Influencias Filosoficas Armando Alducin
Influencias Filosoficas Armando Alducin
Influencias Filosoficas Armando Alducin
La primera palabra que salió de los labios del Señor Jeshua al iniciar su ministerio, fue:
"¡Arrepiéntanse!", que proviene del griego -metanoia-"cambiar la manera de pensar o cambio
de mente". El Hijo de Dios bajaba del cielo para traernos, no solo la salvación, sino también
mostramos la necesidad que tenemos de cambiar nuestra manera de pensar (Rom. 12:2).
Todos los seres humanos actuamos de acuerdo con las ideas que nos han transmitido o nos han
enseñado nuestros padres o maestros de escuela, y estas en su mayoría, han sido muy
destructivas y contrarias a los pensamientos de Dios en las Escrituras (I Red.1:18).
Las filosofías de estos cuatro hombres, contrarias totalmente al pensamiento bíblico, penetra-
ron y permearon casi todas las universidades y centros académicos del mundo entero, dejando
una huella muy profunda, principalmente, en las mentes jóvenes.
Esta teoría filosófica, no solo contradice la Biblia, sino que también es totalmente
anticientífica, por las siguientes razones:
A. Contradice la Leyes de la Termodinámica.
La primera Ley de la Termodinámica establece que todo el proceso natural del universo causa
un amento neto de DESORDEN y una PÉRDIDA neta de energía.
La teoría de la evolución contradice esta primera ley científica al establecer que el proceso
natural que tomó millones de años cambió las moléculas SIMPLES Y DESORDENADAS en
estructuras vivientes COMPLEJAS Y ALTAMENTE ORDENADAS. O sea que, los evolucionistas
ensañan que... ¡del desorden surgió el orden!
La segunda Ley de la Termodinámica establece que todos los procesos espontáneos cambian de
COMPLEJOS AL DESORDEN, y que la energía organizada en energía calorífica, o sea que todo
tiende a la descomposición, al deterioro, a echarse a perder.
Este principio de "entropía", ya lo enseñaba la Biblia hace miles de años (Heb. 1:10-12).
Las leyes de la Genética confirman el principio bíblico que Dios estableció desde la creación de
este mundo (Gén.1:11-12.24). Una "semilla" de uva, contiene la información genética para
producir uvas; la semilla de manzana, producirá manzanas, etc.
La biología ha descubierto que los mismos tejidos que forman el pelo, los huesos, la piel, la
grasa y los músculos de cualquier animal, siempre, SIN EXCEPCIÓN, toman de la sangre el
mismo aminoácido correspondiente.
Este médico de Viena (1856-1939), fue el fundador del famoso "psicoanálisis" y es considerado
actualmente como el padre de la Psicología moderna y DEL PSICOANÁLISIS.
Freud fue altamente influenciado por Darwin y Nietzsche en su filosofía de la vida (era ateo), y
creyó poder descubrir.
A. El problema de la Psicología.
El verdadero problema y fracaso de la psicología estriba en que el problema del ser humano
trasciende el nivel de la mente, pues su problema no es mental, sino espiritual.
La Biblia enseña que nuestra mente es un misterio para nosotros mismos y que es tan pro-
funda, que jamás nos entenderemos a nosotros mismos por medios o métodos humanos
(Jer.17:9; I Coг. 2:11).
A la luz de la Biblia, los intentos humanos para penetrar en la mente humana son vanos y
fútiles.
¿Por qué? Porque el problema humano no es emocional o mental, sino espiritual (Rom.3: 23;
6:23). La Biblia enseña que el ser humano es un ser *caído en pecado”, y el pecado una
enfermedad espiritual que nos separa de Dios y que ha afectado nuestra mente, emociones y
sentimientos (Rom.1:21-22).
Debemos recordar que la mayor parte de los problemas psicológicos del ser humano tienen una
raíz: problemas no resueltos de su pasado (culpa, falta de perdón, traumas, temores, etc.) Dios
nos creó para tener paz dentro de nuestro corazón y mente, y para que esta paz nos gobernara
continuamente (Col.3:15; Fil.4:6-7). Dios es el Dios de la salud mental (Is.26:3).
Ahora bien, si el psicólogo es una persona cristiana y llena del Espíritu Santo, y usando la Biblia
como fundamento de su terapia, entonces si podemos acudir a el, pero cuidado con cualquier
psicólogo que pretenda usar métodos y terapias humanas para tratar de ayudarte, pues lo más
probable es que te recete pastillas tranquilizantes y enrede más tu vida. (Col.2: 8; Is.30:1-2).
3. Frederick Nietzsche y el ateísmo.
Este filósofo alemán (1844-1900), ha sido uno de los filósofos ateos que más influencia ha
tenido en el siglo XX, y se hizo famoso con su frase: Dios está muerto. Sus libros, como, Así
Hablaba Zaratustra, El Anticristo, etc., donde habla de un "superhombre influyeron,
principalmente, en el nazismo y el fascismo con su teoría sobre "la fuerza y la voluntad del
poder humano". Nietzsche acabó su vida en la in sanidad total, pues desde que en 1889 sufrió
una crisis mental. jamás se recuperó. Su filosofía demostró lo que la soberbia y el orgullo
humano pueden hacer de un ser humano: volverlo completamente loco (Rom.1:21-22; Sal.
14:1).
Dentro del ateísmo existen dos interrogantes, las cuales han propiciado, por creer que no
existen respuestas, a la mayor parte de los que se dicen ateos:
La Biblia enseña que Dios creó al ser humano con la característica más grande que pueda
tener cualquier criatura: la libertad para escoger entre el bien y el mal (Gén.2:16-17). La
libertad humana causó el abuso de esta libertad, lo cual propicio la entrada del mal al
universo.
Dios pudo haber creado "robots", forzados a amarle y a sujetarse a EL, pero no lo hizo. Nuestra
imperfección proviene del abuso de nuestra perfección moral como criaturas libres.
2) ¿Por qué, si Dios es bueno permite tragedias que azoten a la humanidad, como terremotos,
huracanes hambrunas, inundaciones, etc.?
Primero, debemos decir los siguiente: El hecho de que una persona no entienda los
caminos de Dios, no le da derecho a negar su existencia, pues es irracional negar la
existencia de lo que no comprendemos.
Mas bien, una persona honesta intelectualmente podría decir: "Si existe Dios, me gustaría
me explicara qué está pasando", pero no negarlo por no entenderlo.
Dios ha demostrado de qué manera el evento más trágico que jamás haya sucedido en la
historia del mundo, resultó en el evento más glorioso que jamás haya sucedido en el mundo.
En ese tiempo nadie podía percibir que algo bueno resultaría de esa tragedia tan espantosa,
pero Dios vio con anticipación que el resultado abriría el ciclo a los seres humanos. Así pues, el
evento más trágico y dramático de la historia, se convirtió en el evento más glorioso de la
historia (I Cor. 1:21-25,27-29; 2:7-8). Si este "supuesto mal" resultó en algo bueno, puede
también suceder aún en nuestra propia vida (Gén.30:20; Rom.8:28).
En el evento de Cristo Dios levantó la cortina y nos ha permitido ver su plan, pero en otras
ocasiones, simplemente nos dirá: "Confíen en mi" (Job S:18; 9:10; 19:25-26).
Carlos Marx nació en 1818 y murió en 1883, y se hizo famoso cuando escribió el Manifiesto
Comunista en 1848. Marx percibía al mundo dividido en dos principales clases que se hallaban
en conflicto - entre cllas:
1) LA BURGUESIA era la clase establecida que controla las actividades mercantiles y las fuerzas
productivas de la comunidad.
Marx creía que este conflicto debería acabar con el derrocamiento de la burguesía (la clase
mercantil) a través de la victoria del proletariado. Esta victoria resultaría en la "dictadura del
proletariado". Sin embargo, esta filosofía económica, jamás funcionó en la práctica en los países
que la quisieron establecer, y solo resultó en tiranía, dictadura, persecución, y la falta de la
libertad de los ciudadanos (Rusia China, Cuba, Vietnam, Nicaragua, Chile, Venezuela, Ecuador.
Este fue precisamente el error más grande de Marx y de Lenin; coartar la libertad humana.
2. El comunismo no es cristianismo.
Estos dos sistemas de pensamientos son diametralmente opuestos, pues en el
cristianismo la "repartición de bienes" es voluntaria y a través del amor a Dios, mientras
que en el comunismo es obligatoria (Hech.2:44-46)
La Biblia enseña que las autoridades civiles han sido establecidas por Dios para gobernar
dentro del marco jurídico de la ley y para "infundir temor" al que hace lo malo
(Romanos 13:1-5); pero el Estado no debe asumir el papel de Dios, ni jamás restringir la
libertad de sus ciudadanos, ni la expresión del pueblo, ni legislar la moral.