido de que hemos dado a esta
palabra: suscitar y sostener las iniciativas que vayan en el sentido de la política
nacional, y luego permitir su difusión; garantizar, pues, una coherencia. He aquí en
Vimos por cierto durante nuestras visitas que se estaban dando en muchos lugares
discusiones sobre la organización interna. Pero es difícil hablar de ellas en general,
ya que la organización, el gobierno y la administración de las instituciones presentan
una gran variedad en función del tipo y el tamaño: ¿qué tienen en común en estos
aspectos una institución reciente de algunos cientos de estudiantes y la UNAM que
podría ser considerada como un sistema en sí misma? Tendremos en consecuencia
que conformamos aquí con algunos principios generales.
RECOMENDACIONES
La tradición de los exámenes de la OCDE dicta que se dé acerca de las
principales cuestiones suscitadas un amplio intercambio de opiniones ente los
examinadores, las autoridades nacionales y los delegados de los países miembros.
El objetivo de este intercambio de puntos de vista es discutir en forma profunda las
recomendaciones de los examinados sobre las grandes orientaciones de la política
de educación.
Muchas indican direcciones a explorar más que medidas detalladas, las que
corresponderá definir a las autoridades mexicanas. Sabemos además que la
aplicación de estas recomendaciones con frecuencia presupone que se satisfagan
ciertas condiciones o que se realicen cambios previos. Sería interesante situarlas en
el contexto de las siguientes preguntas:
Prioridades cuantitativas
Para precisar las prioridades, hay que tener una visión de conjunto de las
formaciones postobligatorias y, habida cuenta de las restricciones presupuestales,
identificar los sectores a consolidar y aquéllos que deben ser desarrollados.
Equidad
1
La costumbre es que los países examinados rindan cuenta al Comité de Educación de la OCDE, luego de un plazo de cerca
de dos años, acerca de la evolución de la situación nacional en los campos cubiertos por el examen y los progresos realizados
en la aplicación de las recomendaciones.
- Redefinir el servicio social de los estudiantes para que se ejerza a favor de los
medios desfavorecidos, formar a quienes lo dirijan, determinar en el ámbito
local los proyectos con los núcleos de población que podrían beneficiarse de
ellos, mediante un trabajo conjunto entre las instituciones de formación y las
administraciones estatales.
Diferenciación y flexibilidad
Las necesidades de la sociedad, y en particular la transformación de las
salidas profesionales, exigen una ampliación de las formaciones, una diversificación
de los niveles de salida y una movilidad de los estudiantes en el espacio y el tiempo.
Este debería conducir a hacer las trayectorias más flexibles y a desarrollar los niveles
de diplomas intermedios, en el marco de ramas progresivas, accesibles en cuanto a
formación inicial así como a formación continua.
- Formular estudios de licenciatura más flexibles; especialización progresiva;
conocimientos comunes (en informática, economía, idiomas), ya sea bajo la
forma de un tronco común, o con una adaptación más específica a cada rama;
distribución modular en créditos;
- Preparar, en particular, una reforma de las escuelas normales que las acerque
a las universidades y permita una movilidad de los estudiantes entre unas y
otras;
Calidad
Tras el periodo de desarrollo cuantitativo, se consolida hoy en día la
preocupación de la calidad. Un primer paso consiste en ponerse en condiciones de
garantizar tal calidad, y en primer lugar la de los diplomas otorgados, mediante
evaluaciones indiscutibles. Podrá entonces trabajarse para mejorarla, y en particular
para disminuir el número de fracasos y de abandonos.
Recursos financieros
Las instituciones públicas reciben del gobierno federal la mayor parte de sus
recursos. Sin embargo, los criterios que guían esta adjudicación no son ni claros ni
públicos. Resulta indispensable una corrección sólo con esos recursos; pero
deberán buscar otros nuevos merced a la profundización de sus relaciones con la
economía y la sociedad.
¿Cómo conducir a los actores a actuar para aplicar una política nacional de
educación que responda a las necesidades del país? Esto exige medidas que
conciernen el ámbito nacional, el de los estados, el de las instituciones, y también las
relaciones entre ellos.
La organización federal: