Auditoria-interna-UNIDAD II
Auditoria-interna-UNIDAD II
Auditoria-interna-UNIDAD II
Objetivos académicos:
Alineación de las metas estratégicas para poder alcanzar los objetivos requeridos por la
organización.
Los hechos confirman que como función independiente dentro de las organizaciones, la Auditoría
Interna cumple un rol fundamental de aseguramiento y calidad, asistiendo a cada entidad no sólo
en el cumplimiento de temas regulatorios, sino en la excelencia de las operaciones y en la gestión
de los riesgos críticos de las compañías.
Las Normas Internacionales para el Ejercicio Profesional de la Auditoría Interna, emitidas por el
Instituto de Auditores Internos (The IIA), en su estándar Nº 1312, indica que: “ Deberían realizarse
evaluaciones externas, tales como revisiones de aseguramiento de calidad, al menos una vez cada
cinco años por un revisor o equipo de revisión cualificado e independiente, externo a la
organización”.
Una Evaluación de Calidad con enfoque en los negocios consiste en efectuar una revisión de la
situación actual de la Función de Auditoría Interna, considerando lo siguiente:
Los servicios de evaluación de calidad van mucho más allá que una revisión típica de
Auditoría Interna.
Además de evaluar los requerimientos del Instituto de Auditores Internos (IIA), el enfoque se
dirige a si la función de Auditoría Interna agrega realmente valor a la organización.
Identificación de brechas de la Función de Auditoría Interna y oportunidades de mejora.
Permite alinear la Función de Auditoría Interna con los objetivos del negocio de la
organización.
Posicionamiento de la Función de Auditoría Interna para resolver los desafíos que enfrenta la
organización.
Comparación de la Función de Auditoría Interna con las mejores prácticas de la industria.
La posición organizacional del departamento de auditoría Interna debe ser relevante para asegurar
el cumplimiento de las responsabilidades de auditoría asignadas. El director de auditoría interna es
responsable, en lo individual, ante la organización; y habrá de ser investido con autoridad
suficiente para promover la independencia del departamento y para asegurar un amplio margen
de cobertura de auditoría, que sean aceptados de manera adecuada los informes de auditoría y
que se adopten acciones apropiadas con base a las recomendaciones de auditoría.
En el tratamiento de los temas que anteceden, ya se dieron elementos para que el lector saque
sus propias conclusiones respecto de la ubicación del departamento de auditoría interna en una
entidad. En complemento habrá de considerarse un elemento indispensable para reforzar el juicio
al que se llegue, este elemento es el tamaño de la entidad u organización.
En entidades medianas o pequeñas que no cuentan con una gran infraestructura administrativa,
es más común que el departamento de auditoría interna dependa del director general o dueño de
la entidad, ya que por ser mayor su rango de control y supervisión, le permite este mejor
acercamiento hacia sus auditores internos.
En organizaciones de mayor envergadura debe pugnarse por el reporte directo del director de
auditoría interna hacia el director o gerente general, o al menos, reportar directamente al
contralor, quien depende del director general. Nunca a un menor nivel. Nunca al director de
finanzas.
En esta decisión de ubicación, favor de tomar en cuenta la relación costo-beneficio. Nunca crear
más infraestructura de la indispensable requerida; el exceso de intermediaciones distorsiona el
proceso de comunicación y reporte, y por supuesto, repercute en el incremento de costos
administrativo.
CORRECTA UBICACIÓN DEL DEPARTAMENTO DE AUDITORÍA INTERNA
2. El departamento de auditoría interna. Factores que influyen en su estructura y
dimensiones
Uno de los aspectos más importantes que inciden en la relación administración-auditoría interna
es la estructura y dimensión que se le habrá de dar al departamento de auditoría interna. El punto
determinante es cuántos auditores lo deben conformar, qué niveles jerárquicos lo integrarán, y
con qué infraestructura se le dotará. Decisión difícil y complicada. Con el propósito de aportar
elementos de juicio que coadyuven en este intento, enseguida se analizarán los factores a
considerar en esta determinante decisión; en el entendido de que no existen criterios,
lineamientos o parámetros definidos o recomendados, a los que se pueda acudir en soporte de
este proceso decisorio. Todo dependerá de la importancia que represente el departamento de
auditoría interna para la administración, nivel o grado de servicios deseados, y la capacidad de
convencimiento del director de auditoría interna sobre el gran potencial de apoyo y servicio que
puede aportar su departamento a laadministración.
Auditoría interna no es un costo, es una inversión, y como tal habrá de redituar beneficios y
rendimientos. Este aspecto en ocasiones es factible de ser medido, analícense, por ejemplo, los
tres siguientes cuestionamientos: ¿cuánto se perdió o desperdició por falta de vigilancia o
supervisión oportuna y adecuada?, ¿cuánto se ahorró o se obtuvieron beneficios gracias a una
oportuna intervención y recomendación de auditoría interna?, ¿en cuánto coadyuva o colabora
auditoría interna en el bienestar y futuro de la organización? El prescindir de los servicios de
auditoría interna, o el dotarla con una raquítica infraestructura puede ser un ahorro mal
entendido.
Recurrencia en errores o actos indebidos. ¿Son frecuentes y relevantes los errores administrativos
y operativos? ¿Es frecuente la incidencia en actos indebidos, fraudes, irregularidades e
ineficiencias? Si la respuesta es afirmativa, es un signo inequívoco de falta de control y
supervisión; se hace urgente la necesidad de contar con un sólido y bien estructurado
departamento de auditoría interna, que intervenga en plan preventivo para evitar su comisión. Es
más económico, y con un cúmulo de beneficios, prevenir quecorregir.
Confianza en la función de auditoría interna. La evolución y desarrollo que ha alcanzado la
profesión de auditoría interna, producto de un esfuerzo firme y sostenido, la ha hecho acreedora
de merecer la confianza de quienes creen y se apoyan en sus servicios. A mayor confianza, mayor
necesidad de ella y mayor apoyo e infraestructura para dotársele. Corresponde al auditor interno
actuar con honradez, disciplina, esmero, entusiasmo y profesionalismo para mantener y superar la
confianza que la administración ha depositado en él.
Mente abierta al cambio. Aceptar los servicios de una auditoría interna moderna infiere una
amplitud de criterio, y mente abierta para administrar con apoyo en esta disciplina. Auditoría
interna reportará aciertos y errores que fueron cometidos por el personal de la organización a
cualquier nivel, lo cual incluye mandos de dirección, y habrán de reconocerse y aceptarse.
Asimismo recomendará cambios en estilos y modos de administrar y operar, a las
recomendaciones serán evaluadas y aceptadas en lo aplicable con un espíritu de superación y
mejora. Auditoría interna, para el que la ejerce, y para el que se vale de sus servicios, debe ser una
dimensión de interacción hacia el cambio positivo, ya que no comulga con interactuantes de
criterio estrecho y resistente al cambio.
a) Perfil del puesto: Planear, coordinar y dirigir la ejecución de auditorías a todas las unidades
administrativas (direcciones, departamentos, secciones y oficinas) que conforman la organización,
así como, a las funciones que dependen de ellas.
• Planear a corto, mediano y largo plazos (de cero a un año, uno a tres años, más de tres años,
respectivamente) las actividades de auditoría interna.
Disponer la revisión permanente a la eficiencia con que está operando el sistema de control
interno establecido en la organización.
• Coordinar la planeación de las auditorías y otras actividades de auditoría interna con los
auditores externos.
• Vigilar que el comportamiento, desempeño y trabajos de sus subordinados se
lleven a cabo dentro de los más altos niveles de conducta, honradez, ética personal y
profesional, apego a lineamientos y disposiciones de orden legal y de pronunciamientos y
criterios institucionales.
Gerente de auditoría
Llevar a cabo planes, desarrollos y revisiones del desempeño de aquel segmento del plan
general de auditoría que está bajo su responsabilidad.
Promover sugerencias e innovaciones de auditoría y revisar los métodos para conducir las
auditorías.
c) Superior jerárquico. Trabaja directamente bajo la supervisión del director de auditoría, recibe
de él la orientación y el apoyo que sean necesarios.
La selección correrá por cuenta de un grupo integrado por el director general de la organización, el
director de auditoría y los otros gerentes de auditoría.
3. Atributos y cualidades. Contador público, de preferencia con estudios de postgrado; no se
descarta la eventualidad de allegarse de un profesional no contador público, con experiencia o
especialidad en los diversos tipos de auditoría a desarrollar; técnicamente actualizado; experiencia
previa indispensable; con madurez personal y profesional; casado; sin limitaciones para viajar y
trabajar en condiciones de eventual exigencia extraordinaria. Mesurado; objetivo; imparcial; justo
en sus apreciaciones, comentarios y observaciones; con independencia de criterio y acción; no
influenciable. Don de mando y excelentes relaciones humanas; alta capacidad de interacción.
Probada honradez.
Supervisor de auditoría
Seleccionar y asignar al personal que sea necesario para ejecutar las auditorías planeadas.
Coordinar con los otros supervisores la planeación de auditorías, así como la asignación de
personal.
Monitorear la conducción de las auditorías para asegurarse de que se cumpla con los
tiempos asignados.
Aprobar los cambios en el alcance de las revisiones, así como los ajustes correspondientes
en cuanto a tiempos de trabajo.
Identificar áreas que requieran especial atención por parte de la administración, incluyendo
patrones de deficiencias y asuntos delicados.
Auditor Sénior
a) Perfil del puesto: llevar a cabo los trabajos de auditoría a las unidades administrativas y
actividades de la organización, y atender instrucciones especiales de revisión que se le
encomienden. Trabajar con independencia en la ejecución de sus asignaciones, las cuales son
revisadas por un supervisor para asegurar consistencia y competencia profesional en todos los
trabajos que se le confíen. Recibir asignaciones con instrucciones generales respecto de los
propósitos y los objetivos a perseguir, y el tratamiento de problemas que se puedan presentar.
b) Principales obligaciones y responsabilidades.
Evaluar el grado en que las prácticas administrativas son conducidas de una manera eficiente
y económica, en que las operaciones están de acuerdo con las políticas y regulaciones, y el
grado en que se van alcanzando los resultados de los planes y programas.
Asistir al supervisor en la planeación de la auditoría y efectuar cada una de las etapas que le
son establecidas para el ejercicio de una auditoría o revisión. Instruir a cada uno de los
miembros de su equipo de trabajo en las responsabilidades que le corresponden.
Revisar los papeles de trabajos preparados por sus subordinados, y preparar el borrador del
informe de auditoría.
Preparar reportes internos, tales como planes y programas de auditoría, reportes de avance y
reportes de hallazgos significativos.
c) Superiorjerárquico.Estábajolasupervisióntécnicayadministrativadeunsupervisor de
auditoría.
Auditor auxiliar
1. Descripción delpuesto.
a) Perfil del puesto: Recibir, por parte del auditor encargado de la auditoría, asignaciones con
instrucciones específicas respecto del propósito de su revisión, y cómo llevar a cabo el trabajo que
le ha sido encomendado. Recibe orientaciones continuamente y su trabajo es monitoreado muy
de cerca por el encargado y el supervisor de la auditoría.
Desempeñar el trabajo asignado, o aquel segmento para ser revisado, con la dirección y
orientación del auditor encargado.
Discutir con la administración los resultados del trabajo, que incluye observaciones,
deficiencias encontradas, y acciones correctivas recomendables.
Estructura operativa
Como adición a los elementos referidos, también se considerarán aquellos conceptos propios de la
evaluación, el desarrollo y el control de la función de auditoría interna, como son: control de
tiempos de auditoría, la evaluación de desempeño de los auditores, capacitación y entrenamiento,
y el archivo de auditoría interna.
Su objetivo es identificar los elementos básicos de la estructura operativa soporte para el ejercicio
y práctica de la auditoría interna en sus tres tipos o modalidades: administrativa, operacional y
financiera.
Hay muchas oportunidades para que un supervisor de auditoría pueda ayudar a entrenar
subordinados obre la marcha, en materia de planeación, organización y control de desarrollo de la
auditoría asignada. Un supervisor siempre debe tener en mente que él es responsable por el
entrenamiento en campo del personal que tiene asignado; esta responsabilidad en ocasiones no
es asimilada debido a las propias presiones del trabajo, sin embargo, el supervisor debe recordar
que del desarrollo de sus subordinados dependerá en gran parte la solidez del área de auditoría a
su cargo. Este entrenamiento puede adoptar diversas posiciones: instrucciones, demostraciones,
estímulos, críticas y orientaciones. A su vez, el subordinado debe recibir las críticas de una manera
constructiva porque tienen como objeto ayudarlo.
En general, el método de dar instrucciones a subordinados juega un papel importante en el
entrenamiento interno sobre la marcha, ya que la comunicación de objetivos que fluye a través de
la organización es muy importante, como es el caso, por ejemplo, de explicar el significado y
propósito del trabajo a desarrollar, y relacionar una auditoría específica con el programa general
de auditoría. Los subordinados deben comprender cabalmente las instrucciones que se les dan. El
estudio, bajo supervisión, de reportes y papeles de trabajo, u otros papeles de trabajo referidos a
auditorías similares, ayudarán al auditor en su desarrollo.
Asesoría. Debe destacarse la importancia de la asesoría, ya que es un elemento que sirve para
aumentar y hacer más sólido el proceso de aprendizaje interno. Un efectivo programa de asesoría
ayuda a detectar puntos débiles de un auditor y sugerir la forma de corregirlos. La asesoría sirve
para captar el punto de vista del personal
Para el supervisor hay muchas oportunidades de desarrollar estas habilidades sobre la marcha.
El personal de auditoría debe ser motivado para expresarse con libertad en las diversas situaciones
de trabajo que se le presenten; se le debe permitir participar en discusiones con los jefes de las
áreas auditadas y con sus superiores; se le debe estimular a llegar a decisiones independientes y a
obtener suficiente evidencia que soporte sus posturas. Debe hacerse notar la habilidad para
planear, organizar y controlar el trabajo de sus subordinados, así como para llevarse bien con
ellos.
Cursos o seminarios internos. Por último, dentro del programa de capacitación interna se
considerará la organización de cursos, seminarios y talleres diseñados en especial para el
departamento de auditoría interna. En estos eventos los capacitadores serán los propios
funcionarios del departamento, como es el caso del director, gerentes, supervisores, y aun los
encargados de auditoría. La bondad de esta opción radica en la preparación y estudio que tiene
que llevar a cabo el expositor para tratar su tema —acción por demás capacitadora para sí mismo
—; permite la interacción y estrechamiento de los lazos de comunicación e intercambio de ideas
entre los miembros del departamento; y los temas a tratar serán diseñados y orientados
específicamente en relación con la organización y en su beneficio.
Importancia. El archivo de auditoría interna reviste tanta o mayor importancia que cualquier otro
archivo de la organización. Conserva la historia de la función y sus intervenciones en las diversas
unidades administrativas, actividades o áreas auditadas. Es una herramienta de consulta
permanente para la administración y otros niveles de jerarquía, debidamente autorizados para
ello. Permite, en cierta forma, conocer la evolución de las auditorías realizadas y el desarrollo de la
organización en atención al cumplimiento de observaciones y recomendaciones presentadas.
Soporta a la propia función de auditoría interna. Es un instrumento de vital importancia, como
elemento de soporte para la planeación y programación de auditoría interna con proyección a
corto, mediano y largoplazos.
Estructura funcional. La estructura funcional del archivo de auditoría interna se divide en tres
áreas principales: archivo de administración interna, archivo de auditorías realizadas y archivo
general.
Archivo de administración interna. Este archivo es básico y determinante para que el director de
auditoría interna se apoye en él, para administrar la función de la que es responsable, nadie debe
administrar por él. Contiene un expediente personal de todos y cada uno de los miembros del
departamento de auditoría, con el mismo tipo de documentos y referencias que debe incluir un
expediente similar integrado por el área de recursos humanos de la organización, el que incorpora,
por supuesto, datos curriculares y la historia y evolución laboral de cada empleado; este enfoque
puede representar duplicidad, pero es necesario para que el director de auditoría pueda controlar
y administrar al personal con que ha sido dotado su departamento. Esta área de archivo será
responsable, además, de conservar y controlar los aspectos presupuéstales y programáticos de la
función; controles de viáticos, gastos y tiempos de auditoría; controles sobre el uso de mobiliario,
equipo y suministros de oficina, que incluye a los vehículos asignados con su correspondiente
mantenimiento.
1. Definir principios básicos que representen el ejercicio de la auditoría interna como deberíaser.
2. Proveer un marco para ejercer y promover un amplio rango de actividades de auditoría interna
de valor añadido.
3. Establecer las bases para medir el desempeño de la auditoríainterna.
4. Fomentar la mejora en los procesos y operaciones de laorganización.
Si bien son de carácter voluntario el cumplimiento de las Normas para el Ejercicio Profesional de
la Auditoría Interna (Normas) es esencial para el ejercicio de las responsabilidades de los auditores
internos.
Dicho cuerpo de normas están constituidas por las Normas sobre Atributos (las Series 1000), las
Normas sobre Desempeño (las Series 2000), y las Normas de Implantación. Las Normas sobre
Atributos tratan las características de las organizaciones y los individuos que desarrollan
actividades de auditoría interna. Las Normas sobre Desempeño describen la naturaleza de las
actividades de auditoría interna y proveen criterios de calidad contra los cuales puede medirse la
práctica de estos servicios.
Las Normas sobre Atributos y sobre Desempeño se aplican a los servicios de auditoría interna en
general. Las Normas de Implantación aplican las Normas sobre Atributos y sobre Desempeño a
tipos específicos de trabajos (por ejemplo, una auditoría de cumplimiento, una investigación de
fraude, o un proyecto de autoevaluación de control).
Si bien sólo hay un grupo de Normas sobre Atributos y sobre Desempeño, puede haber múltiples
grupos de Normas de Implantación: un grupo para cada uno de los mayores tipos de actividades
de auditoría interna. Inicialmente, las Normas de Implantación están siendo establecidas para
actividades de aseguramiento (indicadas por una "A" a continuación del número de Norma, por
ejemplo: 1130.A1) y para actividades de consultoría (indicadas por una "C" a continuación del
número de Norma, por ejemplo: nnnn.C1).