Ensayo Derecho Administrativo 2019
Ensayo Derecho Administrativo 2019
Ensayo Derecho Administrativo 2019
INTRODUCCION
En Venezuela, el ejercicio de la función de control administrativo está atribuida como función propia
a los órganos que ejercen el Poder Ciudadano, en particular a la Contraloría General de la República,
pero en este caso, ello tampoco implica una atribución exclusiva y excluyente, sino que al contrario,
los otros órganos estatales pueden y deben ejercer la función de control administrativo. Por tanto, la
función de control administrativo como actividad privativa e inherente del Estado mediante la cual
sus órganos supervisan, vigilan y controlan las actividades de otros órganos del Estado o de los
administrados, se ejerce por tanto por diversos órganos estatales y en relación con la Administración
Pública, puede clasificarse como control político, administrativo, fiscal y jurisdiccional. Analizando su
origen podemos llegar a entender su concepto, el cual inicialmente consistió ese control en
la libertad procedimental o informalismo que tenían las autoridades administrativas para cumplir su
función. Lo que nos lleva a realizar las siguientes caracterizaciones, a saber:
Proceso y Procedimiento Administrativos. Diferencias.
Procedimiento administrativo, se refiere a una serie de actos, o la cadena de actos de distintos
alcance y contenido – actos de tramite- en procura de la obtención del último eslabón de aquel el
acto final- en el que se contiene la voluntad de la administración pública. Se entiende por PROCESO,
el medio de discusión de dos litigantes ante una autoridad, según cierto procedimiento
preestablecido por la ley.
Así también tenemos que un PROCEDIMIENTO es toda actividad, privada o pública, que requiere de
una consecución de actos.
El procedimiento administrativo está regulado en la LOPA y ésta establece en su Art. 1 a quién se le
aplica esta ley. El Procedimiento administrativo es el cauce formal de la serie de actos en que se
concreta la actuación administrativa para la realización de un fin. El procedimiento tiene por finalidad
esencial la emisión de un acto administrativo.
A diferencia de la actividad privada, la actuación pública requiere seguir unos cauces formales, más o
menos estrictos, que constituyen la garantía de los ciudadanos en el doble sentido de que la
actuación es conforme con el ordenamiento jurídico y que esta puede ser conocida y fiscalizada por
los ciudadanos.
Pudiendo ser esquematizadas estas Diferencias para fines didácticos de la siguiente manera:
PROCESO PROCEDIMIENTO
Proceso es sinónimo de juicio o causa legal. Procedimiento son los trámites y la forma en que se
medio de discusión de dos litigantes llevaante
el juicio.
una autoridad procedimiento preestablecido por la ley
Procedimiento Administrativo Ordinario: Iniciación, Sustanciación, Terminación
“Conjunto de actos y de trámites que la administración efectúa para adoptar decisiones jurídicas con
trascendencia contra terceros”.
La Iniciación: Como lo indica su nombre, es la primera y necesaria etapa de todo procedimiento.
Iníciese de oficio o a solicitud de parte interesada, todo procedimiento debe regirse por los principios
y reglas de alcance general, consagrados en esta ley. La iniciación del procedimiento
administrativo puede producirse de oficio o a instancia de parte
La Sustanciación: Esta fase del procedimiento es, normalmente, la que ocupa la mayor parte del
tiempo empleado hasta la emisión del acto administrativo. Se llama de sustanciación (o de
instrucción) porque en ella se deben recoger y valorar todos los elementos que se han de tener en
cuenta para la decisión final, que pasarán a formar parte del expediente abierto para el asunto en
cuestión.
La Terminación: Tal y como lo indica su nombre, es la etapa final del procedimiento. Consiste en
adoptar el acto que pone fin al mismo. Es fundamental acotar que todo procedimiento debería tener
un fin normal, es decir a través de un acto resolutorio que decide sobre lo planteado, esto ocurre
durante la etapa de sustanciación. Sin embargo, existen formas que se escapan de esta normalidad
de la terminación del procedimiento, pero que el ordenamiento jurídico atribuye la misma eficacia de
darlo por terminado, como son la perención y el desistimiento y por otra parte, el silencio –
administrativo de efectos negativos.
Los Recursos Administrativos
Por recurso administrativo entendemos la impugnación de un acto administrativo por ante un órgano
de la Administración que puede ser el propio autor del acto o su superior jerárquico.
Cabe señalar que la Ley LOPA establece tres tipos de recursos administrativos, a saber; El Recurso de
Reconsideración, El Recurso Jerárquico y el Recurso de Revisión.
REQUISITOS Y EFECTOS
La Ley Orgánica de Procedimientos Administrativos (LOPA) en su artículo 18 establece que todo acto
administrativo deberá contener:
Nombre del Ministerio u organismo a que pertenece el órgano que emite el acto.
Nombre del órgano que emite el acto.
Lugar y fecha donde el acto es dictado.
Nombre de la persona u órgano a quien va dirigido.
Expresión sucinta de los hechos, de las razones que hubieren sido alegadas y de los
fundamentos legales pertinentes.
La decisión respectiva, si fuere el caso.
Nombre del funcionario o funcionarios que los suscriben, con indicación de la titularidad
con que actúen, e indicación expresa, en caso de actuar por delegación, del número y fecha del acto
de delegación que confirió la competencia.
El sello de la oficina.
Recurso de Reconsideración.
El recurso de reconsideración es el que se intenta ante la propia autoridad que dictó el acto, para que
lo reconsidere. Sólo es procedente contra los actos administrativos de carácter particular, es decir, las
declaraciones productoras de efectos individuales. La oportunidad para intentarlo es dentro de
quince (15) días siguientes a la notificación del acto que se impugna. Este recurso debe ser propuesto
ante el funcionario que lo dictó. Si por el contrario, el acto pone fin a la vía administrativa, la decisión
deberá recaer dentro de los noventa (90) días siguientes a la fecha de la interposición. Artículo 94
LOPA.
Recurso Jerárquico o Institucional.
Es el que se intenta ante el superior jerárquico a los efectos de que lo revise. No podrán los
interesados intentar el recurso Jerárquico sin haber previamente interpuesto el recurso de
reconsideración no podrá ser admitido el recurso jerárquico sino después de resuelto
desfavorablemente el recurso de reconsideración, o de vencido inútilmente el lapso legal para su
decisión, caso en el cual se entenderá negada la pretensión del recurrente. Para la interposición del
recurso jerárquico la Ley fija el plazo de los quince (15) días siguientes a la negativa del recurso de
reconsideración. En esa oportunidad el interesado deberá formular el recurso jerárquico
directamente ante el ministro. Artículos 95 y 96 LOPA.
Recurso de Revisión.
En cuanto al recurso de revisión, también se intenta ante el superior jerárquico, pero por motivos
muy precisos, derivados de hechos que sobrevengan después que un acto se ha dictado. Finalmente,
la Ley Orgánica de Procedimientos Administrativos consagra el recurso de revisión contra los actos
administrativos firmes. En cuanto a la decisión del recurso de revisión, el Ministro debe adoptarla
conforme al artículo 97 de la Ley Orgánica, dentro de los 30 días hábiles siguientes a la fecha de su
presentación, produciéndose igualmente en este caso, ante la ausencia de decisión en dicho lapso, la
figura del silencio administrativo previsto en el Artículo 4° de la Ley Orgánica, quedando por tanto
abierta la vía contencioso-administrativa, de acuerdo al Artículo 93 de la misma Ley.
RECURSOS CONTENCIOSOS ADMINISTRATIVOS
El recurso contencioso administrativo es una actuación de los particulares o de las entidades,
corporaciones e instituciones de derecho público o de entidades que ostenten la representación o
defensa de intereses de carácter general o corporativo, en la que se demanda de la Jurisdicción
contencioso-administrativa la declaración de no ser conforme a derecho, y, en su caso, la anulación
de los actos y disposiciones de las Administraciones Públicas.
A estos efectos se entiende por Administraciones Públicas:
A) La Administración General del Estado
B) Las Administraciones de las Comunidades Autónomas.
C) Las Entidades que integran la Administración Local
D) Las Entidades de Derecho Público que sean dependientes o estén vinculadas al Estado, las
Comunidades Autónomas o las Entidades Locales.
Sin embargo en Venezuela, la Constitución Nacional cuando ordena el sistema político de
funcionamiento de la Administración Pública en sus diferentes ramas y niveles, y establece en el
“TÍTULO V DE LA ORGANIZACIÓN DEL PODER PÚBLICO NACIONAL”, “Capítulo III Del Poder Judicial y
del Sistema de Justicia”, “Sección primera: disposiciones generales”, su artículo 259 lo siguiente:
“Artículo 259. La jurisdicción contencioso administrativa corresponde al Tribunal Supremo de Justicia
y a los demás tribunales que determine la ley. Los órganos de la jurisdicción contencioso
administrativa son competentes para anular los actos administrativos generales o individuales
contrarios a derecho, incluso por desviación de poder; condenar al pago de sumas de dinero y a la
reparación de daños y perjuicios originados en responsabilidad de la Administración; conocer de
reclamos por la prestación de servicios públicos y disponer lo necesario para el restablecimiento de
las situaciones jurídicas subjetivas lesionadas por la actividad administrativa.”.
Se observa pues, que no solamente se establece la Jurisdicción Contencioso Administrativa, sino que
además estable las funciones y órganos en los que ha de recaer ésta. Igualmente, en su “TÍTULO V DE
LA ORGANIZACIÓN DEL PODER PÚBLICO NACIONAL”, en el “Capítulo V Del Poder Electoral” en su
artículo 297 se establece:
“Artículo 297. La jurisdicción contencioso electoral será ejercida por la Sala Electoral del Tribunal
Supremo de Justicia y los demás tribunales que determine la ley.”.
Son éstas las dos únicas regulaciones que establece la Carta Magna, no obstante, se remite a la
creación de la Ley Especial de la Jurisdicción Contencioso Administrativa, de acuerdo a lo establecido
en la Ley del Estatuto de la Función Pública, en sus Disposiciones Transitorias, específicamente en su
disposición Transitoria Primera.
Con relación a los Recursos Contra los Actos Administrativos, la Ley Orgánica de Procedimientos
Administrativos, establece en su “TITULO IV De la Revisión de los Actos en Vías Administrativas; De la
Revisión de Oficio”, el Recurso de Reconsideración y el Jerárquico en el (Art. 90), así como el Recurso
de Revisión en la sección IV del mismo título, en el Artículo 97. Entiéndase pues, que la ley prevé los
mecanismos necesarios para corregir los excesos en los que eventualmente pudieren incurrir los
funcionarios públicos (servidores públicos) en el ejercicio de sus funciones con ocasión de la Función
Administrativa que ejerzan. Esto implica saber que los Actos Administrativos pueden ser revisados,
reconsiderados y hasta pueden ser anulables por el mismo órgano que lo emite, por el órgano que
tutela al ente o por tribunales de la jurisdicción contencioso administrativa. En consecuencia,
podemos entender que este tipo de recursos ponen límites a la actuación del Estado (de manera
indirecta, pues se limita con este tipo de acciones los desmanes que eventualmente fueren causados
en perjuicio de los intereses Directos y legítimos de los administrados).
En tal sentido, los administrados pueden contar con herramientas jurídicas que velan por los
intereses de los particulares a la vez que le ponen límites a la función prestacional del Estado en
cuanto a los desatinos, omisiones, excesos o errores que pudiese incurrir cualquier funcionario
público en ocasión del ejercicio de la función pública, y no es solamente un marco regulatorio
especial, sino, que es también un conjunto de garantías principistas establecidas desde el génesis
mismo del Estado – Nación venezolano, puesto que las normas directrices que regulan el ámbito de la
Administración Pública o funcionamiento del Estado, dimanan de la propia Constitución Nacional de
la República Bolivariana de Venezuela, estableciéndose entonces un sistema jurídico unitario y
armónico en que las normas rectoras son la Ley de Procedimientos Administrativos, conjuntamente
con la Ley orgánica de la Jurisdicción Administrativa en conjunción con el resto de las leyes que
versan sobre la materia Administrativa que de una u otra manera regulas sus procedimientos y
procesos internos a la luz de las normas rectoras que derivan de la máxima Norma Constitucional. En
consecuencia, patentiza y hace más que evidente, pues expresa taxativamente la responsabilidad
patrimonial del Estado, y conlleva a un nivel más exacto la responsabilidad del funcionario que
excede el ámbito de actuación de sus facultades y eventualmente puede vulnerar derechos e
intereses legítimos, directos, personales o difusos, en el ejercicio de la actuación pública del Estado.
Lo que de manera directa en caso de la gravedad del daño, puede incluso comprometer el patrimonio
del Estado, para poder reparar o resarcir el daño causado por negligencia, incumplimiento de
instrucciones u órdenes, impericia o intencionadamente, al administrado.
Esto nos hace llegar a establecer mecanismos de defensa de los intereses y derechos de los
administrados, hasta el punto que la actividad prestacional del Estado, acarrea responsabilidad no
solamente el Estado, sino como vimos en el aparte anterior, además de los funcionarios que
incurriesen en desatinos o faltas graves que pudiesen privar a los particulares o administrados de las
necesidades básicas y fundamentales que están ordenadas por la Constitución Nacional y el
entramado de leyes que son de corte prestacional de servicios públicos, pues, nuestro marco
referencial filosófico es de corte humanista que pretende se resuelvan aquellas necesidades
inmediatas de la población, a través del Estado, lo que genera consecuencialmente responsabilidades
no solamente a los funcionarios (como ya se dijo anteriormente), sino además por vía de
responsabilidad patrimonial del Estado.
Recursos de Interpretación
El recurso de interpretación procede en los casos, en los cuales exista, a juicio del recurrente, alguna
duda en cuanto a la correcta aplicación de una norma legal penal, ya sea en relación a su
interpretación o que exista alguna contradicción entre las normas del texto cuya interpretación se
solicita. El recurso de interpretación, en el caso de la Sala Penal, se concibe como un medio para
aclarar o interpretar el contenido y alcance de una norma penal de rango legal.
Medidas cautelares.
El juez o jueza, en cualquier estado del proceso podrá, a solicitud de las partes, dictar medidas
cautelares si considerase que las mismas son necesarias para evitar perjuicios irreparables o de difícil
reparación por la definitiva, tomando en consideración las circunstancias del caso. (Art. 109 LEFP.).
El juez sólo puede adoptar estas medidas si existe algún riesgo o circunstancia que pueda poner en
peligro o frustrar el desarrollo del proceso penal. Las medidas cautelares pueden ser de dos tipos,
personales o reales, según limiten la libertad de la persona, o la disponibilidad sobre sus bienes,
respectivamente.
BIBLIOGRAFIA
Allan R. Brewer-Carías, Contratos Administrativos, Editorial Jurídica Venezolana, Caracas,
1992, pp. 46 ss.; y “La interaplicación del derecho público y del derecho privado a la Administración
Pública y el proceso de huida y recuperación del derecho administrativo,” en Las Formas de la
Actividad Administrativa. II Jornadas Internacionales de Derecho Administrativo Allan Randolph
Brewer-Carías, Fundación de Estudios de Derecho Administrativo, Caracas, 1996, pp. 59 ss.
Allan R. Brewer-Carías “Aspectos del control político sobre la Administración Pública”
Alumnos:
Shirley Hernández
Luz Sojo
Milagros Fajardo
José Flores
Sol Bracamonte