Comentario Torah Naso Revista 5781
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El clan de Merari, Ellos llevaban las pertenencias ordinarias y más pesadas, las
cuales, sin embargo, eran tan importantes y necesarias, que se llevaba
inventario de ellas no sólo por causa de su número y variedad, sino por su
pequeñez y carácter común, lo que podría resultar en que se perdiesen por
descuido, inadvertencia o negligencia. Itamar tenía la superintendencia de los
gersonitas y meraritas.
Los levitas del clan de Cohat llevarían los muebles sagrados, pero solamente
después que los sacerdotes hayan terminado de prepararlos cuidadosamente ya
que son de las cosas más sagradas, por esta razón corren el riesgo más grande
de morir si no cumplen sus deberes correctamente. No debían tocar ni aun ver
los muebles sagrados bajo pena de muerte (v. 15, 20). Esto explica la instrucción
en el v. 18 de no permitir que el clan de Cohat sea eliminado. Los sacerdotes
deben ejercer sumo cuidado en hacer los preparativos para proteger las vidas de
los hijos de Cohat (vv. 19, 20).
Los v 5:1-4 tienen la ordenanza de sacar fuera a toda persona impura con algún
mal de los antes mencionados, primeramente, por una razón puramente física;
porque las enfermedades eran contagiosas y, por lo tanto, era necesario apartar
a los que las padecían para que la infección no se propagara. La segunda es una
razón espiritual, el campamento era la morada de Elohim; y, por lo tanto, en
honor a Aquel que había condescendido a morar con ellos, no se debía permitir
que quedara nada impuro.
En el pasuk Núm. 5:6 dice “Habla a los israelitas: Si un hombre o una mujer
comete cualquier pecado en perjuicio de otro, ofendiendo a Adonai, el tal será
reo de delito. Como vemos el pecado de apostasía, aunque es cometido contra
un ser humano el mayor ofendido es El Creador, aquí está la ley para saber qué
hacer cuando transgredes un mandamiento, aquí específicamente habla de
cuando una persona hace daño a otra; existen muchas situaciones donde
podemos agraviarnos unos a otros, perder alguna pertenencia de alguien,
lastimar en algún sentido, etc. realmente esto es inevitable.
Ahora bien, al mencionar que aquella persona confesará el pecado que cometió
esto se refiere a no solo mencionar el pecado que cometió, sino estar de acuerdo
con la persona que se ofendió: es decir, darle al daño que causaste el mismo
nivel de importancia que le da la persona a quien ofendiste. Somos muy dados a
minimizar lo que hacemos, nos justificamos, decimos que no fue nuestra culpa,
etc.; así mismo tendemos a maximizar lo que nos hacen, y esta es nuestra
tendencia como humanos.
Pero aquí el mandamiento es darle la justa importancia al daño que hicimos, sin
justificarnos o echarle la culpa a la otra persona; en pocas palabras, tener un
corazón como el del rey David. ¿Por qué el rey David no fue desechado como
rey y por qué el rey Saúl si lo fue? No obstante, lo que hizo el rey David fue
incluso más grave que lo que hizo el rey Saúl.
David cometió adulterio, homicidio, cosas terribles y aun así no murió ni Elohim
lo desechó, le dijo ‘tu dinastía va a ser eterna’. Y en cambió Saúl cometió una
pequeña desobediencia, que hasta parece buena. A Saúl se le había dicho que
arrasara con los amalecitas, que acabara con todo y él decidió reservar las
ovejas para hacerle sacrificio a Dios; y cuando le preguntaron por qué había
desobedecido, Saúl se justificó diciendo que lo había hecho para ofrecer
sacrificio al Shaday (2)