Poesía Colón, Bocas y Darién
Poesía Colón, Bocas y Darién
Poesía Colón, Bocas y Darién
Te quedaste de pie
en los charcos internos de mis ojos
y se quedó la pleamar ausente
de la mirada que te eché.
Quedaste como un claro a medio martillar
en el tablón más viril de los macanos.
Donde se agarraban ansiosas
las pelusas y briznas requemadas
a las costras pequeñas o grandotas
de mis dos mudas y torcidas piernas.
Recuerdo cuando miré tu ciudad
bajo el palio de ese verde sexual y transparente
que tan oscuro como de revés puede ser
revolcándose entre humus y mantillo,
zarandeando sus vahos en la espesura
y cambiando sus tonos indecentes.
Habitación del trópico escondida,
es nada más fermentación de edén.
La selva más histórica del mundo.
Esa es la Selva del DARIÉN